Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Aristóteles
384 – 322 a. C.
2
"Los enemigos más encarnizados de nuestras ideas, son aquellos que
no las entienden."
Albert Einstein
1879-1955
3
Índice
Mensaje del Muy Respetable Gran Maestro Pág. 06
PIM 04 Octubre/2017
PIM 07 Dic/2017
4
PIM 15 Junio 2018
5
Mensaje del Gran Maestro
Me despido con un T∴A∴F∴ y con los SS∴, PP∴ y TToc∴ que nos son
conocidos.
S∴F∴U∴
7
Nota aclaratoria
8
Buenas son las palabras del filosofo Hermann Hesse, quien nos dice
―…el que realmente quiere encontrar, y por ello busca, no puede
aceptar ninguna doctrina… el saber es comunicable, pero la sabiduría
no. Se la puede vivir, pero nunca explicar ni enseñar‖.
Me despido con un T∴A∴F∴ y con los SS∴, PP∴ y TToc∴ que nos son
conocidos.
S∴F∴U∴
9
El traje de recipiendario
10
logramos en el devenir del tiempo destruir. Descubrimos el pecho del
lado del corazón porque el masón se presenta sinceramente a sus
hermanos. El pie descalzo representa la humildad que debemos
profesar; el brazo desnudo, es el deber de combatir la tiranía; la rodilla
desnuda significa que ante los dictados de la razón y la moral
debemos inclinarnos.
El despojo de todo metal nos revela que los masones no juzgamos al
hombre por su riqueza o posición social. Sin señalarlo explícitamente,
esta es la primera enseñanza del significado y utilidad del nivel como
herramienta masónica. La Masonería nivela desigualdades arbitrarias,
instruyendo que cada quien tiene una posición en el edificio social, la
cual es importante para toda la Gran Obra y a la que se debe respeto
en su dignidad.
Quedas sin metales, con el corazón franco, desnudo el brazo para
luchar contra la tiranía del fanatismo y la superstición, con la fuerza de
la razón. La Masonería es una institución que tiene por base la razón y
por ende, es su carácter eminentemente universal. La Masonería tiene
un origen propio que no debe confundirse con el de las religiones o
sectas. La Masonería deja a cada uno en libertad de creer, pero se
opone a la invasión fanática de cualquier credo o forma sectaria de
pensamiento. La Masonería es progreso y no pone límite al
conocimiento, siendo este el sendero luminoso para dirigirse hacia la
verdad.
El masón deja atrás la metodología de la ciencia profana, para tomar
la iniciática que te consiente observar los fenómenos naturales y
sociales de acuerdo a las leyes del universo y la naturaleza; fuera de
11
todo dogma y alejado de cualquier superstición. Te permite analizar la
vida fuera de las ataduras y convencionalismos que imponen
conductas que te desgastan existencialmente y no permite que
avancemos por la senda de la Luz, del conocimiento. Conocimiento
que te libera e instruye y con tu libre albedrio, asumas el camino de la
virtud como el sano y lógico, teniendo presente que nuestra convicción
de la existencia de un Ser Supremo y de la inmortalidad del espíritu,
se sustenta en la razón y no en autos de fe.
De allí que la soga que llevamos al cuello como recipiendarios
simboliza esa atadura con los convencionalismos sociales, pero
también con la utilización de la ciencia bajo parámetros deterministas,
como algunos fundamentos que desechan el uso de la razón y se atan
solamente a la experiencia sensorial. De haber sido siempre así, la
ciencia hubiese avanzado poco, porque la filosofía siempre ha
iluminado el sendero y la ciencia, persiguiendo esa luz, ha alcanzado
logros importantes. Es igual con la fe. Según los credos Dios existe
porque nos los dicen y tenemos confianza en el vocero. En Masonería,
la enseñanza iniciática nos entrega herramientas y en la medida en
que vamos adquiriendo experticia en su utilización, vamos avanzamos
en el desarrollo de nuestros grados de consciencia y, en esa medida,
nosotros individualmente, por medio de nuestros estudios y nuestra
practica en la vida diaria, vamos adquiriendo el conocimiento que nos
permite construir nuestro propio juicio en función de nuestro
razonamiento. Esa es la libertad que tanto ponderamos. Es la libertad
de pensamiento la garante del crecimiento como ser humano,
edificando nuestro templo de virtudes y coadyuvando en la inmensa
12
obra que significa la construcción del templo social donde se haga
realidad en este plano existencial la Gran Obra del G.·. A.·. D.·. U.·.
Esa interiorización del conocimiento y su exteriorización en la vida
familiar y social, es el que diferencia al masón del profano.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los SS∴ PP∴ y TToc∴ que nos
son conocidos.
S∴F∴U∴
13
La Iniciación
Si hay una ceremonia que marca por siempre a un masón es la
Iniciación. Si transformar su vestimenta en traje de recipiendario
convoca a la meditación, que decir de ser introducido al Cuarto de
Reflexión y encontrarse, entre otros, con una calavera, una mesa
triangular, cirios, sal, pan, ceniza, agua, lápiz, una silla. Al ser
conducido el Aspirante al Templo, el Ven.·. Maest.·. le pide que
externe sus reflexiones luego de haber pasado un tiempo entre el luto,
las lágrimas y lo lúgubre. Luego le enseña la necesidad de morir al
mundo profano, signado por la ignorancia, el fanatismo, la ambición y
otras tantas pasiones que lo degradan; para luego renacer como
Iniciado en un mundo en el cual debemos trabajar para que impere la
virtud y se practique la fraternidad.
En los Antiguos Misterios, el aspirante era conducido a una caverna en
la cual reflexionaba sobre el paso trascendente que iba a dar. En
nuestro actual rito, una vez despojado de los metales, que simboliza
esa costra que en torno a nuestra individualidad forma hábitos sociales
interiorizados desde la infancia y que moldean nuestra personalidad,
que impiden externar lo inmanente de nuestra espiritualidad, porque
14
no es útil para el estatus social; así que cuando entramos en el Cuarto
de Reflexión se busca entender la parábola del Maestro Jesús cuando
le dice a Nicodemo: ―de cierto, de cierto te digo que a menos que uno
nazca de nuevo no puede ver el reino de Dios…‖ Es la muerte
simbólica del hombre profano para dar paso al iniciado, que transitará
por la senda de la Luz en la búsqueda del Conocimiento, que
mediante la razón y la utilización de las herramientas del constructor
de sí, le permitirá descomponer la personalidad egótica y sumarse
como piedra cubica escuadrada y aplomada, a la Gran Obra como un
ser reconstruido espiritualmente porque ha levantado en su alma y
espíritu un templo a la virtud. Ese descenso y ascenso se reconoce
por las siglas V.I.T.R.I.O.L. que aparece en las piedras grabadas de la
Cámara de Reflexión y es un acróstico que simboliza y sintetiza la
enseñanza masónica: Visita Interiora Terras Rectificatur Invenies
Ocultum Lapidum (Visita el Interior de la Tierra y Rectificando
Encontrarás la Piedra Oculta.)
Examinemos ahora cada una de las palabras: VISITA. Es el viaje que
realiza el iniciado en su propia alma a lo profundo de su ser, para
terminar volviendo al punto de partida. El iniciado no debe quedarse
adentro. El va y regresa. El visita. INTERIORA. El interior. Esto se
interpreta análogamente al principio hermético ―Como es arriba es
también abajo‖ que se puede transformar en ―lo que es adentro
también es afuera‖. TERRAS. La tierra, uno de los elementos
alquímicos. Representa la parte material del individuo, como contrario
a lo espiritual o etéreo. El cuerpo. RECTIFICATUR. Es el acto de
purificación y de enderezar. Lo que está doblado debe ser aplomado.
15
El sendero recto que se debe seguir. Rectificando nuestros
pensamientos y escuadrando nuestras acciones nosotros
encontraremos la verdad escondida. INVENIES. Literalmente:
―encontrarás‖. De la misma raíz de ―invención‖. Topándose con algo,
previamente desconocido, hallaras la Luz que te guiará. OCCULTUM.
Se relaciona con ―occulum‖, el ojo. En el Cuarto de Reflexión ves a tú
gran enemigo: tú mismo. LAPIDEM. La piedra. La piedra eres tú,
objeto y sujeto de tu trabajo como ser humano que serás de Luz, como
masón. Al llegar a la piedra alcanzas a conocerte a ti mismo,
verdaderamente, sin la participación de ninguna otra persona. Es el
conócete a ti mismo de Sócrates.
Una vez fuera del Cuarto de Reflexión y ya en el Templo, el Aspirante
da los viajes, presta los juramentos y es instruido en los SS∴ PP∴ y
TToc∴. Cada parte de la liturgia tiene un porqué simbólico que te lleva
a interiorizar vivencias que te preparan para comenzar ese largo
camino hacia la sabiduría que te oferta la Filosofía Perenne que tú
construye como individualidad, sobre la base de tú libertad de
pensamiento y con las herramientas que te facilita la Orden masónica.
Los Mast.·. del Taller explicarán a los aprendices porqué están en la
Columna Norte, donde no reciben los rayos del sol simbólico, y porqué
el Seg.·. Vig.·., quien se encuentra al Mediodía, bajo la plenitud de la
Luz solar, lleva a los obreros aprendices del trabajo, fuente de
conocimiento, a la recreación, donde aplican en su vida, en la Logia de
San Juan, lo que interiorizan en su labor y se van preparando para el
día en que, apertrechados y con la piedra bruta cubicada, puedan ir a
16
su columna a pedir su aumento de salario. He aquí la magia de la
Iniciación.
No en balde se afirma que en el Grado de Aprendiz se proyecta todo
el saber de la masonería. Eso lo vamos descubriendo en la medida en
que aumentamos nuestros niveles de consciencia, que se representan
en los grados masónicos que nuestros QQ.·.HH.·. nos reconocen.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los SS∴ PP∴ y TToc∴ que nos
son conocidos.
S∴F∴U∴
17
Etiqueta masónica
19
―Esperanza en Alcanzarlos‖. Saludo al S.·. V.·., ―Amor a la
Humanidad”.
El signo es el medio utilizado universalmente por los miembros de la
Francmasonería para reconocerse unos con otros y para dar prueba
del grado que poseen. El Signo del Ap.·. se compone de tres
escuadras y consta de movimientos horizontales y perpendiculares.
Movimientos armónicos y geométricos. Nada más, como señala la
Liturgia. Los signos forman parte muy importante de la
Francmasonería y en unión a los toques o tocamientos, constituyen un
lenguaje mudo que permite el más autentico reconocimiento, de
quienes forman parte de la Orden. El toque del Ap.·. a la puerta del
Templo con la batería del Grado, se relaciona: el primero significa
Llamad y se os abrirá, la puerta del Templo; segundo: Pedid y se os
dará, la Luz; el tercero: Buscad y encontrareis, la Verdad.
Antes de concluir con esta primera plancha sobre etiqueta masónica,
debemos tratar brevemente el termino Q.·.H.·. Nos dice W. Cox
Learche en su libro Regularización Masónica en una Nueva Luz:
―Todos los seres humanos son uno en espíritu, a esta unidad, esencial
y a este origen único les damos el nombre de hermandad. Detrás de
los pares opuestos hay una sola energía. Detrás de todas las
aparentes diferencias, hay una sola vida y una sola humanidad, sin
distinciones o diferencias en su naturaleza esencial, su origen, su
objetivo y modo de evolucionar‖. Esta comprensión de Hermandad nos
facilita el significado de Cadena Fraternal como nos lo explica Aldo
Lavagnini, en el Manual del Aprendiz: ―la cadena es el lazo interior que
une a todos los masones por encima de sus diferencias personales,
20
haciendo de ellos una sola familia Universal. Este lazo interior debe
ser buscado individualmente, esforzándose cada cual en manifestar lo
más elevado en pensamientos, sentimientos e ideales.‖ La Cadena
Fraternal se origina en el Primer Iniciado -según algunos autores fue
Moisés en el evento de la zarza ardiente-, y desde allí su energía se
trasmite cada vez que el V.·.M.·. declara y constituye Ap.·. Mas.·. a un
Candidato.
Comprender la simbología del término Q.·.H.·., es percibir la
profundidad del pensamiento masónico.
La simbología señalada es extensa en significados, por lo que es
importante estudiar varios autores.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los SS∴ PP∴ y TToc∴ que nos
son conocidos.
S∴F∴U∴
21
El Q.·. H.·. Juan Pablo Duarte y la Masonería
22
La Ilustración, en términos generales, se distingue por conservar
intacta la confianza en la razón, algo fundamental en la masonería y
los personajes que se adhieren tienen la decisión de servirse de ella
libremente. El filosofo alemán Emmanuel Kant perfila magistralmente,
lo que es la Ilustración: ―es la salida de los hombres de una menoridad
debida a ellos mismos. Menoridad es la incapacidad de servirse del
propio entendimiento sin guía ajena. Esta menoridad es debida a ellos
mismos si la causa de ella no es un defecto del entendimiento, sino la
falta de decisión y de valor para servirse de él sin guía‖, o sea, ser un
ser libre como somos los masones.
