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to de� yo superior,, en cuyo caso ayuda a iluminar la ínsonda
ble realidad de· �a vida y (l,el destino md.iv.idua1. La. calidad de
cualquje.r diálogo astroló,gi.co depe.nde más, que nada de .la pu�
reza d,e la ment,e� de la profundidad de la conicentracióin, y de
los ,especfficos ideales de vida del co:t:1sej:ero .. Y quienes tratan
de desechar la importancia de los valores filosóficos o ,espiri
tuales del astr,ó,iogo ,. af"ttrnamdo que ·tal orientación es ••mfs.ti
ca'\ inCJiientífica o inadecuada para un conoci miento de "sa
..,
nos principios astro,W6gicos fundamentales 1 :m.e parece que
entienden muy poco el impacto de su trabajo y la responsabi
lidad que asumen al aoo.nsej:ar a los d,emás. El caos aparent,e
que existe en la actualidad en aigun,os círculos. astrológic-0is, y
la c-onfusión qu,e en ocasiones se toma abrumadora en �as
mentes. de �os nu,evos estudiantes de astrología, sólo podrán
ser clarwíicados n1ediante nuestro reconocimiento d,e la suprre ...
macia de las a.ctitudes filosóficas y espirituales qu,e subyacen
en nuestra labor. Co,mo escdbió, ,el docto1r K,enneth ,egus en
un ex ce·Je nt1e artJculo:
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tanto ,. en estre Ubro he tratado, de 'Seftalar al 1ector la dirección
de� conocimiento del mapa natal, los tránsito,st las progresjo
nes y los fa,ctor,es de oomparación de mapas., en un ruv·e] de
profund.ida.d que res d,e espe.rar que produzca un d,espertar in
terior a �as necesidades, posibilidades y propósitos personales..
No es esta una tarea fácil, pues la ·vida es un proceso en n1u
chos niveles. Aunque ,, por ,ejemplo ,. pod,emos saber con algu
na confianza que un tránsito particular se manifestará en la
superficie de cierto modo que la mayorf.a lo reconocerá y res
ponderá a é�; a. menudo hay simuUáneamente un significado
más profundo en ese período,, un desarrollo vital o un cambi,o
e.n el conocimiento que tal v-ez tenga rarnificaci.ones de muy lar...
go término. Es, deber del astrárlogo, y un desafio dificilísimo�
aclarar ese significado al cliente y ayudar a .re- en focar la arten
ción de� cliente sobr,e ,e] proce&o esencial que está ocurrien�
do, en vez de baoet.lo meram,ente sobre los cambios superfi
ciales. Como lo seftatar-a J ung muchas vec-es en sus escritos,
aquello con 1o cual usted no está oonscíen tremen.te ren con
tacto .fe ocurre a ust,ed corno udestino,,, Parece suc,edede
a usted, y ,entonces usted no asume responsabilidad aiguna
por eso ni reconoce su parte a.W bace.rlo maniíestar. Cuanto
más conscientem·ente estamos en contacto con nuestra vida
interior, la astfio�ogía más nos ofrece -no ,se trata d,e sorpre
sas sensacionales ni de un modo de manejar ,el destino- pero
es más bien un medio, de aclarar las e·tapas del autodesarro
llo a las que deberíamos dar fa bienvenida y usarlas ,como
oportunidades para l.a transfrorma.ción persona].
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El ooncepto de karma e basa en el fenómeno de polari
dad por el cual el universo m.anUene , un estado de equilibrio.
Es.to no equ1vaie a decir un estado de inercia,, sino :más bien
un equilibrio dinámico, e, n cambio constante. Inherente a
este· ooncepto es la premisa d,e qu,e un �·'al.ma n individual (o
un uente'\ según al,guna, es.cuelas de pensamjento) tiene den
tro , , de sili e� poder causal que a su tiempo da fruto da los
ºefectos n. La facultad ,que .inicia este proceso e , s la �'\rer
IDuntad�", y a toda la estructura de , ] fenbm,,eno causal se la na�
n
Uama ud.eseo Al ""deseo,n puede v,érse�o como la aplicacibn
+
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profunda sea la auto-realización de un hombre, más influye
éste SQbre el universo entero mediante sus vibraciones espi
rituales sutiles, y menos es afectado por la corriente feno
ménica (el karma).
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tra vida actual� o pralabd .karma. Según estas enseñanzas tam
bién tend·remos ,que enfrentar todo ese· karm.a alguna vez en e�
futuro a menos que u.n Maestro Espiritua� Perfe,cto nos alivie
de es.a carga+
Un roa.estro esp.iritual c-0n much
' os adeptos e:11 los !Estados
Unidos.,, M,eher Baba, aciara de modo parecido el funciona
m.iento del karma;
Como ,cuerpo burd'o t naces una y otra vez has.t,a· que ,com
pr endes .tu 'Yo R.e�l. Co.mo mente ,, na,ces sólo una vez; y
mueres siálo una vez; en este se,uido, no reenca rn·as. El
cuerpo burdo sigu e cambiando j pero la mente (el cuerpo
mental) sigue siendo la misma siempre. To,das las impre
s-ion·es (sanskaras) se almacenan fn la m·ente. Las im
presiones han de gastarse o ,contrarrest,n,·se median·te nue
vo k·arma en ,en,carna,ci,ones sucesivas. Naces varón·, mujer;
rico, pobre� brillante, ,opaco, ... pam t,ener la rica expen,en
cia q.ue ayuda .a tr ascender .todas las formas ,de la dualidad.
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vida de modo positivo. Po,r el contrario� aunque el mapa na
tal muestra al kar.ma y por end1e las restricciones que no,s atan
y nos írn.piden sentirnos libres, el mapa es también una hen-a
míenta que nos permite ver con claridad en q , ué ámbitos de la
v.ida ne,cesitamos trabajar para ,que transmutemos nuestro i mo
do ,coRiente de expresarnos. Como lo dice reite, radas veces
Edgar Cayce en us ]ecturas: HLa mente ,e. la constructora�.
Llegamos a ser aquello ,en lo que la mente mora. En conse
cuencia, sí pode·mos alterar sutilmente· nuestras actitudes y
.mod,os de pensar no sólo teniendo sino también viviendo un
idlea�, cntonoes podremos empezar a. liberamos de la escJavi_...
tud y a respirar libremente con el ritmo de �a vida.
En verdad - corno �o recalcara uno, de los. mis. grandes astró
lo,gos de� siglo XX� Dane Rudltyar en sus extensos escritos,
�os acontecunjent:os no les suceden a las personas de m.odo ca
si tan importante como las personas les suce·den· a .lo,s aconte·
c.imientos. Es,tas :siete palabras sintetizan las posibilidad.es de
nue tro desarrollo esp iritual-psicolbgi.co cuando, nos encontra
1
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un camino n se d errumba cuando la exigencia es demasiado
1
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ma de esa persona 1 empieza a manifestarse 1 en un nivel m,ás su
til� puesto que ahora se ha franqueado para aprender lo que
se debe aprende:r sobre la personalidad > y po.r ende, ya no .hay
.nece-sidad de sacudidas o acontecimie.ntos dram. , áticos para
despertar al individuo del ueiio de Ja letargía espiritual. ,co
molo seña�a Jung:
Pues como, se dio desde el' principio: los pldnetas, los as
tros se ,dan por signos, estaciones y aiios; para que' en v.er�
dad mucbos hallen su reladón más estrecha en· la contem
º'
plación del universo. Pues el h,omb-re .ba sid hecho un co
c-read o,r ,co 11 la Deidad. Nt> C'S q u,e e I b·o mh re sea bueno o
,nal,o según la posici6n de Jo,s astt,os; sino que la posición
d 1e los astros indica �o q, ue esa I ntidad individuaJ ha hecho
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acercaa del plan de Dios en las a,ctividades terrenas� durante
los p,erfodos en los que e,1 bombr;e tuvo la o,portunidad de
entrar en ,nanifestacio ne, .s materia/es.
