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Julio Altmann Smythe

ARQUITECTURA PENITENCIARIA

La arquitectura penitenciaria es un arte y una ciencia siguientemente, cualquier lugar podía emplearse como
que se ocupa de la proyección y de la construcción prisión, si ofrecía efectivos elementos de segur:dad. Es
de establecimientos penales. Se adapta a modernas con- así como solían usarse antiguamente como cárceles
cepciones arquitectónicas y a fundamentales principios lugares bastante disímiles: pozos, cuevas, fosos de cas-
de una progresista ciencia carcelaria. tillos feudales, fortalezas, alas de edificios públicos,
viejas naves en desuso, etc.
Como ha afirmado el arquitecto mexicano Guillermo
Buguerisse: "Esta nueva arquitectura se funda en las En esos tiempos no se construían edificios que s:r-
actuales normas del sistema penitenciario y del trata- vieran específicamente como prisiones. Se aprovecha-
miento individual" (1 ). ban diversos sitios para depositar a los delincuentes,
bastando que no existiera el peligro de evasiones.
Para proyectar y edificar un establecimiento penal, ·Por tanto, no es pos:ble referirse a una auténtica ar-
pues, no es bastante saber construir y embellecer un quitectura penitenciaria cuando no existía una sistemá-
edificio conforme con las nociones generales de la dis- tica política para el tratamiento de los infractores y
ciplina arquitectónica. No es suficiente que el profesio- no había una clara teoría acerca de la verdadera fun-
nal se halle compenetrado en los conocimientos de la ción de la cárcel. Se construían edificios que tenían
arquitectura. Es preciso, además, que él se encuentre otros propósitos, destinándoseles posteriormente a la fi-
imbuido de básicos principios de una actualizada cien- nalidad de hacinar a los presos, mezclándose a niños,
cia penitenciaria que continuamente evoluciona. Por jóvenes, adultos y ancianos; mujeres y varones; sanos
tanto, para proyectar y construir una prisión es impres- y enfermos mentales; encausados y condenados; vagos,
cindible saber conjugar adelantadas informaciones ar- mendigos y delincuentes, etc. Salvo casos especiales de
quitectónicas con las que brinda la ciencia que se ocu- algunas personas que gozaban de determinados privi-
pa del apropiado tratamiento institucional de los reclu- legios, en estos establecimi~ntos no se producía ni
sos. No es sencillo, pues, que un arquitecto pueda la más elemental separación entre las diversas cate-
especializarse en la construcción de esta clase de ins- gorías de reclusos.
tituciones, por lo cual tales expertos no abundan.
Como señalaba el Informe de la "Prison Discipline
Society" de Londres, la prisión era un lugar de cruel-
dad, de privación, de inmundicia, de olvido. En és-
ta prevalecía una inhumana dureza en el trato que se
La prisión antigua daba a los reclusos y, a la vez, una corrupción gene-
ral entre los funcionarios de la cárcel. Esta situación
Durante siglos los establecimientos penales s1rv:eron respondía al criterio predominante con relación a los
sólo para segregar socialmente a los infractores, mante- delincuentes: al autor de un delito se le consideraba in-
niéndoseles en custodia, para evitar las evasiones. Con- digno de toda misericordia. Por tanto, estos depósi-
tos no respondían a un determinado criterio arquitec-
BUGUERISSE, Guillermo, Ponencia presentada al Ter- tural, ya que sólo se buscaba la seguridad. En aque-
cer Congreso Penitenciario de México, Toluca, agosto lla época, pues, mal podía hablarse de una arquitec-
de 1969. tura penitenciaria técnica.

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Antecedentes arquitectónicos En esta época continuaron predominando las antiguas
prisiones. Sólo cesó esta situación en 1773, año en
La situación descrita continuó hasta que se comenzó que se construye la Prisión de Gante, Bélgica; presi-
a construir instltuciones especiales que sirvieran para dio que presentó una arquitectura más adelantada. Es
recluir a los infractores, esto es, establecimientos pe- por este motivo que se estima que sólo entonces na-
nales. Los respectivos proyectos necesariamente se ció una arquitectura penitenciaria técnica. Sin embar-
encontraban orientados por ideas bastante definidas, go. siguió aplicándose en casi todos los estableci-
que eran las que imperaban en los años en los que mientos de nuevo tipo el régimen de estricto silencio
eran elaborados. Rec'én en el siglo XVIII se proyecta- y confinamiento solitario, por lo cual la prisión no de-
ron y construyeron prisiones, con una orientación de- jó su catecterística inhumana.
terminada.
Seudo-humanización de las prisiones
Sin embargo, con anterioridad se constatan algunos
atisbos de arquitectura carcelaria, aunque no fueron An~e la situación que significaba tener a los prisio-
sino meras excepciones. neros hacinados en un establecimiento y sometidos a
En estos atisbos de arquitectura carcelaria se nota regímenes ingratos, se produjo un noble movimiento
una nueva modalidad, ya que las cárceles se encuentran que tendía a la humanizac:ón de las prisiones.
diseñadas con una orientación más definida y el pro- John Howard fue nombrado sheriff del Condado de
pósito de la edificación es que sirva de prisión. Sin Bedford, Inglaterra, en 1773, teniendo la oportunidad
embargo, en estos presidios siguen prevaleciendo re-
de conocer la horrorosa situación en que se encontra-
gímenes inhumanos, al igual que en la antigua insti-
ban los reclusos. En 1777 publicó su célebre libro in·
tuc!ón. titulado "Estado de las Prisiones" (2), obra que tuvo
En 1593, es decir, ya a fines del siglo xv:, los pro- una gran influencia en la humanización de los presid~os.
testantes de Amsterdam mandaron levantar una prisión Howard se dedicó, desde entonces, a la tarea de me-
para mujeres, a las que se sometía a un régimen de jorar las cárceles, aunque conforme a ideas hacía
prácticas religiosas y de trabajo. Trascurrido más de tiempo superadas. Cesó su levantada prédica al mo-
un siglo de la construcción de esta institución, en rir en Kherson, Rusia, en 1790, donde había ido a vi-
1703, el Papa Clemente XI decidió modernizc.r y recons- sitar algunas prisiones de ese país, aunque ya su mo-
truir el Hospicio de San Michelle, en Roma, dedic2n- vimiento humanitario había fructificado en varias nacio-
dolo a servir de prisión para jóvenes delincuentes. Las nes de Europa, reflejado en reformas diversas. Howard
nuevas construcciones fueron inauguradas en 1704. Es fue partidario del sistema celular, justamente para evi-
conveniente señalar que en esta cárcel se usó el sis- tar el atroz hacinamiento de los presos. Sin embargo, no
tema celular. Las celdas eran muy pequeñas y de consideró inhumano el confinamiento solitario, puesto
éstas eran sacados todos los días a un patio central, que se dejó impresionar favorablemente por la Pr:sión
en donde los reclusos debfan trabajar encadenados de de Gante y por la casa Correccional de Milán.
un pie y guardando estricto silencio. Posteriormente,
Probablemente inspirándose en las concepciones de
este régimen fue atemperado, pero el silencio absoluto
Howard, en 1798 se construyó en Wymondham, Norfolk,
continuó siendo obligatorio. Las celdas de este presi-
Inglaterra, un establecimiento integrado por 24 celdas,
dio para jóvenes menores de 20 años tenían como ca-
dispuestas en tres pisos. Esta cárcel fue dedicada a
racterística de tipo externo una ventana en cada una
la recepción de delincuentes de diversos condados.
que se abría hacia un patio, modelo que predomina
La fama de esta pris:ón se difundió y fue visitada por
hoy en las cárceles modernas. Es de mencionar, asi-
numerosos franceses, norteamericanos, ingleses, etc.
mismo, otra pr:sién que igualmente adoptó el sistema
celular y que fue terminada en 1778: la Casa Correc- En los Estados Unidos igualmente se produjo un mo-
cional de Milán. Cada celda tenía dos ventanas. Una vimiento similar desde 1776, año de la declaración de
daba hacia afuera y era bastante grande para esa épo- la independencia. Durante ese año se fundó la primera
ca. La otra era más pequeña y enfrentaba el gran pa- organización en el mundo que tendía a mejorar los sis-
tio de la prisión. Constaba de tres pisos, hallándose
los talleres en el primero. Como en las otras cárceles 2 HOWARD, John, The state of prisons, Lonclon, J.M.
se sometía a los reclusos a un régimen interno estricto. Dant ancl sons, 1929.

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temas penitenciarios reinantes: la "Philadelphia Society la arquitectura de esta prisión se inspiró en la pequeña
for Distrassed Prisoners". Esta sociedad fue reorgani- cárcel de Wymondham, Norfolk, Inglaterra.
zada en 1787, bajo la dirección del Dr. Benjamín Rush,
La arquitectura carcelaria siguió adherida a estas con-
tomando el nombre de "Philadelphia Society for Alle-
cepciones durante largos años. Sólo a fines del siglo
viating the Miserias of Public Prisons", la que logró que
XIX se comenzaron a construir establecimientos con
el Estado de Filadelfia expidiera una ley que sentaba
una mentalidad diferente.
las bases de una nueva política carcelaria, la que se
caracterizó por la separación de reclusos de ambos
sexos y de diferentes categorías de delincuentes y por El sistema celular
el pesado trabajo a los que se sometía a los reclusos,
En la construcción de las pnsrones se ha impuesto
como castigo e intimidación. Esta ley fue expedida en
el sistema celular y actualmente se le conceptúa como
1790 y auspiciaba, igualmente, el sistema celular.
un buen sistema. No cabe duda que ha influido en los
La primera prisión que se construyó conforme a es- criterios arquitectónicos de manera beneficiosa, aunque
tos preceptos fue la famosa Eastern State Penitentiary el sistema celular no es tan nuevo como parece.
de Filadelfia, en 1829. En ésta se sometía a los pre-
La Iglesia lo ha venido empleando desde el siglo
sos a un confinamiento solitario absoluto, vivían y
IX, aprovechando las celdas conventuales para recluir
trabajaban en sus celdas unipersonales, que tenían en
y aislar a algunos infractores, juzgando que los delin-
la parte posterior un reducido patio para ejercicios,
cuentes podían reformarse si se entregaban a una sin-
al cual salían los penados durante una hora al día.
cera penitencia, a diversas prácticas religiosas, etc., lo
Paralelamente se produce en el Estado de Nueva York que generalmente debía influir para que se arrepintieran
otro movim:ento seudo-humanitario. Se basó en las de sus crímenes. Empero, la Iglesia no usó este sis-
ideas de la "Boston Prison Discipline Society", que com- tema con verdadero carácter carcelario, ya que simple-
binaban el sistema celular nocturno, la enseñanza reli- mente se sirvió de las celdas de los conventos para
giosa y el trabajo en común de los presos -Jos que de- recluir a ciertos infractores, con el objetivo de que
bían guardar absoluto silencio- generalmente bajo con- alcanzaran una hipotética reforma moral y espiritual.
trato con empleadores privados. Bajo la influencia de Las celdas, pues, no eran las de una institución penal
estos conceptos, se ordenó levantar la prisión de We- propiamente dicha. Se construían conventos y se em-
thersfield, en el Estado de Connecticut. Sin embargo, pleaban algunas de sus celdas para recluir a ciertos de-
el sistema se ha hecho conocido con el nombre de la lincuentes, así se usó naves en desuso, alas de edifi-
prisión estatal de Auburn, Estado de Nueva York, inau- cios públicos, etc. No puede hablarse, por tanto, de
gurada en 1823. un sistema celular penitenciario.
Al primer sistema, caracterizado por el confinamiento Si el presidio se hallaba regido por un régimen hu-
solitario, se le conoce con los nombres de "solitario", mano y científico el sistema de celdas beneficiaba al
de Pensilvania, y filadélfico. Al segundo, en el que recluso. Pero si el penado era situado en una celda
se estableció el trabajo común en silencio absoluto, se en confinamiento solitario o si únicamente salía de
le denominó de "silencio" y de Auburn. La controver- ella para trabajar con los demás prisioneros sometidos
sia entre ambos sistemas duró muchos años. a un riguroso silencio, el sistema fue cruel e inhumano.
Por ejemplo, los regímenes que predominaron en la
Como es natural, esos sistemas dieron Jugar a dife-
Eastern Penitentiary de Filadelfia y en la Institución de
rentes concepciones arquitecturales. El sistema filadél-
Auburn hicieron que las celdas fueran lugares de inten-
fico fue aceptado mayormente en Inglaterra, Bélgica,
so sufrimiento. De estos establecimientos salieron muy
Holanda, Prusia, Noruega, Suecia, etc. El sistema Au-
pocos delincuentes reformados, pero sí muchos demen-
burn predominó en los Estados Unidos. Sin embargo,
tes.
en este último país se reorganizó en 1790 la Cárcel de
la calle Watnut, en Filadelfia, construyéndose celdas Cualquier concepción arquitectónica puede ser reco-
para confinar solitariamente a los presos, aplicándose mendable o no, según cual sea el régimen penitenciario
el sistema filadélfico. Es interesante señalar que en que rija en el presidio. La adecuada arquitectura sola-
esta ocasión se construyeron celdas unipersonales mente ayuda al tratamiento del penado. Lo esencial,
por primera vez en los Estados Unidos. Seguramente, en este caso específico, es que las celdas se empleen

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correctamente y que al recluso se le trate con humani- costumbre de construirse establecimientos grandes y
dad. En conclusión, el sistema celular depende del régi- cerrados, reemplazándolos de acuerdo a concepciones
men interno de la prisión, para ser útil o perjudicial al más evolucionadas. Igualmente, en las cárceles moder-
penado. nas va desapareciendo la celda enrejada por el frente
y plenamente visible desde afuera, que colocaba al
recluso como fiera enjaulada, dificultándose la readap-
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tación individual y social del infractor.

