Está en la página 1de 19

CAPÍTULO IV

NACIONALIDAD DE LAS SOCIEDADES

l. CUESTIÓN PRELIMINAR
la nacionalidad produce una serie de efectos
1
Respecto de las personas natura es, i son los siguientes:
· 'd' e según RICARDO B BALESTRA'
JUfl icos qu , . · los derechos O los deberes políticos, o
a) Les otorga a deterrrunadas pe~s?nas .
ambos, y les fija sus obligaciones Jillhtares, . ,, . .
ño de detenninadas funciones pubhcas,
b) Faculta para e1desempe ,, .
c) Autoriza a la obtención del pasaporte para retomar al pa1s, y, en caso de m-
digencia, a ser repatriado por el Estado; Y
d) Habilita para obtener la protección diplomática del ~stado en caso de que
los intereses de sus nacionales sean lesionados en el extranJero.
En derecho privado, la nacionalidad ha servido de punto de conexión para ~e-
gular el estatuto personal (estado y capacidad de las personas) y algunas regulac10-
nes de familia.
Ahora bien, ¿qué ocurre con las personas jurídicas? Desde luego que a estas
no les son aplicables los efectos de a), b) y c), porque son específicos para las per-
sonas físicas. En cuanto a la protección diplomática, da lugar a responsabilidad del
Estado en caso de denegación de justicia.
La nacionalidad de las personas jurídicas y, en particular, la de las sociedades,
es planteada a partir de su internacionalización, porque su radio y esfera de acción
rebasan la soberanía de un Estado y penetran en otros territorios estatales.
Es necesario determinar si las sociedades tienen nacionalidad, o no. En efec-
to, por tradición habían aceptado los doctrinantes la nacionalidad de las socieda-
des, pero recientemente2 algunos conceptúan que no era posible que el vínculo mo-
ral de la nacionalidad existiera entre una persona moral y el Estado, ya que se
trataba de una vinculación de carácter esencialmente político y sociológico.
1
RICARDO B. BALESTRA, Nacionalidad, control y régimen internacional de las sociedades,
Buenos Aires, Edit. Abeledo-Perrot, 1969, pág. 6.
LY~N-CAEN et RENAULT, Des sociétés, 4ª ed., t.
parte 2ª, núms. 1164 y ss.; cita de NmoYET,
11,
op. clt., pag. 140; PILLET, Personnes morales en droit international privé vol I Paris 1913 núms.
80 a 113, págs. 118 a 160. · ' · ' ' '
~~,-~·: o-:.
n:e:XJ:.~:n~-:~:::::~~:~:::~t.~:e-da
1
~ d- - - - - - - - - - - - - - --117~3
con un Estad 1
no implica que a sociedad tenga n . . . 0 Y a sumisión a su régim 1 al
dadera nacionalidad, la única que a~ionalidad. J. P. NmoYET3 expresa· '~Ln eg
. . •d existe, crea un 1 . , • a ver-
un mdivi uo y un Estado. Hasta abo 1 a re_ acion de orden político entre
. t 'T' • ra, e derecho mte ·
ninguna ora. J.eruendo esto en cuent . , mac1onal no ha conocido
,t. a, l.como es posibl ·
de orden poli 1co entre una persona e concebu una relación
? H mora1-u otra fo ·,
Estado. ay en ello algo que no se co d rmac10n equivalente- y un
. 1 1 mpren e Un Estad0 f
nac10na es, os cuales constituyen su s ta . · se orma mediante sus
·fi us neta Las forma
les mam estan su actividad no aume ta : s con que los naciona-
, n ne1 numerode 11 N
se que España esté constituida ante tod _ e os. o puede admitir-
más, por sociedades españolas, en las cuºa1' pofir espa~oles (personas físicas) y, ade-
. .· ' es guraran de nuevo forz
nusmos nacionales. De admitir 1 .. , . , , osamente, 1os
a opimon contrana, habna que admitir también
que un Es~a~o puede aumentar ficticiamente el número de sus nacionales".
La p~actlca emplea impropiamente el vocablo "nacionalidad" para referirse
l~s _sociedades, ya que, como lo expresa el autor mencionado con gran criterio
JUndi~o, el hech~ ~e que un automóvil esté matriculado en un país no significa
que dicho automovil haya adquirido nacionalidad. Así, cuando se habla de nacio-
nalidad de una aeronave, no significa que esta tenga nacionalidad, sino que lleva
el pabellón de determinado país. Lo importante no es determinar si una sociedad
tiene nacion;didad o no, sino estudiar su estatuto jurídico o el régimen legal al
que está sujeta. Además, la relación política no puede aceptarse entre el Estado y
una cosa, por ejemplo, un buque o una aeronave.
El Tribunal Arbitral Mixto franco-alemán, en decisión de 30 de noviembre
de 1923, asun{o Jordán, rechazó la nacionalidad de las sociedades4: "El Tribunal
estima que, ~as so.ci~dades en comandita en su calidad de personas morales, no
tienen naci,o~a}ic;l~d propiamente dicha, ya que esta confiere derechos (como el
derecho delisufragio, el derecho a ser nombrado para ejercer funciones públicas,
la protección contra la extradición, etc.) e impone, además, obligaciones, como la
del servicio militar, quy no pueden aplicarse más que a las personas físicas". Pero
aceptando que por un mal uso del lenguaje las sociedades tengan nacionalidad,
¿cómo' se'reconoce si' una sociedad es nacional o es extranjera? Se han propuesto
! ' ,· •

varias teorías.
En r~sumen, se pueden citar las siguientes tendencias: .
a) ~a mayoría de los,países europeos, en su doctrina Yjuris;rudencia, adm1ten
la nacionalidad de la sociedad. Sin embargo, algunos autores la han rechazado.
. .
3 J. P. NIBOYET, Principios de derecho internacional privado, México, Editora Nacional, 1960,
págs. 140 ,y SS.
4 Cita de J. P. NrnoYET, en op. cit., pág. 145.