SaltUTililO
vida tien,e umJ finalidad, pa.ra. que,, por una, razón positiva,,
tengamos que encontramos oo,n estas diversas dificultades.
Como ],o, dice ,el médi'u.m Arthur Ford:
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mente,, .Y el alma quet< en' el cuerpo de carne, a, fron'ta jovia,i
mente y ven'ce los impedimenlto,s fisic,os, crec,e con, más 1'a
pidez que iotro, que, según nonn·ás fs'sicas, tiene t,od,o por
lo cual vivir. La' recompen·sa no ,es en la fo,,rno., física sin.o,
en el' desarrollo ,eipintu.al,, y CUt1nto m'tis· se,an lo,s obstácu
los a vencer en una vid.a física,, menos i
ne·,cesitará ,e·I alma de
allí en más t'íet,ornar a la forma fii ca pam pulir las tosque-
1dades d'e su carácter. (de A Wo,-ld .Beyond',. de Ruth Mont
gomery, pág� 46.)
Aspectos y elementos
E� tópico de los aspectos se tratará minuciosamente en el
Capitulo Vl, _pero a.quf podemos mencionar brevemente aJgu
1
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lo demás. Por tanto una necesidad de armonizar estas po,la
ridades es indjc-ad a también en estos aspectos pero la opo�
1
3,4
mados� Si una persona tiene u.na íntima conjunción o stellium
en un signo particular ,, y todas lars partes de esa coníiguración 1
que ta� vez una tensión indique en los signos. de fuego son:
cón10 ser receptivo, oó1mo admitir nuestras debilidades y ne
cesidades má profundas� y c6mo pedir ayuda cuando esta
mos sufriendo� Las pe.rsonas de fue. go son a menudo dernasia...
do orguHosas: piara ad rn.itir que ellas también denen n1ecesida
des;. y esta tendencia, junto con e�. apego excesivo a ia acción
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burda oom o el único n1odo d e tratar la vida :, inhlb e a menudo
1
interior.
Si el p,lane·ta o 1a configuración t,ensionados, están en un sign,01
de aire, e� individuo tal vez necesite disciplinar los procesos
de pe·nsamiento ! no sólo c6 , mo piensa;, sino, también la mane
ra en que ]os pensamiento,s se expresan a los demás. Por aho
ra ]as :fantasías ,, el esc-a.p ísmo intelectual ,. las p,.roy ecciones in
1
1
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tes o inspi.rado1"1es.
Co:mo dice un maestro espiritual: "''e) kanna es apego'\ En
,oonsecuencia 'I el mapa, natal, y especialmente los muy acen�
tuados componentes del mapa, muestran nuestras armoruza
,dones -y por ende, nuestJiOS apegos� y por tanto, nuestro
kanna. El becho de ver el map,a y nuestra vida de , este m,o�
do pone todo bajo una n U!eva luz. Empie,zan a d isolv,erse las
distinciones arbitrarias, sentenciosas y falsas entre rasgos upo
n
sitivos. y �'negativos" de un mapa na.ta� + ·va no hay ma.pas j
aspectos, o seres humanos, ubuenos'º o '''maios"". Todos somos
parte del vasto drama có,smico, y -en ,este plano material
estamos todos e , nredados en nue , stras marañas kármicas; Una
vez qu.e ,se percibe esto, �a cuestión e-s: ¿qué hacemos para
desape&arnos de, ,estas, involu,craciones kármícas y de ,estas H
mitadoras p,autas del ser?' El consenso que pude discen1fr de
las enseflanzas de muchos maestros espirituales es que,
por más que que-ramos,, deseemo,s o esperemos d, sapegarn,os
o "'wluminarnos n , no es muchísimo lo que lograrnos. Sólo ptr
d rem,os desapegamos de nuestr-as viejas pautas ,con u etudina
rias ape-gándono , s a algo mejor. Por ejemplo,, 'Si un mendigo só
lo tiiene tres moneditas y de pro,nto ,s,e Je caen se ]anzará de
prisa tras eUas para proteger lo poco qu,e tiene. Sin e,mbargo�
si, em el momenlo en que, ese mendigo dejó caer sus 1none
ditas, vio g , ue el viento nevaba por la ,calle un bi1lete de cinco
d61ares, ignoraría de mmediato sus moneditas y saldría en
persecución del biHete. Por tanto, podemos apreciar que no
basta meramente que nuestra vieja per-soaalidad; nue tros vie
j1os, .mod,o,s de se,r y nuestros pro longad,os conflícto,s nos har
ten. Ptu�:sto qu,e las pautas. habit uales de� pasado ej1ercen sobre
n oso, ,fros u na tracción fuerte y constan te,, y puesto que no�,
sentimos inse_guros ·si nos apartamos demasiado lejos de esas
pautas habituales., d,eberemos encontrar algo potentís.im.o ,a
lo cual apegamos si ha de apartamos de hl.s tendencías ká.rmi
ca.s ..Lo único que es suficientemente potent,e e ilimitado para
efectivizar este desapego es una fuerza espiritual de algún ti
po� Dejo librado al lec , tor que en,cuentre e] método de am10-
nizarse con este poder superior que es apropiado para su esta
do de desarrollo. Pero, cualquiera sea e , l sender,o el,egido, e�
axioma bíblico nos proporciona una fe su.sten'tadora: hBus
cad y hal1aréis; golpead y se os abrirá''.
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los signos ''kárm icos,rr
. o es ne·cesario que· aquí discutamos las div,ersas caracterís,�
ticas de ]os doce signos que pueden relacionarse con e) karma
y la tran5,formació:n. Hay muchos Ubro · muy calificados que
aclaran qué lecciones han de apr nderse y qué nuevas actitu
de desanoHarse pa_ra cada Ui!ilO d,e lo•s signos.' P'ero quiero
m,encio,nar aquí aJgu:nos aspectos de tres signos: Virgo, Pis
cis y Escorpio,. De los dooe signos. estos tres se inter,esan mu y
,evidentemente con las. crisis. que pueden relacionarse clara
n1e:nte con ei karma. A menud,o,,, parece qu,e los, de Virgo y
Pis,cis (o sea, 1o:S que tienen en sus .mapas muy recalcados es
tos sjgnos,) han de sopo,rtar ,cargas, mayoJies de las que les co
rres,ponde,. tanto penurias y o bligacjones, rís.icas (V irgo) como
agitació,n y confusión e·mocio,nales (Piscis)+ Esto se debe a que·
estos signos r,eprese.ntan etap,as cruciales. de] desarrollo perso
nal� fa· ,es de evo1ución y crecimie,nt,o, en .�as ,que la persona de..
berá afrontar lo,s frutos de sus, accio.nes y actitudes. ( ótese
que Piscis el duodécimo ·signo,, señala el final de ·todo ·un ci
clo de vida, y que Virgo ¡es, el signo de la..cosecb.aH Ambo,s
signos simbolizan un proceso d,e purificación como pre,p,.ara
ción para un desarrollo, u1terior .. Viirgo se ocupa de .ta purifica
ció,n del ego y de los motivos. personales detrás de una co,n
du eta franca . y Piscis se rela,ciona ,con la p,urificación die las
emoicii0ne y las imágenes mentales que se a.cun1ularon duran..
te los igJos. El signo de Escorpio puede ,,elacio,narse especí
ficam,ente c , on el karma po,rque ,es dur,a,,.l'te esta fase de desa
n-ono que· d,ebere·mos enfr,entar honradament,e nue , str,o,s de
seos y Uegar a comnprende.r eJ poder inherente ,a ,ellos. He aquí
porq , u,é tantas personas con fue,rte énfasis d,e .Escorpio tienen
semejante at:racció,n fuerte hacia J,o·s misterios; l,o oculto, �os
ámbitos '"pt"obibídos u de la experiencia, y las. revelaciones
acerca del más aUá. Estas personas están en contacto con 1os
aspectos más poder,o,sament,e negativos de su ser, y su ,célebre·
rec lo y fa�ta. de confianza en 105, demás, proriene d,e) hecho
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de que, puesto ,que aben ,cuán incónfiables pueden 'Ser sus
emociones y cuán cruel,es sus motivaciones,. suponen naturaJ
m,en te que los demás tienen m.otiva.ciones similares. Escorpio
es el signo de la muert,e y del re.nacimiento, y cualquiera que
tenga un énfasjs mayor sobre Escorp,io en e� mapa natal e
desgarra entre afernirse a viejos d eseos compulsivos puramen
1
, Cf.. .Astro.logia, .Psicologfa y lo.s Cuatro Elem entos� del autor, Ed.
