Está en la página 1de 4

El amor reflejado en “La insoportable levedad

del ser”.
“Los personajes no nacen como los seres humanos, del cuerpo de su madre, sino de una
situació n, una frase, una metá fora en la que esta depositada, como dentro de una nuez, una
posibilidad humana fundamental que el autor cree que nadie ha descubierto aú n o sobre la que
nadie ha dicho aú n nada esencial” Pá g.. 232

Es cierto que los personajes no nacen como los seres humanos, y que simplemente
son ideas expresadas por el autor. En general el libro es una serie de pensamientos
y visiones, en ocasiones contradictorios, expresados simplemente en distintos
personajes. Personajes contradictorios o no, siempre provenientes de una misma
mente.

Las ideas de Milan Kundera reflejadas en su libro “la insoportable levedad del ser”
me resultaron sumamente interesantes. Mediante sus personajes aborda temas de
política, filosofía, experiencias de vida, sexualidad y amor. En especial amor, la
novela del autor es sin duda una historia de amor; una historia en la que se pueden
observar los distintos conceptos de este sentimiento que a pesar de tantos añ os de
vida humana no se puede comprender.

Es debido a lo ya dicho que he decidido basar este ensayo en el amor aunque suene
a cliché, que sin duda lo es. Pero ¿acaso no es de lo mas importante de lo que
siempre se habla?, considero que seria un tema aburrido o incluso superfluo si en
definitiva lo entendiéramos, pero como no lo hacemos y probablemente nunca lo
hagamos, es por eso que me doy el lujo de unirme a los escritores del amor.

Para iniciar debo de dejar en claro que no me referiré al amor paternal, a la


amistad, al amor hacia al hijo, al amor religioso o a todas las expresiones de amor
que no sean referentes a un amor de pareja. No lo hare, en primera porque el libro
se refiere a un amor de pareja y en segunda porque un amor hacia un padre, un
hermano, un amigo o un perro, no traen consigo las mismas consecuencias o
efectos.
Kundera lo expresa perfecto en el amor de Teresa a Karenin (su perro), “es un
amor desinteresado: Teresa no quiere nada de Karenin . Ni siquiera le pide amor.
Jamá s se ha planteado los interrogantes que torturan a las parejas humanas: ¿me
ama?, ¿Ha amado a alguien má s que a mí?, ¿me ama má s de lo que yo le amo a
él?...no pretende transformarlo…,no tiene celos de sus aventuras secretas.” Pá g.
310

Un amor de pareja es mucho má s tormentoso y poderoso. El amor de pareja tiene


el poder de brindar aire y sofocar. E incluso es mucho mas difícil de encontrar. Y si
se encuentra ¿Có mo se sabe que se ha encontrado?, ¿có mo sabe uno que tiene que
dejar de buscar?, ¿Có mo se sabe que a pesar de los errores (ya que nadie es
perfecto) no hay nadie que nos complemente mejor?, ¿có mo sabe uno si seguir su
intuició n o no?. La respuesta es sencilla, nunca se sabe.

“el hombre, dado que vive só lo una vida, nunca tiene la posibilidad de comprobar
una hipó tesis mediante un experimento y por eso nunca llega a averiguar si debía
haber prestado oído a su sentimiento o no.” Pá g. 41 En parte es por eso que el
amor es tormentoso, porque la hipó tesis sobre si es o no el mejor amor ,por así
llamarlo, no es comprobable.

“Todos consideramos impensable que el amor de nuestra vida puede ser algo leve,
sin peso; creemos que nuestro amor es algo que tenia que ser ; que sin el nuestra
vida no sería nuestra vida. Nos parece que el hurañ o de Beethoven , con su terrible
melena, toca para nuestro gran amor su “es muss sein!”” Pá g.42 Un “debe ser” que
nos tranquiliza constantemente manteniéndonos en donde estamos y con quien
estamos. Pero lo mas probable es que la realidad sea otra, probablemente como
expresa Kundera existe una cantidad infinita de amores no realizados por otros
seres, de los cuales nunca conoceremos ni compararemos con el amor de nuestra
vida.

