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COLEGIO CENTENARIO D-91

Psicopedagogo: Mauricio Díaz Vargas

RESUMEN DEL LIBRO "LA POROTA"

1.- El Cuarto de Porota:


Porota era una niña rubia de
grandes trenzas, de ojos claros,
nariz corta y dientes pequeños.
Tenía su propio dormitorio y desde
allí miraba hacia el jardín y
alimentaba a los gorriones con
migas de pan. En su cuarto tenía
muchos juguetes, como una jirafa,
un oso, un piano, una cocina, pero
lo más importante para ella era su
muñeca Mimí ya que la consideraba
su amiga.

Mimí tenía su propia cama al lado de la de Porota y la


niña lo último que hacía antes de dormir era despedirse
de la muñeca y lo primero que hacía al despertar era
saludarla. Un día despertó y la muñeca no estaba, la
buscó, pero no la encontró en ninguna parte.
2.- El secreto de Mimí:
Cuando el papá de Porota llegó de su trabajo a
almorzar, se fue a la biblioteca a leer y la llamó para
que fuera a ver que la muñeca perdida estaba ahí.
La niña la llevó a su dormitorio para acostarla
mientras ella almorzaba y se la dejó encargada a
otro juguete para que la vigilara. Después fue a verla
y como aún dormía, fue hasta el jardín a ver a los
gorriones. Más tarde fue a despertarla y empezó a
preguntarle por qué había desaparecido de su cama
y que le contara qué había
hecho durante la noche. La
muñeca empezó a hacer
movimientos con los ojos y la
boca, la niña se asustó un
poco y de pronto la muñeca empezó a decir el
nombre completo de la niña. Porota quiso saber
cómo aprendió a hablar y le contestó que
escuchando a la gente, pero que tenía que ser un
secreto entre las dos, le contó además que salía
todas las noches cuando Porota se quedaba
dormida a la ciudad donde vivían todos los muñecos
de trapo como ella y que esa noche irían las dos a
esa ciudad.

3.- El extraño viaje:


Porota estuvo todo el día muy nerviosa esperando que
llegara la noche para ir con Mimí a la ciudad de los
muñecos de trapo, no quería ir a verla por temor a que
ya no hablara, estuvo en el jardín,
se hacía muchas preguntas acerca
del lugar que iba a visitar. Al fin la
noche llegó, después de bañarse su
madre la acompañó a su pieza a
rezar como todas las noches, se
despidió de su muñeca y cuando la
mamá salió, empezó a preguntarle
cosas a su muñeca, ella le dijo que
era mejor que durmieran un rato porque se irían a la
medianoche. Así fue, salieron al jardín y subieron a un
coche tirado por unos caballos de trapo, durmieron
durante el viaje y al legar a las puertas de la ciudad
fueron recibidas por unos soldados de trapo.
Mimí se presentó y presentó también a Porota con su
verdadero nombre (Beatriz María Magdalena de los
Angeles Osorio y Castro viejo), al saber que las esperaban,
las dejaron pasar en el camino Mimí era saludada por los
muñecos, era conocida porque su papá era el gobernador
de la ciudad. Llegaron a un palacio y subieron hasta el
cuarto de Mimí a cambiarse de ropa, la sorpresa fue
grande para Porota ya que la pieza a la cual llegaron era
igual a la de ella, pero era porque Mimí quiso que fuera
igual, le mostró el vestido que se tenía que colocar y al
vestirse parecía una verdadera muñeca.

4.- El gobernador:
Cuando bajaron fueron hasta una puerta dorada y dentro
había un muñeco alto y grueso vestido de verde que era el
padre de Mimí, se saludaron, fueron presentados y luego de
preguntar por el viaje, Pirulo le contó el problema que tenían
por el cual la había invitado a la ciudad. Se trataba de unos
vampiros de trapo que le chupaban el aserrín del cuerpo y
que vivían en el mundo de los humanos y que llegaban hasta
allá a matar a los muñecos cada noche. Porota les dijo que
ella los iba a intentar ayudar, pero que necesitaba saber
dónde encontrarlos, así que para allá partió.

