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Teórico 8- 2 parte

Referencias: F= Freud; L= Lacan; I=interpretación; C=construcción; Ns= neurosis;


Ps=psicosis; Sch= Scherber; Fle= Flechsig

Decíamos que íbamos a seguir a F a través de los diversos recorridos que el va haciendo
para poder caracterizar su procedimiento y en especial para registrar como va
combinando los dos métodos, I y C. A pesar de que la I es mínima pero es muy puntual.
De modo general podemos decir que en esa trama, que F va armando, el va a comenzar
primero con una constatación en la historia del sujeto o en el contenido del delirio. Por
ejemplo:
1-primero el constata como era la relación de Sch con Fle. Recuerdan que Fle es a quien
Sch lo considera como el autor de su “almicidio”, como el autor de la persecución y que
toda la elaboración delirante de Sch va a cumplir la función de transformar la relación con
dios, porque la relación con Fle va a ser siempre persecutoria. Incluso uds habrán visto la
carta abierta que él le dirige.
2-Después de la constatación, va a agregar una hipótesis general. La importa de algún
otro caso, alguna ley general, alguna constatación realizada en otro caso, por él o por otro
autor. Por ejemplo, en este punto podríamos decir, lo que importa de Abraham. Aquella
puntuación de Abraham: “la persona ahora odiada y temida, por su persecución, es una
persona antes venerada y amada”. Entonces importa una hipótesis que le funciona como
enmarcando, no es cierto?
3- Articula esta hipótesis con las circunstancias de la historia de la enfermedad. Por
ejemplo cuando constata la hipótesis de que “la persona ahora odiada y temida, por su
persecución, es una persona antes venerada y amada”, en la veneración que
explícitamente menciona Sch tener por Fle, al terminar el primer tratamiento. Y también
en los sentimientos de agradecimiento que la mujer de Sch explicita hacia el médico, que
le dice “ud me devolvió mi marido”. O sea, persona antes amada.
4- A veces agrega hipótesis complementarias (como ya vamos a ver), pero lo que nunca
elude es el momento de verificación directa e indirecta en las singularidades del delirio. Es
aquí donde generalmente aparece la interpretación. Por ejemplo, cuando interpreta los
sueños que tiene Sch en el momento de incubación de la segunda enfermedad. Sueños
en los cuales van a aparecer contenidos de recuerdos de cuando estaba enfermo. Y
entonces F va a interpretar esos sueños como lo hace, como en la interpretación de los
sueños. Y entonces dice, que soñarse enfermo es cumplimiento de deseo de volver a ver
a Fle, porque encuentra allí, ya, la emergencia de la fantasía femenina. Y como comunica
la emergencia de la fantasía de transformación en mujer, a continuación del relato del
sueño, en donde vuelve a ver a Fle, ¿qué es lo que deduce F?, que en esa contigüidad
entre el relato del sueño y el relato de la fantasía encuentra un nexo de contenido entre
ambos, y entonces dice: esta fantasía está referida desde el primer momento a Fle.
Y ahí produce una primera formulación de la construcción, tomando todo esto con lo que
viene. ¿Cuál es esa primera formulación de la construcción? Que desde la primera
enfermedad quedo un resto de dependencia tierna con el médico que va a experimentar
una intensificación al modo de una inclinación erótica, esta es la causa ocasional. O sea,
la brusca emergencia de una moción homosexual.
Entonces, primera formulación de la construcción, desde la primera enfermedad quedó un
resto de dependencia tierna con el médico, esta dependencia tierna se intensifica a modo
de una inclinación erótica, y la causa ocasional y raíz ocasionante es la brusca
emergencia de una moción homosexual.
Hizo esta primera formulación de la construcción, ahora busca las verificaciones. ¿Dónde
las busca? Primero, por ejemplo, objeta su propia construcción y dice: en ningún lado
dice que la transformación en mujer debe cumplirse a favor de Fle, y entonces ¿porque yo
digo que esto tiene que ver con Fle?

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Bueno, allí F hace un entramado con el auxilio de citas de Fausto, de Goethe, de
Manfredo y otras series de escritos y trabajos literarios, que le permiten concluir que
efectivamente estaba vinculado con Fle.
