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UNA PROPUESTA PEDAGÓGICA DE ENSOÑACIÓN

PARA LA INFANCIA
Deysi Liliana Cuartas Montero
Formadora Programa para la transformación de la calidad educativa del MEN
Magíster en Literatura Colombiana y Latinoamericana Universidad del Valle
deisy62971@yahoo.es

Resumen Key words: Daydream, Imagination, Word, Orality and


Este artículo plantea una serie de inquietudes relaciona- Pedagogy
das con el tipo de educación con que se orienta a nuestros
niños y niñas. Presenta además, una propuesta pedagógi- El caramelo instructivo
ca de ensoñación que evidencia la importancia de generar
prácticas innovadoras y sensibles en la escuela para que En el planeta Bih no hay libros. La ciencia se
los niños y las niñas sueñen y se enamoren del lenguaje. vende y se consume en botellas.
De esta forma la propuesta muestra el Lenguaje y la Ora-
lidad como esos primeros elementos de conguración del La historia es un líquido colorado como una
universo simbólico en los niños y niñas mediante la enso-
granada; la geografía, un líquido color ver-
ñación, postulado fenomenológico propuesto por Gastón
Bachelard. Se invita entonces a ensoñar con el lenguaje, a de menta; la gramática es incolora y sabe a
convertir las expresiones de los niños y niñas en material agua mineral. No hay escuelas; se estudia en
poético. Esto sólo es posible si se logra hacer un cambio casa. Los niños, según la edad, han de tomar-
de los paradigmas que encierran las diferentes prácticas se cada mañana un vaso de historia, algunas
de construcción de conocimiento y si se logra convertir la
cucharadas de aritmética (…)
escuela en ese espacio de encuentro entre la palabra y la
magia, donde lo racional e irracional se encuentren para
dar paso a la libertad de soñar.
Gianni Rodari

Palabras clave: Ensoñación, Imaginación, Palabra, Ora- Introducción


lidad y Pedagogía.
¿Qué se hace en la escuela con los niños?
Summary
Este interrogante va acompañado de una
This article raises a number of concerns related to the
cantidad de inquietudes que lleva a pensar en
type of education that we are guiding on our children.
It’s also a pedagogical proposal to show the importance los niños no sólo como el futuro de lo que po-
of creating innovative and sensitive practices in school drá ser, por el contrario, ayuda a reivindicar su
for children to dream and fall in love with the language. rol desde el ahora, y ante ello cabe de nuevo
Thus, the proposal shows the language and orality as preguntarse: ¿Qué tipo de niños y niñas se for-
those rst conguration elements of the symbolic uni -
verse in children, phenomenological postulate proposed
man? ¿Qué tipo de formación se ofrece? ¿Cómo
by Gaston Bachelard. So, there’s an invitation to dream hacer para que los estudiantes rompan los es-
with the language, to convert the expressions of children quemas tradicionales y beban el conocimiento
in poetic material, so this path is possible if we make a con fascinación, con autonomía, así como en el
change of paradigms that contain the dierent teaching- Planeta Bih propuesto por Rodari? Éstas y otras
learning practice. We need to make the school a space of
meeting between the word and imagination.
tantas preocupaciones, ocupan el diario que-
hacer pedagógico. Las aulas no sólo deben al-
bergar conocimientos o inquietudes, sino tam-
Este artículo tiene como base los elementos teóricos de la investi- bién, en ellas se han de incentivar propuestas
gación de la tesis de Maestría “Mitopoética de la Creación” realizada
durante los años 2010 y 2011 para la Universidad del Valle, donde
para permitir que los niños y las niñas sueñen,
se expone una reexión enriquecida desde los contextos educati- se enamoren del lenguaje por medio de prácti-
vos, ya que desde allí los resultados de la investigación cobran vida
y reacomodaciones pedagógicas. cas innovadoras y sensibles. Así, es importante

