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Trabajo Práctico #2 - 4to
Trabajo Práctico #2 - 4to
Material Teórico
Edmund Leach. “Un Mundo en explosión” Barcelona. Ed. Anagrama. 1967. Cap.
Nosotros y los demás (fragmento)
Enfoquemos este punto de una forma más general. Debido al modo en que se
organiza nuestro lenguaje y al modo en que estamos educados, cada uno de nosotros
se sitúa constantemente en una actitud de contienda. “Yo” me identifico a mí mismo
con un colectivo “nosotros” que entonces se contrasta con algún “otro”. Lo que
“nosotros” somos, o lo que el “otro” es, dependerá del contexto. Si “nosotros” somos
ingleses, entonces los “otros” son franceses o americanos o alemanes. Si “nosotros”
somos los defensores de la libre empresa capitalista, entonces los “otros” son
comunistas. Si “nosotros” somos los ciudadanos medios normales, entonces el “otro”
es un misterioso “ellos”, la burocracia gubernamental. En cualquier caso “nosotros”
atribuimos cualidades a los “otros”, de acuerdo con su relación para con nosotros
mismos. Si el “otro” aparece como algo muy remoto, se le considera como benigno y
se le dota con los atributos del “Paraíso”. La China imaginada por los aristócratas
europeos del siglo XVII y los nobles salvajes imaginados por Rousseau eran benignos
y remotos “otros” de esta clase. Con la tecnología moderna, el mundo se ha
empequeñecido de tal forma que este tipo de lejanía ha dejado casi de existir.
En el extremo opuesto, el “otro” puede ser algo tan a mano y tan relacionado
conmigo mismo, como mi señor, o mi igual, o mi subordinado. En la vida diaria
podemos reconocer docenas de estas relaciones de dependencia: padres-hijos,
empleados-dueños, doctores-pacientes, profesor-alumno, hombre de negocios-
cliente... y así sucesivamente. En todos estos casos, las reglas del juego están
perfectamente definidas. Ambas partes conocen exactamente como se “espera” que
el “otro” se comporte y, en tanto en cuanto estas expectativas se cumplen, todo
funciona con disciplina y orden.
Se cuentan por centenares los ejemplos que ilustran este principio. En el siglo
XVIII, con la exaltación de la razón, la locura tomó proporciones escalofriantes, y los
dementes eran conducidos en rebaños a las mazmorras y encarcelados como bestias
salvajes. Cuando los primeros colonos británicos llegaron a Tasmania, exterminaron a
los habitantes locales como si se tratase de gusanos, justificándose en la idea de que
aquellos tasmanianos de ningún modo podían ser considerados como seres
humanos. Algo parecido dijo Hitler de los judíos. En la Sudáfrica contemporánea, el
apartheid se basa en la teoría de que los negros son miembros de especies inferiores
y por lo tanto incapaces de entender la ley y el orden civilizados. La mayor parte de
nosotros reaccionamos con repulsión ante tales actitudes y, sin embargo, nos
comportamos de una manera muy similar. Expulsamos de la sociedad a los
criminales, lunáticos y personas de edad avanzada, simplemente porque se los ha
declarado anormales, pero una vez que esta anormalidad se ha establecido, nuestra
violencia puede ejercerse sin límites. Es cierto que hasta ahora no hemos tenido que
recurrir al exterminio, pero las prisiones, las comisarías de policía y muchas otras
clases de instituciones cerradas, pueden llegar a ser consideradas como lugares
horribles donde resulta muy difícil distinguir entre el castigo y el “tratamiento”. Las
represalias contra el débil siempre han proporcionado al fuerte una profunda
satisfacción; momentáneamente por lo menos alivian el miedo. En este punto
asistimos a una horrible confusión general. Queremos persuadirnos de que el castigo
tiene una finalidad disuasoria, cuando en realidad su móvil es la venganza.
Actividades
1. A partir de las lecturas de Leach y Eco redacta un listado de características sobre las
que se construye la otredad según cada autor.
2. Redacta con tus palabras, luego de las lecturas propuestas, el concepto de otredad.
3. Crear un glosario con los términos subrayados en el texto de Edmund Leach. Luego,
proponer un sinónimo para cada palabra, teniendo en cuenta el cotexto en que
fueron usadas. (Cotexto: Conjunto de elementos lingüísticos que incluyen, preceden
o siguen a una palabra u oración y que pueden determinar su significado o su
correcta interpretación)
4. Redactar la información que formaría parte de las notas al pie de las palabras
resaltadas en negrita.
Criterios de Evaluación
Observaciones.