Curso de Oratoria | Cómo finalizar un discurso

CÓMO FINALIZAR UNA CHARLA

Los finales elegantes son aquellos que, sin necesidad de

pronunciar despedidas, dejan perfectamente claro que el
discurso ha terminado. Consideremos también que estas
estructuras pueden ser empleadas en cualquier
conversación formal o informal.

Dos elementos a recordar

1- Antes de finalizar, debemos dejar claramente establecido el
mensaje principal del discurso, de modo claro.
2- El aburrimiento llega un instante después del momento de mayor
entusiasmo:

Del mismo modo que un automóvil se va quedando sin combustible hasta

detenerse, el mal orador va disminuyendo su entusiasmo al final de la ponencia y, sin
conseguir pronunciar un final contundente, se apaga súbitamente o retoma sus

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palabras para volver a repetir lo mismo. A partir de ahora, ¡pronunciemos finales

contundentes! (verbal y corporalmente)

No prolonguemos innecesariamente nuestro discurso. ¡Nunca

nadie se quejó de un discurso demasiado breve! ¡Dejemos al público
con ganas de más!

Opciones para terminar un Discurso

I- Resumir los puntos o recapitular.

Es un final muy sencillo que sirve para improvisar con facilidad.

No obstante, si bien sencillo, podemos encontrarlo en célebres
discursos:

Cicerón – Primera sesión del proceso contra Verres

“… y ahora se hace necesario salir al paso de la maldad. La

acusación es ésta: declaramos que Gayo Verres, además de haber
cometido muchas crueldades contra romanos y contra aliados y muchos
sacrilegios contra los dioses y contra los hombres, se ha llevado
ilegalmente de Sicilia cuarenta millones de sestercios.”

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A continuación mencionaremos tres finales (Esperanza | Acción | Halago) que

requieren los tres la misma condición: justificar primero el por qué de la esperanza, el por qué
de la acción, el por qué del halago. Es la única manera de que las palabras no tengan aroma a
falsedad. Lo mismo si vamos a terminar motivando, justifiquemos previamente –con
elementos concretos- por qué es lícito pensar que el público puede llegar a alcanzar tal o cual
objetivo.

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Veamos ejemplos varios, algunos floreados en demasía pero que conviene que
aparezcan en los materiales de un curso de oratoria. Además de detectar el final utilizado,
veamos también las imágenes que utilizan los oradores y los demás recursos que van
combinando.

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II- Apelar a la esperanza.

Descubrimiento del Río de la Plata, Zorrilla de San Martín –

Madrid, abril de 1892:

“Que Dios proteja, señores, los destinos de nuestra familia

hispánica, de los cuales jamás debemos desesperar. ¿Quién sabe?
Acaso España fue un día, geológicamente considerada, la cabeza
del gran coloso y destrozado sumergido del Atlántico. Que el
tiempo confirme, señores, esa atrevida suposición: sea ahora
España la cabeza, el cerebro, el pensamiento; palpite en América
el corazón, mientras circula para siempre en todo ese inmenso organismo, dueño tal
vez del porvenir del mundo, la sangre y los recuerdos de los Cortés, de los Pizarro, de
los Valdivia, de los Irala y los Garay, de los Juan Díaz de Solís y de los Bruno Mauricio de
Zabala.”

Víctor Hugo – Congreso de la paz, Discurso de Apertura:

“Llegará un día en el que las balas de cañón sean remplazadas por los votos, por
el sufragio universal de los pueblos, por el venerable arbitraje de un gran senado
soberano que será en Europa lo que es el Parlamento en Inglaterra, lo que la Dieta es
en Alemania, lo que la Asamblea Legislativa es en Francia.”

III- Exhortar a la acción.

Zorrilla de San Martín, La Lengua Castellana – Madrid, 1892:

“No podemos aspirar a tal situación los que, en posesión de una lengua como la
castellana, somos dueños de un tesoro inapreciable; no es posible sostener que el uso
que de esa lengua se hace en el corrillo, en la conversación familiar, aun en la prensa

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periódica, a la que el vértigo de la labor diaria no permite al esmero y la corrección

necesarios, ha de sobreponerse al uso consecuente y científico, meditado y noble de los
Cervantes, Granada, Quevedo, Solís, Jovellanos, Lista, Bello, Heredia, Valera, Menéndez
y Pelayo, Pereda, Caro, Cuervo, Pardo y Aliaga, Tamayo y Baus, Bécquer, Fernández
Guerra, Núñez de Arce y tantos otros que, así en España como en América, significan
no sólo el esplendor y la gloria de la lengua española, sino su marcha y sus
modificaciones progresivas, sus palpitaciones a través del tiempo, su energía
asimiladora, la conciliación, en una palabra, del movimiento con el orden, del uso con
la lógica, del desarrollo con la vida.”

Cicerón: Verrinas – Contra Quinto Cecilio:

“Así pues, jueces, tarea de ustedes es decidir quién estiman que puede sostener
con lealtad, diligencia, prudencia y prestigio una causa y un proceso de tal magnitud. Si
anteponen a Quinto Cecilio a mí, no pensaré que es por su categoría por la que me he
visto superado.

Cuídense de que el pueblo romano no piense que una acusación tan honesta,
tan seria y tan diligente no ha sido del agrado de ustedes.”

IV- Un halago sincero y fundado.