.AND:
5 Pn.LET Des personnes morales en droit international privé, vol. I, Paris, 1914, pág. 13~;
P~PY , Pépy ;hése, París, 1920, pág. 122; S. HAMEL, 1924, 2. 25; DE GALLAIX, Nouveau evue e
174
.onalidad de las sociedades y que es
· actohab lar den ªel
BATIFFOL6 dice q~e no es inex_ . d de navíos, barcos y aeronaves, que expresa
una noción próxima a la nac1onal1da .
., . .d d nacionales o extranJeras.
tamb1en las act1v1 a es . Estados Unidos, las sociedades se
, 1OsaJones Inglaterra Y
b) En los pruses ang ' d d se las ha incorporado (tesis de la incor-
h del país en on e ·
regulan por e1derec O . orado una sociedad al derecho de cierto
., ) l hecho de haberse 1ncorp ., .
porac1on , Y e . . d d tiene derecho a la protecc1on diplomática de
Estado implica el que dicha soc1e a
tal Estado. . . F t rmulada· en 1876 por e 1 nunistro
· · · de
argentino
e) Doctrina /rigoyen. ue O - . ~ ,
. d B ardo de Irigoyen. En dicho ano se presento un
Relaciones Extenores, octor ero , d 1
. · · d Santa Fe el Banco de Londres y Río a Plata. La
conflicto entre la provincia e , ., . .
provincia había dictado una ley que ordenaba la convers1on en oro de las elills10nes
de papel moneda autorizadas por el gobierno local. Como el ~aneo de Lo~dres
no realizó dicha conversión y dispuso del oro en otras operaciones, el gobierno
local tomó medidas sancionatorias contra la sucursal Y sus representantes. Ello
originó una reclamación diplomática del gobierno inglés? a .l a que respondió el mi-
nistro Irigoyen:
"Las personas jurídicas deben exclusivamente su existencia a la ley del país
que las autoriza y por consiguiente ellas no son nacionales ni extranjeras. La so-
ciedad anónima es una persona distinta de los individuos que la forman, y aunque
ella sea exclusivamente formada por ciudadanos extranjeros, no tiene derecho a la
protección diplomática".
d) Código de Bustamante. El artículo 92 dispone: "Cada Estado contrayente
aplicará su propio derecho a la determinación de la nacionalidad de origen de
toda persona individual o jurídica y de su adquisición, pérdida o reintegración
posterior, que se hayan realizado dentro o fuera de su territorio, cuando una de las
nacionalidades sujetas a controversias sea la de dicho Estado. En los demás casos,
regirán las disposiciones que establecen los artículos restantes de este capítulo".
Para las sociedades civiles, mercantiles o industriales que no sean anónimas,
el artículo 18 establece que "tendrán la nacionalidad que establezca el contrato
social Y, en su caso, la del lugar donde radicare habitualmente su gerencia o di-
rección principal". -
. R~specto _de l~s sociedades anónimas, el artículo 19 dispone que "se deter-
minara la nacionalidad por el contrato social y, en su caso, por la ley del lugar en

Droit. International
, Privé' 1936• pág · 485·, J • p• NIBOYET, Traite
· , de drozt· mternational
· · , franrais,
pnve ·
op. Clt., t. I, num. 77; t. 11, 751; SAVATIER, op. cit., pág. 428.

, Traité élémentaire de droit international privé, 4eme ed., París, Librairie


HENRI BAT.IFFOL,
Generale de Drmt et de Jurisprudence ' 1967'pag.
, 221 .
NACIONALIDAD DE LAS SOCIEDADES
175

que se re~ne normalmente la Junta General de Acci .


del lugar en que radique su·princi . 1 . .. _oru~tas ~' en su defecto, por la
,. , ; . , , .. pa Junta O conseJo directivo o administrativo"
El articulo 21 preceptúa•· "Las di' spo sic10nes
. . del artíc 1O 9º · ·
fieran a personas jurídicas y las d 1 , u - , en cuanto se re-
e os articulos 16 a 20 , ¡·
Estados contratantes que no atribu . . ' no seran ap icadas en los
. b yen nac10nahdad a dichas personas jurídicas"
Sin ero'bl'argo, un grupo de Estados (Colombia A
o ·· ' rgent'ma, paraguay Costa Rica . ·
y Repu, ica ominicana) hicieron la siguiente reserva.. "que no entendian
• 1 • • • ,
' , para
nada, aprobar . directa o indirectamente las di· sposic10nes
· · que son· contranas
· • a la
regla de que las person~s jurídicas deben exclusivamente su existencia a la ley
del
. Estado
,, que las autonza y que en consecuencia
· · no son ru· nacionales
: ni extran-
Jeras. . '1 1

2. NACIONALIDAD DE LA S?CIEDAD SEGÚN EL LUGAR DE CONSTITUCIÓN


De acuerdo conjesta tesis la sociedad tendrá la nacionalidad del lugar donde
se ha constituido. Sus partidarios afirman que este es un criterio inmutable y fácil
de conocer y que 'es lógico que la sociedad esté sujeta al Estado en donde nació y
en donde fue reconocida oficialmente.
Sin embargo, esta teoría ha sido criticada porque se presta al 'fraude, porque
permite constituir una sociedad en un Estado, con el fin de sustraerla al cumpli-
miento de las leyes del país en donde va a desarrollar sus negocios. Al respecto
afirma J. MAURY7 : "En,cuanto'al país de constitución, depende exclusivamente
de la voluntad de los fundadores, quienes pueden escoger el país donde constitui-
rán la sociedad. Elevarlo a criterio de la nacionalidad, equivale, por tanto, a dejar
esta a libre elección de los primeros socios, lo que facilita todos los fraudes y lo
que es difícilmente admisible".

3. NACIONALÍDAD DE LAS SOCIEDADES SEGÚN EL LUGAR DE AUTORIZACIÓN


DEL GOBIERNO
Esta teoría presenta los siguientes inconvenientes que con claridad anotar~
CAICEDO CASTILLA8: "Presenta en la práctica el defecto de que no en t~dos los pat-
. · · ' d 1 b ·emo para que una sociedad pueda
ses se requiere la previa autonzacion e go i .
constituirse. Esa ausencia de una legislación uniforme sobre el particular hace
, Ad , n los Estados en donde la auto-
imposible la aplicación de, la teona.
, • emas,
nte ae las sociedades anommas
, . Y no a
rización es precisa, ella se refiere unicame
. . M' • Edit José M. Cajica, 1949, pág. 181.
7 J. MAURY, Derecho internacional privado, ex1co, . . , Ed't 11 ·s 1967
. ional privado, Bogota, 1 . enu ' '
8 JosÉ JOAQUÍN CAICEDO CASTILLA, Derecho mternac

pág. 147.
176 DE LA NACIONALIDAD

toda clase de sociedades o personas jurídicas. Por otra parte, también es.te sistema
puede originar fraudes cuando se obtenga la autorización en_ un Estado: Ylas activi-
dades de la sociedad se encuentren más íntimamente unidas ª los I~tereses de
otro".

4. DETERMINACIÓN DE LA NACIONALIDAD SEGÚN LA DE LOS SOCIOS

Algunos autores sostienen que la nacionalidad ~e la so~i~dad s_e debe fijar


según la de los socios fundadores, o según la de los socios adm1n1stradores o gesto-
res o según la de la mayoría de los socios o accionistas. A esta teoría se le han
hecho las siguientes críticas:
a) Los socios fundadores hoy son, pero mañana no, a causa de la transferencia
a título de venta o de que se retiren;
b) Los socios gestores o administradores pueden cambiar o ser removidos y
habría que concluir que la nacionalidad cambia con el cambio de los .socios ,ges-
tores;
c) Si se acepta que la personería de la sociedad es diferente de la p~rsonería de
los socios, no se ve cómo la personería y nacionalidad de los socios pueda influir
en la nacionalidad de la sociedad;
d) La mayoría cambia por venta o traspaso del interés social, y en este.caso
cambiaría la nacionalidad;
e) En muchas ocasiones es casi imposible saber la nacionalidad de la mayo-
ría, especialmente en las grandes compañías que efectúan o aceptan acciqnes al por-
tador.
9
J. MAURY expresa: "La nacionalidad de los socios se rechazaba, porque tomar-
la en consideración, hubiese sido hacer abstracción precisamente de la personali-
dad de la sociedad, que constituye una entidad distinta de los miembros que la
componen. Por lo demás, de hecho, los miembros frecuentemente son desconoci-
dos en las sociedades de capitales (en toda la medida en que la acció~,al portadÓr
se admite); y en las sociedades de personas, de personal a veces muy reducido
(sociedad en nombre colectivo o sociedad civil), pueden ser de nacionalidades
diferentes".