El historiador Roberto Cassá en su obra Padres de la Patria, señala
que el Q.·.H.·. Juan Pablo Duarte crea la Sociedad Secreta La
Trinitaria el 16 de julio de 1838. Apunta Cassá que la dotó de los
recursos prácticos y organizativos necesarios para alcanzar sus
objetivos. Para ello la asoció con la tradición masónica, siendo su
principal rasgo distintivo el pensamiento libertario de la Ilustración y el
secreto. Le dio una organización celular, siendo cada cuerpo de
conspiradores independiente del resto, concibiéndose como una
cadena que confluía en los primeros iniciados. Los trinitarios se
identificaban por un seudónimo y un color: Duarte tenía el azul,
Sánchez el verde y así sucesivamente (Cassá, págs. 19 y 20). Nos
dice la periodista Julie Estévez Guílamo en un artículo publicado en el
Diario Hoy el 13 de febrero de 2013, intitulado Duarte, “El Esclarecido
e Ilustre Hermano Masón”; que “tanto la idea de conformarse
secretamente y hacerlo de tres en tres constituía una simbología. Sin
dejar de tomar en cuenta que uno de los requisitos primordiales
23
requeridos para unirse a esta misión, era ser parte activa de la vida
masónica‖. Igual escribe el Q.·.H.·. Fidias Omar Díaz en un texto
publicado el 25 de enero de 2017 en Primicias.com, titulado ―la
independencia, Duarte y la Masonería‖. Nos dice el Q.·.H.·. Fidias:
funda ―la “Sociedad Secreta La Trinitaria”, en base a principios
masónicos, porque conoce lo que es una institución secreta, discreta,
el sagrado No. 3, el toque, saludo, los grados, organización y disciplina
y, siendo varios de los trinitarios masones, aplicaron dichos
conocimientos masónicos para formar su institución patriótica, con su
jerarquía y forma de comunicarse entre ellos, con la discreción
aprendida‖.
En la plancha burilada en el portal de la R.·.L.·. Caballeros de la Patria
N° 53: Semblanza Masónica de Juan Pablo Duarte, se señala que ―en
el plano de las comprobaciones concretas, sólo existe el dato extraído
de viejas minutas del historiador de la masonería, Haim López-Penha,
en las que el nombre de Juan Pablo Duarte aparece inscrito con el
cargo de “Arquitecto Decorador” de la Logia Constante Unión No. 8 y
registrado con el oficio de comerciante, como se atestigua en la minuta
del 24 de junio de 1843 en el cuadro de dignatarios de dicha logia,
bajo los auspicios del Gran Oriente de Haití. Esta Logia funcionaba en
la Casa de las Gárgolas, ubicada en la Calle Las Mercedes próxima a
la Calle Las Damas‖. La precitada plancha, así como la obra de
Cassá, ponen de bulto la relación sostenida por el Q.·.H.·. Duarte con
la masonería alemana, particularmente con la del Valle de Hamburgo.
Estudiar el proyecto de Constitución del Q.·.H.·. Duarte, es adentrarse
en su individualidad masónica. Es un manuscrito en el cual plasmó lo
24
que él aspiró debería ser la República Dominicana. Hay que
investigarlo con las herramientas que nos dota la Mas.·.: la escuadra,
el compás, el nivel, la plomada, el mazo, cincel y regla de 24 pulgadas.
Meditarlo en el silencio de la palabra hablada, pero si pensada; ese
silencio que reclama la atención y la concentración energética a la que
nos convoca el V.·. M .·. cuando llama a Silencio y en Logia;
adentrarnos en su pensamiento, estando nosotros purificados de
pasiones, respirando en libertad, aquilatados en el fuego, lo que nos
señala el camino de la razón ilustrada que nos conduce al sendero de
la Luz, del G.·.A.·.D.·.U.·., tras jurar repudio eterno a los ttiran.·. y a las
ttiran.·. Cuando profundizamos este documento y toda la obra del
Q.·.H.·. Duarte bajo la Luz masónica, nos encontramos con un ser
superior, adalid de la justicia, en pleno ascenso a los planos
superiores de la existencia eterna.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los SSig∴ PPal∴ y TToc∴ que
nos son conocidos.
S∴F∴U∴
25
La espada flamígera, símbolo de Fuerza y cumplimiento de la ley.
DESARROLLO
27
materias científicas, así como los temas de enseñanza. La espada es
también la luz y el relámpago del iniciado y la vaina es representación
de la oscuridad; su destello sólo pueden soportarlo los hombres
calificados, por lo que el profano no debe desenvainarla. (2) La
Espada Flamígera: Es una espada de doble filo con la hoja en forma
de espiral u ondulada -a diferencia de las espadas comunes con hojas
rectas- es utilizada en las Logias Masónicas, con un simbolismo
análogo a la espada de fuego mencionada en el libro del Génesis:
CONCLUSION
30
El masón debe ser cumplidor de la ley, y el VM:. Nos indica con la
espada flamígera, la fuerza y voluntad en el cumplimiento de la ley. El
concepto de la moral y la ética debe estar inmerso en el cumplimiento
de las leyes. Este símbolo de fuego zic zagueante, nos muestra la
fuerza del verbo, esa luz que se esparce por todos los puntos
cardinales de la logia al abrirse los trabajos, y nos recuerda que la
instrucción debe estar en todas partes, que aunque dicha instrucción
esta dirigida hacia nuestros MM:., nosotros como modo de progreso
espiritual, debemos apuntar nuestras baterías y trabajo a este fin. En
el caso de aprendices busquemos la instrucción en todas partes, y que
nos llevemos el mejor de los salarios en cada tenida. Es todo y
cuanto VM:.
31
Columnas
32
sientan los CComp.·., separados de los MM.·. MM.·., por el Trono del
Seg.·. Vig.·.
También se reconocen como ―Columna‖ al masón, bien porque es
sostén de la Orden, de la Creación universal, así como del Taller
donde se instruye como obrero de paz. La conducta del masón debe
ser recta como la escuadra y vertical como la plomada, por ello se
asemeja a una columna. En Logia se sienta con la postura del faraón:
el cuerpo en forma de escuadra con las manos reposando cerca de las
rodillas en actitud circunspecta. Nunca de manera derramada. Jamás
reflejando flojera, descuido o impostura. Nada inarmónico puede
mostrar belleza ni tampoco puede ser útil a la Gran Obra.
Los QQ.·. HH.·. Adolfo Terrones Benítez y Alfonso León García en su
obra: Los 33 temas del Aprendiz Masón, nos instruyen en la existencia
de doce columnas que ―se encuentran colocadas simétricamente en el
interior de la Logia, en series de seis al Norte y seis al Sur, quedando
entre ellas, las Dos Grandes Columnas B y J, estas últimas como
sitiales destinados para recibir el salario los QQ.·. HH.·. AApr.·. y
CComp.·. En lo material, sobre las doce columnas se apoya el Cielo
del Taller y, simbólicamente, le sirven de sostén a la Bóveda del
Infinito. Existe también la Columna de Armonía, para referirse al
conjunto de instrumentos que acompañan las ceremonias.
En el Templo se encuentran Tres Columnas simbólicas que sostienen
la Logia representadas por las Tres Luces que constituyen la siguiente
trilogía: la Omnisciencia o sabiduría que corresponde al V:. M:. o sea
la inteligencia creadora, que concibe y manifiesta interiormente el plan
del Gran Arquitecto; la Omnipotencia o fuerza volitiva que trata de
33
realizar lo que la primera concibe y que corresponde al Prim.·. Vig.·.; y
la Omnipresencia o belleza, representada por el Seg.·. Vig.·., estas
tres facultades –y esto hay que tenerlo muy presente– se encuentran
también dentro de cada uno, en el YO del masón.
Las Columnas antes descritas, que simbolizan las tres virtudes
determinantes de toda obra masónica, reciben el nombre de Columnas
Morales o de Orden: la Sabiduría, representada por la Diosa Minerva,
en el V.·. M.·.; la Fuerza, representada por Hércules, en el Prim.·.
Vig.·., y la Belleza, representada por Venus, en el Seg.·. Vig.·.
El Diccionario Esotérico Zaniah, de la Editorial Kier, señala que
Salomón, rey de Israel, representa la Columna de la Sabiduría porque
concibió el soberbio modelo del Templo que inmortalizó su nombre;
Hiram, rey de Tiro, representa la Columna de la Fuerza, porque él
sostuvo al rey Salomón en su grande e importante empresa; y
finalmente, Hiram Abif, representa la Columna de la Belleza, porque
debido a su destreza en las artes, el Templo fue hermosamente
realizado.
Estas tres columnas se manifiestan materialmente en el interior del
Templo, formando alrededor del Ara o Altar una Escuadra,
sosteniendo en la parte superior un cirio o estrella en cada una de
estas columnatas y cuyo encendido, durante la Apertura de los
trabajos de la Logia, es producto de una ceremonia que está a cargo
de los Maestros de Ceremonias. Al cierre de los trabajos se procede a
apagarlas con el ceremonial establecido en el Ritual del Grado.
Todo masón en la Logia de San Juan, en su vida cotidiana, debe
mantener una conducta intachable, recta y aplomada de acuerdo al
34
parámetro ético del Templo de Virtud que construye dentro de sí, para
ser en su condición de obrero de paz, una sólida columna en la
sociedad y, por ende, en la Gran Obra que geométricamente eleva el
G.·. A.·. D.·. U.·.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los SSig∴ PPal∴ y TToc∴ que
nos son conocidos.
S∴F∴U∴
35
Solsticio de Invierno
37
mitos y ritos tienen una carga importante de real conocimiento que se
debe preservar. Por ello en el DEM se lee que ―bajo el doble nombre
de San Juan Bautista y de San Juan Evangelista, patronos de nuestra
augusta Orden, los Francmasones celebran dos grandes fiestas
anuales, llamadas indistintamente fiestas de San Juan o de la Orden
que corresponden a los dos Solsticios‖, personificando en ellos buena
parte del verdadero conocimiento, el del Arte Real.
San Juan Bautista y San Juan Evangelista son expresiones simbólicas
del origen y misión perenne de la Masonería: En nuestros textos
encontramos ―la pregunta ritual del Ven.: M.: a todo hermano visitante
¿De dónde venís?, y en la contestación de éste: De una Log.: de San
Juan… y recordemos que en la Log.: de San Juan se elevan TTemp.:
a la virtud y se cavan calabozos para los vicios, que es la misión de
todo masón en la sociedad para levantar la edificación de la Gran
Obra, la del G∴A∴D∴U∴, utilizando herramientas como el mazo, el
cincel, la regla de 24 pulgadas, la escuadra, la plomada y el compas,
entre otras; sabiamente utilizadas según nos instruyen simbólicamente
en la liturgia por medio de los ritos. Tallar nuestra piedra en bruto para
colocarla en el edificio social, piedra que se cincela mediante una
conducta aquilatada moralmente en nuestra familia, lugar de trabajo,
comunidad, en fin, en nuestra vida social, para interiorizar en nuestro
espíritu, ese Templo de Virtud aplomado por nuestra vidaa masónica.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los SSig∴ PPal∴ y TToc∴ que
nos son conocidos.
S∴F∴U∴
-.-
38
Mistagogo, el que conduce al iniciado
39
lo sería un rabino, un cura, un ulema (erudito del Islam), un lama, entre
otros.
Es importante señalar que el término mistagogo significa aquel que
hace o conduce al iniciado, según los misterios griegos.
En los primeros siglos del cristianismo la catequesis o catequismo (del
griego κατητισμός, de κατητεῖν,'instruir'), se instituyó como proceso
formador por el gran número de bautismos de adultos que se daba en
aquella época, cuyo catecumenado comprendía varias etapas con
objetivo de inculcar la fe a los nuevos miembros que se inician en la
Iglesia y su posterior educación. La última etapa de la catequesis
como proceso formativo, no evangelizador, era la llamada catequesis
mistagógica, que recibían los iniciados bautizados por parte del
Obispo, durante la primera semana de la Pascua. Era una explicación
a la que solo tenían acceso los ya bautizados, que habían recibido tres
etapas previas de formación, acerca de los sacramentos y sus figuras
bíblicas y el sentido de los ritos. Es la profundización en el mensaje
evangélico para educar la Fe.
El mistagogo, por ende, trabaja con los iniciados. Es parte de la
tradición y en masonería la función la ejercen las luces de las logias en
compañía de MMaest:. y MMas:. designados para dicho trabajo. De su
lado, los HHerm:. Mas:. deben encontrar su mistagogo en su ser
interior, para que lo conduzca por el sendero de la Luz.
.·.
40
La Tenida
42
Para poder dar inicio a los trabajos o Ten.·. Masónica, es
imprescindible que la Logia se encuentre ―a cubierto...‖ tanto en el
interior del Templo por las cualidades de los miembros de la Orden allí
presentes, como en el exterior del mismo, para no permitir
indiscreciones del mundo profano. El Templo debe encontrarse
totalmente aislado del mundo externo, lo que constituye una
importante responsabilidad del Guarda Templo o el 2do Diacono,
quien sólo podrá abrir la puerta, cuando el Ven.·. M.·. así lo autorice, a
través del P.·. Vig.·. A este respecto Aldo Lavagnini, asevera que ―El
Guarda Templo simboliza la facultad que se encuentra al umbral de
nuestra conciencia, la que tiene que vigilar que no ingresen en la
misma los errores profanos y todos aquellos pensamientos que no
reciban la aprobación de su ser más elevado. (Ven∴M∴)‖.
Serge Raynaud de la Ferriere, indica que ―el ritual masónico demanda
estar a cubierto de cualquier comunicación con el exterior, así como
vigilar para estar únicamente entre Iniciados y tomar una multitud de
precauciones, casi mágicas; ello es justamente para dar a respetar los
Ritos, que datan de muchos milenios‖.
Durante la Ten.·. debe observarse el mayor respeto y orden, además
de aceptar de manera disciplinada el Silencio y en Logia, que el Ven.·.