5.- La fábrica de muñecos y los planes secretos de Porota:


Fueron a la ciudad de los humanos, a la fábrica de muñecos
de trapo que pertenecía a don Pedro, entraron a ella,
estaba llena de todo tipo de muñecos de trapo pero los
vampiros no estaban por ninguna parte; ya habían ido a la
ciudad de los muñecos de trapo. Mirando el lugar donde
debían estar, Porota tuvo una idea para que no siguieran
causando daño, Ese día Porota demoró en despertar,
estaba muy cansada con todo lo que hizo en la noche, Mimí
también durmió hasta muy tarde. Después de almuerzo
durmió una siesta para tomar fuerzas para lo que harían
esa noche. Después fue hasta la casa de un carpintero que vivía cerca
para que le ayudara con su plan con los vampiros y salió de allí con un
paquete.
Se fueron a acostar y fingieron quedarse dormidas
esperando que las fueran a buscar a la medianoche,
Porota se vistió con el vestido de la noche anterior y salió
con su paquete. En lugar de ir a la ciudad de los muñecos
de trapo como la noche anterior, esta vez fueron a la
fábrica de don Pedro.

6.- ¡Ay, los vampiros!:


Los vampiros aún estaban dentro, esperaron nerviosamente a
que salieran y ellas entraron, Porota sacó el
paquete que le dio su carpintero amigo que
contenía un tarro con un líquido y una brocha y
comenzó a pasarlo por todas las partes del
estante en donde se guardaban los vampiros.
Demoró en hacerlo ya que el carpintero le había
enseñado que debía hacerlo con mucho cuidado.
Cuando terminó se volvieron a su casa y se
fueron a dormir.

7.- El terror de los vampiros y otras cosas increíbles:


Cuando los vampiros volvieron, todo juntos entraron a la
fábrica y en fila fueron colocándose en el estante donde se
guardaban durante el día y uno a uno se fueron dando
cuenta de que no podían moverse, trataron pero no
pudieron gracias a la poderosa cola que Porota había
puesto en el estante. Gritaban ¡socorro, socorro! Pero nadie
podía escucharles y cuando don Pedro se levantó ni
siquiera los miró. En cuanto llegó la noche Porota y Mimí
esperaban la señal para partir, fueron esta vez a la ciudad
de los muñecos de trapo a contar la buena noticia.
El padre de Mimí se puso muy feliz, no se cansaba de dar las gracia a
Porota y llamó a toda su gente para contarles y que todos agradecieran a la
niña por haberles salvado de los malvados vampiros.
Luego decidieron ir a buscar a los derrotados vampiros, fue toda la gente
menos la niña, la muñeca y su padre y comenzaron a tocar las campanas
por todas partes celebrando el triunfo.

8.- Una ceremonia solemne:


Luego de un tiempo volvieron y el oficial a cargo
anunció que los vampiros habían sido traídos para su
ejecución, fueron a la plaza y Porota fue levantada en
brazos para que todos la saludaran, ella respondía
levantando sus brazos. Colocaron a los vampiros al pie
de un árbol y el gobernador le dijo al pueblo que Porota,
su salvadora sería nombrada Muñeca de Trapo
Honoraria para siempre, les dispararon y poco a poco
se les desangró su corazón de aserrín, el peligro había
desaparecido de la ciudad. Todos celebraron, le
lanzaban flores hasta que volvieron al palacio, después
de eso Porota y Mimí regresaron a la casa de la niña.

9.- Aquí termina nuestra historia:


Cuando don Pedro despertó, se dio cuenta que los
vampiros no estaban y creyó que le habían robado, pero
se extrañó mucho que sólo se hubiesen llevado esos
muñecos que nadie compraba. En tanto Porota en su
casa despertó llena de alegría, desayunó con mucho
apetito, en cambio Mimí dormía profundamente y con
una sonrisa en los labios. Pasaron los días y no
volvieron a salir de noche, hasta que un día apareció en
su ventana la señal del cochero que venía a buscarlas.
Fueron a la ciudad de los muñecos donde había una
gran fiesta con un estupendo banquete que se organizó
en honor a Porota donde se le reconocía oficialmente. 
Al día siguiente la niña le contaba a su madre la
historia que vivió con su muñeca, pero por supuesto
que la mamá no le creyó, diciéndole que todo era
fruto de su imaginación. Porota le contó a su muñeca
lo que pasó y ella la consoló, le dijo que los adultos
eran así y acordaron ir a la ciudad de los muñecos de
trapo una vez al mes. Así lo hicieron y cada vez
Porota era recibida con mucho cariño, lo que la hacía
muy feliz.

FIN

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