5. DETERMINACIÓN DE LA NACIONALIDAD SEGÚN EL DOMICILIO

Esta tesis sostiene que la nacionalidad de una sociedad se determina según su


domicilio, que puede ser: o el domicilio social, o el domicilio efectivo, o el de la
sede principal de los negocios.
NACIONALIDAD DE LAS SOCIEDADES

Se decía que la sociedad d b' 177


. .d d e ta tener la na . .
su acttvi a , ya que esta era el soporte de la cionahdad . del país donde rea1·izara
Hubo partidarios de la teoría del " personalidad.
" d . l"
e 1a se e socia . Algunos autor centro de explotaci'6n" y otros de la teorí
d. 1 , d es como LYoN-CA a
nido a teona el centro de explotac. , S . EN Y RENAULT habían soste-
. 'dad re al 1e era impuesto en ci· ion.
acttvi rt e us part1darios decian ·, que el lugar de la
e a iorma a la . d
ba a ser, por tanto, imposible todo fr d socie ad por su objeto, y llega-
au e.
, A· esta tesis
· se le hacen las sigu.ientes observaciones
. · 1·ª) h •
anonimas tienen negocios en dive , · - mue as sociedades
nalidades; 2ª) el centro principal drs~s pruses,_de donde resultarían varias nacio-
sultarían también van· . . e os negocios puede trasladarse, de donde re-
as nacionalidades· 3ª) · 'd 1 •,
de los súbditos cuand • ' impi e ª proteccion de los intereses
d d d . T ,d o esos mtereses estan representados en acciones de socie-
a es omtci ta as en el extranjero; 4ª) el Estado resulta protegiendo a 'súbditos
que no son suyos. -
J• MAURY 1~ sintetiza las ·críticas en estos términos: "En primer lugar, hay con-
tra ~lla argument?s de orden práctico que parecen determinantes: primeramente,
teniendo una sociedad su sede social en un Estado civilizado, puede tener como
fin la explotación de determinadas riquezas en un país no civilizado aún, y es di:..
fícil, si no imposible, admitir que tenga la nacionalidad de este último, la del país
donde no habrá, naturalmente, ninguna reglamentación adecuada; en seguida, los
centros de explotación pueden multiplicarse, estar situados en países diversos,
puede ser difícil determinar el principal centro de explotación que deba atribuir
la nacionalidad; puede acontecer también, ·aunque esto sea excepcional, que una
sociedad, como la Compañía Internacional de los coches-cama, actúe simultánea
e igualmente en varios países. El lugar de la actividad real es, ell ciertos caSos,
difícil de precisar. El derecho necesita certidumbre, estabilidad".
· La teoría de la "sede social" úene el inconveniente de hacer posible el fraude
mediante el establecimiento de una sede fraudulenta, es decir, que una sociedad
se establezca en determinado país, únicamente para eludir la reglamentación legal
de otro con el que tiene la sociedad nexos materiales.
El sistema del domicilio fue el adoptado por la jurisprudencia francesa con
anterioridad a la guerra 11 • . •
Este sistema fue también adoptado por el Tribunal Permanente
12
de ArbitraJe de
La Haya (asunto Canevaro, Italia-Perú, 3 de mayo de 1912) - S~ debe observar
· · d · f · , t el domicilio social fraudulento,
que 1a Junspru encia rancesa reacciono con ra .

lO J. MAURY, op. cit., págs. 180 y SS.


11 Cas., 20 junio 1870 y 29 marzo 1898.
12 Revue de Droit lntemational Privé, 1912, pág. 331.
DE LA NACIONALIDAD

178
buscado caprichosamente por las partes para hacerle fraude a la ley, y lo sustitu-
yó Por el domicilio social efectivo". . . .
En cuanto a los países ratificantes del Tratado de .Montevideo, nge el pnnci-
pio del domicilio comercial, que según el artículo 3° :•es_ el lugar donde el ~omer:
ciante o la sociedad comercial tienen el asiento pnncipal de sus negoc10s. S1
consti;uyen, sin embargo, en otro u otros Estados, establecimien~os, sucur~ales
o agencias, se consideran domiciliados en el lugar en donde funcionen Y suJetos
a la jurisdicción de las autoridades locales, en lo concen)iente a las operaciones

que Se practiquen".
allírige por el derecho del Estado en donde se encuentre tal domicilio "la 2
calidad del documento que requiere el contrato de sociedad" (art. 6 ); el conte-
nido del contrato social; las relaciones jurídicas entre los socios; entre estos y la
sociedad; y entre la sociedad y terceros (art. 72). El artículo s• hace regir a las
sociedades mercantiles por las leyes del Estado de su domicilio comercial, como
~rincipi? general. Entre tanto, el artículo 82 del Tratado de 1940 estableció que
las sociedades mercantiles[...] serán reconocidas de pleno derecho en los .otros
Estados con~a~tes y se reputarán hábiles para ejercer actos de comercio y com-
parecer en JU1C10".

6. NACIONALIDAD DE LAS SOCIEDADES DURANTE LA GUERRA DE 1914-1918

Con motivo de la primera guerra mundial se resentó 1 .


nerles medidas de control a los súbd't d p .
1 os e potencias enemi e problema de
• impo-
Yempresas enemigas: así' en Inglaterra(,.,.,_ d' .
1 ra zng with the
gas Y a sociedades
or en de 29 de febrero de 1916) y Al . . enemy act), Francia
( dnoviembre de 1914).
de emama (decretos de 4 de septiembre y 26

S~ planteó el conflicto de saber si solamen .


eneID1gas aquellas cuya sede social real t . te se considerarían sociedades
{°es: presentaba en Francia antes de la ;;euVJera en p~s enemigo. La situación
os anos _anteriores a la guerra de 1914 hrr~ es descnta por J. MAURY14 así: "En
establecidas en Francia, . compuestas ,dse . abian fundado numerosas sociedades
general alemanes , que en su mayoría se habían
e importantes
co . .elementos extranjeros, en'
nstltuido con capitales alemanes
VS '
13 . pág. 277 C
TRUPP, .
persona jurídica con sede :n ;n~varo-Fall, casos Canevaro y T .
gobierno de dicho Estado p ~s y formada con súbditos del ~unfo. En el caso Canevaro una
1·1arianos accionistas e Ita11·a
· eru redUJO· esos créditos por la leyrmsmoM, prus - tenía créditos contra
' el