Recibido, febrero 16 de 2012, Aceptado, junio 4 de 2012


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crear y encontrar nuevos espacios, donde los tradición pedagógica universal, incorporan-
niños y niñas disfruten del juego verbal: la im- do nuevas tecnologías como herramientas
plementación de didácticas de la literatura que de procesamiento de la información sobre
enriquezcan los procesos de formación de cada el mundo natural y social, como instrumen-
uno de ellos, con el n de convertir el goce lite- tos de su desarrollo cognoscitivo, como
rario en objeto de enseñanza para incidir en el mecanismo de autorregulación y exibili-
desarrollo de competencias relacionadas con zación de sus propias estrategias de cono-
lo estético, lo emocional, lo cultural, lo ideoló- cimiento, e incluso como prolongación de
gico, lo cognitivo y pragmático (MEN, 1998). su capacidad previsora del futuro y de mun-
dos virtuales, como nuevos entornos cuya
¿Qué es necesario? Un cambio de paradig- existencia se simula, se pronostica y se crea
mas pedagógicos. He ahí nuestro gran reto, en realidades virtuales. He aquí la clave que
lograr que las prácticas en la escuela cambien. facilitará la realización del niño (…). (Flórez,
Por eso es de gran importancia entender la Es- 1997, p.33)
cuela como ese primer espacio institucional de
socialización para los niños además, como un Por lo tanto, nuestras miradas no sólo deben
ente generador de propuestas y posturas po- apuntar al desarrollo de prácticas de construc-
líticas, en la que se deben reejar reexiones e ción de conocimiento que busquen la realiza-
investigaciones desde el enfoque pedagógico, ción del niño a nivel cognoscitivo, sino también
didáctico, epistemológico y ético, donde lo dis- a la generación de cambios en los paradigmas,
ciplinar y lo profesional se conjuguen con nue- los cuales nos permitan capturar la atención
vos sentidos. Recordemos lo que Flórez (1997) de quien desea acercarse al conocimiento, no
entiende por escuela: sólo como agentes o protagonistas, sino como
actores dinamizadores del proceso educativo.
La escuela es un centro de formación bási- Todo esto con el n de lograr hacer una inter-
ca que educa integralmente en los valores vención adecuada en los contextos culturales,
y saberes propios de la comunidad y de la interculturales, sociales, artísticos, estéticos y
época dentro de los ideales humanos de la tecnológicos en los que se encuentran inmer-
sos los distintos ni-
ños y niñas que se
reciben a diario en la
escuela, por eso, es
tan importante reco-
nocer en la etapa de
la primera infancia
un periodo altamen-
te signicativo en la
vida de cualquier ser
humano:

La primera infancia
se reconoce como
una etapa funda-
mental en el desarro-
llo del ser humano.
Los aprendizajes y
experiencias que se
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adquieren en este periodo perduran toda la ¿Qué medio nos permite acercarnos a los ni-
vida; las formas de relacionarse consigo mis- ños y niñas para generar posturas críticas, polí-
mo, con el otro y con el entorno permiten ticas e interacciones sociales con sentido?
explorar y conocer el mundo, adquirir co-
nocimientos, capacidades y habilidades que “¿Acaso, allá arriba, en el cielo, el paraíso no
juegan un papel determinante en el desa- es una Inmensa biblioteca?”
rrollo integral de los niños y las niñas (MEN, Gastón Bachelard
2010, p.14)
Y se hizo la palabra…
Los aprendizajes y experiencias que se tienen
en esa primera etapa de la vida son relevantes Cada uno de los seres que había en ese en-
para toda la existencia, por el nivel de signica- tonces agarró con sus alas las palabras que
do que se generan y por el tipo de interacciones habían sido esparcidas al viento, una a una las
que se fortalecen. Es por eso, que es indispensa- tomaron para depositarlas en los colores de las
ble un ambiente académico adecuado en el cual gotas de agua.
se creen oportunidades de desarrollo e interac-
ción social. De ahí la importancia de reconocer Toda la tierra se colmó de su olor, danzaron
la implementación de didácticas que van más con la lluvia, arrebataron la magia, crearon en-
allá de la ejecución de metodologías o trucos de soñaciones y las plasmaron en experiencias de
instrucción, así, la invitación es a reexionar si las vida, experiencias para ser compartidas en ese
acciones las consideramos como una “disciplina paraíso metafórico del diario existir (...).
cientíca” (Álvarez, 2005, p.49) que trasforma la
Una de las características más importantes
realidad del sistema didáctico en objeto de co-
que se tiene como humanos es el uso de la pa-
nocimiento, la cual, permitiría abordar “ese saber
labra y ésta cobra gran valor en el momento en
disciplinar y todas las variables que inciden en
el que se usa con los otros, es decir, en ese ins-
ese saber enseñable” (Zabala, 2002, p.53). De
tante en el cual se toma la biblioteca personal
una u otra forma, el llamado “arte de enseñar” se
como lo menciona Bachelard y se enriquece en
debe involucrar de forma adecuada y mágica en
el intercambio con otros seres, con otras ideas
esos primeros años en la escuela, es decir, que
y propuestas que nos ayudarán a enriquecer
las acciones y prácticas tengan componentes
nuestras propias fuentes del saber-hacer en
pedagógicos, disciplinares, cientícos, investiga-
contextos especícamente educativos. De esta
tivos, éticos, sociales, culturales y ambientales,
forma, se entiende que la palabra es ese medio
en las que se reconozcan los derechos huma-
que ayuda a crear en los niños y niñas esas pos-
nos, pero que también se permita soñar, soñar
turas críticas y políticas necesarias para fortale-
con mundos posibles y palparlos por medio de
cer la zona de desarrollo próximo que propone
las palabras. A propósito de ello, Alfonso Reyes
(MEN, 1998, p.21). En este sentido, el desarrollo
menciona que
cognitivo y sociocultural está determinado por
“[…] lo más importante en los primeros pel- el tipo de relaciones, interacciones y mediacio-
daños de la pirámide escolar es la liberación nes que los niños y niñas tienen con los otros.
de la palabra por el niño, el fortalecimien-
En los roles como educadores, maestros, pro-
to de su competencia comunicativa a nivel
fesores u orientadores se abre la posibilidad de
oral, para luego acceder a la necesidad de
pensar en la palabra como ese elemento mági-
leer y escribir” (MEN, 1998, p.20)
co de intercambio y de reexión que nos ubica
y con una implementación de la ensoñación en la escuela como actores activos. En primer
en las prácticas escolares se puede lograr. lugar, se reconoce entonces que los contextos
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que rodean al niño en la primera etapa de su debe reaprender a ver el mundo con ojos dife-
vida están altamente inuenciados por el uso rentes, aprender a maravillarse con lo simple y
de la palabra, es decir, la oralidad y he aquí que lo complejo, con lo confuso y con lo claro, con
la intervención como educadores debe ser per- el aquí y con el no existente; encontrar en cada
tinente y adecuada. acto, en cada imagen una manifestación poéti-
ca. A propósito de ello, Gastón Bachelard utiliza
De acuerdo a lo anterior, se encuentra que el el método fenomenológico para dar razón de la
evento que representa la palabra hablada sim- imagen poética, busca su origen en la produc-
bólicamente es una colectividad, el decir de sus tividad psíquica de la imaginación, utiliza este
gentes, esa constitución del ahí, de la inmedia- método para profundizar en la psicología del
tez, de lo personal y lo más cercano. Todo esto Maravillarse. Y este camino es el que hay que
lleva una interacción social rica en signicados. explorar, permitir que aore en cada expresión
Ese universo simbólico que encierra la oralidad sublime que los niños y niñas tienen, esos que
