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Carta Evangelistica
Para: William Martinez el creyente de hace 5 años
De: William Martinez, el creyente de hoy en medio de una crisis mundial
El mundo parece caerse a pedazos y quizá esa es una de las definiciones de las
crisis, creo que la mayor crisis de la humanidad fue la muerte de Jesús en la cruz, el
que había sido uno desde la eternidad cargaba ahora con nuestros pecados para
darnos las buenas nuevas del Evangelio, la llegada del Reino de Dios y moría a
mano de los fariseos… Otra palabra curiosa que hoy usamos despectivamente, pero
quizá para los fariseos de su época no estaban en un error, ellos tenían la verdad o
eso creían y estaban totalmente convencidos de eso, y así sucede muchas veces en
nuestra vida, estamos tan convencidos de la verdad que somos capaces de
asesinar el mensaje real del Evangelio, predicamos acerca del miedo y no del amor
aunque el amor sea una palabra sin sentido recurrente en nuestro discurso como
creyentes, y nos aferramos a el por qué es el único discurso que conocemos porque
lo trajeron los evangelistas en la época de los 60° hablando de una gran “conquista
espiritual”
Sin embargo déjame hablarte del evangelio en el sentido más practico en mi vida
personal, todo lo honesto se hace por convicción y no por obligación, así que desde
el fondo de mí corazón te pido que trabajes en conocer el corazón del Padre, es
mucho más fácil enamorarte del reino de Dios y cambiar, que tratar de cumplir una
cuota de apariencia para perpetuar un discurso inquisidor, también, no esperes a
estar muerto para ser un ciudadano del Reino, estar bajo el Gobierno de Dios es
algo que sucede en la eternidad y la eternidad es justo ahora. Respecto a las crisis,
creo que son necesarias, Dios tiene formas curiosas de enseñarnos de probarnos y
de sacar lo mejor de nosotros, así como la muerte de Jesús en la Cruz fue
necesaria, quizá estas crisis nos permitan medir el corazón del hombre, de meros
caprichos a convicciones reales, la verdad es que después de muchas experiencias
dolorosas he notado un patrón en las campañas evangelistas, la mejor campaña
evangelista es tu vida delante de los demás, que la gente olvide tu nombre y
reconozca a Dios en tus actos y tu modo de enfrentar los días buenos y los malos
también, y quizá cuando llegues a una crisis mundial, sea el momento perfecto para
mostrar a través del evangelio el reino de Dios, y una fe activa que lejos de
reconocimientos propios, le enseña al mundo el amor del Padre
.