Evolución de la arquitectura carcelaria Esta evolución positiva se ha debido a la diferente


concepción que ahora se posee de la función de la
La arquitectura carcelaria acusa una acentuada evo- cárcel. Va desapareciendo la idea de que los presos
lución durante los últimos decenios, en cuanto se ha debían forzosamente adaptarse a la prisión, fuera del
desarrollado conjuntamente con el progreso de la c:en- tipo que se prefiriera. Actualmente se tiende a proyec-
cia penitenciaria, la cual ha mostrado un notable pro- tar y construir prisiones contemplando los requerimien-
greso. Sin restar méritos a los primeros atisbos de tos de los propios internos. Es así como las cárceles
la arquitectura penitenciaria, debe afirmarse que ésta se adaptan a cada grupo de reclusos que habrán de
únicamente se hace manifiesta desde el momento en alojarse en éstas, única manera de conseguir que se
que se edifican establecimientos penales de acuerdo a apliquen buenos sistemas de tratamiento ind[vidualizado.
proyectos que muestran una bien definida política en Ha sido descartado, por tanto, el tipo único de cár-
el tratamiento de los reclusos. cel.

En sus primeros tiempos esta arquitectura presenta En muchos países se tiende a la diversificación de
concepciones bastantes limitadas, toda vez que debía los presidios, para que cada categoría de reclusos
adaptarse a viejos conceptos carcelarios, conjugando sea tratada en una determinada prisión, de acuerdo a
las funciones que se asignaba a las penas. A medida concepciones modernas. De lo que se infiere que el
que los pensamientos penológicos evolucionaron, ló- arquitecto deberá conocer previamente a qué categoría
gicamente mejoraron las concepciones arquitectónicas. de internos se destinará la institución que proyecta y
Si la sanción respondía a una noción de castigo, de construye.
reforma, de penitencia, de readaptación, etc. irrefraga-
blemente las prisiones debían proyectarse y construirse Indispensable especialización del proyectista
de modo distinto. Pero es de advertir que la arquitec-
Toda construcción obedece a un propósito. Es por
tura carcelaria ha evolucionado con un ritmo más lento
esta razón que todo proyecto de edificación debe ela-
que la ciencia penitenciaria, por cuanto las teorías
borarse teniendo en cuenta tal objetivo. Naturalmente
acerca del tratamiento de los infractores tienen siem-
que, una vez levantado el edificio, deberá usársele con-
pre un vuelo más amplio. La arquitectura carcelaria
forme a los propósitos que posee. La escuela, por
previamente ha de vencer una serie de obstáculos, es-
ejemplo, posee el objetivo de hacer factible que se
pecialmente prejuicios enraizados que prevalecen en la
otorgue al alumnado una buena enseñanza. Pero no
sicología colectiva. Quiérase o no, esta arquitectura
se ha hallado siempre a la zaga de los progresos al- es bastante que el arquitecto tenga en vista este pro-
canzados por la ciencia penitenciaria. pósito. Además, posteriormente, habrá que usar el
edificio convenientemente, complementándosele con la
En el campo de la arquitectura carcelaria se ha pro- actividad de buenos maestros, la aplicación de exce-
ducido una perenne lucha entre antiguas concepciones lentes programas, etc. Otro tanto acontece cuando se
y otras nuevas; felizmente, las últimas siempre han proyecta la construcción de una casa-habitación, la que
salido vencedoras, aunque con una desesperante len- no se edifica únicamente para que sirva de alojamien-
titud. Así, con alguna tardanza la arquitectura peniten- to a los miembros de una familia. El arquitecto de-
ciaria ha perdido, en gran parte, su anticuada rotundi- berá elaborar su proyecto en tal forma que permita
dad, su inclinación a conceder excepcional importancia las relaciones afectivas, espirituales, culturales, mate-
a la seguridad, sus inconvenientes ideas de gigantis- riales, etc. entre los componentes del grupo familiar,
mo, etc. Dentro de lo factible, se ha humanizado y para darle una fisonomía de verdadero hogar. Sin
tecnificado. Por ejemplo, tiende a perderse la vieja embargo, si los integrantes de la familia no quieren

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o no pueden hacer efectivas tales relaciones carecerá en la construcción de establecimientos penales (4). "Es-
del sello hogareño. La prisión, igualmente, posee pro- ta recomendación obedece al anhelo de evitar frecuen-
pósitos determinados. No ha de servir solamente para tes fracasos, debido a la inexperiencia de arquitectos
brindar a los internos alojamiento, trabajo, recreacio- e ingenieros que proyectan arbitrariamente prisiones,
nes, custodia, etc., s:no especialmente para que se fa- alejadas de la posibilidad de establecer buenos siste-
cilite el apropiado tratamiento institucional de los de- mas de tratamiento y divorciados, incluso, de las pro-
lincuentes, ya que la función esencial de la cárcel es visiones legales" (5), como lo ha señalado el Licen-
buscar la readaptación de los reclusos. De lo expuesto ciado Sergio García Ramírez, reconocido penitenciaris-
se desprende que, como ha dicho Gabriel Seminario ta mexicano y que fuera Secretario General del Con-
Helguero, quien fuera D:rectcr General de Prisiones greso.
del Perú, "es imprescindible que se construya las cár-
celes con la misma preocupación técnica que demanda Escasa bibliografía
la erección de una iglesia, un cuartel, una escuela o
un hospital" (3). Pero de nada valdrá esta buena En muy pocas facultades de arquitectura se dictan
construcción si las autoridades de la cárcel no saben cursos sobre cuestiones carcelarias, por lo que es di-
aplicar métodos cie:1tíiicos para que se alcancen los fícil que los arquitectos posean conocimientos de cien-
objetvos fundamentales de la institución. cia penitenciaria. Pero no pueden ser culpados única-
No todos los arquitectos poseen capacidad para pro- mente los arquitectos y las facultades de arquitectura
yectar y construir un presidio moderno. Es indispen- de esta ignoranc:a en materias relacionadas con la cien-
sable que el arquitecto ostente es¡::ecialización, justa- cia que se ocupa del tratamiento científico que han de
mente para que pueda armonizar sus personales con- recibir los delincuentes. Igual o mayor responsabilidad
cepciones arquitectónicas con los principios básicos de les toca a los penitenciaristas, quienes hasta ahora han
una progresista cienc:a penitenciaria. Es reducido el subestimado tema tan trascendente como la arquitectura
número de profesionales especializados en construccio- carcelaria. Existe la esperanza de que los estudiosos
nes carcelarias. Si bien pueden ser expertos en arqui- comiencen a despertar de este negativo letargo' inte-
tectura, la mayoría ignora lo que debe ser una prisión lectual, profundizando en esta importante disciplina y
moderna. Generalmente, no poseen s;quiera una vaga escribiendo trabajos que divulguen conocimientos bá-
idea de lo que significa un buen tratamiento institucio- sicos sobre ella.
nal. Es de preguntarse, entonces, ¿cómo podrán estos Debido a su eleva:Jo costo no es frecuente que se
arquitectos proyectar y edificar una prisión si carecen levanten pris:ones. Es obvio, entonces, que no se pue-
de un integral conocimiento de bás:cos principios de de pedir a los arquitectos que se especialicen en una
la ciencia penitenciaria?. disciplina que sélo les habrá de significar hipotéticos
Ante este fenómeno natural, existe la tendencia a que ingresos económicos y una actividad muy infrecuente.
se les preste a estos profesionales una orientación y Por otro lado, difícilmente podrán asimilar estos cono-
una dirección apropiadas. Los únicos que pueden otor- cimientos dada la reducida bibliografía mundial que
garla son los pen:tenciaristas. Esto explica que en mu- existe sobre este tema.
chas naciones se haya designado comisiones especiales Los propios congresos penitenciarios rara vez se han
para construcciones carcelarias, integradas por ingenie- ocupado de este asunto tan importante. Ni siquiera
ros, arquitectos y especialistas en materias carcelarias. los certámenes auspiciados por las Naciones Unidas
le han dado alguna atención. Sin embargo, ya ha
Siguiendo esta tendencia el Tercer Congreso Nacio-
aparecido una positiva reacción. En el temario del
nal Penitenciario Mexicano, realizado en la ciudad de
mencionado Congreso Nacional Penitenciario de México
Toluca, en agosto de 1969, recomendó la creación de
figuró la arquitectura penitenciaria, aunque sobre el te-
un organismo técnico consultivo, integrado por repre-
ma sólo fueron pre~entadas dos ponencias: las de los
sentantes de todas las disciplinas que participan en el
quehacer penitenciario, para asesorar a los gobiernos
4 Actas de sesiones del Tercer Congreso Penitenciario
de México, Toluca, agosto ele 1969.
3 SEMINARIO HELGUERO, Gabriel, Notas sobre la 5 GARCIA RAMIREZ, Sergio, Carta personal al autor,
reforma del régimen penal en el Perú, Lima, 1945. 6 de octubre de 1969.

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arquitectos Ramón Marcos Noriega y Guillermo Bugue- En el tipo radial, generalmente parten los pabello-
risse. n8s celulares y de trabajo de un patio central, a ma-
nera de estrella, esto es, radialmente.
En América Latina la bibliografía es sumamente re-
ducida, pero no faltan algunos pocos estudios sobre En el tipo panóptico, las celdas enrejadas están si-
arquitectura carcelar:a. Seguramente los mejores tra- tuadas circularmente alrededor de una alta torre que
bajos en idioma castellano son los publicados por dos se halla en el hall central de la prisión. Desde esta
argentinos: Horacio Moyana Navarro y Carlos García torre puede inspeccionarse todas las celdas. Este sis-
Basalo. El primero publicó el libro "Elementos de teo- tema supone que toda la prisión puede ser controlada
ría de la arquitectura" (6) en el que aparece un capítulo con "un simple golpe de ojo", esto es, que todo se
muy completo ded;cado a estudiar el tema de la ar- encuentra a la vista. El término panóptico deriva del
quitectura carcelaria. Posteriormente, la Revista Penal griego: "pan" que significa "todo" y "óptiko" que da
y Penitenc:aria, órgano de la Dirección General de los la idea de "vista", por tanto, quiere decir "todo a
Institutos Penales de la Nación de la República Argen- la vista".
tina, publicó un erudito y muy bien documentado En el tipo circular se presentan las mismas caracte-
trabajo sobre el tema, preparado por Carlos García rísticas generales del sistema panóptico. respecto al
Basalo, autoridad en mc."ier'as carcelarias y actual Sub- cual tiene mínimas diferencias. La visibilidad del inte-
Director de los Institutos Penales de Argentina. Es de rior de las celdas es imposible desde el patio central,
esperar que sean imitados estos mr~ores en sus esfuer- ya que cada celda tiene una puerta maciza. Sólo es
zos por divulgar conceptos básicos sobre arquitectura factible observar el interior mirando a través de una
carcelarla. paqueña abertura que hay en dicha puerta.

