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GUÍA PARA REALIZAR LA ACTIVIDAD

Consulte en un Diccionario de Especialidades Farmacéuticas (vademécum) y/o en una


Farmacología los siguientes medicamentos de uso frecuente:

Ranitidina Amoxicilina

Diclofenaco Ibuprofeno

Decadron Garamicina

Buscapina Novalgina

Si considera que por su conocimiento o experiencia hay otros medicamentos que sería importante
tener en cuenta, agréguelos.

Una vez encontrados, céntrese particularmente en los efectos secundarios, contraindicaciones e


interacciones con otros medicamentos y realice un cuadro comparativo que le permita analizar y
deducir que recomendaciones daría a un usuario, cuando adquiere estos medicamentos o los va a
utilizar sin fórmula médica.

Posteriormente y con base en ese análisis, elabore un documento bien estructurado (problema,
objetivos, justificación, recomendaciones, conclusiones) donde usted haga énfasis en las
desventajas de la automedicación y envíelo a su tutor (mínimo 3 y máximo 5 páginas).

Ranirtidina

Mecanismo de acción
Antagoniza los receptores H2 de la histamina de las células parietales del estómago. Inhibe la secreción estimulada y
basal de ác. gástrico y reduce la producción de pepsina.

Indicaciones terapéuticas y Posología


Ads.:
- Úlcera duodenal: oral, 150 mg 2 veces/día o 300 mg por la noche, 4-6 sem. Mantenimiento para profilaxis de
recidivas: oral, 150 mg por la noche.
- Ulcera gástrica activa benigna: oral, 150 mg 2 veces/día o 300 mg/24 h por la noche, 6 sem.
- Reflujo gastroesofágico, oral: 150 mg 2 veces/día o 300 mg por la noche, 6-12 sem. Casos graves: 150 mg 4
veces/día hasta 12 sem. Síntomas asociados: 150 mg 2 veces/día, 2-4 sem.
- S. Zollinger-Ellison: oral, 150 mg 3-4 veces/día, se puede aumentar a 300 mg 4 veces/día; máx. 6 g/día.
- Prevención del S. de Mendelson: oral, 150 mg 2 h antes de anestesia general, y preferiblemente otros 150 mg la
tarde anterior. Alternativa IM o IV lenta (mín. 2 min): 50 mg 45-60 min antes de la anestesia. Pacientes obstétricas:
oral, 150 mg al comienzo del parto, siguiendo con 150 mg/6 h.
- Tto. de hemorragia esofágica y gástrica con hipersecreción y profilaxis de la hemorragia recurrente en pacientes
con úlcera sangrante. Profilaxis de la hemorragia gastrointestinal debida a úlcera de estrés en enfermos graves: 50
mg IV lenta seguida de infus. IV continua de 0,125 ó 0,250 mg/kg/h (la infus. IV de ranitidina se administra a razón
de 25 mg/h durante 2 h que puede repetirse cada 6-8 h). Alternativa: 50 mg/6-8 h IM.
- Hiperacidez gástrica: > 16 años, oral: 75 mg cuando aparezcan los síntomas; máx.: 150 mg/día; máx.: 1 sem.
Niños:
- De 3-18 años con p.c. > 30 kg, oral: tto. agudo de úlcera péptica, 4-8 mg/kg/día en 2 dosis, 4-8 sem; máx. 300
mg/día. Reflujo gastroesofágico: 5-10 mg/kg/día en 2 dosis; máx. 600 mg/día.
- De 6 meses-11 años, tto. agudo de úlcera péptica y reflujo gastroesofágico, IV lenta (mín. 2 min), máx. 50 mg/6-8
h.
I.R.: reducir posología al 75% si Clcr = 10-50 ml/min; al 50% si Clcr < 10 ml/min.

Contraindicaciones
Hipersensibilidad. Porfiria aguda.

Advertencias y precauciones
Niños, evaluar conveniencia, recién nacidos seguridad y eficacia no establecidas. I.R. moderada/grave, ajustar dosis.
Descartar lesiones malignas. Evitar con antecedente de porfiria aguda por riesgo de aparición. En ancianos, con enf.
pulmonar crónica, diabetes o inmunocomprometidos puede aumentar el riesgo de desarrollar neumonía adquirida en
la comunidad. Vigilar asociado con AINE en especial en ancianos y en sujetos con antecedente de úlcera péptica. En
pacientes en estado crítico, comparado con sucralfato, aumenta complicaciones infecciosas por infección
generalizada. IV: no exceder velocidad de administración por riesgo de alteración del ritmo cardiaco; más de 5 días
puede aumentar enzimas hepáticos.

Insuficiencia hepática
Precaución. Administración IV durante más de 5 días puede aumentar los enzimas hepáticos.

Insuficiencia renal
Precaución con I.R. moderada/grave, reducir dosis.

Interacciones
Disminuye absorción de: ketoconazol (administrar ranitidina mín. 2 h antes), atazanavir, delavirdina, gefitinib.
Aumenta absorción de: triazolam, midazolam, glipizida.
Absorción disminuida por: antiácidos altamente neutralizantes administrados en ayunas, como hidróxidos de Al o Mg,
espaciar 1 h; sucralfato a dosis altas (administrar 2 h después de ranitidina).
Modifica tiempo de protrombina con: anticoagulantes cumarínicos (warfarina), monitorizar.
A dosis elevadas reduce excreción de: procainamida, N-acetilprocainamida.
Lab: interfiere con prueba de secreción ácida gástrica y con pruebas cutáneas con extractos de alérgenos, no tomar
24 h antes.
Falso + de prueba de proteínas en orina con Multistix (realizar con ác. sulfosalicílico).

Embarazo
Atraviesa barrera placentaria. Estudios de teratogénesis experimentales no permiten sospechar malformaciones en
humanos, usar sólo si se considera esencial. Evitar en 1 ertrimestre.

Lactancia
La ranitidina pasa a la leche materna. Se recomienda evitar la administración durante el periodo de lactancia, a
menos que, a juicio del médico, se estime imprescindible. No puede excluirse una posible inhibición de la secreción
gástrica en el neonato.

Efectos sobre la capacidad de conducir


Aunque no son de esperar efectos en este sentido, si se producen mareos, no se debe conducir ni utilizar maquinaria
peligrosa.

Reacciones adversas
Aumenta complicaciones infecciosas por infección generalizada en pacientes en estado crítico (comparado con
sucralfato). Poco frecuentes: dolor abdominal, diarrea, estreñimiento, náuseas, vómitos, calambres abdominales.

Amoxicilina
actericida. Bloquea síntesis de pared celular bacteriana e inhibe ß-lactamasas. Amplio espectro.

Mecanismo de acción
Asociación de penicilina semisintética (bactericida, amplio espectro) y de molécula inhibidora de ß- lactamasas,
transforma en sensibles a amoxicilina a gérmenes productores de ß- lactamasas.

Indicaciones terapéuticas
En ads. y niños, tto. a corto plazo de infección bacteriana por cepas resistentes a amoxicilina productoras de ß-
lactamasas: sinusitis bacteriana aguda, otitis media aguda, amigdalitis, exacerbación aguda de bronquitis crónica,
neumonía adquirida en la comunidad, cistitis, pielonefritis, de piel y tejidos blandos (celulitis, mordeduras de
animales, abscesos dentales severos con celulitis diseminada), de huesos y articulaciones (osteomielitis), aborto
séptico, sepsis pélvica o puerperal, sepsis intra-abdominal. Además por vía IV: tto. de infección grave de oído, nariz y
garganta (mastoiditis, periamigdalina, epiglotitis y sinusitis acompañada por síntomas sistémicos graves), genital
femenina, intra-abdominal, peritonitis, septicemia, y profilaxis en ads. de infección asociada a cirugía mayor (del
tracto gastrointestinal, cavidad pélvica, cabeza y cuello, del tracto biliar, cardiaca, renal, prótesis articulares). Comp.
de liberación prolongada (1.000/62,5 mg): neumonía adquirida en la comunidad en ads. y adolescentes ≥ 16 años o
que se sospeche causada por S. pneumoniae resistente a penicilina.

Posología
Amoxicilina/ác. clavulánico:
- Oral. Ads. y niños > 12 años con p.c. ≥ 40 kg: 500/125 mg 3 veces/día, 875/125 mg 2-3 veces día o 1.000/125 mg
2-3 veces/día. Niños p.c. < 40 kg: 20/5 mg/kg/día-60/15 mg/kg/día; o bien, susp. 100/12,5 mg/ml para niños con
p.c. < 40 kg: 40/5 mg/kg/día-80/10 mg/kg/día dividido en 3 dosis, máx./día 3.000/375 mg. Comp. liberación
prolongada, ads. y adolescentes ≥ 16 años: 2.000/125 mg 2 veces/día 7-10 días.
- IV. Iny. lenta 3-4 min o perfus. 30-40 min (2g/200 mg solo por perfus.). Ads., habitual: 1 g amoxicilina 2-4
veces/día; septicemia o infección grave hasta 6 g amoxicilina/día (1 g/200 mg), máx. 12 g/día (2 g/200 mg); ác.
clavulánico, máx./iny: 200 mg y máx./día: 1.200 mg; profilaxis quirúrgica: cirugía < 1 h, 1 g amoxicilina en inducción
de anestesia, cirugía > 1 h hasta 4 g en 24 h (si hay alto riesgo de infección puede continuarse varios días como tto.
post-quirúrgico vía oral o IV). Niños (500 mg/50 mg), prematuros: 100 mg amoxicilina /kg/día en 2 perfus.; recién
nacidos y lactantes < 3 meses (2,5-5 kg): 100-150 mg amoxicilina/kg/día en 3 perfus.; niños y lactantes ≥ 3 meses
(5-40 kg): 100 mg amoxicilina/kg/día en 4 perfus. o iny. IV muy lenta.
Duración tto. máx. 14 días sin revisión.
I.R. Oral. Ads. y niños ≥ 40 kg, Clcr 30-10 ml/min: 500/125 mg 2 veces/día; Clcr < 10: 500/125 mg 1 vez/día. Niños
< 40 kg, Clcr 30-10 ml/min: 15/3,75 mg/kg 2 veces/día (máx. 500/125 mg 2 veces/día); Clcr < 10: dosis única
15/3,75 mg/kg (máx. 500/125 mg). Hemodiálisis, ads.: 500/125 mg/24 h; niños 15/3,75 mg/kg/24 h; además deben
recibir una dosis adicional durante y otra final de la diálisis.
I.R. IV. Ads., Clcr 10-30 ml/min: inicial 1 g amoxicilina y después 500 mg amoxicilina/12 h; Clcr < 10: inicial 1 g
amoxicilina y después 250 mg amoxicilina/12 h. Niños, Clcr 10-30: 25/5 mg/kg/12 h; Clcr < 10: 25/5 mg/kg/24 h.
Hemodiálisis, ads.: inicial 1 g amoxicilina seguidos de 500 mg amoxicilina/24 h y dosis adicional 500 mg al final de
diálisis; niños: 25/5 mg/kg/24 h y al final de diálisis 12,5/2,5 mg/kg.

Modo de administración:
Debe administrarse al inicio de las comidas.

Contraindicaciones
Antecedente de hipersensibilidad a ß-lactámicos (penicilinas, cefalosporinas, carbapenem, monobactam); antes de
iniciar tto. investigar reacción alérgica previa. Mononucleosis infecciosa y leucemia linfoide (mayor riesgo de
exantema). I.H. grave, antecedente de ictericia o antecedente de I.H. grave con tto. previo.

Advertencias y precauciones
Monitorizar con I.R. (ajustar dosis) y con I.H. (parámetros de función hepática, suspender si empeoramiento). Tto.
prolongado: riesgo de sobreinfección; control hematológico y de funciones renal y hepática; vigilar diuresis y
mantener hidratación para evitar cristaluria (en sondaje uretral control regular por posible obstrucción). Suspender si
aparece: eritema febril generalizado asociado a pústula al iniciar tto. (el uso posterior de amoxicilina estará
contraindicado), reacción alérgica, convulsión, colitis asociada a antibióticos. Pacientes atópicos, alergia grave o asma
(mayor riesgo de reacción alérgica). Controlar tiempo de protrombina e INR asociado con anticoagulantes. Sujetos ≥
60 años. Notificados falsos + en test detección de Aspergillus (Platelia Bio-Rad). Comp. liberación prolongada
(1.000/62,5 mg): no recomendado en pacientes < 16 años.

Insuficiencia hepática
Contraindicado con I.H. grave, antecedente de ictericia o antecedente de I.H. grave con tto. previo. Precaución con
I.H., monitorizar parámetros de función y suspender si empeoramiento.
Insuficiencia renal
Precaución, ajustar dosis y monitorizar. Oral. Ads. y niños ≥ 40 kg, Clcr 30-10 ml/min: 500/125 mg 2 veces/día; Clcr
< 10: 500/125 mg 1 vez/día. Niños < 40 kg, Clcr 30-10 ml/min: 15/3,75 mg/kg 2 veces/día (máx. 500/125 mg 2
veces/día); Clcr < 10: dosis única 15/3,75 mg/kg (máx. 500/125 mg). Hemodiálisis, ads.: 500/125 mg/24 h; niños
15/3,75 mg/kg/24 h; además deben recibir una dosis adicional durante y otra final de la diálisis.
IV. Ads., Clcr 10-30 ml/min: inicial 1 g amoxicilina y después 500 mg amoxicilina/12 h; Clcr < 10: inicial 1 g
amoxicilina y después 250 mg amoxicilina/12 h. Niños, Clcr 10-30: 25/5 mg/kg/12 h; Clcr < 10: 25/5 mg/kg/24 h.
Hemodiálisis, ads.: inicial 1 g amoxicilina seguidos de 500 mg amoxicilina/24 h y dosis adicional 500 mg al final de
diálisis; niños: 25/5 mg/kg/24 h y al final de diálisis 12,5/2,5 mg/kg.

Interacciones
Véase Advertencias y precauciones Además:
No administrar con: probenecid, antibióticos bacteriostáticos, disulfiram.
Aumenta probabilidad de reacción alérgica cutánea con: alopurinol.
Puede reducir eficacia de: anticonceptivos orales.
Reduce excreción de: metotrexato, monitorizar nivel sérico por riesgo de toxicidad.
Puede aumentar absorción de: digoxina.
Lab: disminuye resultado de nivel de glucemia, interfiere en determinación de proteínas totales séricas por reacción
de coloración. Falso +: glucosuria por método no enzimático y en test de Coombs.

Embarazo
Precaución, puede asociarse con riesgo de enterocolitis necrotizante en neonatos. Evaluar beneficio/riesgo.

Lactancia
Ambas sustancias se excretan a través de la leche materna (se desconoce el efecto de ácido clavulánico en el
lactante). Por lo que, puede darse diarrea e infección fúngica en las membranas mucosas del niño lactante,
debiéndose interrumpir la lactancia. Debe tenerse en cuenta la posibilidad de sensibilización. Amoxicilina/ácido
clavulánico sólo debe administrarse durante la lactancia una vez que el médico evalúe el balance beneficio/riesgo.

Reacciones adversas
Náuseas, vómitos, diarrea, candidiasis mucocutánea.

Diclofenaco

Mecanismo de acción
Inhibe la biosíntesis de prostaglandinas.

Indicaciones terapéuticas y Posología


- Artritis reumatoide, espondilolartritis anquilopoyética, artrosis, espondiloartritis, reumatismo extraarticular, tto.
sintomático del ataque agudo de gota, de inflamaciones y tumefacciones postraumáticas: oral: 50 mg/8-12 h antes
de las comidas; máx. 150 mg/día. Retard: 75-150 mg/día. Rectal: 100 mg/día, al acostarse. IM: 75 mg/día
(excepcionalmente 75 mg/12 h el 1 erdía en casos graves).
Niños de 1-12 años: 0,5-3 mg/kg/día.
- Tto. sintomático del dolor asociado a cólico renal, dolor musculoesquelético: rectal: 100 mg/día. IM: 75 mg/día.
- Tto. sintomático del dolor agudo intenso asociado a dolor lumbar, dolores postoperatorios y postraumáticos: IM: 75
mg/día.
- Tto. sintomático de dolores leves a moderados (dolor de cabeza, dentales, menstruales, musculares o de espalda).
Alivio de los síntomas del resfriado y la gripe, incluyendo estados dolorosos como dolor muscular y de garganta.
Estados febriles: oral. Ads. y niños > 14 años: 25 mg seguido de 12,5 ó 25 mg/4-6 h; máx.: 75 mg/día. Duración del
tto. para el alivio del dolor: 5 días y para estados febriles: 3 días.
Rectal: si es necesario dosis más altas, complementar con 50 mg vía oral.
IM: máx. 2 días, continuar tto. con vía oral o rectal.
- Dismenorrea 1 aria : oral y rectal: inicial: 50-100 mg/día, ajustar individualmente hasta 200 mg/día.

Modo de administración:
Vía oral. Administrar preferentemente antes de las comidas. Ingerir enteros con algo de líquido, sin masticar.

Contraindicaciones
Hipersensibilidad; administración de AAS u otros AINE haya desencadenado ataques de asma, urticaria o rinitis
aguda; enf. de Crohn activa; colitis ulcerosa activa; disfunción renal severa; alteración hepática severa; desórdenes
de la coagulación; antecedentes de hemorragia gastrointestinal o perforación relacionados con ttos. anteriores con
AINE; úlcera péptica/hemorragia gastrointestinal activa o recidivante (2 o más episodios diferentes de ulceración o
hemorragia comprobados); insuf. cardíaca grave; tercer trimestre de la gestación; antecedentes de asma bronquial
(IM); proctitis (rectal).