IGer ,, S.A.,, Capitulo XVI, HLos elementos y las, casas'' en cuanto a
más info,rmación especifica sobre cada una de las casas de agua�
3'9
bles puesto que nunca sabemos qué activará un viej10 recuer
do, irritará una vieja herida, o excitará un molesto compE, ejo,.
P'or tanto, todas, estas casas se oorrelacionan con la necesidad d1e
a�canzar paz emocional y �ibertad respecto del pasado, y el
que tenga má mar,cadas e ras casas en l map,.a natal tiene
1e
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tras vida,s factores que trascienden, abroman o minan nuestra
orientación consciente ha de aceptars e d.e buen grado, pues
con 'frecuencia la consciencia del ego se aterra a pautas limita
das de expres,ión y, por tanto, necesita una ooi.nfronta,cibn pe-
riódica con Jas: fuentes más profundas de vida dentr,o de no
sotros. Ta� experiencia puede ser renovadora;, pues la hauto
anulación '\ e� caos, la pérdida persona�, o la cabal disolución
de la personalidad ,ego,ica consciente experime.ntados por una
persona con ma.yo1r énfasis sobre Ja,s casas de agua podrá fran
•quear a esa persona hacia la in tuición espirit ual y Ja iilu mina
ción. Un fuerte énfasis sobre Jas casas d,e agua puede mostrar
que estos factores en la vida de� individuo luchan para que se
lo,s ,econoz,ca,, o sea pa_ra que se Jo,s acepte bajo la luz de la
consciencia. ( ótese que ,el vocablo Hreconocuniento�· signifi
ca con,ocet dé nuev,o, con referencia a un conocinüento pasa
do, de1 fact 1o•r indicado ,. que actualmente está H,o,lvidado" o
inoonscient,e�) Los efectos emocionales negativos de planetas
tensionadaJmente aspectados en estas casas podr,án a menudo
mejorarse mediante· e] rieconoc,imien·to y la aten , ción e-ons,
ciente de las, fu1erzas de vida así simbolaadas, tal como Jos·an ""
t.iiguos, adoraban a cada uno de los planetas como una deidad
(o sea� como, un poder o una ]ey), sabedores de que lo que
con segurídad so breve.ndria sería la n-éme'sis de los dioses, sí
una persona ignoraba arrogant,emente las exigencias de las
fuerzas m.ás poderos.as.
f
Para esbozar los sig.nificados especíicos de las ,casas de
a.gua, podríamos dar ,el siguiente r,esum,en: La ,cuarta casa re
vela el condicio,nam·iento que nos vincula co,n la fami�ia, el
el hogar_, el sentido de privacidad y la tranquilidad dom.éstica
de ,esta vída, y otros factores de seguridad conexos. Se asocia
con la asunilación de, nuestra experiencia en la juventud y con
la comprensión de Jas ataduras kármicas específicas c-0n los
padr,es o con otro ,s individuo,s ,que, tuvi1eron fuerte im.pacto en
nuestra 1c rianza. La cuarta casa .representa, adem,ás, u.n anhe
lo d e un medio ambierde p,acífico en l que ese individuo se
1
1e
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Marte- ;¡dismiinuyen las ocasjones para que esa persona ex,
p,rese tranquilidad en este ,á.m'b.mito de vida!) La paz que estas
personas an hielan se busca, ,a ·m.enudo, en un esti�o de ·vid a
muy privado y /o a través de su des.apego de la turbulencia
1
emocionail de las relaciones paternas mediaDte distancia fis,i
,ca o mediant,e una conco,.rdancia más sutil con ·su'S sentimien
tos ac,erca de sus padres e·n un nive� int,erior.
De modo pu,e,cid o, la octava ca sa revela fuerte necesidad
de privacidad� y la persona habitualm,ente es, más 'bien difí
cil de familiarizarse en un nivel íntimrO+ Sirl embargo� en co,n
traste con el tipo de persona de �a cuarta casa., este individuo
no se contenta meramente 001n tener priva,cidad porque tam
biéin quiere poder. Esta clase de persona está fue.rtemen te mo
tivada para ejercer alguna clase de rnOuencia poderosa , en el
mundo, mie:-ntra_,. · simultáneam,ente·, mantiene considerable
secreto; y esta motivación es habitualmente de índole come
puisiva índucie ndo a ,esa p 1enori1a a que se ,esfuerce ,en prr0 cu
f'a de varias. metas por las ,que está aficionada kármicamen'te.
La octava ca sa muestra el oomdicionamiento pasado de ,cu
yas vidas a.n tenores, a veces., tene:mos ,conciencia, pero ,que
t,odavía funciona instintivamente y ex trae gran ,energía e , mo
cional de fu en tes. más pr-o fundas que con cien tes. Los plan e
tas d,e �a octava ca� muestran tendencias em.oclo nailes-oo,m
pu.lsivas que tratamos, d,e controlar y habitualmente mante,.,
nen1os en secret,o., pero que ,, no obstante, e:j,eroen formidable
poder sobre nuest, ra.s vid as., Es d üícill eliminar estos d 1eseos só
lo a través del poder de la voluntad ,, como tratan de hacerlo
muchas personas con énfasis de Plutáin, Escorp,io o la octava
casa; pero est,os deseos pueden transf onn arse o, regenerarse y
.r m
_ un 00· ·m·_ p-'O, _ _ _ is - d -, nn·, - a p
_ e_ r--e_ '1."o ...........:,,.,_
" ""' ·-� u
""" na_ - · do
-
� e a través de
!P- uli.r- _o _ 01
a una intensa exp�riencia inmediata. La represión o el con·trol
personal so los jia más son suficientes para tratar estos íactores
de vida que �os planetas de la octava casa muestran� Debemos
brindarnos, para p1artícipa:r con los demás y debemos aprender
i
a asumir riesgos cada tanto,, ,a fn de permitir que la energf,a
corra librem. nte y los sentimientos e .impulsos más profundos
lleguen. a la superficie* En consecu1encia, la ocia-va, casa puede
re Lacwonarse con la asimilación d,e experiencias de muchas vi
das con �a sex.ualidad, los valores ligados a las relaciones hu
manas inUmas, y las respo,msabilidades im.plícitas en el uso de
42
toda clase d,e energía qtte cause impacto ,en los demás. La oc
tava casa r,epresenta un anhelo de pr-ofunda paz em . ocionaJ
que ayudará a esa persona a. aliviar algo la presir6n que fa·s
emociones y los instmtos compulsivos ejer . ci1e ron durante tan
largo 'tiempo. aturabnente,. es,ta paz y 1 este cont1en to ,están
conectados con e� anheto del a�ma en p,rocura de seguríd.ad. y
tranq uíUdad últ_¡mas ( ¡ en p rocu ra de salvación! )r,, que sólo
1
43
cwón HimUada en las artes 1creativas al igual que, senciUamen
te ,. comprensión y empalia con los dolores y las alegrías de
toda la , criatura vivas. Tanto la casa octava c,orno la duodé
cima se relac.io,nan con estudio • s y prá,cticas oculto,s y m,eta
fisícos, sufrimiento en un nivel profundo oomo ¡p.r,eludio d,e
algún género de l'ienacimiento, y consciencia inm,ediata sobre
la reaUdade de las dimensiones psí,quicas y espirituales de la
vida. La diferencia primordial entre las ,casas octava y duodé
cima es que, mientras los p�anetas de la octava casa tienen
que confrontarse inmediatamente y trabajarse del principio
a'i fin, �os planetas de la duodédma casa pu,eden a menudo
tt:ascen,d,erse. En 1 1 p.rime.r caso, nevamos a [a superficie las
viejas tendencias a fin de transformada a través de una par
ticipa,cirén inmediata ,e intensa, mjentras gue, en ,el ultimo
caso, nos elevamos enteramente sobre los p,roblemas+
Pi0,r los corn entarios antedichos podemos d educir que, los
1
1
44
apoyo, y el sentido de orden que niecesitan en tales ,estudios'"
Con Mercurio en . las casas de agua, la nota clave de la modali'
dad operativa de la mente es m.ás bien la i11 tuición que una 16-
g.ica estricta.. La percepción y la comunicación están a m,enu
do ,enredad,as per,o, en o,t:ras. ocasiones, ·son extr,emadame , nte
a
sutUes e incisivas .. Naturalmente �a m,ente Uende a pens r con
profundidad y -aunque p,ueden presentarse modos obsesi
vos de pensar- también hay, a menudo, ta�enlo para los ,esbl
dios o escrU,os herméticos� _psíquicos o espi, ri:tuales. Con Mar
te en estas ca.s.a.s, Wa. persona es ,, a m,enudo, manejad.a por fuer
zas que están más allá de su conbol, y sus más fuertes objeti
vos ta] vez no ten . gan un ,carácter o una m,eta r,cilmenle defi
nibles.. La persona puede se·r nevada hasta e] punto de la o b...
