EL GRAN BOMBERO Había una vez un niño llamado Nicolás.

Él soñaba ser
un gran bombero. El patio de su casa era el escenario
de las grandes aventuras que vivía mientras dormía,
porque soñaba y soñaba que rescataba animales en el
medio del fuego; a los niños y personas adultas
atrapadas en sus casas mientras ardían de calor por
el fuego.

Autor:
Nicolás José Bedoya Puello
Editorial: mi mamá me apoya
2018
Al despertar, era el fin de una historia pero no el fin
de su meta o de su sueño de ser un gran bombero
cuando se hiciera grande.
Pasaron los años, Nicolás buscó la mejor escuela de
su ciudad para aprender, todo sobre rescatar
animales y personas, todo sobre coger una manguera
y echar agua y más agua hasta apagar el fuego.
Nicolás en la escuela aprendió a respetar y fue
respetado por su disciplina y ganas de salvar muchas
vidas. Se comprometió con la escuela de bombero y
era el voluntario de rescate número # 1.
Todos los días se preparaba para tener mucha fuerza
para trepar escaleras y para cargas animales, niños y
adultos. Tenía que hacer ejercicio.
Además leía muchos libros sobre cómo ser un buen
bombero.
Un día muy tranquilo en la estación de bomberos de
la ciudad suena el teléfono informando que un
incendio muy grave estaba quemando y consumiendo
la zona boscosa que rodeaba la ciudad, muchos
animales estaban muriendo. Sin pensarlo dos veces
Nicolás se preparó y en compañía de otros bomberos
salieron a salvar la vida de los animales que se
encontraban en el medio del fuego.
Nicolás se sumergió en el medio del bosque apagó el
fuego y salvó vidas. Sus compañeros, las personas que
Vivian cerca de la de la ciudad y su familia lo
aplaudían al ver su valentía y ganas de servir a la
comunidad. Nicolás estaba muy feliz porque por fin
sentía que se había convertido en un gran bombero.

Fin