PLAYA SOSTENIBLE. AUTOR: Lic. Bolívar Troncoso Morales, máster en Ecoturismo
INTRODUCCION
La postguerra, a partir del 1945, marca los inicios del desarrollo
turístico de litoral (playa) en el Caribe. Este proceso se va expandiendo como un eslabón de encadenamiento insular, y en algunos casos de costas continentales: Cuba, Lucayas o Bahamas, Puerto Rico, Antillas menores inglesas y norteamericanas (islas Vírgenes), Antillas menores francoparlantes, angloparlantes y de habla holandesa, República Dominicana, Haití, Jamaica, Cancún, Islas Caimán, Islas Roetán, Isla Margarita, Cartagena de Indias, etc. Este desarrollo en cierta forma desmedido de los litorales caribeños, sin una política de planificación coherente, adecuada y monitoreada, ha traído como consecuencia una secuela de impactos ambientales, fruto del vertimiento de aguas residuales en el mar, lagos, lagunas, ríos y el manto friático; deforestación de manglares y secamiento de lagunas y humedales litorales para ampliar o crear playas, construir hoteles y otras plantas e infraestructuras turísticas; construcción de pozos sépticos en litorales calcáreos que por la naturaleza de las rocas se infiltran a las playas y costas arrecifales las aguas negras, aportando hongos y bacterias que afectan a los bañistas, además de las secuelas generadas a la biodiversidad marina; construcción de espigones y/o muros de contención en las playas para aumentar el volumen de arena o reducir la erosión, sin estudios previos de batimetría, corrientes marinas, granulometría de la arena, condición de los corales, oscilaciones del nivel del mar, entre otras variables; rompimiento de las barreras de corales para permitir el acceso de las embarcaciones al área de playa; construcción de hoteles y otras plantas turísticas sobre las dunas y las playas, generalmente a menos de 60 metros de la pleamar; sobresaturación de la playa con turistas, 1 superando la capacidad de carga de la misma; construcción de torres de hoteles en la costa, variando la dirección de los vientos; construcción de marinas sin estudios previos que determinen sus efectos sobre las playas; mal manejo de los residuos sólidos, especialmente los orgánicos y plásticos; uso de insecticidas no biodegradables para el exterminio de mosquitos y otros insectos que afectan a los turistas; utilización de detergentes no biodegradables para la limpieza; uso intensivo de embarcaciones para las actividades marinas, aportando al mar grandes cantidades de monóxido y bióxido de carbono; agotamiento de los mantos friáticos por uso intensivo y no planificado del caudal existente; son, entre muchas otras razones, las causas que van degradando los recursos naturales del Caribe y en especial de nuestro país, por un uso no adecuado de los mismos por parte del turismo. Entre las consecuencias de estas inadecuadas medidas del turismo tradicional o convencional en nuestros litorales se pueden citar el desarrollo de cierto tipo de algas que cubre y mata el coral, elemento esencial en la conservación de las playas, así como también en la sostenibilidad y equilibrio de la vida marina; contaminación de las aguas marinas, de ríos, lagos, lagunas y subterráneas, cuya secuela para la actividad turística es catastrófica; destrucción de ecosistemas y nichos costeros-marinos, especialmente arrecifes coralinos y manglares, considerados como de los de mayor riqueza y biodiversidad del planeta; extinción de especies de flora y fauna, muchas de las cuales eran nativas o endémicas del Caribe; aporte de hongos y bacterias a las playas por infiltración o depósitos de las aguas negras, cuyos efectos en la piel del turista y la destrucción de la vida marina es conocida; variación de las corrientes marinas litorales y su consecuente arrastre de la arena de las playas; impermeabilidad y pérdida de la arena al sobrepasar la capacidad de carga de las playas; cambios micro-climáticos con funestas consecuencias para el medio ambiente; degradación ambiental por contaminación con desperdicios sólidos, especialmente plásticos, los que tardan alrededor de 500 años para desintegrarse; destrucción de arrecifes coralinos por la combustión de los derivados del petróleo en las embarcaciones; contaminación atmosférica; degradación ambiental por uso de químicos no biodegradables; pérdida de la biodiversidad costero-marina, entre muchos otros efectos que van en detrimento del turismo y convivencia armónica del hombre con la naturaleza. Este desarrollo turístico a expensa de un uso incorrecto de los recursos naturales, sin ningún criterio de sostenibilidad, ha contado con 2 voces de alarma como la planteada por la UNESCO en los años 70 y otras instancias. Además, varios países se han visto en la perentoria necesidad de tomar medidas paliativas. No obstante, es a partir de las dos últimas décadas(años 80 y 90), con los inicios del subsector del turismo naturalista (ecoturismo), los planteamientos del modelo de desarrollo sostenible aplicados al turismo y el surgimiento de organizaciones regionales con acciones conservacionistas, cuando se buscan soluciones concretas a una problemática regional, donde el producto turístico es tan similar. Para la proposición de modelos que permitan un uso sostenible de los recursos naturales por parte de la actividad turística, estos deben ser planteados en función de los subsectores turísticos que predominan en la zona del Caribe, así como también de las tendencias y perspectivas de este importante sector de la economía. Partiendo de lo anterior, se propone un modelo ambiental para lograr un desarrollo sostenible del turismo convencional de playa para la región del Caribe, dadas las similitudes naturales de las islas y el rol que juega este sector de la economía, al ser el de mayor importancia en la generación de divisas.
