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La justicia en Platón

Platón otorgó mucha importancia a la ética, sobre todo, porque vivió una época de crisis y
decadencia de la cual, como es sabido, culpó al enfoque relativista con el que los sofistas abordaron
el análisis del bien y la virtud. Su maestro Sócrates, por el contrario, había transmitido la necesidad
de indagar sobre la verdadera virtud y el verdadero bien. [...]
Platón sostenía que todos los hombres desean las cosas buenas y la felicidad, y que nadie quiere u
obra el mal conscientemente. Sin embargo, es evidente que distinguir los bienes verdaderos de los
bienes aparentes resulta con frecuencia difícil, porque los seres humanos desconocen muchas veces
en qué consiste el bien y confunden el objeto de la verdadera felicidad con realidades imperfectas,
como los placeres sensibles, las riquezas o los honores. Para Platón, el bien y la felicidad no se
pueden hallar en otra cosa que en la contemplación de las ideas, y especialmente de la idea más
elevada, que es la del Bien.
Solo hay un camino para alcanzar la visión de las ideas: el cultivo de la sabiduría y de la virtud, que,
en el fondo, para Platón, se identifican. La virtud no es una simple habilidad técnica ―como
proponían los sofistas― sino algo propio del alma, que le proporciona armonía y salud, porque
permite que su parte racional regule las otras partes, es decir, los impulsos y deseos.
La primera tarea del filósofo consistirá en explicar qué es la virtud en sí:
• La virtud es un saber o conocimiento acerca del bien. Cuanto más cerca estemos de este saber,
más virtuosos seremos. Ser virtuoso consiste en ser capaz de distinguir los bienes verdaderos de
los aparentes y fugaces. Si actuamos mal, es debido a la ignorancia, que impide al alma
desvincularse de lo sensible y material.
• La virtud es una purificación para el alma que le permite liberarse del cuerpo y retornar al
mundo de las ideas tras la muerte. [...]
• La virtud es el dominio de la razón sobre las demás partes del alma y sobre el cuerpo; podría
definirse, por ello, como la justicia y la armonía entre las partes del alma y del cuerpo, porque,
con la virtud, cada una de ellas cumple su función de un modo adecuado, esto es, racional. [...]
Una vez examinado el concepto de virtud en general, se pueden considerar los cuatro tipos de
virtudes que Platón expuso en el libro IV de La República:
• La sabiduría o prudencia (sofía) es una virtud [...] cuya misión es dirigir tanto a los miembros del
alma como a los de la comunidad. Sabio es, por lo tanto, quien dirige sus acciones de acuerdo
con la ciencia y no con la opinión.
• La valentía o fortaleza (andreia) somete las pasiones a la razón para distinguir lo que se debe de lo
que no se debe temer. Por consiguiente, es valiente quien se esfuerza por hacer el bien, pero no
lo es quien se esfuerza por apartarse de él.
• La moderación o templanza (sofrosine) [...] modera los deseos, para que el hombre haga uso de los
placeres sensibles con medida y equilibrio. Actúa moderadamente quien guía sus apetitos y
deseos según el dictado de la razón.
• La justicia (diké) consiste «en hacer lo que corresponde a cada uno de modo adecuado» y en «que
cada uno no se apodere de lo ajeno ni sea privado de lo propio». En el caso del individuo, esta
virtud lo capacita para que cada parte del alma realice la función que le corresponde, de manera
que las partes inferiores se subordinen y sean gobernadas por la superior.
En su dimensión social, una polis es justa cuando todos los ciudadanos desempeñan
satisfactoriamente sus funciones dentro del conjunto y cumplen con su deber. [...] Lo importante es
que cada individuo desempeñe la ocupación que le corresponde según su naturaleza, sin interferir
en funciones que no pertenecen a su grupo social. Precisamente la virtud de la justicia aplicada a la
polis consiste en eso: si cada ciudadano está en su puesto y hace lo que debe, se logrará la polis
ideal, en la que reinará el orden y los ciudadanos alcanzarán la felicidad.
Belda, A. y Carabante, J. M. Historia de la Filosofía. Bachillerato.
Madrid: Casals, 2009, págs. 42-44 y 46. Texto adaptado.

Unidad 13 • Derecho y justicia. Orden económico y justicia social

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