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CFA – Aristóteles
2020 – 2
Segunda Unidad
Su teoría de la acción está planteada principalmente en Acerca del Alma, que hace parte
de los tratados de filosofía natural, más propiamente de biología, y en La Ética a
Nicómaco, que se inscribe dentro de su teoría política.
Podemos proponer, a manera de claves para la descripción de este asunto, las siguientes
afirmaciones: 1.- El Alma es el principio vital de acción. En que hoy se llama teoría de
la mente el punto caso de Aristóteles se aproxima al monismo. 2.- La base de la
conducta es la naturaleza, 3.- Se obra siempre en procura de un fin 4.- El motor de las
acciones es el deseo. 5.- la educación supone el paso de la virtualidad a la virtud y la
virtud consolidada constituye una especie de `segunda naturaleza’- 6.-La finalidad de la
política es la vida feliz
El Tratado del alma está compuesto por tres libros. En los dos primeros Aristóteles hace
un recuento histórico sobre el modo como se ha entendido el alma, propone su propia
definición y describe con detalle las funciones básicas de la vida, y en particular, las que
componen la sensibilidad. En el tercero se ocupa de las facultades humanas del
conocimiento y la acción, y en general, de la estructura del alma inteligible.
En la mayoría de los casos se puede observar cómo el alma no hace ni padece nada sin
el cuerpo, por ejemplo, encolerizarse, envalentonarse, apetecer, sentir en general. No
obstante, el inteligir parece algo particularmente exclusivo de ella; pero ni esto
siquiera podrá tener lugar sin el cuerpo si es que se trata de un cierto tipo de
imaginación o de algo que no se da sin imaginación. 403 a31
Así pues, alma y cuerpo no se separan salvo en el tipo de análisis que se haga: El
encolerizarse es un movimiento de tal cuerpo o de tal parte o potencia producido por
tal causa con tal fin. De donde resulta que corresponde al físico ocuparse del alma,
bien de toda alma bien de esta clase de alma en concreto. Por otra parte, el físico y el
dialéctico definirían de diferente manera cada una de estas afecciones, por ejemplo,
qué es la ira: el uno hablaría del deseo de venganza o de algo por el estilo, mientras el
otro hablaría de la ebullición de la sangre o del elemento caliente alrededor del
corazón. El uno daría cuenta de la materia mientras el otro daría cuenta de la forma
específica y de la definición. 403 a – 26
1
En Itálicas refrencias al Trado del Alma. Salvo indicación se refieren al texto propuesto para la clase
2
Ver . Facetas de lo mental Ramos Arenas Jaime. Revista Ideas y Valores volumen 50 Número 117
2001 pgs 21 - 36
es idóneo para muchas actividades. Algunas funciones podemos instanciarlas en
distintas partes del cuerpo o fuera de él. Podemos contar ‘mentalmente’, o, con los
dedos o con las falanges o con un ábaco, o con una calculadora.
Por principio, los seres vivos cumplimos funciones, es en eso que consiste la vida en
cada función que se cumple se actualiza una potencia. El alma en tanto presencia
dinámica en el cuerpo es su principio de actualización y de hecho consiste en el
conjunto de acciones que realmente se están cumpliendo. Por eso dice Aristóteles que la
entidad es acto pleno y el alma ‘entelequia del cuerpo’.
En efecto, si el ojo fuera un animal, su alma sería la vista. Esta es, desde luego, la
entidad definitoria del ojo. 412b 23
a.- La sensibilidad
Hay cinco sentidos y tres tipos de sensibles. Los propios, como el color para la visión,
los comunes (que se captan por medio de varios sentidos), como la duración o la
extensión, y los accidentales cuando un sentido logra captar una sensación propia de
otro.
3
En los libros I y II esa tarea fue adelantada con algún detalle y fundamentalmente sobre la sensibilidad.
Aquí se restringe al caso de los seres humanos y se hace una presentación que permite tener una visión
de conjunto de las facultades desde la sensibilidad hasta las decisiones
Infortunadamente esta presentación es muy sucinta pero los tópicos que Aristóteles
identifica aquí han sido materia de amplia investigación en la teoría del conocimiento.
b.- La precepción.
El modo como Aristóteles trata la percepción evita aporías muy incidentes que se
presentan en el enfoque tradicional en el que ha sido tratada. Normalmente se asume
que la percepción es una relación entre sujeto y objeto en la que el objeto tiene una
participación activa sobre el sujeto que esta a disposición para ser afectado. Esta manera
de entender la precepción tiene entre otras las siguientes dificultades:
Al respecto, Aristóteles considera: Tanto las cosas que se van a percibir, como quien
va a hacerlo son en sí mismas potencias que en determinadas condiciones se pueden
actualizar. Así hay en nosotros la potencia de ver el color blanco y hay en la cosa la
potencia de ser vista como blanca. Cuando una potencia de ver determinada cosa se
encuentra con la potencia de ser vista se produce la percepción. Así, la percepción es la
actualización de dos potencias en un solo y único acto.