No conforme con verificarlo por el lado de objetar, lo verifica por el lado de la verificación
indirecta. Por ejemplo: ¿Porque podría haberse dado esa brusca emergencia de una
moción homosexual?, lo pone en relación con la ausencia de cuatro días de la mujer de
Sch, se va de vacaciones, lo deja en la clínica y dice F: la ausencia de su mujer suprimió
el efecto protector que la relación con ella tenía, en relación a los deseos homosexuales.
La relación con su mujer lo protege a Sch de la intensificación de los deseos
homosexuales, se va su mujer, lo deja solo, se va el efecto protector.
Una hipótesis complementaria que también pone F para pensar la construcción, busca
otras razones posibles para la emergencia, otra razón posible sería el climaterio
masculino, por ejemplo. El climaterio de Sch, tenía 51 años.
Sigue F, seguimos con el método. Examina puntualmente una cuestión, esto de que ¿Por
qué puede ser que aparezca 8 años después de la primera enfermedad y que encima de
que aparece 8 años después sea la ocasión de la perturbación? Y aquí se responde con
otra hipótesis complementaria que tiene que ver con lo que nos enseña la transferencia.
Es decir, encontró en el médico la figura del padre o del hermano. Y aquí se hace una
objeción, y si viven su padre y su hermano estaría Fle sustituyéndolos. Bueno, se ocupa
de verificar que ambos murieron y que murieron un tiempo antes de la primera
enfermedad. Esta transformación de las figuras de la serie paterna va a constituir el
eslabón intermedio que tiende el puente que conduce a la segunda construcción que
produce F. Y es muy interesante ver como se arman estas construcciones. Es decir una
heterogénea serie de piezas, que como vimos son: acontecimientos de la vida del sujeto,
leyes generales, material del delirio, hipótesis complementarias, interpretaciones, que si
bien tienen un lugar reducido tienen una función decisiva e ineliminable.
La segunda construcción va a tener que ver con las fases del delirio, sobre todo en la
segunda mitad del capítulo va a examinar las transformaciones que experimenta el delirio.
El primer cambio va a ser la sustitución de Fle por Dios, y la consecuencia inmediata es la
agudización del conflicto y un incremento de la persecución que ya a esta altura es
intolerable. Ahora, ese cambio va a preparar el siguiente, que es de suma importancia. Lo
podríamos enunciar de esta manera: si resulta imposible aceptar ser la mujerzuela del
médico, no ocurre lo mismo con ser la mujer de Dios. Es decir, con ofrecer a Dios esa
voluptuosidad. Es decir, aquello que era ultrajante deviene valioso, digamos. Deviene
acorde con el orden del universo. Este cambio es el que va a preparar, como decíamos la
clase pasada, la solución asintótica del estadio final del delirio.
Y se hace esta pregunta F. Porque si nosotros decimos que L, así decía L de sí mismo.
Que él era como un niño de 5 años preguntándole al psicótico. Si nosotros decimos que L
preguntaba al psicótico en las presentaciones de enfermos, como un niño de 5 años, o
sea como un niño de la curiosidad infantil, como un niño antes de la represión, como un
niño antes de la amnesia infantil, como un juanito, digamos. Si L preguntaba como un
juanito, F que no lo tiene a Sch delante preguntarle, se pregunta él, se pregunta como un
juanito. Entonces una de las cosas que F se pregunta, ¿porqué caminos se produce la
sustitución de Fle por Dios? Y entonces aquí encontramos claramente la analogía entre
los caminos del método y los caminos del delirio. La analogía entre la combinación de la I
y C delirante y la C psicoanalítica. Y entonces va ir mostrando los caminos y mutaciones
del delirio. Es decir una serie de C.
Entonces, la primera cuestión es mostrar que Fle y Dios están en una misma serie. Lo
primero que señala es la fantasía en la que Sch espía un diálogo de Fle con su esposa,
en la que Fle se presenta como un Dios, como el dios Fle.
El segundo punto que muestra a Fle y a Dios en la misma serie, son las fragmentaciones
que se verifican en el personaje Fle y en el personaje Dios. Dado que encontramos en el
delirio Fle medio, Fle superior y también encontramos Dios inferior, Dios superior. Es una
verificación indirecta, claro. No dice Sch, Dios es Fle. Sch hace esta fragmentación de los
personajes, entonces F dice: ahí yo puedo pensar que son de la misma serie. Si Fle es el
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perseguidor antes amado, Dios también significa el retorno de una persona amada, ¿qué
persona amada?, el padre. Y F va a verificar que Fle va a ser desplazado al papel del
hermano, y entonces tendríamos que la dupla Dios-Fle, es representante de la dupla
padre-hermano. Y convalidado esto, se podría concluir y esta es la principal construcción
de esa segunda mitad, que la raíz de la fantasía femenina es la añoranza eróticamente
intensificada por el padre y el hermano.
