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Otra planta más para nuestro pequeño huerto urbano, hoy vamos a
ver cómo cultivar orégano en macetas dentro de casa. Una hierba
aromática que se usa en muchos platos y cuyo cultivo requiere muy
pocos cuidados, pues es una planta que se da bien incluso en zonas
áridas y apenas requiere riego ni abono.
Una misma planta nos puede durar hasta seis años y cada planta nos
dará una buena cantidad de orégano que podemos secar al aire
odeshidratar en el horno y tendremos nuestro propio orégano listo
para consumir durante una buena temporada.
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Al momento de cuidar el orégano es muy importante tener
en cuenta que esta planta soporta muy bien las
temperaturas extremas tanto altas como bajas, esto se
traduce en que su riego debe ser moderado con el fin de
evitar que se pudra. Ten en cuenta que la tierra solo debe
regarse cuando se encuentre completamente seca, siendo
más frecuente el riego en invierno que en verano.
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También debes tener en cuenta el espacio en el que
ubicarás tu planta de orégano. La misma puede recibir el
sol directo sin problema , de hecho es conveniente que así
sea aunque también puedes ubicarla en un espacio en el
que cuente con sol y con sombra en distintos momentos del
día.
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Esta planta aromática no es de las que más abono
requiere, pues crece bien sin demasiado estímulo. A pesar
de ello, y si lo deseas, pues abonarla dos veces al año en
primavera y verano usando algún abono natural o artificial,
pero ten en cuenta que para hacerlo por primera vez es
conveniente que tu planta haya alcanzado al menos los 15
centímetros de altura y cuente con ramificaciones.
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Debido a que el orégano es una planta usada
normalmente en la cocina y que además cuenta con
muchos beneficios para nuestra salud, extraer y secar sus
hojas es la principal finalidad de cultivarla, por eso es
importante conocer el momento adecuado para hacerlo. Se
recomienda cortar las hojas justo después de que la planta
florezca, el momento idóneo para la recolección.
Después de que la planta florezca también se recomienda
podarla para que crezca más sana y fuerte.
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Una vez que hemos extraído las hojas de
orégano debemos reunirlas en manojos y colgarlos en un
lugar seco y ventilado para secarlos. Cuando estén secos
podremos almacenar las hojas en un recipiente
preferiblemente hermético para una mejor conservación,
añadiéndolas a nuestras recetas favoritas para aportarles
su delicioso aroma y sabor.
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Como hemos comentado, para cultivar y cuidar
romero no hace falta ser un experimentado jardinero. Es
una planta a la que se le puede dar la forma que quieras, si
no te gusta que crezca de forma desordenada, puedes
podarlo de la manera que te guste e incluso darle alguna
forma definida. El romero puede llegar a crecer hasta más
de 2 metros de altura así que puedes ponerte creativo y
podar como desees siempre con precaución para que no
pierda su estructura compacta. Pero recalcamos que la
poda es voluntaria, basta con quitar las partes que se
secan y en primavera despuntar para que la mata esté
lustrosa y se favorezca el crecimiento.
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Para sembrar la planta de romero debes tener en cuenta el
tipo de suelo, es importante que tenga un buen drenaje de
agua. Aunque es cierto que la planta es tan fuerte y flexible
que se adapta a cualquier tipo de suelo, es preferible que
no haya estancamiento de agua. Y que haya unas buenas
proporciones de abono, sobre todo durante las épocas más
calurosas como es en primavera y verano. Respecto el
abono, se recomienda que cada año con la reanudación de
la planta se ponga una mezcla completa de nitrógeno,
fósforo y potasio.
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Respecto las necesidades de luz, el romero necesita luz
directa del sol, pero hay que tener especial precaución
con que no esté expuesto al viento. Antes se cultivarlo ten
en cuenta este dato para orientarlo en una zona que no
tenga mucha corriente de aire de normal. En cuanto a la
cantidad de agua que el romero necesita, es con medida.
Respecto el riego, el romero prefiere terrenos secos, no
muy regados. Se debe tener cuidado en no empapar
demasiado y que queden charcos porque este exceso de
humedad no es tolerada muy bien por la planta. Las
mayores necesidades de agua son durante el periodo de
crecimiento, y durante la floración.
Débora De Sá Tavares
Quienes disfrutan cocinando sabrán que no hay nada mejor
que contar con hierbas aromáticas frescas para realizar
nuestros platos, pero además estas plantas ocupan poco
espacio y son realmente útiles, por eso si estás pensando
en hacer tu propio huerto en unComo.com te damos las
claves para que descubras cómo cuidar el perejil en
sencillos pasos.
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Una vez que tengas el perejil plantado (la mejor época para
hacerlo es en primavera) deberás regarlo con
frecuencia cada vez que la tierra esté seca pero sin dejarla
encharcado de agua. En verano necesitará más líquido que
en invierno
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Es importante que el perejil reciba luz pero no que el sol le
pegue directamente, lo mejor es que esté a la sombra
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Esta planta no soporta bien las bajas temperaturas por eso
ante la llegada del invierno es recomendable que la
coloques resguardada dentro de casa
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Cuando comience a florecer deberás podarla pues si la
dejas la planta se secará y morirá. No cocines nada con
esta flor su sabor es amargo y dañará tus platos
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No dudes en podar una vez al mes tu plata de perejil
retirando las hojas secas y ayudándola a crecer más sana,
también es importante que recojas las hojas de perejil y
realmente las uses en tus platos si no la planta acabará por
morir
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Y si no sabes en qué platos incorporarlo te damos algunas
ideas: merluza con salsa de perejil albóndigas de carne y
patata o la salsa chimichurri típica de Argentina y Uruguay
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perejil, te recomendamos que entres en nuestra categoría
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