M.·., solicita de todos al momento de dar comienzo a la reunión y cuyo
propósito no es otro que el de acostumbrar al Hombre a no ser
irreflexivo cuando va a expresar sus criterios y además a ser muy claro
y muy preciso, cuando trate de exteriorizar sus ideas o puntos de vista.
Con esto quien preside la Ten.·., busca que prive el Orden, la
Disciplina y la Armonía, en todo momento, siendo obligación de todos
43
el ayudarle en el logro de este propósito. ―Al silencio así, se le
considera una virtud, por lo cual se logra la corrección y rectificación
de algunos defectos y tendencias que, como humanos, todos
tenemos. Por esta misma disciplina aprendemos a ser prudentes e
indulgentes con las faltas que observamos”. (Germán Mejía García).
De igual manera se debe cumplir fielmente con la disposición de no
levantarse, pasar de una Col.·. a otra, ni salir del Templo, si antes no
ha sido autorizado por el respectivo Vig.·., y este a su vez por el Ven.·.
M.·.. Cuando un asistente a la Ten.·. deba ausentarse, por razones
debidamente justificadas, previamente debe jurar no revelar nada de lo
tratado o practicado en la reunión y dejar su óbolo en el Saco de
Beneficencia, para ello el Hosp.·. se colocará al Occ.·., en espera de
las instrucciones del Ven.·. M.·.
La retirada del interior del Templo, una vez concluida la Ten.·., debe
efectuarse de manera ordenada y si es posible en silencio, evitando
las tertulias y chistes, debiendo permanecer los HH.·. con sus
Mandiles y Condecoraciones, debidamente colocadas hasta
encontrarse fuera de este recinto sagrado.
La Ten.·. es la actividad ritual consuetudinaria principal como ejercicio
de formación masónica.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los Signos (SSig∴) Palabras
(PPal∴) y Tocamientos (TToc∴) que nos son conocidos.
S∴F∴U∴
Bibliografía:
Basado en la pieza de arquitectura Masonería Práctica, del Q∴ H∴ Humberto Camejo
Arias.
44
“Querido Hermano”
46
estrictos de moral y sobre la base de la comprensión, sin peleas ni
diferencias personales: por eso somos ―QQ.·. HH.·.‖.
La Masonería avanza sobre principios de Libertad, Igualdad y
Fraternidad. Estos conceptos no lo entendemos como el vulgo, que le
da una interpretación superficial. Para el masón la libertad es la
condición personal de buscar la verdad, por medio de la virtud,
dominando las tendencias viciosas, hábitos negativos y pasiones
destructivas.
La igualdad se logra en la Masonería por la enseñanza de la Escuadra
y el Nivel que nos ilumina en cuanto a la identidad fundamental de
todos los seres, de todas las manifestaciones del Espíritu, por encima
de toda diferencia externa o grado de desarrollo. La Escuadra nos
proporciona una recta y justa norma de conducta con todos nuestros
semejantes; el Nivel nos hace ocupar el lugar que nos pertenece en la
sociedad o donde hayamos sido convocados a trabajar. La Escuadra y
el Nivel son herramientas que nos ilustran en la condición que
tenemos de sentirnos iguales en todas las circunstancias y
condiciones externas; es la igualdad que debemos cultivar en nuestros
sentimientos hacia los demás y con una serenidad en las condiciones
favorables como en las adversas, en la fortuna y en la desgracia, en el
éxito y en el fracaso, en la pérdida y en la ganancia. Allí encontramos
la esencia de la expresión ―Q.·. H.·.‖, que nunca será una formula
protocolar, porque de ser así, quien la expresa no es verdadero masón
en su interior.
La Fraternidad, conjuntamente con la Igualdad y la Libertad, forma un
Triángulo que nos convoca a la tolerancia de la libertad y comprensión
47
en cuanto a la igualdad con respecto al prójimo. Además de la relación
existente entre los QQ.: HH.: (3)
Para concluir este trazado, la expresión ―Q.·. H.·.‖ tiene una triple
manifestación: la fuerza de la palabra como símbolo de creación del
G.·. A.·. D.·. U.·. expresado en el primer párrafo del Evangelio de San
Juan, que en nuestro caso, estamos creando un hombre distinto,
templo de virtudes; segundo, como herramienta psicológica para
interiorizar un valor fundamental de la Orden Masónica desde el
mismo momento en que el profano es aceptado como Aprendiz; y,
finalmente, como instrumento que coadyuva con la Escuadra y el
Nivel, en la formación de un verdadero masón.
Así que QQ.·. HH.·., cuando abordemos algún tema escabroso con un
Q.·. H.·., nos colocamos al Orden, recordando que el signo gutural
significa además de nuestra decisión de mantener los secretos de la
Orden, también que nunca debe salir una palabra de nuestro ser que
ofenda a un Q.·. H.·., por ello tenemos nuestra mano en forma de
Escuadra, rectitud, se ubica en nuestra garganta. Por ello jamás una
palabra u acción contraria a la hermandad y por ende a la Masonería,
nunca, repetimos, será portadora de sabiduría, ni tendrá fortaleza ni
será estéticamente bella; y por ende, no puede ser parte de la Gran
Obra, del G.·. A.·. D.·. U.·.
S∴F∴U∴
48
Notas y bibliografía.
1) La Biblia.
2) https://groups.google.com/forum/#!topic/secreto-masonico/c8eWZ-AnubI
3) Lavagnini, Aldo. Manual del Aprendiz Mason. Editorial Kier. 8va edición 1992 Buenos
Aires, Argentina. Pag. 116 – 118
49
La Educación Masónica
El conocimiento se caracteriza por ser exotérico o público, esotérico y
trascendente. Desde el Norte (donde se ubican los aprendices)
tenemos acceso al primero y comenzamos a transitar hacia el
segundo. Nos encontramos en la infancia de nuestro desarrollo, por
eso nos corresponde ese intermedio entre ambos. Al avanzar
comprendemos con mayor profundidad, haciéndose la Luz cada vez
más presente. Trascendente lo adquirimos en los Grados superiores.
La plataforma de la Educación Masónica son los emblemas, alegorías,
símbolos y signos. El punto focal es que la relación significado-
significante es diferente en el Orden Masónico que en el mundo
profano. A medida que adelantamos en el estudio, el significado que
se nos descubre permite desarrollar aptitudes sobre la base de la
formación de un espíritu crítico, pensamiento libre, lejos de fanatismo y
superstición.
Nos aproximaremos a cada uno de estos instrumentos y trataremos de
señalar aplicaciones que nos permitan profundizar en el tema.
50
(1)
Emblema, según el DRAE es una ―cosa que es representación
simbólica de otra‖. Según los QQ∴ HH∴ Adolfo Terrones Benítez y
Alfonso León García González(2) nos indican que ―emblema es todas
las representaciones que conciben la imaginación y el ingenio, que
siempre señalan los propósitos del hombre, expresados por medio de
signos, de caracteres, de figuras, de dibujos o de cosas y de diversos
objetos‖.
Hay un punto que plantean los precitados QQ∴ HH∴ en su obra y es
que ―los emblemas, pueden ser símbolos, pero que ningún símbolo,
podrá ser un emblema‖, y esto es importante para no caer en
confusión. Los QQ∴ HH∴ Terrones y León no explican que el emblema
contiene dos o más símbolos los cuales en su conjunto expresan un
cuerpo de ideas o conceptos, públicos o esotéricos; pero un símbolo
per se, tiene un significado y no es representación de otra, como
señala el DRAE.
En el Simbolismo Masónico, la Escuadra, es el emblema de la
EQUIDAD, la Plomada, lo es de la RECTITUD y el Nivel es de la
IGUALDAD.
La Alegoría según el DRAE, es una ―ficción en virtud de la cual algo
representa o significa otra cosa diferente.‖ La Alegoría puede
interpretarse sin tomar un acuerdo previo o convenido, de allí su
diferencia con el Símbolo, por lo que no debemos confundirlos.
La alegoría nos proporciona dos ideas: la que representa y la que
trata de demostrar. Conocido es la alegoría del Mito de las Cavernas,
de Platón, en la cual las tiniebla del mundo de la caverna, era la
realidad; mientras que el reflejo en la pared que provenía del exterior,
51
era la idea. Posiblemente la alegoría de la muerte en la ceremonia de
Iniciación, sea la más impactante para un Apr∴ Mas∴.
El Símbolo es según el DRAE ―una representación sensorialmente
perceptible de una realidad, en virtud de rasgos que se asocian con
esta por una convención socialmente aceptada.‖
En la Masonería, todas las materias de enseñanza ritualista, iniciática
y científica, se imparten y se representan por medio de símbolos, cuya
finalidad consiste en inculcar al Mas:. ese espiritualismo que debe
adquirir, para poder encaminar sus actos, por la verdadera senda de la
virtud (3)
En ocasiones se utilizan como sinónimos los términos emblema,
alegoría y símbolos, por lo que hay que observar con cuidado sus
alcances.
El Signo, según el DRAE es el ―objeto, fenómeno o acción material
que, por naturaleza o convención, representa o sustituye a otro.‖
En el Orden Masónico, al Signo se le considera como uno de los
factores más poderosos y eficaces que se han adoptado para lograr el
reconocimiento entre los hermanos. Es tan importante, que en la
instrucción al Apr∴ Mas∴ se indica que recibe la paga en la columna
Norte dando el Sig∴ el Tocam∴ y la Pal∴.
A manera de conclusión recordaremos nuestra iniciación. El profano
que aspira a los beneficios de la Iniciación Masónica es presentado en
el Templo con una venda en los ojos, signo de la oscuridad en que se
encuentra todo profano. No está ni vestido ni desnudo para
representar la inocencia, y se le despoja de los metales, emblema de
los vicios. En esta ceremonia encontramos claros ejemplos de
52
emblema, alegoría y signo. Igualmente, al Ap∴ se le instruye en el
Taller el significado simbólico de los instrumentos de trabajo: la Regla
de 24 pulgadas, que representa las 24 horas del días y como debemos
utilizarlas: una tercera parte para el desarrollo espiritual y asistir a un
amigo o Hermano en sus necesidades; otra para nuestro trabajo usual
y, finalmente, para el descanso. El Mazo, es la fuerza de nuestra
consciencia que acciona evitando caer en tentaciones que nos hunda
en el vicio, el fanatismo o la superstición. El Cincel, es la energía que
utilizamos para modelar la piedra bruta que somos y hacernos
merecedor de la posición que tenemos reservada en el edificio del G∴
A∴ D∴ U∴
Conociendo y practicando el procedimiento educativo masónico
avanzaremos, metódicamente, inicialmente del Norte hacia el Sur,
encontrando cada día mayor claridad gracias a la Irradiación que
progresivamente nos va iluminando desde el Oriente.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los Signos (SSig∴) Palabras
(PPal∴) y Tocamientos (TToc∴) que nos son conocidos.
S∴F∴U∴
Bibliografía
1) Diccionario de la Real Academia Española
2) Adolfo Terrones Benítez, 32º y Alfonso León García González, 33º,
Los 33 temas del aprendiz masón
3) Idem
∴
53
La Logia de San Juan
55
diferencias, pues así como es arriba es abajo, o sea, que tanto las
personas que se reúnen, como las paredes del Templo en el cual
trabajan, no son otra cosa que ENERGIA CONSCIENTE E
INTELIGENTE. Todo en este universo es una y exclusivamente esa
ENERGÍA que mantiene cada cosa exactamente en su lugar en que
debe estar. Cada Ser Humano crea su propio universo, y lo sigue
creando hasta el día en que parte, para luego volver a crear un
universo nuevo, a la medida de sus necesidades espirituales.
57
Igualmente se argumenta que la Logia de San Juan es un indicio de la
finalidad de la masonería como conservadora del ―conocimiento
esotérico cristiano‖.
Más allá de todas estas tesis, lo trascendente es que en la Logia de
San Juan elevamos Templos a la virtud y cavamos calabozos a los
vicios. Que trabajamos con esa ENERGIA CONSCIENTE E
INTELIGENTE, que nos guía en el camino que nos conduce a la Luz,
al encuentro con el G.·.A.·.D.·.U.·.
Esperamos que esta plancha motive la inquietud investigadora de
cada masón, ya que somos hombres libres y siempre debemos tener
presente que con nuestros estudios, bajo la escuadra de la razón y el
compás de la comprensión, construimos la convicción que alimenta
nuestra conciencia sobre la base del pensamiento y la práctica de una
prístina moral.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los Signos (SSig∴) Palabras
(PPal∴) y Tocamientos (TToc∴) que nos son conocidos.
S∴F∴U∴
Bibliografía:
Mackey, Albert Gallantin. Enciclopedia de la Francmasonería
Lavagnini, Aldo. Manual del Aprendiz
58
Salmo 133
59
Dicho término, Jerusalén Celestial, desarrollado desde sus
perspectivas, tanto por el judaísmo como por el cristianismo; se refiere
a una ciudad figurada, que es una reconstrucción física y una
restauración espiritual, así está en el libro del Apocalipsis(4) y, según
los estudiosos, utilizaron el término griego kainos, que tiene un
significado de algo renovado o refrescado, distinto de neos, otra
palabra griega, que es traducida como nuevo, o sea, algo creado(5).
Entendemos, por ende, que los peregrinos buscan su regeneración en
el templo de virtud, que viene a ser la Jerusalén Celestial.