Y sigue F, esa hipótesis es verosímil y acorde con unas series de cuestiones.
Primero, las características efectivas del padre de Sch, uds saben que era un pedagogo
famosísimo, todavía es famoso. Alguna vez me fue posible ver un libro escrito por él,
donde aparecían los aparatos ortopédicos que inventaba para toda clase de correcciones
en los niños, para corregir la apostura, para que se sienten bien, para que se paren bien,
para que no se encorven, para que no se toquen donde no se tenían que tocar. Digamos,
para todo lo que se imaginen. Entonces la figura del padre de Sch es una figura apropiada
para figurar a un Dios. Admirado, sabiendo podríamos decir.
¿En donde se apoya F para eso? Y por ejemplo, en lo que pasa en otras culturas, en lo
que pasa en otras culturas en la antigüedad, por ejemplo lo que pasaba con los romanos,
como el emperador y el padre, dios y el padre. También en la constelación edípica,
podríamos decir ahí donde la posición infantil frente al padre es una mezcla de sumisión
respetuosa y rebeldía. Y en ese punto va a decir F que la relación con Dios es copia de
esa relación infantil con el padre. El otro punto que toma, es ese punto en el cual el padre
de Sch, pedagogo, aparece en el delirio como un Dios que no comprende a los vivos y
sólo trata con los muertos. Nosotros podríamos pensar, en que punto estaría muerto Sch.
Otra referencia que hace F, como Dios, los médicos hacen milagros, pero aparecen como
milagros absurdos y ridículos en el delirio. Y entonces allí F aplica algo que ha recavado
en su interpretación de los sueños, ósea: que cuando aparecen contenidos absurdos y
ridículos eso tiene un valor de burla y de desprecio, hacia los milagros de Dios digamos.
Este Dios del delirio de Sch es un Dios que no aprende de la experiencia. Y entonces F
aplica allí su idea de que esa posición de Dios que no aprende de la experiencia surge del
mecanismo infantil por el cual se le devuelve a alguien un reproche sin modificación, un
reproche al mismo que lo formuló. Digamos, el padre de Sch que efectivamente lo
martirizaba con sus aparatos ortopédicos y con sus enseñanzas, seguramente lo habrá
puesto en esta posición de vos no a prendes de la experiencia. Ese insulto, esa atribución
injuriante del padre de Sch a Sch se la devuelve en el delirio, Sch a Dios. Dios que no
aprende de la experiencia.
El otro punto es la interpretación del simbolismo del sol, el sol que es la otra figura de la
serie, Padre-Dios-Sol. Aquí F apunta que es el mismo Sch el que da la I.
Y la otra cuestión que va a destacar F es que lugar tiene esa fantasía delirante de tener
hijos con Dios, y va a decir que el lugar que tiene esa fantasía tiene que ver con la
privación real que tiene el matrimonio Sch de poder engendrar un hijo. Dice F sobretodo
un hijo varón, que pudiera haber funcionado como el consuelo frente a la perdida de esos
otros dos varones, el padre y el hermano.
L en sus estudios de las memorias del presidente Sch, va a puntualizar que la
construcción que realiza F se orienta por una referencia sistemática al complejo paterno.
Y la segunda parte va terminar en contigüidad con el comienzo de la tercera. La tercera,
esa frontera de la que hablábamos, o sea nada que no encontremos en la posición inicial
del neurótico. Ahora, sin embargo es como si inadvertidamente F, a pesar de decir “nada
que no encontremos en la infantil posición del neurótico”, inadvertidamente F, en verdad,
va a explicitar cual es la diferencia y oposición. Porque va a determinar con toda claridad
que, mientras que en la ns el padre aparece como perturbador de la satisfacción
autoerótica del niño, el desenlace del delirio, es decir, la fantasía sexual, celebra el triunfo
grandioso en donde el Dios mismo exige satisfacción voluptuosa. Digamos, aquello que
aparece prohibido en la ns, aparece exigido en la ps. Y en la misma fantasía sexual,
podríamos decir que aquello que en la ns aparece como amenaza, es decir la castración,
en el delirio aparece con fantasía femenina delirante.