revalúa las relaciones sociales y las posturas al parecer se forman incoherentes, carentes de
que más adelante debe asumir el niño dentro sintaxis, pero que son en realidad el nacimiento
del llamado “circuito comunicativo” Vich, (2004, del lenguaje.
p.25) que se torna enriquecedor para las inter-
venciones que se hagan para los mismos. Por Este teórico francés dota a la imagen de esa
ello, la oralidad necesita ser pensada desde la capacidad que posee como “un origen absolu-
importancia en la generación de signicados a to (…) una imagen poética puede ser el ger-
nivel social, político e imaginativo, lo que lleva- men de un mundo, el germen de un universo
ría a replantear eso que se dice, cómo se dice y imaginado ante las ensoñaciones de un poeta”
quién es el encargado de motivar el buen uso y (Bachelard, 1993, p.10). Las imágenes se pre-
enamoramiento del Lenguaje. Por ende, lo ideal sentan de esta forma en una “sutileza de una
es entender el fenómeno de la palabra hablada novedad” que redobla la alegría de maravillar-
como “performance” Vich, (2004, p.26), como se. Es por eso, que concibe la imagen poética
discurso que se hace en cierta medida mágico como un nuevo ser del lenguaje, aquella que
por el poder que logra tener en los oídos de ilumina la conciencia y por ello, es inútil bus-
quien interactúa y escucha. La interacción con carle antecedentes inconscientes. De ahí que
el otro es lo que logra darle signicados a los sea importante la toma de conciencia tenien-
enunciados, enunciatarios y contextos comuni- do en cuenta que la toma de conciencia es un
cacionales. aumento de luz, un refuerzo de la coherencia
psíquica (Bachelard, 1997:15) para encontrar
Metodología en la imagen poética una novedad. Y cada vez
que la misma imagen se renueva en uno de
¿Qué logra entonces conjugar el poder de la sus rasgos, mani esta una inocencia primera y
palabra para permitir que simbólicamente se esa inocencia es encontrada con los pasos de
genere una novedad y otro tipo de espacios en la Fenomenología.
la construcción del conocimiento de los niños y
niñas? La ensoñación poética es una respuesta De esta forma, Bachelard muestra un cami-
a ello. En la escuela se debe abrir espacios para no para encontrar un origen del maravillarse y
pintar con las palabras, para permitir que el co- ese maravillarse lo liga a la novedad e inocencia
nocimiento no sólo sea cientíco sino humano, que se encuentra en una imagen. ¡Y qué mejor
de sentires, de generar la capacidad de tener un campo para explorar la inocencia que el com-
diálogo con su realidad, con su fantasía y con partir y crear con los niños y niñas! Pero hay un
sus mundos soñados. Así, para la incorporación requisito: “La fenomenología de la imagen pide
de didácticas que involucren la ensoñación se que se active la participación en la imaginación
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creadora” (Bachelard, 1993, p.14), es decir, en la la facultad simbolizadora del hombre” (Jung,
ensoñación poética: “la huida fuera de lo real, 1997, p.22). Debido a esta facultad la riqueza
sin encontrar un mundo irreal consciente” (Ba- de esas imágenes tiene unas características
chelard, 1993, p.15) y la posibilidad de plasmar- especí cas; son más pintorescas y vivaces que
lo por medio de la palabra. las que tenemos al estar despiertos o cuando
actuamos de forma “racional”.
Así, en su propuesta une la fenomenología
como un método racional con la ensoñación Sin embargo, la ensoñación no se tiene en
poética para encontrar la conciencia de esas este estado onírico pero no lo abandona del
imágenes que la alimentan para determinar todo, está en un nivel intermedio. Hace con-
“una fenomenología de lo imaginario” (Ba- ciencia de esas imágenes que percibe en am-
chelard, 1993, p.20), donde la imaginación es bos estados. La ensoñación como producto de
el primer eslabón psíquico que la determina. esa fenomenología se muestra con conciencia
Recordemos que la fenomenología es conce- de ella, lo que es diferente a la convicción de
bida como un método o como una concep- haber vivido lo que soñó, pues se confunden
ción del conocimiento y se liga de forma casi los sujetos, las imágenes y las realidades. La
“irracional” con lo abstracto, lo imaginario e ensoñación logra hacer la mediación entre el
intangible. A partir de este fundamento, se mundo “irracional” del sueño y “lo racional”
hace necesario saber la correlación existente de la realidad, puesto que esta manifestación
entre sueño y ensoñación. En primer lugar, se- nos permite encontrar y disfrutar de esas imá-
gún Carl Gustav Jung nuestra vida onírica es genes producidas en una especie de sueños,
la primera base de la cual se desarrollan ori- pero con una característica importante, que al
ginariamente la mayoría de símbolos y ésta tenerlas se puede encontrar el recuerdo y ex-
se hace presente de forma inconsciente, “[…] perimentar la conciencia de ellas.
los sueños son la fuente más frecuente y uni-
versalmente accesible para la investigación de Por ello, Bachelard aduce buscar la enso-
ñación en el sueño y no a la inversa. La en-
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soñación, por lo tanto, se llena de belleza, de y la logren conjugar en la Ensoñación. Eso