con b=~
Tribu I permanente' de Arbitraje protestó
de LacoH:1ra 1a ley pe':"ana. Perú
en que cuando se promul , 1 ya, el cual dictó el 3 d
tard ueg"':°n a ser súbditos
· easItali:
sometieron el asunto al
" go aleyp e mayo un¡ d
. MAURY, op. cit., págs. 182
y ss.
eruanatodoslosmiembrosdela sociedad ªº. o favorable a Perú,
eran peruanos.
1
NACIONALIDAD DE LAS SOCIEDADES
17
y cuyos gerentes
Tal
o administradores, y aun sus d" 9
alemana. es sociedades tenían sus d . irectores, eran de nacionalidad
tales soc1e a es as reglas relativa 1 , . en Francia.
· d d 1 · e e social · ¿Se aplicaría 0
. ? L , . s a os subd1tos ene . no a
eneIDigas. a practica francesa se hab' d . ffilgos, a las personas morales
. . d . ta efirudo en 1 .
la Junspru enc1a no quiso admitir q . . e sentido de la alternativa·
· . ue e1 cnteno de 1 d . ·
en Francia continuaran funcionando lib ª se e social permitiera que
dades, manifiestamente peligrosas remente, durante las hostilidades, socie-
' que escaparan estas 1
Por tanto, los tribunales tuvieron q
.
.
ue precisar en qué s
ª secuestro de, sus bienes.
eneIDigo de una sociedad aparentem t fr e reconocena el carácter
NrnoYET1s: "No era posibl . en e ~cesa por su sede social". Como dice
e seguu manteniendo el pu t d · d
social, pues esta fórmula hubiera .. n °
e vista el domicilio
manejos en Francia por la , .!ernutido a los alemanes continuar todos sus
'bdit . via soci , no obstante estar prohibido el comercio con
1os ~u os enermgos".
. Unacirculard
" . lM"tnisteno
· · de Justicia francés, de fecha
· 29 de febrero
· de 1916
die~: La nacwnalidad aparente de las sociedades no puede considerarse como un~
reali~ad: Las forma~ j~rídicas con que la sociedad aparece revestida, el lugar de
su pnnc1pal establec1rmento, la nacionalidad de los asociados, gerentes o miem-
~ros de los organismos fiscalizadores, todos los indicios que el derecho privado
tiene en cuenta para determinar la nacionalidad de una sociedad, son inaplicables,
quedando limitada la cuestión a fijar, desde el punto de vista del derecho público,
el carácter real de esta sociedad".
La tesis de esta circular sostenía que una sociedad debía asimilarse a una so-
ciedad enemiga, siempre que su dirección y capital estuvieren en su mayor parte
o íntegramente en manos de súbditos enemigos.
Los tratados de paz han empleado la teoría del control, al fijar las cláusulas
respecto a la liquidación de bienes enemigos: Versalles (arts. 244, 276c, 297a, 297b,
298); Saint Germain (art. 249); Trianón (art. 232); Neuilly (art. 186); Convenio
Internacional de Navegación Aérea, del 13 de octubre de 1919 (art. 7º). También,
en leyes especiales de Francia (12 de noviembre de 1938) y Suecia (1925). En
Francia, el decreto-ley del lº de septiembre de 1939 considera enemigas a las
personas morales con sede en territorio enemigo, a aquellas sociedades -que
dependan de alguna manera de una o varias personas físicas o morales enemigas-
y a las sucursales y filiales de personas morales, cuando reúnen las precedentes
condiciones, aunque la persona moral de la que dependan no sea enemiga. Según
la teoría del control, se debe averiguar por quién está controlada la sociedad. Si
está controlada por súbditos extranjeros, será extranjera.

15
J. P. NmoYET, op. cit., pág. 154. NmoYET, "Existe-t-il vraiment une nationalité des sociétés?",
Revue de Droit Intemational Privé, 1927, págs. 402 y ss.
180 DE LA NACIONALIDAD

El tratado firmado en Ginebra el 9 de diciembre de 1930, acerca de la nave-


gación interior, preceptúa en su artículo 4º, párrafo 2º, que más de la mitad de la
propiedad de la sociedad debe pertenecer a nacionales de determinado Estado,
para que el barco pueda enarbolar la bandera de dicho Estado.
Un ejemplo es el decreto-ley del 12 de noviembre de 1938, referente a la na-
cionalidad de los concesionarios de servicios públicos, que exige de las socieda-
des personalistas que todos sus miembros sean franceses (art. 2º, párr. 2t).
Inglaterra les concede el derecho a enarbolar la bandera inglesa solo a los
barcos cuyos propietarios sean ingleses o sociedades inglesas (Caso de Daimler
Co. contra Continental Tire and Rubber Co., 1915-1916).
Alemania aplicó la teoría del control desde la expedición de los decretos del
4 de septiembre de 1914 y del 26 de noviembre del mismo año.
España adoptó la teoría del control. Al respecto, GoLDSCHMIDT 16 dice: "Ya el
tratado franco-español del 6 de marzo de 1934 acepta este punto de vista al equi-
parar en su artículo 17 a las sociedades francesas las españolas «que comprendan
elementos franceses», y a las españolas las francesas «con intereses españoles».
Pero la teoría del control aparece con toda claridad en la Resolución 6º de Bret-
ton Woods (New Hampshire) que fue incorporada (así lo dice expresamente la
orden del 22 de mayo de 1945 en el B. O. del 27 de mayo, núm. 147, art. 2º, b) al
derecho español. Esta resolución protege a las víctimas de la agresión alemana.
Es lógico que si España protege a las víctimas extranjeras mediante la teoría del
control, con más razón aplicará dicha teoría para proteger a sus propios nacionales
(argumentum a fortiori)".
NrnoYET cita varios casos en que se aplicó la teoría del control efectivo: la
Sociedad Provenzal de Carbones, cuyo domicilio social estaba en Marsella, a pe-
sar de no ser más que una sucursal de Deutscher Kolhen Syndicat, de Hamburgo,
al cual pertenecían 145 de las 300 acciones de la sociedad; el titular de las 155
restantes era un francés que no percibía intereses. En la Sociedad Minera de Saint-
Pierremont, de 2004 pertenencias, 1303 estaban registradas a nombre de la sociedad
alemana de minas de Gelsinkirchen. Asunto de la Compañía Charbonnages du
Prince Henry, cuyo domicilio social estaba en Alemania y cuyos accionistas eran
franceses. Asunto del ferrocarril de Damasco a Hamat, Sociedad de Capitales
Franceses y con domicilio en Turquía, 31 de agosto de 1900. Estos dos últimos
casos son aplicaciones de los tribunales arbitrales mixtos, en sus tratados de paz 17 •

16
WERNER GoLDSCHMIDT, Sistema y filosofía del derecho internacional privado, 2ª ed., t. I,
Buenos Aires, Ediciones Jurídicas Europa-América, 1952, págs. 456 y ss.
17
Tribunal Arbitral Mixto franco-alemán, 30 septiembre 1921, Recueil Gidel, t. 1, pág. 422;
Clunet, 1923, págs. 595-600. Asunto del ferrocarril de Damasco a Hamat, Sociedad de capitales
franceses con domicilio en Turquía, 31 de agosto de 1900, Clunet, 1923, pág. 595. Vide Trib. Arb.
NACIONALIDAD DE LAS SOCIEDADES

