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ALERGIA A LOS MEDICAMENTOS

ALUMNO: HITALO COSTA DELMONDES


DR: BRIAN MEDINA
SEMESTRE: 7 PARALELO: 1
ALERGIA A LOS MEDICAMENTOS

Qué es la alergia a los medicamentos?


Es una respuesta anómala del organismo frente a un fár- maco, consistente en una reacción
inmunológica inespe- rada, impredecible e independiente de los efectos farma- cológicos propios
del medicamento en cuestión. La mayor parte de las reacciones adversas a los medicamentos no
son inmunológicas, es decir, no son alérgicas.
Cuando una persona toma una cantidad de medicamento inadecuada para su talla, su peso, su edad
o la química específica de su organismo, pueden ocurrir reacciones adversas que llamamos
predecibles; la mayo- ría de ellas dependen de la dosis, y en muchos casos son inevitables. Algunas
de estas reacciones pueden ser graves —como los vómitos y la pérdida de cabello producidos por la
quimioterapia contra el cáncer—; potencialmente graves —como un descenso brusco del azúcar en
sangre por insulina o la osteoporosis desenca- denada por corticoides—, o pueden ser más benignas
—como la somnolencia debida a antihistamínicos—. Además, algunos fármacos interfieren en la
actividad de otros que puedan ser suministrados de forma simul- tánea, produciendo lo que se
denominan interacciones medicamentosas.

tipos de reacciones alérgicas a los medicamentos?


Las reacciones alérgicas a medicamentos se dividen bási- camente en dos grupos, de acuerdo con la
rapidez de pre- sentación: las de tipo inmediato, que se presentan dentro de la primera hora de la
toma del medicamento; y las de tipo tardío, que se presentan pasada una hora, al menos, de la
toma del medicamento (aunque a menudo pueden tardar semanas en desarrollarse).
Las reacciones de tipo inmediato se desencadenan por la producción del anticuerpo o
inmunoglobulina E (IgE), mientras que las de tipo tardío lo hacen por distintos mecanismos
inmunológicos, y pueden dar lugar a varios tipos de reacción: enfermedad del suero —mediada por
inmunocomplejos—; aplasias medulares —mediadas por inmunoglobulinas G—; dermatitis de
contacto —des- encadenadas por linfocitos T—, o distintos tipos de reac- ciones dérmicas (o
toxicodermias) muy graves, como el lla- mado síndrome DRESS (síndrome de hipersensibilidad por
fármacos con eosinofilia), el eritema exudativo multiforme (EEM o síndrome de Stevens-Johnson), la
necrólisis epidér- mica tóxica (NET) u otras.

tipo de reacción alérgica a medicamentos más frecuente?


El tipo de reacción que se diagnostica con más frecuencia es la de tipo inmediato. Se trata de una
reacción grave, que puede ocurrir cuando el sistema inmunitario de una per- sona alérgica produce
el anticuerpo denominado inmuno- globulina E (IgE) en respuesta a un medicamento.
Los medicamentos son lo que se denomina hap- tenos o antígenos incompletos; es decir, moléculas
muy pequeñas que por sí mismas no son capaces de estimular el sistema inmune, sino que precisan
unirse a proteínas del organismo, llamadas proteínas transportadoras, generán- dose así un
antígeno completo, que es el que origina la producción de IgE dirigida específicamente contra el fár-
maco en cuestión. Una vez se ha producido la elaboración de esta IgE específica por las células
plasmáticas, es liberada al torrente circulatorio y se fija en la superficie de basófilos y mastocitos.
reacción alérgica más grave?
La reacción alérgica más grave es la anafilaxia, o choque alérgico generalizado. Los síntomas de
anafilaxia son una sensación de intenso calor, enrojecimiento, picor inten- sísimo (en ocasiones, con
preferencia por el cuero cabe- lludo, palmas de las manos, plantas de los pies, pliegues inguinales),
aparición de ronchas o habones, inflamación de la garganta, asma o respiración sibilante, sensación
de mareo debido a una bajada de las cifras de tensión arterial, ritmo cardíaco irregular, náuseas o
vómitos, calambres abdominales, pérdida de conciencia... Habitualmente, la sintomatología se
presenta de forma repentina y progresa rápidamente. La anafilaxia puede ser mortal si no se toman
medidas oportunas.