bienestar “gracias a ella y ella todo se vuelve intangible, esa ensoñación de las “fuerzas vi-
hermoso” Bachelard, (1993, p.27), de aquí la vas del lenguaje” (Bachelard, 1993, p.75), esa
importancia de seleccionar para los oídos de vida hablada para soñar, soñar en la propia vida
nuestros niños y niñas lecturas encantadoras, del lenguaje. La vida del lenguaje en Bachelard
que generen ensoñación poética, como aper- está ligada a la organización del sexo de las pa-
tura al mundo de los mundos, al mundo de lo labras, especialmente la inclinación femenina.
hermoso. Donde lo real y lo irreal se encuen- Soñar con las expresiones de lo nuestro; la pa-
tran, a veces “el mundo real es absorbido por labra hecha creación desde la escuela con los
el mundo imaginario” Bachelard, (1993, p.29), niños y niñas.
y en denitiva es gracias a la imaginación y a
las sutilezas de la función de lo irreal que se Invitamos entonces al lenguaje poético para
llega al mundo de la ensoñación. que nos acompañe en la escuela, para que sus-
cite nuestra ensoñación, que se funda en ella,
La trascendencia del momento onírico que para que trascienda los antagonismos en el po-
se encuentra en el contacto de la palabra y la der del anima. Las ensoñaciones se desarrollan
aproximación con los niños y niñas de forma en un antagonismo constante, las tendencias
consciente permite como maestros reconocer hacia la aparición del anima y el animus pos-
las imágenes poéticas en momentos irracio- tulados que Bachelard toma de C. Jung en la
nales, en rimas, en cantos, en la narración de psicología de las profundidades para mostrar al
mitos, leyendas, en el contar de anécdotas. És- soñador como ese ser que recoge en una enso-
tas son, sin lugar a dudas, una serie de imáge- ñación andrógina estos componentes. Al con-
nes que se perciben dentro de la imaginación templar una imagen, una palabra se activa el
material planteada por Bachelard, es decir, anima de un hombre o mujer, pero cuando esta
una ensoñación. Aquella que le da sentido a imagen se materializa, es el animus que insta el
la cosmogonía de una colectividad, que le da rigor a procedimientos como la escritura o el
sentido a la educación desde el ser. empleo de la oralidad. De ahí, que quien moti-
ve la ensoñación de esos primeros años de vida
sea conocedor de este gran fundamento.
¿Qué hay qué hacer entonces en la
escuela? Así, ambos elementos se conjugan en la
Seleccionar imágenes, no sólo icónicas que contemplación. La androginia de la ensoña-
evoquen ensoñación y esto se puede hacer por ción también se hace presente en la percep-
ción de la forma, del elemento poético que
medio de cuentos, lecturas de mitos, poemas,
chistes, rimas, trabalenguas, juegos cruzados de encierra imágenes de las historias que cuen-
tan los niños y niñas, en las que cuentan “irra-
palabras que cobren vida, nuevos signicados,
cionalidades” y fugas de ensoñación e “ideali-
que vayan de lo humano a lo divino y donde lo
sagrado se envuelve en los hilos de la imagina- zación efectiva en animus y animas”. Al acer-
ción. En resumidas cuentas, implementar la “Gra- carnos a escuchar lo que ellos nos cuentan
mática de la fantasía”, dirigida a todo aquel asistimos a un nacimiento simbólico, poético
y además a “un sincretismo lingüístico”, que
“[…] quien cree en la necesidad de que la nos lleva por parajes que no habíamos queri-
imaginación ocupe un lugar propio en la do reconocer, hacia las voces ancestrales, las
educación, a quien confía en la creatividad palabras del viento, de personajes extraños
infantil; a los que saben cuál es el valor de e inexistentes, o el lenguaje del agua y de la
liberación que puede tener la palabra” (Ro- tierra que nos permiten concebir una ensoña-
dari, 199, p.17) ción idealizadora.
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Nuestra cultura según María Luisa Ortega y Es decir, la comunicación que se da con los
Betty Osorio (2007, p.20) posee un sincretismo elementos naturales, las anécdotas e historias
lingüístico al percibir “(...) el eco misterioso y sa- que crean personajes inexistentes son esa fuer-
grado del alma de las piedras, el simbolismo se- za emotiva que proporciona esas relaciones sim-
creto de los ríos; la prosa castellana y la voz poé- bólicas con los otros, la palabra representa algo
tica (…)” más allá que los fenómenos sociales, que hacen
parte de su vida diaria, dicho en otros términos,
“[…] una ensoñación que introduce los valo- los denominados arquetipos universales.
res humanos en el alma de un soñador, una
comunión soñada de animus y de anima, prin- A propósito de ello Jung denominó los ar-
cipios del ser integral” (Bachelard1993, p.143). quetipos como

