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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez

Luis Salek Gutiérrez

Camino a la
Gloria

Charagua – Bolivia
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez

Luis Salek Gutiérrez

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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez

Obra: Camino a la Gloria

Autor: Luis Salek Gutiérrez


Derechos Reservados de acuerdo a Ley

© Prohibida la reproducción total o parcial de esta obra,


por cualquier medio, incluyendo las fotocopias, sin per-
miso escrito del autor. Los infractores serán sometidos a
todas las sanciones establecidas por Ley.
Diagramación:
Fernando Jimenez Cuellar
Camiri – Santa Cruz de la Sierra – Bolivia
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez

Dedicatoria:
Dedicado a la Juventud de mi pueblo Charagua.
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez

Agradecimientos:

Agradezco sinceramente a: Jorge Montaño, Dra. Tomelic,


Jorge Mamani Quispe, a mis hermanos: Nena Salek, Fernando
Calderón, Carlos Calderón, a mi primo Julio Salek, a mis so-
brinos: Rodrigo Salek, Rocío Ballivian, Ximena Ballivián, Eli-
zabeth Salek, Mario Ramírez Ballivian, Rocío Ramírez Balli-
vian, Marcos Nordgren Ballivian, Coral Calderón, Daniel Cal-
derón, a mi hijo Carlos Salek y todo mi cariño y gratitud, a mi
sobrina Patricia Ballivian Salek, sin el apoyo y colaboración
de todas estas personas, este libro no estaría entre tus manos.

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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez

E sta es la primera novela escrita


por Don Luis Salek Gutiérrez
un hijo de Charagua. Como en
todo relato, el autor toma algunos
elementos de la realidad y utiliza su
y otras impuestas y que dejan recuer-
dos amargos.
A través de viajes en el tiempo,
nos deleitaremos con relatos de la
Historia no escrita del pueblo Gua-
imaginación y fantasía para crear raní de la provincia Cordillera del
una amena lectura que entre pasajes departamento. La mayoría de los mi-
jocosos unas veces y dramáticos tos de fundación de los pueblos anti-
otras, hace que el lector no quiera de- guos nos hablan de deidades que vie-
jar la lectura hasta el último párrafo nen del cielo para este cometido, en
del libro. este caso, el Tumpa Guaraní sale de
Esta novela fue escrita en 1990, las entrañas de la tierra...
pero se publica este año 2010 en ho- Este libro está dedicado a la ju-
menaje al Bicentenario de esta parte ventud, en quienes se pretende dejar
de nuestra Bolivia, la hermosa y pu- vivencias. También se dirige a quie-
jante Santa Cruz. nes ya han vivido más que la juven-
En la presente publicación, el tud y encontrarán experiencias co-
lector disfrutará de una narrativa que munes, pero, por sobre todo, está de-
entre bromas y chistes típicos de la dicado a quienes nunca dejarán de
personalidad “charagueña”, también aprender, luchar, y tener ilusiones.
le brindará varias enseñanzas: conse- Esperemos que usted disfrute de
jos de padres a hijos, relatos sobre la esta publicación.
agricultura moderna y sobre los agri- La Editora
cultores que después de la guerra del
Chaco, asumirían el reto de recons-
truir lo destruido y trabajando ardua-
mente y con convicción, logran con-
vertir la parte más seca del oriente
boliviano (El Chaco), en un vergel.
También nos habla de enseñanzas
sobre cómo abordar las relaciones de
pareja, la diferencia entre las acepta-
das, consentidas, tiernas y esperadas
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
.

C on la vanidad satisfecha y
cumplido el sueño por tanto
tiempo acariciado, el de sem-
brar mil hectáreas, llego al final de la
última melga, aproximo el tractor a
traguito al lado de mi mujer y agasa-
jar a mis compañeros de trabajo y
buenos obreros.
-Viejo mañoso, hago los bifes y
luego los llamo.
la vera del camino para luego reto- -La cosecha es buena, tan buena
mar a la Casa de hacienda... Te es- que instalaremos silos, así podemos
pero en casa, le digo al operador, guardar nuestra producción espe-
ofreciéndole el asiento del conduc- rando mejores precios, le digo.
tor, mientras por el otro lado em- -Todo lo que ganamos nueva-
piezo a bajar del gigante de acero; mente al campo, ¿no?, ¿no será co-
subo a mi movilidad, cuanta diferen- rrecto guardar?, nos estamos enveje-
cia con la máquina de 50 años atrás, ciendo sin pensar en el futuro, todo
pero es otra historia; ya funciona, el tiempo solo pensar en invertir y
pongo marcha luego de mirar la luego no tendremos para vivir, me
hora: son las tres de la madrugada, dijo.
manejando de retomo, un rápido Durante la nueva siembra nota-
pantallazo, ¡Cuánto cambio; En mos una gran diferencia; en la pri-
1945 manejando el primer tractor de mera siembra de mil hectáreas la hu-
23 hp, un Farmall triciclo con arado medad después de una lluvia fue de
de una reja, hoy uno de 420hp. y 20 84mm., duró los días suficientes
rejas. para sembrar todo, en cambio, esta
Continuo rumbo a la casa de ha- vez, nos duró sólo por seis días, no
cienda, al bajarme de la camioneta, nos permitió terminar, tuvimos que
la luz del tractor se aproxima, le ha- esperar dos lluvias más para poder
blo a mi esposa, compañera y fiel sembrar las mil hectáreas, mucha
aliada en todos los acontecimientos evaporación; con la venta de la cose-
de los últimos 30 años, recorriendo cha pagamos intereses y muy poco
agarrados de la mano los caminos de del capital, es el principio del fin.
la vida, sorteando sendas felices a -¡Un ataque de gusanos en la
veces, en otra ocasiones puro esco- plantación! El agrónomo me comu-
llos, pero siempre unidos. nica la urgencia de una fumigación
-¿Por qué me despertás? aérea. El insecto causante es el más
-Terminamos la siembra, le digo,
deseo festejar con unos bifes y un
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
difícil de controlar, en Brasil y Ar- detengo y bajo, introduciéndome en
gentina usan el producto Azodrin la plantación sin dar crédito a lo que
para ello. veo, cada planta con dos, tres, o cua-
-No existe otra forma para con- tro espigas, mudos exponentes mos-
trolarlo, me dice el Ingeniero, nece- trando la bondad de nuestra próxima
sitamos descontrolar el medio donde cosecha.
se reproducen matando toda vida De regreso a la movilidad, arran-
animal para matar al cogollero1. La qué tres espigas de una sola planta,
angustia de perderlo todo se impone. continuamos el recorrido con los
-¡Mi Dios, sólo los suchas2! Con mismos resultados. De otra planta
la fumigación han convertido nues- saqué cuatro espigas, las separé de
tro campo en el campo del “silencio las otras, tenía ya revisada aproxima-
de los inocentes”. damente la mitad de la siembre.
-Bien ingeniero, lo dejo con su -Arturo, regresemos, mañana a
obra, regreso en cuando mi alma lle- primera hora estaré de vuelta, es ne-
gue a encontrar su cuerpo nueva- cesario llevar estas espigas al CIAT 3
mente. para su respectivo análisis y ver si
Días después regreso al campo, nuestra plantación no contiene ve-
Eusebio sale a recibirme ni bien neno, y con el resultado festejar o la-
llego al campamento; visitamos la mentamos, mientras tanto, para ma-
casa abandonada llena de telarañas ñana necesito la casa limpia, regre-
colgando del techo, las paredes pare- saré con mi señora.
cían de Drácula con algunos murcié- Dos días fueron necesarios para
lagos revoloteando sobre nuestras obtener los resultados, al momento
cabezas, con su agudo chillido rom- de entregármelos me dice el jefe del
pían el silencio... laboratorio: -Bien Don Lucho, puede
-¿Cómo están los cultivos?, comer sus tamales4 y su choclo tran-
-Hermosos Señor., el Ingeniero quilo, hemos efectuado todos los
dice que tenemos la mejor siembre análisis con buenos resultados.
de todos los años, Regresamos con mi esposa, mi
-Ya veremos, vamos Eusebio. única compañía, a nuestra casa en el
Pasando por el campamento apa- campo; unos días después llegó el
reció Arturo, el capataz. resto de la familia en la movilidad de
- ¿Cómo vamos? nuestro hijo Carlos, mis nietos y sus
-Bien Señor. hermanas; los choclos al igual que
- Ya lo veremos, continua- para nosotros, eran un imán pode-
mos rumbo a los chacos, llegando al roso para las primeras aves que lle-
primer lote ingreso a éste por el ca- garon, loros y torcazas, en busca de
mino central. A los pocos metros me

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Gusano que se come la planta de maíz. Centro de Investigación Agrícola Tropical.
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Ave de rapiña Comida hecha de pasta de choclo con queso
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
las espigas de la vida; el ensordece- Eso fue interceptado por una de
dor ruido que otros años enloquecía, mis hijas:
hoy se convierte en una canción de -Como siempre el señor, cuando
vida dulce a nuestros oídos sin im- no tiene la razón escapa a la discu-
portar el daño que estén ocasio- sión; puedes irte a dormir dejando
nando. antes el cheque de 200mil dólares
La cosecha colmó nuestras ilu- para comprar la casa de Urbarí que
siones, fueron necesarias seis máqui- nos gusta a las cuatro bellas de tu fa-
nas cosechadoras con diez camiones milia.
para el transporte. Las primeras cien -Mañana a la hora del desayuno
hectáreas nos dieron una producción terminamos esta charla.
media de 143 quintales por hectárea, -Si tienes mucho sueño, nos de-
lo cual ocasionó la visita de maiceros jas el cheque y a dormir
de todas partes de Santa Cruz para El cansancio puede más que la
ver la cosecha; este milagro de la ge- prudencia, agarré la chequera, llené
nética, colmó cualquier sueño. No uno de 200 mil, sólo que en lugar de
puedo pedir más, esta excelente co- poner dólares lo llené con bolivia-
secha unida a los buenos precios en nos. Me fui a dormir tranquilo con la
su comercialización llenaron mis picardía, pensando en que les tomé
mayores aspiraciones. el pelo..., no conté con la astucia de
Llegó la hora de poner los silos. cuatro mujeres desesperadas por una
Luego de formalizar el pedido le de- ilusión.
cía en la noche comentando con mi Temprano me fui a la propiedad
compañera: nos entregan los silos donde me juntaría con los encarga-
llave en mano..., creo que no te in- dos de la instalación de los silos; ve-
teresa viejita. ríamos el lugar donde se ubicarían
-No me avisaste antes de com- los mismos, elegimos el sitio ade-
prarlos, sabes de mis deseos de com- cuado, tanto para recibir la produc-
prar una casa primero, como siempre ción como los requisitos del suelo y
tú ves los intereses de la propiedad humedad: Está cerca de la casa y del
antes que los intereses de la fami- campamento,... con una picada mar-
lia...; nuestras tres hijas presentes en camos la superficie, fue la hora del
ese instante apoyaron sin reserva lo retomo a la ciudad.
dicho por la madre, la famosa guerra En casa, con la familia, almorza-
de los sexos había comenzado. Sin mos en silencio, cada uno sumergido
apoyo de ninguna clase pronto sentí en sus pensamientos,
la inferioridad de mis posibilidades, -Dormiré un rato, tengo un com-
intentando una retirada estratégica, promiso en el banco por la tarde.
digo: -¿Sacarás dinero?, preguntó mi
-Me encuentro cansado, hasta esposa
mañana, me voy a dormir. -Sí, le respondí, ¿tú también ne-
cesitas?
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-No, después charlamos. -¡Sírvanse, las alcanzo luego¡-
No existió la tal charla, pero si la les dije
sorpresa cuando entré al banco y me -Me levanté con mucha pereza,
dice un empleado: dejé el diario y me senté en el lugar
-El Gerente lo espera en su des- acostumbrado y con una sonrisa las
pacho, pase usted invité a comer.
Extrañado, así lo hice. El Gerente Preguntó mi hijo Luis Felipe
me recibió con una sonrisa dicién- -¿Cómo van las cosas papá?
dome que me esperaba recién ma- -Sin novedad hijo, sólo que ma-
ñana ñana comienzan las excavaciones
-Todavía no tenemos los papeles, para los silos por si quieres... me
usted comprenderá que eran los do- gusta tu compañía.
cumentos de transferencia, tienen un -Vamos viejo, también me siento
trámite engorroso aun para nosotros, feliz de ir contigo.
¿ya fue con sus hijas y vio la casa? Al día siguiente, en el momento
-No todavía -le dije -pero me de salir al campo, intenta subir al
gustaría verla vehículo una de las bellas.
-Con quien usted indique. -¡No -No, esto es sólo para hombres,
faltaba más¡- yo lo acompaño hoy necesito charlar con Luis Felipe,
mismo, tengo tiempo, si quiere va- chau, -le dije a mi hija.
mos... Mientras viajábamos le cuento el
Total, que al final compramos la problema con la casa y del compro-
casa, me gustó, además no quiero miso bancario adquirido por su ma-
problemas... Por primera vez en- dre.
deudé todo mi patrimonio por un -¿Cómo solucionarás el pro-
crédito para la casa y uno más para blema?, pregunta Luis Felipe.
la compra de cosechadoras. -Ya está solucionado, no lo saben
Cuando regresé vi cuatro caras y las dejaremos sufriendo unos días
preocupadas, esperaban anhelantes -¿y qué de la Universidad, de tu
mi reacción, llegue indiferente sin examen de ingreso?, le digo,... pase-
dar ni pedir explicación alguna, fui a mos al regresar y lo vemos.
mi cuarto, tomé una ducha, me vestí, Todo está dentro de lo progra-
me acosté en la hamaca con el perió- mado, -fue la respuesta del encar-
dico que me tenía muy concen- gado de la instalación de los silos,
trado... las cuatro bellezas daban -Démosle una vuelta papá, -me
vueltas esperando cada reacción que dijo Felipe.
no llegaba, miraban contemplando -Vamos hijo.
con extrañeza al indiferente lector
-Papi, pasamos a cenar, te esta-
mos esperando -me dijo una de mis
hijas,- ya está servida la comida,
puedes pasar.
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
Vimos aves por fin regresar, una -Gracias por el premio viejo
urina5 comía plácidamente, todo ha- -¿Por qué premio mi hijo?
bía regresado a la normalidad. -Es por mis notas de la U
-Viejo, aun hay un problema -me -No mi hijo, ese premio te lo dará
dijo mi hijo - el daño aun existe por- la vida, tus estudios son tuyos no
que no se oye el trino de los tordos, míos, es gratitud por el cariño y el
de los maticos, ni el alegre revolotear tiempo que dedicas a tus padres y
de las golondrinas, falta mucho toda- hermanos, por el ejemplo de digni-
vía dad que transmites a todos tus sobri-
-Regresarán, no te preocupes.... nos, gracias hijo, toma esto para la
Pasando por las oficinas de trán- gasolina, es un préstamo...
sito le dije: para hijo, sacaremos tu Guardé el vehículo dejando espa-
brevet. cio para el de Felipe que llegó ha-
Después fuimos por la Universi- ciendo un ruido bárbaro, me hizo sal-
dad y no encontramos su nombre en tar de la hamaca, pero más fuerte fue
la lista de aprobados... el barullo de las bellas en cuanto vie-
-No es justo -me dice -mi examen ron al menor llegando en la movili-
estaba perfecto, esto está mal. dad.
De pronto aparece un amigo y -¿Y eso?, ¿Dónde lo conseguiste
dice -no Felipe el que está mal sos6 hermanito?
vos, no estás en esta lista, porque no- -¿Puedo dar una vuelta antes de
sotros estamos en otra lista pero en que lo guardés? ¿Quién te lo prestó?,
la lista de honor, fíjate aquí que color very very,
-Estaba seguro, contesta mi hijo Luis Felipe madrugó y me dijo:
y respira aliviado. -Viejo, escuché tu discusión ano-
-Vamos, tenemos otra urgencia. che y creo que mi madre tiene razón,
-Vamos padre, pero espéreme un mis hermanas necesitan un auto, yo
ratingo7 que quiero comentar con no lo necesito, entrégales el jeep y
mis amigos. asunto terminado. Me dolió mucho
-Bueno, no demores le dije, yo escuchar a mi madre, no está bien
también necesito comentar una confrontación por mi causa
Nuestra próxima parada la hici- -Un momento hijo, tu madre no
mos en la auto venta Suzuki discutió por tu culpa, has entendido
-¿Cuál te gusta? -le pregunté a mal, sos tan querido como todos sus
Felipe hijos, y no tienes derecho a juzgar
-El escogió un modelo color sus actos, sos tan querido como tus
verde; averiguamos el precio y lo hermanas... ahora vamos al campo
compramos -¿Regresamos a medio día?
-Buena elección - le dije -Depende del trabajo le dije...

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Venado Rato, momento corto.
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Eres en modismo del oriente Boliviano.
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
Nos encontramos con el técnico interno permite revisar los desmon-
argentino armando la secadora de tes; otro camino externo bordea los
granos, solicitó algún equipo para alambrados con esporádicos ingre-
traer de la cuidad sos al camino interno, al poniente
-Puede ir en mi camioneta con el está limitado con un campo meno-
Ingeniero, compra lo necesario, lo nita, límite que revisamos; todo nor-
traen en la misma movilidad y regre- mal, regresamos a la casa de ha-
san para almorzar cienda donde almorzamos, y nos
-Ingeniero, ¿me presta su jeep? dormimos una siesta en hamacas co-
-Es momento de conversar me locadas en horcones de la amplia ga-
dice Luipe lería que rodea la construcción inte-
-Te escucho hijo... rior y exteriormente y que nos brinda
-Es justo lo reclamado por parte una fresca sombra refrigerada por
de mi madre y mis hermanas ¿por una suave brisa que acaricia el lugar
qué no a ellas y a mi si? la mayor parte del año.
-Le respondí: -Tu hermana ma- Después visitamos la parte
yor fue a Santiago, a Viña del mar, a Norte. A la derecha de la vivienda en
Buenos Aires, Mar del Plata, luego a la plantación de tamarindo, nos en-
Montevideo, Punta del Este, estudió contramos con el encargado de los
cuatro años en Brasil, país en el cual árboles frutales.
paseó, todo eso vale por 10 autos, tu -¿Cómo va Juan?
otra hermana paseó durante dos años -Venga y vea
por todo Brasil donde fue a estudiar -Veo que trasladaste la acequia
y no lo hizo, tu hermana menor... -Usted me dijo “con voluntad y
-Suficiente papá. tesón no hay camba huevón”, antes
-Y, tu madre paseó con tus her- regaba trabajando duro, le busqué
manas todas las veces... conoce Río hasta encontrar lo ideal como usted
de Janeiro, San Pablo, Campiñas, va- dijo, no reniegue si me encuentra en
rias ciudades del sur de Brasil, Asun- la hamaca descansando, es el premio
ción, Santiago de Chile, y no sé a mi tesón, el agua va sola de planta
donde más. Fue muy sufrida, le tiene en planta, en dos
miedo a volar... no me gusta el horas listos todos los tamarindos,
tema, pero... para tu tranquilidad de- otras dos terminamos con los paltos
bes saberlo, ahora revisemos el y el camba descansando.
campo -Yo creo que tienes que hacer
Paseamos los 10 lotes de 100 otra cosa, para eso te pagamos, dijo
hectáreas cada uno con sus rompe mi hijo.
vientos de 50 metros de división en- -No Felipe, es su premio bien ga-
tre lotes, en ambas cabeceras una nado, nosotros usamos menos agua y
franja de 50 metros de bosque ro- por eso menor gasto al sacarla de los
dean todo lo desmontado, el camino 120 metros de profundidad, los dos

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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
ganamos, es lo justo, felicidades próxima siembra? -Si lo estima ne-
Juan, ahora veamos los paltos. cesario hágalo.
¡Están impecables; Los plantines -Necesitamos programar la siem-
con semillas traídas de la plantación bra con tiempo
de Charagua se erguían desafiantes Poco tiempo después el análisis
en busca de las alturas. En ese mo- del suelo confirmó la excelencia de
mento corría el agua por la acequia éste para cultivos de maíz, soya, etc.
llevando la vida a las raíces, cons- Pasamos por donde instalaban
trucción en la que Juan se esmeró al los silos, después de una ligera
máximo. charla nos informaron de todo y se-
Recorriendo la plantación me de- guimos rumbo a la ciudad. Luipe an-
tengo. tes de llegar me dice:
-¡Mirá Luipe, está por florecer! -Padre, déjeme aquí no mas, mi
Mirá este abultamiento al final del tía Hilda te espera, me olvidé avi-
gajo, ya viene la flor en esta planta sarte, llamó indicando que te espera
anisada cuando regreses del campo
-Saca una hoja y la estruja en la -Bueno, le dices a tu madre que
mano y huele ya regreso...
-Este es un excelente remedio En poco más de tres meses ter-
para el dolor de estómago minó la instalación de los silos que
-No te creo viejo, si todas son coincidió con el inicio de la prepara-
iguales ción de las tierras aprovechando la
-Notarás la diferencia, no te humedad acumulada en los días de
preocupes llovizna. Por estos acontecimientos,
-Le explico a mi hijo las varieda- mediante la Asociación de Sembra-
des de plantas, no entiende las dife- dores de Maíz, se hicieron presentes
rencias, es tan fácil distinguirlas... muchos asociados, los mejores y
-¿Usted cree? Tampoco yo la veo más grandes hombres del campo cru-
dice el empleado ceño.
-“Mas sabe la experiencia que la -¡Estoy en la gloria! -Comento
ciencia” son palabras sabias de un fi- con mi esposa
losofo chino. Realmente, nuestra felicidad nos
Nos sentíamos en la gloria... el llevó a la gloria y después del acto de
aroma puro de la naturaleza acompa- inauguración y bendición de los si-
ñada del trino de las pocas aves que los, nos trasladamos al campo para
nos rodean, el ruido del tractor per- ver el inicio de la preparación de los
dido en la distancia nos llegaba man- suelos, todos con sus latas de cerveza
samente transportado por la suave o refresco, admiran y ponderan el gi-
brisa. gante paso de avance que significa
¿Usted cree Ingeniero necesario esta maquinaria y la visión futurista,
el análisis del suelo para definir la etc.

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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
Pedro, mi fiel amigo y leal obrero gentina; luego un amigo de la fami-
sintetizaba la viva imagen del triun- lia, el señor Pastor Evangélico, Don
fador sentado en las alturas, rodeado Francisco Harbor, compañero de
por una cúpula de vidrio que mante- ajedrez de mi padre en las noches del
nía la temperatura a voluntad del pueblo, todos los años, al retorno por
operador. Inició su trabajo. El arado México o Centro América de sus va-
de 20 rejas deja una cama de siembra caciones en Canadá llegaba con se-
uniforme, perfecta, produciendo ad- millas. Llegamos a plantar 43 varie-
miración en los presentes, quedando dades.
embriagados de placer por el aroma -Si tenés tantas variedades en la
desprendido de la tierra recién remo- quinta de Charagua, ¡traé todas Lu-
vida. Para los hombres de la tierra en cho, no seas opa!
quienes el olfato y el oído son más -Aquí tenemos las mejores, la
desarrollados que el común de los verdad no quedaron más después del
mortales, este aroma y el de la lluvia gran turbión8 del 1958. El lecho del
después de una larga sequía, son los río, lugar del cual obteníamos riego,
mayores placeres en nuestra activi- se profundizó a 8 metros. Nos que-
dad. damos sin riego durante muchos
La magia fue interrumpida por la años; en ese tiempo murieron los
voz de Luipe que decía: cultivos, la mayoría de paltos y todos
-Papá, está listo el asao Parri- los viñedos de los cuales vivió la po-
llada; nos esperan blación por muchos años. Esta riada
Regresamos en la movilidad que nos dejó sin lagunas, unas rellenas
estaba disponible. Llegamos embo- con arena y troncos de árboles y
tados todo sentimiento por el olor del otras divididas por una zanja ocasio-
churrasco, la gula, se impuso; proce- nada por la riada de las torrenciales
dimos a llenar nuestros famélicos es- lluvias que impiden el embalse de las
tómagos sin pausa. Cumplido nues- aguas en los antiguos depósitos natu-
tro objetivo pasamos a sentarnos en rales
nuestro acogedor ambiente de la ga- - ¡ 15 variedades ¡ Y eso que tie-
lería contemplando la plantación de nen los paltos perdidos por la falta de
paltos. riegos y la falta de lluvias.
Tenemos 15 variedades traídas -Antes del desastre, se tenían llu-
de la propiedad familiar de Charagua vias entre 1000 y 1200 mm. por año;
-¿De dónde tantas? después bajó a 350 y algunos años
-La primera planta de palta que menos mm. Aún. Las desastrosas se-
llego a Charagua y probablemente a quías del gran Chaco tan conocidas
Bolivia la trajo un tío mío a quien en la actualidad por ustedes están
apodaban “el Chueco” desde la Ar- asociadas a la desaparición de estas
lagunas, las cuales en su conjunto

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Riada muy fuerte después de una lluvia
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
formaban varios kilómetros cuadra- interrupción, todo perfecto, pero una
dos de espejos de agua, cuya evapo- torrencial lluvia caída 50 días des-
ración contribuía a las lluvias. pués inundó el ultimo lote, corría el
El gerente de un banco presente agua sin parar por dos días seguidos,
en la inauguración de los silos, pon- tumbando la mayoría de las plantas
deró la pujanza de la propiedad de maíz en ese lote.
-Solamente falta implementar -Juan con la noticia: “don, los
cosechadoras, una vivienda ade- menonitas han hecho un canal con
cuada y algunas pequeñeces, pero no sus tractores por eso llega tanta agua
tengo dinero ni para las pequeñeces. al lote 10”.
Con la compra de los silos se terminó Llamé a Santa Cruz por radio y
todo el efectivo. media hora después aterrizó una
-En mi banco hay todo lo necesa- avioneta con una autoridad con la
rio para eso y más aun, visítenos que realizamos una inspección co-
cuando lo necesite, lo esperamos... menzando por el límite Oeste de la
-¿Será que nos invitan cafecito? colonia menonita, atravesando dos
-Claro Milton, ya lo traen, pero lagunas de los costados, sacamos fo-
antes sírvanse un dulce como postre- tos. Con estas pruebas, tiempo des-
interviene mi esposa y pregunta: pués en la oficina prefectural de Me-
¿quienes quieren manjar blanco o dio Ambiente el jefe me decía:
dulce de menbrillo?, todo es produc- -“No se preocupe tomaremos las
ción nuestra, informa orgullosa, y medidas necesarias del caso, estas
como acompañante tienen cuajada, obras son contrarias a la ley del Me-
queso y quesillo, también hay re- dio Ambiente".
fresco de tamarindo después de un Dos meses después los lotes 3 y
delicioso café. 9 fueron inundados luego de torren-
Llegó la hora de la despedida y ciales lluvias. Nueva inspección aé-
varios quisieron pasar a ver los avan- rea, mis temores se confirman, el se-
ces del tractor. En las 4 horas trans- gundo canal concluido por los meno-
curridas ya dio una vuelta, por pa- nos9 vaciaban sus aguas en el lote 3
sada son 16 metros y 32 metros en y el anterior canal continúa intacto,
una vuelta, lo vemos ya próximo a es mi denuncia.
cumplir la segunda vuelta, hizo ma- -Lo analizaré para tomar medi-
niobras al terminar para comenzar de das, me dice.
nuevo, lo dejamos y regresé a reco- ¡Qué ingenuo que soy! Confiar
ger a mi familia, continuando viaje en nuestras autoridades.
rumbo a la ciudad. Después de la cosecha no tan
Llegó la época de la siembra, buena como la del pasado año, los
todo transcurrió bien: cultivos opor- precios no tan bueno como el ante-
tunos daban esperanzas, lluvias sin rior. La ventaja de los silos fue que