A qué edad son más frecuentes?


Las reacciones alérgicas a medicamentos se manifiestan a cualquier edad. Sin embargo, a diferencia
de lo que ocurre en otras patologías alérgicas —como rinitis, asma o alergia a alimentos—, en las
que el primer diagnóstico se produce en la infancia y adolescencia, la alergia a medicamentos suele
presentarse, por término medio, en torno a los 40 años; ya que, como es normal, los individuos
mayores de 40 años necesitan ingerir más fármacos que los jóvenes, y la posibili- dad de
sensibilización aumenta con los contactos repetidos.

¿Son más frecuentes en hombres o en mujeres?


Los porcentajes de alergia a los medicamentos son muy simi- lares en ambos sexos, pero, aunque
no haya estudios que lo hayan demostrado, en las casuísticas más amplias predo- mina la población
femenina sobre la masculina.

Qué medicamentos producen reacciones de alergia con más frecuencia?


Los antibióticos betalactámicos (penicilina y derivados como la amoxicilina y las cefalosporinas) son
la causa prin- cipal de reacciones alérgicas a medicamentos, hasta un 50% de los diagnósticos,
seguido por los antiinflamatorios no esteroideos (AINE: ácido acetilsalicílico, pirazolonas,
ibuprofeno, diclofenaco, etc.), responsables del 39% de dichas reacciones. Otros antibióticos
(sulfamidas, quinolo- nas, tetraciclinas, macrólidos), los medicamentos antiepi- lépticos (fenitoina,
carbamacepina, lamotrigina) y ciertas medicinas utilizadas en anestesia general (bloqueadores o
relajantes neuromusculares) son también comunes. Las vacunas y las proteínas producidas por
biotecnología pueden inducir reacciones ocasionalmente. El látex en los guantes de goma y los
dispositivos médicos también puede causar reacciones de alergia, que pueden confun- dirse con
reacciones a fármacos.

diagnóstico de una reacción de alergia a los medicamentos?


El problema principal en el diagnóstico de alergia a medi- camentos es la falta de técnicas
diagnósticas que ayuden a confirmar las sospechas clínicas. El diagnóstico se basa primordialmente
en una anamnesis o historia clínica deta- llada de la reacción y los medicamentos implicados. Para
confirmar las sospechas de la historia, de acuerdo con la evaluación del especialista, se pasa a
estudios in vitro (de laboratorio) y/o estudios in vivo (sobre el propio paciente). Los estudios de
laboratorio incluyen la determina-
ción de IgE específica en suero (válida actualmente para antibióticos betalactámicos, látex,
anestésicos generales, miorrelajantes y algunas hormonas), el test de activación de basófilos (TAB) y
el test de transformación linfoblástica (TTL).

trata una alergia a los medicamentos?


En el momento de la reacción, es muy importante la reco- gida de los signos y la relación con la
toma del medica- mento, para realizar la inmediata suspensión de su toma. En ese momento se han
de instaurar las medidas de res- cate, que van a depender del tipo y la gravedad de la reac- ción. En
las reacciones de tipo inmediato, el tratamiento incluye adrenalina, corticoides y antihistamínicos,
así como tratamiento farmacológico de los síntomas de los órganos más afectados:
broncodilatadores, cardiotónicos, etc. En las reacciones tardías, el tratamiento se basa
fundamental- mente en la utilización de corticoides por vía general, o por vía tópica si se trata de
dermatitis de contacto. En las reac- ciones ampollosas y otras toxicodermias graves con des-
prendimiento cutáneo, se incluyen una serie de cuidados similares a los de los grandes quemados.
Una vez que se ha resuelto la reacción desencade- nada, el paso siguiente tras realizar el
diagnóstico incluye la obvia evitación del medicamento causal, así como de la familia de fármacos
relacionados químicamente con el causal (reactividad cruzada), de forma que se prevengan
reacciones posteriores, indicándose en tales casos cuáles serían los fármacos alternativos.