sesión, como Vincent Van Gogh, que tenia a Marte en la duo
décima casa, ,o, tal vez encauce sus pasiones pa:Ja que luche
enérgicamente por lo,s que están en pro,b�emas o contra sus
propias tendencias negativas. Este último enfoque puede lle
"3rle a ser demasiado duro consigo mismo,, :pero no, s.e niega
que Marte ,en las casas de agua puede ser un estímulo eficaz
paira el de·sanoUo personal.
V,enus en las casas de agua muestra generalmente que Ws
persona no puede hallar satisfacción emociona� en ninguna
actividad o rela.ción superficial ooniente, he-cho, que mucho
lamentan a1,guno . s autores de temas astrológicos.. Sin em bar
go, este mismo hecho puede inducir a esa persona a exp,!ora-r
su vi.da interior más fructíferamente q a emp,ezar a dirigir sus
e
, ner(d.as h . acia m,etas espirituales com,o medio para lograr sa..
Hsfacció.n emocionat Esta perso:na necesita únic-amente tiem
po para explorar et mundo interior.. Con Júpiter en estas ca
sas, las necesidades religiosas 'Sólo .P·Ueden satisfacerse armoni..
zá:ndose con fuerzas de vi. da más p�o,fundas+ A menudo hay
una gen,erosidad espiritual interior que sostiene a la persona a
tr--avés de épocas difíciles y proporciona inspiración cuando
,e:n la supeñicie de la vida todo parece· de-sie,rto. El hecho de
t,ener alguno de los plaentas trans--satuminos en_ las casas de
agua indica, con frecuencia, una marcada sensibilidad ps.íqui,.
ca y/o fuierzas inconscientes c.lairament,e activas.
En suma, los planetas en casas d,e agua revet. an lo que no
puede hallarse -o ex.perimentars e fácjlmente d,e modo saUs
factorio- en la superficie de la vida,, y que só,Wo podrá cum-
45
pUrse en las profundidades del ,conocimiento interior. Todo
ptane ta que· caiga en cualq uie·r casa d'e agua pued'e in terpre
tarse, .Pues, como un aspecto de· la naturaleza de la per sona,
como �una dimensió·n ,de la experiencia ,de vida, que só , lo po
drá cu·mplir mediante ,una búsqueda d'ent-r,o d,e ella mísma.
EJ individuo deberá ,converUrse en buscador ! r'en ex.plorado:r
de· los reinos interiores del ser; ant.es de obtener un conoci-
miento suficiente d,e la vida in terio , r que le ermita sa tisfa
cer el anbel,o que siente. De allí qu,e los plane·cas que caigan
en esta casas sean índices d,e aspectos del ser muy proble
mático, cuan . do la persona es espiritualmente inmadura ,, cuan-·
do todavía no dio claros, pasos a ·fin de conocer y enfrentar su
naturaleza y sus mo·Uvacio ·nes interiore , s. Una ye
, z que perci
bió ia finalidad más sutU que existe detrás de estos n.ahefos y
la razón última d e esta frustración y este anhelo temporarios..
1
La Luna
En .la presente vida la personaHdad se construye sobre las
ba.s.es del pasado,. Tal como la cuarta casa e-s'tá ,en e I fondo
misn-io de.! mapa natal,, constituyendo, pues ,, la base sobre la
que c , onstruimos nuest:ra personalidad operacional íntegra, de
igual modo la Luna -que tradicionalmente "gobierna"' a Cán
cer y la cuarta casa que participa del princi p1 io idéntico- re...
pre enta nuestros sentim.iento,s raigaies ace:rca d,e nosotro:S
mismos. El principio d,e la .Luna es simila.r a lo que muchos
psicólogos Haman la ��imagen pei■sonar',. aunque el sentido
del yo representado por la Luna no es tanto una image.n
consciente y visu.al como subli min al, habitualmente una ind.i
cación más bie·n vaga de lo que realm,ente somos� Los astró
logos asociaron tradicionalmente a la Luna oon el pasado ! ya
sea me ram,en te e] pasado durante esta vida� y conectad o con
condicii0namientos de .la infancia y rela.ciones con los ·padres
{especia1mente la madre), o corretacionad,o, con una c , ompren
sión más vasta dei pasad o, en el contexto de la te , or:(a, reencar
nacioni .ta� En muchos, ,escritos astrológicos se ha expresado
,que� m ien·tra s la Luna 0111.,;,e-:;:tra el pasado, el S.oJ muest�a la
46
orientación p,-esente, y el Ascendente seilala el desarrollo
futuro. Sin duda, hay un razonamiento sensato detrás de es
tos paralelismos, y -en un nivel abstracto- son probablemen-
�
te muy exactos en la mayoría de los casos. Sin embargo, en el
presente todo llega junto; lo que hemos sido continúa influ
ye!!ldo en nue.stras orientaciones, actitudes y acciones en el
ahora. El he<:jlo de cómo nos sentimos respecto a nosotros
mismos y qué pautas de expresión sobrevienen más natural
mente y las sentimos más cómodas (la Luna), tienen gran im
pacto sobre nuestro modo presente de vivir.