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Menonitas
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
permitió guardar una parte de la co- viaje cada vez, veremos si tienes más
secha, pagados los interesas, el saldo suerte.
en espera de mejor oportunidad. Disminuidos los vientos, retorné
Comenzamos los trabajos de de- a la propiedad. Al llegar, el lote 1 se
fensa de las inundaciones desmon- divisa del camino, el cambio del co-
tando todo el bosque dejado en los lor de la tierra ocasionado por el
límites con los menonitas y exca- asentamiento del polvo transportado
vando desde el alambrado 20 metros por los fuertes vientos pasados.
para levantar el bordo reforzándolo Como ensayo, este lote y el último
en todo este límite, es decir del es- fueron arados terminada la cosecha.
quinero norte al esquinero sur. Nos La brillante superficie 4 días atrás
subimos al terraplén con el Ingeniero está hoy amarillenta, opacada por
encargado del trabajo, recorriendo efectos del polvo; el rompe viento
toda la extensión bajamos en el final (nombre de la faja de 50 metros de
norte. montes dejando separando los lotes,
Poco tiempo después de la cose- uno del otro) cumplió a la perfección
cha, los menonos comienzan a pre- su cometido al frenar los fuertes
parar sus tierras sin esperar las llu- vientos; dejaron asentada la gruesa
vias que es como se debe hacer. De capa de polvo transportado prote-
retorno a la ciudad contemplo anona- giendo de esta manera los siguientes
dado la polvareda provocada por el lotes en los cuales el verde de los
movimiento de la tierra sin hume- plantines, retoño posterior a la cose-
dad. La ligera brisa aumenta su in- cha continúa
tensidad provocando una nube más En la casa de hacienda el Inge-
espesa y velozmente se dirige al sur. niero, tomando el desayuno se le-
La mirada socarrona de mi mujer vanta y me dice:
e hija me llevó apresurado frente al -¡Ya revisé todos los lotes!
espejo. Una carcajada de toda la fa- -Siéntese, tome primero, charle-
milia acompaño la grotesca imagen mos después
reflejada llena de polvo y hollín acu- -Mejor le informo mientras to-
mulados en el viaje. mamos, después deseo llevar una
Tres días de viento con ráfagas muestra para su análisis. En los pri-
de 80 kilómetros, según el informe meros 2000 metros del primer lote,
meteorológico, me retienen en la tenemos una capa de 2 cm. de asen-
casa. Luipe aprovecha este tiempo tamiento de polvo en el oeste, casi
para llevar la movilidad a reparar el 3cm. en el lote más al norte y en el
aire acondicionado límite noroeste, el último lote es el
-Así no tendrás, viejo, otro sofo- más afectado. En el sur, el sedimento
cón. promedio es de medio centímetro,
-Gracias hijo, en dos oportunida- los últimos metros tienen 7 mm.
des lo hice arreglar, solo duró un Si cree necesario puedo medir el
saldo de lotes, aunque no lo creo por
16
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
lo dificultoso de hacerlo en medio de Terminamos el dialogo y em-
la vegetación existente; con la apro- prendí la marcha...
ximación de lo ya indicados es sufi- Cada vez siento más fuerte la
ciente. También es factible sacar un presión de las circunstancias. Hace
promedio matemático, usted lo de- pocos años promulgaron la ley del
fine, pues lo de hoy es un cálculo medio ambiente. Mi orgullo por esto
provisional, seguro vendrán otras fue enorme y hoy con amargura veo
tormentas de vientos huracanados y que solo fue un medio más, usado
nuevos desastres ecológicos, lo que por nuestros políticos para presionar
hay que hacer es estimar cuánto nos y conseguir nuevas fuentes de ingre-
queda de vida útil en la propiedad. El sos, miles de hectáreas destruidas
ingeniero marchó a la ciudad con su por la mala aplicación de agroquími-
muestra y yo emprendí rumbo a los cos, quema irracional, desmontes,
campos en busca de información. una gran mayoría llega a nuestros
Todo estaba como me imaginé. campos como invasores, destru-
Terminando por el sur, fuimos yendo las tierras recién conquistadas
bordeando el último lote rumbo al lí- y los encargados de velar por su con-
mite con los menonitas, subí al borde servación no existen, como muelas
y me paré allí, admirado contemplé de recién nacidos.
lo increíble ¡jamás soñado! Era un Este intento de avasallamiento
paisaje lunar o un desierto en los paí- me obliga a desmontar la faja de 50
ses árabes; relatos legendarios de mi metros del Este, con esto los anima-
padre retornaron a mi memoria, solo les no tendrán protección del Bosque
faltan beduinos en sus imponentes en sus caminares de Norte a Sur... y
camellos, o veloces caballos con sus el temor de nuevos avasallamientos
feroces guerreros... me obligan a aumentar 5 lotes más;
Juan, ¿pasa algo?- pregunto confiado en las 2.000 toneladas del
-¿No los vio? Los sin tierras tie- maíz guardado en silos que me per-
nen cortados los alambres y han en- mitirá pagar el desmonte cuando los
trado por varios lugares y dicen “las precios mejoren.
tierras sin trabajar son para los po- Nuestros campesinos del interior
bres”. como hordas de Genguis Khan todo
-Tú conoces la ley del Medio a destruir, estamos viendo el fin del
Ambiente ¿No? que obliga a dejar vergel, hoy oriente boliviano, cómo
tierras sin desmontar para que en trabajan los negociantes de la vida.
ellas vivan animalitos- les digo. En veinte, cincuenta años como má-
-¡No te creo! Yo sí las necesito, ximo, veremos todo esto convertido
responde el invasor. en lo mismo que fue el hoy desierto
-Pero si tienes tierras, sos vecino de Atacama. En este caso solamente
de mi hijo... estoy intentando salvar variedades
-Sólo tengo 50 hectáreas -me res- difíciles de conseguir.
ponde - y aquí son miles.
17
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
No me siento muy feliz con esta exige pensar, -Uñero dame 2 minu-
decisión, me pase en 500 hectáreas tos es una urgencia (y me retire a
de mi ideal y no tengo la maquinaria pensar sobre la propuesta).
suficiente. -Ve y orina Turco te espero
Por la tarde en Promasor (Pro- -Luipe invítale algo a mi compa-
ductores de Maíz) fui informado de ñero, me esperan en la radio.
las nuevas variedades existentes, Me bajo con la premura reque-
también que los precios en el mer- rida me desprendo la bragueta; una
cado del maíz siguen bajando. El inoportuna ráfaga de viento en la
contrabando, la crisis Argentina y la cara, y por poco me salvo de recibir
baja del precio con relación al dólar, de vuelta el líquido en mis pantalo-
hacen que aprovechen algunos nes; me doy la vuelta, con rapidez re-
miembros del Gobierno el seguir si- tiro la mano, a un involuntario sus-
lenciando aduaneros piro acompaña el momento y a rau-
en negocios compartidos. Lo dales se desocupa un jausi10 testigo
nuevo en semillas es una variedad de mis apuros.
mexicana, el Opaco Dos con nego- Como lo acordamos por radio el
ciaciones para exportaciones a Ve- anterior día, mi amigo Uñero, a las
nezuela; acordamos en principio la seis de la mañana hacía sonar el tim-
siembra de 200 hectáreas, para pro- bre, tomamos un café con Luipe y
ducir semillas compartiendo el emprendimos viaje a Cotoca; llega-
riesgo. mos a los 20 minutos, de ahí en ade-
El estridente pito del radio de la lante el viaje fue lento porque el ca-
movilidad me retornó a la realidad, mino en pésimas condiciones, ponía
era la voz de Luipe escollos a mis ambiciones. El plan de
-¿Papá me escucha? dos horas de viaje, se convirtió en
-Adelante hijo, que pasa. cuatro y media. Al llegar y ver ese
-Un señor,... tu amigo José Er- bosque tan denso y lleno de vida,
nesto quiere hablarte: sentí una sensación de felicidad y me
-Hola Uñero te escucho, dale el decía “esto es la gloria” Y estoy aquí
micrófono hijo; para destruirlo. Agachado fije mis
-Turco, pisa uva, se trata de lo si- pensamientos en el papel que me
guiente: en las tierras bajas del Este, toca desempeñar en la destrucción de
tengo 2000 hectáreas, quiero ven- este paraíso.
derla ¿tienes interés? -Date tiempo Al retomo, casi chocamos con un
para ir a verlas y luego charlamos... venado lo cual aumentó la incerti-
El ¡no! murió a flor de labios. dumbre en mi angustiado espíritu, la
¿No es la solución? Tanto desastre imagen de lo que hoy empieza a mo-
rir por la desertización ocasionada

10
Lagartija
18
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
por el mal manejo de los recursos na- qué se alimentarán? Peor todavía en
turales en el Sur de Santa Cruz. Al el concepto de los pueblos guaraníes,
vergel de hacen 20 años en Chara- somos guardianes de bosques y todo
gua, lo he vuelto a ver hoy ¿qué le lo que en ellos vive, estos son pro-
sucederá? Embriagado por estas ca- piedad por siempre de las generacio-
vilaciones no preste la debida aten- nes venideras.
ción al conducir. Luipe despertó mi Estas amargas cavilaciones sólo
conciencia a la realidad. me traen depresión y amarguras, de
-¡No te amargues padre! Si tu no regreso a la ciudad paso por las ofi-
lo haces vendrán los depredadores a cinas de la empresa desmontadora
terminar con todo, los menonitas o -¿Listo el contrato?
quienes serán. -Lea usted, está enmarcado en la
-Maneja hijo, le digo y continua- ley del Medio Ambiente.
mos hasta Santa Cruz. Y al ingresar Leo detenidamente y sólo tengo
vamos por la avenida San Aurelio, le una observación: al cadeneo de los
indico, al ingresar a la ciudad, pasa- seis tractores solo lo doy por un con-
remos por las oficinas del ingeniero cepto, como especifica la ley, traba-
Solís, negociaremos condiciones jarán durante el día y no por la noche
para el nuevo contrato de desmonte. Una vez corregido el contrato,
Uñero reclama -primero tienes entrego el dinero para iniciar el des-
que arreglar la compra de los terre- monte. El mismo queda bajo la di-
nos y luego el desmonte. rección del agrónomo Florian, un
-Escucha y luego arreglamos profesional muy capaz y responsa-
El Ingeniero Solís en su oficina ble. Dos días después Luipe en la ca-
nos esperaba con cafecito y refresco. mioneta fue llevando moto sierras y
“Así que don Lucho cambia el operadores para cortar la madera de
rumbo, deja el Sur y se va para el los árboles caídos en el proceso. Al
Este. Exclamó. regreso charlamos con Luipe que
Vemos la posibilidad del trabajo está muy entusiasmado por el pro-
acorde con la planificación de la ofi- greso en los trabajadores de la nueva
cina. propiedad; solamente tenemos pro-
-Mi deseo es desmontar de 800 a blemas con los cortadores de madera
1000 hectáreas, veremos precio, de un aserradero vecino que quieren
condiciones y plazo, usted dirá Ing. ingresar en nuestro bosque.
-Lo más práctico es ampliar el Vanos fueron los primeros inten-
contrato que actualmente tenemos en tos, hablé con el abogado del asunto.
proceso, encadenando las primeras Llamó de la oficina de los madereros
100 hectáreas. con la información, este problema es
Nuestras tierras todavía de la- caso perdido, en el aserradero tienen
branza pronto estarán convertidas en el permiso de explotación maderera
desiertos por el irracional manejo, en toda el área.
nuestros hijos sin esta herencia ¿de
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-¡Bien Dr., páseme sus honora- rato fiscalizador... A las 4:30 pm ate-
rios! Gracias, cuelgo y llamo al Dr. nazamos en la propiedad acompaña-
Pancho (cuñado de mi padre en su dos por dos guardianes forestales
segundo matrimonio), un gran profe- que serian los encargados de res-
sional catedrático y ex presidente de guardar las disposiciones e impedir
la corte; le explico el caso y me dice: el corte de madera en el departa-
-Vení con los papeles de tu pro- mento del Beni; Luipe nos espera
piedad, y pedile toda la información con su jeep, Florian se aproxima
a tu abogado. mientras le digo a Luipe:
Así lo hago y con toda la docu- -Le dejas tu jeep al Ingeniero, en
mentación nos vamos con Luipe, él se movilizarán los guardias fores-
pero antes llamo a Roberto un piloto tales.
y primo mío, y le cuento que nece- Llega el Ing., le presento a mis
sito ir a Trinidad ya mismo. Queda- acompañantes y les digo el motivo
mos de vernos en una hora en el ae- de nuestra presencia y la solución del
ropuerto del Trompillo. problema con los madereros, luego
Momentos después en el bufete de charlar brevemente sobre el tra-
del Dr. Francisco, le entrego los pa- bajo y sus necesidades continuamos.
peles incluso las fotocopias del per- En el aire efectuamos tres pasa-
miso forestal del aserradero vecino. das, con lo cual completé un panta-
-Tus papeles son claros, estás llazo de todo el terreno, regresamos,
afincado en el departamento del pasamos por el campamento de los
Beni, el permiso de explotación fo- tractores y la avioneta de Roberto
restal del aserradero es en el departa- aterriza de manera impecable por
mento de Santa Cruz, vamos a Trini- algo es un general de la fuerza aérea
dad ¡hay solución! (hijo de la hermana menor de mi ma-
-Tenemos una avioneta espe- dre) se apegan a recibirnos, el Ing.
rando en el Trompillo, cuando usted Solís con Uñero.
quiera -le digo. -Don Lucho, que hace con el co-
-¡Carajo; me adivinaste, tu padre mandante de aviación, ¡y de su pi-
pensaba mucho antes de hacer las loto;
cosas. -Es que le enseno a pilotear y en
Pero la madre que me educó me retribución el me enseña cómo ser un
enseñó “en la tardanza está el peli- buen agricultor, bromeo
gro” gran parte de mis aciertos se los Planificamos el trabajo. Los cua-
agradezco siempre. tro en el avión de Roberto, dimos un
-Bueno vamos entonces... recorrido y aclaré las dudas del Ing.,
Llegamos a Trinidad, almorza- los dejamos. Y nuevamente dimos
mos y en dos horas teníamos todo una vuelta sobre mi propiedad del
listo ya que tuvimos que agilizarlo Sur, mirando con dolor y rabia la
aceitando los puntos claves del apa-

20
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
capa trasladada por el viento, que se- Buscando nuevas alternativas, la
guía degradando mis campos y los prensa trajo la solución: Una fundi-
vecinos. ción de minerales en Oruro, está en
Después de tomar desayuno me problemas por falta de carbón, los
fui al Sur. Los trabajos en el Este me proveedores del producto en el Gran
ocuparon varios días, por lo cual des- Chaco no tenían la capacidad de sa-
cuidé la preparación de las tierras tisfacer sus necesidades, conseguí
para la siembra. En el primer lote en- una opción de venta por la cantidad
contré en el centro aproximadamente de carbón que yo produzca para lo
10 hectáreas mal preparadas, no en- cual traje el personal capacitado de
tró el arado a la profundidad necesa- Tihuipa para la construcción de los
ria e igualmente en los siguientes lo- hornos que utilizan tecnología sueca
tes tuvimos que cambiar de herra- para obtener carbón con el 90% o
mientas: en reemplazo del arado de más de carbono fijo. Dos meses des-
rejas, un arado de cincel, probamos pués comienza la producción y pos-
y resultó; en esto pasamos toda la terior transporte del producto termi-
mañana. Cerca del medio día llamo nando con toda la leña.
por radio a Santa Cruz, Luipe me in- En el primer lote los residuos de
forma que del aserradero llamaron chafra11 y hojarasca era el último
en varias oportunidades. problema que sólo se podía solucio-
-Hijo pídele disculpas que yo lle- nar con fuego, ¿Será la solución?
garé a esa aproximadamente a las Una lluvia providencial fuera de
tres y llamaré en cuanto esté allá, le temporada trajo la forma de acabar
digo con el problema. La cabecera de los
Nos pusimos de acuerdo en las lotes próximos a la laguna conver-
negociaciones para la venta de las tida en lodazal imposibilitaba el
troncas. paso; era necesario construir un te-
Dos años tardaríamos en cortar la rraplén y para ello era necesario ca-
madera del desmonte de 12 lotes por var un pozo, ocupando la tierra del
un total de 900 hectáreas. En mismo. Después
el primer año vimos la dificultad llenamos éste con ramas y chai-
por la madera sobrante, la gente de ras, luego lo tapamos con la tierra
las moto sierras se dedicó a cortarla bien apisonada. En el otro extremo
para leña. Cada vez estaba más pro- del lote se efectúa el mismo trabajo,
blemático el proyecto de no quemar para terminar enterrando el total de
los residuos para no degradar las tie- la chafra, casi con los cuatro prime-
rras con el fuego y sólo con un ca- ros lotes por un total de 300 hectá-
mión sacando la leña, el costo fue su- reas. Después un ligero movimiento
biendo de forma alarmante. con el subsolador a 30 centímetros
de profundidad, con esto sacamos las

11
Residuos pequeños de los árboles
21
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
raíces superficiales y quedó listo obliga a eso”, me decía. ¡One diría
para la siembra, y llegó la hora de la hoy si ve esto¡ ¡no!, no lo entendería.
verdad. Tiempo después, unos agriculto-
Meses después en la cosecha, se res brasileros llegaron al límite de mi
comprobó sin lugar a dudas que la propiedad. Traían maqui nai ia y des-
naturaleza sabe devolver. Todo el montaban todo a su paso argumen-
cuidado, y el amor que le puse me tando que esa tierra era de ellos y que
fue pagado con creces: 246 qq por yo había trabajado en el la sin solici-
has., 11000 kg. ¡Cuánta diferencia tar su permiso. Viaje a Santa Cruz en
con una buena cosecha de hacen 50 busca de las autoridades de reforma
años atrás donde 1800Kg. era lo agraria para solucionan esle nuevo
ideal en la finca de mis padres en problema. Luego de un tiempo estos
Charagua. Retornan a mi memoria “confirmaron” que había superposi-
las palabras de la Profe el año ción de dotación de tierras y para
cuando los americanos con las semi- evitar más problemas hicimos una
llas de maíz cubano amarillo nos transacción por la cual me devolvie-
aseguraban una producción doble ron el valor de mi desmonte y me
que la de nuestro antiguo maíz, “pero compraron el saldo de mis tierras
es mucho, la tierra se cansa si la

E s Gruesas gotas bañan mi


frente, el saco de pijama pe-
gado al dorso es una clara
muestra del sudor que baña todo mi
cuerpo, víctima de la ansiedad y ten-
con la evaporación más acelerada,
convertían en realidad la amarga pe-
sadilla de mis 65 años, y veo esfu-
marse el esfuerzo de toda una vida...
El mayor de mis hijos, Carlos,
sión ocasionados por la pesadilla que parado atrás, se aproxima asentando
se repetía una y otra vez todas las no- su cabeza en mi hombro y pregunta.
ches, más clara y aterradora... me le- -Papá ¿cómo y por qué te hiciste
vanté, tomé una ducha fría y vistién- agricultor?
dome rápidamente fui al garaje, subí -¡Porque; te contaré cuándo y
a la camioneta, la puse en marcha cómo fue en un principio...
rumbo a los cultivos. ¡Continúa la Faltan 30 días; cumplirás tus 8
pesadilla! Plantas de maíz agobiadas años decía mi padre, antes de acos-
por el calor y la falta de humedad. tarme luego del baño nocturno,
Tercer año del mismo y continuo duerma mi hijo, Dios lo bendiga;
desastre de lluvias ácidas con el dándome un beso en la frente me
mismo porcentaje, pero este drama, tapó...
22
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
Madrugada ya, entre sueños va- -¿Por fin llegó mi padre? Y ¿mis
gamente sentí la presencia y las cari- hermanas? ¿Y mi madre?
cias de mi padre, se despedía y be- -Aun no, pero no se preocupe us-
sos; ted. Ya pronto regresarán... esté tran-
-Dios lo bendiga mi chiquitito, quilo, es don Cruz el capataz de la
no te preocupes pronto estaremos finca.
juntos... -¿Desde cuándo el capataz me
Me di la vuelta... sueños ¡sueños manda?...
tan raros!; parecían tan reales. Poco -Vamos jovencito, muchas veces
después Ruperta, la guaraní que fue lo he visto haciendo el trabajo de Au-
mi cargadora y madre de leche du- relio y de los otros peones, si tanto le
rante la evacuación cuando los para- gusta, hoy necesitamos ver como lo
guayos ocuparon Charagua el año hace cuando es necesario por falta de
35, suavemente me sacudía... gente, no tenemos peones y necesita-
-Es temprano ¡no molestes! mos sembrar; como llovió, es tiempo
-Por favor mi niño el desayuno de hacerlo y un retraso arruinará esta
está servido siembra. Vístase rápido nos esperan
-¿Tan temprano? ¿Y papá sigue para comenzar... Ruperta acomode
durmiendo?, las alforjas “al niñito” dijo con iro-
-No, viajó esta madrugada. nía.
-Caray, todos viajan, me dejaron Fue tan burlón, me sentí obli-
solo, no comprendo porque viajan gado, ya verá este burlón si puedo...
todos... estaba vestido al regreso de Ruperta
-No se preocupe mi niñito, jamás con la alforja.
lo dejaré, siempre lo acompañaré, no -No usted, no lo...
se preocupe ya regresarán. -Claro, lo haré, ya verás Cruz de
Mare12 guaraní nombrada así por toborochi13 que puedo, me encaminé
mi madre, me abraza cariñosamente, a la puerta con decisión rumbo a la
me siento tan unido a su cora- finca a comenzar la siembra -ya ve-
zón...,”no lo comprendo, viajan to- rás quien ríe mejor... La mirada de
dos, primero las tres mujeres, mi ma- Cruz no fue la misma amistosa que
dre con mis hermanas y solo queda- tenía en presencia de mi padre, des-
mos mi padre, vos Ruperta y yo, solo pedía fuego... era una nueva persona
los tres, ahora todos me abandonan”. desconocida.
-¡Jamás lo dejaré solo mi niño! Llegamos al chaco, los peones y
-Ya no creo... los bueyes ya estaban listos para co-
Pasan varios días de incertidum- menzar; cuán lejos estaba de la reali-
bre y una madrugada ¡levántese jo- dad de una jornada completa en pre-
ven! sencia de mi padre, un momento y
luego a descansar entre risas y gritos

12 13
Modismo guaraní para referirse a Madre. Árbol típico del oriente Boliviano.
23
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
de alegría, hacía 3, 4 melgas. Esta hambre y mucha dije... se iluminó su
vez no fue así, 15 vueltas cada vez cara con una luz asombrosa ador-
más largas, la sonrisa burlona de nada por las pecas y lo tutada 14 que
Cruz me daba valor para continuar. le dejó el rostro la voraz viruela que
Los pies llenos de llagas, con sangre azotó su rancho muchos años atrás
por el caminar en la tierra húmeda; dejando desolación y muerte, y a los
mudos testimonios de mis deseos de sobrevivientes marcados. Era tal su
quedar bien con todos,.... no fue su- bondad, que éstas eran un adorno
ficiente, la burlona voz... más en su ser.
-Niñito de Praga, no le alcanzan -Ruperta, dame comida
los ojos para llorar ¡ya también llorás -¡Como usted dormía solo tenía-
con los pies¡ y reía. mos comida para los peones!
La humillación pudo más que la -Dame un plato de locro de maíz,
prudencia: miren a Cruz de toboro- le pedí. Es tan rico, no te lo cambio
chi le respondí: Cruz de Palo Borra- por nada.
cho (nombre chaqueño para una ma- -Tráele esa comida a mi sobrino,
dera de pésima calidad), no esperaba dijo una conocida voz, yo se la daré;
su reacción pues no medí la cantidad sentándose en mi cama se aproximó
de alcohol que tenía consumida. a mi espalda, apegó mi cuerpo al
-Vamos niñito flojo, nos estás suyo, como necesitaba ternura aban-
atrasando la siembra, sin más co- doné mi cabeza sobre su regazo.
mentarios, se apegó con su vara y me -Tranquilo ya está su tía Domitila
dio dos golpes en la cabeza y el hom- para protegerlo.
bro, me hizo caer al suelo del dolor... Llegó mi comida y cariñosa-
Ruperta, convertida en una fiera, se mente me dio de comer, terminado
abalanza sobre Cruz, y lo ataca a pu- mi almuerzo me dormí mecido sua-
ñetes, patadas y mordidas... Má- vemente y con suaves arrullos de ter-
ximo, el marido de mi mare guaraní, nura. Era la mejor amiga de mi au-
de un feroz puñetazo lo mandó al sente madre. En ese instante tenía se-
suelo, en ese instante también inter- guridad plena y nadie más podía
vino Aurelio y con un palo en alto lo darme esa tranquilidad.
hizo correr al energúmeno borracho. Al día siguiente me levanté
-Por favor Aurelio no paren la mientras mi tía Domitila dormía, me
siembra digo. Lo último que re- aproximé a la cocina en busca del
cuerdo del nefasto día. desayuno. ¿Vicenta, donde están los
Dos o tres días después intenté otros?
levantarme de la cama. Ruperta, dor- -Se fueron a la siembra
mida en el suelo con la cabeza apo- -Dame desayuno! Le dije
yada en la cama despertó asustada,
¡hay mi niño, no se muera!,... Tengo

14
Con marcas de la viruela.
24
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-¡Aquí tiene su yerba joven¡ -Joven, es mi turno,
Siento más respeto y cariño en su Gracias mujer maravillosa
voz. pienso mientras le paso las alforjas
Terminando de tomar me levanto con las semillas, no puedo ni cami-
y... nar señor. ¡Déjenme;
-¿Dónde va joven? -Me apoyaré en sus brazos, me
-Ya regreso, me voy a la siem- dice Máximo agarrándose de mí y
bra... y sin mayores comentarios em- ayudándome. Esas manos amigas,
prendo mi primera caminata al tra- me aproximan al sillón de wiracu-
bajo después de días de descanso en penti amarrado con peroto15 bajo un
la cama, Máximo, Aurelio y Ruperta añoso cupesí en cuya fresca sombra
son los sembradores que paso a paso me dormí al instante.
continúan sembrando. Luego de un reparador descanso
-¿Y los otros por qué no están me levanto marchando hacia el lugar
sembrando? de la primera siembra; los surcos ya
-Usted tiene que seguir descan- apuntaban el maíz, los retoños de vi-
sando en la cama, regrese a la casa das se perdían a la distancia. Este
joven. prodigio llenó de alegría mi espíritu
Miro a los tres, Ruperta descansa reconfortando mi cansancio. Con
un rato y agarrando sus alforjas yo nuevas energías tengo que apurar la
continué sembrando los granos en el siembra, pues la humedad se acaba
lugar donde ella venia plantando. en pocos días más.
¡Qué grandes están las melgas! Dos Máximo y Ruperta con alegría
o tres pasadas mis piernas se quieren me esperaban unos pasos más ade-
doblar, pero las palabras de mi padre lante.
martillaban en mi cabeza: “un hom- -¡Es una belleza patroncito! Te-
bre si quiere ser respetado por sus nemos que conseguir más gente,
empleados tiene que demostrar que sembrar con tres yuntas antes que se
puede hacer más que ellos, si no lo termine la humedad, aunque no tene-
hace no será digno jefe” ¡melgas tan mos dinero
largas! ¿Crecieron las desgraciadas? -¿Cómo hará para pagar a la
no puedo rendirme, debo ser ejem- gente si la conseguimos? Dijo Ru-
plo. Como disfrutaba en tiempos pa- perta.
sados viéndolos en la siembra, una Máximo le respondió: “tenemos
yunta abriendo el surco, los sembra- novillos gordos, si el señor agarra
dores largando la semilla, la otra dos, veremos quién los compra y so-
yunta tapando el surco con las semi- lucionamos el problema”;
llas largadas, ¡qué hermosura! ¡Que -Vamos y tomándome del brazo
cansadora tarea! ¡Cambas! me guiaron camino al pueblo.
Me sacan de mis cavilaciones...

15
Fibra de un árbol que se usa de amarre.
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-Ustedes se quedan pues no po- será en adelante tu guía y tu compa-
demos parar y no lo haremos. Felipe ñero...
el hermano mayor de Aurelio ya está Pasado mi cumpleaños regresa-
sembrando, tengo que ver la comida mos con la nueva esposa de mi padre
y traer para todos los peones, se a la amarga incertidumbre de esta
apresura Ruperta. nueva realidad.
Caminamos charlando con entu- Cumplidos mis 10 años y dos
siasmo y con nuevos bríos que ani- meses, nacía mi nueva hermanita,
man nuestro espíritu, con un poco de fruto de su nuevo amor, era una mu-
suerte terminaríamos toda la siembra ñequita de ojos azules que pronto se
con la humedad necesaria. adueñó de mi corazón.
Llegamos y en el comedor tía -¿Esto y la siembra tienen algo
Domitila sonríe al verme que ver?
-¿Por qué te levantaste sin des- -Pronto lo comprenderás hijo. No
pertarme? Sabías que no te permiti- te canses, volveremos un tiempo en
ría ir al campo... ¿Cómo te sientes la narración.
hijo? Siéntate comeremos y luego a Unos días posteriores a nuestra
la cama a descansar... llegada fuimos a Itahuasurenda,
-No puedo, tengo que vender dos luego de los saludos y conversación
novillos y con ese dinero pagar los de rigor, el dueño de la casa sacó el
jornales de la siembra y para la co- tema de la siembra del maíz y su pos-
mida. terior cosecha, te pagaré las camio-
-Bien hijo, comamos y después nadas que hice traer de tu casa y al
te acompaño. mismo tiempo por la actuación de
Vendimos dos guachas16 y al tér- Luchito, te felicito, como tío de tu
mino de la siembra pagué los jorna- hijo me siento orgulloso, se portó
les ¡me sentía todo un hombre! con la dignidad y decisión propia de
Ese mismo día llegó un camión sus dos apellidos.
de Santa Cruz con órdenes de mi pa- Se fueron a otro lugar, arreglaron
dre para llevarme al día siguiente. cuentas, las facciones de mi padre
Partimos, un año duró mi ausencia, y duras color de cera.
es cierto, no vi la cosecha, pero un -¿Por qué no me contaste del pro-
año después disfruté del resultado de blema que tuviste con el capataz?
la siembra que creció durante el año -Ya lo solucioné y para que lle-
que pasamos en Santa Cruz. varle más problemas, usted tenía
Mis padres se divorciaron, ver muchos motivos de preocupación.
terminar la seguridad de la compañía -Mi querido amigo esa siembra
de tus padres juntos y saber la nueva es de mi sobrino, esto es de mi parte
situación de elegir cuál de los dos y me alcanzó un dinero.

16
Novillos.
26
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-No Jesús, ya le daré yo lo que le para mandarlo a continuar sus estu-
corresponda. dios en Santa. Cruz. Ojala se elija
-¡No olvides Felipe, soy tío de tu una buena profesión.
hijo! Me siento muy orgulloso, esta -¡Con tu ayuda lo conseguirá! No
es tu casa como siempre lo fue, aca- lo dudo.
bemos con esto y pasemos al come- Me separé y continué mi cami-
dor. nata, al pasar por el portón de atrás
En el camino de regreso... dice salió Máximo, nos emparejamos
mi padre: mal, muy mal no le has di- -¿A dónde va el joven?
cho nada a tu padre, si no es por tu -¡Cuantas veces debo recor-
tío Jesús no me entero de lo suce- darte!, para Ruperta y para vos solo
dido. Lucho.
-Basta Felipe, dijo la señora, No -Si me escucha el patrón, que
es justo ese enojo, tu hijo te dio una dirá.
justa explicación, demuestras tu or- -No te preocupes ya le expli-
gullo y no tu desprecio. Fue admira- caré... Continuamos caminado por la
ción y más cuando vi a mi padre son- recién construida calle, la cual nos
reír. lleva directamente; por esta ruta son
Llegamos a la casa, luego de una solamente dos cuadras y no las cinco
larga charla me llamaron nueva- como por la vieja ruta; de improvisto
mente. nos aparece el ex capataz con una es-
-Pásame el dinero que te dio tu copeta en el hombro, mi amigo Má-
tío Jesús. Lo recibió, lo contó para ximo bruscamente se para y agarrán-
después poner otra cantidad igual, dome del hombro se coloca cubrién-
me entregó todo junto con lo de la dome, trata de impedir una tragedia.
anterior siembra; es tu mérito y sa- No seas loco deja esa escopeta... le
crificio, todo lo recibido hoy es tuyo, dice. Se tuerce un poco empuján-
con el puedes comprar lo que veas dome con fuerzas mientras caigo
conveniente, lo agarré, lo miré y se siento el ruido del disparo, luego si-
lo entregué a la señora. lencio...
-¿Me lo guarda por favor? Note Solo un perdigón del disparo me
la satisfacción y la forma de recibirlo dio en la parte posterior de la cabeza
abrasándome; me acarició en la ca- lo cual me hizo perder el conoci-
beza... miento sin mayores consecuencias,
-Pronto iremos a Santa Cruz, allá según el médico para mayor tranqui-
te entregaré tu dinero. Compras tus lidad.
necesidades. Unos días después viajamos a
Camino a la finca, al pasar por el Santa Cruz. Luego de la revisión mé-
corredor cerca de la ventana exterior dica motivo del viaje, después del al-
sin proponerlo escuché, tu hijo es de muerzo me llama aparte la señora
buena pasta; es necesario prepararlo Betty y entregándome el dinero me
dice:
27
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-Tu dinero, ya puedes comprar lo me llamó poderosamente la aten-
que desees. ción, lo compré y feliz salí rumbo a
-Gracias señora ¿me acompaña? casa.
-Tú tienes que ir a comprar sólo, En la puerta de la tienda me en-
no es justa mi compañía, son tus de- cuentro con la señora Betty.
seos no mis necesidades, yo te estaré -¿Y el carrito?...
esperando, chau... -Para mi hermanita.
Media cuadra más adelante esta- -No hijo, eso lo compro yo, tu pa-
ban esperándome las botas de mis dre me encargó eso para su hija...
sueños, me quedaron bien y me las -¡No por favor déjeme; y conti-
compré, pero también otras como nué mi camino feliz por mi adquisi-
para mi tío y gran amigo, Chichín, ción.
también las llevé; un poco más ade- Este carrito, sin buscarlo, cambió
lante, un rifle de aire comprimido pa- el rumbo de mi vida, muchos años
recía burlarse y me decía apurado no después lo comprendí ¡cuánto me
te alcanzará tu dinero, miré las botas sirvió!..., tantos años, no recuerdo si
con desconsuelo: ¿te gusta el rifle? fue en navidad o cuándo, recibí de
Entré preguntando el precio, lo podía regalo el rifle de mis sueños, junto
comprar, conté el dinero, unos me- con el cariño y ternura de una madre,
tros más adentro un carrito para bebé que también se convirtió en una
guía... Gracias Dios me distes todo lo
necesario para ser feliz. .