Advertencias y precauciones
I.R., I.H., ancianos, porfiria, antecedentes de colitis ulcerosa o enf. de Crohn, antecedentes de HTA y/o insuf.
cardiaca, uso concomitante de corticoides orales y antidepresivos ISRS. En pacientes con asma, rinitis alérgica
estacional, inflamación de la mucosa nasal (pólipos nasales), enf. pulmonar obstructiva crónica o infecciones crónicas
del tracto respiratorio (rinitis alérgica) son más frecuentes exacerbaciones de asma, edema de Quincke o urticaria.
Riesgo de hemorragia gastrointestinal, úlcera o perforación es > a dosis crecientes de AINE. Riesgos cardiovasculares
o cerebrovasculares en pacientes que presenten HTA, ICC, enf. coronaria establecida, arteriopatía periférica y/o enf.
cerebrovascular no controladas sólo deberían recibir tto. valorando relación beneficio-riesgo. Antes de iniciar un tto.
de larga duración valorar los factores de riesgo cardiovascular conocidos (HTA, hiperlipidemia, diabetes mellitus,
fumadores). En tto. prolongado riesgo de acontecimientos aterotrombóticos (IAM o ictus). Pueden aparecer
reacciones alérgicas. Puede enmascarar signos y síntomas de una infección. Puede alterar la fertilidad femenina.
Evitar uso concomitante con otros AINE incluyendo inhibidores selectivos de la ciclooxigenasa.-2. Control hepático,
renal y recuentos hemáticos. No recomendado en < 14 años.

Insuficiencia hepática
Contraindicado en I.H. severa. Precaución en I.H., puede producir elevaciones de enzimas hepáticos; tto. prolongado
controlar la función hepática.

Insuficiencia renal
Contraindicado en I.R. severa. Precaución en I.R., control de la función renal.

Interacciones
Véase Advertencias y precauciones Además: 
Aumenta concentración plasmática de: litio y digoxina.
Aumenta acción y toxicidad de: metotrexato.
Aumenta nefrotoxicidad de: ciclosporina. 
Disminuye acción de: diuréticos.
Disminuye eficacia de: isradipino, verapamilo.
Eficacia reducida por: colestiramina, colestipol.
Estrecha vigilancia con: anticoagulantes.
Aumenta frecuencia de aparición de efectos adversos con AINE por vía sistémica.
Potencia toxicidad de: misoprostol y corticoides.
Concentración plasmáticas aumentada por: inhibidores potentes de CYP2C9 (sulfinpirazona y voriconazol).
Aumenta exposición de: fenitoína (monitorizar niveles plasmáticos).

Embarazo
Cat. B (D).Precaución en el último trimestre de embarazo, debido a una posible adinamia uterina y/o cierre
prematuro del ductus arteriosus.

Lactancia
Diclofenaco pasa a la leche materna, en pequeñas cantidades. Por tanto no deberá administrarse durante la lactancia
para evitar efectos indeseados en el lactante.

Efectos sobre la capacidad de conducir


Los pacientes que experimenten trastornos visuales, mareos, vértigo, somnolencia u otros trastornos del sistema
nervioso central, mientras estén en tratamiento deberán evitar conducir vehículos o manejar maquinaria.

Reacciones adversas
Cefalea, mareo; vértigo; náuseas, vómitos, diarreas, dispepsia, dolor abdominal, flatulencia, anorexia; erupción;
irritación en el lugar de aplicación (rectal); reacción, dolor y induración en el lugar de iny. (IM). Lab: aumento de
transaminasas séricas.
Ibuprofeno

SCRIPCION

El ibuprofeno es un derivado del ácido


propiónico que posee propiedades
analgésicas, antiinflamatorias y
antipiréticas. El efecto terapéutico, como
antiinflamatorio no esteroideo que es,
deriva de su actividad inhibitoria de la
prostaglandín sintetasa.

Mecanismo de acción: como todos los


antiinflamatorios no esteroidicos de la
familia de los ácidos aril-propionicos, el
ibuprofen inhibe la acción de las enzimas
COX-1 y COX-2. Los efectos anti-
inflamatorios del ibuprofeno son el
resultado de la inhibición periférica de la
síntesis de prostaglandinas subsiguiente
a la inhibición de la ciclooxigenasa. El
ibuprofen inhibe la migración leucocitaria
a las áreas inflamadas, impidiendo la
liberación por los leucocitos de
citoquinas y otras moléculas que actúan
sobre los receptores nociceptivos. El
ibuprofeno, como otros AINEs, no altera
el umbral del dolor ni modifica los
niveles de prostaglandinas cerebrales,
concluyéndose que sus efectos son
periféricos. La antipiresis es
consecuencia de la vasodilatación
periférica debido a una acción central
sobre el centro regulador de la
temperatura del hipotálamo.

Farmacocinética: El ibuprofeno se
absorbe rápidamente en el tracto
gastrointestinal, presentándose picos de
concentraciones plasmáticas 1-2 horas
después de la administración. Su vida
media de eliminación es de unas 2 horas  
aproximadamente. El ibuprofeno se une
fuertemente a las proteínas plasmáticas.
El ibuprofeno se metaboliza en el hígado,
dando lugar a 2 metabolitos inactivos
que, junto con el ibuprofeno, se excretan
por vía renal bien como tales o como
metabolitos conjugados. La excreción
renal es rápida y completa. La
farmacocinética de los gránulos de
ibuprofeno es comparable a la de los
comprimidos, por lo que no debe haber
diferencias en la pauta de utilización
clínica de ambas presentaciones.

Toxicidad: en los estudios de toxicidad


los efectos tóxicos observados coinciden
con los de otros antiinflamatorios no
esteroideos. El ibuprofeno no resultó
teratogénico en diferentes especies
animales. Asimismo, tanto los estudios
de mutagénesis como los de
cancerogénesis dieron resultados
negativos.

INDICACIONES Y POSOLOGIA

Tratamiento de artritis
reumatoide (incluyendo artritis
reumatoide juvenil), espondilitis
anquilopoyética, artrosis y otros
procesos reumáticos agudos o crónicos.
Tratamiento de lesiones de tejidos
blandos como torceduras o esguinces.
Tratamiento de procesos dolorosos de
intensidad leve y moderada como el
dolor dental, el dolor postoperatorio y
tratamiento sintomático de la cefalea.
Alivio de sintomatología en dismenorrea
primaria. Tratamiento sintomático de la
fiebre en cuadros febriles de etiología
diversa.

La posología deberá ajustarse a la


intensidad del cuadro a tratar,
empleando la mínima dosis que
produzca remisión de la sintomatología.

Administración oral:

 Adultos: Uso como


antiinflamatorio: la dosis
recomendada es de 1.200-
1.800 mg/día administrados en
varias dosis. Algunos pacientes
pueden ser mantenidos con
800-1.200 mg. La dosis total
diaria no debería exceder de
2.400 mg. Uso como
analgésico y antipirético: la
dosis recomendada es de 400-
600 mg cada 4-6 horas
dependiendo de la intensidad
del cuadro y de la respuesta al
tratamiento. Uso como
antidismenorreico: el
tratamiento debe comenzar al
iniciarse el dolor. La dosis usual
es de 400-600 mg, cada 4-6
horas, dependiendo de la
intensidad de los síntomas.
 Niños. El uso de ibuprofen no
es adecuado en niños menores
de 12 años. Ancianos. No se
requieren modificaciones
especiales en la posología. En
caso de insuficiencia renal se
recomienda individualizar la
dosis (ver Advertencias y
precauciones especiales de
empleo).

CONTRAINDICACIONES
Pacientes con úlcera péptica activa.
Pacientes que hayan presentado
reacciones de hipersensibilidad (asma,
rinitis o urticaria) con el ibuprofeno, el
ácido acetilsalicílico u otros
antiinflamatorios no esteroideos.

El ibuprofen debe administrarse con


precaución en los siguientes casos:
Pacientes que padezcan o tengan
antecedentes de asma bronquial, ya que
se ha notificado que el ibuprofeno puede
provocar broncospasmo en estos
pacientes. Pacientes con antecedentes
de enfermedad gastrointestinal.
Pacientes con alteraciones renales,
hepáticas o cardiacas, ya que el uso de
antiinflamatorios no esteroideos puede
producir deterioro de la función renal. En
este tipo de pacientes debe utilizarse la
dosis más baja y monitorizarse la
función renal. Pacientes con
antecedentes de insuficiencia cardiaca o
hipertensión ya que se ha notificado
asociación entre edema y administración
de ibuprofeno.

 
  PRESENTACION

 ALGIASDIN Comp. recub. 400 mg


 ALGIASDIN Comp. recub. 600 mg
 ALGIASDIN Comp. retard 600 mg
 DALSY Jar. 100 mg/5 ml
 ESPIDIFEN Sobres 400 mg
 ESPIDIFEN Sobres 600 mg
 NEOBRUFEN Comp. 600 mg
 NEOBRUFEN Grag. 400 mg
 NEOBRUFEN Polvo eferv. 600 mg
 NEOBRUFEN Sup. 500 mg
 SAETIL Sobres 400 mg
 SAETIL Sobres 600

REFERENCIAS

 Medimecum: Medimecum 2005: Guía de terapia farmacológica. 2005. Adis 1048 paginas

 Davies NM. Clinical pharmacokinetics of ibuprofen. The first 30 years. Clin Pharmacokinet 1998


Feb 34:2 101-54
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dosages. J Pharm Pharmacol 1997 Apr 49:4 345-76
 Petersen KL, Brennum J, Dahl JB. Experimental evaluation of the analgesic effect of ibuprofen on
primary and secondary hyperalgesia. Pain 1997 Apr 70:2-3 167-74
 Evans AM . Pharmacodynamics and pharmacokinetics of the profens: enantioselectivity, clinical
implications, and special reference to S(+)-ibuprofen. J Clin Pharmacol 1996 Dec 36:12 Suppl 7S-1
 Moore N, Noblet C, Breemeersch C. Focus on the safety of ibuprofen at the analgesic-antipyretic
dose. Therapie 1996 Jul-Aug 51:4 458-63
 Halpern SM, Fitzpatrick R, Volans GN. Ibuprofen toxicity. A review of adverse reactions and overdos
  Adverse Drug React Toxicol Rev 1993 Summer 12:2 107-28
 Aycock DG. Ibuprofen: a monograph. Am Pharm 1991 Jan NS31:1 46-9
 Busson M J . Update on ibuprofen: review article. Int Med Res 1986 14:2 53-62
 Ward JR . Update on ibuprofen for rheumatoid arthritis. Am J Med 1984 Jul 13 77:1A 3-9
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 Kantor TG . Ibuprofen.Ann Intern Med 1979 Dec 91:6 877-82
 Huskisson EC, Hart FD, Shenfield GM, Taylor RT. Ibuprofen. A review. Practitioner 1971 Nov 207:2
639-43
 Davies EF, Avery GS. Ibuprofen: a review of its pharmacological properties and therapeutic efficacy
rheumatic disorders. Drugs 1971 2:5 416-46

Decadron

ESCRIPCION  
La dexametasona y sus derivados, dexametasona fosfato
sódico y dexametasona acetato son glucocorticoides sintéticos
utilizados como antiinflammatorios e inmunosupresores. La
dexametasona no tiene prácticamente actividad
mineralcorticoide y por lo tanto no puede ser usada en el
tratamiento de la insuficiencia adrenal. La dexametasona es
considerada el corticoide de elección para tratar el edema
cerebral ya que es el que mejor penetra en el sistema nervioso
central. Como glucocorticoide, la dexametasona es unas 20
veces más potente que la hidrocortisona y 5 a7 veces más
potente que la prednisona. Además es uno de los corticoides de
acción más prolongada.

Mecanismo de acción: los glucocorticoides son hormonas


naturales que previenen o suprimen las respuestas inmunes e
inflamatorias cuando se administran en dosis farmacológicas.
Los glucocorticoides libres cruzan fácilmente las membranas de
las células y se unen a unos receptores citoplasmáticos
específicos, induciendo una serie de respuestas que modifican
la transcripción y, por tanto, la síntesis de proteínas. Estas
respuestas son la inhibición de la infiltración leucocitaria en el
lugar de la inflamación, la interferencia con los mediadores de
la inflamación y la supresión de las respuestas inmunológicas.
La acción antiinflamatoria de los glucocorticoides implica
proteínas inhibidoras de la fosfolipasa A2, las llamadas
lipocortinas. A su vez, las lipocortinas controlan la biosíntesis
de una serie de potentes mediadores de la inflamación como
son las prostaglandinas y los leukotrienos. Algunas de las
respuestas de los glucocorticoides son la reducción del edema
y una supresión general de la respuesta inmunológica. Los
glucocorticoides inhalados disminuyen la síntesis de la IgE,
aumentan el numero de receptores  adrenérgicos en los
leucocitos y disminuyen la síntesis del ácido araquidónico. En
consecuencia, son eficaces en el tratamiento del asma
bronquial crónico y las reacciones alérgicas.

Farmacocinética: la dexametasona se absorbe rápidamente


después de una dosis oral. Las máximas concentraciones
plasmáticas se obtienen al cabo de 1-2 horas. La duración de la
acción de la dexametasona inyectada depende del modo de la
inyección (intravenosa, intramuscular o intraarticular) y de la
irrigación del sitio inyectado. Después de una administración
sobre la piel, el grado de absorción del producto depende de la
integridad de la mismal. Aumenta en las zonas lesionados y es
particularmente intensa en los lugares en los que el estrato
córneo es más delgado. Después de la administración oftálmica
de dexametasona, sólo se produce una mínima absorción
sistémica.

En la circulación sistémica, la dexametasona se une débilmente


a las proteínas plasmáticas, siendo activa la porción no fijada a
las proteínas. El fármaco se distribuye rápidamente en los
riñones, intestinos, hígado, piel y músculos. Los corticoides
cruzan la barrera placentaria y se excretan en la lecha
materna. La dexametasona es metabolizada en el hígado
originando productos inactivos que son eliminados en la orina.
La semivida de eliminación es de 1.8 a 3.5 horas y la semivida
biológica de 36 a 54 horas.

INDICACIONES Y POSOLOGIA

Tratamiento de anomalías de la función


adrenocortical, tales como insuficiencia adrenocortical,
hiperplasia adrenal congénita, enfermedad de Addison o
síndrome adrenogenital:

 Dosis orales (dexametasona):


o Adultos: Inicialmente dosis de 0.75—9
mg/día, divididos en 2-4 dosis. Las dosis de
mantenimiento se deben ajustar en función
de la respuesta del paciente
o Niños: entre 0.03 y 0.3 mg/kg/día (0.6 a 10
 
mg/m2/día) divididos en 2 a 4 dosis. Las
dosis de mantenimiento se deben ajustar en
función de la respuesta del paciente
 Dosis intramusculares o intravenosas (dexametasona
fosfato sódico):
o Adultos: Inicialmente entre 0.5—9 mg/día
i.v. o i.m. en dosis divididas. Las dosis de
mantenimiento se deben ajustar en función
de la respuesta del paciente
o Niños: 0.03—0.3 mg/kg/día (0.6—10
mg/m2/día) i.v. o i.n. en dosis divididas.
Las dosis de mantenimiento se deben
ajustar en función de la respuesta del
paciente

Diagnóstico de la supresión del eje hipotalámico-


pituitario-adrenal (HPA):

Prueba para el diagnóstico del síndrome de Cushing:

 Tratamiento oral (dexametasona):


o Adultos: 0.5 mg p.os cada 6 horas durante
48 horas. Recoger la orina de 24 horas para
la determinación de la excreción de 17-
hydroxycorticosteroides. Alternativamente,
1 mg p.os a las 11:00 p.m., determinación
del cortisol plasmatico el día siguiente a las
8:00 a.m.

Prueba para distinguir el síndrome de Cushing


secundario a un exceso de ACTH pituitario del síndrome
de Cushing debido a otras causas:

 Tratamiento oral (dexametasona):


o Adultos: 2 mg p.os cada 6 horas durante 48
horas. Recoger la orina de 24 horas para la
determinación de la excreción de 17-
hydroxycorticosteroides.

Prueba para confirmar el diagnóstico de una


depresión melancólica:

 Tratamiento oral (dexametasona):


o Adultos: 1 mg p.os a las 11:00 p.m.
Determinación del cortisol plasmático a las
4:00 p.m. y 11:00 p.m. del día siguiente

Tratamiento de condiciones alérgicas:

 Adultos: iniciar el tratamiento con 4 a 8 mg i.m. el


día 1. Después pasar a un tratamiento oral con 3 mg
administrados en 2 dosis divididas los días 2 y 3; las
dosis se deben reducir progresivamente a 1.5 mg el
día 4 en dos dosis divididas y a 0.75 mg los días 5 y 6

Tratamiento de un choque anafiláctico:

 Administración intravenosa (dexametasona fosfato


sódico):
o Adultos: Se han utilizado dosis de 1 a 6
mg/kg i.v. o 40 mg i.v. cada 4-6 horas
mientras que el persiste el choque.
Alternativamente, 20 mg i.v., seguidos de
una infusión i.v. de 3 mg/kg en 24 horas

Tratamiento de rinitis e inflamaciones nasales

 Inhalación nasal:
o Adultos: Inicialmente, 2 pulverizaciones (84
µg/puff) en cada seno nasal 2 o 3 veces al
día. Reducir las dosis y terminar el
tratamiento tan rápidamente como sea
posible. No pasar de 12 puffs/día.
o Niños > 6 años de edad: inicialmente 1 o 2
pulverizaciones (84 µg/puff) en cada seno
nasal dos veces al día, según la edad de
niño.Reducir las dosis y terminar el
tratamiento tan rápidamente como sea
posible. No pasar de 8 puffs/día.