La primera prisión de tipo radial que se proyectó


1!1 y construyó fue la de Gante, Bélgica, en 1773. Su
creador fue el conde Fel:pe Vilain. Esta cárcel estaba
SISTEMAS DE ARQUITECTURA PENITENCIARIA formada por muros que integraban un octágono, con
un patio central. Del último partían los pabellones
Esta arquitectura se encu:::ntra subordinada a las de celdas y los talleres, los que integraban, a su vez,
doctrinas penológicas. Como las últimas cambian de ocho patios triangulares, con el v8r~:co dirigido a di-
continuo. es lég;co que igual mudanza acuse la arqui-
cho patio central. Las celdas eran de tipo interno,
tectura carcelaria. dlspuestas en tres pisos, quedando los lalleres en el
En el tr2nscurso del tiempo se han ido implantando di- primero. Generalmente las celdas eran individuales.
ferentes sistemas arquitectónicos al proyectarse y cons- Salían los presos de éstas a la arcada del patio trian-
truirse los establecimientos penales. Obviamente, éstos gular para ir al trabajo, al comedor, a la capilla, a
son numerosos. En este estudio sólo se darán a cono- hacer algunos ejercicios, etc., siempre sometidos a un
cer sintóticamente algunos de los princ'pales sistemas régimen sumamente estricto. El trabajo era obligatorio,
o "partidos" que se han ido sucediendo a través del ya que el preso que no trabajaba no tenía derecho a
tiempo, indicándose, asimismo, algunas prisiones que comer. Las celdas eran extremadamente oscuras, por
obedecen a cada sistema. Hasta ahora destacan tres, cuanto la única luminosidad que tenían les llegaba por
cada uno regido por un r3gimen carcelario determ:nado. una ventana enrejada que se hallaba en la misma puer-
ta, es decir, la luz del patio interior.
a) E! sistema da inspección central Es d:gno de mencionarse que en esta prisión se da
comienzo a una separación elemen~al de los prisione-
La más importante característica arquitectural que ros, pues había una sección destinada a las mujeres,
presenta se funda en que el establecimiento pueda ser otra a los vagos y una más para los delincuentes va-
inspeccionado y controlado desde su centro. El siste- rones. Además, había una que servía para el ingreso
ma presenta tres tipos secundarios. de los reclusos al penal. Indudablemente se trataba
de una separación empírica, pero significó un adelanto.

6 MOYANO NAVARRO, Horacio, Elementos de teoría El sistema panóptico, ideado por el inglés Jeremy
de la arquitectura, Ec1. Assandri, Córdoba, 1946. Bentham, dio lugar a muchas esperanzas. Se le juzgó

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un sistema eficiente, econom1co y ventajoso, al poder- que sirvió de modelo a otras muchas en los Estados
se inspeccionar todas las celdas desde el centro del Unidos, no obstante que respondía a un sistema ya
establecimiento. Bentham tenía una absoluta fe en su descartado por los técnicos. Sus celdas eran interio-
sistema, pues suponía que todos los problemas de la res. Su sistema fue tan poco racional que tuvo que
prisión se solucionaban con él. Afirmaba que la refor- adoptarse uno más conveniente en época posterior.
ma moral, la preservación de la salud, el vigorizamien-
Seguramente la pr!sión más famosa del siglo XIX fue
to del trabajo y de la industria, la difusión de la instruc-
la Eastern Penitentiary de Filadelfia, inaugurada en 1829
ción, etc. se conseguían con una simple concepción
y conocida igualmente con el nombre de Cherry Hill.
arquitectónica.
Fue proyectada por el arquitecto John Haviland para
El panóptico era una prisión en la que el muro que los reclusos estuviesen en confinamiento solitario y
formaba un cilindro, en el cual se hallaban las celdas se conjugaron en ella el sistema radial con el sistema
enrejadas, plenamente visibles desde el centro de la celular. Era una prisión amurallada de forma rectan-
institución, el que estaba cubierto por un tejado de gular con una rotonda central, en donde se encontraba
vidrio. En el centro del presidio había una torre de la torre de observación, de la cual partían radialmente
control, desde la cual los guardias podían observar to- siete pabellones celulares, cada uno con un corredor
das las celdas que la rodeaban. que daba acceso a las 400 celdas. Cada celda tenía
Bentham jamás logró construir una prisión del tipo un pequeño patio trasero para que los prisioneros hi-
que había ideado. Pero en 1800 se levantó la prisión cieran algún ejercicio. Este pequeño patio, estaba cir-
del Estado de Virginia, cuyo proyecto aceptó muchas cundado por un muro alto. Fue tan estricto el régimen
concepciones del sistema panóptico, siendo su proyec- pensilvánico que prevalecía en esta prisión que, al
tista el arquitecto Latrobe. Fueron numerosas las pri- construirse, las celdas carecían de verdaderas puertas
siones que se construyeron de acuerdo a este tipo y hacia el corredor y únicamente había dos aberturas,
aún en pleno siglo XX, cuando ya se había superado una para que se entregara los alimentos al preso y la
ampliamente la opinión que dio nacimiento al sistema otra para la vigilancia interna de la celda. Se llegó
panóptico, se construyó a un enorme costo, en 1919, al extremo que el recluso no podía ver los servicios
la Prisión de Stateville, lllinois, lo cual significó un religiosos sino solamente oírlos. No recibían visitas.
error innegable. Igualmente en Cuba se construyó la Unicamente se aceptaba que se pusieran en contacto
prisión de la Isla de los Pinos conforme al sistema pa- con los penados algunas buenas personas que escucha-
nóptico. ban las reclamaciones que tenían que hacer -que ge-
El sistema circular tuvo reducida aceptación, debido neralmente no se tomaban en cuenta- y les predica-
especialmente a sus muchos inconvenientes. La Western ban sobre religión y moral. Los reos que se emplea-
State Penitentiary de Pittsburg, Pensilvania, fue cons- ban en trabajos de limpieza en la prisión debían lle-
truida en 1862 respondiendo a una concepción arqui- var la cabeza cubierta por una especie de máscara o
tectónica que podemos calificar de híbrida. La mitad capucha.
de las celdas estaban cerradas por una pesada puerta Este establecimiento sirvió de modelo a muchas pri-
de fierro, lo que imposibilitaba la observación interior siones europeas, en especial en Inglaterra, Francia,
desde la torre central. Además, esto hacía que las Prusia, etc. Fue imitada asimismo en América Latina.
celdas fueran oscuras y húmedas. Finalmente, como las Vale la pena mencionar que la antigua Penitenciaría
celdas se tocaban por la pared posterior, muchas de Central de Lima, inaugurada en 1862, y que prestó
éstas no enfrentaban a la torre de inspección, hacién- útiles servicios durante prácticamente un siglo, fue
dose, entonces, necesaria la inspección directa. El ar- una réplica de la Eastern Penitentiary de Filadelfia, con
quitecto Strickland fue el que proyectó esta cárcel, ins- algunas pocas modificaciones. Mariano Felipe Paz Sol-
pirado en parte en las ideas de Bentham, pero acep- dán fue enviado por el Presidente Dn. Ramón Castilla
tando muchas reminiscencias de la vieja prisión de a estudiar el sistema y la arquitectura de las prisiones
Gante, en la cual las celdas presentaban paredes poste- de los Estados Unidos, en esa época las más adelan-
riores comunes. Estas celdas fueron destruidas siete tadas. Paz Soldán se dejó impresionar por la arqui-
años después, debido a su mal diseño. tectura de este establecimiento y, aceptándola como
Estableciéndose en ella el sistema de Auburn, en modelo, confeccionó los planos de la futura peniten-
1825 se construyó la conocida prisión de Sing-Sing, ciaría limeña. Con buen criterio implantó un régimen

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interno más atemperado al que regía en la pns1on Como se ha dicho, la primera pns1on que fue cons-
norteamericana. Se explica el largo empleo de la Pe- truida dentro de esta concepción fue la de Fresnes.
nitenciaría Central de Lima por haber sido inspirada Poussin rompió definitivamente con el partido de ins-
en una prisión que respondía a una arquitectura ade- pección central y construyó un establecimiento que
lantada para la época. respondía a un doble peine. Aún en la actualidad la
Prisión de Fresnes está prestando útiles servicios. Se-
La concepción arquitectónica de Haviland fue mejo-
rada, hasta que el sistema de inspección central se gún Alfred Hopkins "el partido de Poussin en Fresnes
ha constituido la base para el desarrollo en el proyec-
estancó. Por otro lado, el confinamiento solitario, tan
to de cárceles". "Es el partido más lógico de planea-
absurdo, fue objeto de severas críticas. Uno de los
miento penal" (7).
escritores que rechazó este régimen fue el célebre no-
velista Carlos Dickens. Finalmente fue remplazado. Comprendiendo las múltiples ventajas de esta nueva
concepción arquitectónica, el norteamericano Alfred
b) El sistema en espina Hopkins contruyó varias instituciones penales en los
estados de Nueva York y de Pensilvania aceptando las
Nació gracias a una nueva concepción del arquitecto
ideas de Poussin.
francés Francisco Enrique Poussin y se le conoce igual-
mente con los nombres de sistema de peine, de poste Uno de los más completos modelos de este tipo es
de telégrafo, paralelo, etc. Mientras los antiguos sis- la Prisión de Westchester, en el Estado de Nueva York,
temas arquitectónicos ya tienden a caer en completo construida por Hopkins. Su arquitecto resume las ven-
descrédito, la concepción de Poussin se ha impuesto tajas de este establecimiento diciendo:
plenamente. Naturalmente, desde 1898 en que Poussin
levantó la Prisión de Fresnes, en la cercanía de París, "Este partido hace una prisión mejor que la plan-
ta radial de Haviland. Es mejor como tipo y me-
el sistema ha seguido evolucionando y en la actualidad
jor como teoría. Es mejor para el asoleamiento y
se le prefiere en la proyección de los nuevos estable- para la ventilación. Es mejor para una variada
cimientos penales. clasificación de los reclusos y para una mejor
Una prisión de este tipo se compone de un corredor segregación, luego de clasificarlos. Es mejor para
central, denominado "espina", al cual llegan perpendi- su vigilancia y mitiga el rigor de la detención.
Es mejor en su agrupamiento arquitectónico, pues
cularmente los pabellones celulares, de trabajo y de di-
la planta radial no es arquitectural sino mecáni-
versos servicios. A veces estos pabellones se hallan ca y una estructura tal puede difícilmente ser
a un sólo lado del corredor (peine simple) y otras, a convertida en arquitectura. El partido de West-
ambos lados (peine doble). Al último se le conoce con chester provee entonces todo lo necesario para
el nombre de poste de telégrafo, por parecerse a és- detener, segregar y vigilar al recluso, que son
te. Y como los pabellones se construyen paralelamen- las tres cosas esenciales sobre las que debe ser
te unos a otros, se le llama sistema paralelo. juzgada la planta de toda prisión y sobre las
cuales, como principios básicos, todos están ele
Esta concepción arquitectónica posee dos importan- acuerdo. Los principios fundamentales son sim-
tes ventajas: permitir una mejor orientación de los di- ples, definidos y de fácil aplicación" ( 8).
versos pabellones que caen perpendicularmente al co-
rredor central, favoreciéndose, por tanto, la ventila-
e) Sistema de pabellones autónomos
ción, el asoleamiento, la luminosidad, etc.; y simplifi-
car el movimiento de los reclusos, que ha de efectuar-
Se inspira en el principio que deben construirse pa-
se por dicho corredor central.
bellones autónomos para cada categoría de reclusos,
Hay que convenir que este sistema representa una ya que obviamente, al tener que recibir un tratamien-
positiva evolución en la arquitectura carcelaria, por lo to individualizado, requieren de una separación más
cual ha sido aceptado en casi todos Jos países. Sin efectiva y hallarse sometidos a regímenes distintos.
embargo, y no obstante la superioridad del sistema en Para evitar que por rutina se apliquen métodos de tra-
espina, algunos autores juzgan que en el fondo se tra-
ta de una trivial evolución, por cuanto las institucio- 7 HOPKINS, Alfred, Príson<> and príson building, New
nes penales continúan con sus defectos inherentes, que York, 1908.
no han sido salvados por esta concepción arquitectural. 8 Ibídem.