PASOS O ETAPAS DEL MODELO AMBIENTAL PARA
EL TURISMO CONVENCIONAL DE SOL Y PLAYA SOSTENIBLE.
Como en la región del Caribe, y en específico en nuestro país,
Dominicana, el turismo convencional (sol-playa-arena) es el que tiene mayor incidencia económica y ambiental, se plantea este modelo ambiental para el logro de un desarrollo sostenible en el sector. Partiendo de esta primicia, a continuación se enuncian las variables ambientales a tomar en cuenta para el logro de un turismo convencional sostenible. 1- Elaboración de un "Plan de Ordenamiento Territorial Turístico", donde se establezcan las normas de construcción turística respetando los ecosistemas costeros-marinos frágiles, como son los manglares, humedales, arrecifes coralinos, lagunas costeras y otros. Este plan debe contener un plan maestro (master plan) de cada sitio, zona o polo turístico, donde se señale los ecosistemas frágiles 2- Que todo proyecto turístico someta al organismo oficial de turismo, con carácter de obligatoriedad, un estudio de impacto ambiental (EIA), 3 realizado por un equipo multidisciplinario, cuyo contenido debe abarcar la geología-geomorfología, ecosistemas terrestres y marinos, clima (vientos, condiciones del aire, temperatura, humedad, pluviometría, etc.), hidrografía, biogeografía (flora y fauna), aspectos socioculturales del entorno, sondeo arqueológico, impactos ambientales y socioculturales que generaría el proyecto, mapa de uso de suelo para superponerle el plano del proyecto a fin de que el mismo se ajuste a las recomendaciones del EIA, sistema de gestión o monitoreo ambiental, entre otras variables. Aunque existen varios modelos de EIA, siendo uno de los más completos el del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), cada país debe elaborar uno para adecuarlo a su realidad. 3- Todo país que sustente el desarrollo turístico en la zona costero- marina, debe realizar estudios de batimetría, corrientes marinas, arrecifes coralinos, granulometría, oscilaciones del nivel del mar, morfología litoral y cualquier otro que coadyuve a mantener el equilibrio de las playas. Estos estudios serán elementos decisitorios para la autorización de marinas, muelles de cruceros, acondicionamiento de playas y cualquier otra obra marina con fines turísticos. 4- Todo Estado o Territorio en el Caribe debe elaborar un instrumento jurídico o Ley de Costa, si aún no lo tiene, que tenga como función primordial regular toda actividad humana en la zona costero-marina, especialmente la turística. Sin este mecanismo legal es imposible lograr un turismo sostenible en una región donde el atractivo por excelencia lo es el mar, las playas y los cocoteros, y su fragilidad es alta, dado el riesgo que corren las dunas, manglares, los arrecifes coralinos y otros ecosistemas costero-marinos. Modelos a tomar en cuenta son la "Ley General de Costas de España", la de Cuba, los programas de manejo integral de costas del PNUMA para el Caribe, entre otras 5- Dada la fragilidad de las arenas de las playas y el rol de las dunas en el equilibrio de las mismas, toda construcción debe realizarse a una distancia prudente de las mismas. Esta debe oscilar de 60 a 120 metros de las dunas, no de la pleamar. Con ello se mantiene el equilibrio de las playas, evitando la erosión. 6- Toda construcción turística próxima a zona de manglares, humedales, ríos, lagunas y cualquier otro curso de agua, debe ser establecida a una distancia mínima de 30 metros del límite máximo que alcanzan las aguas de los mismos. 7- Toda obra turística delimitada por el mar y manglares o humedales, 4 debe construir las vías de acceso con sistemas de drenaje (entubamiento) para permitir la circulación del agua, evitando la desaparición de esos frágiles ecosistemas costero-marinos. Para los pasos peatonales y vehicular, las vías deben ser levantadas sobre soportes (sistema de pilotillos), lo que a la vez se convierte en un sendero para la observación de la flora y la fauna. El material de construcción debe ser perecedero y que armonice con el entorno.
