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PORQUE NO PROSPERO FINANCIERAMENTE

3 juan 2
INTRODUCCION
El manejo del dinero es uno de los temas más tratados en la Biblia, y también más difíciles
de explicar según el punto de vista de Dios. Es muy importante para cada hijo del Señor
conocer la verdad de lo que habla el reino de los cielos sobre las finanzas.
Debemos entender que la prosperidad no es solo económica o de dinero, sino que es
integral como el pasaje que leímos, prosperidad en el matrimonio, prosperidad en mi vida
espiritual y en todas las áreas de la vida, así como en mi salud, para poder tener una vida
como Dios desea y que siempre vivamos en victoria.
La Biblia es clara en señalar que Dios desea que sus hijos sean prósperos en todas las áreas
de la vida. Eso incluye salud física, salud mental, salud emocional, vida espiritual, en el
ámbito matrimonial y familiar, en tu carrera universitaria, en tu profesión u oficio y
también en tus finanzas.
Las personas sanas espiritualmente no solo son aquellas que practican disciplinas como la
oración, la lectura de la Biblia o el congregarse seguido, sino también aquellas que han
aprendido a manejar sus finanzas de tal manera que glorifiquen a Dios con su sabia
administración.
El Señor quiere verte feliz, por eso en el pasaje bíblico de la creación, específicamente en
el relato del Edén, encontramos a Dios proveyendo para que sus primeras criaturas lo
tuvieran todo…, ¡ese era el plan original! (tenerlo todo). Pero nosotros mismos lo
estropeamos, por eso el versículo de Eclesiastés 7:29 solamente he encontrado lo
siguiente: que Dios hizo perfecto al hombre, pero éste se ha complicado la vida. DHH
lo que quiere decir parafraseando este versículo: tiene tanto sentido: “Dios creó al hombre
con todas las oportunidades para ser feliz, pero él mismo se complicó la vida”.
UNA COSA ES CIERTA: El Dios al que servimos prometió darnos…