Tratamiento de edema cerebral:

 Administración i.v. o i.m. (en forma de fosfato sódico)


o Adultos: 10 mg i.v. seguidos de 4 mg i.m.
cada 6 horas hasta la remisión de los
síntomas. Se debe observar una respuesta
entre las 12 y 24 horas, siendo posible
reducir entonces las dosis. Para el
manteniento son suficientes 2 mg i.m. dos o
tres veces al día-
o Niños: Inicialmente, 1-2 mg/kg i.v. o i.m.,
luego 1—1.5 mg/kg/día i.v. o i.m. (max: 16
mg/día) divididos en dosis cada 4 a 6 horas,
reduciende seguidamente las dosis. La
dexametasona parenteral se debe sustituir
por dexametasona oral tan pronto sea
posible.

Las dosis de mantenimiento para el tratamiento de


edema cerebral asociado a un tumor cerebral no
operable son:

o Administración oral:
 Adultos: Inicialmente, 2—3 mg 2 o
3 veces al día. La dosis se ajustará
según la respuesta .
  
Niños: Entre 0.03—0.15
mg/kg/día (1—5 mg/m2/día)
divididos en dosis que se
administrarán cada 6 o 12 horas.
La dosis se ajustará según la
respuesta .

Alivio del dolor severo asociado con metástasis


cerebrales, compresión de la médula espinal y dolor
óseo agudo:

 Tratamiento oral o intravenoso:


o Adultos: 12—20 mg/día per os o i.v. se
pueden usar como adyuvantes en el
tratamiento del dolor óseo severo. Para la
compresión de la médula espinal se han
sugeridos dosis de 16—96 mg/día per os o
i.v.

Tratamiento adyuvante de la meningitis bacteriana


pediátrica:

 Administración intravenosa (dexametasona fosfato


sódico:
o Niños y bebés de > 2 meses: 0.15 mg/kg
i.v. 4 veces al día durante 2 días con el
tratamiento antibiótico. También es
aceptable unas dosis de 0.4 mg/kg i.v. dos
veces al día. La primera dosis de
dexametasona debe ser administrada
inmediatamente después de la primera
dosis de antibiótico [2]

En los transplantes de riñón:

 Administración intramuscular, intravenosa o infusión


i.v. (dexametasona fosfato sódico):
o Adultos: Inicialmente entre 0.5—9 mg i.v. o
i.m en 24 horas. La dosis de mantenimiento
se ajustará según la respuesta
o Niños: 0.06—0.3 mg/kg/día (1.2—10
mg/m2/día) i.m. o i.v. en dosis divididas a
administrar cada 6 o 12 horas

Tratamiento de la otitis externa:

 Tratamiento tópico (usando solución de


dexametasona fosfato sódico o unguento de
dexametasona)
o Adultos y niños: Instilar 3 o 4 gotas
(solución) en el canal auditivo 2—3
veces/día; alternativamente, aplicar
unguento 3—4 veces/día

Tratamiento de la naúsea y vómitos asociados a la


quimioterapia antitumoral:

 Administración intravenosa (dexametasona fosfato


sódico):
o Adultos: 10 a 20 mg i.v. antes de la
administación de la quimioterapia. Si fueran
necesarias, se administrarán dosis más
bajas adicionales durante 24 a 72 hours.
o Niños: Inicialmente, 10 mg/m2 i.v.
(máximo: 20 mg), después 5 mg/m2 cada 6
horas.
 Administración oral:
o Adultos: En un estudio comparativo frente a
granisetron, la dexametasona se administró
de la forma siguiente: una dosis inicial de 8
mg i.v. en 15 minutos inmediatamente
antes de la quimioterapia, seguida de 4 mg
orales cada 6 horas después hasta un total
de 4 dosis.[3]

Tratamiento adjuvante de la tuberculosis:

 Administración oral (dexametasona):


o Adultos: Inicialmente, 0.75—9 mg al día
administrados en 2 a 4 dosis divididas. Las
dosis de mantenimiento se debrán ajustar
en función de la respuesta del paciente. La
dexametasona se usa durante períodos que
pueden llegar al mes en el tratamiento de la
meningitis tuberculosa.
o Niños: 0.024—0.34 mg/kg/día o 0.66—10
mg/m2/día divididos en 2 a 4
administraciones
 Administración parenteral (dexametasona fosfato
sódico):
o Adultos: Inicialmente, 0.5—9 mg i.v. o i.m.
al día en 2 a 4 administraciones. Las dosis
de mantenimiento se debrán ajustar en
función de la respuesta del paciente.
o Niños: 0.06—0.3 mg/kg o 1.2—10 mg/m2
i.m. o i.v. al día en dosis divididas cada 6 o
12 horas.

Tratamiento de dermatosis moderadas:

 Administración tópica (crema de dexametasona):


o Adultos y niños: Aplicar una capa fina de
crema 3 o 4 veces al día. Si se administra
en aerosol, aplicar el mismo sobre el área
afectada 3 o 4 veces al día. Reducir las
dosis gradualmente y discontinuar el
tratamiento en cuanto sea posible
 Administración intralesional (dexametasona fosfato
sódico):
o Adultos: 0.2—6 mg en el sitio adecuado,
dependiendo del grado de inflamación y
localización de la zona afectada. Repetir el
tratamiento cada 2 o 3 días

Tratamiento de dermatosis severa (dermatitis


exfoliativa, psoriasis, eritema multiforme, síndrome de
Stevens-Johnson):

 Administración oral (dexametasona):


o Adultos: Inicialmente, 0.75—9 mg al día
divididos en 2 a 4 administraciones. Las
dosis de mantenimiento se debrán ajustar
en función de la respuesta del paciente.
o Niños : 0.024—0.34 mg/kg/día o 0.66—10
mg/m2/día, divididos en 2—4 dosis.
 Administración intramuscular, intravenosa o infusión
intravenosa (dexametasona fosfato sódico)
o Adultos: Inicialmente, 0.5—9 mg i.v. o i.m
al día en 2-4 administraciones. Las dosis de
mantenimiento se debrán ajustar en función
de la respuesta del paciente.
o Niños: 0.06—0.3 mg/kg/día o 1.2—10
mg/m2/day i.m o i.v. , divididos en 2-4
dosis a intervalos de 6 a 12 horas.

Tratamiento de desórdenes reumáticos: (espondilitis


anquilosante, artritis reumatoide juvenil, osteoartritis, artritis
reumática, etc. )

 Administración oral (dexametasona):


o Adultos: Inicialmente, 0.75—9 mg al día
divididos en 2 a 4 administraciones. Las
dosis de mantenimiento se debrán ajustar
en función de la respuesta del paciente.
o Niños : 0.024—0.34 mg/kg/día o 0.66—10
mg/m2/día, divididos en 2—4 dosis.
 Administración intramuscular, intravenosa o infusión
intravenosa (dexametasona fosfato sódico)
o Adultos: Inicialmente, 0.5—9 mg i.v. o i.m
al día en 2-4 administraciones. Las dosis de
mantenimiento se debrán ajustar en función
de la respuesta del paciente.
o Niños: 0.06—0.3 mg/kg/día o 1.2—10
mg/m2/day i.m o i.v. , divididos en 2-4
dosis a intervalos de 6 a 12 horas.
 Administración intra-articular, intrasinovial o
intralesional (dexametasona fosfato sódico):
o Adultos: 0.2—6 mg en el lugar adecuado.
Las dosis dependerán del grado de
inflamación, tamaño y localización de la
zona afectada. El tratamiento se puede
repetir cada 3 a 5 días

Tratamiento de desórdenes
hematológicos: (trombocitopenia, anemia hemolitica
autoinmune, eritroblastopenia, a trombocitopenia asociada a
púrpura idiopática trombocitopénica)

 Administración oral (dexametasona):


o Adultos: Inicialmente, 0.75—9 mg al día
divididos en 2 a 4 administraciones. Las
dosis de mantenimiento se debrán ajustar
en función de la respuesta del paciente. En
un estudio abierto, 10 pacientes con
trombocitopenia idiopática, la
administración de dexametasona ocasionó
una mejora en el recuento de plaquetas. La
dexametasona fué administrada por vía oral
en dosis de 40 mg/día durante 4 días
consecutivos repitiendo este tratamiento
cada 28 días hasta un total de 6 ciclos [4]
o Niños : 0.024—0.34 mg/kg/día o 0.66—10
mg/m2/día, divididos en 2—4 dosis.
 Administración intramuscular, intravenosa o infusión
intravenosa (dexametasona fosfato sódico)
o Adultos: Inicialmente, 0.5—9 mg i.v. o i.m
al día en 2-4 administraciones. Las dosis de
mantenimiento se debrán ajustar en función
de la respuesta del paciente.
o Niños: 0.06—0.3 mg/kg/día o 1.2—10
mg/m2/day i.m o i.v. , divididos en 2-4
dosis a intervalos de 6 a 12 horas.

Tratamiento de problemas respiratorios: ( asma,


hemangioma obstructivo en niños, EPOC, síndrome de Loeffle,
etc.):

 Administración por inhalation dosage (dexametasona


fosfato sódico):
o Adultos: Inicialmente, 3 pulverizaciones
(100 µg/puff) 3—4 veces al día. Las dosis
de mantenimento no excederán 3
pulverizaciones cada vez o 12
pulverizaciones al día times per day. La
dexametasona no es el corticoide de
elección para esta indicación
o Niños : 2 pulverizaciones (100 µg/puff) 3—4
veces al día. La dosis máxima no debe
exceder 8 pulverizaciones al día.
 Administración oral (dexametasona):
o Adultos: Inicialmente, 0.75—9 mg al día
divididos en 2 a 4 administraciones. Las
dosis de mantenimiento se debrán ajustar
en función de la respuesta del paciente.
o Niños : 0.024—0.34 mg/kg/día o 0.66—10
mg/m2/día, divididos en 2—4 dosis.

Tratamiento del crup moderado: una dosis de 0.6


mg/kg oral fué tan efectiva como la budesonida inhalada en
dosis de 2 mg [5]. Se han empleado dosis de dexametasone
entre 0.15—0.6 mg/kg. Para el tratamiento del crup más seero
se recomienda la dosis de 0.6 mg/kg i.m. que es tan efectiva o
más como 4 mg de budesonida por inhalación. [6]

Tratamiento del síndrome de insuficiencia


respiratoria aguda:

 Administración parenteral (dexametasona fosfato


sódico):
o Adultos: Inicialmente, 0.5—9 mg i.v. o i.m.
al día en 2 a 4 administraciones. Las dosis
de mantenimiento se debrán ajustar en
función de la respuesta del paciente.
o Niños: 0.06—0.3 mg/kg o 1.2—10 mg/m2
i.m. o i.v. al día en dosis divididas cada 6 o
12 horas

Administración en niños prematuros y neonatos


para el tratamiento de la displasia broncopulmonar:

 Administración oral o intravenosa: Se sugieren dosis


entre 0.5-0.6 mg/kg i.v. o por vía oral, en dosis
divididas cada 12 horas durante 3 a 7 días, con
reducción de un 10% de la dosis cada 3 días hasta
alcanzar la dosis de 0.1 mg/kg/día. La dosis final se
administra en días alternos y luego se suspende el
tratamiento [7]

Tratamiento de hipercalcemia debida a sarcoidosis o


cáncer, miastenia grave y otras condiciones:

 Admininistración oral (dexametasona):


o Adultos: Inicialmente, 0.75—9 mg por vía
oral al día en 2 a 4 administraciones. Las
dosis de mantenimiento se debrán ajustar
en función de la respuesta del paciente

Tratamiento del síndrome nefrótico:

 Admininistración oral (dexametasona):


o Adultos: Inicialmente, 0.75—9 mg por vía
oral al día en 2 a 4 administraciones. Las
dosis de mantenimiento se debrán ajustar
en función de la respuesta del paciente
hasta que la orina no contenga proteínas.
Después reducir paulatinamente las dosis

Tratamiento de exacerbaciones de esclerosis


múltiple:

 Administración oral:
o Adultos: 16 mg/día en 4 dosis durante 5
días. Estas dosis mostraron ser tan eficaces
como la metilprednisolonai.v. en algunos
estudios clínicos [13]

Tratamiento de la colitis ulcerosa y de la


enfermedad de Crohn:

 Administración oral (dexametasona):


o Adultos: Inicialmente 0.75 a 9 mg/dia en 2
a 4 dosis divididas. Las dosis de
mantenimiento se ajustarán en función de la
respuesta de cada paciente.
 Administración intravenosa o intramuscular
(dexametasona fosfato sódico):
o Adultos: Inicialmente 0.5 a 9 mg/dia en 2 a
4 dosis divididas. Las dosis de
mantenimiento se ajustarán en función de la
respuesta de cada paciente

Tratamiento de desórdenes oftálmicos (conjuntivitis


alérgica, úlcera córnea marginal alérgica, corioretinitis, ciclitis,
endoftalmitis, oftalmopatía de Graves, conjuntivitis papilar,
herpes zoster ophthalmicus, iritis, keratitis, neuritis óptica,
uveitis posteiror difusa, etc.:

 Administración oftálmica (dexametasona fosfato


sódico unguento oftálmico o solución oftálmica)
o Adultos y niños: Aplicar una capa fina del
unguento oftálmico al 0.05% 3 o 4 veces al
día. Alternativamente, instilar 1 o 2 gotas
de solución oftálmica al 0.1% cada hora
durante el día y cada 2 horas durante la
noche, reduciendo la dosis cuando se
consiga una respuesta favorable
 Administración oral (dexametasona):
o Adultos: Inicialmente entre 0.75—9 mg al
día, administrados en 2 a 4 dosis. Las dosis
de mantenimiento se ajustarán según la
respuesta.
o Niños: entre 0.024—0.34 mg/kg al día (0.66
—10 mg/m2) administrados en 2 a 4 dosis
 Administración parenteral (dexametasona fosfato
sódico):
o Adultos: Inicialmente entre 0.5—9 mg i.v. o
i.m al día en 2 a 4 dosis divididas. Ajustar la
dosis de mantenimiento en función de la
respuesta observada
o Niños: entre 0.06—0.3 mg/kg/día (1.2—10
mg/m2/day) i.m. o i.v. divididos en dosis
cada 6—12 horas

Tratamiento adyuvante de la infertilidad


(conjuntamente con clomifeno):

 Administración oral:
o Mujeres adultas: 0.5 mg/día administrados
los días 3 a 12 de un ciclo en combinación
con clomifeno. La dexametasona incrementa
la foliculogenesis suprimiento la secreción
adrenal de andrógenos.

En todos los casos, la administración oral se debe hacer con


alimentos para reducir los efectos secundarios
gastrointestinales. Para la administración parenteral, seguir las
instrucciones específicas de cada fabricante.

CONTRAINDICACIONES y ADVERTENCIAS

Dexametasona oftálmica: no se deberá administrar


dexametasona a pacientes con infecciones oculares debidas a
virus, bacterias u hongos. Deberá ser usada con precaución en
pacientes con abrasión de la córnea. Puede aumentar la
presión intraocular de modo que esta deberá ser monitorizada
cada 2 a 4 semanas al instaurar el tratamiento y a intervalos
de un mes con posterioridad. En los pacientes con glaucoma de
angulo abierto, diabetes mellitos, miopía o huso de
Krukenberg, se deberá administrar con precaución dado que
estos pacientes son más propensos a desarrollar hipertensión
durante el tratamiento con corticosteroides.

Dexametasona tópica: la dexametasona para uso tópico


debe usarse con extrema precaución en pacientes con
enfermedad vascular periférica debido al riesgo de ulceraciones
de la piel. No se debe usar si hay evidencia de infecciones
fúngicas o víricas.

Preparados sistémicos: La mayoría de los fabricantes


señalan que la dexametasona está contraindicada en pacientes
con infecciones sistémicas por hongos. Sin embargo, muchos
clínicos creen que se pueden administrar corticoides en
pacientes con cualquier tipo de infección fúngica, siempre y
cuando se haya instaurado un tratamiento antifúngico
adecuado. Los corticoides pueden enmascarar los síntomas de
infección y, por tanto, no se deben usar en casos de
infecciones virales o bacterianas que no estén tratadas
convenientemente. Los corticoides pueden reactivar la
tuberculosis y, por tanto, no se deben emplear en sujetos con
historia de esta enfermedad a menos que estén tratados
concomitantemente con antituberculosos.

Al poseer efectos inmunosupresores, los pacientes deben evitar


ser expuestos a contagios de virus del sarampión o de la
rubeóla. Igualmente, los pacientes con una infección por
herpes, deberán evitar tratamientos cn corticoides. En caso de
producirse una infección por este tipo de virus, los pacientes
deberán informar inmediatamente a su médico si se
encuentran bajo tratamiento corticoide o han recibido un
tratamiento corticoide en los 12 meses anteriores.

