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Universidad de Santiago de Chile

Facultad de Humanidades
Pedagogía en Historia y Ciencias Sociales
Identidad, raza y género: claves del movimiento afrolatinoamericano en el Cono Sur.

Control I:
Estudios Afrodescendientes en América Latina

Estudiante: Cristóbal Fuenzalida Pinto

Profesor: María Elena Oliva Oliva.

Santiago de Chile, 4 de diciembre de 2019


Durante el transcurso de la historia de América Latina ha sido recurrente la
invisibilización de diversos actores que contribuyeron y contribuyen a las sociedades
latinas, tanto en su configuración como tal, como en el desarrollo de los elementos
culturales, políticos y económicos que las componen. En este caso, uno de los grandes
sectores relegados a ser ocultados y olvidados en la historia de América Latina son los
afrodescendientes.
Los estudios de lo “afro” según García (2005) comienzan como tales hace ya casi
100, alrededor de la década de 1920 (p. 1). Los estudios afrolatinoamericanos se han
desarrollado de diversas maneras, estando marcados por diferentes etapas desde su
gestación hasta el día de hoy, siendo marcados en un principio, como elementos
legitimadores de una visión prejuiciada de los elementos afro en las sociedades y culturas,
en donde hace referencia a lo decía Fernando Ortiz en el caso cubano:
“(…) una raza que bajo muchos aspectos ha conseguido marcar
característicamente la mala vida cubana comunicándoles sus
supersticiones, sus organizaciones, sus lenguajes, sus danzas, etc., y son
hijos legítimos suyos la brujería y el ñañiguismo, tanto que significan en el
hampa de Cuba” (Ortiz, 1917:38)
De esta forma, los estudios de lo que García (2005) denomina la diáspora
afrosubsahariana (p.1) se ve enmarcada en 3 enfoques: un enfoque académico, un enfoque
desde la intelectualidad y un enfoque desde el sujeto histórico. Dentro del enfoque
académico es que García nos define que la evolución de este, desde una visión (como ya se
mencionó anteriormente) criminalizadora de los elementos afros y su aporte a la sociedad,
se pasó paulatinamente a un análisis más exhaustivo desde elementos multidisciplinares,
principalmente desde la etnohistoria y la antropología por diversos académicos. Se pasó
desde una idea racial discriminadora a un interés paulatino en las características de los
afrodescendientes en América Latina y el Caribe, centrándose en países con una población
activa y reconocible como son los casos de Brasil, Colombia, Cuba, etc.
De manera similar, Gladys Lechini (2008), nos plantea el estado del arte del estudio
afrodescendiente en América Latina a partir de la caracterización de los resultados del
Seminario Internacional: “Los estudios africanos en América Latina. Herencia, presencia y
visiones del otro” realizado en Brasil el 2006. Al momento de que Lechini nos habla de las
características del seminario, nos describe los elementos desde un enfoque académico de
los estudios afro y sus aportes y desarrollo en los últimos años principalmente. Centrando el
desarrollo de los estudios en dos ejes a partir del objeto de estudio de los estudios Afro: Un
estudio de los elementos africanos en América Latina y por otro lado, los estudios
centrados en África desde América Latina.
En ambos casos Lechini (2005) nos propone una evolución en el interés y la
intervención de elementos gubernamentales y no gubernamentales dentro del estudio de lo
afro, centrándose principalmente en cómo ha sido el desarrollo de los estudios afro en
América Latina desde los elementos institucionales: cómo se han ido desarrollando
paulatinamente en latinoamérica estudios que poco a poco van profundizando sus objetos
de estudio desde elementos netamente de rastreo histórico a como se desarrollan las
prácticas culturales, la idea de raza y las relaciones económicas dentro de la racilidad en las
sociedad latinoamericanas, el aporte afro en los diversos estado nación, el aporte necesario
del conocimiento y el estudio de la historia de África, el desarrollo de una etnoeducación a
partir de estos estudios, etc.
En cuanto al desarrollo de los estudios de las practicas cotidianas y los elementos
culturales estructurantes de los afrodescendientes, García (2005) nos dice que estos se dan
principalmente desde un enfoque no necesariamente disciplinar academicista, sino que
desde el segundo enfoque que el propone: un enfoque intelectual. En donde los elementos
afrodescendientes son estudiados y registrados por ejemplo desde la poesía, la literatura y la
música. Desde esta perspectiva vemos que, en sus comienzos, se le otorga elementos
endoraciales y discriminadores, otorgando al igual que desde lo académico, elementos
criminalizadores, como es el caso descrito de El club Atenas en donde los afrocubanos de