E l sol se perdía en el poniente


entre la V formada por la cor-
dillera de Charagua en cuyo
vértice inferior corrían mansamente
las aguas del riachuelo del mismo
con tres peones al viñedo de Luis
Brinzoni, arreglé con él y escogerán
todas las plantas resultantes de su
poda, y en amarres de 100 estacas las
llevan a nuestra propiedad. Deseo
nombre, convirtiéndose en destruc- hacer un viñedo de 10-12 hectáreas.
ción y muerte tras las primeras llu- Serás capaz de hacerlo pues llegó la
vias del verano. Un último vistazo al hora de asumir tu responsabilidad.
sol que ya se perdía más de la mitad Con estas últimas palabras se sentó y
-Tome mi hijo, me alcanzaba mi me indicaba hacer lo mismo, cena-
padre un envoltorio mientras comen- mos silenciosamente sumidos en
taba: siempre has querido podar la nuestras cavilaciones personales.
uva del panal, este año, te darás el
gusto. Mañana a primera hora te irás
28
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
Esta responsabilidad la tendrás sola- frente a nuestra casa comentamos
mente cuando no estés en un colegio. con mi padre los incidentes de la se-
Hasta mañana hijo, Dios te bendiga. mana: 7.000 plantines es el resultado
-Buenas noches señora, buenas de nuestra labor.
noches papá. -¿Papá por qué en Machipo tie-
A primera hora del siguiente día nen choclos y verduras todo el año?
recogí mi tijera y a medio vestir -¿Conoces las lagunitas?
mientras me abotonaba la camisa, -¿Claro, son cinco no?
abriendo la puerta de salida, una be- -Las grandes sí, pero también
lla sorpresa: del otro lado una dulce hay varias pequeñas, tienen agua
criatura de entre 10 y 12 años me es- todo el año pero además ayudan a
peraba sonriendo tímidamente. ¿Qué formar un gran espejo de agua y la
deseas? “Soy tu profesora y te es- evaporación de todas ellas producen
pero, toma, manda la madre vieja”, y un microclima, el cual les permite
me alcanza un canasto lleno de cho- sembrar durante casi todo el año.
clos y cumanda17 y otras especies Hola hermano - la voz de tía Ge-
colmando el recipiente, las verduras noveva nos interrumpe.
recién cosechadas, por su apariencia. -Ven, siéntate hermana.
Espérame, las vacío y te devuelvo tu -No puedo, acompáñame más
canasta con arroz y algo más. No, tu bien voy a Piedritas a ver a nuestro
no me des nada respondió, yo solo hermano José.
traigo no llevo, si quieres darme, tú -No hermana, espero a mi mujer,
lleva a mi casa. Me esperaba con el no tarda en salir.
ceño fruncido, no estaba en sus -Vamos sobrino.
cálculos regresar nuevamente con -Puedes ir, dice mi padre.
peso. Me sonreí entregándole su ca- -Me levanto, le doy un beso a mi
nasta limpia de acuerdo a su volun- tía, me agarra del brazo y camina-
tad y sonriendo dijo: Tú eres flojo, mos. A la media cuadra en la puerta
no puedes llegar a Machipo como de su casa una señora dormitando es
yo, no puedes traer nada y dándome despertada por la pregunta de tía Ge-
la espalda se aleja unos pasos y noveva
monta en su burro taloneando rápi- -¿Cómo está comadre?,
damente levanta la mano y dándome -Sigue mal no más el compadre
la cara sonriente se aleja. -¿Por qué no llamas al doctor?
Pasan los días sin sentirlo, felices -Está adentro comadre sentado
en la recolección de estacas para la en la poltrona, el doctor pita y pite y
plantación de la vid. mi enfermo caga y gomita18.
Hoy es domingo por la tarde, -No se preocupe comadre gracias
sentado sobre un banco de la plaza a Dios tenemos un buen médico.

17 18
Especie de frejol que se siembra entreme- Se refería a “vomitar”
dio del maíz.
29
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-Eso espero comadre, que Dios una escuela; en nuestros tiempos
lo Bendiga solo el párroco nos enseñaba a rezar
-Chau comadre Petronila. -Con- y algunas otras cosas, ya ni recuerdo
tinuamos caminado, a los pocos pa- que,... no, usted tiene suerte y por
sos le digo: eso no tiene derecho a burlarse de
-Hay tía que vergüenza su coma- nuestra ignorancia ¡no! Sos un le-
dre Petronila no sabe ni decir Vomi- trado y basta, se agarró de mi mano
tar, ¡que ignorante; y apurando el paso no me dejó hablar
-No hijo, no se las de de letrado, más. .
usted ahora tiene la suerte de tener

D os días después nos llamaron


a la escuela, así era en nues-
tros tiempos de estudiantes,
cuando se le antojaba al director sus-
pendía las vacaciones y las daba nue-
chen todos, a la escuela de inme-
diato. Nos mandaron formar. El di-
rector comenzó así:
-Alumnos de la escuela, esto es
muy importante para vuestra forma-
vamente de acuerdo a su capricho. ción... mañana al medio día llega un
Una voz me saca de mis meditacio- avión C 47 del ejército Norteameri-
nes. cano, es la información del comando
-Niños, nos han informado que del regimiento acantonado en Chara-
está por llegar un avión con regalos gua.
para los campesinos. Bien es sabido -Señor director ¿por qué vuela el
por ustedes, que la pista de aterrizaje avión?,....El nos explicó que el mo-
no se utiliza desde la guerra del tor tenía caballos de fuerza, etc.
chaco, por eso con los soldaditos del Bueno mejor aún, mañana lo verán,
regimiento limpiaremos toda la faja los esperamos a las 8a.m. en el aero-
de aterrizaje; deben venir en la tarde puerto, no se olviden que viene gente
con herramientas. extranjera para estrechar lazos de
-Entre risas y juegos terminamos amistad, seguramente con algunos
la faena y al concluir la tarde cuando presentes. Nosotros tendremos la
regresábamos, uno de los mayores le obligación de recibir bien a nuestros
pregunta al profesor; visitantes, hasta mañana niños...
-Señor ¿qué es un avión? Nos reunimos en la plaza ha-
-Maldito preguntón, me dije ciendo planes para recibir a nuestros
-En la escuela les explicaré char- nuevos amigos ¿qué sorpresa les da-
lando con el director. Niños escu- ríamos? Nos pusimos de acuerdo
con los demás chicos de primero y
30
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
segundo, y ya casi éramos suficien- está entre nosotros, ¡se escondió tan
tes para poder planear algo. rápido; En eso se escucha el galope
En esos años las visitas llegaban del caballo y el grito del arriero jipu,
en caballos, el vehículo de ricos y jip... caballos, el tío en su montura y
pobres, mientras nuestros padres re- revoleando el lazo listo a juntar los
cibían a sus amigos, los hijos aten- caballos del avión... la carcajada con
díamos sus cabalgaduras con agua y la que fue recibido dobló a la que nos
pasto. recibió a nosotros, el desconcertado
Mucho antes de la hora indicada jinete...
por el director, allí estábamos todos Regresamos todos cabizbajos y
sin ningún atrasado o faltón. Luego derrotados. Después del almuerzo
de esconder nuestros regalos en el mientras conversamos con la señora
montecito a la orillas de la pista, in- de papá, con mi hermanita en mi
visibles a toda mirada. Ello sería una falda. Tenía cumplidos 8 meses, ¡qué
sorpresa, buscamos ansiosamente en ojos hermosos; digo, mientras la
el cielo el famoso avión y... ¡no apa- contemplo emocionado. Charlába-
recía el milagroso aparato volador; mos de la plantación de vid, ella en
Allá está, esta nueva visión, des- la mañana estuvo paseándola; la ma-
pués de varias ilusiones por fin un yoría de las primeras plantaciones ya
ruido ensordecedor, el relincho de estaban brotadas.
muchos caballos cansados de arras- -Tienes buena mano para sem-
trar el aparato volador, pasó sobre brar hijo y eso es muy bueno.
nuestras cabezas, con el ruido de mu- -¿Qué es bueno? Nos interrumpe.
chos truenos. Luego de una larguí- -Hola papá
sima vuelta vino hacia nosotros, tocó -No te sentimos llegar Felipe.
tierra y corrió un trecho y se regresó, -Cómo puedes sentir, con lo
hacia cada vez más bulla, (claro to- fuerte que ustedes charlan.
dos los caballos relinchaban al -Señor, ¿dónde van a poner las
mismo tiempo...); se abre la puerta y bolsas con maíz? pregunto un peón.
aparece un militar grandote, con su -Vaya don Luis, vea donde, es se-
cabeza blanca, “techos de paja” dijo milla de maíz cubano amarillo, dicen
no sé quién. Cuando estuvieron en que da el doble de nuestros maíces.
tierra fuimos a recoger nuestros re- -Entra un oficial americano. Se-
galos sorpresa para los amigos y re- ñora estos huevos son de una nueva
gresamos todos cargados con nues- variedad de gallinas RHODISLAND
tros baldes con agua y un jase19 de pesan el doble de sus gallinas crio-
pasto en el hombro, nos paramos sor- llas y ponen el doble de huevos por
prendidos por la carcajada con las año, pueden compartir los huevos
que fuimos recibidos. Nos miraron para no perder la cría...
asombrados. Busco a Chichín y no

19
Atadijo de paja.
31
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-Esta semilla, hijo la compartire- soy tu Profe, nunca se acordaron de
mos un poco con los Guaraníes nues- nosotros, esos huevos quieren sal.
tros vecinos y también llevaremos a Con tan rotunda afirmación..., apuró
Gutiérrez, Lagunillas, Cuevo y Bo- el paso... te daré maíz cubano y unos
yuibe; ellos deben compartir con no- huevos, para..., no los quiero.... no
sotros las bondades de la produc- seas desconfiada, ....mira en primer
ción... lugar esos techos de paja de escoba
-¿Sirve para hacer tamales, bis- nos engañan. Piensa... maíz, gallina,
cocho y locro de semilla? todo es el doble, si cosechas el doble
-Los americanos dicen que si de maíz este gasta el doble a la tierra,
-Tú sabes papá, que si no es así, esta no se recupera del desgaste en el
no podemos engañar a los campesi- año del descanso y más rápido ter-
nos repartiéndoles estas semillas. mina con tu tierra y tus nuevas galli-
-No deben empollar mezclando nas igual... si quieres sacaremos des-
los huevos, mejor se comen las galli- pués mejores cuentas. No sé lo que
nas criollas, así impiden el cruce que quieren tus amigos, quiero que no se
puede degenerar la nueva raza. acerquen a Machipo, aleja tus bendi-
-Ustedes hablan como Hittler, le tas semillas y tus famosos huevos.
digo... ¿Yestos nuevos gallos cantan ¿Cuál es el motivo? Temor, ¿Qué
como los criollos? viene después? Se aleja corriendo
-¡No, pero puedes hacerlo tú! y con su negra cabellera mecida ondu-
sonriendo me mira con cara de picar- lando al ritmo de su ágil caminar...
día. Esta bella imagen me acompañaría
-No es broma y ¿quién nos des- por años en muchos instantes de mi
pertara? vida.
-Toma Luchin, me entrega un re- Seguimos plantando las estacas
loj del tamaño del platillo cafecero, de uva, el plan es poner 10 hectáreas
este será tu nuevo gallo despertador, de vid para vino y 2 de blanca para
apretando un botón suena estruendo- mesa. Continuo a ritmo seguro y sin
samente. pausa, teníamos que hacerlo en su
-O sea si no me despierto y época, pues si nos salíamos del lí-
aprieto el... mite del tiempo el próximo año re-
-Váyase don Luis, tus peones te cién terminaríamos lo de don Luis
esperan. Brinzoni.
Al medio día, al salir me encuen- Pasamos a la poda de don Casi-
tro con la Pofe, nos alejamos char- miro Bossi y continuamos con la de
lando animadamente y le cuento de la viuda de Peralta donde, al parecer,
todas las cosas que nos trajeron de terminaríamos nuestra siembra... son
regalo. ¿Es mucho, no te parece? tantos días sin ver a la Profesora, la
dice con soma Vamos, no seas des- ansiedad por su ausencia se está con-
confiada. ¿Por qué tengo necesaria- virtiendo en temor de no verla más...
mente que confiar? No olvides pues hoy nos encontramos nuevamente
32
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
mirando los pequeños retoños de las sospechar de tus desvelos y afliccio-
plantas de vid, me sacan del ensueño nes. Esa fue sin duda una de las tar-
sus palabras: Mira esto es vida, es fe- des más maravillosas en mi vida..
licidad, no conviertas tu vida y tu .me sentí tan cerca de Dios, ¡gracias
alma en almacigo de rencores y Señor¡ El resto de la tarde la pasa-
amarguras; que tu corazón sea una mos recorriendo surco por surco la
fuente de inagotable amor y ternura, plantación, con el sol en el ocaso,
de comprensión, desparramando su con la paz que acompaña al cre-
fragancia por donde camines, esta es púsculo vespertino, nos sentamos a
nuestra fe, la fe guaraní.... termina su descansar bajo la sombra de un
meditación, tiene una mirada pro- añoso ocoró. Nuestras sensaciones y
funda... ¿dónde quedan tus tierras? sentimientos cambiaron al sentarse,
Nosotros no somos los dueños de la se le subió la falda y mostrando las
tierra, sólo somos los guardianes en- rodillas retiré mi mano de su mano y
cargados de cuidar todo lo que ella bajándola tiernamente comencé aca-
contiene. Bosque, agua, aire y todo riciando su torneada rodilla, cuya
lo visto por tus ojos es, “del dueño suavidad me enloqueció; un frenesí
del monte”, el manda en tu vida, eres desconocido turbó mis sentimientos,
una parte nada más... y sonriendo se colorearon sus mejillas, temblo-
maliciosamente apura el paso y con- rosa su voz susurró. ¡No se apure,
tinúa: toda mujer es digna de tu res- aún no es el momento! No nos ade-
peto pues encama el espíritu de la lantemos, tenemos que esperar,
maternidad, crean vida y por ella cuando sea la hora disfrutaremos
continúa la humanidad, tu colabora- tanto... fueron sus últimas palabras.
ción en esta misión es un aumento de Se puso en pié, se alejó, intenté pa-
tu felicidad; tú fuiste creado paia ser rarme para seguirla pero me dirigió
un hombre digno y responsable. tal mirada, ¡qué de dolor me hizo
Cuando llegue el momento, debes sentir;...
ser quien asuma su paternidad en Pasan los días sin verla me tiene
forma responsable y digna, compar- sufriendo con ansias de acariciar su
tiendo responsablemente. No te ex- piel ¡hasta cuando! Los días pasan 5,
trañes, éstos son los mensajes que la 8, 10 mil, un millón, lúgubres y de-
anciana manda para vos... le agarro solados ¡tonta! Le contó todo a la an-
de la mano y continuamos revisando ciana y no la dejará regresar ¿hasta
los brotes de la vid, unidos por el mi- cuándo? Cada día estoy más mal hu-
lagro de la vida, que se comienzan a morado y pendenciero, nuestras pe-
ver en esos maravillosos brotes que leas con Chichín son la comidilla en
luego serán fuertes plantas donde la escuela, es tan fácil enojarlo, sufi-
florecerán, frutearán y madurando ciente subir el brazo sobre la cabeza
los dulces frutos de la vid que delei- y hacer los gestos para enlazar (el re-
tarán a gente de lejanos lugares sin cuerdo de su papelón cuando el
avión), es suficiente para enojarlo.
33
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
Me brinca y comienza la pelea pu- de mi padre y allí empezó la enemis-
ñete de ida y vuelta, desahogo mi tad a muerte de: Don Luis como el
amargura y frustraciones, comienza zorrino tiene dos madres el muy co-
la pelea y termina cuando uno de los chino, “la historia del zorrino y su
dos derrama sangre; somos la comi- mal olor”, la contó así el profesor
dilla de nuestros compañeros de la Chávez:
escuela, la desazón y mi odio aumen- -Este animalito tiene una madre
tan cada día. En media pelea llega el que lo engendra y lo pare, otra se lo
profesor Chávez, nos agarra de las quita y no lo baña por eso del mal
orejas. olor del zorrino,... fueron sus doctas
-Así se odian el sobrino y el tío, palabras... nueva leña aumenta el
esto lo arregla la calavera. fuego de la guerra personal con el tío
Nos miramos asustados, bien te- Chichín.
mido por todos era el cuarto de la ca- Un tiempo después, a la hora de
lavera: al cuerpo de algún soldado se la cena, me avisa mi padre: viajamos
lo sacarían en el cementerio, con ella en la madrugada a Lagunillas, es
era suficiente para atemorizar al más cumpleaños de mi compadre Juve-
valiente. nal, nos vamos por algunos días,
Cumplimos nuestros castigos en- Beatriz, tus dos hermanitas y sus al-
tre sollozos y lamentos; agarrados de zadoras. Tú te quedarás con Vicenta,
la mano nos salimos los dos eternos la cocinera y le hablaremos a tu tía
enemigos de los últimos meses, ca- Engracia para que se quede a dormir
bizbajos y meditabundos unidos por en la casa, te servirá de compañía,
el temor y por el gran cariño que Beatriz quería llevarte pero en la es-
siempre fue un lazo de unión entre cuela le negaron el permiso; como ya
ambos. Fuimos rivales por el cariño terminaste la poda del viñedo, sólo te
de mi abuelo “su padre”, el último preocupas de los sepes20 y los nue-
hijo y el primer nieto, sus más queri- vos brotes que deben ser amarrados
dos compañeros en sus caminatas correctamente; el riego es mañana,
por el pueblo, que ayudándose de su Aurelio ya sabe lo que tiene que ha-
bastón en una mano y uno de noso- cer, de todas maneras es bueno que
tros en la otra, más los dos galgos, todo marche bien. Dios lo bendiga
completábamos el quinteto visitante mi hijo.
de familiares y amigos. Esta dulce -Buen viaje y tenga un buen re-
armonía que sentía terminó unos tomo papá. Siento todo el ajetreo
años atrás con la muerte del querido previo a todo viaje, funciona la mo-
viejito, empeorando un año después vilidad y emprenden la marcha, me
con el divorcio de mis padres y acre- quedo en cama con la nostalgia pro-
centándose con el nuevo matrimonio pia de tales momentos y la amargura

20
Hormigas que se alimentan de brotes tier-
nos.
34
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
de otra madrugada que jamás me ol- madre, ¡como cambió nuestras vidas
vido: cuando mi padre se despedía ¡estos recuerdos hacen un nudo en
con lágrimas y emprendía un viaje. mi garganta y casi termino llorando.
Era tan funesto en mi vida y en la .
vida de mis hermanitas. En esa opor-
tunidad viajaba a su divorcio con mi

D e pronto siento que se abre la


puerta y una vos que me dice:
-No te asustes soy tu tía,
se aproxima y se sienta en la orilla de
mi cama, comienza acariciándome la
abrirme los labios con su lengua; in-
trodujo una de sus manos entre nues-
tros cuerpos y me acarició el entor-
chado21 miembro, una rara sensación
de miedo y gozo se apoderó de mi, y
cabeza, la cara, los hombros, aquí traté de separarme suavemente pri-
hace frío, da campo mi hijito me mero y después con más ansias,
acostaré a tu lado para no resfriarme, -“No seas tontito mi amor apro-
levanta un poco las colchas y se in- vechemos los placeres de la vida, ya
troduce a mi lado, sus brazos por de- lo verás no tengas miedo” me decía
bajo de mi cuello, me da unos besos con una voz enronquecida y con sus
los cuales me devuelven la tranquili- manos que las llevó entre sus pechos
dad, comienza a desprender los bo- moviéndola suavemente, vuelve la
tones del saco de mi pijama y acari- sensación de gozo y placer y con la
ciándome se levanta sacándose el ca- otra mano comencé acariciándola tí-
misón quedando completamente midamente; pasó una pierna sobre
desnuda a mi lado. Sus pequeños y mis caderas y todos sus movimientos
duros pechos se incrustaron en los se volvieron frenéticos, se echó de
míos, sus suaves caricias aumenta- espaldas me alzó y la ayude a po-
ron la presión pegándose nuestros nerme sobre su cuerpo ¡qué sensa-
cuerpos por completo entre el temor ción!, abriendo las piernas me hizo
y al mismo tiempo el goce descono- introducir el entorchado miembro y
cido. Mis genitales comenzaron a exigir más, más, más...
crecer como nunca antes me sucedió, Yo no entendía cual “más”, es-
su boca comenzó a besarme, primero taba anonadado y confundido, estaba
las mejillas, luego la frente y jun- perdido... pasando sus dos piernas
tando su boca a la mía intentó sobre mis caderas y sus brazos sobre

21
Erecto
35
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
mi espalda de un fuerte apretón con- -¿Nos vamos?
siguió sus ansiedades, me vino tal -Al fin la seguí al baño deseando
dolor que intenté desesperadamente aún conocer el daño que me causó.
retirarme del feroz abrazo de piernas Allí aflojé la guardia y aprovechando
y brazos, varios intentos me retira- el instante de debilidad se apegó len-
ban un poco, pero ella con su abrazo tamente, tomando el jabón suave-
volvía a aproximarme. La lucha se mente comenzó de los pies hacia
hizo más y más intensa y mi dolor en arriba, la parte de mis rodillas..., con-
aumento me obligaba a empujarla tinuó con su dócil cordero, cuando
hacia arriba y con su feroz abrazo ga- llegó al lugar de sus ansiedades, re-
naba nuevamente, no podía pensar, trocedí.
el dolor y el cosquilleo me llevaban -Vamos hombre, solo necesito
a la locura. Consiguió introducir su jabonar la parte que sin desearlo te
lengua en mi boca, y con ella acari- hice daño en el placer de la pasión
ciaba la mía, comenzó a chuparme incontrolable que tú mismo me has
en una forma dulce/amarga, el feroz provocado.
abrazo de nuestras lenguas y cuerpos Nuevamente caí bajo el embrujo.
producía dolor dulce miel, amarga -Continúa con su inocente labor
hiel, llego una sensación de placer de tía ¿no? Siempre confié y obedecí
desconocido, nunca gozado; por ella sus órdenes. Apegó su cabeza a mi
me entere: pierna y continuó lavando con ter-
“Has tenido tu primer orgasmo”, nura.
sentí rabia, humillación, vergüenza y -No se preocupe mi lindo hom-
una fuerza desconocida con la que la brecito quiero ver donde está lasti-
empujé de mi lado, el dolor de mi mado, su aliento y su respiración en-
lengua y miembro se transformaron trecortada cada vez más cerca...tanta
en furor, la saqué de mi cama. proximidad, con el jaboneo el dulce
-Sos un sonso, tu primer pasión cosquilleo, me sentí perdido, pero su
de hombre, mi ilusión soñada, el ma- frenesí fue más urgente que su pru-
yor placer de mi vida, amas como dencia; cuando sentí mi miembro en-
hombre y reaccionas como niño, ya tre sus labios, el temor y la ira me
eres otro, no existe hombre tan viril dieron la sutileza para reaccionar,
como tú, con tu pasión, tu energía por la fuerza me lastimaría... me aga-
masculina, como pocos hombres, tu ché acariciando sus cabellos, su cue-
colmaste todos los sueños de una llo, metí mis dedos en sus oídos, bajé
mujer, aunque esta sea muy exi- nuevamente a sus hombros le hice
gente, tenes mi sumisión ¿cuántos lo cosquillas en las axilas, soltó la presa
han intentado? mirándome con una sonrisa, levanté
La rabia encrespo el plumaje de la pierna empujándola y le di un fe-
pavo real que existe bajo la piel de roz rodillazo en la quijada que la
todo hombre y más aún en un pro- obligó a soltarse emitiendo un ru-
yecto de hombre gido que me asustó, pero salió del
36
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
baño, al instante cerré y tranqué la “lloró tanto de miedo al quedar
puerta. Terminé de bañarme son- solo...” Gracias Chichín tu fértil ima-
riendo burlonamente y con un poco ginación en esta ocasión me sacó del
de temor. apuro, pues ¿qué explicación lógica
Mientras me vestía sentí sus tra- mejor?
jines en mi cuarto luego un silencio Después del colegio fui directa-
total, regresó y continuó haciendo mente a ver el riego que marchaba
ruido mientras me secaba, envuelto perfectamente, lento como siempre
en la toalla regresé al dormitorio, en- la primera vez, ya que después de la
contré la cama tendida toda comple- poda hay largos meses de invierno
tamente limpia, me acerqué a ver en sin utilizar las acequias lo que difi-
el instante que ella salía del cuarto, culta que el agua corra con fluidez,
cerré la puerta que comunicaba con por ello el atraso.
el patio por temor a su regreso, me Me confirmó Aurelio que con 10
apuraba, pero los nervios no me per- horas más de agua sobre nuestro
mitían prenderme los botones de la cupo de 30 horas terminamos.
bragueta, a medio vestir salí al patio. -No te preocupe, nosotros tam-
-Joven está listo su desayuno, bién sabemos la urgencia de un buen
préndase sus botones y pase antes riego, buscaré al juez de agua y es-
que se enfrié el café con leche. Estas pero no tener problemas por el au-
palabras me devolvieron la tranquili- mento de más agua, ustedes conti-
dad, encontrando en la empleada ter- núen que yo regresaré después de ir
nura que es lo más necesario en ese por casa.
momento. Vicenta me espero con el al-
-Apúrese, es hora de ir a la es- muerzo caliente como lo prometió,
cuela, usted no cumplió el encargo luego de lavarme me aproxime más
de su padre, no fue a ver el riego an- tranquilo ya que el dolor no me mo-
tes de la escuela, a la salida vaya di- lestó, me levanté con la idea de bus-
rectamente a la finca yo lo esperaré car al juez de agua.
con el almuerzo caliente a la hora -Joven primero descanse y des-
que cumpla su trabajo, no se preo- pués sale.
cupe usted. -¡No, tengo urgencia!
Se alejó a continuar sus quehace- Aurelio también almorzó y le
res y yo no podía comer nada por el contó a Vicenta del problema y en
dolor en la boca... en silencio recogí ese momento lo vimos a Don Marce-
mis libros y me marché a la escuela. lino pasar con su pala al hombro; le
¡Día infernal! Medio ronco no charlo del asunto, de la necesidad de
podía charlar, difícilmente se enten- más riego y él autorizo continuar re-
día mi voz, por suerte el examen fue gando los demás viñedos. Todavía
escrito, lo único que salió bien ese no habían terminado la poda..., fui a
día fue como siempre mi tío que dio descansar. A las 6 de la tarde me des-
con la causa de mi pérdida de voz:
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
pertó una fuerte discusión de Vi- Eity23, los acompañarán a Cho-
centa, me levanté y al abrir la puerta rety(x) la gente del Gran Aireyu24 y
veo a la tía intentando apartar a mi gente de Capiacuandi, (x) los acom-
fiel guardiana. pañarán al Inca Huasi (x), dice la an-
-No tía -le decía- el doctor no ciana: nosotros somos los guardianes
quiere visitas, recomendó reposo. del bosque, si no lo cuidamos tendre-
-Muchachito zonzo... dijo mi tía. mos grandes castigos, se secará el
Aclarando el nuevo día desperté vientre de las mujeres y nunca más
descansado, me vestí, abro la puerta nacerán niños guaraníes. Un nuevo
del dormitorio, la fiel empleada dor- pueblo se encargará de cuidar el bos-
mía con su cuerpo cruzado, impedía que y todos los seres que viven en su
que alguien se aproxime y pasé interior...¿Ustedes como hacen sus
dando un tranco para que no se des- chacos? Pregunto,...es tan fácil, pri-
pertara. Una nueva sorpresa, al abrir mero escoger un buen lugar... -
la puerta de salida a la calle, mi Profe ¿Cómo saben cuál es el mejor? Los
sonriente y hermosa llenó de luz y árboles y frondosas variedades de es-
felicidad mi corazón y con mi mano pecies...- ¿el motivo? De esos árbo-
en su espalda empujándola le dije les vivirá una familia mínimo uno o
¡vamos; dos años: cuando escoges un buen si-
Tanto extrañarte no tienes per- tio primero cortas los árboles chicos
dón ¿te recuerdas esos soldados de la que existen bajo de los grandes luego
guerra? Años lejos de su tierra, re- cortas las chafras25 para leña, tu fa-
gresaron para hacer sus chacos, se milia averigua primero las necesida-
comprometieron a trabajar desmon- des en el pueblo: si son gavetas26,
tando en la misma forma que el pue- luego tacú27, horcones, tijeras para el
blo guaraní, no cumplieron nada de techo de las casas de los Caray28. El
lo prometido: tumban los árboles y tamaño de tu chaco depende de
les prenden fuego quemando la tierra cuántos hijos tienes. Mientras cami-
a las que ellos llaman la Pacha- namos en forma picaresca y provo-
mama22. Nosotros los creímos los hi- cativa con movimientos de ojos y
jos del gran desconocido a quien tú manos, pone más énfasis en sus afir-
llamas Dios, pero los hijos de la tie- maciones; paseamos por el viñedo
rra le prenden fuego quemándola, sin mirar la vid, tan enfrascados en la
¿tú sabes por qué queman a su ma- nueva lección... ¿cuántos años se
dre?, nosotros no lo entendemos, los cultiva en el mismo lugar con buenas
hemos acompañado por el camino a cosechas? Estas tierras pues,... mira