fa
Tal como Luna refleja, e : n nuestro sistema solar, a la luz
solar hacia la' tierra, y concentra así la fuerza de vida hacia
objetivos prácticos (simboliza.dos por la Tierra), de igual. n10-
do la Luna en astrología rep ,resenta un reflejo general de lo
que hemos sido en el pasado,. Es una imagen de experiencia
pasada y pautas de conducta asimiladas con las que ahora nos
sentimos cómodos porque son familiares y porque -de he
cho- hemos ejemplificado esas cualidades en nuestro mismo
ser. En otras palabras, la Luna simboliza -especialmente se
gú!!l la posición de su signo- pautas kármicas específicas,
mentales y emocionales, que nos inhiben o nos ayudan en
nuestros intentos de expresarnos y ajustamos al mundo ex
terno. Si los aspectos con la Luna son armónicos, revelan
pasados condicionamientos y pautas de reacción espontánea
que podrán ayudar a la persona a que se ajuste a la vida y a
la sociedad, y a que exprese su yo. Si los aspectos de la luna
están tensionados, simbolizarndo así ineptitud para ajustarse
con facilidad a la vida y/o una imagen personal negativa, estas
predisposiciones emocionales deberán superarse. Es importan
te notar que la Luna sin1boliza tal reacción espontánea y tales
pautas de conducta que estas orientaciones son primordial
mente evidentes en la niñez, cuando nuestra conducta es, más
bien pura y desinhibida. De allí que el signo lunar y los as
pectos sean muy inmediatamente eficaces en la primera parte
de nuestra vida. A medida que envejecemos, es posible que
superemos algunas antiguas pautas emocionales, incluso a
punto tal que los bloqueos emocionales que muestre el mapa
a través de aspectos lunares ya no tenga significados impor
tantes. No estoy diciendo que el signo de la Luna cese d:1;: ser
importante, pues simbolizará siempre un tono dominante en
47
el rn.odo fundamenta.] de , er d� la persona. Pero lo 1 que re·calli
.s
co e que los problemas y ci0nflic.to1 asociados ,con los aspec
to,s de la Luna y con la expresión de ]as cualidades. de ,es m.o
1
49
plificar d.e m.ás la asocfa.c1on de �a Luna con las vidas pasa
das a punto, tal de formular deciaracio,nes como ,ésta: uBue
no,, usted dene , la Luna ,en Leo J' de modo que� en una vida
pasada� debió- haber sido un actor". Tales interpretaciones,
pueden ser ocasionalmente vá�idas pero habitualmente no
tienen una finalidad constructiva y pueden dar al cliente la
impresió,n de qu,e el astrólogo está tratando sencillame , nte de
impresionar con expr,esiones sensacionalistas,, deducció , n ésta
qu tal ·vez sea muy p,recisa. Lo importamte , en que· hay ,que
detenerse e �a necesidad que la Luna simboliza en esta vida;
y e� ,enfoqu� más constructivo para ínte·.rprretar mapas desd,e
el punto de vista kánnico es aclarar las motivaciones y las pre ,
s
siones má . profundas que la perona sienta pero que no tiene
modo d _ identificar o poner en una perspectiva más vasta.
AJ concluir ,este capítuJo, podemos decir ,que cada uno de
.nosotros tiene la oportunidad de arm.oniz.ar dentro de sí
mismo las div,ersas manife-stac.iones del universo· y tene
mos ]a o,por!unidad de aceptar a todos los demás seres huma
nos, incluso aqueHos con. �os que pulsamos una nota discor
dante en el nivel de la personalidad. ¿Podemos vivir sin exigir
que t,odas las experiencias y todos los seres humano,s armo,ní
cen con nuestra sintonía? ¿,Podemos hacer evolucionar una
c, onsciencia ma.duc-a y desapegada que , 110s pe.rmita observar
nos mientras representamos el papel que nos. correspondió
en el drama cósmico? ,¿Podemos reírnos d,e nuestra compleji
dad,, de .nuestros conrncto,s y nu,estras inooberencias?' Lo que
es importantísimo: ¿podemos tener fe d, que e� universo es
armónico y que sólo es nuestra visión e , strecha la que ve dis..
cordancia? Las respuestas a estas preguntas determinarán,, en
gran medida� cómo enfrentamos nuestro karma en esta vida
y qué clase de karma estamos cre , ando ahora.
so
Cap ítullo 11
TIRANSFORMAC,IONI
53
traídos que pueden haillars durante cu.alquier época. Por su
puesto, no debemos desodenta.rnos sólo con lo,s números
i
confundiendo así la c , antidad con la calidad del inte.r és.
Sin t,ener en cu.en ta lo, que el futuro mtJroduzca. en e] cam
po astrológico ! creo que dos cosas son seguras .. Primero,. mu
chos estudiant,es serios d,e la astrología anhelan -y :riespondien
a quienes desarrollan- un lenguaje astr,oló,,g:ico nuevo, y m,o
de.rnizado. Segundo, m.uchas personas que sienten curiosidad
por la astrología se apartan rápidam,ente de ella luego de leer
unos pocos libros uadiciona�es o asistir a unas pocas ,clases,
sobre el tema; y muchas de ,ellas es probable ,que persistieran
en su int,erés sima as:tr ologf.a se presentara de un modo moder
no y constructivo que la hície.ra más accesib]e a �as personas
concretas y prácticas. Pu,est o que, en ffia actu ailid ad, a la astro
logia ,se la presenta, tan a menudo, de un modo arcaico, de
masiado basado en la creencia y no lo suficiente en el ,conoci..
miento o la comprensión ,ea�es t un estudiante debe ser atraí
do, con gr-an fuerza hacia 1a astrología y debe senUr una abru
madora fascin.ació,n con ,ella que le permíta. sostener un inte
rés, y un compromiso prolongados. Hoy y.a no es necesario
- -�
man : - · u._ na
t ener :- "' as•""o1o
_ u, _ g ía
__ H·eso·té-=1·
_ t'. ca'"
_ o um· 1_· st·e_ n· osa''
_ '.,- aun
_ que
_
n
todavía podemos ocuparn,os de los aspect,os '�'eso,té.rico,s de
la astrología de un modo directo y experim,ental, •Como ,estoy
tratando de hacer�o en este Ubro,. Et tema en si tiene Ja capa
cidad de instilarnos un. gran sentido, de t,emor rever-encial ha
cia los .misterios del universo. o tenemos que acrecen·tar este
misterio. ¡Con cuánta ffiecuencia creo ,que el esfuerz,o de
mante·ner la astr,oJogía misteriosa ,es sólo un juego de� ego, oo
mo si la persona dij1era: HM.ira qué avisad, o, e intuitivo ,so,y,
puesto que puedo figurarme todos estos misferios. ,cósmicos,'"!
En otros casos, está ciar-o que el astrólogo o el posible astrólo
go hace que las ,cosas parezcan misteriosas o confusas ·sencilla
mente debido a su falta. de comprensjón. Cuanto más enten ...
demos v·erdaderamente m,ediant,e experiencia inmediata (más
bien qu,e mediante me,ra deducción teórica), más sencilla y
práctica podrá Uega.r a ser nuestra expresión de esa compren
sión. Como dijo Einstein, s,i r,ealment,e entendemos algo, d,�
bem.os ser capaces. de exp.Licárse,�o a un nü"iito. Y, como ]o ex
presé en la lntrodu,cción� lo que corrientem,ente s.e necesita
no s6J, o en e·� camp o de ]a astrología. sino t'am bién en toda
54
nuestra visión d.el mundo son principios simpUficadore-s y sin
tetizadores,. En otras palabras, ¿por qué deberíamos seguir ju
gando con 1egocéntdcos ju 1egos conjeturales en . astrolog-ia
cuando p,od,emos ocuparnos di.recta e inmediatamente de los
principio,s arquet fp.icos y estructurales de Ja ·vid.a misma?
¿Con qué ideas simplificadoras y smte·tizado,ras aoerca de
1
55
-cuando s la aplica a las vidas de los individuos- se ocupa
d la transformación. Tal vez sería útil ser más pir, ciso, en
una f:orma esquemática. La ast.ro�ogia, basada en la configu
ración pbinetaria que se considera se ocupa de estas clases
de transformación persona]:
,56
energías y ios poderes d iversos que los planetas. repr�sentan.
Deberá haber una alinea.ción conscientemente forjada c, on nó
sotro m ism,os 1en ue t,odos �os aspectos de nuestro ser a fin d,e
e tar totalmente abiertos ,a �as interminables transforma,cio
nes que Ja rida n o,s e x.lgirá. Y 1esta allneació·n -esta apertuFa
Ue ne un significado directo en nuestra salud física, mental y
espiritua L Conllo escribió el psiq uia.tra jungfa no Robert
M. Stein:
signo siguiente t todo estará muy bien o,tra. vez". Lo que dan
esta clase d e consejo no ,entie·nden que gran parte de un pro-·
1
5,7
blema no podría existn en la actualidad i eW individuo hubie
·'ª logrado la perspec , tiva y ]a integración apropiadas median
, ibn pasados de la e·xpe iencwa pasada.
r
·te aprendizaje y asimiJac
Cualqu�era que sea el conflicto o la necesidad de to,mar dleci'
s:iones que se agite en fa actualidad subirá a la supe.rüc.ie nue
vamente ,en el futuro, aunque ta.� vez de fonna leveme , nte di;
ferente i ahora no se los trata eficazmente.
