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201744854, Dulce Stephanníe Catún Guevara.

Centro Universitario del Norte CUNOR, USAC


Administración de empresas

El virus de la Actitud

Objetivos
 Comprender la importancia de las actitudes y el ánimo y como éste afecta al clima
laboral de una organización.
 Determinar los diversos tipos de trabajadores basados en sus actitudes, en pro de la
mejora de las situaciones en las que se deba de desarrollar en una organización.
 Establecer la importancia de los líderes en la prevención o mejora de actitudes que
puedan poner en peligro el bienestar de la organización.
Resumen
El virus de la Actitud es una metáfora que refleja la importancia y relevancia que tienes la
buena disposición, el ánimo y la actitud de los miembros de un equipo de trabajo en una
organización, desde los más altos cargos como lo son la dirección general de la empresa y
gerencia, hasta los puestos de menor rango; y, como éstos tiene la capacidad o habilidad de
convertir actitudes negativas que puedan poner en peligro a sus unidades de trabajo, mala
disposición, desgano y falta de motivación, en entusiasmo mediante la proactividad, todo
ello para combatir y vencer al virus. El líder de la organización es el ente con mayor
importancia en la creación de este ambiente, pues este se encargará de diagnosticar cada
uno de los síntomas presentes en sus colaboradores, así mismo dará las herramientas para la
solución de cada uno de ellos, su prevención y supervisión constante hasta su plena
recuperación.

Palabras clave
Actitud, virus, importancia, líder, organización.

Desarrollo
Todas las empresas tienen establecida una estructura organizacional laboral. Pues esa es la
base en la cual se diferencian los diversos miembros que la conforman, dependiendo de las
labores y tareas que realizan, así como sus perfiles tanto laborales como personales. Pueden
distinguirse tipos específicos de trabajadores según sus actitudes frente a situaciones
desafiantes y con un alto grado de estrés, entre los cuáles se mencionan:
Perfeccionista: este tipo específico de persona comúnmente considera su propio trabajo
superior y más valioso al del resto de su equipo, por lo que, no admite ser cuestionado por
nadie, pues su trabajo es impecable y sin fallas, esto permite que sienta la libertad de
criticar de manera continua el trabajo de otros.
Alterado: este miembro de un equipo de trabajo generalmente genera una sensación de
rechazo, alguien a quién se trata de evitar, pues sus acciones se basan en impulsos del
momento, no mide las consecuencias de sus actos, pues se deja influenciar totalmente por
sus emociones y sentimientos.
Resistente: es un miembro que no está en disposición a cualquier cambio que quiera
presentarse, se resiste a estas mejoras en la organización, pues no se siente cómodo con las
modificaciones a las situaciones a las que ya se encuentra acostumbrado.
Desapegado: no se encuentra tan comprometido con la organización, no da su máximo
potencial en pro del crecimiento de la organización, se limita a realizar lo mínimo en sus
actividades y con quienes son su competencia.
Esparcidor de rumores: este tipo de miembro se interesa sólo por sembrar dudas y
discordias entres los colaboradores, se interesa por conocer cada uno de los aspectos de la
empresa pues desea contarle a todos lo que sabe, crea desconfianza y rencores entre los
miembros de la organización.
No comprometido: este miembro no se siente partícipe de la organización, por lo que no
asume responsabilidades en equipo.
Pesimista: este tipo de miembro es el principal portador del virus de la negatividad en las
organizaciones en general, pues tiene la habilidad para identificar una gran cantidad de
problemas, pero no plantea o propone soluciones.
Acciones necesarias para corregir esas conductas.
 Ser conscientes de las propias actitudes, reconocer cuando existe un problema de
actitud, este será el primer paso la lograr combatirlas, pues se establece el impacto
que puede llegar a tener en la productividad
 Establecer la responsabilidad propia con humildad, no culpando a la empresa de las
faltas cometidas.
 Al ser capaz de reconocer las faltas propias, puede ayudar a algún compañero a
distinguir y determinar esas actitudes que no le permiten dar lo mejor de sí, como
mejorar su comportamiento y conducta.
 Al ser el líder, es capaz de influenciar a los empleados guiar a los empleados y
mostrar como su conducta y actitudes es un factor determinante en la productividad
y el logro de objetivos.
 Ahondar en las causas intrínsecas que provocan e influyen en la presencia de
actitudes de improductividad. Ayudan a establecer de manera puntual los valores
que persiguen, y la forma en la que se desenvuelven en la empresa.
 Mantenerse en constante contacto y supervisión de aquellos que se encuentran en un
proceso de corrección de malas actitudes, mantener un refuerzo positivo.
Conclusiones
La dirección de todas las empresas en general tiene como objetivo primordial, establecer
una actitud positiva, y hacer de ella una herramienta en la mejora del trabajo en equipo,
mejorar el ambiente y clima laboral, todo ello para la mejora de la productividad de esta.
Las empresas en la actualidad deben de determinarse los riesgos potenciales debido a las
malas actitudes que pueden ser capaces de provocar pérdidas en la productividad tanto para
los individuos como para las empresas. Este tipo de virus deben de reconocerse de manera
inmediata puesto que si no se combate a tiempo pueden tomar mayor fuerza y afectar de
manera incluso permanente. Actitudes positivas provocan una diferencia considerable en
una empresa, porque se relaciona estrechamente con la motivación de los trabajadores. El
rol del líder es importante en el mantenimiento de las actitudes positivas ente los miembros
de equipo de trabajo, el es clave para el éxito, el es el enlace entre los objetivos individuales
de cada empleado y los objetivos colectivos de la empresa, pues se logra obtener una buena
gestión y comunicación en la dirección. La poca o falta de empatía por parte de los jefes y
líderes disminuye el desempeño y afecta el clima laboral.

Recomendaciones
 Buena y fluida comunicación por parte del líder, debe trasmitir de manera clara y
coherente la visión de la organización y lo que se espera alcanzar. Deben
establecerse estrategias de comunicación constante, pues es la autoridad, que brinda
seguridad y confiabilidad a sus empleados.
 Desarrollo constante del líder, pues permitirá mejorar su conexión con los
empleados, compartir ideas, objetivos y más, imparte instrucciones y puede definir
expectativas de manera precisa, y se tendrá como resultado establecer metas
individuales y colectivas en pro de la empresa.

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