22 25
Madre Tierra en idioma Aimará. Gajos delgados.
23 26
Y (x) nombres de comunidades indígenas Fuentes grandes de madera.
guaraníes. 27
Herramienta de madera usada para moler.
24
Nombre del Jefe Guaraní del Departa- 28
Término que usan los guaraníes para de-
mento de Cordillera. (Provincia) signar a los de piel blanca.
38
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
Profe, un mínimo de 60 años, según agarré de la mano y continuamos el
los documentos, entre mis abuelos, recorrido comprobando con alegría,
mis padres y anteriormente fueron “no hay más hojas dañadas por los
cultivadas por el pueblo guaraní, sepes”,-sí, existen varios racimitos
¿sabes cuando las desmontaron? El en varios retoños, esto en la uva
padre de mi madre decía “los guara- blanca y con los brotes recién hin-
níes regaban estas tierras desde antes chados y por germinar parecían más
de la llegada de Cristóbal Colon. Te- tardíos.
nían con seguridad dos o tres cose- Después de caminar durante va-
chas por año”, -es verdad, lo afirma, rios surcos de uva blanca, encontra-
ustedes dicen años para nosotros son mos un brote con un pequeño ra-
cosechas. Ves el cupesí, una cosecha cimo; nos detuvimos examinándolo
nuestra un año tuyo -¿cómo cuentas detenidamente, su tamaño nos im-
los años? -¡mira las hojas, igual son presiona. Mirábamos en silencio. Un
los años! Regresemos a la duración débil rumor llegó, me guío en esa di-
de la tierra del cultivo,... Si trabajas rección, por ahí corrían las aguas del
cuidándola nunca se cansa, mira... riego; nos detuvimos a la orilla alta
agarra un puñado del suelo, lo deja de la acequia que corría mansamente
caer por un costado de su mano, por el canal de tierra, tomaba veloci-
nunca la tierra debe estar desprote- dad al llegar a un canal de madera y
gida; si parece cansada ponle menos raudamente se precipita al canal in-
semillas, si te cansas con 30 kilos de- ferior de dos metros, abajo... era la
jas 15 en el suelo y continúas tu ca- causa del mido y ella, no podía escu-
mino, así es con la tierra, también ne- char por el estruendo de las aguas,
cesita descansar con media carga y tan embelesada está... no servían de
por siempre producirá; no la cargues nada las explicaciones. Nuevamente
demasiado. Creo que es momento de la guíe por una estrecha bajada que
ver la uva, gracias fue una tarde nos conducía a la parte inferior; al fi-
buena, -como deseo tu cosecha de nal un grueso tronco servía como
uva. El próximo año cumplo 13 años asiento, primero nos extasiamos en
y tendremos la primer cosecha, -veo la contemplación, esto en una región
algunos retoños con nuevos racimi- donde el agua era tan escasa... ver el
tos de uva; los italianos opinan “Esa sendero le causa una verdadera emo-
vid no madura bien “ es ácida y de ción la cual sólo comprendemos los
mal gusto, -no lo creo -probaremos que compartimos esta escasez, -no te
sin decirle -listo Profe, pienso igual, olvides, nosotros somos parte de la
-mira tiene hojas comidas, si no las zona más seca del país... sentí su
cuidamos bien nos quedaremos con mano apoyada en mi hombro, suave-
el deseo de probar esos racimos y tu mente puse mi mano sobre su mano
padre te castigará por descuidado, - ¿cuánto tiempo paso? Nos miramos
gracias por tu opinión; -no es mi opi- sonrientes y nos levantamos en si-
nión, es lo que estamos viendo. Le lencio, se agarró de la parte posterior
39
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
de mi cinturón, así como remolcán- deben hacer la primera comunión en
dola subimos la estrecha senda el día del patrono del pueblo.
donde una sonriente señora Betty Por la noche, a la hora de la cena
nos esperaba. le informo a mi padre del comienzo
-Vine mirando la vid, dice. Siem- del ataque de los sepes.
pre y cuando lo permite la ocasión -¡No estás controlando el gasto
me acerco al chorro, esta vez nos del veneno;
reunimos los cuatro, exclama pica- -Lo mejor que puedo, si usted lo
rescamente mirando a mi hermanita: ordena, no voy a la escuela, ahora
Tome a su hermana, lo necesita, - me solo tengo tiempo de controlar en las
dice pasándola a mis manos. Inten- tardes y desde mañana, ni eso podré
cionalmente se quedó atrás con la hacer.
Profe mientras yo caminaba un poco -Yo te enseñaré a contestar a tu
adelantado con mi hermanita que le- padre.
vantando sus manitos hacía mone- -Espera Felipe, no dejas terminar
rías; así nos fuimos. Al llegar al por- de hablar a mi hijo, se más justo.
tón me llamó la señora Betty dicién- -¡Lo único que me faltaba! ¿Vos
dome: en mi contra?
-Dame a tu hermanita por favor, -Sí, para hacerte ver tu error, Lu-
me di la vuelta y la espere para en- chito cumple con sus obligaciones,
tregársela, me alcanzaron y mi grin- injusto eres en este caso...
guita sonriente se fue con su madre. Poco tiempo libre durante la se-
-Espérenme, ya regreso con las mana entre clases y catecismo fue
alforjas de tu Profe ¡no demoro! imposible visitar las plantaciones. El
En cuanto quedamos solos le pre- sábado todo el día lo pasamos con la
gunto:- ¿qué dice la señora?- ¡No Profe, a las 6 de las mañana salí ca-
seas curioso! Sonriendo me res- mino al viñedo. Dejamos sus alforjas
ponde todos sus secretos; sale la em- en el corredor interior de la casa;
pleada con las alforjas llenas y la re- apresuradamente emprendimos
comendación para la anciana con la rumbo a la finca, los pequeños brotes
gratitud de la señora: -Por todas las de la anterior visita estaban conver-
veces que has traído tantas verduras tidos en robustos y largos retoños,
- Ya soropay29 a la caray30 -¡no es ca- con racimos visibles de un surco al
ray! Es la señora, -bueno gracias a la otro. A media mañana, decidimos
señora, se corrige la Profe. anotar los racimos de uva Monte-
Al siguiente día, lunes en la ma- rrico (¡para vino!). En todos los sur-
ñana, el maestro nos comunica: cos encontramos motivos de admira-
-Los mayores de 12 años tienen ción; plantas con 25 racimos. Discu-
clases de catecismo todas las tardes;

29 30
Dios se lo pague en Guaraní. Nombre despectivo guaraní para los occi-
dentales.
40
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
tíamos apasionadamente, al co- más atrás. Apurando el paso traté de
mienzo nos dividimos la producción, intervenir pero el pavoroso ruido de
ella poseedora de los impares, míos un avión pasando sobre nuestras ca-
los pares y a las 11:30 comprobamos bezas interrumpió la polémica.
la imposibilidad de terminar ese día, -Sube con los chicos beduina,
cansados y sedientos nos acercamos nos vamos,- suben todos con Aurelio
a la acequia y tomábamos agua acos- y la Profe dejándome en momentos
tados de barriga. La traviesa Profe que ya llegaba a la parte posterior de
con sus manos sumergió mi cara en la camioneta, quede apesadumbrado
el agua, en revancha lleno mis dos y cabizbajo ¿cómo reaccionará mi
manos con agua y dándome vueltas padre?
se la echó ¡mira nuestra suerte!, en Desde la tranquera, a la salida de
ese momento llegaba mi padre con camino al pueblo, que está más alto
su señora, quienes también recibían que este; veo la camioneta parada en
una parte de la lluvia, la carcajada de dirección de la casa, bajan dos per-
mi Profe, que no se había percatado sonas, (la Profe y mi hermanita) y la
de su presencia, torpemente al levan- camioneta sigue su camino; más
tar los brazos golpea levemente a mi tranquilo, apuro el paso, me retrasé
padre. El susto fue mayor que su ale- leves momentos en los cuales mis
gría, la obligan a darse la vuelta y amigos arrebataban de los brazos de
emprende desesperadamente veloz la Profe a la dulce gringuita que pa-
carrera. Ni los llamados de la señora talea de gozo lo que viene es su de-
Betty logran detener a Yretay. leite: Armindo la levanta y la niña
-Espera, le dice la señora y me sonríe, Chulo levanta sus brazos y la
entrega las manos de mi hermanita recibe en sus manos, la Profe deses-
(ya camina) y con el menor de los hi- perada intenta sacárselas pero 1 me-
jos hombres de papá (pronto cum- tro contra 1.70 no pueden.
plirá un año) en brazos, marcha apre- -Devuelve a la niña -les digo y se
surada en pos de la corredora gritán- ríen.
dole que pare. Entro en la casa y salgo con el ri-
Me pongo de pié el momento en fle de aire comprimido, -no jodan de-
que mi padre salía en persecución de vuélvanme a mi hermana les digo, se
su señora, Aurelio pasaba por la ríen y en ese momento la asustada
senda de ingreso en el momento que Profe le brinca a las patadas a Chulo,
la Profesora también llegaba y este, de un empujón la bota al suelo.
viendo lo que sucedía, la agarra del -Basta, te pegaré un tiro en la
brazo, ella intenta evitarlo inútil- mano, les quito los bríos.
mente, llega en ese instante la señora -¡No es para tanto! Dice su
Betty. amigo, una cuña de mierda no es mo-
-Espera Yretay tivo de pelea.
Solo vi que charlaban y gesticu-
laban, mi padre llegó unos metros
41
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-Es una mujer y también está mi nos castigarán a los dos...termina-
hermana déjennos en paz -dije apun- mos nuestro refrigerio y al retirarnos
tándoles con mi rifle, se alejan profi- llegaban de la pista.
riendo amenazas. Amenazas e im- -¿Comieron?
properios fueron las últimas palabras -Si mamá.
en llegar a nuestros oídos, con Chavi -Quédense, charlaremos un rato.
en brazos entramos a la casa, Vicenta Luchito, llegó el sueño de tu padre,
la recibió y se fueron para hacer al- las semillas para las plantaciones de
morzar a la niña. los frutales de palta... Aurelio está
Al quedamos solos, dije -oiga bajando las bolsas, haremos almáci-
profe ¿qué te dijeron? La señora no gos en el patio después de la posta.
lo dejó hablar en castellano, no en- En el tercer patio el ruido de un mo-
tendí; tampoco era guaraní. No te tor interrumpe la polémica que ya se
preocupes, le dije, es árabe no lo en- iniciaba.
tiendo yo tampoco, pero siempre ha- -¿Eso... que es?
blan así y no me retan después. -Sí, -Lo verás si vas atrás, -nos pusi-
tu padre sonreía cuando me dejaron mos en camino en ese instante; Chi-
con la niña y me dijeron: nos espera chín pasó como un relámpago al se-
en la casa, almuerza con don Luis, gundo patio
(ese fue mi padre). Algo trae el avión -¿A quien lo llamo? El nos defen-
para usted, seguramente que traen dió con su honda de dos grandotes....
semillas, ¡que desgracia; me dice, su riflesingo seguro no los hizo co-
hemos tenido tantas cosechas buenas rrer. Avergonzado bajé la cabeza y
con nuestras semillas, no necesita- seguí mi caminar, en el instante que
mos otras, ese tu cubano traerá dolor pasaba la ruidosa máquina. Los tres
y hambre igual que con las gallinas, nos quedamos sorprendidos: era un
felizmente la peste terminó con ellas triciclo con dos ruedas grande atrás
¿no?. No lo entiendes, el dueño del y dos chiquititas juntas adelantes, en
bosque no quiere cambios con nues- el asiento un moreno sonreía al ve-
tras semillas, con las que tenemos no mos.
cansamos a la tierra, es un buen tra- -¿Quién sos? Le pregunta Chi-
bajo para ella, más cosecha, más des- chín.
gaste, no alcanza de una siembra a la -¿No escuchaste los caballos?
otra para seguir muchas siembras ¿Nos trajeron el pasto?
más, porque no le damos descanso. -No sabía de tu venida, -su carca-
Pasamos a la mesa luego de la- jada contagiosa nos hizo reír a todos,
varnos las manos y la cara, la comida mostrando su dentadura blanquí-
ya estaba servida para dos. -Siéntate, sima. Parecen perlas tus dientes.
le indico a Yretay su lugar ¡no comes
tú! -yo en la cocina, fueron sus asus-
tadas palabras, -si no comes aquí,

42
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-No es Chiquitano31. -¡Que humor de perros!, vamos
-Cuenten de que se ríen ¡yo tam- tío no le hagamos caso, se respira
bién quiero reír! mejor fuera, esto apesta.
-A tiempo Constantino, dice -John, arriba del tractor, hacía es-
papá que traigas gasolina para la má- fuerzos por hacerlo funcionar, llega
quina del señor, de la misma del Constantino y tomando la manija co-
Ford 4, la otra es muy fuerte, si ne- labora en el esfuerzo poniendo la
cesita aceite también le das. máquina en marcha. Se van los dos
-Bueno, cuenten... patroncito, rumbo a la finca, Chichín lo sigue
-Traté de tomarle el pelo camino a la finca con la Profe y mi
-Por eso nunca la pierde, por eso hermana.
le llamamos fregolin ¡cuídate de él! Regresamos al interior de la casa,
-Ya somos aliados, te enseñaré a papá dice: les dejo a la niña y me voy
manejar el tractor a cambio de tu al campo, los alcanzamos, chau
amistad. hijo...
-¿Es un trato? Salimos por el portón de atrás y a
-Chócala, dice extendiendo su los pocos metros comienza la bajada
morena mano. donde años atrás asesinaron a Má-
-Un cálido apretón sella nuestra ximo, que, con su cuerpo, salvó mi
amistad, la cual al igual que la ma- vida protegiéndome del tiro de esco-
quinaria, abre un nuevo horizonte en peta. Un escalofrío me hace detener
mi destino... como si el alma del asesinado qui-
-¿Cómo te llamas? siera hacerme recuerdo. La Profe
-Me dicen John. unos pasos más adelante se detiene
-Este es Chichín, la Profe y sonriente, retrocede estirándome la
gringa mi hermana son mis mejores mano, no te detengas, vamos, le aga-
amigos, esperamos tu seas parte del rro y con pasos cansinos continua-
grupo. mos. ¡Cuánto dolor alberga mi
-Dice el patrón que pase al come- mente; sacudo la cabeza y continua-
dor el mister. mos subiendo, ya escuchamos el
-¡Yo mister! Gracias. ruido del tractor a toda máquina que
Nos vamos al tercer patio donde camina mucho más adelante; llega-
Aurelio tenía vaciada la semilla mos en momentos en que daba la
junto con algunos hombres. vuelta, John en su tractor comen-
-¡Que quieren; zando una melga más.
-Es el patrón -dice Aurelio. Apurando el paso miró admirado
-¡Nos dejan trabajar; es que nece- ¡cuánto trabajo! Más que tres yuntas.
sitamos tranquilidad, salgan y regre- -¿Dónde está la bosta?
san después, ahora estorban. -¿Para qué quieres bosta?

31
Etnia de Santa Cruz.
43
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-Mañana charlamos, chau, se -Lo que pasa es que nací al sur de
aleja y me deja con el interrogante en Texas, allá hablamos ingles y tam-
mi cabeza. Llega mi padre con tío Je- bién castellano desde niños, me res-
sús y otra persona, todos admirando pondió. Rumbo al pueblo, cami-
el trabajo que realiza el tractor, escu- nando los tres, comenzamos la
cho sin intervenir en la discusión; ara subida de mis tristes recuerdos; de la
más profundo dice uno, a mayor ve- esquina izquierda salen dos grando-
locidad vuelca la tierna; con un solo tes en son de pelea.
hombre haces el trabajo de cinco, -Apártate negro de mierda, no es
dice otro; en 4 horas tiene arado con vos, es con los niños, ¡nos deben
como cinco yuntas en un día. una!
-Perdonen si interrumpo, tene- John sonriente comenzó su-
mos de avance 10 metros por 250, un biendo por la derecha
cuarto de hectárea, en 16 horas, ha- -¿Qué pasa si les digo que es a mí
cemos una hectárea, con 6 yuntas en a quien buscan? Estaba más arriba
10 horas hacemos la hectárea. que ellos, lo enfrentaron, en ese ins-
-¿Y el gasto del combustible en tante los atacó John, agarrándolos de
dinero? ¿No será mayor a 6 jornales? las cabezas, los golpea cara con cara
-Tiene algunas ventajas, pero no ¡no podían defenderse! parados
todas las ventajas; cuánto dura la como dos borrachos intentaron ca-
maquinaria sin arruinarse, ¿cuánto minar, fueron golpeados de nuevo.
cuesta? Y lo más importante: los no- -¡Basta John! Nos aproximamos
villos convertidos en bueyes los ven- junto con Chichín, lo agarramos
demos al doble precio. cada uno de un brazo.
Continúa tío Jesús -éste es mi so- -Por favor amigo..., los grandotes
brino, razonas tan bien como un se alejaron tambaleándose.
adulto, hagamos lo mismo mañana, -¿Cómo lo hiciste?
luego de hacer nuestros cálculos, -Pero tío, con ayuda le respondo.
juntémonos, y pongámonos de -Un poco y otras cosas más, ya
acuerdo. les enseñaré...
Todos se van en la camioneta de Seguimos, cuando entrábamos
mi padre, sonriendo; momentos en el por el segundo patio, John dice:
que llega John en el tractor. -Nada de lo sucedido por favor.
-¿Por qué se fueron? -De acuerdo, le contestamos mi
-Es hora de comer, le digo, noso- tío y yo.
tros vamos también, lleva la má- -Bueno, yo los dejo.
quina Constantino, te seguimos con -Joven Chichín, la señora dice
los jóvenes, mientras avanza el trac- que pase a cenar, lo espera.
tor cerramos las tranqueras. -¡No, me voy no más!
-John ¿cuál es la razón por la cual “Hola Chichín, los amigos de
tú hablas bien castellano y los otros Luchito son bien recibidos en esta
no? casa y más aún si es un tío, pasa. Se
44
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
lavan y pasen los tres, los espera- -Tenías que avisar, no tienes que
mos”, expreso la esposa de papá. guardar todos los problemas; busca
-No me gusta comer en tu casa al Ingeniero necesito verlo urgente,
me dice, porque todo quieren ense- no digas nada más.
ñar, no comes tranquilo, dijo Chi- Lo buscaré y lo traigo dijo John...
chin. -Es mejor que sea Lucho, vaya
-Pero aprendemos y cuando sal- mi hijo.
gamos invitados a otro lugar, ya no Primero pregunto por Aurelio,
pasamos apuros, le dije. me dará datos donde está el tipo.
Terminamos de cenar en un com- Mientras cavilo llego a la cocina
pleto silencio sin recomendaciones, y estaban en una tupida32 charla. Me
ni llamadas de atención. encuentro con el Ingeniero al centro.
-Permiso, el tío intentó levan- Mi padre quiere hablar con usted,
tarse. lo está esperando.
-Espera tu postre, hay flan, dulce -Ya voy, que siga esperado, ter-
de membrillo. Brillaron los ojos de mino de cenar y estaré allá.
los tres, ¡parecía un final feliz para Regresando cumplo con mi en-
una cena perfecta!; me preguntaron: cargo, papá se quedó moviendo la
-¿Qué sucedió al venir a la finca? cabeza de arriba abajo y llegó el In-
-¡Nada! Le respondí de inme- geniero.
diato. -¿Me llamó señor?
-Y los grandotes ¿no molesta- Al siguiente día me levanté un
ron? poco tarde; fui al desayuno.
-No, respondo. -Sé pegó en la sábana el joven,
-Disculpe mi hijo, ¿es mi hija todos tomaron ya, le sirvo en un ra-
motivo de problema? tingo.
-Los dos quieren a mi hermanita, Tomé apurado y llegué cuando
a ella le gustan las alturas, quiere vo- sonaban las campanas de la escuela.
lar, si le dan gusto ella está feliz de Chichín en filas me buscaba, llegué
mano en mano, y yo soy el que sufre para ser informado por el señor Chá-
y como ellos la quieren mucho, ha- vez:
cen su gusto sin importar mi opinión, -Salek y Gutiérrez pueden irse a
lo importante es la felicidad de la su casa. Nos esperaban con el en-
niña. cargo de irnos inmediatamente, Chi-
Hijo, ¿viste las semillas de chín a la finca y yo al tercer patio con
palta?, ¿cuántas son? ¿Llegaron Aurelio y las semillas de palta; Chi-
bien? chín salió por el segundo patio, con-
-No sé papá, el señor que estaba tinué por el tercero en busca del Ing.,
con Aurelio me mandó salir, dijo que seguían en la selección y clasifica-
estorbaba, por ese motivo no regresé. ción por variedad y calidad, un

32
Charla amena y sin pausa.
45
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
peón me esperaba listo para ini- -Salud Martina le respondí, tan
ciar la plantación de las semillas. rica como siempre, le dije.
-¿Cómo lo hacemos Ing.? -el nos -Bueno mamá déjenos bailar.
dio las explicaciones y trabajamos -No Casta, yo bailaré con el jo-
hasta cerca del medio día, cuando ven, sacalo a bailar al cumpa Chi-
paramos, ya teníamos 380 semillas chín.
plantadas. Seguí con Martina, medio a la
-“Cumpa avión”, así nos llama- fuerza. Luego fui arrastrado a una es-
mos con Aurelio, en la tarde tengo quina, allí me esperaba la Profe.
clases de catecismo, si tiene otra -Lo dejo joven Lucho; te lo en-
cosa por hacer siga con Anselmo. cargo Yretay,
-Hay cabuy33 , lo espero en la no- -Dice la anciana que no es el mo-
che cumpa, no se olvide de sus cum- mento.
pas. La Profe lo estará esperan en el -Es el instante cuando usted
baile, me dijo que no falte. quiera -dice Martina. Creo la anciana
En el catecismo que fue de 2 a 4 ya se olvidó de eso. Aprovechen us-
solo pensaba en el baile de Aurelio, tedes, no esperen órdenes.
¿me esperará la Profe? O es ¿broma -Gracias Martina, vamos Profe,
de Aurelio?, siempre nos respeta- la veo incómoda, me apresuro y la
mos... regresé a continuar en las pal- saco a bailar...
tas, no estaba el ingeniero. Muy temprano, al siguiente día
-Como es “cumpa avión”. fui al tercer patio para continuar con
-Lo sabrá en la noche, no se la plantación de las semillas de palta.
afane. A media mañana llegó el Ing.
Por la noche fuimos con Chichín -Muy bien, como estamos avan-
llevando una damajuana de vino, zando, en dos días más terminamos
cada uno. Ni bien llegamos, salió a con las 5.455 semillas.
recibimos una de las hijas de Aurelio ¿Cuántas variedades?
-¿Bailamos joven? -Bien parece que tienes interés en
Y yo reclamaba: ¿y mi tío? tu trabajo.
-No se preocupe joven, ya tendrá -Sí, ¡Y mucho!
su tumo. -Son 45 variedades de 8 países,
-Te espero, Casta dos Estados de la Unión..., te pasaré
Nos alejamos bailando al son de toda la información documentada
flautas y tamboras, Martina, mujer para que puedas llevar un registro y
de Aurelio, madre de Casta, se te explicaré la forma y un plano de-
acerca con una tutuma34 llena de chi- tallado para el trasplante de las plan-
cha, sírvase me dijo. titas; luego que yo termine de arar
caminaremos para ver las variedades

33 34
Licor hecho de maíz. Recipiente para contener líquidos extraí-
dos de un arbusto.
46
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
de suelo y obrar de acuerdo a ello. juntos, es la familia perfecta. Somos
Por la tarde no es necesaria tu pre- la imagen y semejanza de Dios, na-
sencia aquí, puedes estar cuando cemos con nuestra trinidad; cerebro,
puedas en la finca, sería bueno que cuerpo y alma. Los esposos están
manejes el tractor arando, te será obligados a formar en armonía esta
más útil. Cuando te conocí pensé en- trilogía, no debe crecer una más para
contrarme ante un niñito y si fui pre- conseguirlo. Has sembrado con yun-
potente y me porté mal, mil discul- tas, hoy manejas un tractor, hay si-
pas, quiero ser tu amigo. Mi nombre militud entre los bueyes y la pareja:
es Juan Sebastián García, mis ami- los dos que están en la yunta tienen
gos me llaman Seba, tú también lo que tirar en una misma dirección y
puedes hacer ¿te puedo llamar Lucho muy parejo, mientras más parejo,
como tus amigos? más recta la línea y en la cosecha ve-
-Claro, le respondí. remos los frutos. Si en el matrimonio
-Choca la mano entonces, es un no trabajamos en la misma direc-
gusto... ción, no formamos a nuestros hijos
Luego del catecismo me fui en correctamente; en la yunta no im-
busca de John. La pasé en el tractor porta cuál es el “jii, o el usa”, lo im-
arando bajo la guía del maestro; una portante es que este siempre parejo...
nueva sensación de placer y triunfo no debe existir un burro de carga,
amalgamaron una felicidad descono- otro arando. Hombre y mujer son
cida. Deseaba con todas mis ansias iguales en la diferencia, sin preferen-
gritarle a todo el mundo y muy en es- cia ni sumisión; esta fue una condi-
pecial compartirlo con mi tío perdido ción no cumplida en nuestro matri-
por varios días. En la noche durante monio con tu madre. La diferencia
la sobremesa lo comenté con mi pa- de nuestras culturas, la mía de
dre. Hoy a los 70 años, valoro su res- oriente donde fui educado y criado y
puesta: la cultura de tu madre educada aquí
-¡Es la felicidad del deber cum- nos llevaron al fracaso. Tus herma-
plido, junto con los actos de sabidu- nas mayores y vos son los grandes
ría adquiridos; perdedores en esta historia, pero
-¿No te molestas si te hago una cada vez eran más desparejos nues-
pregunta muy delicada que me tiene tros caminos; si no labras y cultivas
intrigado? recto no es buena la cosecha igual es
-Pregunta hijo, estamos solos. la formación de los hijos, no existe
-Te veo tan feliz en tu nuevo ma- triunfo si no formas a tus hijos en su
trimonio ¿Por qué no con mi madre? trinidad sin preferencias ni descui-
¿Fue mala? dos.
-No pienses así, tu madre es una -Interrumpo...
mujer admirable, pero nunca nos en- -No mamá, usted no interrumpe
tendimos. El matrimonio es el estado jamás, debe saber que si soy feliz,
ideal, si ambos en la pareja marchan
47
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
gran parte de esa felicidad se la debo Me senté en el mentidero (en to-
a usted. das las casas del pueblo entre los 2
-Un momento hijo no terminé. horcones al frente de la puerta, tie-
-Si papá. nen colocada una madera a 70 cm. de
-Deben crecer mente, cuerpo y altura; allí se sientan las visitas oca-
alma juntos para poder encontrar la sionales, pasan momentos de char-
felicidad. Para ello el requisito indis- las, llamadas los mentideros), char-
pensable es la pareja unida en todo y lamos un momento y luego fuimos a
por todo, encontré la felicidad dar unas vueltas en la plaza. En un
cuando entendimos la necesitad de banco con un grupo de amigas char-
matar el “yo” dándole la vida al “no- lando, al pasar la vi, estaba la tía En-
sotros”. Con Betty tenemos mucha gracia y en la segunda vuelta me
suerte; lo hemos conseguido en me- llamó:
nos de 4 años, otros no lo consiguen -¿No ves a tu tía?, venga mi so-
jamás, donde existe el egoísmo no brino.
existe la felicidad, el sentir tus sufri- -Espérenme por favor, no me de-
miento nos ayudó a comprender lo jen.
que no queremos, lo mismo para tus -Siéntese mi hijo, charlaremos.
hermanitos. -Ya puedes salir hijo. -No puedo tía, me esperan mis
-Gracias padre, mañana regreso a amigos en la próxima vuelta charla-
clases y en la noche les informaré so- mos todo el tiempo.
bre las paltas, ahora debo charlar con -Te espero, chau.
el Ingeniero, acordaremos el pro- En la vuelta siguiente el banco
grama de trabajo para mañana; cami- estaba vacío, yo venía con temor y
naremos lo arado para conocer la ca- fui aliviado; nos despedimos y me
lidad de textura del suelo, para elegir fui a dormir, no salía de mi mente el
el lugar de las futuras plantaciones recuerdo de mi primera “noche de
de paltas. Me esperan, chau, hasta amor” con todas las escenas pasando
mañana, le dije. por mi mente; sin quererlo me sentía
Al salir, sentados en la banca, al excitado, sentía en mis manos el re-
lado de la puerta me esperaban mis cuerdo de los pezones de sus pechos
amigos. duros y sedosos... Me levanté fui al
-Ya nos íbamos te tardaste, me baño y con una ducha fría recién
dijeron. vino la tranquilidad a mi cuerpo y al
-¿Sebas, no tienes padres?, com- fin pude dormir.
prendé que no lo puedes dejar Un tiempo después ¡no sé
cuando te está hablando. cuando! Llegó la pesadilla a mis sue-
-Olvidemos la espera, te com- ños, un monstruo en forma de mujer
prendemos. me dejaba sin aire para respirar, mis
-A esta hora ¿caminamos o se- pulmones querían reventar, la deses-
guimos sentados? peración me dejó sentado en la cama,
-Sentate.
48
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
regresó el drama de la noche de pa- dos, no se preocupe joven se apega-
sión y angustia; la gloria del primer ron a la cama, una a cada lado, lo
orgasmo, sentí la hora de la muerte mismo les pasa a sus hermanitos, co-
por asfixia en el beso y el abrazo de menzaron rascándome la cabeza, no
nuestras lenguas... seguía sin dormir sé cuánto tiempo estarían, dormí tan
en busca del sueño perdido, me le- profundo que al otro día me desperté
vanté, salí del dormitorio y comencé con el ruido de las tazas y charlas del
a pasear por la galería, llegué a la es- comedor. Ingresé al baño, me bañé,
quina torciendo a la izquierda llegué una vez vestido fui en busca del
a la otra esquina. La casa tenía un pa- desayuno, al llegar preguntaba
tio interno rodeado de galerías que mamá:
daban acceso a las piezas, torcí nue- -Que pasó Vicenta, las encontra-
vamente a la izquierda caminé unos mos durmiendo apegadas en la cama
pasos en dirección al dormitorio de de Luchito...
mi padre. Las dos empleadas dor- -El joven no dormía le respondió,
mían en sus camas tendidas en el trotando en la galería nos despertó,
suelo del corredor, regresé por el cuando se acostó fuimos, lo hicimos
mismo camino al dormitorio, el dormir como a sus hermanitos.
sueño no llegaba aún; seguí, pasé la -Está bien.
puerta al comedor en la otra esquina, -Buen día ¿y papá?
torcí nuevamente, llegué por el otro -Se fue al trabajo, tome su desa-
lado en donde dormían las alzadoras yuno que te vas vos también...
de mis hermanitos; doy la vuelta -Chavisita, mañana nos iremos a
para regresar y una mano aprisiona la escuela que hoy no puedo.
mis tobillos, intento saltar por la sor- -Ella se fue llorando.
presa, hay el temor..me sostiene más -Déjela mi hijo, que ya le pasará.
fuerte. -Bien, usted sabe que no puedo...
-No se asuste joven, me dice la provecho.
tranquila voz de Vicenta, -me de- -Vamos niño estamos retrasados,
vuelve la calma; ¿qué tiene? termino Sebas y nos vamos.
-Ay Vicenta, es una pesadilla que Emprendimos camino a la finca,
no me deja dormir. Aurelio con Irepi, el marido de Vi-
-Caminando no regresa el sueño, centa, nos esperaban con un montón
corra y se cansará y dormirá como de estacas de madera de unos 1.50
sus hermanitos. metros con una punta afilada, en el
Salté por encima de su cama, co- otro extremo pelado. Marcamos el
mencé a correr, di la vuelta y al lle- ingreso a la propiedad con una ave-
gar a su cama, salté nuevamente así nida de paltos con una separación de
continué varias vueltas, el cansancio 10 metros entre filas y ocho entre
llegó junto con el sueño. Me acosté plantas de cada fila. Al lado derecho
y comencé a las vueltas, entraron las de la avenida teníamos estaqueadas