Castelar a los federales de Zaragoza

"Zaragoza, que dio al cristianismo sus

innumerables mártires; a la Edad Media sus
guerreros; al siglo decimosexto los últimos
tributos que lucharon con el absolutismo; a
nuestro siglo los héroes de la independencia, que
todos los pueblos oprimidos invocan, que todas
las generaciones colocarán al lado de los héroes
de Salamina y de Platea en el agradecimiento de
la humanidad; Zaragoza se alzará a la altura de
su historia, y escribiendo la protesta enérgica del derecho, salvará con su actitud y con
su ejemplo, que pronto seguirán las demás ciudades, la causa de la libertad y la honra
de la patria."

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El halago se puede combinar con las felicitaciones. ¡Recordar que es

preferible colocar las felicitaciones al final!

V- Cita poética o palabras de un personaje reconocido.

Zorrilla: Homenaje a Rodó – 1920

Vamos, señores, acompañando al presidente de

la República que representa a la Nación. Nuestros
corazones doblarán. Nuestros oídos oirán pasar por las
alturas remotísimas el verso alado de Homero: “Ven,
recibe tu recompensa, y queda exento para siempre de
tu condición de mortal”.

Variante – No citamos palabras textuales sino lo

que hubieran hecho otras personas eminentes:

Cicerón: segundo discurso, Verrinas

“¿Qué hubieran hecho con éste hombre los Craso y los Antonios?
Para no perder su honestidad no se hubieran encargado de su defensa,
jamás perderían su vergüenza en la desvergüenza de otro.”

VI- Motivar.

Zorrilla: Congreso Pedagógico, Madrid, 1893.

Hay algo más noble que realizar grandes acciones resonantes:

realizar buena acciones ignoradas. Eso es ser valiente según el concepto
cristiano; eso es lo que transmitiremos a nuestros hijos en nuestras
escuelas, con la eficacia de los más perfectos recursos de la ciencia
pedagógica. Eso, restituyendo a nuestra gran familia hispánica la mente
sana en cuerpo sano, hará resplandecer para ella aquellos tiempos en que,
paseando por la redondez de la tierra por primera vez el estandarte de la

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Cruz y el de Castilla, demostró que tenemos las condiciones necesarias

para realizar grandes empresas, y para ser, como ninguna otra cosa, los
protagonistas del mundo.

VII- Llamar a la reflexión

Víctor Hugo – Discurso sobre la libertad de enseñanza:

“Pues bien, lo repito con profundo dolor, yo que odio las catástrofes, los
derrumbamientos, lo repito con la muerte en el alma: Ustedes no quieren el progreso. Y
tendrán una revuelta social.”

Will Durant al hablar sobre Copérnico:

“Con la revolución de Copérnico, el hombre fue obligado a ser mayor de edad.”

Sobre Francis Bacon

“El que inspiró a la ciencia sus tareas y predijo sus increíbles victoria; el que
inspiró a la Real Sociedad de Gran Bretaña y a la Gran Enciclopedia de Francia, el que
alejó a los hombres del conocimiento como meditación y los llevó al conocimiento
como un poder remodelador; el que despreció la adoración y ansió el control; el que
llevó a su valiente alma, más que cualquier otro hombre de esa dilatada era, todo el
espíritu y el propósito de la mente moderna. Por supuesto, era Francis Bacon.”

Sobre Isaac Newton

“Porque es a él, a quien domina nuestra mente con la fuerza de la verdad y no a

quien la esclaviza con la fuerza de la violencia, a quien debemos nuestra veneración y
respeto. Incluso mientras vivía, el mundo comprendió que Newton era uno de sus
héroes.”

VIII- Un final muy artístico e IMPORTANTE: Estirar los elásticos

emocionales a través de imágenes progresivas.

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Veamos el final del video de Martin Luther King enviado por e-mail, “I have a
dream”.

IX- Volver al inicio.

Son los llamados “discursos circulares”. Simplemente hacemos referencia al

motivo que empleamos para comenzar el discurso.

Es también un recurso para generar humor (Callback, estará explicado en la

ficha correspondiente) y para finalizar conversaciones.

X- Inspirar en dirección al futuro.

Se trata de inspirar mencionando la idea de un futuro que será mejor. Lo
mismo que con otros finales, conviene justificarlo muy bien previamente para que las
palabras no sean vacías.

XI- Dejar con ganas de más.

Si despertamos el suficiente interés durante la ponencia, podemos valernos del
deseo del público para invitarlo a que dé el siguiente paso: que visite un sitio web, que
solicite más información, que concurra nuevamente a la próxima reunión. Digamos
algo así: “Esto ya excede a la charla de hoy, pero, si desean ver todavía más, los invito a
concurrir a la próxima jornada…” Mejor aún si anticipamos un beneficio puntual que se
revelará en esa próxima charla.

Si bien es un final “mal visto” desde la oratoria más formal, es necesario

mencionarlo. Cada vez se utiliza más en publicidades, presentaciones de nuevos
servicios o incluso en conversaciones.

XII- Giro imprevisto.

Ejemplo: un alumno del curso desarrolló toda una charla dando la impresión de
que estaba hablando de un medicamento. Recién al final nos dimos cuenta de que se
trataba del mate.

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XIII- Desafiar

El desafío es una técnica de debate que no amerita ser mencionada con

detenimiento aquí, pero que también puede utilizarse para finalizar las palabras en
algunas situaciones (específicamente en aquellas en que tenemos a un público que, en
su mayoría, es adepto a nuestra idea y nos apoya). La mencionaremos en el módulo
correspondiente.

Recurso para desarrollar con facilidad y hacernos

entender con mayor claridad:
Simplemente se trata de hacer enunciados generales y a
continuación brindar casos progresivamente concretos. ¡Recuerda las
prácticas que hemos hecho en clase!

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