63
tamiento similares, se busca que cada pabellón tenga miento de los reclusos es lograr que los prisioneros
una administración independiente. anhelarán llevar una existencia correcta y útil al salir
en libertad y que lo harán así". En forma similar, la
De acuerdo a las ideas de sus propugnadores, aven-
norma 58 de las reglas mínimas para el tratamiento de
taja al sistema en espina, porque previene las relacio-
los reclusos, adoptadas por el Primer Congreso de las
nes entre diversas categorías de presos, imposible de
Naciones Unidas sobre Prevención del Delito y Trata-
lograrse en las prisiones que tienen un único corredor
miento del Del:ncuente, de agosto de 1955, indica:
común, puesto que, fatalmente y no obstante la vigi-
lancia que exista, siempre se producen contactos en- "El fin y la justificadón de las pe~as y medi-
tre los reclusos. Se juzga pues, que con el sistema das privativas de libertad son, en definitiva, pro-
de pabellones autónomos se supera el part:do paralelo, teger a la sociedad contra el crimen. Sólo se al-
ya que permite una más completa y mejor separación canzará este fin si se aprovecha d período de
entre las distintas categorfas de prisioneros. privación de libertad para lograr, en lo posible,
que el delincuente una vez liberado no solamente
Estas prisiones no abundan aún. En algunos países quiera respetar b ley y proveer a sus necesi-
europeos, especialmente en Suecia y en Yugoslavia, dades, sino también que sea capaz ele hacerlo"
se están empleando algunos establecimientos penales (10).
de este tipo, aunque todavía son escasos. Es muy
temprano para poder señalar las más notables venta- Por tanto, la arquitectura carcelaria ha de procurar
jas y desventajas que ostentan las prisiones que res- que estos objetivos puedan realizarse en la prisión,
ponden a este sistema. En verdad, están en pleno pe- por lo cual los establecimientos penales deberán pro-
rfodo de experimentación. Naturalmente, ofrecen nota- yectarse conforme a tales principios.
bles ventajas. Pero irrefragablemente será necesario es- A continuación. y en forma sintética, se señalará al-
perar a que la práctica las indique y compruebe. gunos de estos elementos fundamentales, cuya acep-
tación adqu:ere una mayor importancia día a d:a. Por-
IV que no basta que se siga un determinado sistema arqui-
tectónico, por creerse que es el mejor. Lo esencial
ELEMENTOS BASICOS DE UNA MODERNA es que el proyecto consulte una serie de elementos
ARQUITECTURA CARCELARIA que se encuentran íntimamente relacionados con el buen
Es posible que los objetivos de un correcto trata- tratamiento que se dé a los internos, según la catego-
miento institucional jamás lleguen a alcanzarse plena- ría a que pertenezcan. La arquitectura carcelaria, por
mente. Pero es incuestionable que los buenos proyec- tanto ha de facilitar que se cumpla el objetivo bás:co
tos arquitecturales vendr2n a auxiPar el cumplim:ento que se otorga a una prisión: readaptar a los presos,
de los fines de la prisión moderna. Una progresista en lo factible.
arquitectura carcelaria deberá hallarse orientada por los
Diversificación de los establ~cimientos
conceptos que conllevan las funciones de los estable-
cimientos penales. Como dijera el eminente penitencia- Si los reclusos pertenecen a diversas categorías, es
r:sta norteamericano, James V. Bennett: "El tipo de edi- obvio que estén internados en diferentes t:pos de ins-
ficación e instalaciones de los establecimientos refleja tituciones, correspondiendo un tipo a cada categoría.
no solamente la filosofía que los informa, sino que Es por tal motivo que actualmente se halla descartado
ejerce una influencia en la clase de programa que se el tipo único de prisión. No solamente deberá proyec-
sigue y en los resultados que podrá obtenerse" (9). tarse distintos tipos de establecimientos penales cuando
Toda política carcelaria se debe basar en la creencia se trate de encausados o condenados; de del:ncuentes
de que los reclusos pueden ser readaptados mediante incorregibles, menos peligrosos y que no acusan ma-
un tratamiento científico. Ya en 1948 la ley sobre jus- yor peligrosidad; de delincuentes políticos o crimina-
ticia criminal de Inglaterra y Gales, en su regla sexta, les comunes; de varones o mujeres; de jóvenes-adul-
establecía: "El propósito de la educación y del trata-
10 Reglas mínimas para el tratamiento de reclusos,
~) Cit. por ALTMAJ\'1\ SMYTHE, Julio, Bases para un Primer congreso de las Naciones Unidas sobre pre-
plan de tutela y política penitenciaría nacional, Li- vención del delito y tratamiento del delincuente, Gi-
ma, 1962. nebra, agosto-setiembre de 1955.

64
tos o adultos; etc. También deberá considerarse si se be concluir, pues, que las cárceles deberán construirse
pretende construir una prisión de tipo cerrado, semi- con diferentes criterios arquitectónicos en lo que se re-
ab:erto o abierto o si se le va a destinar a penados fiere a la seguridad. Es totalmente erróneo proyectar
que gozan de una disciplina morigerada o que se en- prisiones con un único criterio de seguridad.
cuentren en el período de pre-libertad. Igualmente, ha- Según John H. Callender, el 30% de los recluídos no
brá de contemplarse si se trata de presidios de tipo requiere o requiere pocas medidas precaucionales; 60%
industrial, agrícola o mixto. Finalmente, no podrán ol- las necesita en forma limitada; y sólo un 10% debe ser
vidar los arquitectos si se va a proyectar una insti- objeto de una máxima seguridad. Para Carlos D. Whi-
tución especializada: para enfermos mentales o que su- te, los presos deben ser clasificados en tres grupos:
fran perturbaciones nerviosas rápidamente curables, de mínima peligrosidad; de mediana peligrosidad, y
centros de observación y de clasificación, etc. de peligrosidad máxima. De acuerdo a este autor, los
El proyectista, por tanto, deberá conocer previamente últimos nunca exceden de un 30% del total.
a qué categoría de penados se destinará la institución,
partiendo de la idea de que los reclusos son distin- Estos porcentajes corresponden a delincuentes de los
tos y que, por ende, de.ben ser internados en diferen- Estados Unidos y, por tanto, no es aceptable que se
res tipos de establecimientos, esto es, en prisiones di- generalicen a todos Jos países. Debe admitirse cierta
versificadas. flexibilidad, como es obvio. La mayoría de los tratadis-
tas sostienen que de todos los reclusos, únicamente
Hoy, aunque se acepta que los reclusos alienados y
de un 10 a 30% requieren de máximas med:das pre-
enfermos mentales nunca deben ser recluídos en pri-
cautorias; de un 40 a 60% necesitan de pocas medi-
siones y que las autoridades penitenciarias deben to-
das de seguridad; y de un 20 a 30% han de ser coloca-
mar disposiciones para trasladarlos, lo antes posible,
dos en establecimientos abiertos o de mínima seguridad.
a establecimientos para enfermos mentales (Norma 82
Son pocas las cárceles, por tanto, que deban proyec-
[1] de la Reglas Mínimas de las Naciones Unidas) (11},
tarse con un exclusivo criterio de seguridad. Sin em-
en Inglaterra ya se ha construido una prisión siquiá-
bargo, generalmente se sigue exagerando la idea de
trica, especialmente diseñada para que s¡rva de clíni-
segregación y la de impedir las evasiones.
ca, por las ventajas que significa esta institución. Na-
turalmente en estos casos los arquitectos deberán estar Al proyectarse la mayoría de las cárceles no debe
asistidos por médicos especialistas, al proyectar una prevalecer el criterio precaucional, no solamente por-
prisión de este tipo. Otro tanto ha de suceder cuando que son escasos los delincuentes que requieren máxi-
construyen en un establecimiento un anexo siquiátrico, mas medidas de seguridad, sino porque con los altos
gabinete imprescindible en toda prisión moderna, pues- muros de ronda, los complicados sistemas de cierre
to que no sólo sirve para ayudar a enfermos nervio- de celdas y demás dependencias, el abuso de barro-
sos o mentales rápidamente curables, sino también pa- tes y rejas, etc. elevan verticalmente el presupuesto
ra desenmascarar a los simuladores. de la construcción. Barnes y Teeters han señalado que
Como es de verse, el proyectista necesariamente de- en el Estado de Nueva York se han perdido millones
berá tener presente que no es aceptable que se cons- de dólares construyendo seis o siete prisiones para
truyan prisiones de un tipo único, sino que éstas im- reclusos de máxima seguridad, cuando éstos no pasan
prescindiblemente deben responder a distintos tipos, es- de un 20% del total.
to es, que hay que llegar a la diversificación de las
En los Estados Unidos el equipo carcelario de segu-
instituciones carcelarias.
ridad para un recluso de mínima peligrosidad cuesta
La seguridad en las prisiones unos 600 dólares; para uno de mediana peligrosidad,
2,000 dólares, y para uno de máxima, 3,000 dólares.
Entre las diversas categorías de internos hay algu- Como expresa el arquitecto Horacio Moyano Navarro:
nos que seguramente intentarán evadirse; otros, que "Un sujeto de máxima peligrosidad requiere un gasto
requieren algunas medidas de seguridad moderadas equivalente al de cinco de peligrosidad mínima" (12).
para evitar la fuga; y existe un tercer grupo que no
necesita ninguna de estas medidas precaucionales. Ca-
12 MOYANO NAVARRO, Horacio, "Arquitectura carce-
laria", en Revista penal y penitenciaria, Buenos Aires,
11 Ibídem. enero-diciembre de 1946.

65
Construir cárceles de max1ma seguridad para todos los "La responsabilidad ele que aún se usen celdas
internos significa un dispendio inútil. que parecen jaulas, con paredes de acero, barro-
tes y complicados sistemas de cierre, recae ente-
Muy escasas son las prisiones modernas que presen~ ramente en los fabricantes de artículos para cár-
tan muros en todo su perímetro. La tendencia actual celes. Convencen a los funcionarios carcelarios
es emplearlos solamente en los pabellones en donde que el único medio de evitar evasiones son los
se alojan delincuentes de real peligrosidad, los que, dispositivos que venden" ( 14)
como se ha dicho, no pasan de un 30% del total. Se
prefiere en estos casos el sistema "self-enclosed", sir- Es así como los arquitectos que proyectan y cons-
viendo de muros las mismas paredes del pabellón. truyen cárceles, al igual que el personal superior pe-
Cuando aún prevalece el criterio· de seguridad, se em- nitenciario que debe dar su visto bueno a los proyec-
plea un sistema de alambrada electrizada, con baja tos, se dejan convencer por los vendedores de estos
tensión, de tal suerte que no mata al recluso que in- artefactos. En cuanto al segundo factor, es de señalar
tenta huir, sino que lo aturde. Naturalmente, este sis- que -especialmente en algunos países- los altos fun-
tema de alambrada rodea toda la cárcel. cionarios encargados de aceptar determinados proyec-
tos reciben buenas comisiones de estos fabricantes.
Una prisión sin muros parece algo insólito para el
común de las personas, para las que el muro es la La verdadera seguridad no la dan las rejas ni los
principal característica de un presidio. Es que desco- dispositivos mecánicos, sino los buenos custodios y la
nocen que los muros afectan negativamente la siquis propia ventana de cada celda, si se la construye apro-
del recluso, y por consiguiente dificultan su readap- piadamente.
tación. Además, como ha dicho Alfred Hopkins, "la
teoría del muro inescalable es pura ilusión" y "la se-
guridad la dan los custodios" (13). Finalmente, hay que Los sistemas de celdas
considerar el alto costo de la construcción del muro
circundante, que lo race totalmente anti-económico. Frente al horroroso hacimiento que prevalecía en la
prisión antigua, el sistema celular significó un progre-
La experiencia de muchos años enseña que si un pre- so efectivo, ya que evitó la contaminación social y mo-
so logra fugar de su celda y del pabellón en que se ral del recluso. Todas las prisiones modernas tienen
encuentra, el muro constituirá un obstáculo absoluta- celdas. Para Moyano Navarro, la celda
mente secundario para evitar la huida. En las prisio-
nes más modernas no hay muros ni alambradas. Se "es el elemento básico del partido y la unidad don-
los ha remplazado por un sistema completo de tele- de el recluso pasará la mayor parte ele su conde-
visión, que ha dado espléndidos resultados, si el per- na. De su eficiente proyecto dependerá no sólo
sonal de guardianes es capaz, honesto y responsable. la arquitectura del conjunto sino también, lo que
es mucho más importante, gran parte de la in-
Al igual que el muro, las rejas y los complicados fluencia moral del instituto sobre el espíritu del
sistemas de cierre son sumamente costosos. Hoy se tra- recluido" ( 15).
ta de evitarlos, en lo posible. Empero, aún en cárce-
les últimamente levantadas se sigue abusando de los Cuando el preso vivía todo su tiempo en su celda,
ya clásicos elementos de seguridad. Es de preguntar- trabajando en ésta, fue lógico que sus dimensiones
se a qué factor obedece tal fenómeno. tuvieran una relativa extensión. Pero en la actualidad
se juzga que la celda sirve únicamente para que el
Son dos, los prinr.ipales de estos factores: el lucro
recluso descanse y duerma, por lo que sus dimensiones
de los fabricantes de estos dispositivos mecánicos y re-
se han limitado. Además, esta reducción del tamaño
jas, e ignorancia y deshonestidad de los propios fun-
de las celdas impide que sean colocados varios reclu-
cionarios de las prisiones.
sos en una sola celda cuando el establecimiento está
Refiriéndose al primero de estos factores, el Informe sobrepoblado, lo que es frecuente en países como el
de la Comisión Nacional de Prisiones de los Estados nuestro.
Unidos, presidida por Robert L. Davidson, señalaba:
14 Cit. por MOYANO NAVARRO op. cit.
13 HOPKINS, A., op. cit. 15 Ibídem.