En muchas antiguas cultuias, a los p1anetas se los consid,e
rabai deidades. ce�estiales :reales º� po,.r lo menos� encarnacio
nes de fuen.as o medios espirituales. En cie , rtas .ramas de·I hin
duismo� a los planetas s lo,s c,o,ns.ideraba como lo·s "Señores
e
S8
nos de la existencia e mtre eJ mundo físico y el p [ano causal
(o me,ntal) puro� Primero se .menciona a ulos. mundos del
Sor\ luego a Hlos. mundos de Ja Luna'\ y �uego de· eHo,
numerosas sub-zonas. Además,. a menudo se dice qu,e el
Sol y la Luna, vistos con los i0j10s fisic, os ·so,n meros refle
1
jos d.e las fu entes de energ ia del Sol y la Luna en los pEa
nos más ·sutUes. 'Los Vedas y los Shastras, dos ese ritur.as
indias. tan antiguas que nadie :sabe rea.Lment e cuál es su
1
del Sol.
Aunque el cr.iterio cient f fico �und ial dese ribe al Sol como
inmensamente mayor -que la Luna me ha p,arecido siempre
Un.. simbo.J.o espec'a 1 -e· nte
_ _ ,_ J_ uu' _ n-otab1e - J.o·s d"#
. _ que �a.metros
· y- d"1�
tancias relaUv,os del Sol y la Luna son tales ,que cu·ando se,
los ue desde la tierra, ambos discos subHend,en casi exacta-
59
mente el mismo ángulo visual {O.Sº) y parecen ser ,del mism,o,
tamafio. Esto t simbólicamente J no, sólo ilustra que las fuerzas
lunares y so lares de nuestras vidas son de importancia absolu
tamente igual, sLno que demuestra también con claridad ,cuán
grande es r,ealmente in.cluso un grado c-o.rn.plet, o cuando obser
vamos al cie�o de_dre la tierra., Además, el he·cho de que e�
So1 y la Luna sean visualmente de sem,ejante tamaHo igual de
bería dar a los astróJogos más razón aún para oo,nsiderar que
e� signo de la Luna es d,e igual .importancia qlle el signo del
Sol en todo map,a y para basar sus int,erpreta.ciones ,en una
síntesis d,e las posi,ciones del Sol y de .la Luna ,en relación
reciproca.
¿Cuáles son e·xactamente estos principios solares y lunares?'
uevrunente, podemos encontrar la más clara exp licación 1
fo 254.)
Mientras la lógica y la objetividad s,on babitualmente lós
rasgos pre,dominantes de la actitud exterior del bomb-re 1 o
po,r lo meno,s se las con:s,ide-ra ,como, idea·Jes 7 en el ,ca·s,o de la
m-uj,er lo es el sentim'iento. Pero en· .e/' aim'fl es al revés: inte
rion,u:nte es ,el bombr,e quien siente, y la muje,. quie n' re-
2 Esta clase de oo:n:ocimien�:os bien podría servif' para mstar a los astró
logos, a que usen 11 'orbes��, más pequeñas pan los aspectos interp�neta
rios una -vez qu,e ven que hasta un grado es d.os veces el diám.eu-o, deJ
Sol o de lla. Luna y que los otbe,s de 1 O gndos se u.sao a menudo pues
los as,pectos ·lunares o so�ares son ¡ve.in re veca el dlámem,, del Sol 0 1
Is Luna!
60
mente y ,que ·trataremos de .resolver dando ,consejo que esté
tan condicionado por nuestras tendencias culturales y sexua
les que sea esencialmente 1carent,e de valo.r para el individuo
que lucha y busca nuestra ayuda+ (Hay tam b ié.n una tenden-.
c, ia ·sexuai co,nsiderable 1 en muchas ·tradiciones astrológicas,
aunque no tanta como algunos extremistas ,gustan creer:
pues quienes dicen que la astro,iogía ,es, • .,se xist..a n m,eramente
porque hab]a, d1e Jos, princi_p,ios ar,que'típicos masculino y fe
m,enino . no. conocen simpl,em,ente su propia integridad po
tencial.) P.or ejemplo i taJ ·vez sea ent,eramente inapropiado
emplear las. rígidas oorr1e laciones astrológicas del siglo XIX
para el matrimonio, ,en e) trabajo astrológico 0On una per
sona Joven y m.odema. Pero sería igualmente inapropiado
e,mplear términos y supuestos que son important!es para mu
chas personas más j,6venes. de hoy e.n una consulta con una
persona mayor cuya pauta de vida ,es más tradicional.
Las po:siciones, dei Sol y la Luna e.n el mapa nata.! r,eflejan
ta.m.bién n: uestra experiencia de· �os padres y nuestra :f\elación
con ellos. En esta vida., lo . s padres constituyen,, por así de0cir
lo, las fu.entes oo,ncretas y aparentes de nuestra vida,, nuestro
destino y nuestrio carácter. Muchos de los libros, más viejos so
brne astrología dan la impresión de ,que invariablemente podrie
mos deducir del mapa exactam,ente a qué se :par-e,ce la re]aci,ón
con los padres y 06,mo anduvieron uno con otro, si se divor
,ciaron, o uno murió prematurarn ente, etc. Y o hallé tan
fácil deducir estos oo,no,cirnwentos específi cos ,como algunos
escritos inducirían a supone.do. A. menudo es posib�e ave.ntu
rar una conjetura, sobre la base de los, datos del .map,a, que re
sulta ser exacta, pero -incluso ,en esos c, asos- re , almente nada
demuestra y no brinda c-onocirnientos útiles. Es meram1 ente
un juego conjetural.. ¿Por qué debemos. usar la energía psíqu�
ca y un tiempo valioso tratando de, conjeturar algo que, a me-
~ ~
64
sobre los demás. 1 o estoy in firie.ndo que no hay a relaciones,
padrerhijo-s que no ne,cesiten un atento examen y� a ·veces,
tJ "a·tamiento psicoler,apéutico. ¡Por el contrario! Me parece
que a menudo nacemos ,como lo1s padres o los hijos de un en
te con el que tenemos un karma partj¡cularment:e intenso. Pe
ro si esa relación misma., en vez de ser só)o la a,ctitud de un
individuo hacia ella es. más bien r,ealmente un _p,rob1ema en
tonces es invariablemente necesado, mirar no sólo un mapa,
natal sino también una comparación ponnenorizada. del mapa
e.ntre las personas involucradas. Algunas,. personas son de na
turalezas y armonías tan enterame, nte diferentes que son pu
ra y simplemente incompatibles 7 y -en estos ,casos- por más
que se trabaje en la rela,ción no1 se hará que esas persona,s sean
m,ás semejantes. Tal vez puedan aprend,er cómo aceptarse mu
tuamente y de m-odo más pleno,, y a brindarse n1utuamente
espacio suficiente para que se expresen, ¡pero� sin embargo ;,
tal vez no quieran frecuentarse mucho.
El hijo vive en el campo ,energético de los padres� En ,otras
palabras el hijo vive y f"iespira ,en la at,nósfera que los pad'r:es
,crean a través de .su relat:ión mutua. , De allí ,que, ,cuando una
perso,na enveje,ce y vive ,cada vez con mayor ind,ependencia
.respecto de sus padJr,es, 'ta� vez d,escubra, a través de esta pers,-,
pectiva. a,crecentada; que su naturaleza verdadera no es com ...
p,atible con la atmósfera de sus padr,es que todavía Ueva alre
dedor de sí en forma. de pautas psj1c0Jógicas consuetudjnarias..