Es de notar que la Corte de L . , 181


, d yon aphco la t ,
nas,
•, basan ose en el derecho civil · En esta teorí eonah de la interposición de perso-
c1on para• una persona de e1ecutar un acto Jurídico-
. ª )ay tres elementos· · 1) proh"b·
.J
2 . . 1 1-
aparente, y 3) un beneficiario real . .' existencia de un beneficiari
.b. •, ., , que es la mism . o
proh1 1c1on. Refinendose a esta sentencia . no dº ª persona. a quien se refiere 1a
biano CAICEDO CASTILLA is: "Para• tºfi ' s. ice el mtemacionalista colom-
, H . . Jus i car su tesis la C0 rt d
asi: ay que distinguir entre la e . e e Lyon argumentaba
., mpresa y la soc. d d L .
agrupac1on de capitalistas que se propone la explot ie ª· ,· da pnmera . la forma la
gunda, el organismo jurídico por dº d acwn e una mdustria; la se-
me 10 el cual se re r · •,
bien, cuando los capitalistas alem b ª iza esta explotac1on. Ahora
anes o ran por med·10 d •
francesa, la sociedad no es sino . e una sociedad de forma
diversas personas que e t una persona mterpuesta entre-la empresa y las
. . n ren en relaciones con ella. Existen en consecuencia
las tres circunstancias
. . .constitutivas
., del 1enomeno
, . 'dº1co de la
JUn ' mterposición
. de
person~s. _1) 1~ proh1b1c10n de comerciar con súbditos de países enemigos; 2) un
ben~fiqano aparente, o sea la sociedad; 3) un beneficiario real,o sea la empresa".
Para determinar e1caracter' enem1go
· de una corporación era necesario, como
1~ observa W OLFF, alzar "el telón de la personalidad jurídica". Es importante men-
c10nar el caso que presenta RICARDO B. BALESTRA en su citado libro Nacionalidad,
control y régimen internacional de las sociedades, caso conocido como "Daimler
Co. vs. Continental Tire .and Rubber Co.", de 1915. Se trataba de resolver si una
compañía incorporada en Inglaterra (y, por tanto, británica, según el sistema inglés
de la incorporación) y con una secretaría en la Gran Bretaña, pero con todas las
acciones en manos de extranjeros enemigos, podría considerarse a su vez como
enemiga, a fin de ·hacer efectiva sobre ella la prohibición de comerciar con el
enemigo. El Tribunal de Apelación se pro~unció en sentido negativo, sosteniendo
que la .existencia separada de la compañía no.podía soslayarse como si fuera un
tecnicismo. Pero la Cámara de los Lores revocó la decisión. Lord Parker sostuvo
- .

que la consideración británica de la sociedad, a causa de su lugar de incorpora-


ción, no bastaba para resolver sobre su carácter enemigo .. La corporación, en sí,
era incapaz de lealtad o enemistad, pues tales cualidades son atribuibles solo a
O
los seres humanos; entonces, no podría derivarse su carácter de leal enemigo,
sino del carácter, a su vez predominante, de los accionistas. Y estando estos en

. .
Mixto germano-belga, l' de diciembre de 1925, Recueil Gidel, t. v, pág. 7_~8; Trib. Arb. Mixto
franco-búlgaro, 21 de julio de I 925, ibid., t. v, pág. 856. Asunto de la compama denorrunada Char-
. d .. . Al • yos acci'onistas eran franceses. Vide J. P.
onnages du Ponce Henry con onnc1110 en emama Ycu . .
b · · · d d h · · l · d Me'xi·co Editora Nac10nal, Edmal S. de R.
IBOYET, rmcipws e erec o mtemacwna priva o, , ..
L., 1%0, Ppág. 155. Los tribunales arbitrales mixtos, organizados por los tratados de paz, hicieron
N

varias aplicaciones de la idea del control enemigo como los casos antes citados. 153
JosÉ JOAQUÍN CAICEDO CASTil..LA, Derecho internacional privado, op. cit., págs. Y ss.
18
DE LA NACIONALIDAD

do bajo su dirección, le
1s2 d nes y obran
/ d .
.b•endo sus or e . En concor ancia con
· o rec1 1 d enenuga.
contacto con el enenug ' . t gran el carácter e el fallo mencionado, se
· d d que in e 1 Lores en
otorgan a la soc1e a
is
or la Cámara de os
estos principios, sentado; la Trading with the enemY
dictó el 8 de agosto de 1
amendment act.

VO DE LA POSGUERRA
7. DERECHO posrri algunos tratados diplomáti-
.b les franceses y . ·¡· .1
la guerra los tn una . d .stema del donuc1 10 socia .
Después de ' artidanos e1s1
finnados por Francia se muestran p/ d 117 de agosto de 1927; franco-belga,
cos f
Es el caso de los acuerdos ranco- O
aleman e
de . b art
la Rép. Franc.' 5 de nov1em re, .
del 29 de octubre de 1927 (Joum. 'ff. 16) del Convenio de Lausana con
5º)· franco-polaco (6 de febrero de 1922, art. y
T~quía (Clunet, 1923, pág. 1os ). 7 ./ / del control y así, en Fran-
d"1al se volv10 a 1a teona '
En la segunda guerra mu~ d dispuso que las sociedades que de-
1939
cia, un decreto del 19 de septle~bre . aun cuando hubiesen sido
pendieran de enemigos se cons1deranan enemigas,
constituidas en Francia. · ¡·d d
Estados Unidos se había mantenido fiel a la determinación de _la nac1ona _1 / a
de las sociedades según el lugar de su fundación (sistema ~e la 1nco~orac1on).
En la segunda guerra mundial fueron promulgadas en es~ prus las free~ing orders
(órdenes de congelación), que disponían el bloqueo de bienes que _pud1~~an pasar
finalmente a poder de los países del Eje. Se tuvo en cuenta la s1tuac1on de los
accionistas y directores de la sociedad, entre otros motivos.
España, que durante la primera guerra mundial había seguido el criterio de la
nacionalidad según el domicilio, aplicó, mediante el decreto-ley del 5 de mayo de
1945, los principios de la teoría del control, recomendados en la resolución sexta
adoptada en la Conferencia Financiera y Monetaria de las Naciones Unidas, en
Bretton Woods, New Hampshire.
Después de la segunda guerra mundial, la orientación doctrinaria se inclina por
la teoría del control. En Francia, algunas leyes han aplicado la teoría de SALVIOLI,
que como sistema general acepta que la nacionalidad de la sociedad se deriva de
su domicilio; mas, para ciertos efectos, se tiene en cuenta la nacionalidad de los
socios. La tendencia actual es suprimir la nacionalidad de las sociedades, con-
siderándolas ficción, siguiendo al respecto la tesis expuesta en el libro de ANDRÉ
PÉPY , de la Universidad de Grenoble.
19

Pépy thése, París, 1920, pág. 122· s. Hamel 1924


19
ANDRÉ PÉPY, Vid V
"L · 1· , ' ' , 2 . 25 . l e DE ISSCHER,
a nationa 1te et le caractere ennemi des sociétés commerciales" R . • l
Privé, 1917, págs. 50 1_515 _ • en evue de Droit Internatwna
NACIONALIDAD DE LAS SOCIEDADES
183

En el proyecto de Código de Derecho Internacional Privado, elaborado por el


delegado colombiano en el Comité Interamericano de Río de Janeiro, doctor JosÉ
JoAQUÍN CAICEDO CASTILLA, Y,que es un excelente documento de trabajo con miras
a la revisión del Código de Bustamante y su adaptación con el sistema de Mon-
tevideo, se acogió esta tesis, en el artículo 16, que dice: "Las personas jurídicas
deben exclusivamente su existencia a la ley del Estado que las autorice y por con-:-
siguiente no son ni nacionales ni extranjeras; sus funciones se determinan por
dicha ley, de conformidad con los preceptos derivados del domicilio que ella les
reconoce"20 . -