66
La norma 9 [1] de las reglas m1mmas para el trata- clima, particularmente en lo que concierne al vo-
miento de los reclusos de las Naciones Unidas esta- lumen de aire, superficie mínima, calefacción v
blece: ventilación" ( 19). "'

"las celdas o cuartos destinados al aislamiento Hoy se evitan las celdas que presentan un exagera-
nocturno no deberán ser ocupados más que por do sistema de cierres mecánicos, barrotes, etc. Por
un solo recluso. Si por razones especiales, tales tanto, las celdas con rejas por el frente y plenamente
como el exceso temporal de población carcelaria, visibles desde fuera, que sitúan al preso como fiera en-
resultara indispensable que la administración pe- jaulada, se hallan totalmente descartadas. Actualmente
nitenciaria central hiciera excepciones a esta re- se está construyendo celdas con puertas que llevan una
gla, se deberá evitar que se alojen dos reclusos mirilla para ejercer la vigilancia interior y una ventani-
en cada celda o cuarto individual" ( 16).
lla alambrada para la ventilación. Algunas prisiones
prefieren las puertas de tipo corredizo que sirven a
Las finalidades de esta norma son numerosas. Pero
todo un sector de celdas, para abrirlas y cerrarlas si-
destacan dos: evitar, en lo posible, la homosexualidad.
multáneamente; generalmente se cuenta con un dispo-
y otorgar a cada recluso la privacidad que requiere.
sitivo que permite la apertura o el cierre de una puer-
Cada preso, pues, debe tener su propia celda que de-
ta particular en forma independiente. En todo caso, se
be servir de dormitorio individual, contando con una
tiende a emplear puertas de distintos tipos para las
pequeña mesa, cama empotrada, lavatorio, retrete, clo-
diversas categorías de presos, reaccionando contra la
set, etc., los que se dispondrán para que integren un
costumbre inadecuada de tener puertas macizas en to-
único conjunto. La mesa, para escribir o leer, tendrá
das las celdas. Hugh Klare critica esta estructura se-
buena luminosidad natural y artificial, por lo que se la
ñalando que no es aceptable colocar a delincuentes
coloca debajo de la ventana de la celda externa. La
agresivos y claramente anti-sociales en la misma cla-
norma 11 de las acotadas reglas mínimas determina que
se de celdas que los delincuentes menores o relativa-
"la luz artificial tendrá que ser suficiente para que el
mente sin peligro.
recluso pueda leer y trabajar sin perjuicio de su vis-
ta". Y la norma 12 señala: "las instalaciones sanita-
rias deberán ser adecuadas para que el recluso pueda Celdas interiores y exteriores
satisfacer sus necesidades naturales en el momento
oportuno, en forma aseada y decente" (17). Generalmente, las celdas integran pabellones que for-
man un paralepípedo. Estos pabellones integran uno o
Además, cada pabellón celular deberá contar, igual- más pisos. Sin embargo, las celdas de estos pabello-
mente, con las instalaciones de baño y duchas, para nes suelen responder a tres tipos distintos: interiores,
que cada recluso pueda bañarse o ducharse a una exteriores, semi-exteriores o mixtas. Consiguientemente,
temperatura adaptada al clima, como lo indica la nor- hay dos sistemas de celdas que predominan, ya que las
ma 13 de estas reglas mínimas. Esta norma agrega que mixtas combinan las características de los tipos funda-
el baño o la ducha se tomará por lo menos una vez mentales.
a la semana en clima templado, debiéndose considerar
la estación y la región geográfica en la que esté si- Las interiores se construyen con sus muros posterio-
tuada la cárce1.(18) res enfrentados, separados únicamente por un angosto
corredor en donde se hallan los conductos por donde
Finalmente, los proyectistas deberán tener presente corren los alambres de la electricidad, las columnas
lo preceptuado por la norma 10 de las acotadas reglas sanitarias, los aparatos de calefacción, etc. Estas cel-
mínimas: das se abren hacia un corredor que la separa del muro
externo y este corredor tiene unos 3 ó 4 metros de
"Los locales destinados a los reclusos y especial-
ancho. La vigilancia se ejercita desde este corredor,
mente aquellos que se destinan al alojamiento de
los reclusos durante la noche, deberán satisfacer el que es lo bastante ancho, a veces, para que sirva
las exigencias de la higiene, habida cuenta del asimismo como patio de recreo a los reclusos de cada
piso. La luminosidad llega desde unas ventanas en-
16 Reglas mínimas ... , op. cit. rejadas que se encuentran en el muro externo, por
17 Ibídem.
18 Ibídem. 19 Ibídem.

67
lo que las celdas generalmente son oscuras, mal ai- zada, que luego en la prúctica no se usan por su
readas y hasta húmedas. Consiguientemente, estas cel- alto costo do funcionamiento. Cuando se usan
das interiores forman pabellones que tienen su propio ventiladores, las celdas superiores se hacen insu-
corredor hacia la pared exterior, por lo que en cada fribles por el calor v las inferiores por el frío.
piso existen corredores. En cuanto a las cel¿las externas, la mayoría de
los directores se pronuncian en contra por los
Las exteriores tienen su pared posterior en el mismo peligros de evasión. Empero, debe recordarse que
muro del pabellón, por lo que la entrada a la celda no hay cárcel alguna de la que sea imposible fu-
se hace por un corredor común para dos pabellones garse. En general, las fugas responden no a in-
del piso. Los diversos servicios sanitarios, eléctricos, convenientes del tipo, sino a deficiencias de vigi-
lancia. En Europa no existe cárcel que no sea
etc. se hallan empotrados en la pared que da al corre-
del tipo de celdas externas y los penalistas eu-
dor central y común, dispuestos para que sirvan a dos
ropeos que visitan los Estados Unidos no llegan a
celdas a la vez. La ventana de estas celdas se cons- comprender cómo es posible que aún exista en es-
truye en el muro externo y se abren hacia un patio, te país el tipo interno, sobre todo teniendo en
por lo que reciben una mayor luminosidad. cuenta que la potencialidad lumínica está en
Conviene señalar que, con excepción de la prisión razón inversa del cuadrado ele la distancia. Es de-
cir que una celda a cinco pies ele una ventana re-
de Gante, en la historia de la arquitectura carcelaria
cibe l/2 de la luz que recibiría si tuviera ventana
aparecieron primero las exteriores. Predominaron pos- directa. La ventilación artificial pasa a segundo
teriormente las interiores buscándose una mayor segu- plano cuando cada celda es externa y tiene venta-
ridad. Pero actualmente se prefieren las celdas exterio- na, y la calefacción del pabellón puede hacerse
res por estimarse más apropiadas en muchos sentidos. perfectamente con cualquier sistema en uso, ya
El tipo de celdas internas sólo se emplean excepcional- sea de agua caliente o de vapor. Son estas razo-
mente, cuando están destinadas a reclusos de máxima nes de mejor ventilación, luz, calefacción, efecto
seguridad o para disciplinar a algún recluso. sicológico sobre el recluso y mucho menor costo
lo que hace dar preferencia al sistema de cel-
Es digno de anotarse que en las prisiones europeas das externas" ( 20).
rara vez se han aceptado las celdas interiores, desde
remotos tiempos. En los Estados Un:dos, por el con- La seguridad de las celdas se halla en su ventana
trario, han predominado las interiores, constituyendo y la de los pabellones celulares en la reja que se colo-
un típico ejemplo la prisión de Sing-Sing. Empero, hoy ca a la salida de cada corredor común.
allí mismo se están prefiriendo las prisiones con celdas Cuando la ventana es construida siguiendo determi-
externas. nadas orientaciones, la evasión del recluso es prácti-
La ventaja de la celda interior es la mayor seguri- camente imposible desde su alojamiento. Empero, si el
dad que ofrece. Pero la celda exterior tiene numero- preso logra fugar de su celda y del pabellón, el mu-
sas ventajas, a saber: permite una mejor vigilancia des- ro constituirá un obstáculo secundario.
de un único corredor central y común a dos pabellones, En la celda externa la ventana da hacia un patio.
lo que ha de significar efectivo ahorro en personal de A veces lleva una reja en su parte interior, por lo
guardia; produce efectiva economía en la superficie que que la ventana puede abrirse hacia afuera y, de esta
cubre; es más humana e higiénica, etc. Robert David- suerte. igualmente se evita la acción de la humedad so-
son se refiere a estas celdas: bre el enrejado. Generalmente las rejas se hacen de
tal suerte que tienen una agradable apariencia, igual
"Las ventajas del sistema de celdas interiores son
a las que tienen las casas-habitación.
que las evasiones son doblemente difíciles y que el
manejo de los presos se simplifica. El tipo no es, Las nuevas prisiones, sin embargo, ya no tienen re-
sin embargo, recomendable, a no ser para los jas o ventanas que poseen dispositivos especiales de
reos de máxima peligrosidad o como sección de seguridad, los que se encuentran fijos en el propio
celdas de castigo. Su influencia sobre el delin-
montaje de la ventana, con vidrios relativamente grue-
cuente, semejante a una fiera enjaulada, es de-
primente. Otra objeción es la falta de luz di- sos y con postigos de limitada abertura, abriéndose o
recta en las celdas y su defectuosa calefacción y cerrándose la ventana mediante un sencillo mecanismo.
ventilación. Cientos ele miles de dólares se han
invertido en instalar sistemas de ventilación for- 20 Cit. por MOYANO ?\AVARRO, IIoracio, op. cit.