Aunque la terapia corticosteroide no es incompatible con las


vacunas, se recomienda a los pacientes con una importante
inmunosupresión debida a un tratamiento crónico que eviten
las vacunas con virus vivos. Cuando se considere iniciar un
tratamiento inmunosupresor o quimioterápico, la vacunación
debe preceder el tratamiento en 2 o más semanas.

En caso de requerirse una intervención quirúrgica, el paciente


deberá informar al cirujano sobre el tratamiento corticoide
recibido en los 12 últimos meses y sobre la enfermedad
tratrada. Se recomienda que el paciente lleve consigo una
tarjeta de identificación en la que decriba la enfermedad que
está siendo tratada, el tipo de corticoide empleado y el nombre
del médico que trata al paciente.
Se ha asociado el tratamiento con corticosteroides con ruptura
de la pared del ventrículo izquierdo en pacientes con infarto de
miocadio reciente. Por lo tanto, estos pacientes deberán ser
tratados con precaución. Los corticosteroides puede ocasionar
edema lo que puede empeorar una insuficiencia cardíaca o la
hipertensión.

Se sabe que los corticosteroides pueden ocasionar cataratas y


exacerbar el glaucoma durante la administración a largo plazo.
Los pacientes con glaucoma y otras alteraciones visuales
deberán ser tratados con precaución y evaluados
períodicamente para determinar la posible formación de
cataratas.

Los corticosteroides de deberán usar con precaución en los


pacientes con trastornos gastrointestinales, diverticulitis,
anastomosis intestinal o alguna condición hepática que
ocasione hipoalbuminemia (tal como la cirrosis). Aunque los
corticoisteroides se usan para el tratamiento a corto plazo de
las exacerbaciones agudas de desórdenes inflamatorios
crónicos (como la colitis ulcerosa o la enfermedad de Crohn)
están contraindicados en aquellos pacientes en los que exista
la posibilidad de una perforación, absceso o infección
piogénica. Los corticoides no deben ser usados en pacientes
con úlcera péptica salvo en casos en los que sin ellos pueda
peligrar su vida.

Los corticosteroides deben ser empleados con suma precaución


en pacientes con psicosis, irritabilidad emocional, infección por
herpes, enfermedad renal, osteoporosis, diabetes y epilepsia
ya que estos fármacos pueden empeorar estas condiciones. Los
pacientes con hipotiroidismo pueden mostrar una respuesta
exagerada a los corticoides.

La dexametasona está clasificada dentro de la categoría C de


riesgo en el embarazo. Se han observado en ocasiones efectos
teratogénicos (paladar hendicdo) y abortos prematuros en
algunas ocasiones en las que emplearon corticoides durante el
embarazo. De ser estos absolutamente necesarios durante la
gestación, se deberá informar a los padres sobre los posibles
riesgos. Además, los neonatos de mujeres tratasas con
corticoides durante el embarazo deberán ser vigilados por la
posibilidad de una insuficiencia adrenal.

Los corticosteroides se excretan en la leche materna, por lo


que se recomienda a las madres tratadas con orticosteroides
que no alimenten a sus hijos.

El tratamiento prolongado con corticosteroides debe ser


evitado en los niños ya que estos fármacos pueden retardar el
crecimiento. Los niños tratados con corticoides se encuentran
inmunodeprimidos y son más susceptibles a las infecciones.
Además, infecciones normalmente inocuas pueden resultar
fatales.

La discontinuación de un tratamiento prolongado con


corticoides debe ser gradual: la supresión del eje HPA puede
durar hasta 12 meses, de tal modo que los pacientes necesitan
una terapia hormonal sustitutoria mientras que sus adrenales
van recuperando su funcionalidad. La supresión abrupta de un
tratamiento prolongado puede ocasionar serios efectos
adversos e incluso la muerte.

Como los glucocorticoides pueden agravar el síndrome de


Cushing, deben ser evitados en pacientes que padezcan esta
condición.

Dexametasona por inhalación: la dexametasona por


inhalación está contraindicada en pacientes con status
asthmaticus agudo u otros tipos de asma que requieren un
tratamiento intensivo. Si los pacientes reciben adicionalmente
corticoides por vía sistémica, puede producirse un efecto
aditivo con supresión del eje hipotalámico-pituitario-adrenal
(HPA). La dexametasona debe ser utilizada con precaución
cuando se sustituye el producto inhalado por el fármaco por vía
oral: puede producirse una insuficiencia adrenal. Los pacientes
debe ser advertidos de que la dexametasona inhalada no es
eficaz para tratar un broncoespasmo agudo.

La dexametasona se debe usar con precaución en pacientes


con herpes ocular o cualquier infección de los ojos bacteriana o
fúngica no tratada.

Se desconoce la seguridad y eficacia de la dexametasona en


niños de menos de 6 años de edad. En los niños de mayor
edad, la dexametasona puede ocasionar retrasos en el
crecimiento

INTERACCIONES

Los inductores de las enzimas hepáticas (barbituratos,


fenitoína y rifampicina) pueden aumentar el metabolismo de
los glucocorticoides y reducir su eficacia. Las dosis de
dexametasona pueden necesitar reajustes si alguno de estos
fármacos es añadido o retirado durante el tratamiento con
corticoides.

Los estrógenos puede aumentar la concentración de


transcortina, reduciendo las cantidades de cortisona libre y
alterando sus efectos. Puede ser necesario un reajuste de las
dosis si se añaden o retiran estrógenos durante un tratamiento
glucocorticoide.

Los corticosteroides aumentan el riesgo de ulceraciones


gástricas inducidas por el antiinflamatorios no esteroídicos
(AINES). Los salicilatos y la aspirina deben ser usados con
precaución en pacientes con hipoprotrombinemia que también
estén tratados con corticoides. Además, si se discontinúa el
tratamiento corticoide, los niveles de salicilatos pueden
aumentar debido a la reducción del metabolismo de los
salicilatos que se encuentra aumentado por los corticoides, lo
que puede producir una toxicidad por salicilatos y un aumento
de los efectos secundarios.

Los glucocorticoides estimulan la excreción urinaria de potasio.


Si se administran concomitantemente otros fármacos que
también eliminan potasio como las tiazidas, la furosemida, el
ácido etacrínico o la anfotericina B, puede producirse
hipokaliemia. Se recomienda determinar los niveles de potasio
si se administran corticoides con estos fármacos. Además,
puede aumentar el riesgo de arritmias en pacientes tratados
con digoxina y , dofetilida, puede potenciar el bloqueo
neuromuscular producido por los bloqueantes neuromusculares
nodepolarizantes.

Los glucocorticoides interaccionan con los inhibidores de la


colinesterasa como el ambenonium, la neostigmina y
piridostigmina, provocando una seria debilidad muscular en
pacientes con miastenia gravis. No obstante, hay casos en que
deben usarse ambas terapias concomitantemente.

En raras ocasiones, los corticosteroides pueden aumentar la


coagulabilidad de la sangre. Los pacientes tratados con
heparina o warfarina pueden experimentar una pérdida parcial
del efecto clínico. Por otra parte, la irritación gastrointestinal
provocada por los corticosteroides puede aumentar el riesgo de
hemorragias en pacientes anticoagulados, por lo que los
pacientes bajo heparina o warfarina deberán ser vigilados se se
instaura un tratamiento con dexametasona

Los corticosteroides sistémicos aumentan los niveles de


glucosa en sangre. Además, existe una interacción
farmacodinámica entre los corticosteroides y los
anticoagulantes orales. Los diabéticos de tipo 1 y 2 requerirán
reajuste de las dosis de insulina o de antidiabéticos orales si se
inicia o discontinua un tratamiento corticoide. Se ha observado
que las concentraciones plasmáticas de lactato aumentan
cuando se administra metformina concomitantemente con
hidrocortisona, con el correspondiente riesgo de desencadenar
una acidos láctica. Por estos motivos, los diabéticos tratados
con corticoides deberán ser estrechamente vigilados

La administración de corticoides antes o durante la terapia


fotodinámica con porfímero puede reducir la eficacia de este
tratamiento.

El metabolismo de los corticosteroides se encuentra aumentado


en el hipertiroidismo y disminuído en el hipotiroidismo. Se
necesitan reajustas de la dosis al iniciar, modificar o
discontinuar un tratamiento con hormonas tiroideas o fármacos
antitiroideos.

En los pacientes asmáticos el riesgo de cardiotoxicidad del


isoproterenol puede aumentar si se administran
concomitantemente corticosteroides o metilxantinas. Se ha
observado infarto de micocardio con necrosis, insuficiencia
cardíaca congestiva y muerte en casos en los que se
administrados dosis i.v. de of isoproterenol de 0.05 a 2.7
mg/kg/min en niños asma refractario.

La dexametasona induce la actividad enzimática del sistema


CYP3A4, por lo que aumenta el metabolismo de los fármacos
que son degradados por este sistema. El alosetron y la
zonisamida son ejemplos de fármacos metabolizados por
CTP3A4 y, aunque no se ha evaluado específicamente esta
interacción, es posible que la dexametasona reduzca la eficacia
de estos fármacos. En cambio, en un estudio en pacientes
tratados con irinotecan , se observó un aumento de la
excreción biliar de este fármaco y de sus metabolitos [7]. Lo
mismo ocurre en el caso de lopinavir, cuyos niveles
plasmáticos disminuyen al administrar concomitantemente
dexametasona, con la correspondiente pérdida de eficacia
clínica

La mifepristona, RU-486 muestra una actividad


antiglucocorticoide que puede antagonizar los corticoides. En la
rata, la actividad de la dexametasona fué inhibida por dosis
orales de 10 a 25 mg de mifepristona. Una dosis de
mifepristona de 4.5 mg/kg en el hombre ocasiona un aumento
del ACTH y del cortisol. Además, la dexametasona puede
reducir los niveles plasmáticos de mifepristona al inducir el
sistema CYP3A4. Por todas estas razones, la mifepristona está
contraindicada los pacientes bajo tratamiento crónico con
corticoides.

Suplementos dietéticos:

Magnesio: los corticoides aumentan la pérdida de magnesio en


la orina. Algunos autores recomiendan suplementar la dieta
con 300-400 mg de magnesio/día en los pacientes bajo
tratamiento glucocorticoide crónico.

Potasio: no se recomiendan suplementos potásicos, pero si un


aumento de la ingesta de alimentos ricos en este catión como
los zumos vegetales o de frutas.

Acetil-cisteína: en un estudio en pacientes con alveolitis


fibrosa, la adición de acetilcisteína en dosis de 600 mg tres
veces al día mejoró significativamente la respuesta a la
prednisona [8]

Calcio y vitamina D: los corticosteroides reducen la activación


de la vitamina D, con el correpondiente riesgo de
descalcificación y pérdida de hueso. Se deberán vigilar los
niveles de 1,25-dihidroxicolecalciferol para determinar si se ha
producido deficiencia.[9]. En un estudio en pacientes con
artritis reumatoide tratados con prednisona durante 2 años,
aquellos que recibieron un suplemento de 1000 mg/día de
calcio y 500 UI de vitamina D, no mostrarón pérdidas óseas
significativas a diferencia de los pacientes que recibieron
placebo [10]. Por este motivo, algunos muchos clínicos
recomiendan añadir un suplemento de 1000mg de calcio más
400 a 800 UI de vitamina D para prevenir la osteoporosis
durante un tratamiento crónico con corticoides

Vitamina B6: los corticoide aumentan la pérdida de vitamina


B6. Sin embargo, no se ha comprobado que la adición de esta
vitamina como suplemento añada algún beneficio

Melatonina: una dosis única de dexametasona administrada a


voluntarios sanos suprimió la producción de melatonina en 9 de
11 sujetos [11]. Se desconoce si la administración crónica de
corticoides interfiere con la producción de melatonina y si es
conveniente añadir un suplemento de esta hormona.

Interacciones con plantas medicinales:

La Ephedra sinica  (Ma huang) contiene efedrina, compuesto


que estimula el aclaramiento de la dexametasona y por lo
tanto disminuye su actividad. Aunque se desconoce si la planta
tiene el mismo efecto, parece prudente que los pacientes
tratados con dexametasona se abstengan de utilizar esta
planta.

El regaliz (Glycyrrhiza glabra) ha demostrado disminuir la


eliminación de la prednisona en estudios realizados in vitro. En
un estudio en voluntarios sanos tratados con prednisolona y
glicirricina (principio activo del regaliz) se observó un aumento
del efecto del corticoide en comparación con voluntarios que
solo recibieron la prednisolona.[12] Además estudios en
animales han mostrado que la glicirricina previene los efectps
inmosupresores de la cortisona. Hasta que se conozcan más
detalles acerca de la naturaleza de esta interacción, los
pacientes tratados con corticoides no debererán consumir
regaliza sin consultar previamente al médico
REACCIONES ADVERSAS

La gravedad de las reacciones adversas asociadas al


tratamiento crónico con corticoides aumenta con la duración
del mismo. Las administraciones en dosis únicas o en número
reducido no suelen provocar efectos secundarios, pero la
administración crónica ocasiona la atrofia de las glánduñas
suprarrenales y una depleción generalizada de proteínas.

Dexametasona por inhalación: los efectos adversos


observados son flush, xerostomía, rash, ronquera, disgeusia e
irritación de boca y garganta. Debido a sus efectos
inmunosupresores, son frecuentes las candidiasis orales. Los
efectos nasofaríngeos son irritación y sequedad de nariz. Los
efectos secundarios más frecuentes después de la inhalación
son irritación y sequedad de la nariz. Muy raramente se ha
descrito perforación del tabique nasal en pacientes tratados
con glucocorticoides por vía intranasal

Dexametasona oftálmica: Aunque los corticosteroides se


usan para el tratamiento de la oftalmopatía de Graves, pueden
producirse efectos oculares adversos como exosftalmos,
cataratas subcapsulares posteriores, retinopatía o aumento de
la presión intraocular. En particular, puede producirse
glaucoma y lesiones del nervio óptico, incluyendo neuritis. Se
han comunicado casos de ceguera temporal después de la
administración de glucocorticoides por vía intranasal e
intraocular. El riesgo de cataratas aumenta con la duración del
tratamiento y con la dosis del corticoide inhalada. No se conoce
con exactitud el mecanismo de la formación de cataratas
aunque parece ser que esta implicada de alguna manera la
bomba sodio-potasio que hace que se produzca una
acumulación de agua en las fibras de la lente y una
aglutinación de sus proteínas.

Dexametasona tópica: Entre los efectos adversos


dermatológicos se han descrito atrofia de la piel, acné vulgar,
diaforesis, mala cicatrización de heridas, eritema facila, estrías,
petequias, hirsutismo, y equimosis. Pueden producirse
reacciones de hipersensibilidad como dermatitis alérgica,
urticaria o angioedema. Después de inyecciones i.v. de
corticoides de han observado parestesias en el área perineal..

Dexametasona sistémica: los glucocorticoides son


responsables del metabolismo de la proteínas, por lo que un
tratamiento prolongado puede ocasionar diversas
manifestaciones musculoesquelético como miopatía, mala
cicatrización, osteoporosis, fracturas o necrosis avascuoar de la
cabeza del fémur o del húmero. Estos problemas se presentan
con mayor frecuencia en pacientes ancianos o debilitados, Los
glucocorticoides no modifican el metabolismo de la vitamina,
pero interaccionan con el metabolismo del calcio sobre todo en
los osteoblastos [15]. Las mujeres postmenopaúsicas deberán
ser estrechamente vigiladas por si se desarrolla osteoporosis
durante un tratamiento corticosteroide.

Las inyecciones intra-articulares de corticoides pueden


ocasionar artropatías parecidas a las de Charcot. También se ja
manifestado atrofia en l punto de la inyección y ruptura de
tendones.

Las dosis farmacológicas de los corticosteroides administradas


durante períodos prolongados pueden ocasionar una
dependencia fisiológica debido a la supresión del eje
hipotalámico-pituitario-adrenal (HPA). Los corticoides exógenos
ejerce un efecto de retroalimentación negativac, inhibiendo la
secreción de la adenocorticotropina (ACTH). El resultado final
es la disminución de los corticoides y andrógenos segregados
por la corteza adrenal. La severidad de esta insuficiencia
adrenocortical varía según los individuos y depende de las
dosis, frecuencia y duraciñón del tratamiento. Los pacientes
con el eje HPA suprimidos requerirán mayores dosis de
corticosteroides en los momentos de estrés fisiológico.
Además, se los corticoides se discontinuan bruscamente, puede
producirse una insuficiencia adrenal aguda e incluso la muerte.
Los siguientes síntomas están relacionados con una
insuficiencia aguda: anorexia, letargp, nausea/vomitos,
cefaleas, fiebre, artralgias, mialgias, dermatitis exfoliativa,
pérdida de peso e hipotensión. También se ha informados de
casos de presión intracraneal y papiledema.

El tratamiento prolongado con corticosteroides puede afectar


negativamente el sistema endocrino, ocasionando
hipercorticoidismo (síndrome de Cushing), irregularidades
menstruales (con amenorrea o dismenorrea) hiperglucemia y
agravamiento de la diabetes mellitus. En una reciente revisión
de 93 estudios con corticoides [14], el desarrollo de diabetes
mellitus fue 4 veces más frecuente en los sujetos tratados con
estos fármacos. Pueden ser necesarios reajustes en las dosis
de insulina o antidiabéticos orales. Aunque la dexametasona
está prácticamente desprovista de efectos mineralcorticoides,
su uso prolongado puede causar retención de fluídos,
hipokaliemia, hipernatremia, edema e hipertensión. La revisión
anterior de 93 estudios mostró una incidencia de hipertensión
4 veces mayor en los pacientes tratados con esteroides en
comparación con los controles.