49
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
10 filas con 15 estacas cada una, pa- Y en la esquina de la plaza: -Va-
ramos y Sebas le dice a Aurelio: mos Orlando, pasemos Chueco, al-
-Consigan otras 300 estacas, nos morcemos juntos.
avisan cuando estén listas para con- -Otro día gracias.
tinuar, nosotros veremos tu planta- Tomando nuestro cafecito luego
ción de vid. Pasado el día, regre- del almuerzo, pregunta mi padre:
sando a casa, pasamos por una vieja ¿Por qué le pidieron el letrero a
construcción. Chueco?
-¿Y esto? -¿No le gusta señor?
-Eso, ingeniero si quiere ver, -Te explicaré: Algunos pueblos
tiene cubas, gabetones, y todo lo ne- árabes le llaman “Camino a la Glo-
cesario para hacer vino. ria” a lo que tú le llamas “vida”. Pue-
Entramos y después de ver una des buscar la “gloria” material para
parte salimos, de regreso. Teníamos satisfacer la vanidad o la “gloria es-
recorrido gran parte de la avenida, piritual” para compartirla con el altí-
nos encontramos con mi padre y simo.
unos cuantos amigos, señalando las -Me gusta, así se llamará; otra
estacas, pregunta uno de ellos: pregunta Sebas: ¿qué motivo impide
-¡Y esto; ¿los gringos, siembran llegar con la plantación de paltos al
estacas? pié de la loma?
-Ay tío mejor es callar y no ha- -El tipo de suelo señor, las esta-
blar burreras. cas marcan el terreno arenoso, más
-Respete a su tío mi hijo, es el adelante es arcilloso apto para la vid;
hermano de tu madre. aconsejo trasplantar una parte de vid
-Tan Gutiérrez como vos, so- en producción a esta parte de los
brino. ocoroses; adelante deben ser 4 hec-
-Así es tío, pero eso no es motivo táreas, poner 2 hectáreas, reduciendo
para burlarse de quien sabe más que el espacio entre surcos a dos metros,
uno. en lugar de los 4 metros. Menos es-
-Calma Lucho, te estás metiendo pacio, un costo de mantenimiento
en líos. menor con la misma producción.
-Disculpe Ingeniero, este viejo -¿Es necesario Ingeniero?
burlón no tiene importancia. -Paseando los viñedos con Lu-
-Señor, esto que usted ve, es la cho, hicimos un promedio de su pro-
futura plantación de frutales con su ducción de 2.5 kilogramos por plan-
avenida de ingreso ¿qué nombre le tas solamente en la de vino, nos da
pondrá? -“CAMINO A LA GLO- 10.000 kilogramos; este tipo de uvas
RIA”, si usted es tan amable, ¿puedo producen de cada 1.000 kilos 800 li-
confeccionar el letrero? dice mi tío. tros de jugos; necesita poner en con-
-Gracias señor... diciones 6 toneladas, en su bodega es
-Los amigos me llaman el
Chueco.
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
fácil elegir dos toneles de fermenta- tor fannall, de 23 hp. efectúa el tra-
ción, 3 gabetones para extraer el jugo bajo equivalente de 6 yuntas en el
de la uva... arado y 10 en siembra con una sem-
-¿Sabes de fabricación del vino? bradora de 3 hileras; con bueyes, una
-Si es necesario, en su época de yunta abre el surco en el cual echa-
vendimia puedo ayudarlo unos días, mos la semilla, otra yunta tapa la se-
ustedes por intermedio del comando milla, es decir 2 yuntas por hilera
me llaman, vendré en febrero, fecha con un promedio de 2.5 km/hrs.
de transplante de los paltos. También Nuestro tractor a una velocidad de 5
organizaremos el club “4 eses”. km/hora, hace 3 hileras además po-
-¿Y eso? Pregunto demos regular nuestra máquina: de-
-Te explicaremos en la tarde, lo jará caer entre 2 a 7 semillas de maíz
traes a Chichín y todos los amigos por metro lineal.
que deseen. -Nosotros ponemos, cada 4 semi-
-Don Felipe, analice lo del tras- llas de maíz uno de cumanda y cada
plante de la vid; otra ventaja es el 10 una de zapallo. Su máquina ¿tam-
riego, al tener los surcos más unidos bién puede?
se humedece todo el terreno aumen- -Lo veremos cuando llegue la
tando la humedad, le proporcionará ocasión por ahora veremos arar pri-
más tiempo de un riego y el otro. mero. Chichín en la cabecera, la ter-
-Tengo el catecismo ¿me discul- minación es despareja, dos o más pa-
pan? La próxima semana es la última sadas son necesarias para emparejar-
de preparación para la comunión, los las.
mismos días que faltan para la fiesta -Comienza aquí y vas al final del
del patrono. Haremos un repaso el arado con una línea recta regresando
jueves, así los que tienen suficientes al punto de partida, ya comienza ¡jó-
conocimientos se confiesan el vier- venes no toquen las estacas! Son
nes para el sábado recibir la eucaris- marcas indicando el lugar donde es-
tía. tarán los pozos para poner las plantas
Con un bullicioso grupo de com- de palta, ustedes ven el lugar que
pañeros llegamos a la finca. Sebas y pronto será una de las plantaciones
John miraban incrédulos a sus futu- más grandes de América, con 4 o 5
ros miembros del club “4 eses” ¿qué mil plantas, no existirá otra igual.
significa?: Esperemos ver hecho realidad, el
-Servicio, Solidaridad..., si les sueño de Don Felipe, de convertir a
enseño hoy todo perderán el interés; Charagua en el paraíso de las pal-
seguro no vienen más, don Chichín tas... acelera el tractor para comenzar
por favor lo hace funcionar el tractor el trabajo, todos miramos en esa di-
y se viene con él, lo esperamos... rección, el arranque brusco casi de-
mientras les daré una breve informa- rrama a su pasajera que, agarrada del
ción sobre esta máquina: es un trac- cuello hacía desesperados esfuerzos
para no caer por detrás del tractor,
51
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
Valentina, parada a un costado, mi- frente perdida en el horizonte no ha-
raba la escena entre apesadumbrada cía hincapié en mi sacrificado tío, me
y divertida, era su prima hermana en aproximé.
tan ridículo trance; minutos antes -¿Te ayudo Chichín? Tanta era
una pequeña discusión por el puesto su furia que ni se dignó a mirarme.
de acompañante en el tractor; es que Me aproximé al lugar de su pasajera,
solamente “una” podía aspirar a te- creo mejor te bajas y vas caminando.
ner el título de primera mujer que -Estás loco... tienen que bajarme
subió a un tractor y vio arar desde donde subí, es lo justo.
arriba. Pensativo veo ahora lo ri- Miro al tablero, aproximo mi
dículo de esto. mano y le doy contacto, funcionando
Yretay pasó una tarde completa el tractor, me mira las manos, tío me
agarrada de mi hombro extasiada mi- indica:
rando el continuo movimiento de la -Sube.
tierra roturada, sin pensar si fue la Lo hago, pongo retro, retrocedo
primera o la última, solo extasiada un espacio, acomódate bien no te
¡que diferente cultura! Faltando confíes le dijo a la dama; no escucha,
poco para llegar al punto de partida por las dudas cruzo una pierna detrás
se apagó el motor del tractor. John de ella y arranco, caminamos poco
fue para ver lo ocurrido, regresó me- trecho, llega el arado donde se paró
neando la cabeza. con Chichín, chocan en el lugar del
-¿Que fue? Pregunta Sebas cual retrocedí, medio frena brusca-
-Su acompañante lo obligó a dis- mente; mi pasajera pierde estabili-
minuir la marcha al llegar a la zanja dad y cae sentada en mi pierna, que-
dejada por el arado, cuando estába- dando empalcada35 en la misma, el
mos arando todo el terreno. caminar nos ocasiona un suave vai-
-¿Por qué lo hizo? vén, llegamos nos bajamos, lo hago
-Ella se lastimaría al pasar, solo primero, levanto las manos, las re-
por eso chaza y de un ágil brinco termina la
-Y tiene algún blasón. jomada...
-¿Es un dignatario un general o John continúa arando mientras
qué? Sebas continúa charlando con noso-
-Somos nosotras las tres y es su- tros sobre cómo organizar dos gru-
ficiente, lo increpa una de las herma- pos: uno con Chichín y otro con-
nas. migo.
Chichín echaba gotas de sudor Ellos serán los organizadores
con la manivela intentando poner en luego ustedes, eligen sus líderes; una
marcha nuevamente la máquina, su de las chicas pregunta:
pasajera firme con la miradla al -¿Aceptan mujeres?

35
Montada.
52
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-Si usted lo desea, con su compa- todos conformes en un momento se
ñera podemos intentar y veremos el formaron los grupos. Mañana a la es-
resultado, son bienvenidas todas las cuela y por favor Nany hace nuestra
que quieren participar en el club, ma- lista del grupo
ñana nos vemos en la escuela, Chi- -¿Por qué yo? Dijo ella, por ser la
chín y Lucho pueden formar sus gru- de mejor letra, le respondo.
pos con un mínimo de 10 y un má- Tenemos organizados los 2 gru-
ximo de 20 por grupo, hasta mañana pos. Tres días de continua formación
jóvenes. de líderes y también de trabajo en los
Las cuatro chicas se organizaron: almacigos de verduras de mi padre.
las dos Barrancos menores con Chi- Llevaron también trasplantes para
chín, la hermana de Chico Chico y colocar en sus huertas. Todos sentía-
Chico Grande, con la Barranco ma- mos fructíferos esos días pasados en
yor en mi grupo; Calixto Barranco a espera del próximo retomo de nues-
solicitud del interesado en el otro tros amigos Americanos para conti-
grupo; si les parece la suerte decidirá nuar aprendiendo nuevas formas de
con una moneda el saldo del grupo; agricultura. .

T odos en la iglesia nos encontrá-


bamos en el esperado y temido
¡día de confesión! Dos maes-
tros nos hacían pasar al confesiona-
rio por orden alfabético, García,
batalla, y de mudos testigos: Terra-
zas, Vargas, y todas las mujeres que
por ser mujeres serían las últimas...
pronto la barra dividida en dos a los
gritos de guerra: Chichín, Luchín,
Gonzáles, Gutiérrez, tío Chichín se hicieron volar a las palomas de la cú-
acerca al confesionario con su cara pula y entrar trotando al señor direc-
de triunfo mirándome; un mosquito tor con los maestros que sentados en
vuela sobre mi cabeza con su mo- los bancos de la plaza, esperaban pa-
lesto zumbido; me mantengo un cientemente el fin de la confesión de
tiempo inalterable, sintiendo el ruido los angelitos. En la feroz pelea
sobre mi cabeza, cada vez más mo- mientras el santo padrecito ter-
lesto y yo más inquieto, levanto un minaba de vaciar el agua bendita del
brazo y comienzo a espantar al in- baptisterio, sin poder aplacar a los
truso el momento en el que mi tío endemoniados combatientes, llegó a
Chichín regresa de su confesión. Mal la escena mi futuro padrino, el “tío
interpreta mis gestos, apurando sus Chueco” con el clarín de la paz en
pasos me ataca, comienza la última ambas manos, con las cuales agarró
de una oreja al hermano menor y con
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
la otra al sobrino y futuro ahijado, si y su voz próxima a la locura ex-
nos permitían continuar... salimos clamó:
hacia la puerta del templo en puntas -¡Mira!
de pié para no dejar nuestras orejas La feroz lentamente se aproxima
en las manos del pacificador. Nos es- volando al ras del suelo, con un es-
peraban listas las manos en alto del calofriante gemido dándose la
profesor Chávez y el Director. Chi- vuelta, el tío:
chín, más audaz se agachó esqui- -¡No... no puede ser!
vando al director, yo en cambio, su- -Con voz próxima a la histeria
cumbí en las manos del profesor, que respondo sí, es...
con mano firme condujo a mis orejas Chichín que siempre es quien
erguidas y el maltrecho cuerpo a las toma la iniciativa en todas nuestras
puertas del colegio; el anciano pa- aventuras, esta vez se dirige camino
drecito allí nos dio alcance y ex- al peligro, contraataca, en su teme-
clamó: roso caminar, sus pies se enredan en
-¡Chávez! Suéltalo o te agarro de lo invisible; escuchamos un macabro
tus orejas a ti. Es día de amor y de gemido, acompañado del pedido de
perdón para estos jóvenes, Heriberto auxilio del tío; está siendo atacado
deja a estos muchachos, yo los llevo por defenderme, corro directo a la
después de 6 minutos. enemiga y de un feroz puntapié
-Padre, tengo que sancionarlos. vuela rumbo a la pared del frente
-Bueno, pero sin tocarlos. acompañada de un escalofriante la-
-Estaré en 6 minutos en su iglesia mento; el fantasma de la calavera
padre... y ustedes dos al cuarto de la sale en veloz retirada rumbo a la
calavera, hoy conocerán su enojo: puerta la cual es violentamente
nos miramos, con pasos lentos em- abierta por el fantasma, que en su
prendimos el recorrido al temido al- vergonzosa huida cierra la puerta a
bergue de la ciega. Antes de entrar sus espaldas. Algo sigue arrastrán-
nos decía el profesor: en su anterior dose en veloz huida por el suelo
castigo, la calavera no estaba resen- rumbo a la puerta, choca en ésta y
tida con ustedes, ahora si está por lo vuelan pedazos por todo el cuarto; en
que hicieron ustedes en la casa del el patio del otro lado de la puerta
señor, la tienen muy mala, ya lo ve- llega un grito de dolor y lamento.
rán... y empujándonos al interior ce- -¡Me cagué carajo!... la voz del
rró la puerta en nuestras espaldas de- portero...
jándonos entre el temor y el pavor. Con las piernas paralizadas por el
Chichín agarró mi mano con és- dolor, eran vanos los intentos por ca-
tas no muy decentes elucubraciones, minar. Vino el tío en mi auxilio, el
¡Está muerta! No se mueve ¿cómo también rengo; éramos dos heridos
podrá castigar?, retiró bruscamente por la feroz batalla, apoyado en su
la mano de un fuerte tirón llevándola hombro con la pierna derecha enco-
hacia arriba y con el dedo extendido gida caminamos para retiramos por
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
la puerta, y allí dejamos a la justi- acontecimiento me da un nuevo res-
ciera repartida en mil fragmentos, piro y plazo para ver cómo actuar en
como resultado del desesperado pun- la confesión...
tapié. Imposible comer con tanto dolor,
Salimos, los fuertes rayos del sol contemplando mi cena me encontró
cegaron nuestros primeros pasos que el padre Nazario.
dimos con las manos sobre los ojos -Buenas, terminas tu cena y re-
maltrechos, doloridos, la viva ima- greso.
gen de los heridos después de una fe- -No cenaré padre, pase usted.
roz batalla, el dolor del pié aumentó, -No te preocupes hijo, te espero
nos detuvimos... el Director con su y luego te confiesas y salimos ya que
socarrona sonrisa, se aproxima y tenemos mucho por conversar, me
pregunta; dijo; Lo que pasó es que la calavera
-¿Qué fue? la movía tu amigo Melquíades el
-Lo interrumpe la angustiada voz portero, una pita en una mano ama-
del portero ¡mi dedo, mi dedo! Con rrada al pulgar llevaba la calavera, al
su mano en alto mostrando su despe- otro lado una pita en el dedo de la
llejado dedo, un compañero de entre otra mano, la hacía retroceder tu
los varios curiosos presentes, apun- amigo Melquíades ubicado tras un
tando a mi pie, decía: miren, miren, cajón.
el diente en su pie de Lucho, lo mor- Chichín dijo: no lo vimos,
dió la calavera. Fuerte bien prendido cuando fui me enredé la pierna en
en el zapato un colmillo de “la justi- uno de los hilos, eso le sacó el pellejo
ciera”, mudo testigo de lo ocurrido, del dedo; por el dolor salió corriendo
hizo brillar la imaginación de los amarrado el dedo, con la otra pita te-
presentes. Chichín tan curioso como nía la mandíbula a rastras, pasó con
siempre aprovechó, pues todos lo el cordel, pero en la otra punta se
miraban, de pie desafiante con su atoró despellejándole el otro, ¡el
colmillo, regreso al cuarto de la ca- muy maldito;
lavera y luego de una minuciosa in- -Tío, no hables así mañana co-
vestigación regresó risueño, para de- mulgas no te olvides...
cir: Al otro día sentado en el sillón
-¡Después te cuento! del señor obispo compartí la misa y
Me llevaron al dispensario: el la primera comunión con todos mis
doctor luego de curarme me indicó amigos, después pasamos a la casa
reposo, no debe moverse, tiene el parroquial, tomamos un delicioso
dedo gordo fracturado. Con lo que chocolate con buñuelos paraguayos.
me salvé de la confesión. Tenía duda Sentado en el sillón del monseñor
de si me perdonan o no por lo de la contemplo el partido de la pelota de
noche con la tía que me tiene amar- trapo disputado en la calle. El mon-
gado o más bien angustiado. Este señor a un costado y el padrecito al

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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
otro, comentan el desarrollo del par- -¡Lo reteó!36 “Sacrilegos han
tido, en eso se bajan una grada: profanado el cuerpo de un cristiano,
-Cuenta cómo te lastimaste el quitando su calavera lo han cerce-
pie, me tienes toda la mañana sin mi nado, es un pecado” y los miraba fijo
asiento me dijo, lo menos que debes apuntándoles con el dedo índice.
hacer es contarme todo... Con tal ar- Tembloroso el Director dijo: -
gumento no es posible el silencio y Cuando llegué a la escuela ya tenían
así se lo conté sin omitir detalles. la calavera ¡no tengo la culpa mon-
Escuchando con atención asentía señor!
con movimientos de la cabeza partes -Bien hijo mío, esta vez no tienes
de la narración; florecía en sus labios culpa pero si vuelve a suceder será tu
una sonrisa picarona, un paso atrás culpa y los culpables serán castiga-
subió el nivel superior, buscando con dos, no lo olvides.
la vista hasta encontrarlo y lo llamó: Los compañeros llaman a Chi-
-Gutiérrez, ven acércate y llama chin que tuvo que ir y dejar media
al Director por favor. información en el momento en que
Me dejó preocupado. Poco des- salía el Director y el Profesor se-
pués retomó el tío con su sonrisa pi- guido por el señor Obispo, a paso
caresca de siempre: apresurado continúa recomendando
-Ya viene Monseñor. Me indica prudencia a sus contritos feligreses.
al Director y no fue más. Sentado en la cama sobre una al-
Lo conocía tanto, ¿trama algo, mohada, por recomendación del
pensé?, llega y el señor Obispo los doctor, el mismo que ordenó mi tras-
invita a entrar: lado de la puerta de la casa parro-
-Pase, es necesario que me escu- quial. Al ver mi pié hinchado diag-
che, -estos continuaron seguidos por nosticó que se debía a haber estado
el tío en forma disimulada y no se mucho tiempo sin reposar. Almor-
dieron cuenta o se hicieron los cie- zaba sin ganas, más por obligación.
gos... Poco después en sigilo salió el Vicenta exigía que coma, me decía
tío, el padre Nazario interesado en que si no lo hacía no sanaría. Cuando
los juegos no lo vio, regresó y en voz entró la esposa de papá, a quien ya
baja me contó: respetaba y quería como madre por
El padrecito lo interrumpe di- el cariño con el que me trataba, me
ciendo, -cuenta no más que yo miro dice:
el partido, no los interrumpiré, tran- -Bueno hijo, te traigo novedades,
quilo, cruzando los brazos sobre el te dará apetito no lo dudo, pasa no te
pecho, con la mirada en alto se de- quedes fuera, llama,
sentendió... al verlo Chichín me dice Entra la Profe ¡tanto tiempo sin
al oído: verla!, con su sola presencia me pasó

36
Lo riñó.
56
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
el dolor de pie, me regresaron las ga- ducción, la iglesia es estricta y tene-
nas de comer, y más aun cuando me mos nuestras normas, este es el mo-
dio las noticias del viñedo. Bueno, tivo de nuestra visita.
primero mire esto, dijo y metió su -Nos pusimos a hablar sobre la
mano en su seno sacando uvas que educación en el pueblo
las puso en mis manos. Estaban tan -Tienen aquí en el pueblo, un mal
crecidas, casi ya por madurar, es así concepto de lo que es educar, dice mi
como está casi todo el viñedo, sin padre.
problemas los dos primeros surcos -Es la formación profesional re-
bien cargados, uno con muy pocos cibida en la normal rural superior de
racimos y otro bien o con casi nada la ciudad de La Paz, con disciplina y
y en las mismas condiciones. Dos rigor sacamos estudiantes de lo me-
buenos y otros malos hasta cerca del jor, este es reto. Dos años atrás me
final, los últimos surcos bien parejos hice cargo de la dirección de la es-
todos. Las uvas blancas está más chi- cuela, sólo encontré indisciplina e
cas, pero los racimos cuatro veces ineptitud... Sólo tenemos primaria,
más grandes, usted los conoce bien, nuestros discípulos tienen la obliga-
seguro tardan más en madurar. En ción de continuar sus estudios en la
efecto es así ¿y vio los nuevos almá- ciudad de Santa Cruz, es donde tie-
cigos?, sí una parte pegada a la loma nen la única oportunidad. Es el único
fue atacada por los sepes, unos 30 colegio secundario en el departa-
metros en dos surcos ya fueron con- mento y nuestros alumnos por ser
trolados por Aurelio, no se preocupe, provincianos están limitados en la
no fue por descuido, ya que estos ba- gran ciudad. Para triunfar ellos de-
jaron de la loma en una noche, fue ben estar mejor preparado que sus
todo el ataque. otros condiscípulos, lo cual sólo con-
-Y ¿donde fue el pleito esta vez? seguiremos con una estricta disci-
Pregunta el padre Nazario quien en- plina impuesta con rigor.
tra en compañía del señor Obispo. -No es correcto y para demos-
-No fue pleito padre, fue un ata- trarle necesito de su apoyo Padre Na-
que de los sepes al viñedo. zario. Si usted me ayuda hablando
-Y ¿cuándo tomaremos vino de con el maestro y el director de mi
tu cosecha? me dijo mirándome. hijo Luchito, Chichín y unos más los
-Este año será el primer ensayo. formaría en mi casa, haciéndolos es-
-Si tienes buena calidad y canti- tudiar e implantando disciplina con
dad, el obispado necesita 1.000 litros sistemas pedagógicos, aprendidos en
por año, ya que ese es el consumo de Sucre, es más importante la Autoes-
todas las parroquias. Este año inten- tima, valorar sus aptitudes, el amor a
taremos abastecer sus necesidades, su responsabilidad, es el único ca-
el padre Nazario fiscalizará su pro- mino al triunfo, con honestidad para
alcanzar la felicidad apoyado en las
leyes divinas de nuestra iglesia; él
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
como hermano mayor será el ejem- banco no distingo las divisiones de
plo de sus hermanos menores. los surcos. Tan embobado estoy, no
El día lunes Chichín llegó con siento la presencia, una mano en el
sus cuadernos, todo anotado lo que hombro me libera de los sueños, que
teníamos por estudiar en casa. Dice llevándome a un nuevo embrujo de
el profe que nosotros tenemos que los ojos negros y risueños enmarca-
estudiar en tu casa, mientras sigas en dos por una picaresca sonrisa bur-
cama me dijo. lona, ¿en qué piensas? ¡Regresa!, te
Toda la semana nos pasamos es- espero; una presión ligera de su
tudiando en casa y el sábado vino el mano me pide bajar. Sentados ya...
Doctor a sacarme la venda del pié ¡jamás pensé en tanta belleza; ¡que
para revisarme; en tres o cuatro días regaló para el espíritu; Nunca olvi-
puedes caminar y en otra fíjate a des Lucho, la tierra, si la tratas con
quien pateas y como lo haces. Pasan amor y respeto, te devuelve con in-
los días con esporádicas visitas de la tereses ¿recuerdas?
Profe charlando siempre lo bien o La primera siembra fue regada
mal de los viñedos. Veinte días pasa- con tu sudor, lagrimas y sangre, pero
ron y recién me autorizó el doctor sa- recompensó todo ese esfuerzo. Al
lir caminando una semana de cami- vaivén de nuestras manos unidas re-
nar por las aceras de la plaza. tornamos y cerca del comienzo del
Llegó el momento de los exáme- viñedo, la Profe me llevaba de la
nes finales. Chichín, Ocalo y yo fui- mano a unos metros de los surcos
mos los primeros entregando los murmurando ¿se olvidó de sus uvas?
exámenes escritos y luego resultaron A tu lado sólo pienso en vos, no di-
ser los mejores en notas. Para desem- gas eso, yo también me puedo olvi-
patar y definir cuál era el mejor del dar de todo, y una yunta de locos
curso nuevamente nos llamaron al hace sólo locuras; apartando las ho-
desempate, hacían preguntas muy jas, recién contemplo los apretados
continuas. En 3 días más recogíamos racimos de uvas, saco del bolsillo
libretas. una cortapluma compañera que no
Me fui directo a la finca. En un olvido, pues todo viñatero la nece-
cupesí a orillas del camino un có- sita, comienzo cortando las hojas
modo banco proporcionó un mere- para amarrarlas; dejando los racimos
cido descanso a mis cansadas pier- expuestos al sol, así vamos más de
nas, pues luego del obligado des- una hora y no llegamos a los 20 me-
canso por la fractura del dedo de un tros, el lento avanzar me asusta, la
mes, estoy aún débil. Sentado mi- voz de la Profe me detiene: fíjese
rando a derecha e izquierda contem- tiene ramas sin racimos, ensayemos
plo admirado un panorama que no cortándolas. En la siguiente cepa le-
soñé, una bella alfombra verde de vanta un gajo y dice ¡córtelo! Así lo
singular belleza de la pequeña eleva- hago y continuamos en esta planta,
ción del terreno. En el lugar desde el la tenemos lista en la mitad del
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
tiempo. Nos regresamos recogiendo -¿Conque lo esperamos al inge-
las ramas, llegamos junto con mis niero Sebastián?, tú verás lo que ha-
padres y hermanitos en la camioneta; ces y como lo haces...
ellos al vemos cubiertos por las ra- -No es justo, más correcto es que
mas paran y preguntan: usted o yo nos encarguemos de los
-¿Qué hacen?, almorzamos y vos gavetones, para extraer el mosto, los
seguís paseando me dijo mi padre; depósitos de fermentación y las cu-
-No, trabajando papá, no pa- bas de maceración y el otro de hacer
seando, le respondí. un galpón entre el segundo y tercer
-¿Y esas ramas? No juegues con patio pues la finca no ofrece como-
las plantas. didad ni seguridad para los trabajos
-Usted cada vez peor de la mente de la vendimia.
que se va antes de viajar. Si tiene -Hijo, harás el galpón, yo te
mucho follaje el viñedo, es necesario ayudo con el equipo de la vendimia.
sacar un poco, los racimos nece- -Bien papá me deja la camioneta
sitan sol para madurar. Esto fue en su unos días.
presencia y esto hacemos, baje y vea -También el techo del galpón
le dije; fue caminando, intenté se- será de bagazo de caña de azúcar;
guirlo. contrata la gente necesaria, si es ne-
-No hijo, sube y dale vuelta a la cesario un buen capataz.
camioneta, está mal parada, nos da el -Me acompaña mamá, en Ovaí
sol. Así lo hice, ya llegaba mi padre recién terminaron la molienda, nece-
de regreso con una cara de satisfac- sito su apoyo para encargar el ba-
ción contagiosa, aproximándome gazo necesario.
pregunto: Camino a Ovaí pasamos por la
-¿Cómo ve usted padre su vi- molienda de don Eulogio Heredia
ñedo? quien terminaba la construcción de
-Charlamos mientras almuerzan, su galpón, nos acercamos y pronto
suban me dijo... nos pusimos de acuerdo en precio y
Comíamos en silencio; llega condiciones, le pagaré por obra ven-
papá al finalizar nuestro almuerzo; dida, encañará y tejerá el bagazo por
ataqué yo primero: m2'.
-Como usted vio, pronto comen- -Mi compromiso es que en 15
zamos la cosecha. días entregaré el armazón, con cum-
-Fui al depósito de las uvas, ¿en breras, costaneras, tijeras y todo listo
cuales envasaremos el mosto? para encañar y tejer el techo de ba-
-Yo no sé, pero tengo curiosidad gazo. Es decir, en un mes a partir de
en aprender. la fecha trasladaría el equipo para
-Pues parecería justo que usemos comenzar la vendimia.
los cálculos de Sebas en la produc-
ción.