68
El recluso, salvo casos excepcionales, no podrá huir efusos que puede aceptarse en cada dormitorio. En los
de su celda, pero recibirá la grata sensación de es- Estados Unidos hay dormitorios en que se alojan 200
tar ocupando una habitación usual, toda vez que las reclusos, lo que constituye una exorbitancia. Como
ventanas, salvo el acero que tienen, son idénticas a afirma Davidson, "cuando la cantidad aumenta se mul-
las que se emplean frecuentemente en las casas-habi- tiplican las dificultades de control y vigilancia" (23).
tación. Por otro lado, las celdas tienen una buena lu- Algunos tratadistas señalan como el máximo que pue-
minosidad, aireac10n, etc. El un1co, pero efectivo, den estar en un dormitorio, 25 presos.
dispositivo de seguridad está representado por los
El distinguido penalista argentino Sebastián Soler se
flejes de fuerte acero fijos en el propio montante de
muestra opuesto al sistema de dormitorios en América
la ventana.
Latina, tomando en consideración la índole de nuestros
Alojamientos colectivos infractores. Otros latinoamericanos auspician la implan-
tación de alojamientos colectivos. Sin llegar al extre-
Los dormitorios comunes para un grupo de reclusos mo de Soler, quien sostiene que jamás deberían haber
se emplean en algunas prisiones y se les destina a de- dormitorios en las cárceles de América Latina, cabe se-
lincuentes de mínima peligrosidad, debidamente selec- ñalar que no se debe abusar de este sistema y que,
cionados. En ciertos países se suele construir cárceles en todo caso, debe producirse una previa y cuidadosa
en las que predomina el sistema de dormitorios o cua- selección de los reclusos que serán colocados en un
dras. Esta tendencia no es recomendable. No obstan- alojamiento colectivo.
te lo señalado, Davidson apunta que es posible acep-
tar un criterio de mitad y mitad, que los penitencia- Como todo sistema, el de dormitorios ofrece algunas
ristas no aceptan. En Canadá funcionan algunas cár- ventajas y desventajas. Moyano Navarro señala las si-
celes que tienen un 80% de los penados en dormito- guientes ventajas: menor costo de construcción por
rios y sólo un 20% en celdas unipersonales, lo que penado; mejor efecto sicológico sobre algunos penados,
constituye una aberración técnica. debido a la convivencia; mejor ventilación; y mayor
cubaje de aire por penado. Las desventajas que halla
El empleo de los alojamientos colectivos debe cons-
el mismo autor son las que siguen: mayor dificultad
tituir la excepción. Además, deberá tenerse presente
consiguiente en la clasificación de los reclusos; menor
lo que consigna la norma 9 [2] de las reglas mínimas
seguridad en la reclusión; posibilidad de contactos in-
ya citadas: "Cuando se recurra a dormitorios, éstos
convenientes entre los penados; y que hay reclusos
deberán ser ocupados por reclusos cuidadosamente se-
sobre quienes el régimen celular tiene mejor resultado
leccionados y reconocidos como aptos para ser aloja-
que la convivencia en dormitorios (24). Habría que agre-
dos en estas condiciones"(21 ). En verdad, el proble-
gar otras desventajas: dificultades para mantener la
ma de los dormitorios en las prisiones es serio, espe-
disciplina apropiada; inevitables hurtos que se produ-
cialmente si no se selecciona debidamente a los reclu-
cen en estos alojamientos colectivos; frecuentes roza-
sos que han de ser colocados en estos alojamientos co-
mientos entre los reclusos; y necesidad de establecer
lectivos. En todo caso, sólo una ínfima minoría debe
una vigilancia especial durante la noche.
estar en dormitorios.
En todo caso, todas las presuntas ventajas de este
En algunas naciones se acepta un sistema mixto, es-
sistema se anularían si falta una apropiada vigilancia
to es, de celdas y dormitorios, guiándose especialmen-
y supervisión y si no se produce una selección cientí-
te por un sentido de ahorro. Pero podría generalizar-
fica entre los presos que se alojarán en estos dormi-
se a todos los países la opinión de Alfred Hopkins, re-
torios.
ferente a las prisiones de los Estados Unidos, quien de-
termina que para ese país "son más adecuadas las cár-
Ubicación de la prisión
celes exclusivamente celulares que las prisiones con
dormitorios o mixtas" (22). Indiscutible interés tiene la apropiada ubicación de
Otro problema que debe solucionarse al implantar el los establecimientos penales. Como es obvio, esta ubi-
sistema de alojamiento colectivo es el número de re- cación habrá de variar según cual sea el tipo de ins-

21 Reglas nummas ... , op. cit. 23 Cit. por MOYANO .:\'AVARRO, Horacio, op. cit.
22 HOPKINS, A., op. cit. 24 Ibídem.

69
titución que se proyecte. Habrá que considerarse fac- ra asesorar a la Comisión antes indicada, quien insis-
tores muy diversos: la categoría de los infractores que tió en que los tribunales del crimen integraran un con-
se internarán en la prisión; si se trata de un estable- junto con la cárcel.
cimiento de tipo industrial, agrícola o mixto; si la insti- Los especialistas recomiendan que se levanten las cár-
tución recibirá encausados o condenados; si es prisión celes destinadas a encausados en las ciudades por los
para varones o para mujeres; etc. El proyectista bus- siguientes motivos: a) evitar las fugas de los reclusos
cará ubicar el establecimiento tomando en cuenta fac- en el inevitable traslado de la prisión a los tribuna-
tores muy heterogéneos. Sería largo y ocioso determi- les del crimen y su regreso a la cárcel; b) disminuye
nar la ubicación de cada tipo de prisión. Por tanto, los gastos de estos traslados; e) facilita la asistencia
sólo nos referiremos a la ubicación que deben tener del encausado de parte de su abogado, permitiendo
las cárceles destinadas a los encausados y a los con- a éste ponerse en diario contacto con su defendido,
denados. evitándose pérdida de tiempo y viajes largos; d) se
La cárcel para enjuiciados debe hallarse en la ciu- produce ahorro efectivo en la defensa, por las razo-
dad y funcionar a manera de anexo de los tribunales nes expuestas; e) permite las visitas de los familiares
del crimen, formando un conjunto armónico. Esa es y amigos, evitando el aislamiento de los enjuiciados;
la opinión de los expertos más calificados en cuestio- y f) se evita todo bochorno para el encausado al ser
nes penitenciarias. Frecuentemente, los tribunales del visto mientras es llevado a los tribunales o regresan-
crimen suelen funcionar en local cercano a la cárcel, do de éstos lo que de otra forma es inevitable, aún
unido a ésta mediante un pasaje subterráneo. No es si se usan carros especiales.
imprescindible, por tanto, que los tribunales del cri- Las prisiones para los ya sentenciados deben cons-
men se hallen en la misma prisión. Esta ubicación y truirse en el campo, como lo propugnan Collender y
esta organización presenta algunas desventajas. Pero Hopkins, quienes sostienen, sin embargo, que deberán
son siempre mayores sus ventajas. ubicarse a una distancia no mayor de 8 a 12 kilóme-
tros de una ciudad que acuse algún progreso indus-
Los contrarios a esta ubicación señalan que el costo
trial, salvo que se trate de un presidio de tipo neta-
del terreno en la ciudad siempre es más elevado que
mente agrícola. Aun en este caso, se juzga que la pri-
en el campo, en lo que tienen razón. Pero este in-
sión no debe estar aislada, sino relativamente cercana
conveniente se salva construyéndose la cárcel en una
a una población.
limitada extensión de terreno y levantándola hacia arri-
ba, esto es, haciendo una construcción de varios pisos, Además de estas condic:ones de ubicación, para cons-
siendo cada piso independizado para obtener una bue- truirse una prisión para sentenciados deben los proyec-
na separación de los d:versos reclusos. tistas contemplar algunos factores de suma importancia:
a) debe evitarse que el terreno destinado a la institu-
Esta tendencia se manifiesta en la cárcel para encau-
ción se halle rodeado de cerros, por los peligros que
sados situada en Brooklyn, Nueva York, la que viene
conlleva este hecho para la· propia seguridad del pre-
funcionando con excelentes resultados. Idéntica incli-
sidio; b) que se constate la segura posibilidad de go-
nación muestra el proyecto de cárcel para enjuiciados
zar de buenos sistemas de agua potable, desagues, etc.;
de Buenos Aires, que se comenzó a construir en 1962.
e) que se estudie técnicamente la naturaleza del terre-
La edificación no ha continuado por insalvables dificul-
no, no sólo con vista a la construcción de la insti-
tades económicas. Es de señalar que se la ha proyec-
tución, sino, igualmente, contemplándose las posibili-
tado para que cada piso integre una unidad indepen-
dades de destinar parte de éste a labores agrícolas
diente. Además, está diseñada en forma tal que es su-
-aún en los de tipo industrial- y a la crianza de cer-
mamente difícil evadirse de ella.
dos, gallinas, etc; d) que la prisión esté unida con la
La ubicación de esta prisión fue escogida por la Co- ciudad por un buen sistema de carreteras y de ferro-
misión de Construcciones Carcelarias de la República carriles, facilitándose los viajes de los familiares de
Argentina, creada en 1960, después de recibir contes- los penados, de los empleados de la institución, etc.;
tación a las encuestas que fueron enviadas a diversos e) que estos medios de comunicación sirvan, asímismo,
países. Se mostró ampliamente de acuerdo con esta para que se lleven los víveres al presidio, para que
ubicación el experto Jean Dupréel, reconocida autori- puedan llegar los materiales para el trabajo de los pe-
dad en la materia enviado por las Naciones Unidas pa- nados y puedan sacarse los productos ya elaborados

70
por estos; f) que pueda aprovecharse las redes de los pns1on peruana proyectada en 1964 y que se halla edi-
servicios eléctricos públicos, sin perjuicio de que la ficada a medias, actualmente aloja a más de 1,500
institución tenga su propia planta generadora, situada presos y, cuando esté terminada su capacidad será de
fuera de la prisión, para ser empleada en caso de ac- unos 3,000 reclusos.
cidentes en las redes generales comunes, debiéndose
La institución gigante, es verdad, significa que se po-
contar con fluido eléctrico en todo momento, para la
seen serviclos comunes y que puede reducirse el per-
iluminación del establecimiento y para que pueda usar-
sonal en proporción, lo que representa efectivo ahorro
se la maquinaria industrial; y g) que pueda contarse
en gastos administrativos. ¿Vale la pena este menor
con suficiente espacio para el funcionamiento de la pri-
gasto si con ello se desvirtúa la finalidad de la pri-
sión y la construcción de casas para el personal que
sión? No debe olvidarse que toda gran prisión cues-
ha de vivir cerca del establecimiento.
ta sumas enormes. Es preferible, por tanto, construir
varias instituciones pequeñas, pero diversificadas.
Capacidad
¿Qué capacidad debe tener una prisión?. Natural-
Como escribe el respetado criminólogo Manuel Ló- mente, ésta ha de depender de la categoría de presos
pez-Rey: que aloje, toda vez que las prislones abiertas han de
tener una mínima capacidad. La norma 63 [3] de las
"En cuanto a los edificios, éstos casi siempre son reglas mínimas de las Naciones Unidas señala textual-
inadecuados. Muy recientemente, nuevas peniten- mente:
ciarías excesivamente grandes han sido construi-
das en algunos países". Y agrega: "La preferen- "Es conveniente evitar <1ue en los establec:imien-
cia, por mal entendidas razones de economía y tos cerrados el número de reclusos sea tan ele-
administración, por la gran prisión constituye un vado que llegue a constituir un obstáculo para
fenómeno poco comprensible". la individualización del tratamiento. En algunos
"Por una variedad de razones, algunas de índole países se estima que el número de reclusos en di-
espectacularmente política, los gobiernos se hallan chos establecimientos no debe pasar de 500. En
frecuentemente interesados en construir grandes los establecimientos abiertos, el número de deteni-
prisiones que son debidamente alabadas, pero que, dos deberá ser lo más reducido posible" ( 26).
en fin de cuentas, constituyen una negación de
una adecuada política penitenciaria" ( 25). Muchos autores consideran que la capacidad indicada
por la norma antes trascrita es demasiado grande. Ca-
Los juicios del Maestro español debieran ser toma-
llender cree que una prisión debe alojar únicamente a
dos muy en cuenta por los proyectistas de prisiones.
unos 250 reclusos y Klare estima que la capacidad de-
Unánimemente, los penitenciaristas se muestran fran-
be ser de unos 150 a 200 presos. En Inglaterra se
camente contrarios a la prisión gigante, por estimarla
construyen establecimientos para unos 300 internos; en
una aberración en todo sentido. Un establecimiento de
Francia, para 250; en Dinamarca, para 120; y en Suecia,
esta clase es difícil de manejar, su costo es muy eleva-
la capacidad máxima es de 250 internos, bajando en
do y, en especial, imposibilita el tratamiento individua-
las prisiones abiertas a 8 ó 1 O reclusos, generalmente.
lizado de los internos. Empero, es habitual que en los
Estados Unidos y en los pasíes de América Latina gocen Como es lógico, la capacidad de una inst:tución de-
de preferencia las grandes prisiones, sin llegarse a com- penderá, igualmente, de las posibilidades económicas
prender que con ellas se desnaturaliza la finalidad de cada país, así como de otros muchos factores, co-
esencial del establecimiento penal. mo la peligrosidad de los delincuentes, la aptitud de los
guardias, etc.
Muchas prisiones de los Estados Unidos tienen capa-
cidad para unos 2,000 reclusos. Algunos establecimien-
tos alojan a cerca de 5,000. En América Latina, igual- Talleres
mente, se sigue levantando prisiones gigantes, con
capacidad para 1,500 internos o más. Por ejemplo, una Ya John Howard, citando a Voltaire, señalaba que si
a un hombre se le convertía en un sujeto diligente,
25 LOPEZ REY Y ARROYO, Manuel, "Teoría y prácti- éste se haría honesto. Desde hace mucho tiempo las
ca en las disciplinas penales" en Cuadernos de Cri-
minología, México, N9 22, 1960. 26 Reglas mínimas ... , op. cit.

