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ASUNTO: Salvación
TEMA: “Separados de mi nada podéis hacer”
TEXTO: Juan 15:5
Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste
lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.
Propósito General.- Evangelistico
Propósito específico.- Mostrar en amor al inconverso con el pasaje de la vid
verdadera para que entienda que si no estamos en Cristo, nada podemos hacer
en la vida.
INTRODUCCIÓN:
La vid es la planta de la uva, aquello que vemos en los viñedos con las uvas
colgando, y a esos racimos se les llama pámpanos los cuales se alimentan, se
nutren, crecen y maduran solamente pegados a la vid, sin esta unión necesaria
una uva seria marchita, sin jugo, y en poco tiempo seria basura, recogida y
quemada.
Esta comparación que nuestro Señor Jesucristo hizo acerca de los hombres en
su relación con El mismo, es un ejemplo de la dependencia que tenemos con
nuestro Creador, solo estando unidos en El y con El podemos ser cuidados y
labrados por Dios, sin esta relación proveedora y salvadora podemos dar fruto
y proseguir hacia la única meta posible: la salvación.
PROPOSICIÓN.- En su tiempo Jesús comparó la vida cristiana con algo que
ellos conocían a la perfección y estaban muy relacionados, (la agricultura) las
viñas eran muy comunes en ese tiempo, tanto para el consumo o comercio.
Una rama separada del tronco se seca, así de simple. Igual pasa con la vida del
ser humano. Separados de Dios, estamos perdidos y comenzamos a morir.
ORACIÓN DE TRANSICIÓN.- Así hermanos considerando la trascendencia
de las palabras del Señor Jesús y entendamos las implicaciones de la
dependencia con El divino Salvador.
PREGUNTA SERMONARIA.- ¿Por qué separados de Cristo nada podemos
hacer?
Divisiones:
I. Porque la Vid es Jesucristo