8. NACIONALIDAD DE LAS SOCIEDADES EN DERECHO COLOMBIANO

Hemos visto que propiamente no hay nacionalidad en las sociedades y, repe-


timos, la tendencia moderna es suprimir la nacionalidad de las sociedades, con-
siderándola ficción. Lo importante es averiguar el régimen legal de la sociedad.
·El artículo 14 de la Constitución de 1886 establecía: "Las sociedades o cor-
poraciones que sean en Colombia reconocidas como personas jurídicas, no ten-
drán otros derechos que los correspondientes ·a personas colombianas". De esta
disposición se deducía que en Colombia había personas jurídicas nacionales y
personas jurídicas extranjeras. La Constitución de 1886 aceptaba la tesis de la
nacionalidad de las sociedades.
El acto legislativo 1 de 1936 derogó la norma constitucional de 1886, y esta-
bleció: "La capacidad, el reconocimiento, y, en_general, el régimen de las personas
jurídicas se determinarán por la ley colombiana". La Constitución contiene una
autorización al legislador para que determine el régimen legal de las sociedades,
pero no adopta la teoría de la nacionalidad de las sociedades. La Constitución de
1991 no reguló la materia, pero no hay duda de que se aplica lá ley colombiana.
La nueva Constitución nada establece acerca de la nacionalidad de las sociedades.
Las únicas sociedades extranjeras para las que se ha dispuesto un régimen
especial son las que tienen negocios 'permanentes en el país. La ley 124 de 1888
exigió ciertos requisitos para las sociedades anónimas domiciliadas fuera del
país, que tuvieran negocios permanentes en él. Los decretos legislativos 2 y 37
de 1906 ampliaron tales exigencias, así: a) protocolizar en los seis meses subsi-
guientes a la iniciación de sus negocios, el documento de su fundación y de 'sus
estatutos, en la notaría de la circunscripción en donde esté el asiento principal de
sus negocios e industrias. Las anónimas protocolizarán, además, en la mism·a

20Proyecto del doctor JosÉ J. CAICEoo CASTILLA, en Documentos de la OEA sobre la posibili-
dad de revisión del Código de Bustamante. Unión Panamericana, OEA, set. 1/vI/CIS-90/ set., 1967.
Comité Jurídico Interamericano.
DE LA NACIONALIDAD

184 en caso de que sea necesaria .


· ción del Esta o, d
notaría, la prueba de la autoi:iza . 1. b) mantener un agente o apoderado
dicha autorización para su existencia ledgal ' egocios o si no los tiene, en donde
. · cipal e os n , .
residente en el lugar o asiento pnn t las ante los tribunales nac10nales y
. . para represen ar
deba cumplir sus obligaciones, . , las demandas y asuntos que contra
. . t tivas y de po1icia en . . .
las autoridades admims ra . 1 notaría del respectivo circmto un
ellas se promuevan,. c) han de protocobzar en ªndi'ente en que conste·la existencia . .
• fi · 1 'blico correspo '
certificado del notan o u O cia pu a O personas que tienen la facultad
legal de la sociedad Yel nombre de 1.ª persdo~ectamente O por medio de sustituto
· · · en C lombia ya ir ados debidamente legalizados y
de representarla en 3mcio ° '
1 documentos enumer ,
0
delegado; d) presentar os d rci·o O en su defecto, en el respectivo
. d . ) . tr n la cámara e come
autentica os,~ r~gis ar e . . . , '
. dentro de los quince días siguientes a la
·uzgado del circmto del domicilio socia'1 ·turas protoco1·izadas, cert'fi i cado
Jfechadelaprotocolización, un extracto de 1asesen
. d be contener 1) nombre, apell'd i os
por el correspondiente notano. El extracto e . · .
y domicilios de los socios; 2) la razón o firma soc1a1; 3) _los soc1?s encargados
1
de la administración y del uso de la razón socia1; 4) el capital que ~troduce cada
uno de los socios, en dinero, créditos o en cualquier otra clase de bienes; el va1or
que se les asigne a los aportes en muebles e inmuebles Y, e~ su defecto, 1~ f~~a
en que debe hacerse el justiprec.io; 5) la época en ~ue la soc~edad debe pnnc1p1ar
disolverse. t) Registrar en la cámara de comerc10 respectiva, o, en su defecto,
0
en el juzgado del circuito, un extracto de los poderes de los representantes de la
compañía; g) publicar los extractos después de registrados en la cámara de comer-
cio o en el juzgado, por lo menos tres veces en el periódico oficial del respectivo
departamento y en el Diario Oficial; h) acudir ante la Superintendencia de So-
ciedades Anónimas con el fin de obtener el permiso para que la sociedad pueda
ejercer actividades en Colombia.
Sobre el régimen de las sociedades, dice la Corte21 : "Las sociedades formadas
en país extranjero se rigen, en cuanto a su constitución y requisitos, por la ley de
su origen, según el principio de derecho internacional privado locus regit actum;
y por lo que respecta al ejercicio de derechos y a la efectividad de obligaciones
que han de producir efectos en Colombia, los documentos comprobatorios respec-
tivos extendidos allá tienen a su favor la presunción de que lo fueron conforme a
la ley local de su origen, desde que estén autenticados de acuerdo con la ley co-
lombiana, salvo que parte interesada compruebe lo contrario".
L_as sociedades extranjeras con negocios transitorios se rigen por la ley de
su ongen. Al respecto, ha dicho la Corte22 : "Cuando tales sociedades tienen sus
negocios transitorios, su personería sustantiva se rige por la ley extranjera, de con-

21 Corte Suprema de Justicia, cas., 5 octubre 1927, xxxv, 29.


22 Corte Suprema de Justicia, sent., sala civil de única instancia, 1Ooctubre 1939, XLID, pág. 963.
NACIONALIDAD DE LAS SOCIEDADES 185

foonidad
• con1 el1principio
d locus
• . regit
. actum· Por consigmen
· te, d'ichas compamas
~,
se 0 gen,por .a . ey,, e su doffilcibo, y si allí no se reqmere
· escntura
. , . esta
pubhca
podna exigirse . . '
00
El Código de. Procedimiento
, Civil (decrs • 1400 y 2019 de agosto 6 y octubre
26 de 1970), en el articulo 48 reguló la representación de la · 'd'
extranjeras, de la siguiente manera: s personas JUn icas

