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Ensayo construcción histórica de la ciudadanía

Presentado por:
Brayan David Osorio Ureña

Materia:
Formación ciudadana y cultura de la paz

Grupo: ar

Programa de licenciatura en educación física, recreación y deporte


Universidad de pamplona
2021
El devenir histórico del concepto ciudadanía

En el presente ensayo haremos un recorrido por las distintas etapas de la historia


con el propósito de conocer las diferentes perspectivas sobre el concepto de
ciudadanía. No obstante, se enfatizará, en la estrecha relación que este termino
ha tenido en todas las etapas hasta nuestros días; aunque cabe resaltar que esta
relación se observa en el devenir histórico de manera evolutiva. Para ello querido
lector, le sugiero abrocharse el cinturón. ¡Empecemos con el recorrido!
Quisiera dar un pequeño panorama del origen de ciudadanía, para así saber de
dónde partiremos. Es bien sabido que, aunque en nuestros días este termino es
mencionado, no debemos aludir este término a la actualidad, pues, es un termino
nacido en la antigua Grecia; diferentes pensadores de renombre que generaron
impacto en la civilización trataron este término de manera profunda, tanto así que
Sócrates fue condenado a muerte. Cabe resaltar que gracias a las bases
profundas que una vez se cavaron, hoy día ya podemos ver una edificación que
sigue en obra.
En Grecia ser ciudadano era sinónimo primeramente de no ser esclavo. Los
griegos clásicos consideraban que había que ser varón y mayor de cierta edad
para poder detentar la cualidad de ciudadanía de pleno derecho. Así pues,
excluyeron de la misma a las mujeres y los niños que la tendrían de hecho, es
decir, en cierto modo ciudadanos de hecho, pero no de derecho; al niño en cuanto
nacido en la ciudad y por tanto futuro ciudadano con voz y voto (ciudadano de
derecho) y a la mujer en cuanto que madre puesto que lo había engendrado, pero
sin voz ni voto en la asamblea. La ciudadanía de derecho solo se reservaba a los
varones mayores de edad e implicaba las siguientes obligaciones: primero, la de ir
a la guerra en defensa de la ciudad; segundo, la de respetar a las deidades
propias y a las leyes propias; tercero, la de participar directamente en la asamblea
de gobierno y defenderse o acusar en un litigio jurídico ante tribunales populares,
cabe mencionar que para esta última obligación se requería de un nivel intelectual
elevado. Y es aquí en Grecia donde vemos los indicios de la democracia que hoy
conocemos.
Roma dio un gran salto, aunque utilizaron como trampolín los fundamentos de los
griegos, cabe resaltar su originalidad en la jurisprudencia, pues alcanzo
dimensiones muchos mayores que las de Grecia hasta el punto de llegar a la
formulación de la ciudadanía universal y la concesión de la ciudadanía a todos lo
habitantes del gran imperio. Al concepto de ciudadanía universal llegaron los
Romanos gracias a dos influencias, una filosófica y la otra religiosa, la segunda
fue mas influyente en el momento en que la sociedad imperial se acababa;
primeramente, quienes tenían el titulo de ciudadanos eran los patricios y los
plebeyos; los esclavos no lo eran; pero con el paso del tiempo esto fue mejorando
a tal punto que los esclavos o extranjeros podían obtener la ciudadanía.
En la edad media aparenta haber una disolución del concepto “ciudadanos” debido
a que el feudalismo se instauraba sobre nuevas bases que implicaban la
desaparición de ese concepto y el advenimiento de un sistema social constituido
por siervos, vasallos y señores. Aunque con esto no se quiere decir que el
concepto de ciudadanía que se venia manejando desde años anteriores queda
erradicado. Al parecer se siguió manejando de manera implícita. Lo acabado de
expresar sobre la edad media, es parecido al renacimiento. Pues, en esta época
aparece la monarquía absoluta lo que coloca de manifiesto la carencia de status
ciudadano ya que al pueblo se le reconoce como súbditos.
En la era de las revoluciones es evidente el cambio drástico respecto a la
concepción de ciudadanía, aquí se despierta un avivamiento donde se lucha en
pro de los derechos. La revolución americana (1772) da lugar a los estados
Unidos de América y la revolución francesa (1789) derribo la institución de la
monarquía, todo esto genero la declaración de los derechos del hombre y del
ciudadano. Aunque las declaraciones de los derechos del hombre parecen
extender la condición y estatus de ciudadanía a todos los miembros de la
sociedad; en realidad no fue así; los derechos que se proclamaban en la
revolución americana y francesa solamente eran efectivos para los varones
adultos libres, blancos y con cierta independencia económica por eso la esclavitud
siguió existiendo hasta entrado el siglo xix.
La era actual en comparación con las eras tratadas anteriormente podemos ya
contemplar una edificación que a adquirido una forma aparentemente agradable.
Pues, se ha colocado en la edificación derechos civiles, que consiste en la
igualdad de todo ante la ley y libertades del individuo; derechos políticos, que
establece la forma de participación política, elegir y ser elegido; derechos sociales,
son los que se tienen por el simple hecho de pertenecer a una comunidad.
En conclusión y de manera personal, en cuanto al concepto de ciudadanía,
superficialmente podemos ver en el devenir histórico un cambio, pero
profundamente puedo ver en la actualidad el mismo modo de arquitectura que en
otras épocas utilizaron. Si, teóricamente hablando todo suena utópico pero la
realidad es muy diferente y todo esto lo resumo en una palabra “injusticia” y es por
esta razón que creo profundamente en el gobierno justo de Cristo, donde no habrá
muerte, ni habrá mas llanto, ni clamor, ni dolor. vano seria creer en esto. si Cristo
no hubiera dicho lo que dijo: “Mi reino no es de este mundo; si mi reino fuera de
este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos;
pero mi reino no es de aquí” (Jn 18:36) “En la casa de mi Padre muchas moradas
hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para
vosotros” (Jn 14: 2) “Entonces verán al Hijo del hombre, que vendrá en una nube
con poder y gran gloria” (Lc 21:26) y si tampoco hubiera hecho lo que hizo: le dio
la vista a un ciego de nacimiento (Jn 9) Sano a un paralitico (Mt 9) muchas mas
cosas milagrosas hizo, también resucito al 3 día y muchos fueron testigos de esto.
Querido lector el recorrido ha terminado.

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