71
autoridades carcelarias han prestado debida atención Como lo ha establecido uno de los congresos auspi-
al trabajo de los reclusos. En verdad, el trabajo pe- ciados por las Naciones Unidas, estas labores sirven
nitenciario ha sido un tema que ha interesado tanto "como medio de promover la readaptación del reclu-
a los especialistas como a los profanos. so, prepararlo para una profesión, inculcarle hábitos de
trabajo y, además, como medio de evitar la ociosidad
Pero actualmente, el trabajo de los internos ha de-
y el desorden" (29). Como es de verse, las finalida-
jado de ser un castigo más, que se unía a la pena.
des que se otorgan a este trabajo son absolutamente
El progreso doctrinario ha humanizado y tecnificado
diferentes a las que antiguamente se le daban.
esta labor, favoreciendo a los penados. Hoy ya ha si-
do superado el concepto de la industrialización de las El trabajo puede efectuarse dentro o fuera de la pri-
pris:ones, que buscaba cubrir los gastos de la insti- SIOn. Cuando se efectúa en la institución, jamás se
tución con los ingresos que producía el trabajo de realiza en la celda, como antes, sino en talleres, de-
los presos. Lo que se busca actualmente es que el bidamente dispuestos y acondicionados. Estas labores
trabajo carcelario se oriente, para que, con su ayuda, se cumplen bajo la dirección de un personal competen-
se alcance la hipotética readaptación del delincuente, te. Además, se selecciona científicamente al grupo de
sin descuidarse el rendimiento económico. reclusos que deberá trabajar en cada taller.

Como ha dicho Thorsten Erickson, indiscutida auto- No obstante los buenos deseos de las autoridades
ridad en materias penitenciarias, refiriéndose a las ins- de las prisiones, es sumamente difícil encontrar traba-
tituciones carcelarias de su país: jo a todos los presos. En algunos establecimientos
se procura celebrar contratos con empleadores particu-
"Cuando construimos un nuevo establecimiento, lares, para salvar la situación. Pero, como señala John
abierto o cerrado, construimos primero la fábri- Madge: "existen límites notables para esta clase de
ca y después colocamos la prisión al lado . Para
contratos, aparte del peligro de la explotación del tra-
decirlo de otro modo, el trabajo desempeña un
bajo del recluso" (30).
papel preponderante en el tratamiento de presos
en Suecia" ( 27). En todo caso, el trabajo es uno de los medios esen-
ciales para que el recluso pueda readaptarse social e
Actualmente, el trabajo carcelario posee dos fines
individualmente. Por tanto, todo proyecto de prisión
esenciales: promover la laboriosidad de los reclusos, y
debe contemplar la construcción de los talleres y los
procurar que con el producto de este trabajo se pa-
ambientes que deben tener para que se lleve a cabo
guen los gastos que ocasionen los propios internos.
la labor penitenciaria, teniendo en cuenta las finalida-
Sin embargo, debe predominar el primero de estos
des que se persigue con el trabajo carcelario; las ne-
objetivos. En el trabajo penitenciario debe respetarse
cesidades industriales y comerciales de la región; la
lo que determina la norma 72 [1 y 2] de las reglas mí-
ubicación de la institución; el número de los reclusos
nimas acotadas:
que laboran en cada taller; e~c. Basado en las esta,
dísticas y asesorado por las autoridades respectivas,
"La organización y los métodos de trabajo peni-
el proyectista deberá idear Jos talleres conformándolos
tenciario deberán asemejarse lo más posible a
los que se aplican a un trabajo similar fuera del a Jos datos recogidos, procurando que la clasificación
establecimiento, a fin de preparar a los reclusos de los internos se extienda igualmente a los talleres
para las condiciones normales del trabajo libre" presentes y futuros. Finalmente, deberá concebir estos
y "Sin embargo, el interés de los reclusos y de su talleres para que no se produzca contrabando al exte-
formación profesional no deberán quedar subordi- rior o hurtos en el interior.
nados al deseo de lograr beneficios pecuniarios ele
una industria penitenciara" ( 28). De acuerdo al pensamiento de Davidson, "salvo que
las industrias a explotarse sean de aquellas que requie-
ren maquinaria pesada, debe hacerse talleres modernos,
27 ERICKSON, Thorsten, "Problemas relacionados con
la reforma del tratamiento de la delincuencia", en
Archivos de criminología, neuro-siquiatría y disci- 29 Ibídem.
plinay conexas, Quito, N<.) 44, octubre-diciembre de 30 MAGDE, John "Prison design and penal reform", en
1963. Revista internacional de política criminal, Naciones
28 Reglas mínimas ... , op. cit. Unidas, Nq 17-18, octubre de 1961.

72
simples y que permitan la adición de nuevos pisos" (31 ). en una prisión moderna. Es preferible que se proyec-
El área debe calcularse a razón de 15m2. por hombre ten pequeños comedores separados, uno para cada
y los salones deberían tener las siguientes dimensiones: pabellón celular y que, además, sirve como local de
ancho, 4 metros; largo, 18 metros; y alto, 4 metros. recreación. Está demás indicar que nunca debe acep-
El mismo Davidson agrega: tarse que, salvo casos muy especiales, el recluso coma
en su celda.
"Debe tenerse presente que sólo la mitad ele la
población carcelaria trabajará y se emplearán más En todo caso, se emplea una cocina central, lo que
hombres por múquina que en la industria libre. es preferible y siempre más econom1co, que sirva a to-
Los talleres clarún mejor resultado si, desde ellos, da la población carcelaria. Desde esta cocina central
puede verse el panorama exterior. Como la salida se llevan los alimentos ya preparados a cada uno de
de los productos serú mucho más lenta que en el
los pequeños comedores en carros térmicos, lo que per-
comercio libre, la capacidad normal de aquéllos
deberá aumentarse en un 100%. Los talleres se mite que los reclusos reciban las comidas aún calientes.
ubicarán en forma que queden completamente in-
Para Hopkins es de recomendar el comedor común,
dependientes de los pabellones celulares" ( 32).
puesto que es más fácil llevar al recluso a la comida
Pabellones de recepción que la comida al recluso. Se muestra entusiasta par-
tidario del sistema de comedor-cafetería, por su no-
Todas las reglamentaciones carcelarias determinan que table eficiencia. Es de convenlr que Hopkins tiene ra-
los reclusos deberán ser sometidos a determinados exá- zón al señalar que este sistema es más adecuado.
menes, antes de que pasen a los pabellones celulares Pero, tal cual la prisión gigante, el gran comedor tien-
corrientes y a la prisión misma. Consiguientemente, de- de a desaparecer por los múltiples inconvenientes que
ben ser previamente colocados en pabellones especiales presenta, pues la experiencia de siglos enseña que ca-
de recepción. Como es obvio, éstos requieren de un si todos los motines, huelgas, etc. tienen su origen en
ambiente arquitectónico particular. estos grandes comedores.
Según Moyana Navarro dichas exigencias son las si-
guientes: Locales para recreación
1) oficina de identificación;
Ya se ha señalado que los propios comedores, situa-
2) sala Bertillón; dos en un extremo de cada pabellón celular, pueden
3) sala de vestuario y de baño; servir de locales de recreo para el grupo de reclusos
alojados allí. Sin embargo, generalmente existen otros
4) sala de examen médico;
sitios de recreación, aun fuera de la prisión. Natural-
5) sala de clasificación siquiátrica; y mente, los lugares de recreo deben variar conforme
a la peligrosidad de los presos.
6) pabellón de observación, en donde el penado es
alojado durante un lapso que puede variar de algunas Los locales de recreación deben construirse lo más
semanas a varios meses, o aun años. Este pabellón lejos posible de los talleres, para evitar que los pri-
generalmente se levanta vecino al edificio de admisión, sioneros obtengan de éstos instrumentos de metal, que
colindante con el hospital, de ser posible. El pabellón suelen usarse en muy distinta forma por los reclusos.
de observación no dif:ere mayormente de un pabellón Además, deben tener siempre la apropiada vigilancia.
común, por lo que generalmente se construye con cel-
das externas. Es frecuente que se empleen patios que se hallan
en la m!sma prisión, en donde los reclusos pueden
Comedores practicar fútbol, básquetbol, etc. y realizar gimnasia.
Por tanto, estos patios deberán proyectarse para que
Si bien es cierto que el comedor común es más efi- tengan las dimensiones apropiadas. En las prisiones
ciente y económico, generalmente está contra-indicado de máxima seguridad se suele usar la azotea, con ven-
taja indudable. En torno a los locales de recreo de-
31 Cit. por MOYANO NAVARRO, Horacio, op. cit. ben colocarse bancos corridos, adosados a las pare-
32 Ibídem. des, para asiento de los prisioneros.

73
Además de estos locales, deberán proyectarse audi- las que se harán en voz baja. Habrá vigilancia, pero
torios, con capacidad diversa, según la propia capaci- nunca una intromisión inconveniente.
dad de las instituciones. En estos lugares, los reclu-
No pueden faltar las oficinas de la administración
sos tendrán oportunidad de manifestar sus creaciones,
del establecimiento penal; generalmente se levantan a
sus cualidades de actores, de músicos, etc. Igualmen-
un extremo del corredor central, cuando se emplea el
te, estos auditorios servirán para que se dicten confe-
sistema de espina. Igualmente se prefiere construirlas
rencias, se den conciertos, etc. Finalmente, podría
cerca del pabellón de recepción.
considerarse como parte de las recreaciones de los
internos -y con un sentido educativo- el uso de li- Una experiencia de s:glos enseña que la religión po-
bros, en bibliotecas especiales. see una gran influencia en la mayoría de los reclusos
y que, por ende, ayuda al correcto tratamiento insti-
tucional. Es por tal motivo que en un establecimiento
Otras instalaciones
penal jamás debe faltar una capilla con suficiente ca-
pacidad. Cuando la prisión obedece al sistema en es-
La educación del penado es parte del tratam:ento
pina es de recomendar se la construya a uno de los
institucional y, consiguientemente, no es posible conce-
extremos del corredor central.
bir una prisión moderna sin su escuela, dotada del su-
ficiente número de aulas, las que no deben ser pro- Muy frecuente es que los internos profesen distintos
yectadas para más de 20 ó 30 individuos. Generalmen- credos. El arquitecto, por tanto, deberá proyectar la
te, la escuela debe proyectarse formando un solo todo capilla en forma que permita los oficios religiosos de
con la biblioteca. Es posible separar sus aulas med!an- diversas creencias, haciéndose factible que todos los
te mamparas corredizas, uniéndose, de esta suerte, dos reclusos reciban los auxilios de los ministros de cada
o más aulas, en casos particulares como funciones de una de las religiones. Hasta se llega a emplear espe-
cine, conferencias, etc. a las cuales asista un número cie de altares que rotan, para permitir la práctica de
más o menos reducido de penados. En estos casos, distintos cultos.
se prefiere películas de tipo educativo.
V
El hospital de una prisión, como el pabellón de re-
cepción, debe ubicarse formando un cuerpo separado
de la institución, evitándose contactos inconvenientes. ARQUITECTURA PENITENCIARIA EN EL PERU
Por lo menos, ambos deben estar situados en pisos
diferentes a Jos que emplean corrientemente los pre- Este estudio quedaría incompleto si no se ocupara
sos. De ser posible, el hospital y el pabellón de re- de la evolución de la arquitectura carcelaria en nues-
cepción deben construirse integrando un todo indepen- tro país -al menos durante la etapa republicana- y,
diente, vecino el uno al otro. en especial, si no se examinara si alguna vez entre no-
sotros se ha aplicado los elementos fundamentales de
El hospital necesariamente deberá ser proyectado con
esta arquitectura en la construcción de prisiones. (33)
el asesoramiento de un equipo de médicos, especialmen-
te del cuerpo médico de la cárcel. Su disposición, fa- Aunque a partir de 1821 no faltaron algunas disposi-
cilidades, etc. dependerán de las necesidades de cada ciones legales que tendían a humanizar las prisiones.
establecimiento. En todo caso, deberá construirse salas en esta época se continuó el sistema de la época co-
para el aislamiento de algunos reclusos que por razones lonial, es decir, Jos locales de estos establecimientos
sanitarias deben incomunicarse del resto de los enfer- siguieron siendo totalmente inapropiados y mal puede
mos. Algunos pacientes podrán ser enviados a un hos- hablarse hasta entonces de política y arquitectura car-
pital común; para ellos se requerirá un trato especial. celarias. No se construyeron prisiones sino cuando
Castilla gobernaba. Paz Soldán afirmó en su Informe
Los presos necesariamente han de recibir visitas de elevado al Gobierno de Castilla: "las cárceles, en gene-
familiares, amigos, abogados, etc. Por tanto, en toda ral, no merecen este nombre. En muchas provincias
prisión se debe construir salas de visitas, las que po-
drán variar de fisonomía de acuerdo a la mayor o me- 33 Para un desarrollo mayor de la evolución histórica
nor peligrosidad del interno. Reclusos y visitantes go- véase mi trabajo Reseña histórica de la evolución del
zarán de relativa independencia en sus conversaciones, derecho penal, Lima, 1944.