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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
Regresé y fuimos a casa de Aure- -Y ¿ustedes no quieren trabajar?,
lio y le expliqué la urgencia de con- le pregunté.
seguir madera para la construcción -Nosotros, los hermanos Tem-
del galpón... behuaso podemos parar los horco-
-Si me lleva a Machipo, podemos nes, subir cumbreras y costaneras,
cumplir. Con Limón y sus 2 hijos asegurar las tijeras, asentar el techo,
puedo cortar toda la madera, y en 3 quinchar las varas para las paredes,
días usted puede comenzar el trans- después rellenarlas, revocar y enlu-
porte. cir.
-Aurelio, me preocupa la madera -¿Y esto es todo?
recién cortada, pronto se cimbra. -No joven, -otra vez Aurelio, -
-No será así joven, todavía no ha falta el güembé para amarrar o con
llovido y por eso no ha subido la sa- alambre o perotó
bia, al final de la época de sequía la -Y ¿no será mejor amarrar con
madera no se tuerce si tumbamos los alambre?
árboles ya; en cañón de baracas tene- -No lo es joven, el alambre ape-
mos toda la madera necesaria, la ro- gado a la tierra se oxida y se suelta
deamos con los bueyes a la loma y en pocos años. La iglesia de Chara-
en la carreta o en uno de los camio- gua que están tumbando, fíjese en la
nes de su papá los bajamos hasta la inscripción sobre la puerta de in-
casa; vamos a Machipo. Antes del greso. Es de 1816, tiene 130 años y
anochecer nos fuirm .> y llegamos el perotó con el que fue amarrado,
con el tiempo justo, Aurelio fue en todo el quinche está seco; en la casa
busca del personal necesario; al re- del joven Chichín, su abuelo hizo
greso intercambiamos ideas: los tres construir un galpón para su cocina en
Limón, el padre y sus dos hijos, más menos de tres años comenzaron a
los hijos Baritua, cortaban la madera caerse las paredes, me llevaron para
en el cañón de baracas; el padre y los componer; el alambre de amarre está
otros Barituas cortarán varas de soltado y todo oxidado...
wiracupenti, para quinchar las pare- -¿Y mamá les damos anticipo?
des y encañar el techo. -Ya les di hijo me respondió mi
-Cumplimos con la provisión de madre.
materiales ¿no joven? Al día siguiente Aurelio llega
-Falta la paja para el barro del re- con la carreta, trayendo tres horco-
lleno de paredes y la bosta para el ba- nes, los esquineros de la construc-
rro del revoque y enlucido de las ción. Los hermanos Tembehuasu te-
mismas, ¿esto puedes hacerlo vos nían marcado todo el perímetro y co-
Anselmo? menzando las excavaciones llegó
-No joven, esto los hermanos madera para ser colocada a cumplir
Tembecho se lo pueden hacer, me sus funciones.
respondió.

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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
El lugar elegido por los construc- manos entrelazadas atrás, inspec-
tores fue el mejor para la construc- ciona todo el camión, nos cubre de
ción y con el personal trasplantamos miradas, tomo sus hombros y la
los plantines de palto a su lugar defi- obligo a girar dándole un beso en la
nitivo, formamos la avenida de in- frente, en los ojos... la voz de Vi-
greso de acuerdo a lo programado centa apaga la magia del momento:
por el ingeniero Sebas, 300 futuros -¡Vengan a comer!, Vicenta se
árboles; mas el letrero encargado a apega y con ternura baja la falda de
tío Chueco, fueron trasladados en un la Profe, pues la tenía esta, levantada
día, y continuamos en el galpón, a medio muslo, seguro en el nervio-
unos plantaban los horcones y otros sismo ella se la levantó apuñando...
sacaban la tierra del lugar de los -Vaya joven antes que llegue la
plantines, trasladando y preparando señora, -me fui apresurado encon-
el barro del relleno de paredes y trando a mamá en la puerta de in-
otros preparado para el revoque; es- greso del segundo patio.
tos dos con paja traída en burros; y -Vamos hijo tu padre se impa-
dentro del galpón preparaba un ter- cienta (jamás comía si no estábamos
cer barro con bosta de caballo. Este todos), te toca la bendición, es hábito
barro, según mis técnicos guaraníes, no ingerir alimento sin dar gracias al
precisaba 30 días de maduración señor. Terminando el almuerzo, le
para posteriormente enlucir las pare- cuento a mi padre mi intención de
des revocadas y su blanqueo con cal pasar la tarde revisando los viñedos
para terminar. y demás plantaciones.
Al quinto día Baritua padre, llegó -Bien hijo, tú verás lo más con-
a pedir un camión ya que tenía listas veniente...
las varas de wiracupenti (en años de De camino al campo y de paso
guerra se usó esta madera para cons- por el segundo patio veo el camión
truir sus lanzas y flechas, por su du- vacío, me aproximo revisando, noto
reza y calidad). Pasado el medio día los diferentes cortes de la parte supe-
llega la carga, encima de la carga rior, examinando fui interrumpido
llegó la Profe sonriente y llena de por la Profe ¿qué miras?, estas varas
vida... ágilmente está pronto en el le respondo, más cortas da la impre-
suelo, con su alborotada cabellera, sión que le sacan un pedazo mayor,
me aproximo y tomándola entre mis y en las diferentes formas del corte.
dos manos intento doblegar su desa- Aprendes muy rápido y me alegro,
fiante mirada y la aproximo, levanta no he perdido el tiempo con mi
la pierna y con una sonrisa en los la- alumno, efectivamente así es, la an-
bios intenta golpear (más fue una ciana dice que debes saber lo que tú
manifestación que una intención), preguntes, poco más y se terminan
marcha hacia la construcción, la las clases, vamos caminando sin pro-
acompaño un poco retrasado, con las nunciar palabras, revisamos los pri-
meros surcos, los racimos llenos y
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
brillantes dan la esperanza de una lo que le contaré, ahora sigamos vi-
cosecha abundante, vimos salir el sitando lo que falta del viñedo, las
enano con cubas camino al taller uvas blancas están por madurar ¿qué
para su reparación. Pronto el galpón hará con ellas?, Dice la anciana que
terminado y lleno de uva depositar- vienen tiempos muy malos y no
las del vino para su maduración. Dos puede perder un grano de uva. Esta
horas para inspeccionar la mitad, nos es la primera y última, pronto llegan
sentamos en un tronco a la sombra los malditos, no se puede hacer nada,
del cupesí, miro a mis espaldas una ellos llegan y se comen todo. Quedé
alfombra verde que forma la planta- amargado masticando sus palabras;
ción de maíz con una que otra man- encontramos sentimientos de sed y
cha café, donde no fue cubierta aún euforia, por lo visto incertidumbre y
la tierra por las pequeñas plantas; fui pesar por el mensaje de la anciana
interrumpido en mi contemplación por intermedio de la Profe, despacio
por la voz de la Profe ¿no quieres sa- y pensativo mi retomo, sus últimas
ber más de la varas?, cuente le dije: palabras, no puede contar a nadie lo
la familia encargada de cortarla, por que le conté ya que peligra la vida de
muchos años fueron los encargados la anciana y la mía. Llegando a la
de hacer flechas y lanzas para nues- casa ella siguió el viaje, miré ade-
tros guerreros y cazadores, enseña- lante y dos figuras se perdían en la
dos de padres a hijos, ellos saben tra- otra cuadra. El temor y la descon-
bajar en wiracupenti y lo guardan en fianza me obligan a mentir a mi pa-
lugares seguros sin humedad ni sol; dre:
esta plantación de Machipo y la otra -Nos falta perotó para amarrar,
más chica de tu finca, atrás del pan- necesito ir a Machipo en la camio-
teón, como usted lo llama, son cui- neta para traerlo o si no mañana nos
dados por nuestro pueblo, de allí sa- atrasaremos.
lieron todas las flechas y lanzas con -Vaya no mas mi hijo me dijo mi
las cuales nos defendimos en el In- padre, pero no se tarde, lo esperamos
cahuasi, y después de los españoles, para cenar.
sacamos varas para vender, pero es- -Aurelio, Anselmo suban a la ca-
cogiendo lo que sirve en nuestra de- mioneta, vamos a traer perotó.
fensa y para cazar. Toda la gente que -Pero si aún tenemos,
hoy trabaja en tu construcción son -Suban ya les cuento, salimos
los mejores; es una orden de la an- pronto y bajamos a la quebrada y le
ciana que personalmente sean elegi- doy impulso para no plantarnos en la
dos- ¿por qué? le dije,... no sea cu- arena, subimos la cuesta de la otra
rioso por demás... quedé analizando banda y unos metros más adelante
lo escuchado sin hallar razón para la los alcanzamos, los dos malditos y la
confesión tan secreta. No se preo- Profe que en el suelo se defendía a
cupe, pronto sabrá la razón de esto y las patadas. El hijo del corregidor,
con los pantalones abajo le decía al
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
primo, su compañero, agárrala de luego de cenar, una ducha y a dor-
nuevo que de esta no se escapa; ni mir.
cuenta se dieron de mi presencia. Aclarando el día fui a ver la cons-
Agarré un palo del suelo y con él le trucción, el personal está todo traba-
di un fuerte garrotazo en sus nalgas jando, unos llenando con el barro
peladas; desconcertado se dio la preparado y otros siguen amarrando
vuelta con el miembro duro apun- varas, en fin todo marcha bien; des-
tando al cielo, le doy otro golpe pués del desayuno fui a controlar el
cerca del pene, cayó desmayado estado de la uva, regreso con la satis-
apuntando al suelo chorreando baba. facción de ver dos surcos pagados
El otro intentó hacerme frente y le con intereses, solo quedaba esperar
gano la moral con un buen golpe en que madure y a fabricar el vino. Du-
el cuello, lo levanto para dar el se- rante el almuerzo comento con mi
gundo pero emprendió la retirada se- familia:
guido por el socio el cual sobándose -¿Qué harás en la tarde?
los genitales me amenaza: -Iré a revisar los viñedos
-¡No te olvides que mi padre es el -No, dice papá mucho tiempo sin
Corregidor! jugar con tus amigos, ya Chichín te
-¿Lo sé! Y vos sabes que el señor reclamó.
delegado es mi tío, (Charagua es el -Mamá riendo me contó, tu tío
asiento del delegado presidencial del Chichin es un caso especial, lo calló
Gran Parapety y Llanos de Manso), a tu padre diciéndole:
jefe de tu padre. -¡Luchito esta rematado por el
La Profe avergonzada no quería trabajo, necesita descansar! No es la
subir a la camioneta, con la falda y cosa, así dale vos si queres, hasta que
su blusa rota en su desigual pelea, le te acabes, después comienza Lucho,
doy mi camisa para cubrir su desnu- -Tu tío tiene razón, te hemos
dez, ¡vamos!, llegamos al crepúsculo dado mucha responsabilidad. Esta es
y Anselmo fue a la casa de la Profe, tu última vacación completa con no-
regresó con ropa y venía al lado de sotros, la próxima tienes necesidad
una anciana que gesticula y venía ha- de alistar tus cosas para comenzar la
blando en guaraní, al llegar cerca se secundaria en Santa Cruz y cuando
detiene, me mira, se abraza de la regreses de vacaciones seguramente
Profe y se va meneando la cabeza, con nuevas obligaciones, Chichín
las miro irse apesadumbrado por el nos hizo ver lo injusto de nuestro
salvaje intento. comportamiento, vaya mi hijo, viene
-Vamos Aurelio. al té; chau.
-No joven, esperemos que ya Salgo al patio, miro la parra, todo
traen el perotó para llevar. Poco des- cubierto por racimos próximos a ma-
pués entre varios llegaron con sufi- durar, son once plantas que cubren
ciente rosca de perotó, para cargar la todo sin dejar pasar los rayos del sol,
camioneta y regresamos al pueblo,
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
uvas de todas las variedades existen-
tes en la zona. Un silbo en la calle
cambió el rumbo de mis ojos, Chi-
chín con desesperados movimientos
de ambos brazos me llama.
-Ya voy.
-Don Luis.
-Si papá.
-No debes salir sin cepillar tus
dientes (esta recomendación se nos
quedo junto con el maíz cubano y las
gallinas chocas), después de lavar
mis dientes al trote salí, me esperaba
el tío.
-Mira dice apuntando al medio
de la plaza. Tres cabelleras descan-
san en el respaldo del banco ¡va-
mos!. .

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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez

La Casa del Pueblo


– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez

L as dos hermanas Barranco con


la tía Engracia nos reciben son-
rientes:
-¿Qué hacen a esta hora de la
siesta cuando todo el mundo
Nos separa, un pequeño giro y
unimos nuestros labios con suavidad
y ternura, intenta retirarse, paso mi
mano por su nuca, nos unimos, más
intenso el apretón de la mano en el
duerme? cuello, sin pensarlo baja y se detiene
Tía responde: los esperábamos, en su pecho, suave, tierno y pequeño
estas chicas desean saber el sabor de le acaricio el pezón, tía Engracia me
un beso, que mejores maestros que agarra la otra mano y llevándola la
ustedes dos, son los elegidos. Em- introduce en sus senos y con su mano
pujo a Regina y me senté entre las sobre la mía frota esta sobre sus se-
dos, mi tío al otro lado con Felicia nos maduros, ¡que sensaciones mas
pronto entre sus brazos se besan en encontradas! Desafiante, agresivo en
la boca, intento con Regina y ella no la otra, retiro mis manos, un pellizco
quiere abrir los labios, la boca de tía de Chichín me obligó a hacerlo... Tía
Engracia, nos separa, mira Felicia así Engracia nos propone:
es, lo agarra a tío, lo obliga, este abre -¡Vamos al chorro!
la boca y nuestra maestra moviendo -Sí, apoyan las 2 hermanas, -no
la lengua pone su boca con la del tío. tenemos otra opción, rumbo a la
-¿Vio bien? Su tumo: finca paseamos un poco por el vi-
-Venga sobrino ahora soy tu ñedo, las mujeres pellizcando un
maestra, no pienses en tu tía, piensa grano aquí, otro más allá, saben que
en Regina, puso su mano en mi cue- aún no sirven... que diferencia con la
llo, unió nuestra boca, en un apasio- Profe, tantas veces este recorrido
nado beso; me costó separarme, en- pero completo y jamás toco un
tre el embrujo de sus besos, la pre- grano, sólo curiosidad por las uvas,
sión estas, amor a la naturaleza la otra.
de sus manos en mi nuca, fue tan -¿Y ese ruido?
pero tan difícil, su piel desnuda cu- -Es el chorro le respondo, si quie-
bierta con el vestido se desliza sua- ren podemos ir... miran frunciendo la
vemente sobre mi pierna, usamos nariz en un acto despectivo, miran de
pantalón corto hasta los 12 y 14 arriba del canal, tía Engracia pro-
años; eso no es enseñar, eso es pa- pone
sión. -¿Bajamos?
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
No de muy buen talante las her- -Ya está trabajando en La Paz
manas aceptan y bajamos, cambia la -Y ¿no sabes si juega en algún
indiferencia en satisfacción, hablan equipo de allá?
y no se puede escuchar por el es- -No, no lo sé.
truendo en la caja formada por las -Yo también quiero ir a La Paz,
paredes, es el canal con 2.5 metros decile al Negro si puedo jugar allá,
de profundidad, por donde corría pues quiero irme porque aquí no te-
caudalosamente el agua en su nuevo nemos futuro.
nivel y unos metros más adelante se- -¿Por eso has venido?
guía en su velocidad normal, donde -¿No lo ves? acarreo las cuvas,
fuimos a sentarnos a continuar la mi padre las arregla y yo las llevo y
conversación interrumpida por el traigo, me voy atrás a cargar 2 más
ruido; un momento después el ata- para acarrear todas las que sirvan, es
que de los mosquitos obliga a nues- el pago a de don Felipe por el camión
tras compañeras a una presurosa re- que nos está vendiendo, chau ya re-
tirada. De la mano de Regina nos greso.
aproximamos al chorro y continua- Quedé mudo por la pena de saber
mos caminando al pueblo. Su cabe- que mi padre tenía que vender sus
llera se mecía al impulso de la brisa camiones que eran “su vida”. Regina
y los rayos solares, nosotros adelante interrumpe mis pensamientos
y los otros 3 nos siguen pasos atrás, -¿Qué te pasa? Te veo muy pen-
así hasta llegar a la puerta de ingreso sativo...
de los camiones. La cual está abierta, -No tiene importancia burreras
el ruido de un motor alerta muestra de hombre, vamos a la plaza.
curiosidad. Entramos seguidos por Salíamos y nos llamo mamá a to-
Chichín y las chicas, están bajando mar el café que fue rechazado por las
unas cubas del camión por 2 tablas, tres al mismo tiempo, no conocen a
en el otro extremo asentada en 2 ro- mamá que amenaza:
llizos, lugar en el cual asentarían las -Si no vienen, Luchito se queda.
cubas definitivamente. Una vez des- Y pasamos todos, pronto llego mi
cargadas fueron transportadas empu- padre sentado en la cabecera co-
jándolas sobre las tablas hasta el fi- menzó con tía Engracia:
nal del andamio, y para ser descarga- -Como están tus padres mucho
das se siguió la misma ruta, 50 cen- tiempo sin acompañamos ¿cuál es el
tímetros antes de chocar con la pri- motivo?
mera fue estacionada al final de su -Les prometo no se repetirá.
viaje. -Y ustedes chicas Barranco, es-
Saliendo me encuentro con un peramos verlas con frecuencia.
amigo y compañero del equipo de Regina menos tímida responde
Básquet del mayor de mis hermanos. que sí, que vendrán con más frecuen-
-Hola Luchito ¿que sabes del Ne- cia. -Esperamos no cansarlos señora,
gro? la próxima, le aseguro, nos tiene en
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
su mesa a la primer señal. Y por fa- la escuelita que está en construcción
vor, espero no nos den la señal de re- gracias el empuje y dinamismo de la
tirada. maestra Susana.
-Hija, eso jamás lo verás en esta Ya en Machipo, la señorita Susy
casa. regordeta y reilona se aproxima,
-¿Puedo hacer otra pregunta? -Faltan días ¿cuándo las traen
-Adelante hija, sí puedes. querido primo? Me da un suave
-Muy bonito su letrero, pero apretón en la mano, giró la vista y
¿tiene algún significado especial? allí esta mi Profe.
-Es tan sencillo, como no lo en- -Mi perdida, me olvidas, pasan
tiendes, si eres tan inteligente. los días sin visitarme, ¿por qué? Es-
-Su hijo a mi lado me tiene opa. tás resentida.
-Te explico, la vida es un cons- -Vamos joven, necesitamos car-
tate buscar, algunos buscan la gloria gar el perotó.
egoísta, otros la gloria espiritual, -Me acompaña Profe, le dije.
pero siempre existe un camino para -Puedes ir, dice Susy.
llegar a lo que tu conceptúes la “glo- Sube y nos vamos en busca de la
ria”. carga, llegamos al sitio, intento ba-
-Y en su finca usted encontró la jarme y me detiene la Profe, tengo
suya. necesidad de hablar con usted. Escu-
-¡Viste cuan sencillo! che, es un encargo de la anciana ¿co-
Se pone de pié tía Engracia, -chi- noce usted quien es Taremacua?
cas nos vamos. Claro, un cerro pasando el río Para-
Reclama Chichín: -¿Me dejan? pety en el puerto de San Antonio, va-
-Imposible, responden las her- rios kilómetros al Sur. En las cum-
manas. bres en una ladera tiene una gran
Los acompaño, en la puerta me marca ¿subió usted? No le respondí,
despido, necesito recoger una ma- no es necesario, vamos tenemos que
dera, es la base para asentar las bor- hablar con la anciana, primero termi-
dalesas de fermentación. namos de cargar y nos vamos des-
-No te hagas el importante Lu- pués; no se preocupe, lo cargarán
cho, dice Regina, no creo que mane- allá, tanta seguridad se impuso a mi
jar un camión sea tan importante. prudencia, nos fuimos, en un ban-
Retruqué, -si me esperan después quito bajo un Lapacho nos espera la
las llevo a dejar a su estancia. encamación de los años, sentada al-
Pasan varios días, los encargados tiva, digna nos espera. Se adelanta la
de amarrar las varas para techar, pi- Profe, se arrodilla y le besa una
den más perotó. Pido permiso a mi mano, parándose a su lado, sumisa y
padre para ir a Machipo en la camio- callada. Me acerco, siento paz y una
neta con dos hermanos Tembehuasu fuerza jamás experimentada, como
y Vicenta. Pero antes de partir el imán al acero me aproxima, in-
subimos las chapas de calamina para tento impedirlo y algo más fuerte me
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
inclina, de rodillas le tomo la mano continúo mi caminar para seguir re-
y llevándola a mis labios la beso con visando los plantines de palta, sola-
ternura y fervor, levanto la mirada, mente dos fallos en las trescientas:
se encontró con la anciana, veo en su en el viñedo las uvas blancas se ven
mirada el desfile de los años, grandes brillantes próximas a entrar en sa-
praderas verdes hasta el infinito, zón, en un rápido recorrido por los
sembradas de arroz, trigo, maíz, primeros surcos. ¡Qué aburrido reco-
grandes bestias tirando arados con- rrer solitario! Como pesa la soledad,
ducidos por rubios y gigantescos al día siguiente termina el enlucido
hombres, retiro sus manos de la mía, de las cuatro paredes del interior, fal-
se borró la visión, quedé en éxtasis tan las externas, es necesario traer
esperando nuevas revelaciones, la bosta de caballo para preparar más
Profe me sacó del ensueño, la an- barro y terminar las paredes exter-
ciana dice que en 4 días termina la nas.
construcción, iré a tu casa para con- Al día siguiente, temprano, me
tarte la historia del gran Taremacua fui con la maestra Susy y el saldo de
y después venimos en la camioneta las calaminas para la escuelita, llega-
para ir con ella al cerro de la vida, mos a Machipo, después de descar-
allá conocerás toda la historia, sos el gar este material, arreglamos con los
elegido para contarle a todos los encargados de reunir bosta de caba-
hombres, luego se alejó silenciosa- llo para la construcción. Esperé un
mente al mismo tiempo que regresa tiempo, regresó la maestra Susy con
Vicenta para irnos. varias jóvenes, con las que regresa-
Un torbellino de imágenes e mos a Charagua; en casa, las esperan
ideas encontradas me acompañan en con las costureras del pueblo para to-
mi regreso, no dormí toda la noche, mar las medidas de los uniformes ne-
la curiosidad, más fuerte, venció el cesarios para trabajar en la vendimia;
cansancio, despunta la Aurora, llega mamá me recuerda llevar a las chicas
junto con el sueño reparador y me a Machipo, y traer las 3 que no vinie-
despiertan unos besos, las manitos ron en el primer viaje. Al retomo,
intentan abrir mis ojos, cuando lo una se acomodó a mi lado y las otras
consiguen nuestras miradas se entre- subieron atrás, todo el tiempo fueron
cruzan, los ojos azules color cielo de cantando en guaraní, gozosas, feli-
mi gringuita, sonríe... ces; mi compañera de asiento silen-
-Che durmió ñaño Luchín. ciosa meditando; en las proximida-
-Espere afuera hermanita. des de Machipo se animó y me pre-
Nos interrumpe mamá. -Vamos gunta:
Chavi, te dije que no molestes a tu -¿De qué hablan con Yretay?, to-
hermano, la agarra de una mano y se dos los días solamente comenta de
retira... sus charlas con el joven.
Cuando llegué al galpón termina-
ban de enlucir una de las paredes,
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-Debe ser otra persona con el pensativo detengo la camioneta, es-
mismo nombre de Lucho y ella lo pero a que se bajen,
sabe. La Profe se acerca y por fin escu-
Es momento de parar, se bajan cho su voz: tengo un encargo de la
mis alegres pasajeras y también la anciana para usted, le preguntaré al
mudita (compañera de asiento); joven si quiere escuchar... sí somos
suben tres muchachas entre ellas la culpables de nuestros actos no de los
Profe, resignado hago funcionar la ajenos, yo vi dos canallas intentando
movilidad y camino de retomo, si- aprovechar de la soledad de una
lencioso y aburrido qué diferencias chica la cual se defendía con valentía
con las otras compañeras de viaje; el y con furia, ella es mi heroína, la
mismo compás de espera, esperan a dejo tengo que regresar, espere, el
la costurera y el silencio del retorno; encargo de la anciana... escucho: .

L os pueblos de Timboy An-


kasoro, Huirapava y Caran-
dayti, Machipo, Huirapetindi,
Piriti, Saipurú, Wiracuputy, Taputá
y Taputamí, reunidos en Charagua.
el pueblo Guaraní. Un trueno horro-
roso calla a todos, despertando a los
dormidos: la voz salía de las profun-
didades de la tierra diciendo
“TIANUPIRUS”37 (tanto habla-
Los Abas (guerreros), sentados en lo ban...), tiembla la tierra y se abre una
que hoy es el pueblo, la finca de su gran zanja y divide a la tierra en dos,
padre, y el saldo de ancianos, muje- atrás en el tercer patio de su casa y el
res y niños, en el centro (atrás de su comienzo en lo que hoy es su finca,
casa y comienzo de la finca). Los todo el pueblo guaraní, contempla en
Tumpas contaban sus hazañas y silencio y admiración la aparición.
grandezas, no se ponen de acuerdo En el medio de la zanja, una eleva-
para elegir al jefe que será el encar- ción, en la punta de está un guerrero
gado del ejército para defender sus erguido, con los brazos impone si-
tierras de los “tembetas” invasores lencio y dice: “Yo soy Taremacua el
de los llanos de Zamuco. Ya es mu- Tumpa de todo el pueblo Guaraní,
cho tiempo y no se ponen de hijo del dueño del bosque que me
acuerdo. Los Aba cansados se dor- manda para imponer su ley, escu-
mían y despiertan para seguir escu- chen y obedezcan”. Da la espalda al
chando, tantas y en tantas hazañas. cerro y mira donde nace el sol. Uste-
Corrían peligro en las guerras entre des son los cuidantes del bosque, el

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Viejas locas en guaraní.
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
dueño ya lo dispuso así. Primero de- de llegar a Pinondi, se encuentran
bemos derrotar a los invasores y con los jinetes regresando de la mi-
luego les enseñaré las obligaciones sión, que informan que los Tembetas
del pueblo Guaraní para con el se aproximan a Itaguazurenda lo cual
dueño. Los Tumpas con 100 guerre- les obliga apurando el paso, a espe-
ros me siguen; esta es mi mujer “Ca- rarlos en ese lugar sobre la gran pie-
bellos de Luna”, una hermosa llegó dra Las órdenes sobre la defensa son
con Taremacua del centro de la tie- bien claras. Y comenzaron a llegar
rra, donde están todos los dueños, (el los invasores; desde las alturas de la
dueño del viento, del aire, del agua, gran piedra dominan a los invasores,
de las nubes, del bosque, de las llu- los reciben con una nube de flechas
vias y todo lo que existe). Los tres que aciertan en los lugares indicados
dueños manejan lo conocido y tam- por el jefe; muchos invasores caen
bién lo desconocido. Así nos organi- heridos en brazos y piernas, ninguno
zaremos para esta batalla: Todas las muerto. Cuando un invasor era he-
mujeres de la izquierda sigan a Ca- rido llegan dos mujeres del ejercito
bellos de Luna y un grupo de Avas, guaraní lo recogen y se lo llevan para
seguirán a estas por si piden ayuda. curarlo, muchos ya curados son lle-
Luego llamó a la más anciana de las vados al río Parapety en cuyas már-
ancianas y le dijo: y vos a la derecha genes se forman nuevas poblaciones
con las demás mujeres. No quedará entre prisioneros Tembetas con gue-
ninguna mujer sin tener grupo. A es- rreros guaraníes. Cuando se termi-
tas también las seguirá otro grupo de nan las flechas de los guerreros, los
guerreros por si necesitan ayuda. Un Ava que los siguen por detrás, les pa-
tercer contingente esperará por si san más; en la noche suspenden la
cualquiera de los grupos necesita de guerra y continúan en la misma
su apoyo. Ahora todos los demás a forma un día más sin muertos y mu-
comer y alistar sus armas.... chos
Dos soles y dos lunas demoraron Tembetas heridos y curados por
para estar listos. En el primer día; las mujeres guaraníes. Son transpor-
Taremacua mandó guerreros en ca- tados a su nuevo destino; por la no-
balgaduras para que inspecciones. che suspendida la pelea, los guerre-
-¡Pero si no tenían, los españoles ros del refuerzo de las guerreras gua-
llegaron con los caballos; inte- raníes llegan al campamento de las
rrumpo yo. -Nosotros teníamos Gua- mujeres y niños Tembetas y de
nacos, que vinieron con los grandes acuerdo a las órdenes del Gran Tare-
rubios mucho antes; conocerás esto macua son llevadas a Charagua.
en el cerro de la verdad... Temprano en el último día de pe-
Al segundo día salen las mujeres lea son pocos los invasores y al com-
por izquierda y por derecha a cum- probar cuan pocos son, se ponen de
plir con las órdenes del Gran Tare- pie y asaltan a los guaraníes, les en-
macua. Después los Tumpas, antes tra temor a éstos y terminan matando
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
a los pocos guerreros Tembetas, pese de la zona que ni bien te ven te reci-
a la insistencia del GRAN TARE- ben con los brazos abiertos.
MACUA de suspender la pelea. Los Al calor del retomo lo pasé cavi-
muertos rodean la gran piedra; lando sobre nosotros, la increíble
viendo esto el gran Tumpa da un historia que acababa de escuchar y
salto y por el impulso rueda la piedra sobre cómo justificar mi demora en
y abre un gran hueco llevándose a los regresar a la casa; la angustia au-
desobedientes Tumpa y los guerre- menta mientras más me aproximo.
ros Tembetas muertos. Muy en lo Llego, me esperan con el portón
profundo corre un río de agua que abierto para guardar la camioneta.
arrastró en mortal abrazo a Guara- Vicenta, preocupada, me informa
níes y Tembetas al mismo lugar... que mi mamá había pasado la tarde
Mucho tiempo después, pero mucho caminando preocupada por el corre-
después, un caray llegó al lugar le dor sin noticias mías hasta que llegó
puso marco de madera de cupesí don Alberto Barba y la tranquilizó.
construido por manos guaraníes y La voz de mi padre calló a la parlan-
hoy se llama “La Noria De Itaguazu- chína Vicenta:
renda” que contiene agua suficiente -La señora te mandó abrir la
para aproximadamente 5.000 vacas puerta para guardar la camioneta, no
de la propiedad del mencionando es- te mandó con chismes, pasé por un
tanciero. (Los vaqueros dicen que en lado de mi padre que no contestó a
algunas ocasiones el agua sale teñida mi saludo y continúo rumbo al co-
de rojo y es la sangre de los Tembe- medor.
tas que se encuentran heridos en la -No es por ahí, primero a ba-
profundidad; otros afirman que el ñarse.
Tahuara (soto o quebracho colorado) Después de un día tan agitado to-
y también el cupesí aún siguen man- maré agua y después me baño.
chando las aguas con el tanino que -¿Tomaste mucha chicha?
ambas poseen.) -Continuo al baño con la lengua
Mire Profe está anocheciendo, pastosa y seca mientras escuchaba a
con tan bella historia pasó el tiempo la Profe en el banco, bajo la sombra
sin sentirlo: ¿cuándo nos vemos? La del añoso tajibo, no sentí ni hambre
dejo, en mi casa deben estar preocu- ni sed, ambos me consumen ahora.
pados por mi demora; no me deje sin Después de bañarme me peiné me-
verla mucho tiempo para continuar ticulosamente ya sé que cuando mi
su narración, la espero, Adiós. padre está con la mierda revuelta, es
Cree usted querido lector que la muy detallista; así fue, asomo en el
fuerza que c realidad ganó esta gue- comedor, y
rra ¿es el amor?... pues yo diría que -¿Dónde es tu fiesta?, ¿por qué
sí, porque si te vas para el Isoso, ve- tan bien peinado?
rás a la gente más sencilla y humilde

