Está en la página 1de 1

“Deléitate asimismo en Jehová, Y Él te concederá las peticiones de tu

corazón.” Salmo 37:4


el enfoque está que Jehová sea nuestro deleite principal en la vida. 
Deleitarnos en nuestro trabajo es hacer con pasión lo que se me delega, es
mostrar su excelencia en toda acción. Es mostrar ese amor en todo por él. En
realidad, lo debe ser porque no hay otro como Él.  No hay otro que me tenga
ese mismo amor.  No hay otro que nunca me falla.  No hay otro que pueda
hacer por mí lo que Él hace.  No hay otro que está conmigo en todo
momento. Todo está en que yo realmente Lo aprecie y me deleite en Él.

También podría gustarte