Exportación indirecta.

La manera de exportar influye en todos los sistemas económicos de una empresa, pues esta
permite su expansión globalizada, en algunos casos la forma más común de participar es a
través de la exportación directa, sin embargo, aquellas empresas de menor escala no
cuentan con los recursos necesarios para establecer una relación directa con los clientes
extranjeros, por lo que se requiere de una exportación en donde esté involucrado un tercero
que no sea necesariamente el productor, es ahí en donde participa la exportación indirecta o
pasiva, que por medio de intermediarios se encargan de todo el proceso logístico, aduanero
y el papeleo del comercio exterior limitando a la empresa a producir y vender a sus clientes
locales. En pocas palabras, la exportación indirecta es una venta doméstica, ya que todas las
tareas de comercialización las realizan otras empresas u organizaciones, estos
intermediarios están situados en el mismo mercado del exportador, encargándose de las
tareas de exportación, en nombre de la empresa, o comprando y revendiendo en mercados
exteriores por cuenta propia (López, 2008).
Ventajas de la exportación indirecta (Becerra & Milagro, 2015).
 Permite ahorrar tiempo en los trámites documentarios, así como el establecimiento
de oficinas y puntos de venta.
 Los costos de inversión inicial son menores.
 Pueden generarse menores riesgos para la empresa exportadora.
 La empresa no requiere aumentar su estructura organizacional.
 No se requiere la especialización de la empresa en ámbitos legales y fiscales.
 Acceder a los mercados internacionales teniendo como vía la ayuda de terceros.
Inconvenientes de la exportación indirecta (Sulser & Pedroza, 2004).
 Menor control en la actividad exportadora.
 Dependencia hacia terceros.
 El porcentaje de utilidad es menor para la empresa exportadora.
 No existe relación con los clientes o importadores.
 No se brinda servicio post-venta directo, sólo mediante terceros.
Conclusión.
La exportación constituye en la actualidad un atractivo para que las empresas alcancen una
mayor eficiencia en su producción, por lo que exportar, necesita de una mentalidad abierta
que permita mantener la concepción de mercados, competencia, y estructura (Rincon,
2017). Por eso para aquellas empresas que están empezando su proceso de expansión
global, la exportación indirecta es el método para ir conociendo sobre la interacción e
integración de los mercados internacionales y, sobre todo, cómo es insertarse en la
economía mundial.