"Las personas jurídicas extranjeras de derecho privado con domicilio en el ex-


terior, que eStablezcan negocios permanentes en Colombia, deberán constituir en
el l~g~ ~onde tengan tales negocios, apoderados ·con capacidad para representar-
las Judicial~~nte. Con tal fin se protocolizará en la notaría del respectivo circui-
to, prueba idone~ de la existencia y representación de dichas personas jurídicas
del_ c?1;espondie~te poder. Un extracto de los documentos protocolizados se
mscnbira en el registro de comercio del lugar, si se tratare de una sociedad, y en
los demás casos, en el Ministerio de Justicia.
"Las personas jurídicas extranjeras que no tengan negocios permanentes en
Colombia, estarán representadas en los procesos por el apoderado que constitu-
yan con las formalidades prescritas en este Código". ·
Entre tanto, el régimen de las sociedades extranjeras fue regulado en forma
técnica por el Código de Comercio (decr. 41 Ode 1971) en el título vm, artículos
469 a 498, que derogó la legislación anterior vigente en esta materia. ·
El artículo 469 define como extranjeras "las sociedadesconsti~uidas conforme
a la ley de otro país y con domicilio principal en el exterior". Luego establece el
control por la ley colombiana en el artículo 470, al decir que "todas las sucursales
de sociedades extranjeras que desarrollen actividades permanentes en Colombia
estarán sometidas a la vigilancia del Estado, que se ejercerá por la Superintenden-
cia Bancaria o de Sociedades, según su objeto social". Los requisitos para que
una sociedad extranjera pueda emprender negocios permanentes en Colombia,
son los siguientes: 1º) establecerá una sucursal con domicilio en el territorio na-
cional; 2º) protocolizará en una notaría del lugar elegido para su domicilio, copias
auténticas del documento de su fundación, de sus estatutos, la resolución o acto
que acordó,su establecimiento en Colombia y de los que acrediten la existencia de
la sociedad y la personería de sus representantes, y 3º) obtendrá de la Superinten-
dencia de Sociedades o de la Bancaria (hoy financiera) permiso para funcionar
en el país.
Igualmente, el Código de Comercio, en su artículo 474, define qué se entien-
de por actividades permanentes, y enumera las siguientes: 1ª) abrir, dentro del terri-
torio de la república, establecimientos mercantiles u oficinas de negocios, aunque
estas solamente tengan un carácter técnico o de asesoría; 2ª) intervenir como
contratista en la ejecución de obras o en la prestación de servicios; 3ª) participar
DE LA NACIONALIDAD

186 or objeto el maneJo, · aprovecha


· ·d des que tengan P d 4ª) d d. ,
n cualquier forma en acuvi a . del ahorro priva o; - e icarse a la
e
miento . de ion
o inversión s: d provementes
os_ . . 5ª)
amas o servic10s; - obtener del Estado
·. alqUiera de sus r ºd 1 . ,
industria extracuva en cu h biera sido ced1 a a cua qmer titulo 0
·6 que esta 1e u a f · '
colombiano una concesi .º 1Otación de ella; y 6-) el unc10namiento
s: participe en la exp • d • • .,
que en alguna 1orma . . directivas, gerencia o a ID1mstrac1on en el
de sus asambleas de asociados, Juntas
territorio nac~onal. .etas a la ley colombiana, y puede la Superinten,
Estas sociedades ~uedans: suJ . nu·ento cuando la sociedad no satisfaga las
· 1permiso de 1unc10na ,
dene~ª- negar e , . fi . s oJ· urídicas que indica la ley del pais (art. 481 ).
condiciones economtcas,, nanciera
• rJ·uicio de lo pactado en los tratados o convenios
Estas normas se aplicaran sm pe . ,, . ,,
internacionales, y en caso de que no exista regulacion legal, se aplicaran las reglas
que rigen las sociedades colombianas (art. 497). .. ,, . .
En cuanto a la responsabilidad, el artículo 485 del citado Codigo dice: "La
sociedad responderá por los negocios celebrados en el país al tenor de los estatutos
que tengan registrados en la cámara de comercio al tiempo de la celebración de
cada negocio, y las personas cuyos nombres figuren inscritos en la misma cámara
como representantes de la sociedad tendrán dicho carácter para todos los efectos
legales, mientras no se inscriba debidamente una nueva designación". La prueba
de la existencia de estas sociedades es el certificado de la cámara de comercio, y
también la personería de sus representantes (art. 486).
Con respecto a la nacionalidad de las aeronaves, la ley 89 de 1938 establece
lo sig~iente: 1 la nacionalidad de una aeronave será la del último país en donde
haya,, sido matncu!ada; 2) las aeronaves matriculadas en otro país podrán adquirir
matncula c?lombiana; 3) no es admisible la coexistencia de dos O más matrículas
para una,, .mtsma. aeronave·, 4) en Colomb·ia, toda aeronave 1nscnta · · en el registro·
aeronauttco nacional es colombiana.
Para matricularse, la aeronave de transportes úbli . ,, 23
reunir los siguientes req ms1 • •tos: a) que llene 1 P . .coso,,trabajos . aereos debe
.
el gobierno· b) que pert . os requisitos tecnicos que determme
, enezca a nacrnnale b.
inferior al 51 por ciento de su . s co1om ianos en una proporción no
. va1or o entidades cuya p ,, . "d. .d
reconocida en Colombia med· t ersonenaJun ica haya s1 o
ian e e1cumpr · . . . .
1) que la entidad esté domic·l· d imiento de los siguientes reqmsitos:
I ia a en Colomb· . 2) . . ,
representado en una proporción . ti . Ia, que su capital social este
· · pertenecientes a na no
nomtnattvas . m enor al 51 por ciento· del total en acciones
l b. crnna1es colo b.
~m ianas cuyo capital social tamb •,, m ianos o a personas jurídicas co-
bianos·' 3) que su presidente
. ien
gerente pertenezca en su mayona ,, a nacionales
. coloro-
terceras partes del resto del p'ersonal od_repr~sentante legal y, por lo menos las dos
1rectivo' sean de nacionalidad
. '
colombiana.
23 J
OSÉ JOAQI.JÍN CAICEDO C
ASTilLA, op. cit., pág. 167.
NACIONALIDAD DE LAS SOCIEDADES
187

9. EMPRESA MULTINACIONAL ANDINA

El Acuerdo de Integración Subregional


. Andino fu . 6
de mayo e 1969 por los plenipotenci . . . e suscnto en Bogotá el 2
,, pd . anos de Bohv1a C01 b'
y eru. ostenormente Venezuela su .b. , ' om ta, Chile, Ecuador
P .. ,, sen 10 el acuerdo 113 d
se adhírio el 29 de noviembre del mis mo ano.
_ Chile. s e f , edfebrero de 1973 y
La Decisión 46 de la Comisión d A e re uo el Pacto Andino.
. e1 cuerdo de Carta , , .
uwforme de la empresa multinacional 1 1 gena aprobo el regimen
al capital subregional. y e reg amento del tratamiento aplicable