La contemplación de cada manifestación ex- “[…] el inconsciente colectivo, es decir, esa


presada por el niño y la niña crea el plano de la parte de la psique que conserva y transmite
ensoñación. Los símbolos que nos presentan la común herencia psicológica de la huma-
sus eventos poseen una “signicancia psíquica”, nidad” (Jung, 1997, p.18).
denominada así en los términos de Jung, lo que
nuestra cultura denominaría como abstractos. Esos símbolos son tan antiguos que a veces
Esos símbolos y la narración de los mismos son se torna difícil asimilarlos por otras culturas,
los que permiten encontrar esa armonía de con- pero la ensoñación es un buen camino para
trarios, su uso logra comprender algunas de las disfrutarlos, degustarlos y palparlos. La teoría
cosas que suceden al interior de las mismas, junguiana nos ayuda a establecer que gran
parte de la actividad humana está determina-
“Así es que una palabra o una imagen es da por imágenes innatas, es decir, esos arque-
simbólica cuando representa algo más que tipos que nos invitan a hacer una lectura de
su signicado inmediato y obvio” (Jung, las diferentes manifestaciones que el niño y la
1997, p.18). niña tienen a temprana edad.
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Gracias a la conanza de los impulsos que niña materializan la vida misma, sus líqui-
han generado las percepciones en nuestras dos permean sus universos simbólicos. Es
ensoñaciones todo lo que expresa el niño y decir, la manifestación más sublime e ideal
la niña lo podemos catalogar como poéticas. de la vida, en la cual se refleja sencillez, be-
Esas ensoñaciones innatas, esas encantadoras lleza, humildad, aroma y personificación de
imágenes simbólicas que encierran la tradi- seres que se dan vida por medio de la en-
ción oral de una comunidad logran que sea- soñación.
mos unos lectores y constructores con alta
sensibilidad, ese sentimiento que derrama co- De esta forma, entendemos entonces que
lores, ritmos, sueños. Bachelard solicita en el la escuela debe trascender en los muros del
lector este tipo de virtud: conocimiento y educar seres más sensibles
con las palabras. Nuestras prácticas pueden
“Un lector bien sensibilizado deberá tomar evocar la ensoñación con cada uno de nues-
entonces todas las imágenes en su virtud tros actos. Permitir que no sólo con los di-
inicial, en la solicitación de un movimiento ferentes tonos de voz llevemos a los niños
ascensional, como una invitación constante y niñas a esa ensoñación, por el contrario,
a un porvenir aéreo” (Bachelard, 1998, p.131). lograr que ellos construyan de forma libre y
autónoma canciones, imágenes y elementos
Una dinámica que le permitirá ascender en inexistentes que en la categoría poética co-
los caminos del sueño de la palabra y por ello bran gran valor y poder de transformación.
al leer cada manifestación oral en los niños y
niñas se piensa en esas imágenes desde su vir-
tud inicial para lograr percibir ese movimiento Resultados
aéreo de la ensoñación. Con este planteamiento se puedan con-
jugar muchas prácticas más, por ejemplo La
El ser poético encontrado en la manifesta- Piel del Alma de Francisco Cajiao Restrepo,
ción de cada palabra utilizada por el niño o la quien afirma que
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“[…] la educación de los sentidos es el desa- dio de rostros, imágenes y nalmente escrita.
rrollo de la sensibilidad y ella es la fuente de Lo que trasmiten se hace con símbolos que
la producción de conocimiento, de modula- adquieren signicados para un contexto de-
ción del afecto. Es a través de esta educación terminado, el de los imaginarios de los niños y
como se alimenta el alma humana para res- niñas como actores importantes en la creación
catar su equilibrio con el entorno (…). ” (Ca- de una nueva concepción de vida.
jiao, 1996, p.108).

