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Como administrar las bendiciones de Dios

Efesios cap. 1-3 dice: Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con
toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo.

La bendición de Dios más grande para los hombres se llama Jesucristo, por medio
de Él recibimos perdón, somos reconciliados con el Padre, recibimos la salvación
y la vida eterna.

Dios nos bendice de muchas maneras; Dios te bendice espiritualmente, también lo


hace materialmente y físicamente.

Dios nos salva en Cristo Jesús, Dios sana nuestro cuerpo de toda enfermedad y
toda dolencia. Dios da gozo al corazón y nos bendice de tal manera que suple
todas nuestras necesidades. Esto significa entonces, que Dios nos prospera y nos
muestra sus bendiciones para con nosotros en todas las áreas de nuestra vida.

Las bendiciones de Dios son favores que recibimos de parte suya sin nosotros
merecerlo.

No debemos encerrar las bendiciones de Dios sólo en cosas y cuestiones


materiales y físicas; sus bendiciones se manifiestan en nosotros en todas las
áreas de nuestra vida.

Es la voluntad de Dios bendecirnos y proveernos de lo que necesitamos para que


nosotros podamos contar sus obras y sus maravillas en medio nuestro.

Cuando Dios te bendice, Él lo hace con los siguientes propósitos.

1. Dios te bendice para que le honres.

Debemos reconocer que Él es la fuente de toda bendición.

2. Dios te bendice para que disfrutes en gran manera.


La vida que te dio, la familia que te dio, el esposo que te dio, la esposa que te
dio, el trabajo que te dio, la casa que te dio, la salvación que te dio, su perdón
que te otorgó.

3. Dios te bendice con el firme propósito de que puedas bendecir a los demás.

Dios le dijo al patriarca Abraham, te bendeciré y serás bendición y en ti serán

benditas todas las familias de la tierra.


Debemos entender que cuando Dios nos bendice, es también para ser bendición a

otros.

Debemos compartir de las bendiciones que Dios nos ha dado con las personas

que nos rodean, y para convertirnos aún más en buenos administradores de las

bendiciones que Dios nos ha dado debemos saber qué es lo que Dios espera de

nosotros cuando Él nos bendice.

Para saber qué es lo que Dios espera de ti después de bendecirte, vamos a leer
en Deuteronomio cap. 8: 7-18 dice: Porque Jehová tu Dios te introduce en la buena tierra,

tierra de arroyos, de aguas, de fuentes y de manantiales, que brotan en vegas y montes; 8tierra de trigo y

cebada, de vides, higueras y granados; tierra de olivos, de aceite y de miel; tierra en la cual no comerás el

pan con escasez, ni te faltará nada en ella; tierra cuyas piedras son hierro, y de cuyos montes sacarás

cobre. Y comerás y te saciarás, y bendecirás a Jehová tú Dios por la buena tierra que te habrá dado.

Cuídate de no olvidarte de Jehová tu Dios, para cumplir sus mandamientos, sus decretos y sus estatutos

que yo te ordeno hoy; no suceda que comas y te sacies, y edifiques buenas casas en que habites, y tus vacas

y tus ovejas se aumenten, y la plata y el oro se te multipliquen, y todo lo que tuvieres se aumente; y se

enorgullezca tu corazón, y te olvides de Jehová tu Dios, que te sacó de tierra de Egipto, de casa de

servidumbre; que te hizo caminar por un desierto grande y espantoso, lleno de serpientes ardientes, y de

escorpiones, y de sed, donde no había agua, y él te sacó agua de la roca del pedernal; 16que te sustentó

con maná en el desierto, comida que tus padres no habían conocido, afligiéndote y probándote, para a la

postre hacerte bien; 1 digas en tu corazón: Mi poder y la fuerza de mi mano me han traído esta

riqueza. Sino acuérdate de Jehová tu Dios, porque él te da el poder para hacer las riquezas, a fin de

confirmar su pacto que juró a tus padres, como en este día.


En resumen, Dios espera de nosotros después de bendecirnos en cualquier área

de nuestra vida:

1. Que no nos olvidemos de Él.

2. Que no se enorgullezca nuestro corazón.

3. Que no nos olvidemos cuál era nuestra condición anteriormente y de donde

Dios nos ha sacado.

4. Que reconozcamos siempre que Dios es quien nos da el poder para hacer
las riquezas y alcanzar cualquier cosa

5. Y para terminar, Dios espera que siempre le sigas amando a Él más que a

sus bendiciones.

Acuérdate que Dios es la fuente, acuérdate que de Dios es de donde emanan

todas las cosas.

Dios espera que siempre tengamos un corazón agradecido por todas las

bendiciones que Él nos ha dado.

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