Hace mención el salmista a la importancia que los hermanos vivan
unidos y lo compara al ―buen perfume que corre por la cabeza de los
sacerdotes y baja por su barba hasta el cuello de su ropaje‖. Para
consagrar al sumo sacerdote se utilizaba aceite perfumado. Si
revisamos el libro del Éxodo, encontramos como el Señor le da
instrucciones precisas a Moisés de cómo elaborar el aceite de
consagrar, señalando que tome 18 kilos de diferentes plantas
aromáticas y tres litros y medio de aceite de oliva. Hay dos datos
importantes: el 18 que equivale a 9, múltiplo de 3; numero de especial
simbolismo en la Orden Masónica, cuyo estudio se inicia desde el
grado de Ap y 3 litros y medio de aceite de oliva, destinado a ser
base del aceite de consagrar, pero también proporciona el combustible
para las lámparas en el templo, significando energía espiritual y Luz
del conocimiento. Me pregunto ¿cuánto de energía espiritual y Luz del
conocimiento necesito para construir el templo a la virtud y cavar fosos
a los vicios?
60
Esos 18 kilos de plantas aromáticas deben ser molidos, triturados.
Representa que debemos desbastar nuestra materialidad,
escuadrando nuestra acción de vida con esfuerzo y dedicación, con la
conciencia en el significado del simbolismo de la límpida L.·., que
genera la combustión de este aceite utilizado en el encendido del
candelabro sagrado, en el Templo de Salomón, en mi templo personal.
Veamos el término ―buen‖, de ―buen perfume”, como análogo de
bueno: ―al ver Dios que la Luz era buena‖, nos dice el Génesis 1:4, así
que este ―buen perfume‖, elaborado según mandato del
G.·.A.·.D.·.U.·., hecho a base de aceite de oliva, impregna el cuerpo y
algo tan mundano como el ropaje. Recordemos nuestra Iniciación y el
traje de recipiendario; su simbología, su significado masónico.
Y desciende el ―buen perfume” en su término de Luz del
Conocimiento, desde la cabeza, lugar donde se encuentra el cerebro y
órgano de la mente, centro en el cual desarrollamos humanamente
nuestra consciencia y aquilatamos nuestro espíritu, hacia el corazón,
el Ara del cuerpo. El mensaje es claro: el aceite generador de Luz
impregna los órganos fundamentales para el conocimiento de si, y
escuadrar mi existencia sobre la base de la rectitud, en la acción
virtuosa.
La referencia al rocío del monte Hermòn debemos comprenderla
alegóricamente. Cierto que dicho punto geográfico se encuentra muy
lejos de Jerusalén, como para que la humedad de la zona llegue a la
ciudad. Es, perfectamente, un símil con la prueba del agua, a la que
somos sometidos en la Iniciación. En nuestro renacer como MMas.·.,
significa fecundidad, ya que germinamos como hombres nuevos y, aún
61
siendo infantes en el grado de Ap.·., y aún no nos hemos librado,
totalmente, de nuestras ataduras profanas; pero si hemos asumido la
decisión de desbastar la piedra bruta que somos, porque la Masonería
nos mostro la L.·., el camino y la forma de marchar hacia ella.
La referencia a la larga vida, con la que termina el Salmo, no puede
ser otra que el encuentro que nosotros procuramos con el
G.·.A.·.D.·.U.·., dirigiendo nuestra existencia con las herramientas y
principios que nos aporta la masonería.
El Salmo 133 es un cántico sapiencial cuyo contenido es rico en
armonía y hermandad. Interiorizarlo es imprescindible en la
construcción de nuestro templo interior. No es casualidad que lo
tengamos siempre presente en los trabajos en el grado de Ap.·.,
indicándonos un modelo de conducta, tanto en el Taller, como fuera de
él.
Al momento en que circunstancias de la vida te colocan en un trance
difícil, sintamos el rocío del monte Hermón y avancemos en nuestro
camino hacia la L.·., con el Mazo, el Cincel, la Regla de 24 pulgadas y
demás instrumentos que nos proporciona nuestra Orden Masónica.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los Signos (SSig∴) Palabras
(PPal∴) y Tocamientos (TToc∴) que nos son conocidos.
S∴F∴U∴
Notas y bibliografía
1) Liturgia de la Gran Logia de la República Dominicana
2) Becker, Udo. Enciclopedia de los Símbolos. Robin Book. Barcelona, España 1996 pag 220
3) Idem
4) Se encuentra en los versículos 3:12 y 21:2 del libro del Apocalipsis.
Wikipedia. http://es.wikipedia.org/wiki/Nueva_Jerusalen
62
El secreto masónico
63
Visto así, pareciera que los masones no tenemos secreto y cualquier
Q.·. H.·. puede pensar que ingresó en un lugar equivocado si creía
que es una organización supra secreta. No tenemos esos secretos.
Pero oh sorpresa. Si tenemos ―nuestro secreto‖ y ello nos diferencia
del común de las asociaciones que existen en nuestro tiempo.
Los masones tenemos un secreto que se expresa en aspectos que por
su diferencia pareciera que son tres diferentes, pero que al final es
uno, porque el uno, la unidad, el punto, es el inicio del todo.
Tenemos un secreto que lo podemos llamar convenido. Lo que ocurre
en las TTen:., se queda en las TTen:. Lo juramos al finalizar cada
sesión. Es parte del ritual. El Guarda Templo o el Segundo Diacono
verifican que no entren elementos profanos al Taller. Silencio y en
Logia también es un llamado a que cada masón coloque a su Guarda
Templo interior personal en guardia para alejar de su mente los
pensamientos que puedan perturbar la formación de ese egregor que
debe transformarse en una concentración de fuerzas espirituales, que
una vez interconectada, proceden a su expansión en beneficio de la
hermandad y de la humanidad. Recordemos que la Logia representa
al Cosmos y éste se origina en un punto, el cual simbolizamos con el
punto en el centro del círculo y numerológicamente con el UNO. Las
teorías físicas nos hablan del big bang, o sea ese punto donde se
originó el universo. En cábala, por citar un ejemplo del esoterismo, nos
hablan del tzimzum, que es la contracción del Absoluto que dejó un
vacio, espacio donde pudo se emanado el Universo.
No vamos a profundizar en teorías físicas o metafísicas de grados
superiores. Lo que debemos tener presente es que en la apertura de
64
la Logia, los QQ:. HH:., quienes estaban dispersos en la Logia de San
Juan, se reúnen en UN PUNTO, para generar una ENERGIA
CONSCIENTE E INTELIGENTE, creadora de una armonía cósmica y
que en cada Masón erige su propio universo y en él, su Templo de
Virtudes, a la medida de sus necesidades espirituales. Este aspecto
litúrgico es parte del secreto masónico, porque nadie puede ingresar a
vuestra conciencia para conocer y mucho menos comprender, la
acción de la energía creadora generada en el Taller.
Pero también existe un aspecto simbólico del secreto masónico. En la
época de los masones operativos, se guardaba con celo los
conocimientos por diversas razones, económicas entre otras. Luego
en el siglo XVI, mientras en las villas y pueblos se asesinaban entre
católicos y protestantes durante las guerras de religión, en las logias
convivían armónicamente con hermandad. Así que los SSig∴, PPal∴ y
TToc∴ eran un lenguaje que expresaba físicamente una condición,
pero con la convicción de reproducir simbólicamente el acto de crear
del constructor, que no depende de que algo se oculte, sino que por el
contrario algo se conozca, pero que el acto creador se ejecuta sobre la
base del secreto de cada masón. Los tiempos cambian, pero en su
naturaleza la relación entre masones siempre será un acto fraternal y
privado, esencialmente secreto porque se acrisola en su yo interno.
Pero hay un aspecto cardinal en el secreto masónico: el iniciático. Es
referido al cambio de consciencia que se opera en cada individuo y
que va regenerando su personalidad, proyectando una nueva
condición de ser humano. En la medida en que cada masón progresa
en grados, que no es otra cosa que el aquilatamiento del Templo de
65
Virtudes que se levanta en la conciencia de cada quien,
perfeccionamiento que se logra por medio de las experiencia profunda
que se transforma en secreto porque, sencillamente, es imposible
revelárselo a ninguna otra persona.
El secreto masónico no se trata de conspiraciones. El secreto
masónico esta dentro de ti, lo practicas dentro y fuera del Taller, en la
Logia de San Juan. La Masonería es una orden iniciática y por ende
cada símbolo tiene un significado exotérico o publico, esotérico o
privado, pero también tiene uno hermético, dentro de ti, que te ayuda
al proceso de conocimiento de sí mismo que debe transitar cada
masón, para encontrar su maestro interior que le orientará en su vida
en pos de la Luz.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los SSig∴, PPal∴ y TToc∴ que
nos son conocidos.
S∴F∴U∴
66
Siempre obrero de paz, siempre aprendiz
68
Todos estos gremios que se fueron formando combinaban el arte del
oficio con prácticas religiosas propias de la época. Recordemos que
imperaba el paganismo, que en general, por ser politeístas, aceptaban
con algo de sosiego la existencia de los dioses y diosas de otras
culturas. Así que en un gremio donde los individuos manejaban
conocimientos que le eran de interés al grupo, aceptarían a miembros
de diferentes orígenes nacionales y, por ende, con dioses distintos a
los del sitio. El mundo antiguo aunque los hay, son pocos los ejemplos
acentuados de intolerancia religiosa.
69
armonía de las logias donde el sentido de humanidad es tanto fraterno
como cosmopolita.
70
el masón. Pero también el sentido de justicia, ya que la tolerancia con
los intolerantes tiene un límite.
Nuestras logias son centros de discusión fraterna. La Masonería es
una Orden donde impera la libertad de pensamiento. La tolerancia es
esencial para el ejercicio de dicha libertad. Igualmente el respeto al Q∴
H∴, porque sin respeto no hay tolerancia. De allí que los masones, que
siempre seremos obreros de paz y eternos aprendices porque el
tránsito por este plano temporal es de constante asimilación de
conocimientos por medio del estudio y de la experiencia de vida,
trabajamos en función de la Gran Obra, que es de belleza sublime e
inefable.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con SSig∴, PPal∴ y TToc∴ que nos
son conocidos.
S∴F∴U∴
71
Los tres San Juan y la Masonería
73
Masónicamente graficamos este ciclo mediante un círculo rodeado de
dos rectas paralelas tangentes y verticales, que contiene un punto en
su centro. El círculo corresponde al ciclo anual, identificado con el
recorrido del Sol –punto situado en el centro del círculo-; el hecho de
que las dos columnas sean paralelas indican simetría y que sean
tangentes nos dice que estarán situadas en los puntos límite del ciclo,
los dos solsticios opuestos.
El círculo, en la medida que avanzamos en nuestros estudios
masónicos, le vamos encontrando nuevos y más profundo significado.
Filosóficamente, el punto simboliza el inicio, lo que numéricamente
identificamos con el numero UNO, es la emanación primaria desde la
cual parte la Creación y donde todo es sutil e indiferenciado. De allí se
va generando un proceso jerárquico, de descenso o degradación
ontológica, proveniente del Ser Supremo. Este devenir, visto
simbólicamente, nos es útil para explicar la producción de la realidad
inferior como una especie de irradiación a partir de la superabundancia
de la superior, que es el G∴A∴D∴U∴, lo UNO, la realidad subsistente y
originaria, sin que ésta pierda su unidad ni se contamine con lo inferior
a lo largo del mismo.
En este proceso de creación, que en el grado de Aprendiz estudiamos
los tres primeros números y en grados sucesivos, llegamos hasta el
DIEZ, se enmarcan en las dos columnas que se colocan tangentes y
verticales representando a los solsticios, que a su vez se identifican
con los dos San Juan. Este símbolo interpreta toda la Creación, desde
el punto inicial, representado su origen en el UNO, hasta la línea que
distingue el círculo que constituye el Universo y las líneas o columnas
74
tangenciales. Allí se visualiza el proceso cíclico necesario e
imprescindible para que la materialización de la emanación, sea
percibida por los seres humanos como realidad múltiple, diferenciada,
material perceptible por los sentidos.
En el ritual del Grado de Aprendiz lo recreamos en cada Tenida en el
parlamento del porqué los vigilantes y el Venerable Maestro se ubican
en el Occidente, el Sur y el Oriente. El Occidente es la realidad
diferenciada, múltiple, material, donde el bien y el mal coexisten, el
final de la creación donde reinan las tinieblas de la opinión sobre la
ciencia y la virtud. Allí se instala la Logia de San Juan como energía
regeneradora de la Masonería en su labor de edificar en este plano
material la Gran Obra, signada por la belleza de la virtud, porque la
idea de BIEN, de VIRTUD, es consustancial con la de BELLEZA, ya
que la Gran Obra jamás puede ser grotesca.
Nuestro transito existencial debe tener por objetivo ir hacia el punto
inicial, en búsqueda de la SABIDURIA simbolizada en el Trono del rey
Salomón y que en la Logia lo ocupa alegóricamente el Venerable
Maestro y allí, en el Oriente, se encuentra el Sol, símbolo del punto
inicial y de la fuerza motora de la Creación. Por ello el Aprendiz pasa
de la Columna Norte, donde los rayos del Sol son esquivos, hacia la
del sur, donde brilla el Sol del conocimiento y luego, en la medida de
su trabajo en su templo interior, que se proyecta en la sociedad, busca
la exaltación en el grado de Maestro que lo coloca definitivamente en
la senda de encontrar la verdadera Luz, aquella filosófica que le
muestra su maestro interior y lo conduce por la plomada, la vertical,
75
con la escuadra y el compas, en busca de los grados superiores de
crecimiento espiritual.