Si est,e es ,el caso ,. entonces esa persona necesita enco ntrar y
1
65
ces e] individuo repetirá d,t: modo inconsciente ]os eRor,es d,e
sus padres, Como escribe Jung:
66
posterior de la vida, ,entonces, nos encontramos vagam,ente
�esentidos, sin un objetivo claro de .nuestro resentimiento. En
vez de co,mprender que nos molesta nuestra ignorancia, nues
tra necedad y nuestra cobard ia, a menudo volvemos nuestro
resentimiento hacia algún gmpo hacia algún segmnento vaga
mente definido de nuestra sociedad que ost,enta a bierta1n,ente
su desprecio ha,cia nuestros valores opresivos o que de algún
modo re-presenta las estruieturas social,es opr,esivas que ,consi
deramos ,que nos es<:lavizaron.
En una sociedad en .la que tenemos que haUar nues.tros me
dios de iniciación y t.ransforma,ción, la astrología tien re que re"'
presentar un rol partwcularrnente va]ioso. Pe,o debemos .r-ecor
dar ,que la astro1ogia no es, una cosa separada de la vida. · o es
una r,eligión en sí misma no es una ciencia ,que abarque· todos
los d,emás ,enfoques d,e] conocimiento .hun1ano. Es, senciUa�
mente una berramie·nta ., una de las muchas herramientas posi
bles ieiue pueden usarse de cua]quier cantidad d,e modos. En
nuestras vidas individuales, la astr,o,logia puede 'Servir a los fi
nes d,e guiamos a través de varias inicfa.ciones transforrn.acio
t
nes y transiciones cruciales. Puede proporcionarnos la 1es. ruc
tura, y rel significado cósmicos que instila en toda ex·periencía
1nayor un significado profundo, algo que las .r,e.Ligiones en su
mayoría� tratan de haoer, 1 pe.ro no Wo �ogran. Y ,, e, n la práctica
j
del conse o astro�ógico como profesión, um conocim.ie·nto, de
Wos roles sociales, de las influencias y v.ínculos de los padlres,. y
de las necesidades individuales para a.travesar las fases .arque
típicas de, transformación humana ,, es una necesidad absoluta
para un consejo eficaz. Cuando la sociedad o la re1igión de
una pe rsona no logra proporcionar u11 medio para entend,er
tales p,rocesos y nec,esidades importantes. deberá , encontrarse
otro mod,o. Y Ja astrolo,gía e-s un método cognoscitivo que
miUones de p rsonas buscan como guía.
La consciencia :superior
67
Algunos astrólogos h�n escrito y dicho en diS!ertaciones públi
cas que podemos eva�uar e] nivel de consciencia po,r el mapa1
natal, que pod1emo decir -según ciertos aspectos y posi,cio
nes p1anetarias- si un individuo es u111 u.alma evolucionada'� o,
un • alma vieja,,, par-tiendo simplemente de lo,s datos astroló
,
gicos. Creo que este es un burdo ,error, ,que no, sóio p,odrá de
sorie ntar a una persona en sus esfuerzos por e·nt,enderse a si
misma,. sino que también podrá inducirla a una acUtud prie
juiciosa y farisaica hacia los demás seJ ",es humanos, ,especial!-·
rne n t,e entre estudiante . pírincipiantes de astrología que to,
r
da.vía no desar ollaron ma cultura que sólo la experiencia prác...
tica puede proporcionar� Todos nosotros somos 7 sencillam,en
t, a]mas que luchan en el sendero que conduc,e a un amor y
una luz mayores. Podemos estar en difere , ntes estaciones a. lo
largo del camino, pero todos. ,estamos en ,el mismo camino ya
sea que nos demos cuenta de , ello o no� El mapa na.tal es un
mapa simbó�i,co de la parte p-anicular d•el camino por el que
viajamo,s en e ta vida. Como Dane Rudhyar se e forzó en ,ex
plicado en sus voluminosos escritos; el mapa natal re\\'ela las
pautas e tructural,es de la vida. 3· El contenido y la. c , on cien
cia de·ntro de esa estructura :no apare·c-en en e[ mapa.. Aunque
un astról,ogo de orientación espidtuaJ y psíquicamen·te sensi
ble
, puede intuir a menudo el nive� de consciencia de otra per�
so,na (y de hecho necesitaría p-od,er ha,cerlo, en ap.ücacio,nes.
depuradas de la astrologí.a paira eW con,ocimiento personal)
tal percepción proviene más bien del astrólogo en sí que de·I
mapa solo. ldealm.emte, podemos sintetizar mtui.tivam.ente las
pauta de·J mapa com una impresión directa de la per. ,ona viva
a fin de negar a entenderla en p,r,ofundid.ad. Pero aunque sea
mos bastante sensibles p.a - ra poder armo.nizamo , en. el nivel
de consciencia de una persona, d,ebemos ser extremadamene
te cuidadosos al basar todo j1uicio en esta intuición p rso,nal.
La expre ión de Rudhyar� citada al comienzo mismo de este
capit.uJo� explica porqué es tan necesaria esta precaución;.
pue cada uno de noso,tros. tiene Umitacione-s, y nuestro nivel
co,gnoscitivo, y nue_tros valores perso,na]es pueden realmente
68
limitar nuestra obJetividad y .la eficacia de nuestro conseJo..
D.ar por sen·tado que el mapa muestra el nivel de conscien
cia o el nivel d1e d.esarroJlo esp,iirituaJ es también un enfoque
muy Hmi·tativ,o de la persona indívidual. ¿No somos cap,aces
de creoer en e·W co:nocimiento durante esta vida? ¡Es. de espe
rar que sí! Tengo la buena fortuna de tener hermanas geme, las
diez afio , más jóvenes que yo., y pude vedas crecer - individua
lizarse y d sarrolar sus propio estilos de vida. · acieron en
1e
70
Capf'tulo IU
CLAVIES, DE TIR�NS,FORMACION
Primera Parte
URAN01 V NIEPTUNO
• , _ a/e-gráos. �effor.
Nuestros jolgorios aho1't1 concJ'uy.e•
ron. Es.tos actares nuestros, como
os pnedije. fu·eron tod08 esplritu."8, y
se jünden ,en el aite., en el aire sutil:
y, co, mo la infundada tela de esta vi•
sión� la3 torres cut>iertai de nubes;
los nuzgn {fic-os palacios. los so,lem ..
nes templos; el gran mundo, mis·mo�
si,. todo lo· que éste hereda. se disoJ:.
verá't y,. c-omo este insustancial es
pee tdculo desa1X1recib, sin de¡ar
nu rros detrás. Somos como la sus
tancia cori que están hechos los sue
ifos; y nuestm 11ida pequeña está ro
deada de sueno...
Sbakespeare� La Tempes.tad
Et decenio pasado se ,escribió muchísimo acerca del sígnifi-
1cado de los ·planetas. tr.ans-satuminos: Urano� ,eptuno y 'Plu
tón .. Me ser:fa imposible c-ondensar todos estos significadus
que se sugirieron, en el ámbito de uno ,o, dos capítulos, y,,
realmente� no es ése aquf mi propósito. En este capitulo.
procuraré aclarar el sign:ificado funcional de estos planetas
,o, sea� �a ,cualidad dinámica de fo,s cambios ·vi tales y de la
transfonnación personal simboUzados. po,r e,stos planetas co
mo el individuo ,experimenta inmediatamente 1estas energias
y dimensiones de la. experíencia. En escritos o disertaciones
astrológicas nos dicen a menudo que estos planetas ·se refie�
.ren senci1la y únicamente a cualidad1es grupales, diíerencias
73
generacionale o ''�karma colectivo•'� Si bien estos planetas st
reJacionan innegablem,ente oon estos, factores ,. e,� consej 1ero
astró,Jogo de or . ientación psic
, ol6gka :necesita conocer el sjgni
ficado d,e lo . tra11swSaturnmos en la ·vida individual, desde un
punto de vista práctico. experimental Estas fuerzas, después
de todo só,]o podrán funcionar a travé�. de un grupo partirCU·
lar si actúan a tr.a vés de l,o individuos ,q ue, abarcan ese gru p0r.