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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-¡Felipe! Dice mamá y siguen en Caminando rumbo al Cupesí en
árabe; así es siempre cuando discu- busca de un reparador descanso, por
ten por culpa mía, en un momentá- los surcos del viñedo (comienzan a
neo silencio ¡llegó mi oportunidad! cambiar de color, son muchos gra-
-¿Nunca se plantó por problemas nos), está la profe, con un pantalón a
con la dirección o se trancó la gaso- medio muslo y aparentando indife-
lina? No interesa la causa, antes de rencia la misma que es correspon-
renegar... Esta nueva experiencia fue dida por mí, ingresó en el otro surco
una gran lección... la duda que te -¿tiene prohibido el señor por ser ca-
ataca es tu mejor arma. En la cama ray saludar amistades? La Profe se
pronto llegó el sueño. convirtió en Ypáye38 y es adivina,- le
Me fui a la construcción acla- digo, ¿me acompaña? Recorrimos el
rando, ya están en la tarea mis ami- camino y encontramos un racimo en
gos. Cada vez admiro más a mi pue- proceso de maduración, lo sacó y
blo guaraní por su dignidad y res- empezamos a comer un poco acidas
ponsabilidad. pero deliciosas, regresamos sabo-
-¿Y Anselmo, no lo veo? Pre- reando la agridulce uva; nos senta-
gunto. mos ¿cuándo me enseñas más de la
-Fue a traer hojas de tuna para historia de tu pueblo?
preparar la cal para el blanqueo de Taremacua, consigue la paz y se
las paredes. dedica a organizar la nueva nación,
-¿Cómo lo hacen? entre ambos pueblos sin triunfadores
-Ya lo verá joven, mire y aprenda ni vencidos comenzando en Tarenda
me respondió. hasta el último rancho del río Para-
-Tengo apuro le dije. pety, con los hogares de guerreros
Me fui al corredor del tercer pa- Tembetá, con mujeres guaraníes y en
tio, un hijo de Anselmo trabaja con la falda de la serranía del Aguarague
las hojas de tuna: les saca la corteza de Ankasoro, al río Guapay, los gue-
verde, y las ensarta en un palo, las rreros Guaraníes con mujeres Tem-
quema en la fogata y las deposita en betas, ¿Cuál es el motivo de esta
una tabla puesta para cortarlas en pe- unión? Ambos pueblos son guardia-
dazos pequeños que luego son depo- nes del monte, encargados por el
sitados en un balde, el cu:1 contiene dueño. La gran seca, muchos años
agua de cal hasta la mitad relleno con sin lluvia espantaron los animales a
pedazos de hojas de tuna, las cuales tierras guaraníes donde llovía, deses-
trituran con ambas manos y así con- perados por el hambre y la mortan-
siguen una pastosa leche que vacían dad de sus hijos, los tembetas inva-
en un recipiente conteniendo agua de dían los bosques guardados por
cal, me siento vigoroso; el desayuno, nuestro pueblo, ésta parte te contó la
joven; la llamada de Vicenta.

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El brujo de la comunidad
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
anciana en Machipo, ¡oh¡ ¿ así siem- padres y después de su compañera,
pre se comunica? Si... no puede co- tu abuela; ¿un cementerio?, aquí en
municarse de otra manera, no tiene la finca, no es verdad, como todos,
lengua, ¿qué le pasó? El gran Tare- no he visto ningún cementerio, me
macua la mandó a tierra del Inca agarra la mano y nos fuimos a la an-
como mensajera, sabía que los incas tigua casa y seguimos por la avenida
invadirían los montes del dueño, hoy de los ocoroces, pasamos la acequia
en nuestros lugares, ellos serán de- y nos internamos por el monte ingre-
rrotados con muchos muertos y sando a un cañón, unos pasos a la iz-
grandes pérdidas. El Inca ordenó quierda y ahí está: el panteón de mis
cortar la lengua de ella, pues su pue- ancestros, rodean a las cruces un
blo la escucha y cree. Cuando se en- alambrado; recé una oración por mis
teró el gran Tumpa Guarani, mandó desconocidos ancestros. Caminamos
gente para traer a su mensajera, se un poco más y llegamos a un pe-
juntó con ella y agarrando su cabeza queño bosque, la famosa plantación
la juntó con la de él y le dio el don de de wiracupenti que la anciana había
hablar de su cabeza directamente, sin plantado. Regresamos juntos a la
pasar por su lengua ni por los oídos... hora del almuerzo.
Le ordenó vivir para contar lo pa- Me siento y me informan que
sado por los guardianes guaraníes y tengo carta de mi madre.
toda la historia en defensa de los -Ve y lee...
montes. Taremacua organizó una na- -Y Don Luis llegó tarde, primero
ción y un poderoso ejército entre- almuerza y después lee su carta, dice
nando en la serranía de Charagua a mi padre.
los Avas más jóvenes en guerra de -No castigues a Luchito, no es el
guerrillas, con valientes Tumpas de culpable de tu divorcio.
jefes de estos grupos entrenados para -Su madre sos vos y basta.
atacar y desaparecer. Esta enseñanza -Pero viejo, me dices es madre
duró muchos años y a los impacien- quien concibe y pare; y cambias de
tes el poderoso les dice: pronto esto opinión, no por justificar tus erro-
que aprenden nos salvará de los in- res... Y se fue a traer la carta, me la
vasores. Al mismo tiempo que entre- entrega, -hijo lee tu carta en tu dor-
nan hacen arcos y flechas de wiracu- mitorio y después vienes a comer.
penti y lanzas de chonta. Grupos de -Regreso con un nudo en la gar-
hombres dirigidos por los ancianos ganta y amargado con los sufrimien-
traen plantas de chonta donde el sol tos de mi madre y mis hermanas, na-
se junta con el monte; traen plantas rrados con tanto dolor... el remordi-
cerca de los ranchos y plantas de miento atormenta mi dicha tan inme-
wiracupenti, en el interior de Cabapi, recida, no puedo comer, contemplo
en Caratindi. La anciana plantó en tu las albóndigas de maíz como dan
finca (tu abuelo sacó un poco para vuelta en la sopa, impulsados por la
guardar en la tierra el cuerpo de sus
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
cuchara, es mi comida preferida, Vi- encuentro pues conocerás toda la
centa se esmera por eso, llega mamá: verdad del pueblo guaraní y además
-Hoy debes contestar a tu madre, conocerás la felicidad con tu Profe.
es necesario llevarla al correo antes Ahora pónete atrás, agarra mis cabe-
de las 4 de la tarde, así se va hoy llos con tus dos manos; una sensa-
mismo, ¿quieres un consejo? No le ción de fuerza desconocida, pasión
cuentes nada malo, solo tus alegrías, lujuria, todos me invaden... esta
así ellas, no sufrirán, dales esperan- energía la necesitas para subir al ce-
zas... así lo hice. rro de la verdad donde conocerás
La construcción terminada en el todo; después tienes que purificar tu
interior, por fuera falta el enlucido y cuerpo en el Chorro, pueden bañarse
pintar; tenemos 14 cubas en su lugar juntos, “un manantial de agua
listas para guardar el vino, los tres fresca” es en nuestra lengua el nom-
toneles de fermentación y los gabe- bre de tu Profe. Engendrarán un hijo,
tones para lavar y pisar las uvas, en no lo conocerás, un descendiente de
espera de comenzar la vendimia. Es- él salvará al pueblo, de 3 a 5 años
tamos colocando el portón traído del después subirás al otro cerro de la
anterior galpón en la finca y con esto verdad, cerca del gran río donde se
asegurar la cosecha; mamá mira la encuentran el sol con el gran bosque,
obra satisfecha: tu lo encontraras por tus sentimien-
-Dudamos con tu padre poder tos y pasarán muchos años; “en un
conseguir esto antes de tener la uva libro dirás todo, está es tu misión”...
madura. Nos das una lección hijo. Estoy cumpliendo esta misión al
-Yo no mamá, los constructores, escribir esta publicación...
como ven el pueblo Guaraní sabe Con una tutuma llena de somó39
cumplir, ellos lo hicieron, me toca llega la Profe, la anciana tomó un
cumplir con ellos. trago y me pasó la tutuma, la miro y
-¿Necesitas mi ayuda? tomo un trago después toma la Profe,
-Si mamá, la camioneta y per- me devuelve el recipiente, le doy fin
miso por un día. a su contenido. Tomo a la anciana en
-Hablaré con Felipe. brazos, y la Profe la recibe en sus fal-
-Gracias mamá. das y comienza el viaje. Bajamos al
-Espera y después agradeces. río, nos esperan seis jinetes dos en-
Aclarando el día llego a Ma- ganchan las defensas a las cadenas
chipo, me espera la Profe sonriente, del parachoque, otros dos enganchan
la anciana sentada bajo el lapacho, su a la cincha de los primeros, la misma
cara brillante parece feliz con una operación los últimos y los seis ca-
medio sonrisa picarona; si soy feliz ballos así unidos emprenden marcha
no te equivocas, es nuestro ultimo hacia el agua remolcando el

39
Refresco hecho de semilla partida de
maíz.
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
vehículo. Siguen el rumbo marcado Aguarague y descender en línea
por varas clavadas en el lecho que- recta, al río Paraguay, todo lo demás
dando una errática línea, nos llevan a será fácil de entender y con tu Profe
la otra orilla. Desenganchan sus ca- debes descifrar cualquier duda, tie-
denas, continuamos viajes pasando nes 10 meses y si queda algo, tu solo
Itatiqui, Ipitacuape. Hay una senda buscas; encontrarás claridad en todas
más adelante, seguimos por ella las dudas... Al ver profundamente
hasta llegar al pié de la montaña, esta dormida a la anciana me encaminé a
continua más angosta. Seguí a pié buscar “la verdad” pronto llegué al
dejando a las dos mujeres en la ca- lugar, era una piedra sobresaliente en
mioneta pero unos pasos adelante forma de un anfiteatro. Di un pe-
una profunda zanja me impide el queño salto situándome en el lugar
paso, comprendí que las mujeres son deseado; me siento, encojo las rodi-
el salvo conducto para llegar a la llas abrazándolas con ambos brazos
cima, ambas me reciben con expre- inclino la cabeza, gira vertiginosa-
sión de inocencia ¡me equivoqué! In- mente más y más, bajo a las profun-
tentó un nuevo viaje sólo, un farallón didades... cual bala de un gigantesco
me detiene en el camino, regreso y cañón, fui enviado a las alturas, el te-
tomo en mis brazos a la anciana y rror mantiene mis ojos cerrados, se
continuamos seguidos por la profe, detiene el ascenso y primero abro los
ahora avanzamos sin tropiezos. El ojos con curiosidad, lo magnifico,
cansancio esta vez me detiene, e in- increíble y la nada rodeada del cielo
tento sentarme pero se me aliviana verde resplandeciente, azul inmacu-
la carga, una nueva energía impulsa lado, giró cual segundero del reloj.
mi cuerpo y adelante, continúo la Siento curiosidad, en el verde res-
subida unos 2 o 3 kilómetros de em- plandecen tres líneas que en paralelo
pinada pendiente. Me siento desfa- se pierden en lo fantástico, sigo el
llecer, me detengo y un nuevo res- viaje, en medio de las líneas blancas
piro a mis doloridos miembros. La un punto negro se mueve, deseo ver
anciana cada vez más pesada; me de más cerca; mis pensamiento aban-
paro mirando atrás, no hay rastros de donan mi cuerpo y con la velocidad
la Profe, miro en busca de un lugar del pensamiento soy transportado.
para sentarme descansar nueva- Debe ser al río Guapay, veo un barco
mente, me siento flotando, la energ del cual bajan unos enormes rubios
revitalizada me invita a continuar; arreando animales gigantescos, son
con dos descansos y la recuperación unos mastodontes me digo, los pri-
de energía estamos cerca del final. meros se encaminan a los árboles
Bajo un arbolito acomodo a la an-
ciana, por fin hace un gesto humano
levanta la mano la posa en mi cara y
sin hablar me comunica: verás al río
Guapay y al Parapety, salir del
76
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
más próximos, los de arriba pe- tendió la Profe, pronto dormíamos.
chando40 con su frente proceden a El frío en la madrugada nos despierta
comer las hojas, siguen bajando, y unió nuestros cuerpos, siento dos
tumbando y comiendo; decido ele- poderosas fuerzas encontradas en
varme pero más lento, retomo al san- desigual lucha, el deseo camal y la
tuario, frené mis instintos de entrar, fuerza espiritual del pasado día,
y mirando, ¡que increíble; veo con pronto vi que la espiritual ida en des-
todo mi ser, sin necesidad de girar ventaja. Me volteo apoyando las ma-
soy todo vista, siento con todo y tam- nos en la pared, llega el sueño repa-
bién con increíble nitidez escucho a rador, suave, por instantes siento las
los vigías guaraníes admirados que manos de la Profe recorrer mi
contemplan a los extraños visitantes, cuerpo, mis piernas desnudas, toda-
mi morada en la altura se está en- vía uso pantalones cortos, me las cu-
friando, siento la necesidad del re- bre con una manta, este calor adicio-
greso, así lo hago, me reintegro, me nal tranquiliza mis sueños.
encuentro de nuevo sentado en el an- Por la mañana me despierto con
fiteatro entibiando mi cuerpo con los la claridad del nuevo día, mis piernas
rayos del sol. Durante ciento, miles cubiertas con el tipoy41 de mi Profe,
de años, primero admiré el avance quien temblando por su desnudez
del desbosque de los extraños seres, mira culpable su tipoy a mis pies,
todo desde el río, Guapay al Para- avergonzado le reclamo, responde
pety, un solo campo de labranza, pa- estaba tan ardiente que fue necesario
saron al Parapety y continuaron su ¿no lo comprendes? Recogí su
arrollador avance destructivo, vanos prenda de vestir, intento caminar
esfuerzos de los guardianes por dete- para ponerle su ropa, ¡no puedo!
ner el holocausto, atacan con sus fle- Afligida ella mira asustada, le indico
chas y un fuego azul usado por los aproximarse, así lo hizo y levanta los
invasores los aniquila; el frío obliga brazos dócilmente. Ya vestida ella,
mi retomo, llegué al anfiteatro con el con ternura la aproximo y abrazo su
sol en el ocaso, ya no calienta. Un cuerpo, eres muy fuerte y te admiro,
viento frío azota la montaña, la voz fui un cobarde, dándote la espalda
de la Profe llamando, me aproximo, solucionó mis ansiedades ¡cobarde!
suena su voz apremiante, baje, me Y vos para frenar las tuyas procedes
indica, lo hago con dificultad pues con valentía, ¡te admiro! – Gracias.
mis miembros entumecidos por el Subido en el anfiteatro, con la
frío dificultan los movimientos; nos mano le doy mi despedida. En las al-
sentamos en la tierra apoyadas las turas compruebo que ya se manejar
espaldas en el anfiteatro protegidos mi cuerpo, esto permite permanecer
del viento; el cansancio llega obli- más tiempo conociendo el pasado,
gándome a recostarme, en el suelo se los cultivos, cerca del río Pilcomayo,

40 41
Empujando Traje típico de las mujeres guaraníes
77
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
los invasores son detenidos por los de los ríos, cuando fue tarde, una in-
guardianes; una franja de entre 30 y tensa lluvia con huracanes cambian
50 kilómetros de la serranía del el cauce de los ríos Guapay y Para-
Aguarague del naciente del río Gua- pety; las turbulentas aguas amonto-
pay al Pilcomayo, se ven siembras en nan árboles y tapan el curso de las
pedazos de ambas márgenes, es hora aguas obligando a éstas a irrumpir
de abandonar el refugio, algo pasa, por el monte derribando todo lo que
no lo distingo bien, con mayor velo- impide su paso, el tiempo no se de-
cidad llega al lugar un grupo de gue- tiene, vanos intentos de siembra y
rreros, atacan a los invasores y huyen nuevos fracasos; vientos intermina-
perseguidos en busca de la seguridad bles erosionan los fértiles campos
que les brinda el monte, antes de lle- convirtiéndolos en desiertos insípi-
gar se dividen en grupos, por su ve- dos y calientes. El gran chaco soñado
locidad y su volumen, los invasores por los extraños invasores, conver-
siguen recto en persecución del tido en tierra desolada y muerta.
grupo más chico, por ambos lados Regreso al anfiteatro y me siento.
atacan los guardianes, cae un inva- Quedé profundamente dormido, me
sor, intento entretener los refuerzos: despiertan las lágrimas de la Profe,
tonto me digo no me ven, veloz- aún soñoliento ¿qué pasa Profe?-
mente recupero mi cuerpo ahora si Pensé: ¡está muerto! Tan frío estabas
me verán, regreso en veloz descenso que me asusté, no sé qué pensar. ¡No
casi me estrello, no puedo dirigir el piense! “Mujer que piensa la caga”,
pensamiento con la fluidez de dicen los chaqueños,... con este
cuando estoy solo, lo peor no hay chiste de mal gusto conseguí mi pro-
nada ya, todo pasó. Continuo el re- pósito, la hice sonreír.
corrido, peleas a lo largo del límite Siento lucidez mental, veo todo
entre el borde del monte y las tierras tan sencillo, sólo el cuerpo no res-
de cultivo, los guardianes con gran- ponde a mi voluntad; mi Dios, estoy
des pérdidas, guerreros muertos y como la anciana ¡un cuerpo muerto!,
heridos buscando el amparo del con mente privilegiada, ¡no¡ nece-
monte protector; los invasores bus- sito caminar. Con un esfuerzo más
cando a estos para esclavizarlos o re- consigo gatear y así llego a la orilla
matarlos si ya no les sirven, el dueño del anfiteatro, con las piernas col-
del monte aliado con los otros dos, gando la Profe me hace masajes, no
viene en ayuda de sus fieles guardia- siento nada, muy lentamente camino
nes, fuertes vientos transportan las de retomo en busca de la camioneta;
nubes y no reciben en las tierras de poco a poco se facilita el camino
labranza el agua necesaria para los y llegamos con las piernas ligeras.
cultivos, fuertes vientos con sol Sentados en la camioneta rumbo a
abrasador dieron fin a los cultivos, Machipo -¡Profe cuente la historia de
vanos intentos por desviar las aguas su pueblo! -Usted ya sabe más, me
responde, pero siento a la anciana
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
que me comunica: -usted tiene toda- Llegamos al anochecer guardé la
vía mucho por aprender, en el otro camioneta, Vicenta nos recibió:
cerro de la verdad del río Paraguay; -Joven, no se preocupe, la señora
-muy difícil es un viaje al Paraguay, lo espera, pase, su padre viajó y re-
-se hará, no se preocupe. Tal convic- cién llega mañana.
ción en sus palabras me devuelven la -¿Qué pasó mi hijo?, usted me te-
fe y seguridad, -sí, lo haremos. nía preocupada, por Vicenta me en-
Llegamos a Machipo, siento aún teré de las camas para las chicas, vea
el cuerpo adormecido, -bájese... -no, que las armen y viene para que cene-
tengo necesidad de seguir, ¡así no mos, tu padre regresa mañana con el
puede! Abre la puerta y agarrándome ingeniero Sebastián para empezar la
el brazo me bajó, conduciéndome al vendimia,... vaya, lo espero.
banco bajo el tajibo; en él siento la Bajamos la madera de las carre-
presencia de la anciana que me de- tas y seis colchones, vamos Profe a
vuelve las energías perdidas, la Profe cenar, nos lavamos y luego estamos
me obliga a recostarme y junto con con ustedes.
una cuñatai, me hacen masajes en los -Bien, las esperamos en el come-
brazos y piernas, me hacen ejercicios dor.
y siento retornar la agilidad, una -No llegaron, cené y luego del
cuña42 mayor llega con una tutuma baño dormí profundamente.
con un aromático brebaje, lo tomo Al otro día la voz de Vicenta me
saboreándolo hasta darle fin, conti- despertó para' desayunar y hacerme
nuando con un sueño muy profundo. recuerdo de mi viaje. Tomando el
Desperté acostado en el banco con desayuno estaban las cuatro cuñatais
mi cabeza en la falda de mi Profe bromeando y riendo, se interrumpen
arrullado con un suave tamborilleo en el momento que ingreso al come-
de sus manos en mi cabeza peinando dor, silencio total.
mis cabellos con sus dedos. -¿Se comieron la lengua? Yretay
Siento la urgencia de levantarme, saca y muestra su lengua, ¿te la
el recuerdo de mi padre preocupado muerdo? ¿Eso quiere? y todas ríen
por el tiempo transcurrido desde que gozando de la amiga, interrumpe
salí de la casa; nuevamente la Profe mamá:
me adivina; -no se preocupe, todo -Yo también quiero reír, cuenten;
está bien, pronto lo verá, vamos, nuevo silencio; la cara color naranja
está cargada la camioneta, tres de la Profe, denuncia a la causante
alegres cuñatais nos acompañan y del jolgorio. Acompáñame Yretay,
¿qué llevamos? Son las camas de las veamos cómo están arreglando el
chicas; las necesitan para descansar dormitorio.
durante su vendimia, no pregunte, Aproximo la silla a la mesa y me
todo lo verá en su casa. siento, llega Vicenta con la lechera

42
Mujer en guaraní
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
humeante primero a las chicas y apoya el muslo rozándolo con inten-
luego recién mi turno. Termino mi ción en esta, retiro mi mano. Un tre-
desayuno y al retirarme les dijo: - cho adelante está mi prima Susy ca-
permiso chocas43 las dejo, voy para mino a la escuela de a pie como
traer más camas y a las otras mucha- siempre, detengo el vehículo a su
chas. Estando listo para partir, se lado:
abre la puerta del otro lado del -Suba prima la llevamos, mi
vehículo, la más alta y ocurrente de compañera de viaje intenta bajar y
las muchachas se sube: Susy la detiene; apéguese Olguita,
-¡Como Yretay no va, yo te entramos los tres; así fue, seguimos
acompaño! Subiendo al otro lado de cada vez más incómodos, pues Ol-
la quebrada es necesario cambiar a guita se ubica de tal forma que me
segunda, agarro la palanca del cam- acomodó su pecho rozando mi es-
bio junto con la rodilla, la empujo palda durante todo el tiempo, así lle-
con suavidad y efectúo el cambio de gamos a la escuela en Machipo. .
marcha; en el dorso de mi mano

N os apegamos a la sombra y
mientras Olguita ve a las
otras guaraníes y traen las ca-
mas, charlamos con Susy hasta que
éstas regresan y la maestra se va para
mis mejores alumnas, fueron la ale-
gría de mi escuelita, (y demuestra or-
gullo) a comienzo de año escolar Ol-
guita estaba retraída y esquiva, atri-
buí esto a su pubertad, fui una tonta
tocar la campana de la escuelita con reclamé por el perjuicio en sus estu-
la cual llama a los niños a clases, re- dios cuando la traían a clases todos
gresa y nos sentamos en el banco de los días de la semana y por ese re-
la anciana a charlar de lo linda que clamo, solamente la traen los sába-
era Olguita. Y Susy me contó cómo dos y el lunes.
la muchacha había sufrido mucho, Siempre estaba en clases, un lu-
que era ahijada de uno de los Enrí- nes llego y toco la campana como
quez, el español. siempre, pero esta vez no vienen mis
-Cuando era muy niña y hasta jo- alumnos, preocupada nuevamente
ven siempre en casa de sus padrinos, los llamo con el mismo resultado ne-
siempre fue hermosa y muy inteli- gativo, más preocupada temiendo
gente y vivaracha, ella e Yretay son una desgracia, fui por la casa más

43
Se les dice a las de cabello claro.
80
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
cercana todas vacías; seguí bus- curso de instrucción primaria, no hay
cando, finalmente afuera de una de donde seguir estudiando y como no
las casas estaba toda la gente; trata- había gente mejor preparada conse-
ron de detenerme pero impuse mi au- guí el nombramiento, mis dos prime-
toridad de maestra y solo así pude ras alumnas fueron Olguita y tu
llegar, las mujeres rodeaban la cama Profe, se apegaron a mí con el amor
y me impedían ver lo sucedido, a la y la admiración que solo los niños
fuerza me dejaron llegar al pié en la pueden dar y cuando llegué me mos-
cual estaba Olguita pálida y con esos traron el local de la escuelita, un
ojos me mira, jamás vi una mirada de cuarto de barro sin revoque ni blan-
tanta angustia y desesperación. Ca- queo, piso de tierra y los bancos de
mino hacia la cabecera y me hinqué vara y catreras con palcas y travesa-
en el suelo agarrando su cabeza, la ños y orilleros de madera encima,
acaricié, un temblor sacudió su servían de pupitres para que escriban
cuerpo, este fue el momento más do- los niños. Jamás imaginé tanta po-
loroso en mi vida, esta niña conver- breza, las dos niñas esperaban anhe-
tida en mujer sin saber, por un amigo lantes la opinión de la maestra que
y compañero de mi padre y los com- mira avergonzada, en ese instante
pañeros de mis hermanos destruyen largué la mentira más grande de mi
mi fe y confianza en los seres huma- vida: está bonita nuestra escuela, te-
nos de mi condición social y cultu- nemos que hacer unos arreglos, hoy
ral; asiento mi frente sobre su frente, en la tarde que vengan todos para po-
un caudal de lagrimas nacidas en mi nernos de acuerdo.
dolor se unen a las de Olguita, en el -Ay profesora, aquí todos somos
más crudo silencio provocado por la pobres no hay plata, me respondie-
impotencia y amargura... en esta ron las niñas
parte Susy queda en silencio, como -¿Quién pide plata? lo que se ne-
en trance con movimientos de la ca- cesitamos son trabajadores para re-
beza de arriba abajo, de sentimientos vocar y pintar paredes, paja para ta-
parece mirar sin ver. par esos agujeros en el techo, carpir
Dice la anciana: -debe saber la todo el campo de la escuela, es todo
historia completa, es también parte lo que necesitamos; pero primero
del pueblo guarani y publicarás con anotar a todos los alumnos, comen-
lo que ya sabes, lo que pronto verás zaremos con ustedes, tu nombre:
en el otro Cerro. -¿Yo, profesora? Soy Yretay
-No lo entiendo ¿y si vos sí? -Bien ¿qué significa?
-Si prima, continúe por favor -“Manantial de Agua Fresca”
-Te contaré toda la historia de la maestra.
escuelita: Seis años hace que llegué -Lindo nombre y vos
a Machipo con mi cargo de maestra, -Soropay que significa “Dios Se
a mis 13 años recién salida de la es- Lo Pague”
cuela d * Cuevo, vencido el quinto -¿Lo cambiamos?
81
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
-¡Sí maestra! -En la tarde recorrimos el viñedo
-Bueno serás Olguita ¿te gusta? con Lucho para evaluar el estado de
-Gracias maestra, si me gusta. las uvas y también calcular la fecha
-Bien alumnas, son las dos pri- del comienzo de la vendimia, dice
meras, pero es necesario llamar a to- Sebas.
dos los niños para inscribirlos tam- Pasado el medio día después del
bién almuerzo fuimos con la Profe a revi-
Ambas salen gritando... se que- sar la viña, han pasado varios días
dan esperando. Del monte que rodea sin poder revisarlo. Los fuertes soles
la escuelita salen los chicos brin- y continuos riegos están apurando la
cando y moviendo los brazos, cual maduración, la Profe tan meticulosa
pollitos tras el cacareo de una clueca. se detiene al azar y propone: tu cuen-
Pronto se llenó la escuelita con sus tas los racimos verdes y yo los ma-
futuros alumnos. Llegó la hora de la duros, un 70% ya están maduros, del
inscripción, son varios ya en la lista saldo falta muy poco; efectuamos el
y toca el tumo a un nuevo niño de mismo análisis en varios lugares con
nombre Michire idénticos promedios; descansamos
-y ¿qué quiere decir? en el banco del cupesí, entre risueña
-“Solamente Pregunto”, señorita y molesta, pregunta la Profe ¿te
-Serás Miguel, ¿te gusta? -Si se- gusta mi amiga Olguita? Mucho, y a
ñorita. vos ¿te gusta?, retruco, -No cambié
La voz de Olguita nos inte- de rumbo, ya, ella es
rrumpe. su nueva Profe, su compañera. -
-Ya está todo arriba, podemos ir- En primer lugar yo no la busqué, no
nos cuando quieran. la llevé, ella se subió, es bonita pero
-Bien Susy te dejo, me cuentas sólo eso, el lugar de mi corazón que
luego del final de tu primer día en la usted ocupa jamás lo ocupará otra
escuelita cuando estemos en casa mujer mientras viva, sólo usted.
¡chau¡ nos vemos, vamos Olga. Puede en algún momento compartir
-Subieron otras guaraníes machi- mi cama, puede suceder que el ins-
peñas y nos fuimos. Cuando llega- tinto opaque el amor momentánea-
mos, en la casa estaban papá con Se- mente, pero jamás ocupará su lugar;
bas recién llegados, inspeccionando sonríe y responde: creo que gracias,-
la recién construida bodega. Ter- el lugar del cual sos la única dueña
mina la inspección cuando llego, Se- en mi vida, te lo ganaste, jamás lo-
bas da la conformidad a las instala- grarán separarte de él. .
ciones y recuerda que sólo falta de-
sinfectar todos los recipientes para la
elaboración y conservación del vino.