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Bueno, para terminar con nuestro pasaje por el historial y esta comparación por el modo
en que aparece la dupla I-C, en ambos textos, primero vamos a destacar los rasgos
comunes.
Los rasgos comunes en los dos trabajos son los siguientes:
En ambos, la I aparece como un componente menor y puntual, que integra
construcciones.
La construcción va a aparecer como un trabajo preliminar del analista, que en su
elaboración de la C, es independiente de si después resulta en una comunicación ulterior
o no. Por ejemplo, la C que F realiza del historial de Sch, no es comunicada a nadie,
digamos. Y eso también puede ocurrir en el marco de un análisis. Uno no siempre
comunica al analizante la C que va realizando. Primero, porque no siempre es momento,
mmm. Y segundo, porque habrá que ver si en ese, caso por caso, digamos, de la ética del
analista, la comunicación es pertinente. Entonces, la elaboración de la construcción no
implica necesariamente la comunicación.
La tercera cuestión que aparece como rasgo común es la legitimidad y justificación que va
a ser presentada en primer plano, en ambos artículos. Es decir, se trata de piezas
heterogéneas que articuladas entre sí van a contribuir a una pequeña teoría aplicada a un
caso singular. Es decir un ser intermedio, podríamos decir, entre I y teoría.
La otra cuestión que podríamos puntualizar una vez puntualizados esos rasgos en común
es, apreciar mejor el lugar y la función de la I. El lugar y la función de la I aparece en esa
trama heterogénea y como decía, lugar no tanto reducido como puntual. Y se le va a
exigir a la I cumplir una función precisa, por eso lo de puntual también. ¿Qué funciones
precisas? Y, como veníamos diciendo, o bien la articulación entre componentes
heterogéneos, o bien la verificación indirecta de alguna parte de la C como los sueños por
ejemplo. Funciones que resultan esenciales para una C. En consecuencia la I es una
pieza fundamental, sin la cual la C no sería viable, no se sostendría.
Si comparamos los dos artículos podríamos decir que en el historial lo que podemos
apreciar mejor es el lugar de la I como traducción y como desciframiento, y también poder
reconocerla como un componente heterogéneo en relación a la construcción. Y en el
artículo del 37 la I aparece como con un rango menor, porque allí la C es el tema,
digamos.
Y la tercera cuestión que podemos puntualizar es la diferencia entre ambos artículos. Y
acá es un punto muy interesante. Porque podríamos decir que en el artículo del 37, que
uds ya leyeron en psicoanalítica 2, la C va a aparecer en su cara de sustituto del
recuerdo, mmm? ¿Recuerdan como aparecía? Allí donde el sujeto había olvidado, la
cadena significante paraba, mmm, en ese punto F construía, mmm. Entonces en 1937 la
C aparece como sustituto del recuerdo, y tiene el valor de reestablecer una verdad
histórica. Sobre todo eso lo vemos en el hombre de lobos, ¿recuerdan?, También en el
hombre de las ratas. Es decir tiene el valor de reestablecer una verdad histórica, mientras
que en el historial de Sch apunta con la mediación de la fantasía directamente a la
motivación ocasional y va a remontar su raíz pulsional. Entonces, en el artículo del 37
sustituye el recuerdo y tiene valor de verdad histórica, en el historial de Sch la cuestión es
la raíz pulsional, ¿no es cierto? , la motivación ocasional y la raíz pulsional.
Para terminar, en el historial la I y la C se reparten el registro del sentido. Una descifrando
el significado, esto es, la I. Y otra en referencia al sentido del goce. Es decir, para decirlo
más lacananiamente, la primera más en relación al fantasma, la segunda más en relación
al goce, a la pulsión.
Bueno, tenemos media hora para introducirnos en el artículo de la Negación e intentar
abordar lo que hace L en el seminario de la psicosis con ese artículo. Muy probablemente
no termine, nos quedemos en un esbozo. Pero quiero hacerlo.