clase media que lo conformaban, adoptaban elementos “blanqueadores” para ser mejor
aceptados socialmente, como la decisión de no bailar rumba, debido a que era música
considerada de la clase pobre y marginal. En este sentido se describe una simultaneidad en
intereses dentro de los enfoques
Dentro de una perspectiva general, podemos definir etapas dentro de los estudios
relativos a lo afro en latinoamérica, ambos autores nos plantean en una primera instancia
dentro del desarrollo de los estudios una tendencia a servir como elementos para la
continuación de la hegemonía historiográfica del relato de lo blanco, viéndose a lo afro
como un elemento criminalizado, subalterno y despreciable. En este sentido, dentro de una
primera fase de los estudios de lo afro, estos sirvieron como elementos legitimadores de las
diferencias raciales y la discriminación hacia lo afro, en otras palabras, como sustento para
la idea de raza y la supremacía racial blanca.
Luego de esta primera etapa, los estudios relativos a lo afro en comenzaron a
indagar sobre las construcciones sociales y los aportes de los elementos afro a las historias
locales, como su participación en procesos de independencia y la invisibilización de lo afro
en las sociedades latinoamericanas, conformándose así algunos de los primeros grupos de
estudio de los elementos afrodescendientes en América Latina y construyéndose las
categorías de Afrocubano, Afroargentino, etc, para hacer la relación de los elementos afro
en las distintas naciones. De manera similar se comenzó a utilizar dichos elementos, en
conjunto con el mestizaje, para diluir los aportes de la ascendencia afro en las culturas
locales y generar la idea de una nación homogénea.
Paulatinamente los estudios afro comenzaron a tomar más fuerza en conjunto con
los movimientos afro de cada país, debido a esto, paulatinamente también las instituciones
tanto gubernamentales como no gubernamentales comenzaron a prestar atención a la
“cuestión afro”. A partir de esto, el mayor análisis realizado en la bibliografía señalada es
realizado por Lechini (2008), en donde nos señala que, en conjunto con este interés de la
afrodescendencia por parte de las instituciones, también se comienza a tener un interés en
los estudios de África, esto lo podemos relacionar con la etnoeducación (Lechini, 2008),
debido a la necesidad de los diferentes elementos afrodescendientes de conocer su pasado
en el continente.
En una última etapa podemos ver como la conjugación de los estudios sobre lo afro
se va configurando con una lucha y resistencia de los elementos afro en latinoamérica,
configurándose de esta manera como estudios multidisciplinares enfocados en diversos
objetivos: Análisis de los elementos afro y sus aportes a las sociedades de América Latina,
caracterización y análisis de las sociedades afrodescendientes para la preservación de sus
culturas y raíces, reinscribir a la afrodescendencia latinoamericana dentro de los anales
históricos de las naciones de América Latina, romper con las relaciones raciales, sociales,
de género que se dan entorno a lo afro (García, 2005:11).
En este sentido, concuerdo con García (2005) que se deben no solo romper las
relaciones de poder ligadas a la discriminación racial y de genero, sino que también las
estructuras que las condicionan, legitiman y hacen posible la explotación hacia las
personas, para ello y como también propone se deben propender los estudios afro en
América Latina, para un comprensión de los elementos afrodescendientes y sus valiosos
aportes a las sociedades americanas, y comprender de una vez por todas que América
Latina es mestiza, pero no solo entre los elementos indígenas y europeos, sino que dentro
de todos los elementos que conformaron, conforman y conformarán las sociedades que la
componen, es por esto que debe existir una conexión entre lo académico, lo intelectual y la
real praxis de la conservación y valoración de los elementos afrodescendientes en América
Latina, una conjunción entre los elementos teóricos y los movimientos sociales, en donde
los estudios de la africanidad sirvan a los movimientos afrodescendientes para ser
valorados, respetados, aceptados y de una vez por todas se reconozcan sus labores y aportes
a la sociedad y cultura de los distintos países de América Latina.
.
Referencias:
- Lechini, G. (2008). “Los estudios sobre África y Afroamérica en América Latina. El
Estado del Arte”. Los estudios afroamericanos y africanos en América Latina:
Herencia, presencia y visiones del otro. Comp. Lechini, G. Buenos Aires, CLACSO.
11-32.
- García, J. (2005). “Encuentro y desencuentros de los ‘saberes’ en torno a la
africanía ‘latinoamericana’”. Cultura, política y sociedad. Perspectivas
latinoamericanas. Comp. Mato, D. Buenos Aires. CLACSO. 359-377.

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