De esta manera no se trata de captar algo externo sino de actualizar una potencia de
manera que no es el caso de la traducción de un tipo de naturaleza a otro y no tiene
sentido preguntar si captamos tal cual son las cosas, sino que simplemente se actualiza
una potencia en el encuentro de esas dos instancias.
Compartimos con las cosas ciertas potencialidades. Pero ni nosotros somos solamente
percipientes ni las cosas son solamente percibidas. Así el acceso por medio perceptivo
solo alcanza ciertas características de la realidad que es mucho más amplia y diversa.
Por fin es bueno tener en cuenta que los sentidos tienen que ver con el movimiento. En
la medida en que somos animales con capacidad para trasladarnos los sentidos son
biológicamente indispensables. Pero además de ese rasgo biológico hay también un
rasgo estético. Ejercemos los sentidos en un rango en el cual es agradable ejercerlos y
fuera de ese rango o no se puede sentir, o resulta desagradable, por ejemplo algo
insípido o demasiado salado, o algo de muy bajo volumen o demasiado ruidoso.
Otro aspecto novedoso de la manera como Aristóteles se ocupa del saber a nivel de la
sensibilidad es el modo como considera que los sentidos cumplen al menos tres papeles:
1.- sentir, 2.-discriminar o discernir, y 3.- apercibir, esto es una especie de saber que se
está sintiendo. Para esto no es necesario acudir a una instancia superior, como se ha
hecho muchas veces en la tradición posterior a Aristóteles el sentido mismo muestra así
su complejidad. Esto se enmarcaría hoy en día en una teoría de mente extendida
c.- la imaginación
Aristóteles considera que la imaginación cumple un papel central para la vida. Las dos
funciones básicas del alma son inteligir (o pensar) y moverse y en las dos la
imaginación es indispensable. El pensamiento se apoya en imágenes, de otra parte,
cuando nos movemos prefiguramos con la imaginación lo que ha de venir. En Particular
cabe destacar el hecho de que Aristóteles considera a la imaginación una especie de
proto intelecto. De hecho, en los animales que no poseen intelecto, la imaginación hace
las veces de esa facultad en algunas funciones.
d.- El intelecto
De manera muy general, podemos decir que las funciones pasivas del intelecto, o si se
prefiere la denominación, el intelecto pasivo permite la actualización de las formas de
los objetos, o de los conceptos. Por eso este intelecto en potencia puede ser todos los
objetos no le corresponde un órgano que interfiera en su función a nivel de contenido y
es garante de objetividad o de solidez teórica, contemplativa. Se separa de la materia en
la misma medida en que sus objetos pueden hacerlo, esto es en tanto formas.
Hay también una serie de funciones en las que el intelecto puede considerarse activo,
una suerte de espontaneidad y de garantía de la verdad, de certeza intelectual.
Probablemente la justificación más clara para proponer la idea de un intelecto activo
radique en que desde el punto de vista de cada individuo el conocimiento en potencia es
anterior temporalmente al conocimiento en Acto, pero desde el punto de vista del
universo no es anterior temporalmente. La verdad está y los individuos la buscamos y
actualizamos nuestro conocimiento.
Aristóteles dice que en general son funciones del alma: 1.- conocer o pensar y 2.-
moverse. En la tradición que siguió a Aristóteles se le dio privilegio al estudio de las
facultades para conocer y pensar y se trato la acción a un nivel distante de la base
biológica. Se prefirió tratar esta como una cuestión propia y exclusivamente humana a
nivel ética
Aristóteles tiene un punto de vista totalmente divergente en este caso, considera que la
verdad o falsedad no tienen que ver con la acción. Lo bueno y lo malo no son cuestiones
teóricas sino prácticas y no se pueden confundir las funciones desiderativas ( del deseo)
con las funciones del conocimiento.
A este nivel estamos alejados del intelecto teórico, del conocimiento. No se pretende
afirmar que obremos en contra de lo que sabemos. Muchas veces decidimos teniendo
eso en cuenta, pero es muy importante señalar que eso no ocurre necesariamente así, sí
obramos de acuerdo con lo que sabemos es porque lo deseamos. Pero bien puede ser
que nuestro deseo sea contrario a nuestro conocimiento, es decir que haya un conflicto
entre lo teórico y lo practico. De hecho, el intelecto teórico no manda actuar. Si se
decide actuar de acuerdo con la ciencia, no es la ciencia quien lo decide.
Ocurre también que se dan conflictos entre lo que se decide hacer voluntariamente y los
apetitos que demandan satisfacción. Es algo bastante común. La llamada Akrasía, es
uno de los asuntos más interesantes para investigar en filosofía práctica. Es un asunto de
común ocurrencia que frente a ciertos hábitos o costumbres que desaprobamos y no
desearíamos hacer, tengamos conductas incontinentes. Es común obrar en contra de
nuestras propias decisiones voluntarias o racionales. Así, se da el caso de deseos
mutuamente excluyentes o contrapuestos.