PRESOCRATICOS

¿Quiénes Fueron?
Cuando hablamos de Presocráticos nos referimos al primer periodo de la filosofía griega,
periodo en el que se incluyen todos los filósofos anteriores a Sócrates, esta etapa se
dividió en dos, etapa de bronce (3000-1200 a.C) y oscurantismo (1200-700a.C).
Los filosos presocráticos fueron los primeros pensadores que rompieron con las formas
míticas del pensamiento para empezar a edificar una reflexión racional:
Fueron los primeros que iniciaron el “Paso del mito al Logos” ( LOGOS – ESTUDIO
CONOCIMIENTO- RAZONAMIENTO) Es decir pasar de esos mitos, criticas y condiciones
sociales a una especulación más libre de ataduras a dogmas y textos sagrados, en donde
se estudia y se reflexiona desde lo racional.

¿Qué estudiaban?
Los presocráticos centraron su atención en la naturaleza, el problema del hombre y su
dimensión ética, estos no negaban la existencia de dioses o del alma porque para ellos los
dioses y el alma se constituían desde los mismos principios que otros objetos del mundo.
Estos empiezan un estudio de la naturaleza sin referencia a dioses ni entidades
sobrenaturales, en lugar de ello se explica a partir de conceptos de naturaleza y orden,
dejando a un lado los mitos para hacer una verdadera teoría, por lo cual empiezan a
reflexionar a partir de la observación de la naturaleza, en la que buscaban el origen de la
vida y del universo; analizaron el agua, el fuego, la tierra y el aire, como elementos
constitutivos de la vida, es así como en los presocráticos se inicia un modo de pensar
“demostrativo” que no se limita a escuchar relatos, si no que con su propia observación y
reflexión crítica trata de entender y razonar algo.

Los problemas de los presocráticos:

Si bien inicialmente centraron sus estudios en la naturaleza lo que en realidad les
importaba era el ser, su propia esencia y sus leyes, siendo el problema principal la
cuestión de la “arkhe” que significa el principio y origen de todas las cosas.
Es por esto por lo que empiezan a estudiar la distinción entre lo exterior y lo interior, lo
perceptible por los sentidos y lo intangible, lo accesorio y lo esencial, la apariencia y la
esencia.
A partir de esto surgen las primeras aproximaciones frente a las teorías del conocimiento,
fue precisamente Heráclito quien sostuvo que el conocimiento es producido por los
sentidos, en contraposición a él, Parménides afirmó que la razón era la base del
conocimiento, manifestando que las cosas y la realidad no son tal como la muestran los
sentidos, si no que existe un pensamiento que nos lleva a la razón y se opone a los datos
sensoriales de lo que percibimos.
Surge el Empirismo: Teoría del conocimiento, que enfatiza que los aspectos del
conocimiento científico están cercanamente relacionados con la experiencia o en el caso
científico mediante la experimentación.
Surge también el concepto de "arete", es la perfección, la virtud que se obtiene después
de haber realizado algunos lineamientos. Se decía que para poder entrar al "Hades",
paraíso, era necesario tener esos lineamientos, tales como: ser varón, guerrero, haber
muerto en batalla y haber sido enterrado.
Por otro lado, los pitagóricos: Enfocan su investigación desde un punto de vista formal
enfocado a las fuerzas de atracción (amor) y repulsión (odio), siendo esta la manifestación
de una investigación que comenzaba a indagar causas eficientes sobre temas morales.
Mas adelante surgieron los sofistas, quienes aportaron aspectos importantes como el
hecho de que las cosas existen solo si se les puede explicar, lo que no se pueda explicar no
haría parte del universo y la realidad.
A partir de estos presupuestos comienzan las primeras teorías empiristas y racionalistas,
las cuales serán tomadas posteriormente por otros filósofos modernos.

Entre los presocráticos más destacados encontramos a Tales de Mileto, Hipócrates,

Almeon de Crotona, Anaxímenes, Anaximandro, entre otros.

 Tales de Mileto: hablaba de la diversidad dentro de una unidad; cada uno de nosotros
somos una esencia, pero conformamos algo, formamos parte de una familia y cada una de
las personas que la conforman no pierden su esencia.  

 Pitágoras: Concepción antropológica dualista, es decir, el ser humano está compuesto

por un cuerpo y un alma, estaban influidos por creencias religiosas, defendían la
inmortalidad y la transmigración. El ser humano tiene que purificarse y una de las formas
de hacerlo es conociendo el cosmos.

 Heráclito: Una de sus máximas es “Todo fluye, nada permanece” (Panta rei). Señala que
nadie puede bañarse dos veces en el mismo río. Existe una perpetua lucha entre
contrarios. A diferencia de los pitagóricos, para los que la realidad era armonía, para
Heráclito todo tiene su origen en la tensión y el conflicto: “La guerra, de todos es padre, de
todo rey: a unos los designa como dioses, a los otros como hombres, a unos los hace
esclavos, a otros, libres”.
 Parménides de Elea: De la nada nada puede surgir. Señaló respecto a lo existente que lo
que es no tiene origen ni fin (es eterno), no puede cambiar (es inmutable), no puede
moverse, es único (no existe la pluralidad), es limitado (de acuerdo con los pitagóricos) y
perfecto, es una esfera homogénea y maciza. La materia es indestructible. Por lo tanto, los
sentidos no son válidos para el conocimiento. La única vía de acceso al conocimiento es la
razón. Distinguió entre la vía de la opinión y el camino de la verdad.

 Anaxágoras: Fue el primero en introducir un principio intelectual de mucha importancia,

el “Nous” (causa externa, intelecto, mente). Especulo sobre el origen y el desarrollo
del mundo, argumentaba que este comenzó como un caos desordenado al que el
espíritu, el Nous, impuso un orden y diferencio en cuatro elementos; fuego, agua,
aire y tierra.
Conclusiones:
Estos filósofos explicaban que la vida y la materia eran inseparables, de modo que los
hombres estaban vinculados íntimamente al universo. Por lo tanto, el principio físico
determinante a partir del que fluye la vida debía encontrarse en el universo.

De esta manera el pensamiento presocrático engendra las bases de desarrollo de la

filosofía y la ciencia, manifestando la preocupación por la indagación del ser, del devenir y
del tiempo, la distinción entre apariencia sensorial y realidad meramente intangible así
como una inicial preocupación por temas morales, alma y mente del individuo.