74
no son más que malas casuchas en que un borracho caducos, como fue inspirada en una pns1on que cons-
rompe de una puñada la puerta de seguridad sin que tituía en su época una cárcel progresista, pudo ser
nadie lo contenga" (34). El mismo autor escribe, re- empleada durante prácticamente un siglo. Como nos
firiéndose a la cárcel de Lima, que antes fue prisión hemos ocupado del sistema arquitectónico de la Eas-
del Santo Oficio, que era un verdadero "sepulcro de tern Penitentiary de Filadelfia, no hay necesidad de en-
vivos" y que había un calabozo, llamado el "infierni- trar en mayores explicaciones acerca de los fundamen-
llo", en donde los penados sufrían horrores compara- tos arquitectónicos de la Penitenciaría de Lima.
bles a los del infierno. Posteriormente se ha venido construyendo algunas
El deplorable estado de los presidios peruanos mo- prisiones, pero todas ellas no han significado ningún
vió al gobierno a encomendar, en los primeros meses progreso sustancial. Generalmente obedecen a un único
de 1853, a Mariano Felipe Paz Soldán la misión de tipo: prisión cerrada. Un ejemplo típico es la Cárcel de
estudiar los sistemas penitenciarios de los Estados Uni- Encausados de Lurigancho.
dos, que en esos años estaba a la vanguardia del mo-
vimiento carcelario mundial. Desde Nueva York, en La cárcel de encausados de Lurigancho
noviembre de 1853, Paz ·Soldán elevó un informe com-
pleto al Ministerio de Justicia; el documento estaba in- Fue proyectada en agosto de 1964 y comenzada su
tegrado por dos partes: la primera daba una idea gene- construcción en diciembre de ese año. No obstante
ral de los regímenes penitenciarios de Estados Unidos que han trascurrido cinco años, todavía permanece in-
y la segunda, trataba del estado de las cárceles pe- conclusa.
ruanas y proponía un plan de reformas.
El proyecto no se ha ceñido a los básicos principios
Este interesante y b:en fundado Informe que venía de una arquitectura carcelaria técnica lo que no debe
acompañado de numerosos planos de algunas prisiones sorprender, ya que todavía en nuestro país falta un
del pals del Norte, concluía en un reglamento de 213 equipo de arquitectos especializados en esta clase de
artículos y 17 disposiciones generales y provisionales construcciones, de lo cual, como se ha dicho, no debe
referentes a los menores y a los enjuiciados y deteni- culparse a los proyectistas por múltiples razones.
dos. Es conveniente informar que Paz Soldán propuso
Es sabido que en ninguno de los programas acadé-
la construcción de dos penitenciarías: una para Lima
micos de arquitectura de nuestras diversas universida-
y otra para el Cuzco,
des se dictan cursos completos sobre asuntos carcela-
Basado en este informe el Supremo Gobierno orde- rios. Por otro lado, son pocos los profesionales que
nó en 1855 la construcción de la Penitenciaría Cen- han visitado prisiones extranjeras. Se ha dado prefe-
tral de Lima, inspirado -como ya se señaló- en la rencia a los establecimientos de los Estados Unidos,
Eastern Penitentiary de Filadelfia. El Mariscal Castilla sin saber que la mayoría de sus prisiones obedecen a
puso la primera piedra de la obra el 13 de enero de proyectos anticuados. Por otro lado, las visitas efec-
1856. La Penitenciaría fue inaugurada solemnemente el tuadas han sido tan breves y superficiales que era
23 de julio de 1862. Para esta prisión se adoptó un imposible que estos arquitectos hubieran podido asi-
régimen similar al auburnés, atemperándolo. Separó en milar las modernas concepciones arquitectónicas. Ge-
distintos departamentos a los menores, las mujeres y neralmente, los proyectistas se han inspirado en algu-
los varones adultos. Implantó, además, un sistema de nos modelos de los Estados Unidos, introduciéndoles
clasificación bastante elemental y un s:stema de fondos modificaciones adjetivas, especialmente por razones
de reserva para cuando el reo saliera del presidio. de economía. Esto explica que el proyecto de la Cár-
cel de Encausados de Lurigancho no haya aceptado
Al construirse la Penitenciaría Central de Lima se
modernos planteamientos de arquitectura carcelaria.
aplicó, por vez primera en el Perú, un criterio arquitec-
tónico técnico. Cabe afirmar que fue la introducción Con buen criterio se ha adoptado el sistema en es-
de la arquitectura carcelaria en el país. Aunque cuan- pina, pero su capacidad ha sido proyectada para con-
do fue destruida esta prisión respondía a conceptos ya tener unos 2,900 internos, lo que técnicamente cons-
tituye una aberración. Actualmente, sin concluir, su
34 PAZ SOLDAN, Mariano Felipe, Informe elevado al población alcanza a la subida cifra de 1 ,600 reclusos,
Supremo Gobierno, noviembre de 1853. haciendo no sólo imposible el tratamiento institucional

75
de Jos presos, sino dando Jugar a una serie de proble- Este, debe enfatizarse, se halla rodeado de cerros, lo
mas de organización y de control. No se ha pensado cual significa serio peligro para la seguridad de la
que con Jos millones que se han gastado hasta ahora prisión. Sin embargo, la calidad del terreno es bas-
en su construcción hubiera sido posible levantar va- tante aceptable, siendo apto para la instalación de pe-
rias prisiones pequeñas, llegándose a la diversificación queñas granjas y el cultivo de pequeñas chacras. Em-
que propugnan Jos especialistas. Aunque se la ha cons- pero, no hay bastante agua de regadío y hasta falta
truido con el criterio de mantener separadas a las di- suficiente agua potable. Finalmente, no se ha cons-
versas categorías de reclusos en secciones semi-inde- truido buenos servicios de desagüe.
pendientes, éstas aún no funcionan. Finalmente, no
Todavía no se ha podido aprovechar los servicios
puede dejarse de señalar que no existe un equipo téc-
eléctricos generales o comunes, debiéndose emplear
nico para observar y clasificar a los internos, por lo la energía eléctrica de un generador, el cual en oca-
cual en todo caso, la pretendida separación se basa-
siones falla.
ría en datos del todo inconsistentes.
Aunque podrían emplearse como comedores peque-
La cárcel de Lurigancho responde al tipo único tradi-
ños espacios en cada pabellón de celda¡, se ha co-
cional. Se trata de un establecimiento cerrado, rodeado
metido el error de construir un enorme comedor, en
de un muro con 7 torres de vigilancia. Además existe
el que habrán de comer todos los reclusos, incluso
una alambrada exterior, separada del muro por una faja
cuando alcancen la proyectada cifra de 2,900. la coci-
de terreno que está fuera de la misma institución. Se ha
na es general, pero aunque ya se tienen todos Jos ar-
gastado en esto ingentes sumas de dinero fiscal sin
tefactos del caso, el alimento para Jos internos es
provecho y sin parar mientes en que los muros se em-
traído de fuera, lo que constituye un contrasentido.
plean únicamente en los pabellones destinados a los
delincuentes que acusan real peligro. Los proyectistas, Se ha proyectado una sección para delincuentes pe-
por tanto, han olvidado princ:pios fundamentales de ligrosos con pabellones celulares que obedecen al siste-
una buena arquitectura penitenciaria. Como ha seña- ma de celdas inter:ores. Todavía se halla inconclusa es-
lado Manuel López-Rey: ta sección. Naturalmente estas celdas presentan todos
los defectos del sistema interior, careciendo de venta-
"Una mal estudiada arquitectura penitenc:iaria nas. Así, los reclusos sufrirán el impacto de sentirse
hace que la prisión cerrada, aún modernamente como fieras enjauladas. Hay otra sección para delin-
construída, sea raramente lo que debe ser. Por cuentes de mediana peligrosidad, con celdas exteriores,
lo común, la modernidad se reduce a algo de ín- que tampoco está terminada. Se las ha dotado de puer-
dole externo y no a la función asignada a esta
tas, con la oposición de algunas autoridades peniten-
clase ele est:1blecimientos" ( 35).
ciarias. Las ventanas de estas celdas no ofrecen se-
Se la proyectó solamente para alojar a enjuiciados, guridad alguna, habiéndose adoptado un sistema abso-
aunque actualmente se reciben igualmente a delincuen- lutamente impropio. En las c~ldas dest:nadas a delin-
tes sentenciados. Como prisión destinada a recibir en- cuentes de máxima seguridad se colocarán complicados
causados debió ubicársela en la misma ciudad. Sin sistemas de cierre, muy costosos, que debieron ser evi-
embargo, se encuentra situada a alguna distancia de tados por los arquitectos que proyectaron esta prisión.
Lima, sin que aún existan med:os de comunicación La mitad de la población carcelaria será alojada en
apropiados. No hay facilidades, por tanto, para llevar dormitorios, lo cual, como ya se ha expresado, presen-
a la prisión los víveres, los materiales para el traba- ta inconvenientes numerosos. Actualmente, la mayoría
jo de los reclusos, etc., ni para la salida de Jos pro- de los internos ocupan cuadras o dormitorios, debiendo
ductos elaborados por éstos. Para los familiares, abo- la mayoría trabajar en éstos.
gados y amigos es difíc:l llegar rápida y fácilmente a
Se ha construído dos talleres formando pabellones
la institución.
que salen del corredor central hacia cada uno de los
La ubicación del establecimiento no ha sido estudia- lados. Cada taller tiene una superficie de 6.500 m2.,
da convenientemente. Más bien, se aprovechó de una aunque se proyecta dividirlos en varios talleres más pe-
especie de donativo que se hizo al Estado del terreno. queños, cuando sea posible usarlos. Actualmente los
presos trabajan en los patios o en sus dormitorios.
:35 LOPEZ REY Y AHROYO, Manuel, op. cit. Estos patios igualmente sirven de comedores para la

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población carcelaria, ya que no se emplea el gran Empero, esto no los disculpa, ya que no puede acep-
comedor, ni los espacios que podrían servir como tarse técnicamente la capacidad de esta cárcel. Es
comedores en los pabellones de celdas. imperdonable, igualmente, que hayan preferido el tipo
único de prisión al cual estamos habituados, en lugar
Se ha proyectado un hospital y una capilla, bien dis-
de haberse optado por varios tipos de prisiones, per-
puestos y apropiados para el número de reclusos que
fectamente diversificadas. Tanto desde un punto de
habrán de ser internados en esta cárcel. Todavía se ha-
vista científico como económico estaba indicado que
llan inconclusos.
se evitara el tipo único de prisión cerrada que adop-
Las aulas escolares, los locales de recreac1on, las taron. Por desgracia, estas imperfecciones ahora son
salas de visita, las oficinas de administración y hasta ya insalvables. Debieron ser anotadas oportunamente,
el pabellón de recepción han sido proyectados conve- al confeccionarse el proyecto respectivo y antes de
nientemente, aunque no con un criterio del todo pro- proceder a levantar la prisión.
gresista. Es incuestionable que el proyecto debió me-
jorarse, escuchándose a los especialistas en cuestiones Pero debe hacerse justicia a los proyectistas seña-
penitenciarias. lando que, no obstante los serios defectos que presen-
ta la Cárcel de Enjuiciados de Lurigancho, su cons-
Sin duda los proyectistas, desconociendo los nuevos
trucción ha significado un claro progreso, si se la com-
principios de la arqu:tectura carcelaria, especialmente
para con las demás prisiones del país.
en lo tocante a la capacidad de la prisión, se dejaron
impresionar por el elevado porcentaje de individuos Cabe anhelar que en el futuro, cuando se proyecte
que permanecen recluidos mientras se les juzga, debi- alguna nueva institución penitenciaria, se consulte a los
do particularmente al procedim:ento judicial vigente. especialistas y, se siga las opiniones de estos técnicos.

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