Así no sólo ver la propuesta como una inter- Conclusiones


vención pedagógica desde la ensoñación para Para concluir, es necesario mencionar que
la infancia, sino la posibilidad de integrarla a las no cabe duda de la pertinencia de conocer
diversas prácticas de construcción de conoci- otros referentes teóricos relacionados con el
miento que se incorporan en las aulas. lenguaje, es decir, no sólo la concepción didác-
tica de la lengua como tal, sino al contrario, el
Igualmente, la ensoñación puede ser per- poder de la palabra poética y de sus posibles
cibida en las escuelas para que esos universos aplicaciones en el aula ayudan a congurar la
simbólicos que los niños y niñas tejen a diario escuela como generadora de nuevos signica-
se conguren en la imaginación, en la libertad, dos. También, es importante formar desde el
en la construcción de parámetros sociales y quehacer pedagógico intervenciones didácti-
políticos, en el respeto por los otros, por la di- cas donde se aprecie el lenguaje oral como ve-
ferencia y el deseo de compartir por medio de hículo de emociones, motivos y temas propios
palabras, palabras dulces que acompañen la de un contexto social y cultural al que pertene-
infancia, palabras mágicas que conguren sus cen nuestros niños y niñas.
presentes, palabras audaces que creen formas
de vida y convivencias con ellos y su medio am- Sin duda alguna, el rol como docentes debe
biente. trascender el concepto que actualmente se le
da a la Educación. Para el caso, enamorar con
Finalmente, con esta reexión se invita en- el Lenguaje. Permitirse jugar con los roles para
tonces para que desde la escuela se conguren palpar la conguración de ese mundo que se
nuevos espacios para que la palabras de cada presenta ante nuestros ojos; enredaderas de
niño y niña tengan el verdadero valor poético palabras que se tejen poco a poco en el mun-
que merecen. Además de ello, que se explore do infantil. Ese que muestra cómo el niño-niña,
el ser desde sus manifestaciones más sublimes, se conjugan en la metamorfosis de la vida; la
en reconocer en cada palabra un nacimiento palabra hecha vida, la palabra hecha cuerpo, la
simbólico, al pensar en el lenguaje, como ese expresión vuelta poesía.
vehículo de imágenes y amalgamas que el ser
humano ha creado gracias a la palabra viva, es
decir, las maravillosas imágenes, arquetipos y BIBLIOGRAFÍA
símbolos que cada comunidad recrea y comu- Álvarez, T. (2005). Didácticas del texto en la formación del
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tá, MEN.

Cómo citar este artículo:


Cuartas, D. L. Una Propuesta Pedagógica de ensoñación para la Infancia. Espiral, Revista de Docencia e
Investigación. 2, (1), 53 - 62

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