Quiero contarles dos cosas, una que en prácticos van a trabajar justamente el seminario 3
de la psicosis y otra que el próximo lunes es feriado y yo el jueves no voy a estar así que
la clase se va a dar igual en este mismo horario y por este mismo canal pero la van a dar
mis compañeros de seminario. O sea que este tema que esbozamos hoy lo retomamos
cuando retomen conmigo, digamos. O sea en ese seminario lo que van a ver es el
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recorrido lacaniano respecto de la psicosis, es decir como va apareciendo el recorrido de
la psicosis en la obra de L. Desde el primer momento del estadio del espejo hasta el
último momento, que se llama la clínica borromea, con los nudos borromeos propios de la
última parte de la enseñanza de L.
Vamos al otro lugar, a la otra pata de la oposición más amplia de la que hablábamos,
registro del sentido, registro del mecanismo. Registro de la significación, registro de la
formación de los síntomas. Ahora vamos para este lado, a hablar de mecanismo de
formación de síntomas.
En la psicosis, cuando F trabaja la cuestión del narcisismo hay una pregunta que queda
planteada y es ¿Qué hace se traspase, se vaya más allá del narcisismo y se ubique libido
sobre los objetos? mmm. Esa es una pregunta freudiana, es una pregunta que a pesar de
que uds saben que el narcisismo lo introduce en el historial del Sch y luego en 1914 en
“introducción al narcisismo”, las líneas fundamentales están desde el primer momento de
la construcción teórica del psicoanálisis. Tanto es así que vamos a ver que en distintos
momentos de la obra de F van a haber tentativas de diferentes respuestas a esa
pregunta. Por eso, por ejemplo, por mencionar un trabajo de la primera época, ese trabajo
llamado “proyecto para una psicología de neurólogos”, uno de los primeros trabajos de F,
era neurólogo todavía ahí. Fíjense que uds se van a dar cuenta que ya la saben a esta
respuesta, aunque a lo mejor nunca hallan leído el proyecto. La respuesta que da F es
que lo que lleva al sujeto a engancharse con otro, podríamos decir, a vincularse con otro,
a relacionarse con otro, es la indefensión estructural es decir aquello que F dice es la
necesidad de la asistencia de otro salvador advertido de las necesidades del sujeto para
poder sobrevivir.
En la conferencia 26, por ejemplo, llamada “la teoría de la libido y el narcisismo”, la
respuesta la va a dar en el terreno económico. Dice F: diríase que la acumulación de la
libido narcisista no puede ser soportada por el sujeto sino hasta un determinado nivel y
podemos además suponer que si la libido acude a revestir objetos es porque el Yo ve en
ello un modo de evitar los efectos patológicos que produciría un estancamiento de la
misma.
Nosotros podríamos decir que la respuesta más acabada que da F a esa pregunta la
podemos encontrar en el “más allá del principio de placer”, en donde F va a decir que lo
que presiona y fuerza al Yo no es otra cosa que la pulsión, mmm. Es decir, la pulsión es
aquello que fuerza al Yo a engancharse con los objetos, ahí, más allá del narcisismo.
Para desarrollar esa tentativa de respuesta es que vamos a tomar algunos puntos del
trabajo de F de “la negación”.Nosotros podríamos decir que el empuje de la pulsión
efectivamente es la vía estructural del abandono del narcisismo, siendo necesario aclarar
que es la vía neurótica. En cambio lo que vamos a encontrar en la ps es justamente este
desbarajuste pulsional, por decirlo de alguna manera, del que venimos ya de algún modo
intentando dar cuenta. ¿Por qué? Porque justamente lo que vamos a subrayar es que la
idea de F en relación a este narcisismo particular que el nombra como introversión de la
libido, no tiene vuelta. Es decir, no tiene vuelta en el sentido que implicar una ruptura que
no permite un camino de retorno, lo cual tiene fuertes consecuencias para la cura y obliga
a redefinir todos y cada uno de los componentes del dispositivo analítico.
Cuando nosotros decimos que es una ruptura radical que no permite un camino de
retorno, lo que queremos decir es que a partir del desencadenamiento de la ps no se trata
de restituir un estado anterior. Entonces no hay camino de retorno en el sentido de que se
fuera a restituir un estado anterior.
¿Cuál es el valor del texto la negación de F? Este texto tiene un valor dentro de la obra de
F pero justamente formando parte de esa operación de lectura que hace L del texto
freudiano, uno de los efectos de la operación de lectura del texto freudiano es que L va a
resaltar muchísimo ese artículo, cortito, difícil, condensado. Ese artículo en el que F va a
trabajar sobre como surge la función intelectual, es decir, como a partir de las mociones
pulsionales primarias surge la función intelectual o lo que es lo mismo el modo en que el
aparato psíquico inscribe un juicio a través de la dinámica de las pulsiones. Como se
inscribe algo en el aparato psíquico.