8- El Estado debe construir las obras de infraestructura turística
adecuadas en cada sitio, zona, lugar o polo turístico, tales como alcantarillado sanitario, alcantarillado pluvial, acueducto de agua potable, vías de comunicación, medios de comunicación, sistema de recogida y disposición final de desperdicios sólidos (basura), entre otras. Cuando no esté en capacidad de hacerlo, debe exigir a los proyectos: a)- Planta de tratamiento de las aguas residuales (negras y servidas) con los tres procesos (primario, secundario y terciario), para que las mismas sean recicladas y usadas en la jardinería, riego agrícola, consumo animal, vertidas en los cursos de agua o cualquier otro uso b)- Sistema de abastecimiento de agua potable con los estándares internacionales c)- Sistema de abastecimiento de energía ambientalmente compatible d)- Rellenos sanitarios para el destino final de los sólidos. 9- Todo proyecto hotelero a construir debe exigírsele la inclusión de un cuarto frío para el manejo de los desperdicios sólidos, con la finalidad de que no se descompongan los orgánicos, y aplicar el sistema de reciclaje. Recomendar la producción de compost (abono orgánico) a partir de los desperdicios orgánicos, para ser usado en la fertilización de la jardinería, producción de agricultura orgánica, etc. 10- El organismo oficial de turismo no debe permitir hoteles en la zona de playa cuya altura sobrepase el tamaño de la palmera, ya que afectaría las corrientes de aire, cambiando el microclima local y por lo tanto las corrientes marinas. Para la región del Caribe, la altura máxima ideal debe ser de tres niveles (plantas) en la primera línea de costa. 11- Toda empresa hotelera de playa, montaña o cualquier lugar donde los insectos afecten a los turistas, deben usar insecticidas biodegradables. 12- Toda empresa turística que utilice detergentes para la limpieza debe usar los biodegradables. 5 13- Toda empresa de alojamiento debe abocarse a la reducción en el consumo de agua potable, utilizando sistemas de grifos implementados por la Asociación de Hoteles Verdes, la Alianza Caribeña para el Turismo Sostenible (CAST) de la CHA, GREEN GLOBE, entre otros programas de certificación hotelera. 14- Toda empresa hotelera debe buscar alternativas ambientalmente sanas para la producción de energía, lo mismo que mecanismos para la reducción del consumo, a través de sistemas de iluminación que implementa la Asociación de Hoteles Verdes, la CAST, entre otros. Para la producción energética, las alternativas más viables en el Caribe son la solar, eólica e hidráulica. 15- Todo Hotel debe acondicionar su entorno con una jardinería que utilice predominantemente especies de flora nativa y endémica, muchas de ellas frutales que atraerán la fauna, especialmente las aves y mariposas, y plaquetarlas con el nombre común y el científico. Está demostrado que estas resisten más que las exóticas los fenómenos naturales como los ciclones. 16- Toda empresa de alojamiento debe dar los pasos de lugar para la integración de las comunidades locales a su actividad turística, a través de la cooperación para la creación de micro-empresas de artesanía a partir de los recursos naturales de la zona que no afecten el medio ambiente, proyectos de agricultura orgánica para el abastecimiento del mismo proyecto, creación de reservas ecológicas privadas en los terrenos periféricos al hotel, para que sean integradas a la oferta turística a través del comanejo, creación y utilización de grupos culturales locales en las actividades recreativas y de diversión, etc. 17- Cada hotel u organismo de turismo deberá crear un modelo de gestión o monitoreo ambiental para darle seguimiento al cumplimiento o no de estas regulaciones. 18- Cada hotel u organismo de turismo deberá crear un modelo de certificación ambiental del turismo, tomando como modelo el de Costa Rica, el de CAST, GREEN GLOBE o cualquier otro, o en su defecto aplicar cualquiera de los enunciados. 19- El organismo oficial de turismo, en coordinación con el sector privado y las ONGs ambientalistas, deberán crear programas nacionales de educación y concienciación ambiental. Esto como un programa de educación asistemática. Además, en coordinación con el organismo oficial de educación, crear un 6 plan nacional de educación y concienciación turística sistemática. Ambos programas deben fundamentar sus contenidos en el turismo sostenible. 20- El organismo oficial de turismo de cada país o territorio deberá crear una división o departamento de Medio Ambiente, cuya finalidad fundamental será hacer cumplir estos requisitos, establecer un sistema de gestión o monitoreo ambiental, y aplicar el modelo de certificación ambiental.