Salud mental y desarrollo humano

La organización Mundial de la Salud Define Salud Mental como un estado de bienestar en el

cual un determinado individuo es consciente de sus propias capacidades, logra hacer frente a las
tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva, y es capaz de hacer una
contribución a la sociedad en la que se desenvuelve. Así mismo esta misma entidad define
desarrollo como: un proceso de expansión de las libertades de las personas para llevar una vida
prolongada, saludable y creativa; conseguir las metas que se consideran valiosas y participar
activamente en darle forma al desarrollo de manera equitativa y sostenible en un planeta
compartido (PNUD, 2010, p. 24).

Vemos en la definición estas dos conceptualizaciones que entre ambas hay un vínculo
indisoluble; no es posible encontrar desarrollo humano, allí donde no hay salud mental. Tienen
como propósito lograr el bienestar individual a partir del desarrollo de las potencialidades de una
persona. Sin embargo, si una persona tiene afectaciones en su salud mental, se verá que su
desarrollo está afectado de manera directa y proporcional. A pesar de esta unión irrefutable, y
contrario a lo que pudiésemos llegar a pensar como profesionales de salud y específicamente
como profesionales de la salud mental ésta no se encontraba en los radares de los políticos del
mundo hasta hace relativamente poco tiempo; aunque el desarrollo, la evolución, el crecimiento
económico y social siempre estuvo en su campo visual.

A inicios del milenio poco se tenía en cuenta la salud mental dentro de las acciones
priorizadas para el desarrollo, eventualmente, a lo largo de los 10 primeros años de los 2000 se
fueron dando avances mundiales en la visibilizarían de esta temática. En el año 2010 la OMS, invito
a las diferentes naciones del mundo a incluir en sus planes y estrategias de desarrollo a la salud
mental, y finalmente en el año 2015 se definieron los objetivos de desarrollo sostenibles y allí, en
su objetivo número 3 el cual busca garantizar una vida sana y la promoción del bienestar para
todos en todas las edades, se señala la búsqueda por: “promover la salud mental y el bienestar” y
“prevenir el consumo del alcohol y sustancias psicoactivas” . Tenemos entonces finalmente como
objetivo mundial y asociado al desarrollo la salud mental.
 La pregunta entonces es ¿por qué tardamos tanto en darnos cuenta del impacto de la salud
mental en el desarrollo humano? La salud mental tiene un impacto directo sobre del desarrollo
humano, cuando la salud mental se cuenta alterada, cambia la vida; la persona se vuelve victima
de estigmatización, de marginación ( CITA), la capacidad de toma de decisiones se le ve
cuestionada, sus libertades se limitan, sus capacidades entran en duda, el individuo afectado deja
de ser considerado por la sociedad como un ser autónomo, y empieza a ser un visto como una
carga, un lastre, algo que debe arrastrarse y en mucho desde algunas perspectivas padecerse.

Así mismo las personas con alguna problemática asociadas a la salud mental se enfrentan a
una gran cantidad de barreras que les impiden obtener nuevamente autonomía y desarrollar sus
capacidades de forma productiva -relación a definición salud mental - puesto que tienen
limitaciones en tanto acceso a salud; un atención priorizada, adecuada optima y consecuente con
sus diagnóstico que propenda a una mejoría de sus sintomatología, estudio: planes formativos
diferenciales para personas con discapacidades o limitaciones cognitivas, trabajo: acceso a
empleos con remuneración y actividades dignas a personas con algún tipo de enfermedad mental.
Generando así círculos de malestar

Estos círculos y entramados de malestar son un fallido social, que afecta al individuo, a la
comunidad y evidencia el fracaso en las políticas de atención en salud mental establecidas por una
nación. Pues sabemos que muchas de las afectaciones de este tipo son prevenibles, sin embargo,
vemos que un sin numero de afectados no reciben tratamiento inicial, y aquellos que reciben
tratamiento pocas veces lo culminan visibilizando, por lo menos en nuestro país las limitaciones en
tanto el acceso a la salud. Y frente al sector justicia no estamos mucho mejor, los procesos de
rutas de atención pocas veces se cumplen de la manera esperada, las rutas suelen funcionar
únicamente en el papel membrete sobre el cual son diseñadas, en su ejecución evidencian miles
de problemáticas como son; falta de personal idóneo, revictimización, inatención de la denuncia,
iatrogenia, etc. Para visibilizar esta problemática imaginemos el siguiente panorama: … menor de
edad víctima de acceso carnal violento, como consecuencia de este queda embarazada, contrae
sífilis y su hijo al nacer evidencia meningitis y como consecuencia se esta presenta en retraso en su
neurodesarrollo… ¿Cómo imaginamos el futuro de esta menor? ¿Cómo imaginamos el futuro de su
hijo?
 De acuerdo con el Ministerios del Reino Unido Para el Desarrollo Internacional, los grupos
vulnerables no recibirán beneficios a menos que se identifiquen como grupos de riesgo. Es decir
que sin una serie de acciones dirigidas de manera específica a ese grupo vulnerable es muy
probable que el mismo se vea rezagado en términos de desarrollo mientras un país progresa. A
pesar de su vulnerabilidad, las personas con problemas de salud mental, vimos como
históricamente han sido invisibilizada dentro de los programas de desarrollo. Aun cuando las
problemáticas de salud mental tienen una alta prevalencia a nivel mundial, la afectación en tanto
la vida global del individuo es alta, la familia del individuo se ve afectada y ocasiones la comunidad
en que reside también se ve afectada.

Acercándonos a la realidad de la enfermedad/ malestar mental de nuestra sociedad, las

organizaciones políticas y civiles enfocadas en el desarrollo han de tener en cuenta la visibilización
de las problemáticas en salud mental en un determinado territorio, identificar su prevalencia,
incidencia, comorbilidades, factores determinantes y de riesgo, acciones, de atención con personal
idóneo capacitado y formado para brindar un acompañamiento ideal al afectado, acciones
conjuntas con diversos profesionales donde se atienda la el entorno familiar del enfermo,
programas de promoción y prevención, etc. Se ha de poner el foco en visibilizar poblacionales
vulnerables, y desde los programas de desarrollo efectuar acciones que tengan como fin, brindar
atenciónes que generen en el individuo la capacidad de ser partícipe de manera efectiva de la
sociedad, es decir para finalmente ajustarse de una manera precisa a esa definición que se nos
daba inicialmente de salud mental.