Los síntomas gastrointestinales asociados a un tratamiento


prolongado con corticoides incluyen naúsea/vómitos y anorexia
con la correspondiente pérdida de peso. También se han
comunicado diarrea, constipación, dolor abdominal, úlceras
esofágicas, gastritis y pancreatitis. Aunque temporalmente se
asoció la úlcera péptica a un tratamiento crónico con
corticoides, los resultados de un meta-análisis sobre 93
estudios han demostrado que la incidencia de úlcera péptica no
era mayor en los sujetos tratados con corticoides que en los
sujetos de control [14]

Se han comunicado efectos adversos neurológicos durante el


tratamiento prolongado con corticosteroides, incluyéndose
entre los mismos cefaleas, insomnio, vértigo, neuropatía
periférica isquémica, convulsiones y cambios en el EEG.
También se han descrito cambios en el comportamiento como
depresión, euforia, cambios de personalidad y psicosis.

Los corticoides por vía parenteral también pueden producir


hiperpigmentación de la piel, induraciones, atrofia cutánea o
subcutánea y abscesos.

Se han asociado a tratamientos con corticoides


hipercolesterolemia, arterioesclerosis, trombosis,
tromboembolismo y flebitis. Puede producirse trombocitopenia
en pacientes tratados durante períodos prolongados con
corticoides

En ocasiones más raras se han comunicado palpitaciones,


taquicardia sinusal, glositis, estomatitis, incontinencia y
urgencia urinarias

Los corticoisteroides pueden reducir las concentraciones


plasmáticas de vitamina C y A que, en ocasiones poco
frecuentes pueden ocasionar deficiencias en dichas vitaminas.

 
  PRESENTACIONES

 AMPLIDERMIS, pomada. MEDEA


 BRONCOFORMO MUCO DEXA SUSPENSION 100 ML.EDIGEN
 CLORANFE HEMIDEX LLORENS, COLIRIO 5 ML LLORENS
 COLIRCUSI DE ICOL.COLIRIO 10 ML. ALCON CUSI
 COLIRCUSI DEXAM CONSTRIC. COLIRIO 10 ML. ALCON CUSI
 COLIRCUSI DEXAMETASONA. COLIRIO 10 ML. ALCON CUSI
 COLIRIO LLORENS HEM ANTH. COLIRIO 5 ML. LLORENS
 CRESOPHENE. SOLUCION 45 ML. PRATS
 DALAMON INY. 6 AMP LIOF+6 AMP DISOL. ALTER
 DECADRAN. 4 MG/ML 1 VIAL 2 ML. MERCK SHARP DOHME
 DECADRAN NEOMICINA. COLIRIO 2.5 ML. MERCK SHARP DOHME
 DEXA TAVEGIL. 20 COMPRIMIDOS. NOVARTIS CONSUMER HEALT
 DEXAMETASONA BELMAC. 0.5 MG 20 COMPRIMIDOS. BELMAC
 FORTECORTIN. 4 MG/ML 3 AMP 1 ML. MERCK FARMA QUIMICA
 FORTECORTIN ORAL. 1 MG 30 COMPRIMIDOS. MERCK FARMA QU
 HONGOSAN. SOLUCION 150 ML. MEDEA
 INZITAN. 6 AMPOLLAS 2 ML
 LIQUIPOM DEXA ANTIB. COLIRIO 10 ML. IQUINOSA
 LIQUIPOM DEXA CONST. COLIRIO 10 ML. IQUINOSA
 LIQUIPOM DEXAMIDA. COLIRIO 10 ML. IQUINOSA
 MAXIDEX. 0.1% COLIRIO 5 ML. ALCON CUSI
 MAXITROL. COLIRIO 5 ML. ALCON CUSI
 NEUROCATAVIN DEXA INY. 6 VIALES 5 ML. LLORENTE
 NEURODAVUR PLUS. 6 AMPOLLAS 2.5 ML. BELMAC
 OFT CUSI DE ICOL. POMADA 3 G. ALCON CUSI
 OFT CUSI DEXAMETASONA. 0.05% POMADA 3 G. ALCON CUSI
 OFTALMOL DEXA. COLIRIO 20 ML. REIG JOFRE
 OFTALMOTRIM DEXA. COLIRIO 5 ML. ALCON CUSI
 POMADA OC DEXAFENICOL. POMADA 3 G. CIBA VISION
 RESORBORINA. SOLUCION 200 ML. BELMAC
 RINO DEXA. GOTAS 10 ML PEDIATRICO. SANOFI WINTHROP
 RINOBLANCO DEXA ANTIBIO. NEBULIZADOR 10 ML. ALCON CUSI
 SABANOTROPICO. POMADA 12 G. CALMANTE VITAMINADO
 SEDOFARIN SPRAY. AEROSOL 15 ML. PENSA
 TOBRADEX. 3/1 MG COLIRIO 5 ML. ALCON CUSI
 VASODEXA LLORENS.COLIRIO 5 ML. LLORENTE
REFERENCIAS

 Davis PG, Henderson-Smart DJ. Intravenous dexamethasone for extubatio


Rev 2000 :2 CD000308
 McNamara S, Kilbride L . Treating primary brain tumours with dexamethaso
 Perez EA. Use of dexamethasone with 5-HT3-receptor antagonists for che
Sci Am 1998 Mar-Apr 4:2 72-7
 Bonadio WA. Adjunctive dexamethasone therapy for pediatric bacterial me
 Wildenradt SS, Hart LL . Antenatal dexamethasone as prophylaxis of respi
Apr 28:4 475-7
 Van Ekeren RF. Using dexamethasone to treat bronchopulmonary dysplas
 Smeets RE, Hillen HF . Acquired amegakaryocytic thrombocytopenic purpu
therapy and review of the literature.Neth J Med 1988 Feb 32:1-2 27-33
 Anonymous . Effects of dexamethasone on glucose metabolism. Nutr Rev
 Jacox A, Carr DB, Payne R. New clinical-practice guidelines for the manag
Med 1994;330:651—5.

Garamicina

GARAMICINA
SOLUCION INYECTABLE
Antibiótico

SCHERING-PLOUGH, S.A. de C.V.


- DENOMINACION GENERICA
- FORMA FARMACEUTICA Y FORMULACION
- INDICACIONES TERAPEUTICAS
- FARMACOCINETICA Y FARMACODINAMIA EN HUMANOS
- CONTRAINDICACIONES
- PRECAUCIONES GENERALES
- RESTRICCIONES DE USO DURANTE EL EMBARAZO Y LA
LACTANCIA
- REACCIONES SECUNDARIAS Y ADVERSAS
- INTERACCIONES MEDICAMENTOSAS Y DE OTRO GENERO
- ALTERACIONES EN LOS RESULTADOS DE PRUEBAS DE
LABORATORIO
- PRECAUCIONES EN RELACION CON EFECTOS DE
CARCINOGENESIS, MUTAGENESIS, TERATOGENESIS Y SOBRE LA
FERTILIDAD
- DOSIS Y VIA DE ADMINISTRACION
- MANIFESTACIONES Y MANEJO DE LA SOBREDOSIFICACION O
INGESTA ACCIDENTAL
- PRESENTACIONES
- RECOMENDACIONES SOBRE ALMACENAMIENTO
- LEYENDAS DE PROTECCION
- LABORATORIO Y DIRECCION
- NUMERO DE REGISTRO Y CLAVE IPPA
DENOMINACION GENERICA:
Gentamicina.

FORMA FARMACEUTICA Y FORMULACION:


Cada ml contiene:
Sulfato de gentamicina
   equivalente a ............ 10 y 40 mg
   de gentamicina base
Vehículo, cbp ............... 1 ml

INDICACIONES TERAPEUTICAS:
GARAMICINA® Solución inyectable está indicada en el tratamiento de infecciones
causadas por cepas sensibles de las siguientes bacterias: Pseudomonas aeruginosa,
Proteus spp., (indol-positivas e indol-negativas), Escherichia coli, Klebsiella-
Enterobacter-Serratia spp., Citrobacter spp., Providencia spp., Staphylococcus
spp., (coagulasa negativas y coagulasa positivas, incluyendo cepas resistentes a
penicilina y meticilina) y Neisseria gonorrhoeae. Por lo tanto,
GARAMICINA® Solución inyectable debería considerarse en el tratamiento de las
siguientes infecciones causadas por estos microorganismos sensibles:
1. Infecciones del riñón y del aparato genitourinario (incluyendo gonorrea). En
ésta, basta una sola dosis IM de 280 mg (puede utilizarse cualquiera de
nuestras presentaciones para completar la dosis requerida).
2. Infecciones respiratorias (ver uso coadyuvante por inhalaciones).
3. Septicemia.
4. Infecciones de la piel, huesos o tejidos blandos.
5. Peritonitis o infecciones pélvicas (incluyendo aborto séptico).
6. Infecciones graves del sistema nervioso central.
7. Infecciones gastrointestinales.
8. Heridas infectadas.
9. Quemaduras infectadas.
En la sospecha de sepsis cuando se desconoce el organismo infectante, la gentamicina
puede administrarse en asociación con un antibiótico tipo penicilina o cefalosporina.
Después de la identificación del organismo y su susceptibilidad, debe continuarse la
terapia antibiótica apropiada.
Si se sospechan organismos anaerobios, debe asociarse a GARAMICINA ® Solución
inyectable un quimioterápico anti-anaerobio apropiado.
Deberán efectuarse pruebas bacteriológicas para identificar el germen causal y para
determinar su sensibilidad a la gentamicina. Se hallan disponibles discos de 10 mcg de
gentamicina para las pruebas de sensibilidad.
La decisión de continuar el tratamiento con GARAMICINA ® Solución inyectable deberá
basarse en los resultados de las pruebas de sensibilidad, en la respuesta clínica del
paciente y en la tolerancia al medicamento. Si las pruebas de sensibilidad indican que
el germen causal es resistente a la gentamicina y el paciente no está respondiendo
favorablemente, deberá instituirse otro tratamiento antimicrobiano adecuado.
GARAMICINA® se ha empleado eficazmente en asociación con la carbenicilina en el
tratamiento de infecciones muy graves causadas por Pseudomonas
aeruginosa. También ha sido eficaz cuando se ha usado en asociación con un
antibiótico tipo penicilina en el tratamiento de la endocarditis causada por
estreptococos del grupo D. En el recién nacido con sospecha de sepsis o con neumonía
estafilocóccica, también se indica el uso concomitante de la gentamicina con un
antibiótico tipo penicilina. GARAMICINA® Solución inyectable ha demostrado ser eficaz
en el tratamiento de las infecciones estafilocóccicas graves.
La administración subconjuntival de la gentamicina se recomienda en el tratamiento de
la endoftalmitis causada por cepas bacterianas sensibles. Puede también considerarse
para uso profiláctico en enfermos que van a ser sometidos a cirugía intra-ocular de alto
riesgo, especialmente si los cultivos o frotis pre-operatorios revelan la presencia de
gérmenes gramnegativos.
GARAMICINA® Solución inyectable también puede administrarse por inyección
endotraqueal directa o por nebulización como coadyuvante a la terapia sistémica en el
tratamiento de las infecciones pulmonares graves.

FARMACOCINETICA Y FARMACODINAMIA EN HUMANOS:


GARAMICINA® Solución inyectable es gentamicina, un antibiótico aminoglucósido
descubierto y desarrollado por Schering Corporation, USA, producido por la
fermentación de la Micromonospora purpurea,perteneciente a un género de
microorganismos del cual nunca se había aislado ningún antibiótico empleado en
medicina humana.
GARAMICINA® Solución inyectable es un complejo de antibióticos formado por tres
componentes, gentamicina C1, gentamicina C1a y gentamicina C2 en forma de la sal
sulfato, en una combinación que cumple con las especificaciones de la Administración
de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos; así como las contenidas en la
Farmacopea de los Estados Unidos. Los diversos componentes C se encuentran en la
siguientes proporción: C1 = 25 a 50%, C1a = 15 a 40% y C2 = 20 a 50%.
La potencia del sulfato de gentamicina utilizado en GARAMICINA ® es inferior a 590
mcg/mg de gentamicina calculada como base anhidra. GARAMICINA ® Solución
inyectable es una solución cristalina, estable, que no requiere refrigeración.
Las pruebas in vitro han demostrado que la gentamicina es un antibiótico bactericida
que actúa inhibiendo la síntesis proteica en microorganismos susceptibles. Es activa
frente a una amplia variedad de bacterias gramnegativas y grampositivas,
incluyendo E. coli, Pseudomonas aeruginosa, Proteus spp., (Indol-positivas e
indol-negativas), Klebsiella-Enterobacter-Serratia spp., Citrobacter spp.,
Providencia spp., Staphylococcus spp., (coagulasa negativas y coagulasa positivas,
incluyendo cepas resistentes a penicilina y meticilina) y Neisseria gonorrhoeae. La
gentamicina también es activa in vitro contra especies deSalmonella y Shigella. Las
bacterias siguientes son generalmente resistentes a los
aminoglucósidos: Streptococcus, particularmente del grupo D. La asociación de
gentamicina y penicilina G tiene un efecto bactericida sinérgico frente a casi todas las
cepas de Streptococcus faecalis y sus variedades (S. faecalis var. liquifaciens, S.
faecalis var. zymogenes, S facium y S durans).
También se ha demostrado, in vitro, aumento del efecto bactericida frente a muchas
de estas cepas, con asociaciones de gentamicina y ampicilina, carbenicilina, nafcilina y
oxacilina.
El efecto combinado de gentamicina y carbenicilina es sinérgico para muchas cepas
de Pseudomonas aeruginosa. Se ha demostrado también el sinergismo in vitro
frente a otros organismos gramnegativos con asociaciones de gentamicina y
cefalosporinas.
La concentración bactericida de la gentamicina es generalmente una a cuatro veces
mayor que su concentración inhibitoria mínima. Se ha comprobado que la gentamicina
es ocho veces más activa in vitro a un pH de 7.5 que a uno de 5.5 frente a varios
patógenos comunes de vías urinarias.
La gentamicina puede ser activa frente a cepas de bacterias aisladas en la clínica que
son resistentes a otros aminoglucósidos. Las bacterias resistentes a un aminoglucósido
pueden ser resistentes a uno o más aminoglucósidos.
La resistencia bacteriana a la gentamicina aparece lentamente y en forma escalonada;
no se han observado mutaciones altamente resistentes en una sola etapa.
Pruebas de sensibilidad: Si el método de susceptibilidad  con disco es el descrito por
Bauer et. al. (Am. J. Clin. Pathol. 45:493, 1966; Federal Register 37: 20527-20529,
1972), un disco de 10 mcg de gentamicina debería producir una zona de inhibición de
13 mm o más para indicar la susceptibilidad del organismo infectante. Una zona de 12
mm o menos indica que el organismo es probablemente resistente. En ciertas
circunstancias puede ser deseable efectuar pruebas de sensibilidad adicionales por el
método de dilución en tubo o en agar.
Gentamicina no se absorbe en forma adecuada al administrarse por vía oral. Cuando
se administra por vía intramuscular se alcanzan niveles séricos adecuados en 30 a 60
minutos. Se requiere una dosis relativamente alta de gentamicina para el tratamiento
de infecciones sistémicas causadas por cocos gramnegativos. Una dosis de 80 mg cada
8 horas usualmente produce niveles séricos pico de 4 a 6 mg/lt., en la mayoría de los
adultos. Las dosis de mantenimiento varían considerablemente en diferentes pacientes,
algunas variables conocidas incluyen función renal y edad. Las personas con adicción a
fármacos narcóticos requieren dosis mayores de gentamicina. La dosis debe ser
modificada en pacientes con falla renal.
La vida media plasmática en adultos es de 1 a 4 horas; en neonatos de 2.3 a 3.3
horas; en infantes mayores de 20 meses de 1.5 a 2.5 horas y en niños mayores es de
1 hora aproximadamente. En pacientes con enfermedad renal avanzada, se incrementa
hasta alrededor de 35 horas. La depuración renal en sujetos normales es de 60
ml/min. Los primeros días de tratamiento, la excreción se retrasa y solo se puede
recuperar 40% del fármaco administrado en la orina, posteriormente aumenta a 80%.
Una pequeña cantidad del fármaco es excretada por la bilis y no hay evidencia de
circulación entero-hepática. La gentamicina permanece en los tejidos por largo tiempo.
Las concentraciones de gentamicina decrecen en forma bifásica posterior a la última
dosis administrada. Hay una disminución rápida inicialmente y después una fase lenta
por lo que se pueden mediar niveles séricos hasta 10 días o más después de la última
dosis administrada.
La gentamicina se reabsorbe de la luz de los túbulos proximales en donde se alcanzan
niveles corticales hasta 100 veces mayores que en suero. La gentamicina se distribuye
a través de todo el cuerpo, principalmente a nivel extracelular con un volumen de
distribución de 0.2 lt./kg. La unión de gentamicina a proteínas plasmáticas es baja,
aproximadamente de 0 a 25% y se incrementa cuando disminuyen las concentraciones
de calcio y magnesio, por lo tanto la unión  a proteínas no es farmacológicamente
importante, pero un aumento de esta unión puede ocurrir en ciertas condiciones
patológicas.
Las concentraciones en líquido cefalorraquideo son muy bajas cuando las meninges no
están inflamadas. La difusión a los ojos es pobre. Los niveles en líquido pleural,
pericardio y en ascitis es usualmente la mitad de los séricos. La gentamicina penetra
bien al líquido sinovial incluso en ausencia de infección, alcanzando niveles que
exceden 50% de los séricos.
Los niveles de gentamicina a nivel de secreciones bronquiales son 25 a 50% de los
niveles séricos. La gentamicina atraviesa la barrera placentaria y alcanza niveles de 30
a 40% a nivel del cordón umbilical con respecto a los niveles séricos maternos. Penetra
a los eritrocitos y a los polimorfonuclerares alcanzando niveles de 10 y 80%,
respectivamente con relación a los séricos. Las mayores concentraciones de
gentamicina se encuentran en el riñón. La gentamicina se distribuye también en
corazón, hígado y tejido linfático en concentraciones similares a las séricas. Se
encuentra también a nivel de perilinfa y endolinfa en el oído interno. Se encuentra en
leche materna en cantidades mínimas. Se excreta en orina sin cambios con una
recuperación hasta de 80% del fármaco después de 24 horas de administrada la dosis.
La enfermedad hepática no altera la cinética del fármaco.