El artículo 8º establece que se entie d


que cumple los siguientes requisitos: n e por empresa multinacional aquella

"a) Que los aportes ,,de inversionistas subregionales en el capital de la em re-


s~ ~orrespondan a los tenninos establecidos en los artículos 1Oy 11 del pre~nte
reg1men;
' b?Que la mayoría subregional del capital se refleje en la dirección técnica
fi~anc1era, administrativa Ycomercial de la empresa, ajuicio del organismo na'.
c1onal competente del país del domicilio principal;
"c) Que el domicilio principal de la empresa esté situado en el territorio de
uno de los países miembros;
"d) Que tenga aportes de capital de propiedad de inversionistas nacionales de
dos o más países miembros;
"e) Que el objeto social de la empresa sea de interés subregional, se ajuste
a las condiciones y modalidades establecidas en los programas que se señalan a
continuación y se refiera a los proyectos y productos que se incluyen en ellos:
"1) Programas sectoriales de desarrollo industrial;
"2) Proyectos de infraestructura, encanúnados a resolver problemas que inci-
den desfavorablemente en el proceso de integración subregional;
"3) Programas de racionalización de la producción de industrias existentes;
"4) Programas conjuntos de desarrollo agropecuario".
El artículo 10 establece: "La participación de inversionistas extranjeros ~n una
. . d, • al arenta por ciento del capital de
empresa mult1nac10nal no po , ra ser supenor
. d cu · ar el máximo de 1nvers1on
. .,
a empresa.
. Correspondera a cada gobierno. etermm · al que establezcan domimo ..
1 1
extranJera
. . en el capital de las empresas
l lí mu. t1I1ac10n
-al do es .
en el inciso antenor.
pnnc1pal en su territorio y dentro de nute. sen al d apropiedad de los mvers10mstas
. . .
1
."En todos los casos ' la mayoría
, de capit
. e dirección técmca,
. adnums . • trat' -
1
nac1onales y subregionales debera refleJarse en ª
va. financiera y comercial de la empresa".
DE LA NACIONALIDAD

188
. . . / d 1 s inversionistas nacionales de cada
/ artí/ lo 11 la participac10n e o . ional no podra/ ser infenor
. . al
Segun e1 cu ,
1
país miembro en el capital de una empr~sa mu ttnac .
15 por ciento de la participación subregwnal total. . .
. . estará representado por acciones nollll-
El capital de la empresa mu1tmacwna 1 •
/ en la unidad monetaria nacional del país
nativas, y el valor de estas se expresara
del domicilio principal. . / .
· · 1 e constituyen en forma de sociedades anom-
Las empresas
. . mu ttnaciona es s
1
1 bras "empresa mu1ttnaciona
. . l" .
mas y deben mdicar expresamente as pa a 1 . .
En cuanto al régimen jurídico, las empresas multinacionales se suJetan a l_a
decisión 24, y en su defecto a la legislación del país donde establezcan su domi-
cilio principal.
Las empresas multinacionales se constituirán en el país miembro donde esta-
blezcan su domicilio principal y se sujetarán al procedimiento previsto en la le-
gislación nacional de dicho país.
El artículo 23 preceptúa: "Concluidos los trámites de constitución de la em-
presa en el país del domicilio principal, las autoridades respectivas solicitarán a
las autoridades de los demás países miembros la inscripción del contrato social en
los registros nacionales y la publicación en la forma establecida en su legislación.
"A partir de la fecha de la publicación o de la inscripción de la empresa mul-
tinacional en los registros nacionales, de acuerdo a los requisitos exigidos por la
legislación nacional respectiva, esta gozará de la capacidad jurídica más amplia
reconocida a las personas jurídicas por tales legislaciones y recibirá el tratamiento
de sociedad de derecho nacional.
"La inscripción de las empresas multinacionales se sujetará a las disposicio-
nes legales generales que regulan la actividad económica de cada país.
"La empresa multinacional se rige por las siguientes normas:
"a) Su estatuto social;
En 1"b) El régimen
t de la decisión 46 en todo lo no establecido en su estatuto socia
. 1.
os aspee os no regulados por el estatuto social de 1 / .
de la decisión 46 se apr / . . ª empresa o por el reg1men
icaran 1as s1gu1entes disposiciones.
"a) La legislación del país del domicili . . . .
relacionadas con las normas d
"
/ ° pnncipal, cuando se trate de materias
e1cap1tu1o vn de este régimen.
b) En los demás casos la legislación del / ,y
jurídica o la de aquel donde h d . pais donde se establezca la relación
. . ayan e surtu efectos I · / .
presas multmacionales según lo t bl os actos Jund1cos de las em-
privado aplicables". ' esª ezcan las normas de derecho internacional

El artículo 38 establece que el domi T10 . .


nal estará situado en el país m · b ci pnncipal de la empresa multinacio-
1em ro en que se d esarro11e su actividad
. principal,
NACIONALIDAD DE LAS SOCIEDADES
189

conforme a los términos


. del proyec to o programa respectivo • y deberá indicarse
en su estatuto social. El domicilio pnnc1pa
· · 1sera,, la sede, el d1rectono
•' . y la gerencia
genera.1
La asamblea
. . general . es el órgano máximo de 1a empresa y estara,, mtegrada
.
por
. . los
,, acc1omstas
. reunidos
. en la forma y condi·c1·0 nes que se establecen en la de-
c1s1on 46. El directono
. . es el órgano administrador de 1a empresa. Las func10nes,
·
derechos Yobhgacwnes del gerente general y de los representantes legales serán
los que se establezcan en el estatuto de la empresa.

10. ÜRUPO EMPRESARIAL

La ley 222 de 1995 reformó el libro n del Código de Comercio colombiano;


incluyó el capítulo v, que se refiere a "matrices y subordinadas", y el artículo 28
establece el grupo empresarial así: "Habrá grupo empresarial cuando además del
vínculo de subordinación, exista entre las entidades unidad de propósito y dirección.
"Se entenderá que existe unidad de propósito y dirección cuando la existencia
y las actividades de todas las entidades persigan la consecución de un objetivo
determinado por la matriz o controlante en virtud de la dirección que ejerce sobre
el conjunto, sin perjuicio del desarrollo individual del objeto social o actividad
de cada una de ellas".
Las normas sobre grupos empresariales son aplicables a las subsidiarias de
empresas extranjeras porque realizan actos jurídicos en Colombia y por ende se
sujetan a la ley colombiana (C. C., art. 20, num. 3; C. de Co., art. 869) sin que pueda
hacerse ninguna excepción. No se trata de extraterritorialidad, sino de aplicar la
ley colombiana a los actos y a los efectos jurídicos que se realicen en territorio
colombiano sin que se cambie esta situación por estar la matriz domiciliada en
el exterior ni por ejercer el control desde el exterior, porque la ley colombiana se
aplica a la actividad comercial cumplida en Colombia.

11. PREVALENCIA DE LOS TRATADOS INTERNACIONALES. RÉGIMEN APLICABLE

Las normas del Código de Comercio, y particularmente sus artículos 469 a


497, rigen cuando no exista tratado internacional aplicable. El artículo 497 del
Código de Comercio dice: "Las disposiciones de este título regirá~ sin perjui~io ~e
lo pactado en tratados O convenios internacionales. En lo no previsto se aplicaran
las reglas de las sociedades colombianas. Así mismo estarán sujetas a él todas las
sociedades extranjeras, salvo en cuanto estuvieren sometidas a normas especiales"•
Las sucursales de sociedades extranjeras están sometidas a la ley colombiana,
y sujetas a la vigilancia de la Superintendencia Bancaria o de la Superintendencia
190 DE LA NACIONALIDAD

de Sociedades, según su objeto social (art. 470). Se exeptúa de lo anterior si hay


un tratado o normatividad internacional como las Decisiones de la Comunidad
Andina.
Las sociedades extranjeras actúan en Colombia de diversas formas, a través
de agentes comerciales (C. de Co., arts. 1317 y ss.), o por medio de apoderado 0
representante (C. de Co., arts. 832 y ss.); o mediante la constitución de sociedades
filiales, o a través de una sucursal (C. de Co., arts. 469 y ss.) .
• f •

• r

.,

También podría gustarte