Qué antibióticos pueden causar alergia?


Cualquier antibiótico puede producir una reacción alér- gica, aunque los implicados con mayor
frecuencia son los antibióticos betalactámicos, que incluyen las penicilinas como la amoxicilina, y las
cefalosporinas. En los últimos años, está aumentando el número de reacciones provo- cadas por
otros antibióticos denominados quinolonas, entre los que se incluyen moxifloxacino, ciprofloxacino
y levofloxacino. Otros antibióticos que pueden ocasionar reacciones alérgicas, aunque con un índice
menor, son las sulfamidas, los macrólidos como la eritromicina, y otros.
Qué pruebas de laboratorio son útiles en la alergia a antibióticos?
La prueba de laboratorio más empleada en alergia a anti- bióticos es la determinación de IgE
específica, también denominada RAST o CAP, que son las siglas de las técni- cas empleadas en esa
determinación (radioallergosorbent test y coated allergen particle test, respectivamente). Es útil,
sobre todo, para las reacciones alérgicas a antibióticos beta-lactámicos. En los últimos años,
también se recurre al test de activación de basófilos (TAB), cuya rentabilidad en general en alergia a
medicamentos es media-baja, y que sólo puede realizarse en un número limitado de centros.

Cómo se trata la alergia a antibióticos?


El tratamiento de una reacción alérgica aguda exige la administración de antihistamínicos,
corticoides e incluso adrenalina en las reacciones más graves. Este tratamiento debe llevarse a
efecto en una unidad de Urgencias, ya sea ambulatoria u hospitalaria, donde hay el personal y los
medios necesarios para poderlo realizar adecuadamente.
Cuando se confirma la presencia de alergia a anti- bióticos, el tratamiento de elección es la
evitación, no sólo del antibiótico implicado sino de todos aquellos del mismo grupo frente a los
cuales el paciente también puede reac- cionar, aunque nunca los haya tomado.

características de las reacciones a AINE de tipo respiratorio?


Las reacciones de tipo respiratorio provocadas por un AINE cursan con la aparición, en las primeras
dos horas tras tomarlo, de síntomas nasales (lo que llamamos una reacción nasoocular: obstrucción
nasal, moqueo, ojos muy rojos con lagrimeo); y aunque esta reacción se puede repe- tir siempre así
a lo largo de la vida del paciente, lo habitual es que se asocie con ahogo, sibilación, tos y sensación
de un peso en el pecho, constituyendo lo que denominamos una crisis de asma. Las reacciones
pueden ser leves; aun así, lo más habitual es que el paciente haya de acudir a un hospital para ser
tratado. En algunos pacientes, las reaccio- nes de tipo respiratorio pueden comprometer la vida y
ser necesario el ingreso en una Unidad de Cuidados Intensivos.

Cómo se puede comprobar una reacción a AINE?


Hasta hace poco, no existía ningún análisis de laborato- rio que permitiera diagnosticar de forma
fiable la alergia a AINE. El único modo de poder llegar a diagnosticar este tipo de reacción era volver
a exponer al paciente, en el hospital y de una forma controlada, a cantidades cada vez mayores del
AINE hasta llegar a una dosis adecuada para su tratamiento, para poder así confirmar, o descartar,
dicha reacción.
En la actualidad, algunos tipos de alergia o intole- rancia a AINE pueden confirmarse mediante un
examen de laboratorio llamado test de activación de basófilos (TAB)

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