Para ello los masones tenemos muchos maestros como referencia.
Uno de ellos es San Juan el Limosnero, hijo del rey de Chipre, nacido
en esa isla en el siglo VI y quien abandono los goces del poder para
emigrar a Jerusalén, ayudar a los peregrinos, fundar un hospital y
organizar una fraternidad con el objeto de auxiliar a los cristianos, por
lo que en la tradición se le ha designado como protector de la Orden
Masónica de los Templarios.
En conclusión, las fechas solsticiales nos muestran los ciclos de la
existencia y así como San Juan Bautista descubre el inicio de la obra
terrenal del Maestro Jesús, en aquel momento simbólico del cruce del
rio Jordán, recordemos la prueba del agua en nuestra iniciación; San
Juan Evangelista cierra el ciclo de la obra del Maestro burilando su
grandioso planteamiento filosófico, el cual es referencia obligada en
los estudios de la Filosofía Perenne. San Juan el Limosnero nos
muestra un ser humano excepcional, dedicado a construir su templo
interior, proyectando su accionar en la sociedad como obrero de paz,
en función de la Gran Obra.
Esta simbología debemos tenerla presente en el proceso de
conocimiento de sí y de tallar la piedra en bruto, fundamental en la
construcción de nuestro templo interior de virtudes, camino por el que
debe transitar todo masón y coadyuvar con su accionar, a fortalecer la
inmensa cadena fraternal que encarna la Gran Orden Masónica
Universal.
76
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los SSig∴, PPal∴ y TToc∴ que
nos son conocidos.
S∴F∴U∴
77
El pavimento de mosaico
78
En el Taller abordamos el complejo tema de la situación del ser
humano con respecto al conocimiento y para ello nos auxiliamos con
el Mito de la Caverna de Platón: el mundo sensible, que es percibido a
través de los sentidos y el mundo inteligible, el cual sólo podemos
lograr mediante el uso exclusivo de la razón. Esa dualidad, como el
pavimento de mosaico, ratifica el principio de los pares opuestos,
indicándonos, entre otras enseñanzas, que al estar nosotros en
sociedad tenemos la tentación de quedar atrapados en el
conocimiento profano, diverso, de la multiplicidad, propio del mundo
sensible, peligro al que estamos expuestos si no profundizamos en el
conocimiento que la Ciencia Masónica nos ofrece, al nivel de nuestro
grado.
S∴F∴U∴
Bibliografía y notas:
1) Lavagnini, Aldo. Manual del Aprendiz Mason. Editorial Kier. 8va edición 1992 Buenos Aires,
Argentina. Pag 126
2) El Kybalion
3) DRAE. Vigesima segunda edición.Tomo I RAE 2001 pág. 613
82
CÓDIGO MORAL MASÓNICO
84
02. El verdadero culto que se da al Gran Arquitecto consiste
delante de tu conciencia.
06. Estima a los buenos, ama a los débiles, huye de los malos, pero
no odies a nadie.
11. Evita las querellas, prevé los insultos, deja que la razón sea tu
guía.
12. No seas ligero en airarte, porque la ira reposa en el seno del necio.
se te confía. Haz que hasta los diez años te obedezca, hasta los veinte
18. Conténtate de todo, por todo y con todo lo que no puedas mejorar
y antes procura sondear bien los corazones para apreciar sus obras.
20. Se entre los profanos libre sin licencia, grande sin orgullo, humilde
sin bajezas; y entre los hermanos, firme sin ser tenaz, severo sin ser
86
Tras exhortar a los QQ.·.HH.·. a interiorizar estos principios contenidos
87
15. La lectura y conocimiento del Reglamento Interno de la Logia.
16. El calendario de Tenidas de su Logia.
Recomendaciones
S∴F∴U∴
Nota: Texto del Código tomado de la página web de la R.·.L.·. Lautaro N° 197, al
Or.·. de la República de Venezuela. https://lautaro.org.ve/biblioteca/minuto-
masonico/2010-2014/2011-2/codigo-moral-masonico/
∴
88
El Ara
89
Flamígera desnuda, esta última irá debajo de la Biblia con la punta
hacia el Oriente.
El Ara representa la verdad velada por símbolos y alegorías, que todo
Masón debe descubrir por la perseverancia, el estudio y la constancia
en la práctica de todas las virtudes. Alrededor del altar se encuentran
ubicadas, en forma de escuadra, tres pequeñas columnas, que
representan la Sabiduría, Fuerza y Belleza, sobre los cuales se
colocan cirios o estrellas que deberán permanecer encendidos
durante el trabajo de la Logia.
Según Jorge Adoum (Las Llaves del Reino Interno), la forma
triangular responde a ―los tres altares en el tabernáculo, símbolo de la
evolución: Altar de bronce o de sacrificio, altar del incienso y el altar
de oro, cuyo simbolismo es el hombre antiguo, el hombre moderno y
el hombre del futuro o superhombre‖.
Para referirse al Ara, Aldo Lavagnini, en el Manual de Aprendiz
expresa: ―es el símbolo de la elevación de nuestros pensamientos por
medio del cual percibimos la realidad trascendente que se esconde
bajo la apariencia contradictoria y llegamos a conocer la palabra, o
sea la verdad, que es propósito íntimamente benéfico de toda
experiencia, siempre extendida para nuestro progreso y bien, más
verdaderos‖.
Adolfo Terrones Benites y Alfonso León García en su obra “Los 33
Temas del Aprendiz Masón” definen el Ara en los siguientes términos:
―se le considera como representativo de la Eternidad, del Secreto, del
Misterio, de lo Desconocido, de lo Abstracto, y en general de todas las
Fuerzas Ocultas que existen en el Universo, como Arcanos de la
90
Naturaleza; además, en lo material, el Ara es emblemática de la
Tumba, o sea del Sepulcro que recibe al hombre como el sitio propio
para su Descanso Eterno‖.
R. W. Mackey en su Lexicón de Masonería, hace la siguiente
exposición referida al Altar: ―Es el lugar en donde se ofrecían
sacrificios a Dios. Después de la erección del Tabernáculo, los altares
fueron de dos clases: de los sacrificios y del incienso. El altar
masónico puede considerarse como la representación de ambas
formas. De este altar se eleva constantemente el Gran Yo Soy, el
grato incienso del amor, consuelo y verdad fraternales, mientras que
sobre él quedan las indómitas pasiones y los mundanales apetitos de
los hermanos como un apropiado sacrificio al genio de nuestra
Orden‖.
Vista la ilustración que nos ofrecen los autores señalados, podemos
decir que el Ara es el lugar donde efectuamos nuestros juramentos,
como manifestación visible de una energía invisible y trascendente y
en el que hemos aceptado nuestros compromisos internos y hemos
prometido cumplirlos. Está iluminado por las estrellas de la Sabiduría,
la Fuerza y la Belleza.
El Ara se comprende como el centro de gravedad del triángulo
formado por el lugar del V:: M:. y los VVig:., siendo el punto central del
Templo, a partir del cual, se organiza toda la Logia y los trabajos que
en ella se realizan. De allí la ceremonia del encendido de las candelas,
cirios y estrellas.
Recordemos que el Templo Masónico representa una relación espacio
- tiempo. El Templo Masónico es un rectángulo extendido de Oriente a
91
Occidente, es decir en dirección de la Luz. Su anchura es del Norte a
Sur, desde la potencialidad hasta la plenitud, y su altura del Cenit al
Nadir, desde el firmamento hasta el centro de la tierra. Esto quiere
decir que prácticamente no tiene límites, es una representación del
Universo.
Las Columnas, doce de ella, seis en las caras norte y sur sostienen el
firmamento y rodea el Taller. Delimitan y establecen la pertenencia del
lugar. Forman un espacio admirable.
El Templo está rematado con una bóveda por cielo, la cual nos
recuerda que debemos aprender de las estrellas y la infinita distancia.
El Templo nos contiene, del mismo modo que nos contiene el cosmos.
En el Taller desarrollamos la pragmática de la Liturgia. El rito es un
símbolo en acción el cual es develado por cada hermano utilizando las
herramientas que nos suministra la Masonería: el mazo, el cincel, la
regla de 24 pulgadas, la escuadra, compás, plomada, nivel, entre
otras.
Toda la enseñanza iniciática a la que el Masón se entrega sobre la
base de la libertad de pensamiento, porque eres tú, como
microcosmos, quien debe comprender las leyes universales del
cosmos, de la existencia y del existir, se desarrolla teniendo como
centro el Ara, porque allí se representa el centro del Universo, con la
lámpara votiva como eje de la Creación, simbolizando su conexión
con la estrella Polar, y esta a su vez como divisa del G.·.A.·.D.·.U.·.
En el Ara entregamos en holocausto nuestras pasiones,
imperfecciones y errores humanos, para sobre sus cenizas construir
92
el Templo de Virtudes con el cual todo Masón debe contribuir a la
Gran Obra Universal del G.·.A.·.D.·.U.·.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los Signos (SSig∴) Palabras
(PPal∴) y Tocamientos (TToc∴) que nos son conocidos.
S∴F∴U∴
93
Escuadrar la Logia
Para Aldo Lavagnini, en su Manual del Aprendiz, nos dice que ―el
ángulo recto, formado por la Escuadra, es el emblema de la fijeza,
estabilidad y aparente inexorabilidad de las Leyes Físicas que
95
gobiernan el Reino de Occidente o de la Materia. Los dos principios o
lados que concurren a definirlo, se encuentran siempre a la misma
distancia angular de 90 grados, que corresponde a la cuarta parte de
la circunferencia (que, de por sí, representa la Unidad dentro del ciclo
de la continuidad) y el ángulo del cuadrado. El ángulo recto, es
también el símbolo de la lucha, de los contrastes y de las oposiciones
que reinan en el mundo sensible, de todas las desarmonías exteriores,
que deben enfrentarse y resolverse dentro de la Armonía que viene
del reconocimiento de la unidad interior‖.
Escuadrar la Logia
97
la sociedad en que se desenvuelve y que aspira las mas autenticas
transformaciones sociales y la exaltación de los ideales.
S∴F∴U∴
98
Blancanieves y los siete enanos
100
Dormilon, como bien su nombre lo indica, representa la pereza con
un permanente desgano por obrar en el trabajo o por responder a los
bienes espirituales y hacer el bien a los demás.
Con estos aliados Blancanieves debe recuperar el reino e imponer un
gobierno de paz, armonía y justicia para todos los súbditos. ¡Parece
una contradicción!
Blancanieves procede con su ejemplo, proyectando el templo de
virtudes entre sus colaboradores, logrando cambios sustanciales en
cada uno de ellos. Al soberbio Doc, le inculcó la humildad, haciéndole
reconocer que en nuestra existencia solamente tenemos nada. A la
avaricia de Estornudo, le enseñó la generosidad, haciéndole sentir en
su espíritu el bien que produce dar sin esperar nada a cambio. A Tonti,
el lujurioso, le mostró los beneficios de dominar los apetitos
sexuales. Gruñón, el iracundo, le señaló el camino de la paciencia y
el arte de recibir en paz y serenidad las adversidades. Feliz, la
templanza para controlar la gula, la moderación en el comer, en el
beber y en el accionar. Al envidioso Tímido, le muestra la caridad que
genera paz espiritual que conquista cuando le deseas y le haces el
bien al prójimo. Y finalmente al perezoso Dormilón, le modela la
diligencia con prontitud de ánimo para hacer el bien, sin mirar a
quien.
Con su ejemplo Blancanieves levanta y transforma un ejército de
extraviados por la incongruencia de algunas normas sociales, en un
conjunto donde laboran todos a una, en función del bien común. La
conclusión es que tiene éxito en su cometido.
101
La enseñanza de esta historia más que centenaria, es que en la lucha
por conseguir objetivos debemos contar con todas aquellas personas
de buenas costumbres, que aunque se encuentren perdidos por cierto
males sociales, son útiles para alcanzar metas en beneficio de la
comunidad. Es un ejemplo de buen pragmatismo.
El liderazgo en todos los órdenes de la vida debe dar el ejemplo de
moral, tener ideas claras, exponerlas, organizarse y saberse rodear de
personas que prometan y desechar aquellos irrecuperables, porque
esos son a los que hay que derrotar.
Blancanieves luchó ella misma a lo interno para construir en su ser, en
su conciencia, el faro de luz que luego sería guía para recuperar
recursos humanos y con ellos, derrotar a los irrecuperables.
Los irrecuperables se simbolizan en la Masonería con unas piedras
deformes, sin consistencia, que se colocan fuera del Templo como
ejemplo de que en la Orden no entra todo el mundo. Ahora bien, toda
piedra susceptible de ser labrada, auto esculpida, con el objetivo claro,
diáfano, de construir un templo individual de virtudes, como el de
Blanca Nieves, puede tocar las puertas del Templo que se le abrirán,
pedir sabiduría y se le mostrará el camino y buscar la Luz y encontrar
su Maestro Interno.
La Masonería enseña con símbolos y alegorías. El mundo profano
está plagado de enseñanzas que los ojos carnales no ven porque se
encuentran subsumido en lo múltiple y variable de las tinieblas de
Occidente, mientras que el Iniciado, quien ha emprendido su camino
hacia el Oriente, que es el simbolismo del origen de la Luz, lo sutil de
la Sabiduría, representado por el UNO, como figura excelsa que todo
102
lo contiene y del cual deriva lo múltiple de donde parte el DOS y así
sucesivamente. Blanca Nieves es solamente un ejemplo de la belleza
de la sabiduría que se enseñorea ante nuestros ojos y que sólo los
Iniciados la percibimos y la interiorizamos.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los Signos (SSig∴) Palabras
(PPal∴) y Tocamientos (TToc∴) que nos son conocidos.