CONTRAINDICACIONES:

Antecedentes de hipersensibilidad o reacciones tóxicas graves a la gentamicina u otros


aminoglucósidos.

PRECAUCIONES GENERALES:

Los enfermos tratados con aminoglucósidos deberán estar bajo observación clínica
estrecha debido a la posible toxicidad asociada con su uso.
Se recomienda la vigilancia de las funciones renal y del octavo nervio craneal durante
el tratamiento, particularmente en enfermos con insuficiencia renal previa. El riesgo de
nefrotoxicidad es mayor en enfermos con insuficiencia renal y en aquellos que reciben
dosis elevadas o un tratamiento prolongado. Adicionalmente, la ototoxicidad tanto
vestibular como auditiva se puede presentar en los pacientes tratados con
gentamicina, principalmente en aquellos con daño renal y en los pacientes con función
renal normal tratados con dosis elevadas y/o durante períodos más largo de lo
recomendado. La orina debe examinarse para determinar si hay variación de la
densidad, aumento en la excreción de proteínas, o presencia de células o cilindros.
Debe determinarse periódicamente el nitrógeno ureico en sangre, la creatinina sérica o
la depuración de creatinina. Los signos de ototoxicidad (mareo, vértigo, tinnitus,
zumbido de oídos y pérdida de la audición) o de nefrotoxicidad requieren modificación
de la dosis o suspensión del antibiótico.
Al igual que con otros aminoglucósidos, puede ser que en raras ocasiones no se
manifiesten cambios en la función renal o en el octavo nervio craneal, sino hasta
terminar el tratamiento.
Las concentraciones séricas de los aminoglucósidos deben determinarse siempre que
sea posible para asegurar niveles adecuados y al mismo tiempo evitar concentraciones
potencialmente tóxicas. Durante la observación de las concentraciones máximas de
gentamicina, deben evitarse niveles prolongados por encima de los 12 mcg/ml. Cuando
se determinen las concentraciones residuales séricas de gentamicina, se debe ajustar
la dosis para evitar los niveles por encima de 2 mcg/ml. Las concentraciones séricas
máximas de aminoglucósidos pueden incrementar el riesgo de toxicidad renal y del
octavo nervio craneal.
En pacientes con quemaduras extensas, las alteraciones farmacocinéticas pueden
producir una disminución de la concentración sérica de los aminoglucósidos. En estos
pacientes tratados con gentamicina, se recomienda determinar la concentración sérica
como base para el ajuste de la dosis.
Debe evitarse el uso sistémico o tópico concomitante y/secuencial de otros
medicamentos neurotóxicos y/o nefrotóxicos, como cisplatino, cefaloridina,
kanamicina, amikacina, tobramicina, vancomicina y viomicina. Otros factores que
pueden aumentar el riesgo de toxicidad son la edad avanzada y la deshidratación.
El uso concomitante de gentamicina con diuréticos potentes, como el ácido etacrínico o
la furosemida debe evitarse ya  que estos diuréticos son potencialmente ototóxicos.
Además, cuando se administran por vía intravenosa, los diuréticos pueden
potencializar la toxicidad del aminoglucósido alterando la concentración del antibiótico
en el plasma y en los tejidos.
Los antibióticos neuro y nefrotóxicos pueden absorberse de la superficie corporal
después de aplicaciones o irrigaciones locales. El efecto tóxico potencial de estos
antibióticos administrados en esta forma debe tomarse en consideración.
Los pacientes que reciben más de 7 a 10 días de GARAMICINA ® para el tratamiento de
infecciones serias o que tienen que ser tratados con dosis mayores a las recomendadas
de acuerdo a la edad o a la función renal estimada; debe de ser sometido a valoración
de la función renal y de los electrolitos séricos con cierta periodicidad durante el
tratamiento.
Se ha reportado un aumento de la nefrotoxicidad después del uso concomitante de los
aminoglucósidos y algunas cefalosporinas.
Se ha observado bloqueo neuromuscular y parálisis respiratoria en el gato con dosis
elevadas de gentamicina (40 mg/kg). La posibilidad de estas complicaciones debe
considerarse en el hombre si la gentamicina se administra a enfermos que reciben
bloqueadores neuromusculares, como la succinilcolina o la tubocurarina. Si ocurre
bloqueo, las sales de calcio pueden contrarrestar estas complicaciones.
Los aminoglucósidos deben usarse con precaución en pacientes con trastornos
neuromusculares como miastenia gravis, enfermedad de Parkinson o botulismo infantil,
ya que estos medicamentos teóricamente pueden agravar la debilidad muscular debido
a sus potentes efectos curariformes en al unión neuromuscular.
Los enfermos ancianos pueden tener cierto grado de insuficiencia renal que puede no
manifestarse en los exámenes de laboratorio de rutina, como BUN o la creatinina
sérica. La depuración de creatinina es un examen más específico. La observación  de la
función renal durante el tratamiento con gentamicina, como con otros
aminoglucósidos, es particularmente importante en dichos enfermos.
Se han recibido informes de casos con un síndrome similar al de Fançoni, con acidosis
metabólica y aminoaciduria en algunos adultos y lactantes tratados con gentamicina.
Se ha demostrado alergenicidad cruzada entre los aminoglucósidos. Los pacientes
deberán estar bien hidratados durante el tratamiento.
La mezcla in vitro de un aminoglucósido con un antibiótico β-lactámico (penicilinas o
cefalosporinas) puede producir inactivación significativa mutua. Aún cuando los
aminoglucósidos y el fármaco tipo penicilina se administren en forma separada por
diferentes vías, se ha reportado reducción en la vida media sérica y de los niveles
séricos de los aminoglucósidos en pacientes con insuficiencia renal y en algunos
pacientes con función renal normal.
Aún cuando la mezcla in vitro de gentamicina y carbenicilina produce inactivación
rápida y significativa de la gentamicina, esta interacción no se ha demostrado en
enfermos con función renal normal que han recibido los dos antibióticos por vías
diferentes de administración. Se ha reportado reducción de la vida media sérica de la
gentamicina en enfermos con insuficiencia renal grave que han recibido carbenicilina
asociada. Generalmente esta inactivación de los aminoglucósidos es clínicamente
significativa solo en los pacientes con insuficiencia renal severa. El tratamiento con
gentamicina puede dar como resultado la proliferación de gérmenes no susceptibles. Si
esto se presenta, se deberá administrar el tratamiento adecuado.
La cantidad de gentamicina liberada que se administra mediante inhalación, puede
variar de acuerdo al tipo de equipo empleado y a las condiciones bajo las cuales opera.
El empleo de la vía inhalatoria en forma concomitante con la administración sistémica
de un aminoglucósido puede producir concentraciones plasmáticas más elevadas,
especialmente cuando se emplea la vía endotraqueal directa.
La gentamicina inyectable contiene bisulfito de sodio, un sulfito que puede causar
reacciones alérgicas, incluyendo síntomas anafilácticos que pongan en riesgo la vida, o
crisis asmáticas de menor gravedad en personas susceptibles. La sensibilidad al sulfito
se observa con mayor frecuencia en personas asmáticas.
Se ha reportado en muy raras ocasiones la aparición de síndrome de Stevens-Jonhson
y de necrólisis epidérmica tóxica con el uso de aminoglucósidos, incluyendo la
gentamicina.

RESTRICCIONES DE USO DURANTE EL EMBARAZO Y LA


LACTANCIA:

Los antibióticos aminoglucósidos atraviesan la placenta y pueden ocasionar daño fetal


si se administran a mujeres embarazadas. Se han recibido informes de sordera
congénita bilateral irreversible en niños cuyas madres recibieron aminoglucósidos, con
inclusión de gentamicina, durante el embarazo. Si la gentamicina se administra
durante el embarazo o si la paciente queda embarazada mientras recibe tratamiento
con gentamicina, debe advertírsele sobre el peligro potencial para el feto.
En las mujeres que están amamantando, la gentamicina es excretada en la leche
materna en un grado mínimo. Debido al potencial de reacciones adversas graves
causadas por los aminoglucósidos en lactantes, se debe evaluar la decisión de
suspender la lactancia o bien el tratamiento, en consideración de la importancia del
medicamento para la madre.

REACCIONES SECUNDARIAS Y ADVERSAS:

Nefrotoxicidad: Se ha reportado la presencia de efectos renales adversos como la


presencia de cristales, células o proteínas en orina o la elevación de las cifras de
nitrógeno ureico (BUN), de nitrógeno no proteico, de creatinina sérica y oliguria.
Los pacientes ancianos y en edad pediátrica pueden ser particularmente susceptibles, y
se debe de realizar un monitoreo de la función renal estrecho. Una cuantificación basal
y un seguimiento de la función renal y de los electrolitos séricos es recomendable en
los pacientes que reciben terapia prolongada, (por ejemplo, más de 7 a 10 días) con
gentamicina o que han sido tratados con dosis mayores a las recomendadas de
acuerdo a la edad, peso, o función renal estimada.
Neurotoxicidad: Se han reportado efectos adversos sobre las ramas auditivas y
vestibular del octavo nervio craneal, principalmente en enfermos con insuficiencia renal
y en sujetos tratados con dosis elevadas y/o por tiempo prolongado. Entre los
síntomas se incluyen mareos, vértigo, tinnitus, zumbido de oídos y pérdida de la
audición. Generalmente, cuando se inicia la pérdida de la audición se manifiesta por
disminución de la agudeza auditiva de las tonalidades altas y puede ser irreversible. Al
igual que con otros aminoglucósidos, las anormalidades vestibulares pueden ser
irreversibles. Otros factores que pueden incrementar el riesgo de ototoxicidad inducida
por el uso de aminoglucósidos incluyen, la deshidratación, administración combinada
con ácido etacrínico o furosemida y el uso de otros medicamentos ototóxicos.
También se han reportado casos de disminución de la sensibilidad cutánea, hormigueo
de la piel, espasmos musculares, convulsiones y un síndrome similar a la miastenia
gravis.
Nota: El riesgo de reacciones tóxicas  es muy bajo en pacientes con función renal
normal que no reciben gentamicina inyectable en dosis más elevadas o durante
períodos de tiempo más largos de lo recomendado.
Otros efectos secundarios posiblemente relacionados con la gentamicina, incluyen:
Depresión respiratoria, letargo, confusión, depresión, trastornos visuales, disminución
del apetito, pérdida de peso, hipotensión e hipertensión, erupciones cutáneas, prurito,
urticaria, ardor generalizado, edema laríngeo, reacciones anafilactoides, fiebre,
cefalea, náusea, vómito, aumento de la salivación y estomatitis, púrpura, pseudotumor
cerebral, fibrosis pulmonar, alopecia, dolores articulares, hepatomegalia transitoria y
esplenomegalia.
Aún cuando la tolerancia local de la gentamicina inyectable generalmente es excelente,
se ha reportado ocasionalmente dolor en el sitio de la inyección. La atrofia subcutánea
o la necrosis grasa que sugiere irritación local, se ha reportado muy rara vez.

INTERACCIONES MEDICAMENTOSAS Y DE OTRO GENERO:

Se han observado interacciones medicamentosas con altas dosis de metrotexato,


ifosfamida pentamidina, foscarnet, algunos antivirales como (aciclovir, ganciclovir,
adefovir, cidofovir, tenovir), amfotericina B, inmunosupresores como ciclosporina, o
tacrolimus y medio de contraste iodado.

ALTERACIONES EN LOS RESULTADOS DE PRUEBAS DE


LABORATORIO:

Las anormalidades de laboratorio posiblemente relacionadas con la gentamicina


incluyen: elevación de las transaminasas séricas (TGO, TGP), de la deshidrogenasa
láctica (DHL) y de la bilirrubina; disminución de calcio, sodio y potasio; anemia,
leucopenia, granulocitopenia, agranulocitosis transitoria, aumento y disminución del
número de reticulocitos, trombocitopenia. Si bien las anormalidades en las pruebas de
laboratorio pueden ser hallazgos aislados, también pueden estar asociados a los signos
y síntomas clínicos.

PRECAUCIONES EN RELACION CON EFECTOS DE


CARCINOGENESIS, MUTAGENESIS, TERATOGENESIS Y SOBRE LA
FERTILIDAD:

No se han reportado a la fecha.

DOSIS Y VIA DE ADMINISTRACION:

GARAMICINA® Solución inyectable puede administrarse por vía intramuscular o


intravenosa, la dosis recomendada es idéntica. La vía endovenosa generalmente se
reserva para indicaciones especiales (ver Administración endovenosa).
GARAMICINA® Solución inyectable también puede administrarse por vía subconjuntival
o por inyección subcapsular (cápsula de Ténon), por nebulización o instilación
endotraqueal directa. Debe obtenerse el peso corporal del paciente antes de iniciar el
tratamiento con objeto de calcular la dosis correcta.
GARAMICINA® Solución inyectable no deberá pre-mezclarse con otros medicamentos,
se debe administrar por separado de acuerdo con la vía de administración
recomendada y el esquema de dosificación.
Se recomienda determinar la concentración sérica de gentamicina para asegurar
niveles adecuados, pero no excesivos. Después de la administración intravenosa o
intramuscular de gentamicina dos o tres veces al día, la concentración máxima medida
30 minutos a 1 hora después, se espera que esté en el rango de 4 a 6 mcg/ml. Con la
administración de una dosis diaria pueden anticiparse concentraciones pico elevadas,
transitorias. Con todos los esquemas, la dosis deberá ajustarse para evitar
concentraciones prolongadas por encima de 12 mcg/ml. También deben evitarse
niveles máximos mayores de 2 mcg/ml, medidos antes de la administración de la
siguiente dosis. Para determinar que un nivel sérico es adecuado para un paciente en
particular, se debe considerar la sensibilidad de germen causal, la severidad de la
infección y el estado inmunológico del paciente.
La duración del tratamiento para todos los pacientes, generalmente es de 7 a 10 días.
En infecciones con complicaciones puede requerirse un período más largo de terapia.
En estos casos, se recomienda vigilar la función renal, auditiva y vestibular, ya que es
más factible que la toxicidad pueda aparecer cuando el tratamiento se prolonga por
más de 10 días. La dosificación debe reducirse si está indicado clínicamente.
Administración intramuscular en pacientes con función renal normal:
Adultos: La dosificación recomendada de GARAMICINA® Solución inyectable para
enfermos con infecciones graves y función renal normal es de 3 mg/kg/día,
administrados en tres dosis iguales cada 8 horas, o en dos dosis iguales cada 12 horas,
o en una dosis diaria.
Puede utilizarse la dosificación simplificada que sigue para enfermos que pesan más de
60 kg: 80 mg (2 ml) tres veces al día, 1 dosis de 120 mg cada 12 horas; para
enfermos que pesan 60 kg o menos, 60 mg (1.5 ml) tres veces al día. Para adultos
muy pequeños o muy grandes, la dosis debe calcularse en miligramos por kg de peso
corporal.
A enfermos con infecciones que amenazan la vida puede administrárseles una dosis
hasta de 5 mg/kg/día repartidos en tres o cuatro dosis iguales. Esta dosificación
deberá reducirse a 3 mg/kg/día tan pronto como esté indicado clínicamente. En estos
enfermos es aconsejable determinar la concentración sérica del antibiótico para
asegurar las concentraciones adecuadas, pero no excesivas. Generalmente, la
concentración máxima a esperar con esta dosis fluctúa entre 4 y 6 mcg/ml. La
determinación de una concentración sérica adecuada en un paciente dado debe tener
en cuenta la sensibilidad del germen causal, la gravedad de la infección y el estado de
los mecanismos inmunológicos del paciente.
Cuando las infecciones sistémicas o urinarias son de gravedad moderada y el germen
causal es probablemente muy sensible, puede considerarse una posología de 2
mg/kg/día administrados en dos dosis iguales o una vez al día. Sin embargo, si la
respuesta clínica no se hace aparente rápidamente, la posología deberá aumentarse a
3 mg/kg/día administrados en tres dosis iguales.
GARAMICINA® Solución inyectable alcanza concentraciones elevadas en la orina y en el
tejido renal. En enfermos con infecciones urinarias, particularmente si son crónicas o
recurrentes y sin evidencia de insuficiencia renal, que pesen 50 kg o más, se puede
administrar GARAMICINA® Solución inyectable en una dosis de 160 mg por vía
intramuscular, diariamente por 7 a 10 días. Para adultos que pesen menos de 50 kg, la
dosis diaria única deberá ser de 3 mg/kg de peso corporal.
En enfermos con sospecha de insuficiencia renal, se deben practicar determinaciones
de nitrógeno ureico (BUN) y de creatinina sérica antes y durante el tratamiento. El
intervalo entre las inyecciones deberá determinarse sobre la base de los resultados de
BUN, la creatinina sérica y/o depuración de creatinina (ver Guía de Enfermos con
Insuficiencia Renal).
Pacientes pediátricos: Prematuros o recién nacidos de 1 semana o menos: 5 a 6
mg/kg/día (2.5 a 3 mg/kg cada 12 horas).
Recién nacidos de más de 1 semana y lactantes: 7.5 /kg/día (2.5 mg/kg
administrados cada 8 horas).
Niños: 6 a 7.5 mg/kg/día (2.0 a 2.5 mg/kg administrados cada 8 horas).
Para información adicional en relación con el uso de gentamicina en lactantes y niños,
favor de comunicarse a la Dirección Médica de Schering-Plough, SA de CV.
Enfermos con insuficiencia renal: La posología debe modificarse en enfermos con
insuficiencia renal. Las concentraciones plasmáticas de gentamicina deben
determinarse siempre que sea posible. Un método para ajustar la dosificación consiste
en aumentar el intervalo entre las dosis usuales. Como la creatinina sérica tiene una
alta correlación con la vida media plasmática de la gentamicina, ésta prueba de
laboratorio puede proporcionar una guía para ajustar el intervalo entre las dosis.
La vida media en plasma (en horas) de la gentamicina puede calcularse multiplicando
la creatinina sérica (expresada en mg) por 4. El intervalo entre la dosis (en horas)
puede estimarse aproximadamente, multiplicando la creatinina sérica por 8 (Tabla 1).
Por ejemplo: un enfermo que pese 60 kg con una creatinina sérica de 2.0 mg puede
recibir 60 mg (1 mg/kg cada 16 horas (2.0 mg x 8).
Tabla 1. Guía para la modificación de la posología en enfermos con
insuficiencia renal
(se prolonga el intervalo de administración entre dosis usuales)
Indice de
Peso
depuración Nitrógeno
corporal de Creatinina Frecuencia de
Dosis de ureico
enfermos (mg) administración
creatinina (mg)
adultos
(ml/in)
Más de 60 kg 80 mg (2 Más de 70 Menos de Menos de Cada 8 horas
ml) 35 a 70 1.4 18 Cada 12 horas
24 a 34 1.4 a 1.9 18 a 29 Cada 18 horas
16 a 23 2.0 a 2.8 30 a 39 Cada 24 horas
10 a 15 2.9 a 3.7 40 a 49 Cada 36 horas
5a9 3.8 a 5.3  50 a 74 Cada 48 horas
5.4 a 7.2 75 a 100
60 kg o 60 mg Igual a la anterior
menos (1.5 ml)
En enfermos con infecciones sistémicas graves e insuficiencia renal, puede ser
aconsejable administrar el antibiótico más frecuentemente pero en dosis reducidas.
En dichos sujetos deben determinarse las concentraciones plasmáticas de gentamicina
para lograr la concentración adecuada, pero no excesiva. La determinación de las
concentraciones máximas en forma intermitente durante el tratamiento, proporciona
una guía para ajustar la posología. Después de la dosis inicial usual puede hacerse un
cálculo aproximado para determinar la dosis reducida que debe administrase a
intervalos de 8 horas, dividiendo la dosis normalmente recomendada por el nivel de
creatinina en suero (Tabla 2). Por ejemplo, después de una dosis inicial de 60 mg (1
mg/kg), un enfermo que pese 60 kg con una creatinina sérica de 2.0 mg/% puede
recibir 30 mg cada 8 horas (60 a 2). Debe notarse que el estado de la función renal
puede cambiar durante el curso del proceso infeccioso.
Tabla 2. Guía para la modificación de la
posología
en enfermos con insuficiencia renal
(dosis reducida a intervalos de 8 horas
después de la dosis inicial usual)
Indice aproximado
Creatinina de Porcentaje de
sérica depuración de la
(mg) creatinina dosis usual
(ml/min/1.73 m)
1.0 100 100
1.1 a 1.3 70 a 100 80
1.4 a 1.6 55 a 70 65
1.7 a 1.9 45 a 55 55
2.0 a 2.2 40 a 45 50
2.3 a 2.5 35 a 40 40
2.6 a 3.0 30 a 35 35
3.1 a 3.5 25 a 30 30
3.6 a 4.0 20 a 25 25
4.1 a 5.1 15 a 20 20
5.2 a 6.6 10 a 15 15
6.7 a 8.0 10 10
En adultos con insuficiencia renal sometidos a hemodiálisis, la cantidad de gentamicina
depurada de la sangre puede variar dependiendo de varios factores, inclusive el
método de diálisis empleado. Una hemodiálisis de ocho horas puede reducir las
concentraciones plasmáticas de gentamicina aproximadamente en 50%. La dosificación
recomendada al final de cada período de diálisis es de 1 a 1.7 mg/kg dependiendo de
la gravedad de la infección. En niños puede administrarse una dosis de 2 a 2.5 mg/kg.
Los esquemas posológicos descritos no deben considerarse como recomendaciones
rígidas, sino solamente como guías para la dosificación cuando no es posible
determinar la concentración plasmática de gentamicina. Estas guías deberían usarse
junto con la observación clínica y de laboratorio del paciente y modificarse de acuerdo
al criterio del médico de cabecera.
Administración intravenosa: La administración intravenosa de gentamicina puede
ser particularmente útil en el tratamiento de enfermos con septicemia o en choque.
También puede ser la vía de administración preferida para algunos enfermos con
quemaduras graves o de aquellos con masa muscular reducida.
Para la administración intravenosa en adultos, una dosis única de
GARAMICINA® Solución inyectable puede diluirse en 50 a 200 ml de solución salina
normal estéril o en una solución estéril de dextrosa en agua al 5%, en lactantes y
niños el volumen de diluyente debe ser menor. La solución puede administrarse por
infusión durante un período de media a dos horas.
Una dosis única de GARAMICINA® Solución inyectable sin diluir puede también
administrarse directamente en la vena o en el catéter, lentamente en un período de
media a dos horas.
Cuando se administra GARAMICINA® Solución inyectable por infusión intravenosa en
un período de media a dos horas, los niveles plasmáticos máximos se alcanzan 10
minutos después de terminar la infusión. Cuando se inyecta lentamente en forma
directa en la vena o en el catéter en un período de 2 a 3 minutos, los niveles
plasmáticos máximos, generalmente más altos que los obtenidos con la administración
IM, se alcanzan inmediatamente después de la inyección.
La dosificación recomendada para la administración intravenosa e intramuscular es la
misma.
Administración subconjuntival y subcapsular: GARAMICINA® por inyección
subconjuntival se ha empleado con seguridad y eficacia en la clínica, para el
tratamiento de las infecciones bacterianas oculares profundas y graves producidas por
organismos susceptibles. También se ha empleado eficazmente en asociación con
penicilina, antes y después de cirugía ocular, siempre que se encuentre presente o se
sospeche infección bacteriana.
Las inyecciones subconjuntivales y subcapsulares (cápsula de Ténon) deberán
administrarse únicamente por expertos en su aplicación. La dosis usual de
GARAMICINA® varía de 10 a 20 mg, dependiendo de la gravedad de la infección ocular.
La dosis apropiada se llena en una jeringuilla de tuberculina usando una aguja calibre
27 a 30 y se inyecta bajo asepsia por debajo de la conjuntiva o dentro de la cápsula de
Ténon después de la instilación de un anestésico tópico. La dosis puede repetirse
después de 24 horas si es necesario.
Tratamiento por inhalación: El tratamiento por inhalación de gentamicina, como
coadyuvante de la administración sistémica en el tratamiento de las infecciones
pulmonares graves, puede lograrse por nebulización o por inyección endotraqueal
directa. La dosis usual es de 20 a 40 mg administrada cada 8 a 12 horas, diluida en
solución salina fisiológica en un volumen de 2 ml.
Esquema posológico específico para uretritis gonocóccica masculina y femenina:
GARAMICINA® administrada por vía intramuscular en dosis única de 240 a 280 mg ha
sido eficaz en el tratamiento de la Gonorrea (incluyendo infecciones causadas por
cepas resistentes a la penicilina y otros antibióticos) en el hombre, e infecciones
gonocóccicas localizadas en el tracto genital de la mujer.
Si se emplea GARAMICINA® Solución inyectable regular (40 mg/ml) se recomienda
inyectar la mitad de la dosis en cada nalga.
Tratamiento combinado: Cuando GARAMICINA® se asocia a otros antibióticos, no
debe reducirse la dosificación.
Modo de empleo de GARAMICINA® Hypak:
1. Abra el estuche por su base.

Buscapina

Composición cualitativa y cuantitativa de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg


Una ampolla contiene:
N-butilbromuro de hioscina 20 mg
Para consultar la lista completa de excipientes, ver sección Lista de excipientes.

  Forma farmacéutica de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg


Solución inyectable.
Es una solución clara, desde incolora a casi incolora

  Datos clínicos 
Indicaciones terapéuticas de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg

Espasmos agudos del tracto gastrointestinal, biliar y genitourinario, incluyendo cólico biliar y renal.
Coadyuvante en aquellos procesos de diagnóstico y terapéutica en los que el espasmo puede suponer un
problema, como la endoscopia gastro-duodenal y la radiología.

  Datos clínicos 
Posología de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg

Adultos y adolescentes mayores de 12 años:


1- 2 ampollas (20- 40 mg) mediante inyección intravenosa lenta, intramuscular o subcutánea, varias veces al
día.
La dosis diaria máxima no debe sobrepasar los 100 mg.
Niños y lactantes:
En casos graves: 0,3-0,6 mg/kg de peso corporal, administrados mediante inyección intravenosa lenta,
intramuscular o subcutánea, varias veces al día.
La dosis diaria máxima no debe sobrepasar 1,5 mg/ kg de peso corporal.
La duración óptima del tratamiento sintomático depende de la indicación, recomendándose para tratamientos
a corto plazo.
No se requiere ajuste de las dosis en pacientes con insuficiencia renal y/o hepática.

  Datos clínicos 
Contraindicaciones de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg

Hipersensibilidad al principio activo o a alguno de los excipientes.


Buscapina solución inyectable no debe administrarse en las siguientes situaciones:
Glaucoma de ángulo estrecho no tratado, hipertrofia prostática, retención urinaria por cualquier patología
uretro-prostática, estenosis mecánicas del tracto gastrointestinal, estenosis de píloro, íleo paralítico,
taquicardia, megacolon, miastenia grave.
Buscapina solución inyectable no debe aplicarse por inyección intramuscular en pacientes que están siendo
tratados con medicamentos anticoagulantes puesto que pueden producirse hematomas intramusculares. En
estos pacientes, se debe aplicar vía subcutánea o intravenosa.

  Datos clínicos 
Advertencias y precauciones de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg

Debido al riesgo potencial de complicaciones anticolinérgicas debe administrarse con precaución en pacientes
susceptibles de padecer glaucoma de ángulo estrecho, taquicardia, obstrucciones intestinales o urinarias, así
como en caso de hipertrofia prostática con retención urinaria.
La administración de Buscapina a pacientes con glaucoma de ángulo abierto no diagnosticado y no tratado
puede producir elevación de la presión intraocular. Por esta razón, se debe advertir al paciente que si presenta
después de la inyección de Buscapina un ojo rojo, doloroso, con pérdida de visión debe acudir inmediatamente
al oftalmólogo.
Tras la administración parenteral de Buscapina, se han observado casos de anafilaxis incluyendo episodios de
shock. Como con todos los medicamentos que producen este tipo de reacciones, los pacientes a los que se les
administre Buscapina solución inyectable deberán mantenerse bajo observación.
  Datos clínicos 
Interacciones de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg

Puede potenciar el efecto anticolinérgico de medicamentos como los antidepresivos tricíclicos, antihistamínicos,
quinidina, amantadina, disopiramida y otros anticolinérgicos (por ejemplo tiotropio, ipratropio)
El tratamiento concomitante con antagonistas dopaminérgicos tales como la metoclopramida, puede dar como
resultado la disminución del efecto de ambos fármacos sobre el tracto gastrointestinal.
Puede potenciar los efectos taquicárdicos de los fármacos beta-adrenérgicos y alterar el efecto de otros
fármacos, como la digoxina.

  Datos clínicos 
Embarazo y lactancia de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg

A pesar de la amplia experiencia disponible, no se puede descartar un efecto nocivo durante el embarazo en
humanos. Estudios preclínicos en ratas y conejos no han mostrado efectos embriotóxicos ni teratogénicos.
Debe procederse con precaución al utilizarse durante el embarazo, en especial durante el primer trimestre.
La Buscapina, como el resto de anticolinérgicos, puede inhibir la secreción de leche. Es poco probable que se
excrete en la leche materna debido a su baja liposolubilidad.

  Datos clínicos 
Efectos sobre la capacidad de conducir de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg

Debido a los trastornos de la acomodación visual los pacientes no deben conducir ni utilizar maquinaria tras la
administración parenteral de Buscapina solución inyectable hasta que la visión se normalice.

  Datos clínicos 
Reacciones adversas de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg

Muchas de las reacciones adversas pueden ser asociadas a las propiedades anticolinérgicas de Buscapina
solución inyectable, que por lo general son leves y autolimitadas.
Las reacciones adversas se presentan en orden decreciente de gravedad dentro de cada intervalo de
frecuencia.
Trastornos del sistema inmunológico:
Frecuencia no conocida (no puede estimarse a partir de los datos disponibles):
Hipersensibilidad, reacciones anafilácticas, shock anafiláctico (con posible desenlace letal), disnea, reacciones
cutáneas.
Trastornos oculares:
Frecuentes (≥1/100, < 1/10): trastornos de acomodación
Trastornos cardíacos:
Frecuentes (≥1/100, < 1/10): taquicardia
Trastornos vasculares:
Frecuentes (≥1/100, < 1/10): mareo
Frecuencia no conocida (no puede estimarse a partir de los datos disponibles): Disminución de la presión
arterial y rubor.
Trastornos gastrointestinales:
Frecuentes (≥1/100, < 1/10): sequedad de boca.
Transtornos de de la piel y del tejido subcutáneo:
Frecuencia no conocida (no puede estimarse a partir de los datos disponibles): disidrosis
Trastornos renales y urinarios:
Frecuencia no conocida (no puede estimarse a partir de los datos disponibles): retención urinaria

  Datos clínicos 
Sobredosificación de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg

Síntomas
En caso de sobredosificación pueden presentarse síntomas anticolinérgicos, tales como retención urinaria,
sequedad de boca, rubefacción cutánea, taquicardia, inhibición de la motilidad gastrointestinal y trastornos
pasajeros de la visión.
Tratamiento
Si fuera necesario, pueden administrarse parasimpaticomiméticos. Los pacientes deben consultar
urgentemente a un oftalmólogo en caso de glaucoma. Las complicaciones cardiovasculares deben tratarse de
acuerdo con las medidas terapéuticas habituales. Si se produce parálisis respiratoria, se practicará intubación y
respiración artificial. Sondar en caso de retención urinaria.
Además, se aplicarán las medidas de soporte adecuadas, que sean necesarias.

  Propiedades farmacológicas 
Propiedades farmacodinámicas de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg

Grupo farmacoterapéutico: Alcaloides semisintéticos de la Belladona, compuestos de amonio cuaternario,


código ATC: AO3BB01.
Buscapina ejerce una acción espasmolítica sobre el músculo liso de los tractos gastrointestinal, biliar y génito-
urinario. Debido a su estructura de derivado de amonio cuaternario, el N-butilbromuro de hioscina no pasa al
sistema nervioso central y en consecuencia no se presentan efectos secundarios anticolinérgicos a nivel del
sistema nervioso central. Puede aparecer una acción anticolinérgica periférica como resultado de una acción
bloqueadora ganglionar a nivel de la pared visceral así como de una actividad anti-muscarínica.
  Propiedades farmacológicas 
Propiedades farmacocinéticas de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg

Tras la administración intravenosa, el N-butilbromuro de hioscina se distribuye a los tejidos rápidamente


(t1/2= 4 min, t1/2= 29 min). El volumen de distribución (Vss) es de 128 l (equivalente a aprox. 1,7 l/kg).
El tiempo de vida media de la fase de eliminación terminal (t1/2γ) es de aprox. 5 horas. El aclaramiento total
es de 1,2 l/min, siendo renal aprox. la mitad. Los principales metabolitos encontrados en la orina se unen muy
poco al receptor muscarínico.
La concentración más elevada de N-butilbromuro de hioscina en la rata, se encuentra en el tejido del tracto
gastrointestinal, hígado y riñones. El N-butilbromuro de hioscina no atraviesa la barrera hematoencefálica.
La unión del N-butilbromuro de hioscina a proteínas plasmáticas es baja.

