Está en la página 1de 3

GOBIERNO DE LA IGLESIA

La iglesia, como cuerpo de Cristo, comprende a todos los cristianos que se han
unido a Cristo como cabeza del cuerpo por medio del bautismo del Espíritu. La
iglesia como un organismo ha sido ordenada sobre la base del mismo principio
del cuerpo humano, porque cada parte se relaciona con las demás partes y todo
el cuerpo se relaciona con la cabeza que dirige el cuerpo. El cuerpo de Cristo no
necesita esencialmente de una organización, puesto que su relación es espiritual
y sobrenatural.

Sin embargo, en la iglesia local, tanto en los tiempos bíblicos como ahora, es
necesario tener cierta organización en la práctica. En la historia de la iglesia se
encuentran tres formas de gobierno de la iglesia, cada una de las cuales tiene sus
raíces en los tiempos apostólicos.

Los tres tipos tradicionales de gobierno eclesiástico

1- Gobierno Congregacional

Las iglesias bautistas, las iglesias cristianas, las congregacionales e


independientes se rigen por este tipo de gobierno. Strong, uno de los teólogos
bautistas dice: cada iglesia local esta sujeta directamente a Cristo, no hay
jurisdicción de una iglesia sobre otra sino que todas están aun mismo nivel y son
independientes unas de otras.

Esta posición es citada por Ernest S. Williams que fue superintendente de las
Asambleas de Dios y agrega que las iglesias de gobierno congregacional pueden
creer en la cooperación entre iglesias pero que ninguna iglesia, ni oficina fuera de
si misma debe gobernar las iglesias locales la base neotestamentaria para un
gobierno local se dan en la citas siguientes:

a) Juntas de negocios y reuniones de adoración

b) Elecciones y reconocimientos de líderes

c) Autoridad local
d) Cartas de recomendación

e) Provisión para las viudas

La forma congregación al de gobierno es aquella que pone la autoridad en la


congregación local, y los asuntos importantes son decididos por las
congregaciones sin considerar la autoridad de otras iglesias u oficiales. Esta
forma de gobierno se ve en las iglesias congregacionales, las iglesias de los
discípulos y en las iglesias bautistas.

Aunque las iglesias locales pueden estar sometidas en algún grado a cuerpos
mayores, comités u oficiales, el concepto de una iglesia congregacional es que la
iglesia local determina sus propios asuntos, elige y ordena sus ministros y dirige
el uso de sus ingresos.

2- Gobierno Episcopal

En este sistema, sobre salen ciertos oficiales, reconocidos como obispos, (de ahí
el nombre episcopal, de “Epískopos”) la autoridad de obispos y supervisores
distritales esta fundada en la práctica de la iglesia primitiva, como se registra en el
Nuevo Testamento.

Las iglesias locales fueron fundadas y supervisadas por apóstoles

Pablo ejerció la superintendencia de las iglesias de Asia y Europa

El sistema de ofrendas y la institución de acciones tanto disciplinarias como


ceremoniales son asuntos trascendentales determinados por el apóstol a nivel
regional.

La iglesia de Dios reconoce como autoridad máxima en asuntos administrativos a


la Asamblea General.

La forma episcopal de gobierno reconoce un obispo, o dirigente eclesiástico,


como quiera que se le denomine, que, en virtud de su oficio, tiene poder de dirigir
la iglesia local. Esto ha dado origen a la compleja organización de la Iglesia
Católica Romana, o a los sistemas más sencillos de la Iglesia Episcopal y de la
Iglesia Metodista, en las que se designan obispos para supervisar las actividades
de las iglesias en una determinada área.

3- Gobierno Presbiterial

Este gobierno difiere con el gobierno episcopal también difiere, con los gobiernos
democráticos. El tipo presbiterial elige ancianos gobernantes, los cuales forman el
consistorio para el gobierno de la iglesia local.

Para asuntos regionales, las iglesias presbiterianas cuentan con presbiterios y


sínodos que también son grupos representativos de autoridad superior.

En cierta medida se ven las tres formas de gobierno en la iglesia primitiva.


Algunas de las iglesias primitivas reconocen que los apóstoles tienen la autoridad
primaria. Sin embargo, esto parece haber acabado junto con la primera
generación de cristianos. En el concilio de Jerusalén se ilustra el gobierno
representativo. (Hch. 15), donde los apóstoles y ancianos reunidos fueron
considerados como una autoridad en cuestiones doctrinales surgidas en las
iglesias. Sin embargo, estrictamente hablando, ellos no habían sido elegidos ni
eran representantes de la iglesia en el sentido moderno. A medida que las
iglesias maduraron y ya no necesitaron la supervisión apostólica, parece que el
gobierno fue pasando a las iglesias locales mismas. Esta parece ser la situación
en el caso de las siete iglesias de Asia mencionadas en Apocalipsis 2- 3, las
cuales no estaban sujetas a autoridad humana aunque permanecían bajo la
autoridad de Cristo mismo. Es dudoso si las Escrituras autorizan un gobierno
extenso complejo como el que a veces se ve en la iglesia moderna, y parecería
necesario volver a la sencillez bíblica.

También podría gustarte