S∴F∴U∴
103
El arquetipo de la sabiduría
105
conocimientos, incluso va más allá de la aplicación práctica de los
mismos.
La sabiduría ha sido tratada desde la Antigüedad. El mejor ejemplo lo
tenemos en la figura de la diosa griega de la paz, la civilización,
estrategia, de las ciencias, de la justicia, de la habilidad y de la
sabiduría, Palas Atenea. En la mitología romana Minerva es la diosa
de la sabiduría, las artes, la estrategia militar, además de ser la
protectora de Roma y la patrona de los artesanos. Se corresponde con
Atenea en la mitología griega. Pero en el mundo real el rey Salomón,
el tercer y último monarca del reino unido de Israel, es considerado
como un arquetipo de sabiduría.
La palabra sapiencia se utiliza como sinónimo de sabiduría. Sapiencia
deriva del latín, de la suma de dos partes diferenciadas: ―sapiens‖, que
significa ―saber‖, y el sufijo ―-ia‖, que indica ―cualidad‖. Generalmente
se considera que se obtiene sapiencia mediante la experiencia,
aunque no es descartable adquirirla mediante el estudio y la
formación. Platón consideraba que la adquisición del conocimiento
consistía en recordar lo que el alma sabía cuando habitaba en el
mundo inteligible de las ―ideas‖, antes de descender al mundo sensible
y quedar encerrada en el cuerpo. Y la belleza era la ―idea‖ más
excelsa, que se identificaba con el ―Bien‖ y la ―Verdad‖, no la realidad,
porque realmente el Bien y la Verdad, no pueden ser grotescos. En las
tradiciones relacionadas con la Leyenda del Santo Grial, el objeto
precioso y difícil de alcanzar es la sabiduría.
El helenismo significó una yuxtaposición de culturas que ejercieron
una clara influencia tanto en la filosofía hebrea en general, como en la
106
cábala en particular. De allí que Aristóbulo, a mediados del siglo II d.
C., pretende demostrar que tanto Pitágoras como Platón, tenían
conocimientos de los libros del Antiguo Testamento. Lo cierto es que
autores como Abbagnano señalan que en el libro bíblico de la
Sabiduría, escrito probablemente en el siglo I a. C., hay clara
reminiscencia tanto del platonismo como del pitagorismo(1).
La cábala, una expresión de la corriente neoplatónica desarrollada en
el marco de la filosofía hebrea, coloca a la sabiduría como segunda
séfira o esfera del Árbol de la Vida, el cual se compone de diez
emanaciones espirituales por parte del Creador, a través de las cuales
dio origen a todo lo existente. Así la Sabiduría procede directamente
del número Uno, la Corona o la Providencia equilibrante y deriva hacia
el tres, la Inteligencia siempre Activa. No se puede acceder al Uno, sin
pasar y obtener la cualidad de la Sabiduría.
Continuando en este breve repaso por algunas de las antiguas
corrientes del pensamiento, los gnósticos la relacionaron con ―Sofía‖.
Para este conjunto de corrientes sincréticas filosófico-religiosas que
llegaron a mimetizarse con el cristianismo en los tres primeros siglos
de nuestra era, convirtiéndose finalmente en un pensamiento
declarado herético por la institucionalidad oficial católica, ―Sofía‖ es un
conocimiento liberador que no es la opinión, la doxa de la que nos
habla Platón. La opinión se compone de eikasía, o el desarrollo de la
imaginación en sentido de fantasía y la pistis, o sea, la fe. Hoy en el
mundo de las comunicaciones avasallantes y complejas, se juega
normalmente con la opinión o doxa y la mayoría, no todos por
supuesto, de los líderes sociales, sean políticos, periodistas,
107
gremiales, religiosos, no salen de los límites de la opinión, bien por
ignorancia, flojera o manipulación, utilizando herramientas retoricas
como las falacias, entre otras. Platón oponía la episteme a la doxa,
que para el griego era intentar alcanzar el conocimiento del mundo de
las ideas, mientras que para nosotros, en un plano más cotidiano, es
buscar saber por medio de la gnosis.
Conocimiento no es fe ni viceversa. La fe es una Virtud teologal y
como tal es de gran importancia en el campo de la religión. No es
conocimiento porque la comprensión del Creador está fuera del
alcance de nuestro ser y solamente se podría conseguir en un estado
de misticismo que propone la unión del alma con Dios por diversos
medios, como el ascetismo, devoción, amor, contemplación, entre
otros.
Racionalmente es difícil definir el arquetipo de la sabiduría, siendo su
naturaleza fluida, cambiante, como la inmensa mayoría de lo existente
en este mundo manifestado. Herman Hesse en su Siddharta escribió:
―el que realmente quiere encontrar, y por ello busca, no puede aceptar
ninguna doctrina… el saber es comunicable, pero la sabiduría no. Se
la puede vivir, pero nunca explicar ni enseñar‖.(2)
Entonces, después de lo dicho cabe preguntarnos: ¿cómo percibimos
la sabiduría siendo tan elusiva? Si. No es fácil por ser exclusivamente
individual. En el transcurrir de nuestra vida, cuando colocamos cada
día una nueva piedra al edificio existencial que levantamos, nos
encontramos con una construcción ordenada y armónica o
contrariamente. Si satisface nuestra alma y enriquece nuestro espíritu
sobre la base de la virtud, porque se basa no en la opinión vaga y
108
charlatana del acomodo social momentáneo, sino en la búsqueda
dentro de sí mismo, en el yo interior, allí donde no hay público ni
aplausos, esa sensación de encontrarse con el grado más alto de
conocimiento, que aquel que te lleva al Verbo Divino, más allá de un
acto de fe, sino con la consciencia plena de su existencia sobre la
base de comprender la realidad del Cosmos y del Microcosmos,
entonces podremos estar en el camino de la sabiduría que nos
ilumina.
Un buen ejemplo es la sucesión de arquetipos femeninos que Jung
llamó Eva, Helena, María y Sofía, donde Eva sería la mujer de vida
absolutamente corporal, dedicada puramente a la satisfacción de los
apetitos. Helena sería más espiritual que Eva y en María culminaría la
espiritualidad pura. Para Jung, el arquetipo femenino más elevado no
es María, sino Sofía, ya que ésta ha recuperado el cuerpo que María,
con su énfasis en lo espiritual, ha perdido, logrando reunir lo
disperso.(3)
Nosotros, seres humanos, difícilmente llegamos al grado de
espiritualidad de María. Pero si podemos llegar a la sabiduría que
representa Sofía, aplicándose el adagio ―menos es más‖, porque en
nuestro plano existencial Sofía conoce los mármoles negros y blancos,
las luces y las sombras, el Cosmos y el Microcosmos y como tal,
simboliza la Sabiduría que de alguna forma requiere comprender lo
variado de lo existentes en el Cosmos y en el interior de nuestro ser.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los Signos (SSig∴) Palabras
(PPal∴) y Tocamientos (TToc∴) que nos son conocidos.
109
S∴F∴U∴
Notas y bibliografía.
(1) Abbagnano, Nicolás. Historia de la Filosofía. Tomo I. pág. 175
(2) Diccionario Akal de Francmasonería. Pag 61
(3) Carl Gustav Jung. Obra completa. Volumen 9/I. Los arquetipos y lo inconsciente colectivo.
Cornejo, José Norberto. Reflexiones sobre el esoterismo del Rito Escocés Antiguo y Aceptado
110
Entre la Simbología y la Ética
Nos dice el Q.·. H.·. García: ―Sin lugar a dudas toda la enseñanza
masónica está basada en el valor del trabajo. El arquetipo principal
que nos lleva de la mano a entender la ética de todo masón, es la del
hombre que se talla a sí mismo. El trabajo entendido como un fin en sí,
para la obtención de la excelencia y no sólo del conocimiento.
Si entendemos el trabajo como un medio, enseguida estaremos
relacionando el esfuerzo con sacrificio, y no como el compromiso que
todo masón y especialmente el maestro masón debe tener cuando
trabaja masonería.
111
Trabajar masonería, no debe ser una actividad complementaria en la
vida del iniciado, entendiendo el trabajar masonería como el
comportamiento cotidiano de todo masón.
La ética que conduce a todo hermano masón, debe estar
fundamentada en los principios intrínsecos de la masonería. Como lo
son: El respeto a la moral y a las buenas costumbres, la honestidad, y
la práctica de todas estas virtudes con sus hermanos y toda su
comunidad.
James Anderson (1678-1739) quien fuera el autor del llamado: Libro
de las Constituciones, o mejor conocida como: La Constitución de
Anderson, que fue concluido en 1723 y que reunió las reglas de la
masonería que hasta entonces existían, y que fue reeditado en 1738,
1756, 1767 y 1784. En el Párrafo Primero de las Constitución de 1723,
realiza una clara descripción del comportamiento ético de todo masón:
“Un Masón está obligado, por su condición, (a) a obedecer la ley
moral, y si comprende el Arte, nunca se convertirá en un estúpido
ateo, ni en un libertino irreligioso. Aún cuando en los tiempos
antiguos los masones estaban obligados en cada país a practicar la
religión que se observaba en ese país, hoy se ha creído más
oportuno no imponerle otra religión que (b) aquella en que todos
los hombres están de acuerdo, y dejarles completa (c) libertad
respecto a sus opiniones personales; es decir, (d) ser hombres
buenos y leales, (e) es decir, hombres de honor y de probidad,
cualquiera que sea la diferencia de sus Denominaciones o de sus
Confesiones. De este modo la Masonería se convertirá en un
centro de unidad y es el medio de establecer relaciones amistosas
112
entre gentes que, fuera de ella, hubieran permanecido separados
entre sí.”
En este párrafo de destaca claramente la intención de Anderson por
exaltar valores como:
a) Respeto a las leyes de convivencia social.
b) Respeto a la libertad de pensamiento y opinión
c) Tolerancia
d) Honorabilidad
e) Responsabilidad
Todos estos valores éticos se encuentran en la simbología del hombre
que se talla a sí mismo. Imagen que contiene multiplicidad de
interpretaciones, siempre dependientes no solo del nivel de estudio
alcanzado en los augustos misterios masónicos, sino del trabajo que
cada uno ha hecho para alcanzar un grado de madurez masónica, así
como el de madurez personal, que definitivamente revelará ante sus
ojos, el misterio que encierra esta imagen, abstracta e incomprensible
para una mente no entrenada; que si bien no necesariamente
pertenece a la simbología oficial, es perfecta para crear una imagen
mental en aprendices y compañeros y por supuesto en maestro
masones, que ayude a reflexionar en lo que debe ser, no solo el
trabajo de esculpirse, sino cuantas dimensiones de nuestro ser son
posibles de ser deslastradas.
Al desarmar la imagen que hemos propuesto, encontramos en primer
lugar, al humano (El cuerpo), multidimensional, complejo, único. Si
intentamos identificar a este magnífico ser, debemos comenzar por su
corporeidad, es decir su lugar físico, de delicado equilibrio, el cual
113
debe atender conscientemente, so pena de dañar ese preciado
vehículo; repositorio para algunos de la mente, sitio no determinado
aún, pero al cual se le identifica como la genuina chispa de dios en el
hombre, capaz de crear universos y destruirlos con un solo trillar de
dedos.
El mazo (El alma): símbolo de la fuerza o del poder temporal, que mal
utilizado quiebra o daña sin mucho esfuerzo, hasta el más duro de los
materiales.
El cincel (El espíritu): símbolo de la voluntad, que sin dirección y sin
sapiencia deformará hasta la intención más valiosa, desfigurando una
preciosa obra de arte, convirtiéndola en vulgar parapeto.
Esta visión holística del masón y su entorno, debe ser la guía para el
estudio del comportamiento ético masónico.
Muchos son los arquetipos que podemos utilizar para crear un análisis
de la enseñanza masónica y su ética intrínseca, que nos lleve a la
conclusión que intentamos determinar desde el principio de esta
plancha: La simbología masónica, es el reflejo de la ética masónica, la
cual está basada en el trabajo.
Por sí mismos, los símbolos y los signos utilizados en los ritos y
rituales; son una amplísima cantera de conocimientos, que deben ser
aprovechados en las diferentes cámaras; no solamente para el análisis
del significado masónico, sino para concientizar que la vida masónica
no se realiza solamente dentro de las logias; que el conocimiento
adquirido debe ser practicado día a día, y que no se estudia para
saber solamente, se aprende para llevar a cabo. O dicho en otras
114
palabras: ―Las enseñanzas masónicas no solo se deben aprender,
deben ser aprehendidas.‖
Los masones, a lo largo de la historia hemos sido garantes de tradición
y conocimiento, ejemplos de ética; ciudadanos ejemplares que se han
convertido en modelo para generaciones. Esto ha sido posible por la
puesta en práctica por parte de estos hermanos, de los principios
éticos masónicos en su vida cotidiana.
El trabajo de los masones operativos, que aún vive en las hermosas
construcciones, es el ejemplo más fiel de cómo lo físico y lo espiritual,
se pueden unir en una armonía que cause asombro por su belleza, y
respeto por su significado. Por su parte, los masones especulativos,
debemos buscar esa armonía en nosotros mismos, y tratar de
construirla alrededor nuestro; enseñando con el ejemplo y estando
conscientes de que el secreto masónico no reside en los símbolos de
la masonería; reside en el valor profundamente ético-masónico que
cada hermano debe darles, para luego aplicarlos en sí mismo y en su
comunidad.‖
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los Signos (SSig∴) Palabras
(PPal∴) y Tocamientos (TToc∴) que nos son conocidos.