 Una vida abundante (Juan 10:10),


 Un futuro esplendoroso (Jeremías 29:11)
 La herencia de Abraham por medio de Cristo (Gálatas 3:29)
Existen muchas razones del porqué no surgimos, siempre viviendo tiempos difíciles y
nuestra familia pasando necesidades, a pesar de que contribuimos en la Obra del Señor.
Pero debemos entender esto: “Diezmar, ofrendar, aportar, congregarse no lo es todo, no
es una fórmula mágica que asegura la bendición, hacerlo contribuirá a mover la mano de
Dios a vuestro favor, pero no del todo, tenemos que asegurarnos de hacer bien las cosas”.
Déjenme enseñarles algunas razones por las que no prosperamos financieramente en
nuestra vida a pesar de que trabajamos incansablemente:
PRIMERA RAZÓN: POR MAL UTILIZAR EL DINERO.
Leamos Lucas 16:1-2, “Dijo también a sus discípulos: había un hombre rico que tenía un
mayordomo, y este fue acusado como disipador de sus bienes. Entonces le llamó, y le dijo:
¿qué es esto que oigo de ti? Da cuenta de tu mayordomía, porque ya no podrás ser más
mayordomo”.
Cuando Dios suple tu necesidad económica por medio de una ofrenda, un pago atrasado,
un donativo inesperado, un aumento de sueldo es preciso ocupar ese dinero para lo que
fue provisto y no usarlo para otra cosa que no fuese el propósito, desviar el dinero se
llama “malversación de fondos”. A Dios esto no le agrada y cierra su mano para los malos
administradores. En este punto también entran los que no piensan ahorrar para el futuro.
SEGUNDA RAZÓN: NO PROSPERAS POR TOMAR MALAS DECISIONES FINANCIERAS.
Leamos Proverbios 21:5, “Cuando las cosas se piensan bien, el resultado es provechoso.
Cuando se hacen a la carrera, el resultado es desastroso”.
Hay gente que es experta en “meter la pata en asuntos financieros”. Son apurados, se
alocan fácilmente, se meten en proyectos demasiado costosos, trabajan para otros
creyendo que trabajan para sí mismos, saltan de un emprendimiento a otro sin afirmarse
en ninguno, etc. Este tipo de personas no son malas en sí mismas, pero no saben decidir
bien, simplemente arruinan su futuro porque sus decisiones son pésimas y luego lloran
cuando las cosas van de mal en peor y se enojan con todo el mundo.
TERCERA RAZÓN: NO PROSPERAS PORQUE NO AHORRAS PARA EL FUTURO.
Leamos Proverbios 10:5, “El que recoge en el verano es hijo sabio, el que duerme durante
la siega es hijo que avergüenza”.
¡Qué sabia es la Palabra de Dios! Aquí nos da un principio que violamos todo el tiempo, el
principio del ahorro. Es precisamente cuando tenemos edad y fuerza para trabajar cuando
más debemos ahorrar para el futuro. Al hacerlo aseguraremos un porvenir mejor, no
seremos carga para nadie e incluso podemos dejar herencia a nuestros hijos y nietos. La
recomendación es sencilla: ¡Aprovecha los veranos de tu vida para cuando venga tu
invierno!
CUARTA RAZÓN NO PROSPERAS PORQUE GASTAS DE MAS
Proverbios 21:20 tesoro precioso y aceite hay en la casa del sabio, mas el hombre
insensato todo lo disipa. Hay que ser prudente en los gastos o despilfarramos todo lo que
ganamos y esto pasa en muchos hogares no se miden en el gasto, con aquello que hare lo
pagare, y nunca pagas, siempre estas en escases, porque no tienes un presupuesto que es
tu guía para el manejo del dinero, si no lo tienes te lo explico: es lo que te indica cuanto
ganas, y cuanto puedes gastar, y eso te hace hacer un plan de gastos mensuales que no
superes lo que tu ganas, para que no estés endeudado todo el tiempo. Planifica tus gastos
para que no vivas abrumado por las deudas y nunca alcances tus sueños.
QUINTA RAZÓN: NO PROSPERAS POR MANTENER UN PECADO OCULTO.
Leamos Josué 7:11-12, “Lo que pasa es que los israelitas han pecado. Yo les ordené que
destruyeran todo lo que había en la ciudad de Jericó.
Era un trato que habíamos hecho. Pero se quedaron con algunas de esas cosas. Se las
robaron, las escondieron entre sus pertenencias, y luego mintieron acerca de lo que
habían hecho. Por eso los israelitas no pueden vencer a sus enemigos. ¡Huyen porque
ellos mismos merecen ser destruidos! Yo no voy a ayudarlos mientras no destruyan las
cosas que les prohibí tocar”.
Desobedecer la palabra de Dios es pecado de rebeldía, cuando tercamente decidimos
seguir practicando un vicio, un mal hábito o una conducta desordenada (a escondidas),
esto se vuelve contra nosotros y nuestra familia pues al igual que Acán, “ocultamos debajo
de nuestra tienda la maldición”.
SEXTA RAZÓN: NO PROSPERAS POR NO AYUDAR A LOS NECESITADOS Y A LOS POBRES.
Leamos Proverbios 19:17, “Un préstamo al pobre, es un préstamo al Señor y el Señor
mismo pagará la deuda.” No hay mejor inversión que bendecir a las personas necesitadas,
no sólo decirles “Dios te bendiga”, sino acompañar ese saludo con dinero, comida, ropa,
trabajo, una oportunidad.
No hacerlo conlleva una serie de maldiciones. Proverbios 28:27 declara, “El que da al
pobre no tendrá pobreza; más el que aparta sus ojos tendrá muchas maldiciones.”
Proverbios 21:13 enseña, “El que no atiende a los ruegos del pobre, tampoco obtendrá
respuesta cuando pida ayuda.”
Leamos 1ª Juan 3:17-18. “Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener
necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él? Hijitos míos,
no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad.”
La iglesia debe ser una comunidad de fe donde no exista la necesidad, y si la hay es
nuestro deber como miembros suplir las carencias del grupo, no hacerlo acarrea
consecuencias sobre el individuo tacaño y sobre la congregación también.
SEPTIMA RAZÓN: NO PROSPERAS POR HACER TRAMPAS
Leamos Proverbios 28:20, “El hombre de verdad tendrá muchas bendiciones; más el que se
apresura a enriquecerse no será sin culpa.”
A veces con el afán de salir de la pobreza ha habido personas que han estafado a otras, o
bien han hecho trampa al Fisco, o se han burlado de sus empleadores con cuentas
fraudulentas (fingiendo enfermedades, demandas injustas, etc.). El asunto es simple, “los
engañadores serán engañados”.
OCTAVA RAZÓN: NO PROSPERAS POR MURMURAR CONTRA TUS HERMANOS, LA
IGLESIA Y LOS PASTORES.
Leamos Salmos 101:5, “Destruiré al que en secreto habla mal de su prójimo”. La
murmuración es quizá uno de los males más perjudiciales que existen tanto para el que
murmura, porque se echa maldición encima, como para la víctima de la murmuración,
porque su buen nombre se difama.
La Biblia es clara, cuando murmuras de alguien te pones de enemigo de Dios. Y peor aún,
si murmuras de líderes o pastores que han cuidado de ti, la catástrofe es inevitable: “No
toquéis, dijo, a mis ungidos, Ni hagáis mal a mis profetas” (Salmos 105:15), otro pasaje
dice así: “¿Quién extenderá su mano contra el ungido de Jehová y quedará inocente? (1ª
Samuel 26:9).
NOVENA RAZÓN: NO PROSPERAS POR PEREZA, EN TODAS SUS FORMAS.
Leamos Proverbios 10:4, “Poco trabajo, pobreza; mucho trabajo, riqueza.” DHH, “Si no
trabajas, te quedas pobre; si trabajas, te vuelves rico”. TLA.
Este principio es claro. Las personas flojas, perezosas, mediocres en su trabajo jamás
prosperarán. Ahora bien, no hace falta quedarte todo el día en cama para que la Biblia te
considere un flojo, este verso también se refiere a aquellos que pudiendo ser mejores en
su oficio, emprendimiento o profesión no lo son, los tales también son perezosos.
También se refiere a los que hacen las cosas mal, rezongando, murmurando o cumpliendo
los deberes fuera de los tiempos exigidos. los que se toman las horas de trabajo de las
empresas.
DECIMA RAZÓN: NO PROSPERAS PORQUE NO BUSCAS A DIOS DE VERDAD.
Leamos Salmos 34:10, “Los leoncillos pasan necesidad y tienen hambre, más los que
buscan al Señor no carecerán de bien alguno”. Esta es una verdad poderosa, los hijos de
Dios debemos creer que el buscarlo a él, de todo corazón, Dios nos ayudara. ¿Qué nos
dice el salmista? Que aquellos que de verdad buscan a Dios jamás tendrán necesidad de
nada. Si lo dice la Biblia entonces es verdad, quienes hacen de Dios su prioridad podrán
estar seguros que Él proveerá para sus necesidades.
CONCLUSIÓN: Cuando hacemos las cosas bien y seguimos las enseñanzas del Señor en
nuestras finanzas, la bendición integral de Dios vendrá sobre nosotros. así nos
aseguraremos que nuestro presente y futuro sean prósperos en todas las áreas de nuestra
vida.

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