  Propiedades farmacológicas 
Datos preclínicos de seguridad de BUSCAPINA Sol. iny. 20 mg

El N-butilbromuro de hioscina tiene un bajo índice de toxicidad aguda: los valores de la DL50 oral fueron en
ratones de 1000 a 3000 mg/kg, en ratas 1040-3300 mg/kg y 600 mg/kg en perros. Los signos de toxicidad
fueron ataxia y disminución del tono muscular, adicionalmente en el ratón temblor y convulsiones, en el perro
midriasis, taquicardia y sequedad de las membranas mucosas. En 24 horas se produjeron muertes por parada
respiratoria. Los valores de la DL50 por vía intravenosa fueron 10-23 mg/kg en ratones y 18 mg/kg en ratas.
Con dosis orales repetidas, en estudios de más de 4 semanas, las ratas toleraron 500 mg/kg sin observarse
efectos adversos. A 2000 mg/kg, el butilbromuro de hioscina paralizó la función gastrointestinal dando lugar a
estreñimiento, por acción sobre el ganglio parasimpático del área visceral. Fallecieron 11 de 50 ratas. La
hematología y los resultados bioquímicos no sufrieron variaciones relacionadas con la dosis.
Las ratas toleraron 200 mg/kg a lo largo de 26 semanas, mientras que a 250 y 1000 mg/kg se produjeron
muertes por depresión de la función gastrointestinal.
Una dosis intravenosa repetida de 1 mg/kg fue bien tolerada por las ratas en un estudio de 4 semanas. A dosis
de 3 mg/kg, inmediatamente aparecieron convulsiones después de la inyección. Las ratas que recibieron dosis
de 9 mg/kg murieron por parálisis respiratoria.
Perros tratados a lo largo de 5 semanas, con dosis intravenosas de 2 x 1; 2 x 3 y 2 x 9 mg/kg, presentaron
midriasis dosis dependiente en todos los animales tratados y con la dosis de 2 x 9 mg/kg presentaron además
ataxia, salivación y pérdida de peso y de apetito. La tolerancia local fue buena.
En comparación con ratas control, las dosis repetidas de 10 mg/kg, administradas intramuscularmente, fueron
bien toleradas sistémicamente, aunque las lesiones musculares en el punto de inyección se incrementaron de
manera manifiesta. A dosis de 60 y 120 mg/kg, la mortalidad fue elevada y las lesiones locales incrementaron
en relación con la dosis. El N-butilbromuro de hioscina no fue ni teratogénico ni embriotóxico en Seg. II a
dosis orales de hasta 200 mg/kg, administradas a las ratas con la dieta y tampoco lo fueron dosis de 200
mg/kg administrados mediante sonda o 50 mg/kg s.c. a conejos neozelandeses. La fertilidad no se vió
afectada en Seg. I a dosis orales de hasta 200 mg/kg. Los supositorios de N-butilbromuro de hioscina fueron
localmente bien tolerados.
Se llevaron a cabo estudios específicos de tolerancia local en perros y monos, a dosis repetidas i.m. de 15
mg/kg a lo largo de 28 días. Únicamente en los perros se observaron pequeños focos de necrosis en los
puntos de inyección. El N-butilbromuro de hioscina fue bien tolerado en las arterias y venas de la oreja del
conejo. In vitro, una solución al 2% de N-butilbromuro de hioscina inyectable, no dio lugar a acción hemolítica
cuando fue mezclada con 0,1 ml de sangre humana.
El N-butilbromuro de hioscina no reveló potencial mutagénico en el test de Ames, en el ensayo in vitro de
mutación genética con células V79 de mamífero (test HPRT) y en la prueba in vitro de aberración cromosómica
con linfocitos periféricos humanos. No se llevaron a cabo estudios carcinogenéticos in vivo. De todos modos el
N-butilbromuro de hioscina no demostró potencial tumorigénico en dos estudios de 26 semanas en los que se
administraron dosis de hasta 1000 mg/kg a las ratas.

Novalgina

OVALGINA - Otras Presentaciones

 NOVALGINA A.X 5 X 2 ML
 NOVALGINA A.X 5 X 5 ML
 NOVALGINA Amp. 500 mg/ml
 NOVALGINA BLIST.X 10
 NOVALGINA Comp. 500 mg
 NOVALGINA COMP.X 100
 NOVALGINA COMP.X 1000
 NOVALGINA COMP.X 50
 NOVALGINA Gts. 500 mg/ml
 NOVALGINA GTS.X 30 ML
 NOVALGINA Jbe. 250 mg/5 ml
 NOVALGINA JBE.X 200 ML
 NOVALGINA JBE.X 200 ML X 3

Composición
Dipirona, según detalle: 500 mg/ comprimido; 30 gotas orales =1 ml = 500 mg; 5 ml de
jarabe = 250 mg; 1 ml de solución inyectable (IM/IV) = 500 mg.

Acción terapéutica
Analgésico, antipirético, espasmolítico.

Indicaciones
Fiebre intensa que no responda a otras medidas, cólicos biliares o de las vías urinarias
deferentes, dolores agudos intensos (postraumáticos o posoperatorios), dolores de origen
tumoral y otros dolores intensos agudos o de larga duración (siempre que los analgésicos
simples o los antiinflamatorios no sean eficaces o estén contraindicados).
No administrar por dolores leves.
La forma inyectable debe usarse solamente en estados dolorosos agudos intensos cuando la
administración enteral no es adecuada.
Ver información completa en prospecto de envase.

Dosificación y administración
Adultos y adolescentes desde los 15 años: Uno a dos comprimidos por toma (máximo 8
comprimidos diarios), vía oral.
Para dosificación y administración pediátrica o general detallada, por favor remitirse al prospecto
del envase.

Contraindicaciones
Alergia a las pirazolonas, porfiria hepática, déficit congénito de glucosa-6-fosfato-
deshidrogenasa, granulocitopenia y otros trastornos de la hematopoyesis.
No administrar a menores de 3 meses de edad o con peso inferior a 5 kg.
Insuficiencia hepática o renal grave.

Precauciones y advertencias
Pacientes que sufren asma bronquial o infecciones crónicas de las vías respiratorias
(especialmente cuando van asociadas a síntomas o manifestaciones de tipo fiebre de heno) o
que presentan reacciones de hipersensibilidad de cualquier tipo frente a antirreumáticos y
analgésicos, al recibir Dipirona pueden presentar ataques de asma y shock (intolerancia a los
analgésicos, aspirina, asma por analgésicos).
En estos casos emplear Dipirona sólo ante imperiosas necesidades (bajo estricta vigilancia
médica y evitando la vía parenteral).
No usar durante períodos prolongados o en dosis altas sin supervisión médica.
Se recomienda supervisión médica en lactantes, niños pequeños y en pacientes que sufran
defectos preexistentes en el desarrollo sanguíneo.
Embarazo y lactancia: No administrar durante los primeros 3 meses ni durante los últimos 3
meses de embarazo.
Del 4to al 6to mes, sólo por estrictas razones médicas.
Dejar transcurrir 48 horas después de la última ingesta antes de amamantar.

Reacciones adversas
Principalmente de hipersensibilidad.
Las más importantes son las discrasias sanguíneas (agranulocitosis, leucopenia,
trombocitopenia) y el shock.
Las manifestaciones de agranulocitosis incluyen fiebre alta, escalofríos, dolor de garganta,
dificultad al tragar, lesiones inflamatorias en boca, nariz y garganta, así como también en las
regiones genital y anal.
La inmediata suspensión de la medicación es decisiva para la recuperación.
Por esta razón, en el caso de algún deterioro en la condición general, si la fiebre no desaparece
o empieza nuevamente o si aparecen lesiones dolorosas en las mucosas (especialmente en boca,
nariz o garganta) la Dipirona debe suspenderse inmediatamente.
Es indispensable la hospitalización urgente o, al menos, un control inmediato de la fórmula
sanguínea y de la fracción leucocitaria.
La trombocitopenia produce una tendencia creciente a hemorragias y/o a hemorragias
puntiformes en la piel y las mucosas.
Los signos de shock inminente son transpiración fría, vértigo, obnubilación, náuseas, cambio en
el color de la piel y falta de aire.
Además puede haber edema de la cara, prurito, sensación de opresión precordial, pulso rápido y
sensación de frío en brazos y piernas.
Estos síntomas pueden presentarse inmediatamente o hasta una hora después de la
administración.
Acostar al paciente con las piernas elevadas en un lugar bien ventilado.
La administración de Dipirona u otras pirazolonas debe ser suspendida inmediata y
definitivamente.
Ocasionalmente ha habido casos de oliguria, anuria, proteinuria y nefritis intersticial.
Otros efectos indeseados muy raros incluyen reacciones severas de la piel, a veces peligrosas
para la vida del paciente, involucrando usualmente las mucosas (síndrome de Stevens-Johnson o
de Lyell).
Ataques de asma (en pacientes predispuestos) y dolores abdominales.

Interacciones medicamentosas
Probable disminución del nivel de ciclosporina.
Alcohol: Influencia recíproca.
No mezclar con otras drogas en la jeringa.

Presentación
Envases con 50, 100 y 1000 comprimidos.
Envases con 5 ampollas de 2 y 5 ml.
Gotas: Envase con 30 ml.
Jarabe: Envase con 200 ml.
   
La automedicación, práctica común tanto en hombres como mujeres, conlleva riesgos severos incluso
en pastillas que nos son familiares, como las aspirinas o algunas vitaminas. Esto por varias razones,
pero la principal es que cada persona es diferente y puede manifestar una reacción propia al
medicamento.

De acuerdo al químico farmacéutico y presidente de su gremio Iván Saavedra, uno de los motivos de
la automedicación es la comodidad, ya que se venden medicamentos en ferias libres y otros sitios de
alta concurrencia; por lo que las personas suelen tomar esta determinación evitando así ir a una
consulta, caminar hasta la farmacia o consultar a su farmacéutico.

Otra razón es el problema económico, ya que ir al consultorio significa un gasto en dinero, locomoción
y espera.

Los países desarrollados han respondido a esta situación con políticas de control de medicamentos. En
Latinoamérica es una preocupación creciente y que causa grandes problemas, especialmente con los
medicamentos de venta directa, que son aquellos que se venden sin regulación.

Riesgos 
Según explica Saavedra, cada medicamento y cada principio activo que lo compone trae consigo una
reacción adversa. Estas van desde un simple enrojecimiento cutáneo hasta problemas mayores, como
un paro respiratorio.

Así, cuando hay una persona que se automedica acude a la consulta del médico, éste se dedica a
investigar la patología y si no se le informa que está tomando un medicamento puede haber una
equivocación en el diagnóstico o el tratamiento, atribuyéndolo a otro motivo.

El segundo problema es la interacción, ya que los medicamentos tienen un principio activo o droga
que tiene el mismo sitio de absorción o eliminación y por lo tanto, puede interactuar con otros
medicamentos, con alimentos; algunos aditivos que tienen los alimentos o los tóxicos ambientales,
todos los que puede potenciar la acción de la droga o disminuirla.

Medicamentos
Todos los medicamentos son peligrosos en la automedicación. Incluso, aunque se suele pensar que las
vitaminas no son dañinas, la vitamina A en exceso produce daño tanto a mujeres embarazadas como
a los pacientes comunes.
Hasta una simple Aspirina está contraindicada para las personas que suelen hacer hemorragias o
padecen de úlcera gástrica, y los componentes de este medicamento le potencia estas patologías. Por
su parte, el paracetamol no está indicado para las personas que tienen daño hepático.

Cada persona es diferente a otra, tanto en absorción, metabolismo y excreción de los fármacos, lo que
junto a la reacción adversa que en sí cada fármaco contiene, puede producir un daño.

Por eso, en general se recomienda no tomar ningún medicamento por iniciativa propia, lo cual resulta
altamente peligroso, especialmente en las personas de edad, las embarazadas y los niños.

La automedicación, ese problema

2 de diciembre de 2008.- Es un problema que se manifiesta en cualquier época del año,


pero cuando llegan los crudos meses de invierno, y a caballo de gripes, enfriamientos y
catarros, su incidencia es aún mayor si cabe. Nos referimos a la automedicación.

Técnicamente, la automedicación se puede definir como la práctica de tomar


medicamentos que no han sido prescritos por nuestro médico. Se trata de un
fenómeno de creciente incidencia social. Así lo atestiguan las últimas estadísticas
dadas a conocer por el Ministerio de Sanidad y Consumo: un 28% de los españoles
declara que consume medicamentos prescritos sin consultar a su médico –de éstos, los
más utilizados son los antibióticos con un 30% de consumo sin consultar al
facultativo-, y lo que es más grave: un 33% de los ingresos hospitalarios se
deben al mal uso de los fármacos, es decir, a la automedicación.

Las causas que inciden sobre esta peligrosa conducta, que poco a poco y de forma
alarmante se torna en costumbre, son varias. ¿Quién no conoce a alguien que, ante
nuestra dolencia, acude rápido en nuestra ayuda con ésta o aquella medicina
asegurando lo bien que le fue a él o a algún familiar o conocido?

El anterior ejemplo es sólo una de las causas originarias del problema porque,
efectivamente, hoy en día todo el mundo parece saber como tratar sus
dolencias, pero además vivimos en una sociedad que favorece la automedicación. En
primer lugar, la disponibilidad de medicinas que no exigen receta médica es amplia y
de fácil acceso, lo que unido a la falta de tiempo para acudir a la consulta del médico
en busca de un remedio para combatir cualquier dolencia ha convertido la
automedicación en un hábito común, en una costumbre. Es ya parte de la rutina tomar
fármacos para animarse, para relajarse, para el dolor de cabeza, el dolor de estómago,
etc. etc.

Y sin embargo, los peligros son múltiples. Por ejemplo se abusa de los antibióticos
para cuestiones que nada tienen que ver con sus propiedades, como sanar procesos
infecciosos o febriles e incluso problemas respiratorios. El resultado es el contrario al
deseado, pues cuando nuestro organismo no los necesita, las bacterias se hacen
resistentes y cuando posteriormente lo necesitemos será más difícil de tratar.

Cosa parecida puede ocurrir con el uso indiscriminado de paracetamol que puede
ocasionar daños importantes en el hígado si no se controla su uso y las dosis
recomendadas. Hay otros medicamentos que pueden crear dependencia o adición, por
no hablar de los graves problemas que puede ocasionar a la conducción y así hasta un
largo etc.

De manera que la automedicación es un peligro que no se debe minimizar. ¿Qué


podemos hacer?

Para empezar lo mejor es empezar limpiando el botiquín de casa. Seguro que


muchas de las medicinas que guardas ya no son necesarias, han caducado o
simplemente no sabes para que sirven. Recuerda que es muy fácil reciclar los
medicamentos. Basta con que los lleves a uno de los puntos de recogida instalados en
algunas farmacias.

La educación y la información son fundamentales. No debemos suplantar al


médico, ni siquiera si, ante una infección y sin saber exactamente cual es, nos
prescribe un antibiótico. Solicita información y pregunta siempre que tengas dudas.

Debemos leer el folleto que informa de las características, composición,


contraindicaciones y posología del fármaco y, desde luego, respetar rigurosamente la
fecha de caducidad de los medicamentos.

Es muy importante que sigamos los consejos del médico en lo que hace referencia a la
dosis y la duración de los fármacos. Cualquier negligencia A este respecto puede
derivar en graves enfermedades
LA AUTOMEDICACIÓN PROVOCA
GRAVES PROBLEMAS DE SALUD

Necesario fomentar una cultura de la prevención entre la


población
El automedicarse puede retrasar el diagnostico de una enfermedad grave
La automedicación provoca problemas de salud y resistencia bacteriana, además puede ocultar
el diagnóstico temprano de enfermedades graves, por ello se recomienda que ante cualquier
síntoma anormal se acuda al médico para ser diagnosticado, afirmó Francisco Navarro
Reynoso, director general del Hospital General de México (HGM).
El cuerpo humano tiene múltiples formas de autodefensa para contrarrestar algunas
alteraciones leves, que no requieren la ingesta de ningún antibiótico, como pueden ser una
diarrea o un malestar en la garganta.

Es importante que en la población se fomente una cultura de la prevención y acuda  al médico
ante cualquier malestar, pues en muchas ocasiones cuando nos duele algo, antes de pensar en
consultar al especialista, ingerimos algún medicamento que nos recomendaron o que teníamos
en casa.

Muchas veces los síntoma no atendidos pueden ser los principios de una enfermedad grave, por
ejemplo, detrás de un dolor de cabeza puede haber un problema de hipertensión, estrés o en el
peor de los casos, un tumor cerebral.

“Antes de automedicarse hay que ir al fondo de la causas, el paciente al tomar medicamentos


para quitar el síntoma, lo único que hace es retrasar el diagnóstico de la enfermedad”.

Por lo anterior es importante que visitemos al médico, él es el único que nos puede diagnosticar
y recetar los fármacos más eficaces para mejorar nuestra salud.

Ante el problema de la automedicación en nuestro país, desde el pasado 25 de agosto, se emitió


un acuerdo por el cual se prohíbe la venta de antibióticos sin receta médica.
De acuerdo a una evaluación realizada al término de la epidemia de influenza, se vio que en
promedio los pacientes graves dejaron trascurrir hasta siete días para solicitar atención médica.

Durante estos días ingirieron antigripales, antihistamínicos, jarabes para la tos que se venden
sin receta médica, lo que dio como resultados cuadros mucho más graves y lamentablemente
un gran número de ellos fallecieron.

Si hubieran acudido de inmediato con un médico, seguramente esas muertes se hubieran


evitado, ya que se contaba con el medicamento para curar la influenza, de ahí que ínsita que la
automedicación puede traer consecuencias graves.

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