S∴F∴U∴
115
Gran Arquitecto del Universo
116
embargo, no acepta otros elementos característicos de las religiones
en su relación con la divinidad, como la existencia de revelaciones o la
práctica de cultos… los deístas creen en Dios pero no en las prácticas
y los dogmas religiosos. El deísmo reconoce que Dios ha creado el
universo aunque no cree en su intervención posterior para orquestar
su destino.‖(2)
Los deístas creen que las manifestaciones de Dios se realizan a través
de leyes naturales y estas pueden estudiarse por medio de la ciencia.
No creen en supersticiones, y sí que el individuo se puede acercar al
Creador mediante la reflexión. En general no creen en milagros ni en
la Santísima Trinidad.
Un pensamiento racional y una ética vinculada a su propia conciencia
orientan la conducta de los deístas, de allí que no acepta a ninguna
jerarquía religiosa que actúa como mensajero de Dios y es portador de
sus mensajes.
El origen del deísmo se remonta a la Grecia Antigua, pero su
pensamiento se desarrolla con fuerza en los tiempos de la Ilustración.
Algunos investigadores consideran deístas a personajes como Platón,
Aristóteles, Immanuel Kant, Locke, Thomas Edison, Voltaire y el poeta
norteamericano Walt Whitman. Los deístas coinciden, además, en
oponer la religión natural (o racional) a las religiones históricas.
El teísmo es la doctrina que cree en Dios y este Ser Supremo crea el
universo y se involucra en su conservación. Del griego "Theós" (dios),
el término se aplicó a cualquier doctrina que defendiera simplemente
la existencia de dios, independientemente de que se le dotase o no de
determinados atributos; pero a finales del siglo XVII el término teísmo
117
fue adquiriendo un uso más restringido para referirse a cualquier
doctrina filosófica o religiosa que afirma la existencia de un dios
personal, trascendente, creador y providencial, en oposición al término
"deísmo", que se aplicó a las doctrinas que defendían la existencia de
dios como un principio de la realidad del que no es posible alcanzar
ningún otro conocimiento o determinación.
La idea de teísmo surgió en la Antigua Grecia con referencia a la
creencia en las divinidades que formaban parte del Olimpo. Con el
tiempo comenzaron a reconocerse diferentes teísmos de acuerdo a las
cualidades atribuidas a los dioses. El monoteísmo, por ejemplo,
sostiene la existencia de un único dios. El cristianismo, el judaísmo y
el islam son religiones monoteístas. El politeísmo, en cambio, se basa
en la creencia en varios dioses, como ocurre en el hinduismo. En
todos estos teísmos, se acepta que el dios o los dioses han creado el
universo y se siguen involucrando en él, aunque trascendiéndolo.(3)
De lo anterior vamos a hacer referencia al henoteísmo o monolatría
(del griego: heis, henos "un"; y theos "dios") es la creencia religiosa
según la cual se reconoce la existencia de varios dioses, pero sólo uno
de ellos es suficientemente digno de adoración por parte del fiel.(4)
Algunas personas practican una especie de henoteísmo al profesar
especial adoración a santos, ángeles, arcángeles y otras potestades,
siempre reconociendo la condición subalterna de los mismos frente a
Dios.
El Panteísmo es el sistema que identifica a Dios con el mundo: El
filósofo masón Baruch Spinoza (1632-1677) defendió el panteísmo.
118
El término está compuesto de las palabras griegas "pan", todo, y
"theós", dios. En general, entendemos por panteísmo la identificación
del mundo con dios, o de dios con el mundo, como se prefiera, de tal
modo que forman una única realidad, no aceptando, pues, ninguna
realidad trascendente ni personal, dando lugar a una interpretación
monista de la realidad.
La filosofía del Q:.H:. Spinoza es un ejemplo de tal interpretación. Si
se considera que dios es la verdadera realidad, y el mundo algo que
emana de dios, se habla de un panteísmo acosmista o sea, que niega
la existencia del mundo sensible. Si, por el contrario, se considera que
el mundo es la verdadera realidad, y que dios no es sino la
autoconciencia del mundo, por ejemplo, hablamos de un panteísmo
ateo. De cada una de las dos versiones hay, por lo demás, distintas
interpretaciones.
Baruch Spinoza fue un filósofo holandés, de origen lusitano judío,
cuyos ascendientes huyeron de la península ibérica por las
persecuciones religiosas. Un punto importante de su trabajo fue el
Orden Geométrico del Universo. Acreditada es su expresión: ―casi
todos quieren hacer pasar sus invenciones por “palabra de Dios” y que
no pretenden otra cosa que, so pretexto de religión, forzar a los demás
a que piensen como ellos‖.
Spinoza se inició en la Masonería en una Logia de Ámsterdam, donde
se enseñaba la filosofía de Francisco Bacón y de otros notables
filósofos francmasónicos.
En general, son muchos los filósofos que han abordado el tema del
Creador y de la Creación. Han desarrollado tesis metafísicas,
119
comprendida esta como la parte de la filosofía que trata del ser, de sus
principios, de sus propiedades y de sus causas primeras; teológicas,
como la ciencia que trata de Dios y del conocimiento que el ser
humano tiene sobre él; ontológicas, como parte de la metafísica que
estudia el ser en general y sus propiedades. Los masones, bajo
nuestra premisa de ser hombres libres, de libre pensamiento,
estudiamos las diferentes posiciones, asumimos lo que nuestro
albedrio considere pertinente para la construcción de nuestro Templo
Interior de Virtudes y contribuir con la regeneración del mundo sobre la
base de la Gran Obra de armonía, paz y progreso que provee la
libertad, la igualdad y la fraternidad.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los Signos (SSig∴) Palabras
(PPal∴) y Tocamientos (TToc∴) que nos son conocidos.
S∴F∴U∴
120
El Ser
"Los enemigos más encarnizados de nuestras ideas, son aquellos que no las
entienden."
Albert Einstein
122
que se manifiesta en el nous, la mente, así que el ser y la mente no se
da el uno sin el otro.
Platón, Aristóteles, los árabes, la escolástica, Hegel, Kant, los
existencialistas y muchos más tratan el tema del ser y lo definen, lo
clasifican por categorías, lo ubican dentro o fuera del ser humano,
aplican criterios de espacio y temporalidad.(1) Pero toda enunciación
siempre emana de la mente y es por ello que nos detuvimos
brevemente en el párrafo anterior de la plancha, porque para
comprender postulados como ―conócete a ti mismo‖, es importante
tener una noción personal y racional de lo que el ser es. Recordemos
el primer principio de las leyes cósmicas: el Principio de Mentalismo:
"EL TODO es Mente; el Universo es mental".
Si prestamos atención en nuestras conversaciones diarias
observamos que hablamos del reino animal, mineral y vegetal. No
hablamos del ―ser animal‖, ―ser vegetal‖ o ―ser mineral‖. La condición
de ―Ser‖, solamente se la otorgamos al Ser Superior y al ser humano.
Lo anterior nos permite reflexionar sobre la chispa divina que
conservamos en nuestro espíritu y que agigantamos o disminuimos
como enano insignificante según construyamos templos a la virtud y
cavemos calabozos a los vicios o quedemos a merced de la maldad,
vileza o desenfreno en nuestro devenir en la Logia de San Juan.
Recordemos las consideraciones que sobre el deísmo burilamos en la
plancha sobre el G.·.A.·.D.·.U.·., y desciframos en anterior Tenida.
Veamos: ―Los deístas creen que las manifestaciones de Dios se
realizan a través de leyes naturales y estas pueden estudiarse por
medio de la ciencia. No creen en supersticiones, y si que el individuo
123
se puede acercar al Creador mediante la reflexión… Un pensamiento
racional y una ética vinculada a su propia conciencia orientan la
conducta de los deístas…‖(2) Un pensamiento racional en cuanto al ser
se encuentra relacionado con la mente, por medio del acto de pensar,
y el pensar, que también es objeto de discusiones científicas y
filosóficas, tiene unas características generalmente aceptadas: es una
actividad o proceso psíquico que ocurre en el tiempo, cuyos elementos
son un sujeto pensante, un pensamiento que aprehende, y la situación
objetiva a la cual se refiere(3).
Como conclusión de esta plancha que pretende motivar el estudio,
vamos a traer a colación como el ser humano ha planteado la
Creación. Las religiones politeístas nos dibujan a un grupo de dioses
que tienen la responsabilidad de crear los cielos, océanos, la tierra, el
inframundo, pero sobre ellos hay un dios superior, Zeus en el mundo
griego, Júpiter en el romano. Las religiones del libro: hebrea, cristiana
e islámica, plantean en el Génesis que ―en el principio Dios creó los
cielos y la tierra‖, mientras que pensadores materialistas plantean la
teoría del Big Bang, que es una hipótesis que dice que el Universo
nació hace aproximadamente 14 mil millones años de un único punto
que estaba contenido en el espacio, y que a partir de ahí se expande
continuamente.
Independientemente de la idea que se tenga, siempre nos
preguntamos que hay antes de la Creación y como se da ese primer
momento, ese primer impulso Creador y, finalmente, cuanto de ello es
inmanente al ser humano y cuanto es trascendente. Y el tema
124
adquiere una supra complejidad cuando abordamos el tema de la vida,
esencial para comprender la existencia y el existir.
Para ingresar a la Orden solamente se exige ser hombre de libre
pensamiento, de buenas costumbres, creer en un Ser Supremo y en la
inmortalidad del alma. Hoy en algunos países, existen orientes que
admiten el ateísmo, reduciendo a las dos primeras condiciones las
exigencias requeridas para ser masón. En una próxima plancha
abordaremos el tema del ateísmo. Pero en esta, por los momentos,
diremos bajo el contexto de afirmaciones que, aun del no ser, puede
afirmarse que es. Esta positividad nació de los griegos y la deducimos
del propio Parménides quien con su sentencia: ―Ser es, el no ser no
es‖, marcó el pensamiento universal y dejó para la posteridad uno de
los temas de investigación más rico de la filosofía y que nosotros, en
nuestras Tenidas, los tenemos siempre presente, simbólicamente,
tanto en el ritual de inicio de los trabajos, del encendido de las
estrellas y candelas, en toda la ceremonia en todos los grados de la
masonería. Recordemos que el rito es un símbolo en acción y como
tal, tiene un significado y un significante.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los Signos (SSig∴) Palabras
(PPal∴) y Tocamientos (TToc∴) que nos son conocidos.
S∴F∴U∴
∴
125
Ateísmo
¿Se puede creer en Dios y ser ateo al mismo tiempo? Esta pregunta o
razonamiento en absoluto es una contradicción insoluble. En esta
plancha abordaremos algunos aspectos relacionados con el ateísmo,
colocaremos sobre la mesa posturas controversiales las que convocan
a la investigación y al debate creador. Como institución nos colocamos
al lado de los landmarks, lo que no es óbice que siendo la Masonería
una escuela de filosofar integrada por individuos de libre pensamiento,
no escudriñemos en el cosmos en búsqueda del conocimiento que nos
aquilata como seres humano y nos abre el sendero hacia la Luz.
Según el Diccionario de la Real Academia Española (DRAE), ateo es
quien niega la existencia de cualquier dios. Francis Bacón (1561-1626)
padre del empirismo filosófico y científico, en su obra La Nueva
Atlántida, afirma que la paz y el florecimiento económico hacen
aumentar el ateísmo. Este testimonio enfocado desde una perspectiva
sociológica, pone de bulto lo complejo del tema.
El ateísmo no es un concepto univoco. Tienes significados diferentes.
Los filósofos lo han trabajado y han construido teorías y clasificaciones
126
de gran densidad. En esta plancha, utilizaremos la del intelectual
español Gustavo Bueno (1924-2016), quien desarrolló un sistema que
llamó materialismo filosófico, que en resumen afirma que todo es
material y que no existe un mundo inteligible. Luego, este investigador
realizó una clasificación del ateísmo que para nuestra plancha resulta
útil por ser muy explícita.(1) Podemos hablar del ateísmo ontológico,
que tiene un alcance ontológico general y un ateísmo óntico, que no
se refiere a entidades generales, sino particulares. El ateísmo es la
negación de dios, por tanto según el dios que se niega, así también es
el ateísmo, nos dice Gustavo Bueno. Veremos entonces que el
ateísmo ontológico es la negación del dios único, omnipotente,
omnisciente, creador del Universo en las religiones monoteístas. Este
ateísmo es distinto al óntico, que niega dioses específicos, como los
dioses del panteón olímpico griego, como Atenea, Venus, Zeus, entre
otros o del romano, por ejemplo Júpiter. Se le atribuye a Sócrates que
era un ateo porque solamente creía en un solo dios, ya que no
compartía la creencia en la extensa gama de dioses propios de la
mitología griega. Era ateo para aquellos quienes creían en esos dioses
olímpicos y organizaban sus ideas religiosas en torno a esas
deidades. Se encuentra testimonios de la época cristiana primitiva de
que los griegos consideraban ateos a los propagadores del
cristianismo, porque estos no creían en Zeus y en los dioses
helénicos. De lo anterior deducimos que la diferencia entre el ateísmo
ontológico del óntico no es solamente un ejercicio intelectual,
académico, sino que tiene una presencia real en el pasado y el
presente. Este contraste es fundamental para hablar de ateísmo.
