FACULTAD DE BIOCIENCIAS Y SALUD PUBLICA LICENCIATURA EN EDUCACIÓN PARA LA SALUD Presentado por: Laurencio J. Armuelles V. 9-751-1426 Prof. – Sheyla P. Samudio P. - Promoción para la salud
La carta de Ottawa es una guía
de inspiración política de muchos gobiernos, organismos internacionales, universidades, múltiples sectores, así como de la sociedad civil en su objetivo de mejorar las condiciones de la salud y promover la equidad. La promoción de la salud se centra en alcanzar la equidad sanitaria. Su acción se dirige a reducir las diferencias en el estado actual de la salud y a asegurar la igualdad de oportunidades y proporcionar los medios que permitan a toda la población desarrollar al máximo su salud potencial. fue concienciar de la importancia de la Promoción de Salud como abordaje para resolver problemas relacionados con la salud en un mundo que socialmente cambiaba a un ritmo ya desmesurado. Habíamos pasado de las Enfermedades Transmisibles como centro de la preocupación mundial a la aparición de Enfermedades No Transmisibles (ENT). Hoy, la situación sigue en esa línea de cambios, y la tendencia sigue orientada hacia la Promoción de Salud. Pero en la práctica, los actores que toman decisiones en salud olvidan cuáles son las prioridades en el campo de acción. Vivimos en un mundo globalizado, en el que los flujos migratorios o las consecuencias de la política internacional y en definitiva, los problemas globales, influyen en la población mundial, conllevan un importante cambio en los problemas de salud y en las preocupaciones de la sociedad. Muchos de los problemas tienen su origen en factores sociales que provocan desigualdades en la salud por razón de género y nivel socioeconómico, lo que se denomina “desigualdades sociales en salud”. No podemos olvidar que hay gente que tiene más fácil llegar a la meta de la salud, pues la clase social sigue siendo el eje principal de la desigualdad. La Salud Pública, y en este caso, la Promoción de la Salud no entiende de razas ni de clases sociales, está comprometida con el mundo, y sus acciones deben ir encaminadas a generar oportunidad y con ello equidad en salud. La carta de Ottawa se emite el 21 de noviembre de 1986 para cumplir con el objetivo ya planteado en el año 1978 en la declaración de Alma-Ata sobre Atención Primaria de “Salud para todos en el año 2000”. En esta conferencia se define Promoción de la Salud como “El proceso de capacitar a la población para que aumente el control sobre su propia salud y la mejore”. Se definen unos prerrequisitos para la salud; cualquier mejora de la salud ha de basarse en ellos: paz, educación, vivienda, alimentación, renta, un ecosistema estable, justicia social y equidad. Una buena salud es el mejor recurso para el progreso personal, económico y social y una dimensión importante de la calidad de vida, por lo que el objetivo es hacer condiciones favorables para promocionar la salud. Se insiste en que la Promoción de la Salud exige acción coordinada de gobiernos, sectores sanitarios, y otros sectores sociales y económicos, autoridades locales, industria y medios de comunicación. En conclusión, se propusieron cinco estrategias fundamentales para conseguir activar la Promoción de la Salud: 1. Políticas de Salud Pública adecuadas. 2. Crear entornos saludables. 3. Reforzar la acción comunitaria. 4. Desarrollar aptitudes personales. Educación para la Salud. 5. Reorientación de los servicios sanitarios.