Lo raro y a la vez interesante del amor es que no se puede hablar de amor sin
dolor. Y es ló gico, cuando el amor nos produce una sensació n de bienestar y
felicidad, al no estar presente, no nos queda má s que sentir el malestar. Es esto lo
que hace tan poderoso al amor. Que tiene la capacidad de hacernos sentir tanto la
levedad como la carga mas pesada.
El dolor como parte del amor no es algo malo, no por nada todas las grandes
historias de amor, son las que contienen mas dolor inmerso en ellas, Romeo y
Julieta, Tristá n e Isolda, Tita y Pedro (Como agua para chocolate), Mina y Drá cula.
En fin es probable que un amor verdadero no sea posible sin dolor.

Y es que el amor va de la mano con muchos factores, como por ejemplo la libertad.
Un amor monó gamo renuncia a su libertad, a su forma de vida. En primera
renuncia a su libertad de expresió n sexual, y exige lo mismo de su pareja. En
segunda renuncia a su libertad de individualidad, aunque no del todo, pero si una
parte de lo individual del ser se hace complementaria de otra. El individuo deja de
ser solo él al tomar en cuenta a su pareja en un porcentaje de sus acciones. En
pocas palabras en la monogamia el individuo sacrifica su libertad por su amor.

El personaje de Kundera, Tomas no practicaba la monogamia , sin embargo la


exigia, no de sus amantes pues ellas podían tener incluso varias personas mas y no
le molestaría, mas si de Teresa. Tomas se percato desde un inicio en su relació n
con ella “que consideraba que su fidelidad era una condició n imprescindible” Pag
24. Sin embargo aú n así , teniendo la libertad sexual, y la fidelidad de Teresa,
Tomas en ocasiones se sentía atado, como si cada uno de sus pasos fuera
observado por los ojos de ella. “Era como si le hubiera atado al tobillo una bola de
hierro.” Pá g. 37

Una relació n monogama aunque implica el sacrificio de la libertad también


representa un lujo, ese lujo de evitar los celos y la inseguridad propia, y al mismo
tiempo el bienestar de evitar sentirnos vigilados constantemente, al estarle
causando al otro el malestar de los celos e inseguridad.
Tomas se decía: hacer el amor con una mujer y dormir con una mujer son dos
pasiones no só lo distintas sino casi contradictorias. El amor no se manifiesta en el
deseo de acostarse con alguien (ese deseo se produce en relació n con una cantidad
innumerable de mujeres), sino en el deseo de dormir junto a alguien (este deseo se
produce en relació n con una ú nica mujer) Pá g. 21

Querer a alguien por compasió n significa no quererlo de verdad. Pá g. 27

Tener compasió n significa saber vivir con otro su desgracia, pero también sentir
con él cualquier otro sentimiento: alegría, angustia, felicidad, dolor. Esta
compasió n significa también la má xima capacidad de imaginació n sensible, el arte
de la telepatía sensible; es en la jerarquía de los sentimientos el sentimiento má s
elevado. Pá g. 27

¿Un acontecimiento no es tanto má s significativo y privilegiado cuantas má s


casualidades sean necesarias para producirlo? Só lo la casualidad puede aparecer
ante nosotros como un mensaje . Lo que ocurre necesariamente, lo esperado , lo
que se repite todos los días, es mudo.

Si la excitació n es el mecanismo mediante el cual se divierte nuestro Creador, el


amor es, por el contrario, lo que nos pertenece só lo a nosotros y con lo que
escapamos al Creador. El amor es nuestra libertad. El amor está al otro lado del “es
muss sein!”

“Parece como si existiera en el cerebro una regió n totalmente especifica, que


podría denominarse memoria poética y que registrara aquello que nos ha
conmovido, encantado, que ha hecho hermosa nuestra vida. Pá g. 218… El amor
empieza en el momento en que una mujer inscribe su primera palabra en nuestra
memoria poética.

Es posible que todas estas preguntas que inquieren acerca del amor, que lo miden ,
lo analizan , lo investigan , lo interrogan, también lo destruyan antes de que pueda
germinar. Es posible que no seamos capaces de amar precisamente porque
deseamos ser amados, porque queremos que el otro nos dé algo (amor), en lugar
de aproximarnos a él sin exigencias y querer só lo su mera presencia .

También podría gustarte