127
Otra diferencia es la del ateísmo total y parcial. El total no solamente
niega a dios, sino sus cualidades: la omnipotencia, omnipresencia y la
omnisciencia. Quizás puede creer en una entidad superior, pero no es
ni omnipotente, omnipresente ni omnisciente. Para Aristóteles dios no
era omnipotente ni omnisciente, porque no conocía el mundo ni
intervenía en él, simplemente movió al mundo como primer motor o
causa primera, sin haberlo creado ni conocerlo. El ateísmo parcial
admite a dios, incluso a un dios creador, pero le niega, por ejemplo, la
omnipotencia, estas tesis se han desarrollado frente a hechos sociales
o naturales que generan incomprensión. Un sector de la teología judía
puso en duda la omnipotencia de Dios frente al Holocausto judío en la
época nazi. Esta es una forma de ateísmo parcial.
Otra diferencia que se ha trabajado por investigadores es la del
ateísmo existencial y del esencial. El existencial niega la existencia de
Dios, pero no la idea de Dios. Este ateísmo es el considerado
generalmente por el común de las personas. El ateísmo esencial no
niega la existencia de Dios, sino su esencia, hasta la propia idea de
Dios. Esto trae aparejado por la vía de consecuencias que Dios no
puede ser considerado existente sin considerar su esencia, o sea,
Dios no podría ser concebido si no es pensado de un modo
consistente, por tanto, quien niega a Dios la esencia, también niega su
existencia y por ende, se niega también la idea de Dios como idea.
Cuando se demuestra que la idea de Dios es posible, entonces por
argumentos filosóficos, se prueba la existencia de Dios. El ateísmo
esencial niega a priori la existencia de Dios.
128
De lo anterior queda resuelta la pregunta burilada en el primer párrafo
¿Se puede creer en Dios y ser ateo al mismo tiempo? Ahora bien,
antes de abordar un punto álgido que confronta a la masonería
moderna, precisemos brevemente y sin entrar en profundidades, la
noción de agnosticismo, que el DRAE define como la ―actitud filosófica
que declara inaccesible al entendimiento humano todo conocimiento
de lo divino y de lo que trasciende la experiencia‖. O sea, es una
posición distante, no intermedia, entre el teísmo y el ateísmo.
Vivimos tiempos de desacralización de aquellos símbolos que marcan
la identidad de personas y grupos humanos. Hay tendencias de
convertir mucho de lo sagrado en obsceno y viceversa. A esa
dinámica se le suma la velocidad con lo que se comunican las
personas gracias a la Internet. Se da frecuentemente el caso de que la
opinión cargada de sesgos, supera el análisis detenido y profundo, por
lo que la banalidad impera sobre lo sustancial. Quizás sea esta la
causa por lo que a la ortodoxia masónica le aterra el sólo pensar que
un hermano masón pueda ser ateo y particularmente ateo ontológico.
Ya existen orientes, como en Francia, donde se ha desechado la
exigencia en la creencia en un Ser Supremo. Incluso han sustituido el
Volumen del Libro Sagrado por un cuaderno cuyas páginas se
encuentran en blanco, sin nada escrito y el significado es simple: el
hombre, mediante la razón, debe investigar en esta sociedad
postmoderna la creencia en la certidumbre y abordar los temas que
afectan al ser humano con una nueva óptica: ¿cuáles son los
problemas que atentan contra la transformación de la tierra como un
lugar paradisiaco? Pues el dogmatismo, la ignorancia, el egoísmo y
129
muchos otros generadores de las guerras y el hambre, los cuales
impiden el avance humano frente a las enfermedades. Las injusticias y
otras calamidades que oscurecen este planeta que día a día recibe la
iluminación solar, pero cuya energía simbólica es mal o
deficientemente utilizada.
Se estima que hace dos mil quinientos años a. C. nace el budismo
como idea. El budismo es una «doctrina filosófica y espiritual» no
teísta. Buda, al igual que muchos científicos modernos, creía que las
ideas religiosas y especialmente la idea de dios, tiene sus orígenes en
el miedo. La doctrina plantea que en la medida en que nuestro
conocimiento del mundo sea más completo, podremos entender las
causas de fenómenos inexplicables, los que en la antigüedad y aun
hoy, muchas personas descifran como maldiciones o fenómenos
sobrenaturales. A esta idea se acerca el filósofo y masón Baruch
Spinoza (1632-1677), para quien existe una coincidencia entre la
Naturaleza y Dios. Lo que se considera sobrenatural es por ignorancia
de ―las leyes universales de la Naturaleza (que) son únicamente
decretos de Dios, que nacen de la necesidad y perfección de la
Naturaleza en Dios‖. De lo anterior se deduce, claramente, que no
puede existir una suspensión de las leyes de la Naturaleza o una
corrección de las mismas, ya que significaría que Dios no hubiese
sabido créalas ordenadas y perfectas, para hacerlas servir a sus
designios.(2)
Otro enfoque es el que nos presentan los científicos Stephen Hawking
y Leonard Mlodinow, en su libro ―El Gran Diseño‖ (2010), quienes
aseguran que la física moderna descarta a Dios como creador del
130
Universo, tal como en el pasado lo hizo el darwinismo, que echó por
tierra las ideas de Dios como creador de las especies. El gran tema
que nos ataja es como surge la vida, reto a los que aun la ciencia no
ha podido darnos un respuesta convincente.
A lo interno de la Masonería el debate entre ortodoxos y heterodoxos
se centra, entre otros puntos, en que no es necesario creer en un Ser
Supremo para levantar templos a la virtud y cavar calabozos a los
vicios. Es una discusión que aún no llega con fuerza a
Hispanoamérica, pero es cuestión de tiempo que se plantee, por lo
universal de la discusión al punto que, hasta en iglesias de corte
protestante en países nórdicos, se debate sobre el alcance de la
divinidad.
En este siglo muchos no ven el ser ateo como un ser anti espiritual e
incluso en no creer en la vida tras la muerte. Nada de esto es nuevo.
Si nos remontamos a la Antigua Grecia encontramos las raíces de un
pensamiento materialista y espiritual. En Oriente el budismo no es el
único ejemplo. Así que el tema, a pesar de ser añejo, no está fuera de
época. Es inmanente al ser humano y la Masonería, como escuela
para filosofar, en los viajes del masón, no debe dejarlo fuera de
agenda y tratarlo con la seriedad y profundidad que merece.
Nos despedimos con un T∴A∴F∴ y con los Signos (SSig∴) Palabras
(PPal∴) y Tocamientos (TToc∴) que nos son conocidos.
S∴F∴U∴
∴
131
Libre pensamiento y libre albedrio
Kant coincide en buena parte con el Q:.H:. Spinoza cuando señala que
el yo empírico no es libre, pues está condicionado por la causalidad
natural, pero también está el yo puro, determinado solamente por las
leyes de la libertad: el hombre, como persona racional, nos dice Kant,
pertenece al mundo de la libertad, que es el mundo del conocimiento
moral, del deber ser, el hombre, como persona moral, es libre y su
libertad es un postulado de la razón práctica.(3) Para Kant al habla de
134
razón práctica es porque al actuar siempre debemos obedecer a la ley
de la razón, el deber, y no movidos por intereses personales o para
obtener algún beneficio subalterno.
135
ya que, siendo imposible por los condicionantes materiales y sociales
que estabulan nuestra vida en este plano existencial, encontramos
nuestra fuerza que rompe las barreras que nos conducen como seres
sin capacidad clara de discernimiento por un sendero determinado que
llega a transformarse en monótono, por estar predefinido.
S∴F∴U∴
∴ ∴
∴∴∴
137
Laicismo y Laicidad
138
Como bien apunta el Q:.H:. Guillermo Chávez en su plancha:
―Laicismo, Esencia Vital de la Masonería‖, ―la historia ha certificado a
la Institución Masónica como depositaria del Laicismo: el paso del
tiempo registra un sinnúmero de intervenciones definitivas y decisivas
en favor de la libertad, la autonomía y la independencia del hombre, de
la Sociedad y del Estado.
141
Un masón, como librepensador y creyente en un ser superior, que
denominamos G:.A:.D:.U:., tiene la inmensa responsabilidad de no
caer en lugares comunes recurrentes en los debates que se tejen en
los distintos ámbitos de la sociedad. No ser coro complaciente de
opiniones en nada sustentadas y que reflejan resentimientos y odios
ancestrales, más que posturas analizadas a la luz de las evidencias
que aquilatan el verdadero conocimiento.
142
S∴F∴U∴
Notas
143
Libre pensamiento ¿es posible en nuestro tiempo?
144
2015, donde fueron asesinados 13 individuos e hiriendo a otros 11,
generó un estado de conmoción no solamente en Francia, sino en
toda Europa.
Conclusión
Notas
1) http://www.masoneria-liberal.com/2016/01/quien-ha-apagado-las-luces-un-viaje-
al.html http://sevilla.abc.es/andalucia/cordoba/sevi-laicidad-y-laicismo-
201601050832_noticia.html
148
El oficio de cantero en la Antigüedad
149
(1)
Comenzaremos nuestro tema señalando que la cantería es tanto la
faena como el arte de desacoplar y labrar la piedra para su empleo en
construcciones. Los diferentes artesanos que participaban – y
participan – en el proceso se denominan: cabuqueros, entalladores,
canteros y tallistas o labrantes. Vamos observando que hay una
división del trabajo en función de la especialización.
150
4) Acabado final, realizado por el tallista o labrante, incluyendo a
veces detalles decorativos.
151
indican que tenía los conocimientos operativos de aritmética y
geometría necesarios para manejar las disciplinas tanto de
arquitectura como de astronomía, entre otras.
152
Grecia(4) fue una cultura marginal en la época del esplendor de Egipto
y Mesopotamia. Su puente con ese mundo centro de la civilización fue
la isla de Creta: la cultura Minoica, pasarela entre Oriente y Occidente,
entre Egipto y lo que vendría a ser Grecia. Estamos situados entre el
tercer y el segundo milenio a. C.
S∴F∴U∴
1) Wikipedia
2) Orlando Mejía Rivera Introducción crítica a la historia de la Medicina. Universidad de Caldas,
Colombia. 1999; pág. 447. Tomado de Wikipedia.
3) Wikipedia
4) Toro Pampols, Isidro. Faros de la Antigüedad: Los Siete Sabios de Grecia. Editado por Isidro
Toro Pampols, ww.bibliotecarafaelvillavicencio.Blogspot.com. Caracas, Venezuela. 2016. Pág.
14
5) Ídem. Págs. 14-15
154
Los colegios romanos
155
Estos collegia cumplían una función en la sociedad que difícilmente el
Estado como tal podría satisfacer, así los collegia serían asociaciones
de tipo voluntario que cumplían las necesidades de agrupación tanto
de ciudadanos como de esclavos.
156
cada oficio, tradición que se proyectó en el tiempo hasta los gremios
de nuestros días.
Lo que nació como una asociación para defender los intereses de sus
agremiados, se fue transformando en algo más con el tiempo. Así que
estos colegios adquirieron un relevante peso social en momentos
políticamente convulsos y en las elecciones a las magistraturas
romanas, muchos actuaron apuntalando a candidatos que buscaban
su apoyo.
La legislación romana (la Ley de las XII tablas de mediados del siglo V
a. C.) preservaba la absoluta libertad de asociación. Muchos de estos
colegios, en medio de los constantes debates electorales, se fueron
transformando en agrupaciones con fines políticos y colocaban como
activo la nómina de afiliados del collegia, infiriendo una venta de los
votos de los mismos.
157
―santo patrón‖, como por las prácticas religiosas propias de la época,
se mimetizaron con estas instituciones.
Más allá de las inferencias que algunos autores hacen sobre la base
de leyendas u otras fuentes tradicionales, lo cierto es que los collegia
existieron y por las construcciones que siguieron levantándose entre la
caída del Imperio romano y la institucionalización de Sacro Imperio
Germano Romano con Carlo Magno a la cabeza, en el siglo IX; las
158
asociaciones de constructores trascendieron; se adaptaron a los
tiempos y sirvieron a la sociedad en que actuaban. Poseían un valioso
conocimiento que no se iba a perder y difícilmente podría concentrarse
en los monasterios, ya que no solamente se edificaban catedrales y
otras obras religiosas, sino que se aplicaba en la ingeniería militar, la
que dudamos hubiese sido monopolizada por la Iglesia. Además, en
las zonas europeas ocupadas por los árabes se ejecutaron
importantes obras que como es de suponer, no fueron hechas con el
beneplácito de los monjes católicos.
El I.·.P.·.H.·. 33º Mario Rolleri, actual Gran Maestro del Gran Oriente
del Perú, señala ―lo que resultó fundamental para relacionar a la
francmasonería con los colegios romanos son ciertas particularidades:
160
Esperamos que esta plancha motive el estudio de las raíces de
nuestra Orden y que los QQ:. HH:. Aprendices y compañeros
desarrollen el tema y lo discutan con los QQ:.HH:. maestros del Taller.
S∴F∴U∴
Notas:
1) Frau Abrines, Lorenzo. Diccionario enciclopédico de la masonería. Tomo I. Pág. 206
2) Ídem-
3) Mario Rolleri. La cuestión de los Collegia Fabrorum y el enigma de los Maestros del lago de
cómo. Fenix News. 16/06/2016
4) Lavagnini, Aldo. La masonería revelada. Manual del Aprendiz. Edición digital. Págs. 25-26.
Ver apéndice.
161
162