82
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez

U
sos.
n ligero codazo de Yretay in-
terrumpe nuestra charla, Se-
bastián nos mira a pocos pa-

-Y que me cuentas
en todo proceso de cosecha y lo que
sea necesario en el cuidado, para te-
ner menos pérdidas en tiempo y pro-
ducto verde que puede haber.
-Mañana temprano te espero, por
-Bien Sebas, la uva para vino está favor Profe si no puedes tú, mandas
madura en un 70%, lo demás en pro- a una de las chicas más activas para
ceso, falta muy poco; las plantas ape- conseguir la gente necesaria.
gadas a las lomas se ven grandes y Olguita espera apoyada en la ca-
de mejor calidad, son mucho más mioneta, en silencio emprendimos el
dulces, terminando con las blancas, viaje, ¡como provoca; entre el deseo
tienen muchos granos dañados por y el recuerdo de la profe... ¡Qué mar-
insectos, mariposas especialmente, tirio! Regresamos, me despide con
lo que comienza a madurar ya está su sonrisa burlona, la mirada invita-
dañado, ¿caminamos juntos? dora, no dormí entre el deseo y el
-Vamos, veamos, responde y co- desprecio.
menzamos por las uvas blancas. - Le gané al sol, con la claridad de
Todo esto está un desastre; es el co- la aurora fui al viñedo, allá esperaba
mentario de Sebas y después conti- con un grupo de cosechadores la
nuamos en las uvas negras, termi- Profe, quien con los brazos abiertos
nada la inspección llegando al gal- corrió a recibirme, nos abrazamos
pón, el ingeniero indica la urgencia como nunca antes. ¡Viene la lluvia,
de ultimar todo lo necesario pues en nos interrumpen!
2 días más estaremos pisando uvas y Una nube negra tanto como la
en el ajetreo es necesario no distraer- noche que se iba, viene del Sur; cien-
nos en otros menesteres, sólo en la tos, miles bajan de la nube, extraños
fabricación del producto; -Yretay, avispones. Sebas bajando de la ca-
serás mi ayudante en la organización mioneta en la cual llegan con mi pa-
de grupos y tumos de trabajo. dre gesticula desesperado gritando:
-Y porque yo Lucho, dice ella ¡langostas, langostas! Corran, espan-
-Porque en el control de cosecha témoslas, no dejemos que coman.
y producción, lo primero es alistar Desordenados comenzamos, Sebas
los grupos de cosecha y el transporte intenta ordenarnos pero todos corre-
de la vid al centro de producciones, mos gritando, saltando, moviendo
y esa es tu misión, porque las muje- los brazos. Vuelan y dando la vuelta
res son mas minuciosas y eficientes se asientan en nuestras espaldas; que
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
sensación de derrota, Sebas ordena De un pequeño salto estoy en sus
que salvemos la cosecha, la planta- brazos, mis pantalones en los tobi-
ción está perdida: mi padre sube a la llos me hacen perder estabilidad,
camione. i e intenta retornar a la abrazados caemos al agua, nuestra
casa, nuevamente interviene Sebas... ropa arrastrada por la corriente,
-No señor, precisamos su movili- salgo en la persecución; al regreso
dad para transportar la cosecha así veo su mirada confiada y llena de es-
será más rápido. La Profe fue la pri- peranza, ¡no la defraudé! Llego, me
mera en llenar su canasta, dos mu- acuesto fuera del agua y la invito a
chachas fueron para descargar la subir, con movimientos pausados,
uva. A la hora del almuerzo, Olguita sube un pié y luego el otro, de pié
a nombre de todos solicitó que nos con las piernas unidas sonríe de las
traigan la comida en dos turnos,... alturas, su belleza es inigualable, con
Con un viaje más basta por hoy; pue- un gesto la invito para recostarse so-
den bañarse y luego a descansar que bre mi cuerpo, lo hace con las brazos
esta noche trabajaremos pisando extendidos y manos apoyadas en el
uvas y si aún queda algo mañana piso, mis brazos rozan su cuerpo de-
continuamos, que después tendre- licioso sobre el mío, mis manos en su
mos mucho tiempo para descansar, espalda presionan su cuerpo para
nos isntruye Sebas. aproximarla más; acaricio su espalda
Con señas la Profe me indica que desde los hombros hasta la promi-
vaya rumbo al chorro, mis piernas no nencia, bajo mis manos sobre sus ca-
se movían con la rapidez exigida. deras, las subo a sus axilas, a la curva
Bajo al chorro y me senté en la ba- de sus pechos duros y pequeños, las
rranca, ella volvió a subir, y mirán- bajo nuevamente a sus caderas y su-
dome a los ojos comenzó a despren- biendo por sus nalgas la presiono
derme los botones de la camisa. Con suavemente, me sonríe y se aban-
una sonrisa picarona me invita a ba- dona a mis deseos; vanos esfuerzos
jar y yo aún no puedo moverme, sus con las piernas unidas, imposible de
manos comienzan a hacerme un ma- conseguir, con ambas manos y su
saje, primero desde los hombros, ba- ayuda, separo las piernas y con ellas
jando hasta las manos, luego por el al costado de las mías seguimos em-
pecho, la cintura y se detienen en el peñados, con el orgasmo próximo
cinturón. Poco a poco retornan las sin conseguir penetrarla, con la
energías y su tipoy desabrochado mano izquierda hecho agua al miem-
muestra y dejan ver dos pechos pe- bro, para postergar el momento cul-
queños. Jugueteando con mi rodilla mine. Esto produce barro a mis cos-
le paso por sus pezones, sus manos tados donde sus piernas se resbalan,
acarician mis piernas solo con panta- siento nuestros sexos por el buen ca-
lones cortos, cada vez sube más su mino, una ligera presión y se intro-
tipoy y ya muestra hasta abajo del duce en la deseada gruta, al intentar
ombligo, el nacimiento de sus vellos.
84
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
evitarlo, sus pies nuevamente resba- Pasamos la tarde unidos en la pa-
lan en el barro, y por fin... el mo- sión de nuestros cuerpos y en el amor
mento sublime nos llena de felici- de nuestras almas. Comienza a oscu-
dad, ella con los ojos abiertos al má- recer, nos vestimos y regresamos a la
ximo y la bo^j. abierta apaga un casa paso a paso unidos por las ma-
grito, un suave grito ¿de placer? O nos, no han notado nuestra ausencia.
¿dolor? En el galpón a la luz de una lámpara
La pasión más fuerte nos lleva a de Kerosén, trabajan las muchachas;
la consumación de la vida, nuestros unas lavan y escogen las uvas sa-
labios unidos en el éxtasis del primer cando las picadas y las no bien ma-
amor ¿no lo ves? La paciencia en dura las pasan a otro gavetón, donde
nuestra espera ya fue recompensada, tres muchachas descalzas y en pan-
¿Cómo sabías que llegó el mo- talones cortos pisan la uva para ex-
mento? La anciana me recomendó: traer el jugo, el cual es retirado por
paciencia ya llegará tu felicidad, un tubo de madera que se encuentra
corta pero completa, el aviso llegar á en la parte inferior y pasado a un to-
de arriba, y con las langostas..., no nel de fermentación; toda la noche
tendrás dudas en la entrega y, llegó pasamos en el trabajo; entre cantos y
la pérdida de toda la cosecha junto rizas. Un rato d esos viene mi padre,
con nuestra felicidad... Embriagados e intenta callarlas. ¡Este agravio
en nuestro momento de amor no ve- árabe; lo calme y lo conduzco por el
mos más allá de nuestros sentimien- camino del silencio y la cordura, si-
tos, las langostas desaparecían en el guen las chicas el trabajo.
horizonte de nuestra felicidad. Aclarando el día, hemos termi-
Luego de la felicidad camal, siento nado con la uva recogida. Con nues-
una unión espiritual máxima, su- tro esfuerzo nocturno hemos llenado
blime, nuestros sentimientos son un dos depósitos de fermentación con el
solo sentimiento de amor a la vida y mosto suficiente para llenar una cuba
cuanto en ella encierra; tierra, árbo- de maduración de vino,... Vicenta y
les, animales; desaparecen la vani- dos empleadas llegan con el desa-
dad y la ambición, solo existe la ar- yuno: tujuré con leche y miel de
monía. En los años transcurridos caña, luego una tacita de café con
posteriormente, muchos momentos masaco para los que quieran un poco
de debilidad sustituyen a esta armo- más, terminamos el refrigerio y mar-
nía, por la desesperación de la vida chamos a la finca en busca de mas
mundana que hoy nos agobia pero el uva para continuar la fabricación del
retorno a este momento de gloria, de- vino, mueren los cantos y la risa,
vuelven las energías “vitales” a mi solo vemos los postes del viñedo con
ser ¡gracias dulce maestra! No te ol- los alambres y unos palos, de lo que
vidaré... (Es imposible describir es- ayer fue un vergel de hojas y raci-
tos sentimientos perdónenme uste- mos, no queda ni un racimos ni nada,
des...)
85
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
las langostas algunas en los surcos nuevas experiencias: unión de dos
mueven sus alas sin poder volar. cuerpos en una sola alma... El tiempo
-Olguita pregunta: ¿Y ahora que pasa pero la felicidad continúa en
se fueron, brotaran nuevamente y apacibles y ardientes uniones cama-
continuaremos trabajando con la les que son guardadas en uno de los
nueva uva en cuanto madure? más íntimos y jamás olvidados luga-
-Veremos qué pasa, nos contesta res de nuestro ser, nos levantamos y
el ingeniero. protegidos de las miradas curiosas
-¿No será necesario regar con caminamos rumbo al chorro... Inol-
agua para ayudar en la recuperación vidables sensaciones nos embargan
de las plantas? mientras más cerca del hermoso lu-
-¡Probemos! responden Aurelio, gar estamos. Desnudos retozamos
Felipe y Anselmo que sin esperar al lado a lado; a momentos ella se ade-
juez de agua para solicitar permiso, lantada con su cadencioso caminar,
comienzan la tarea. Pronto vemos, los cabellos negros que le llegan a las
las langostas que están en el piso caderas mecidos por ocasionales rá-
mueren al inundarse el terreno, Se- fagas de brisa en otra oportunidad se
bas, agarra una por las alas y al reti- queda atrás, en ese momento sólo so-
rarla del suelo, queda enterrada en mos dos jóvenes; siento su mirada
este la mitad posterior de la langosta. recorrer mi cuerpo desnudo, nues-
-Están poniendo huevos para re- tros pensamientos unidos por una
producirse. Siento una extraña ansia milagrosa, bajamos a la ace-
calma, le pido al Señor esta paz, para quia, corre el agua mansamente, a 50
mis padres y amigos del pueblo y la metros o poco más del chorro me de-
región, seguramente todos con la tengo y dando la vuelta la tomo des-
misma pérdida, siento la presión de prevenidamente chocando en mis
la mano de la Profe, en mi mano, brazos abiertos para recibirla. Su
sonríe dulcemente, ¡comprendió! sonrisa y el rubor que la cubre, para-
Regresamos camino a la casa del lizan el tiempo y vuelven al espacio
pueblo sumidos en nuestros pensa- cada vez más y más pequeño, no
mientos, comprendemos sin palabras queda un lugar sin unirse, todo es un
que ahora sólo somos uno con dos todo... Se da la vuelta y trata de es-
cuerpos, con sus necesidades y anhe- capar rumbo al chorro, a pocos pasos
los. Nos retiramos a un pequeño bos- la agarro de la cintura e inclina su
quecillo y atrás de un gramadal cuerpo hacia delante, en esta posi-
verde, que por un raro motivo no se ción nos unimos nuevamente ador-
comieron los depredadores, nos re- mecidos de la lujuria en la danza de
costamos y en silencio nuestras ma- los sexos; dobla una rodilla, la ende-
nos se comunican con nuestros cuer- reza y dobla la otra mientras mis ma-
pos y entre besos y gemidos se pro- nos recorren su cuerpo, gozamos con
duce la segunda unión carnal. Es im- esta nueva forma de hacer el amor, el
posible tratar de comunicar estas vaivén por el movimiento de rodillas
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
producen una sensación de placer in- Vanos nuestros intentos por dete-
creíble... caemos de rodillas en el nerlos; salen de todas partes avasa-
agua. Descansan nuestros cuerpos llando; al medio día solo quedan los
unidos en un dulce beso, nos baña- palos desnudos, los cuales siguen co-
mos, nos vestimos y regresamos a miendo estos hijos del Averno; sin el
casa pues se acerca la hora de cenar, apoyo de mis padres sin el consuelo
pasan los días en felicidad y armo- de la Profe, todo se derrumba... mi
nía. fe, mis esperanzas.
La uva comienza a retoñar, reto- Retomo a la casa del pueblo solo
man las ilusiones de una nueva ven- y amargado, unos pasos atrás me si-
dimia, la Profe llamada por la an- gue Aurelio y los muchachos, todos
ciana se fue a Machipo, mi familia se unidos en la amargura de la derrota.
fue a Santa Cruz. Mi padre ve la so- No sé cuánto tiempo después
lución a nuestros problemas econó- llega la Profe... mi familia aun no re-
micos en la venta de sus camiones, toma de la ciudad. -Alístese, tengo
por eso se encuentran en esa ciudad. un mensaje de la anciana: tenemos
Por la mañana bien temprano estoy que retomar nuevamente al cerro Ta-
revisando el viñedo con nuevas ilu- remacua... Nos fuimos en el Ford 4,
siones cuando veo que una mancha un camión modelo 1930, los dos so-
negra baja de la loma rumbo al vi- los. La anciana no puede ir, me dijo
ñedo, Aurelio a mi lado mira con la Profe; llegamos al pie de la mon-
asombro esta alfombra que camina, taña y continuamos en silencio aga-
mi mente rápidamente me dice que rrados de la mano. Fue mucho más
son los hijos de las langostas, (los fácil y rápido que la primera vez,
chochis) Aurelio ya no está a mi esta vez la Profe más prevenida sacó
lado, lo veo de regreso en compañía de su bocó (especie de saco colgado
de dos hombres más, llegan se ponen al hombro) aticuy y charque, comi-
a cavar una zanja. mos acompañado de unos tragos de
-¿Y eso? agua del manantial a unos metros del
-Tratamos de pararlos, me dice anfiteatro, lo acompañaré a este viaje
Aurelio que junto con Anselmo y Fe- al pasado, fueron sus primeras pala-
lipe comienzan la obra, al llegar a la bras, por lo avanzado del día y con el
acequia los chochis se largan a esta y sol ya por ocultarse, buscamos
son arrastrados por el agua; miren donde pasaríamos la noche. Me dice:
muchachos ¡es la salvación! borre sus amarguras y el rencor de su
-¡No¡ ¡miren¡ dice Felipe... unos espíritu por lo que pasó, ¿cómo lo sa-
metros de agua arriba salen millones bes?
de los “fatídicos”, como se les llama ¿No recuerda? Podíamos hablar
a estos insectos, y van directamente sin la boca, fueron sus palabras, apa-
a las verdes hojas de los nuevos reto- cigüe su rencor y olvide sus amargu-
ños. ras. Retomemos a la paz y tranquili-
dad, la vida es amor, el amor energía
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
que construye. Fuimos a sentarnos a ollas de barro cocinando otros pro-
la sombra de un frondoso soto, su ductos, niños jugando. En otros lu-
tronco nos protegerá del viento frío gares jóvenes con arcos y flechas,
de la noche, allí agarrados de la mar ejercitando su puntería, por la que-
' pronto se unieron nuestras almas y brada llegando hacia Aguas Calien-
retornó ia comunicación interrum- tes un grupo grande de jóvenes can-
pida por tanto tiempo, a causa de mis tando y riendo van rumbo al cerro,
amarguras y rabias acumuladas por llegando a la cumbre de este, otro
las langostas, -no piense en eso,... se grupo y así continuamos por Heyty,
introdujo en mis pensamientos, -si llegamos al cerro más alto conocido
continua amargado no conseguire- hoy como el Incahuasi, una concen-
mos nada ¿no lo comprende? Con las tración mayor de jóvenes distribui-
manos en nuestra cinturas, unidas dos en toda la ceja del cerro, del otro
nuestras cabezas pronto llegó el lado un grupo mucho mayor, de un
sueño, separados como dos herma- ejército mejor organizado y discipli-
nos, aclarando el día despertamos nado rumbo a la cima, pronto se en-
con los primeros rayos del sol, nos contraron y comenzaron la desigual
fuimos a la “piedra de la verdad” pa- batalla, miles y miles de tropas del
rados con la mirada hacia el na- Inca, tratan de avasallar al grupo
ciente, nos sentamos abrazando guaraní los cuales se defendían con
nuestras piernas dobladas y apega- sus arcos y flechas de las hondas in-
das a nuestro estomago, inclinando caicas, pronto vimos la supremacía
la cabeza a las rodillas. Todo ha de la flecha para pelear en el monte,
cambiado de mi viaje anterior, no las hondas y las piedras no eran ar-
mas destrucción de la naturaleza, no mas eficaces en este tipo de lucha, un
hay rastros de los gigantes cabeza de ejército compacto con miles de hom-
paja, todo es apacible, los campos bres en un solo grupo acosado por to-
desiertos sin vegetación, mudos re- das partes por pequeños grupos gua-
sabios de los destructores, mirando raníes, que con sus flechas, pronto
al naciente cambiamos de rumbo a la hicieron estragos a los invasores al-
izquierda, estamos sobre lo que hoy tiplánicos, el método de guerrillas
es Charagua, reconozco nuestros ce- empleados por el pueblo en su lucha
rros, nuestras quebradas, la finca contra los gigantes rubios de los lla-
llena de maíz en flor, nos aproxima- nos chaqueños muy perfeccionados
mos; mucho movimiento de gente, y sincronizados en pocas horas die-
otros regando las tierras de maíz, veo ron fin al poderoso ejército que co-
donde desvían el agua de la quebrada menzó la retirada en forma orde-
por la acequia que conduce para re- nada, acosados por pequeños grupos
gar el maíz, más adelante mas culti- que atacan y desaparecen en la selva,
vos, gente llegando con jocos (cala- en su medio ambiente parecían in-
bazas), cumanda (fréjol), en el fuego vencibles, siguieron retrocediendo; y
al llegar al actual Muyupampa, los
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
incaicos se agruparon en una gran después recién comienzan los movi-
superficie, alejados de las arboladas, mientos, con dolor en las manos.
instalaron sus cuarteles; la noche se Hago masajes en los hombros de la
aproxima silenciosamente, los gua- Profe, en su cuello, espalda, ya no
raníes rodean en pequeños grupos puedo mover nada pero ella ya resta-
sin hacer nada, en espera, hace va- blecida me hace masajes en los bra-
rios días el ejercito del altiplano zos, piernas y en todo el cuerpo, ba-
constantemente atacado por todos jamos del anfiteatro o “piedra de la
los flacos no osan moverse, el espa- verdad” y nos dirigimos al viejo
cio abierto en el cual se encuentran soto, allí pronto restablecimos ener-
es lugar ideal para ellos, esperan el gías, con el aticuy (harina de maíz
ataque definitivo para acabar con los tostado) y charque tomamos agua de
guaraníes... damos un vistazo atrás, la vertiente y agarrados de las manos
no a mucha distancia cientos de mu- recordamos todas las aventuras vivi-
jeres con chípenos (grandes calaba- das... es hora de pensar en nosotros;
zas huecas) se aproximan al lugar de amar en las alturas y con semejante
la batalla, nos vamos rumbo a Cha- vista es una experiencia inolvidable,
ragua, en todo el trayecto jóvenes ar- pasión desenfrenada, amor sublime,
mados con arcos y flechas marchan ni aún los años transcurridos enti-
con miles de mujeres cargadas con bian los recuerdos; estos siguen ayer,
sus chípenos, seguimos en busca del hoy y por siempre.
origen y llegamos a la quebrada de Llega la noche llena de estrellas
Taputá, los niños recogen de una y de luna llena en el cielo, mucho
vertiente un producto aceitoso y con frío trae la brisa de los llanos. Nos
él llenan los chípenos con petróleo. dormimos con el deseo de retomar
¿Para que es? Esa noche sigilosos jó- temprano al día siguiente. Veamos
venes guaraníes buscan a los serenos que pasa en la guerra, nos acomoda-
instalados a las orillas del gran cam- mos y pronto estamos en el lugar. Ha
pamento del Inca, dejan sus chípenos pasado el tiempo suficiente para en-
bien cerrados próximos a las fogatas. contrar una nueva realidad, de muje-
El calor de estas los hace reventar res guaraníes, formando una familia
con grandes llamaradas. Pronto la con soldados de ayer, del incario,
paz nocturna convertida en un in- forman poblaciones donde sólo ha-
fierno de destrucción y muerte. Esta blan guaraní, no hay por ver; retoma-
dantesca visión nos invita a retira- mos a la piedra de la verdad (Yta en
mos del lugar. Solo escuchamos la- guaraní), pronto emprendemos el re-
mentos y explosiones; con mucho tomo por la bajada. En el Ford 4 nos
frío tratamos de mover nuestros en- vamos a Machipo, allí queda la
tumecidos brazos, mis piernas no Profe... ya no hay qué preguntar,
obedecen, el sol aparece con sus pri- solo nos miramos en la despedida y
meros rayos de luz y calor y poco continúo solo mi viaje, muy corto ya,
en la primera cuerva una cuñatay me
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
hace señas para que la lleve a Chara- ritual de toda mi vida, pasan mis her-
gua, es Olguita que toda risueña pre- manitos siguen mi ejemplo y nos re-
gunta: tiramos.
-¿Lindo el paseo?... ¿cuándo me Bien temprano me despierta el
llevas? llamado de la Profe, salgo, abro la
-En otra oportunidad. puerta y sonriente me saluda,- se ol-
-Ya lo sé, fue su respuesta, en si- vidó de nosotras,... está con un grupo
lencio continuamos nuestro viaje, de muchachas que me sonríen, abro
con su sonrisa picarona parecía invi- la puerta y ellas marchan seguras
tar a cosas más íntimas, pero mi rumbo al galpón de la fábrica de
amor es tan grande que no permite vino, sigo avergonzado por mi ol-
devaneos. vido, entramos y el mosto ya com-
Llegamos al pueblo y cuando pletamente fermentado nos espera,
paré para bajar, ella se despide con sin abrir los labios pero sonrientes,
una última sonrisa y un adiós con su tomamos los baldes vacíos, los la-
mano. van, enjuagan con alcohol de una bo-
No llegan aún mis familiares; tella que ya conocían, y una vez bien
pasó el día descansando, paseando seco, Olguita sube a la cuba, la des-
por el pueblo, para compartir con las tapa y la examina bien y con un gesto
amistades del colegio. Pronto aban- las invita a proceder; las miro en si-
donaré esta vida, viajaré a la ciudad lencio y gratitud por recordármelo,
de Santa Cruz, a continuar mis estu- trabajan en silencio, sin apuro, sin
dios si la economía familiar lo per- pausas, terminando el primer fer-
mite, pensé. mentado continua el segundo, pronto
Dos días después llegan mis pa- está llena y cerrada esta cuba y pasan
dres con mis tres hermanitos, dos a la otra preparada hace tiempo; el
mujercitas y un varón, convertido en mismo ritual, con un poco más de la
mi cola que desde que comenzó a ca- mitad con vino y este se acabó. En
minar le está quitando su lugar en silencio aún, traen agua y llenan un
mis preferencias a la gringuita, la ter- fermentador y luego el otro ¿y el
cera mujercita de pecho aún. Cena- azúcar?, pregunta la Profe sin hablar
mos todos juntos y pasamos una ve- camino al depósito. Veo a mi familia
lada intercambiando informaciones, tomando el desayuno, con una bolsa
al fin mi padre dice que llegó la hora de azúcar paso de retorno; mi padre
de dormir y todos marchamos a me llama,- que haces hijo, -hemos
nuestros respectivos dormitorios, vaciado el mosto fermentado a una
pero antes de irme, me acerco a mi cuba llena y un poco más de la mitad
padre, me agacho y con el dedo pul- a otra cuba, llevo azúcar a los reci-
gar me hace la señal de la cruz en la pientes de fermentación. Queda un
frente “Dios lo bendiga mi hijo”, este saldo de cáscaras y semillas... las he-
mos llenado con agua, y el azúcar es

90
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
para aumentar el dulce, luego de ex- modificar nuestros pensamientos,
primir con las manos estos residuos, anhelo nuestra lucha que aún no ter-
medimos el dulce de éstos y le au- mina, hoy nuestras vidas están uni-
mentamos, lo dejamos fermentar y das por una misión, mi camino y el
en 10 o 15 días veremos si es vino o tuyo están marcados, no digas
nos traemos madre de vinagre para nada... son las últimas palabras de la
convertir en vinagre este líquido, anciana... ¿tú serás la nueva anciana?
continúo, -perdón ya regreso. Ella sonríe y se duerme, cuando des-
Las chicas cantan y ríen, con las pierto, estoy solo, llamó a la Profe...,
manos trabajan tal como le expliqué el silencio y los golpes de algunas
a mi familia; la Profe, acercándose puertas mal cemadas son las respues-
hace un ademán como para aga- tas. .
rrar mi cara con sus manos rojas por
el trabajo teñidas por la cáscara de
uva... le acerco mi cara, la restriego
en sus manos, todos ríen, la Profe
queda muda pues no espero esta
reacción, le sonrío y la beso suave-
mente en la frente.
Mucho después, conseguimos la
madre para hacer vinagre. En días
más viajaré a continuar mis estudios,
comprendimos que esto sería nuestro
último día de felicidad, toda la fami-
lia viaja nuevamente, nuestra situa-
ción económica cada vez más deli-
cada, nos quedamos solos Vicenta,
la Profe y yo.
No sospechan nada de nuestro
amor, sabíamos que estos días no te-
nían probabilidad de continuar, la
anciana, clara en sus predicciones,
sentíamos la felicidad empañada por
la amargura de la separación; nues-
tras culturas diferentes, en un pe-
riodo de racismo e incomprensión...
Un nuevo periodo en tu vida, acom-
pañado de Olguita viajarás al Para-
guay, visitarán otro cerro de la ver-
dad y verás otra parte de nuestra his-
toria... visitantes de otras tierras, in-
tentan cambiar nuestras costumbres,
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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez

E l autor nació el año 1933 en Charagua-Santa Cruz. Cuando tenía 2 años,


le toco vivir la evacuación de Charagua cuando la invasión de los Para-
guayos durante la Guerra Del Chaco tuvo que escapar con su familia y
fue cargado y amamantado junto cc.i su madre, por una guaraní de nombre
Ruperta, este es uno de los motivos de su eterno agradecimiento con el gran
pueblo Guaraní.

E l autor falleció el 28 de enero del año 2018. ¡Y en su memoria y para


que ella persista en el tiempo y sea conocido y recordado por muchos,
yó, Fernando Jimenez Cuellar e transcrito este hermoso documento de
quién a pesar de la diferencia de edad, me dio el honor de llamarme amigo!

Por: Adhemar Suárez


Honda consternación ha causado el reciente deceso de Luis Salek Gutié-
rrez (85), de ilustre progenitura y uno de los últimos patricios de su amada
Charagua, que, a lo largo de su existencia, la sirvió devotamente, demos-
trando mucha sabiduría, determinación y prudencia para vencer el ostracismo
y el ninguneo por parte del poder político.
En su casa-jardín, ubicada al pie de la imponente montaña Aguaragüe,
pende una fotografía emblemática de fines de 1980, donde un gallardo y jo-
ven anfitrión aparece rodeado de los ejecutivos del Comité pro Santa Cruz,
Rodolfo Roda Daza y Adhemar Velarde Ortiz, que lo visitaron para diseñar
una estrategia de defensa institucional contra los rumores de intervención por
parte de la dictadura militar de García Meza. En la ocasión, nuestro recordado
personaje remarcó que “Charagua se cansó de ser la cenicienta del país. Pese
a haber sembrado de patriotismo sus mesetas y farallones, durante la Guerra
del Chaco (1932-1935), hasta convertirse en atalaya de la soberanía nacional,
hoy como ayer nos siguen maltratando. Prometo que nadie mancillará nuestra
Casa Mayor. A tiempo de rechazar cualquier pretensión intervencionista, de-
fenderemos con nuestras vidas la integridad del Gobierno moral de los cru-
ceños”.
Presidió en dos gestiones consecutivas el Comité Cívico de la Ciudad Be-
nemérita, convirtiéndose, junto a otros destacados líderes como Miguelito
Gutiérrez, Abelardo Vargas, Mila Muñoz de Suárez, Carmen Mary de Peña,
Isidoro Mery y Francisco Torrico, en pionero del ramal asfaltado Abapó- El
– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez
Espino, base del proyecto carretero El Espino-Charagua-Boyuibe, que el ac-
tual Gobierno se ha comprometido a construir. Apoyó vigorosamente la crea-
ción de la provincia Charagua, a partir de la segunda sección municipal de la
provincia Cordillera, que la Cámara Baja del Parlamento aprobó en grande.
Bordeando los años 90, llevó adelante un importante simposio de desarrollo
integral bajo el lema: “Los grandes desafíos de Cordillera, hoy y mañana”,
que nucleó a expertos medioambientalistas y dirigentes cívicos y originarios
de la región.
Uno de los panelistas, Nelson Bustos, ponderó el evento diciendo: “Se
han sentado las bases para consolidar un plan, a mediano y largo plazo, que
busca impulsar el desarrollo socioeconómico sostenido y sostenible de estas
fecundas tierras”.
Se apagó el fuego de un amigo leal y munífico, mentor de juventudes y
que enalteció a Charagua.

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– Camino a la Gloria – Por: Luis Salek Gutiérrez

El autor escribe esta novela cumpliendo con una


misión que el año 1945 le encomendara una an-
ciana sabia Guaraní de la Comunidad de Machipo
en la provincia Cordillera del departamento de
Santa Cruz. A través de un libro el debe difundir
entre la gente parte de la historia no escrita vivida
por el pueblo Guaraní. “Pasaran muchos años, en
un libro lo contaras todo, esta es tu misión” estoy
cumpliendo al escribir este libro dice el autor.

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