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La función intelectual podríamos decir, surge a partir de este acto del juicio que es
constitutivo de un sujeto. Fíjense que nosotros aquí en cierto modo tenemos que hacer
una referencia mítica, es como una complicación más que tenemos, mmm. Porque
nosotros nos vamos a referir al establecimiento de la función simbólica en un sujeto
sabiendo que lo simbólico lo preexiste al sujeto. Es decir que hay un comienzo mítico de
la función simbólica, porque la función simbólica está desde el primer momento para el
sujeto, mmm. Es esto que tanto los atormentamos en psicoanalítica 3, sujeto mítico que
aparece sin barra pero que después aparece barrado porque siempre estuvo inmerso en
un baño de lenguaje. Bueno ahora para pensar la función simbólica tenemos que pensar
en términos de ese sujeto mítico, sabiendo que es mítico porque siempre estuvo…mmm.
Entonces L se va a valer de un comentario del artículo freudiano de la negación, del
comentario que hace un filósofo, Hyppolite, cuyo comentario aparece en el seminario 1,
Hyppolite esta en el seminario y hace un comentario. Darles el comentario que hace
Hyppolite que aparece en los escritos era un poco demasiado. Entonces, digamos, uds
tienen que confiar en una lectura de este comentario. Hyppolite se va a ocupar en ese
comentario de diferenciar la negación freudiana de otro tipo de negación, lo que le va a
servir a L para pensar el mecanismo de la forclusión, el mecanismo del rechazo propio de
la ps.
¿Qué es lo que va a decir F en el texto de la negación? F va a afirmar que la función del
juicio sólo es posible por la creación del símbolo de la negación. ¿Por qué? Porque el
símbolo de la negación es el símbolo que permite al pensar una relativa independencia de
los resultados de la represión. Es decir, permite usar los contenidos de lo reprimido.
¿Cómo lo ve a eso F? F tiene un ejemplo clásico, el ejemplo de “no es mi madre”, ¿no?
Dice F algo así como: bueno si frente a un sueño uno le pregunta al paciente, el paciente
va a decir, por ejemplo, no es mi madre. Y dice F cuando aparece “no es mi madre”, yo
tengo que concluir que “es la madre”. Es decir, eso “no” le asegura a F la presencia de un
pensamiento reprimido que solo aparece bajo la condición de que se deje negar. Y por
ejemplo F inventa una pruebita para eso, una trampita, y dice, por ejemplo: le pregunta al
sujeto, quien piensa ud que no podría ser de ningún modo ese personaje y ahí va a
aparecer, mi madre. La fórmula más prototípica, que juro que se escucha en los análisis,
no vaya ud a creer, no vaya ud a pensar que estoy hablando de mi madre.
Bueno, entonces L lo invita a Hyppolite a su seminario para hablar de la negación y lo
interesante es que ahí Hyppolite va a hablar de tres tiempos o tres niveles de la negación.
Hago aquí la primera advertencia, no tenemos que pensar que esos tres tiempos y esos
tres niveles de la negación se corresponden puntualmente con los tres tiempos de la
represión. No.
Bueno, voy a introducir dos cuestiones y los dejo.
Cuando Hyppolite va a puntualizar qué es esta negación freudiana, la negación esta de no
vaya ud a creer, dice: no es la negación de algo en el juicio, sino una especie de desjuicio,
o sea, no es negar contenidos, enunciados, sino el lugar mismo de la enunciación. Por
ejemplo, que sería negar contenidos, si yo digo: la pared no es roja, eso es negar algo de
un juicio, mmm. En cambio este desjuicio, este negar el lugar de la enunciación es por
ejemplo: yo digo que la pared no es roja, mmm. Es bien distinto decir la pared no es roja
que decir yo digo que la pared no es roja. Entonces para Hyppolite la negación freudiana
es del tipo yo digo que la pared no es roja. Entonces, cuando yo digo: no vaya ud a creer
que es mi madre, yo estoy negando lo que digo. Entonces, en esa negación se rebela la
posición misma del sujeto de la enunciación. Y acá dejamos. Esto nos va a servir como
marco para lo que sigue.

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