Puest,o que creo que Urano y . eptuno se entienden gen,era�
mente mej , or y se explican más clar.am,ente ,que Plutón en los
libros astrol1ógi100,s d1e qu se dispone, consagré todo el p,:rióxi:
rno capítulo a discundr obre P'lutóa con alguna profundidad,
mientra que e�te c-apwtu�o, trata a todos los planetas trans-
satumin,os corno un grupo de energías transformativa rela
cionadas, con particular énfasis sobre Urano y . eptuno. Me
diante �a ,, ,.influencia'·� de estas fuerzas trascendentes, un ser
humano experimenta grandes cambio,s en sus pautas de pensa ..
miento, en su nível de consciencia, en su estilo d e vida y en
1
su capa,cidad de autoexpresi6n.
Creo que ]os planetas tranSesa'tuminos ili1fluyen muy inme
diatamente 1en la vida psíquica más p,ro fíunda del individuo.
Sin embargo,, el poder de estas fuerzas es a menudo, tan gran-
de que estallan desde sus con f'm,es psíquicos, por así decido,
e irrumpen en el mundo; por tanto se manifiestan como 1
74
fluencias' de los trans-saturninos se experim,entarán. Pero
,creo que es una generaHza.ción demas,iado vasta declarar que
sólo las uahnas altamente evolu.ci,onadas'J son ,sensibles a �as
energías de estos pWanetas. Más correctam.en�e; podríamo d,e-
1dr que una persona más consciente es capaz de &er un canal
para la expresión. d1e las manifes.taciones más. puras ,, más puli
das y m�s oons'trucUvas de estas fuerzas, como ocurr,e con to
dos los planetas. P'ero ) de ningún modo podemo,s a.firmar que
los revolucionarios destnictivos, son insensibles a ·urano los
miembro1s de la n1afia a Plutón, y �os drogadictos a eptuno.
Estas personas e-x p,r,esan oon seguridad un aspecto del pod,er
de los trans�saturnmos en sus vidas,. aunque evidentement,e
no el modo óptimo de ex pl"iesión.
Urano, Neptunio y Plut,ón simbolizan las fu,erzas que cons
tantemente acucian el cambio i(y ,es de esperar que e] creci
miento) en nuestra consciencia.. � eminent aSitrólo,go Dan,e
Rudhyar se ha referido a ]os trans-satunúnos como u.embaja
dores, de Ja galaxia'"''. En un artículo publicado n la revista
�"Astrovi,ew'", ,expresa!
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completo al sistema soÚJr. Están dentr;o de su esfera de in
fl14,eru:ia para realizar un trabajo,, par-a ligar nuest,-o peque
ñtJ sistema (del que el 5,ol es ,el c,entro y la órbita de Satu,...
n,o la circunfe-rencia) con el sistema m'ás vast'O',, la galaxia.
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años de �a mía ! , on grandes las poswbUidade de que mi P'lu
tón natal caiga en la misma casa de su mapa en el que está
ubi,cado su Plutón natal. Así podemos ver que ],os tipos de
cambios mayores jmp,ulsados por estrechas relaciones e,ntre
personas de edades muy c.Hfe-rentes es pr,obable qu,e sean de
un onh.i:n enterament e nuevo, aJle-ctando a ambas personas de
1
1
crezcamos a fin de que sem10rs [nás vastos (podr:íamos decir
"'cósmicos,.). :De aUí que las relad i0n s con personas de dife
rentes gene·raciones a menudo, sean una amenaza para no o
tros y con fre,cuencia nos exijan tTiucho esfuerz,o. Tal vez
tengamo,s que enfrentar alguna clase de· dolor en el árnbito
indicado o alguna fonna de ansiedad cuando no,s desafían pa
ra que transformem · os nuestr-as actitudes; p,ero j como ,escribió
Jung, uLa consciencia n,o llega sin dolor'". .Algunos d noso
tros por supuesto, re, ciben de buen grado Wos desafíos y las
oportunidades para ap,r,ender de quie·nes tienen en Wa vida una
perspectiva cHferente y un mi0do marcadam ente distinto de
1
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viduo son siempre ]os mismos. Estas fuerzas esencia]es, o es.
ta dimensiones de la vida,, han ,existido en todos los seres hu
manos en todos Jo sigfos. Motivan diferent1e s orientaciones
en la vida ,consci,ente de un individuo aunque el grado en el
que e las admite en eJ e-onocimiento consciente depende en
gran rned.ida no sólo de la interrelación entf\e estos factores
dentro del individuo (simbolizados por Jo Ha pectos�') ino
también de las innuencias ambienta�es y las no,mas cultura 1
1 Cf. AstroiogirJ, Psicología y los Cuatro Elem,en tos� pág. 110, Ed�
Kie·r, S.A.� respecto de· un completo esbozo esquemático de los factores
personafes, oo]ectivus y t.ransperson.ales representados por los planetas.
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ta'S� el cambio erá más dificU de ºmanejar ,.
n
,osea que expe
rimentar,emos dificultad para dominar Wa situación; y pode-
1nos, ser abrumado· por estas fuerzas, pue·s l.o,s trans-saturni
nos simbolizan energías que son mucho más potentes que
cualquiera de ],os otros planetas. El poder die la voluntad y la
determinación solos nunca son uficient,es para. imponer-se a
estas e, nergías..
Por ejemp�o, si uno de los tr.an -satunünos está en aspecto
de cuadratu ra con otr.o planeta., estas fuerzas están r: eftídas en
tre sí. eoesariamente, algo tendrá. qu,e suced,er. A veces, po
dem . os resistir muy ]argo tiempo 1a creci nte presión para ,el
cambio; pero, a su tiempo .. Hegainos a advertir que tal resis
tencía es en efecto, resistencia a lo que nos haría n1ás totales
y, de esta mane ra., más. humanos. En consecuencia esta resis
tencia es en. última instancia, una autoderrota. Un ,eje,mplo
de semejante aspecto ut 1ensío11ado � en l m.aJp-a n�ta� aparece·
en el horóscopo de Mehe,r Baba, un maestro indio rever,enc.ia�
do por sus devotos como una en,camaición de .Dios. De hecho.
e,� mismo M,eher Baiba cu.ando We p,regu.ntaban si éW era dios
replicaba: "& ¿Quién n1ás ¡podría ser yo? H En ,el n"la.pai d,e Meher
,
Baba� encontramo,s al Sol eo la primera casa en aspecto de
cuadratura con una ,conjunción de Plutón y · eptuno ,en la.
cuarta ,casa. (La conjUD,ción de Plut6n- eptuno está también
en aspecto d, quincundo con 1� Luna en la novena casa.) Por
tanto ) el sentido de la identidad consciente (Sol� especialmen�
te fuerte en fa primera casa) en Meher 'Baba estaba en pugna
con las poderosas fuerzas r,epresen tad as por Plutón y eptu
no (en la cuarta casa las raíces fundamentales de nuestro
ser). Con semejante gr,an en r,gía. genera.da n est,e aspect,o
tens.o� algo tuvo que du. Lo que udio n fue el senUdo, de ser
un eofe individua] y separado� En co,nsecuencía el factor Sol
se convirtió, en un canal a travé del cual podrían manifestarse
fas fuerzas mayores. La Luna e convirtió (simbáiU,carnente)
en un factor para �a diseminación y la focalizaci6n de estas
fuerzas. Si comprend,emos que . e,ptuno sim boliza > en parte'!
Wa consciencia "mística", y que Plutón re presenta un renaci
miento espiritual potencia�� tenemos la c�avc simbólica d,e]
género de ener_gías cósmicas que se manffestaron a través de
este gran maestro,. Las po,siciones de ,casa d,e] S,ol y de la Lu
na (los, canaJ,es a través de los cuales estas fuerzas funciona-
1'9
ron) reve,Jan n que an1 , tro de .la vida se manifestaron taile ,
influencia . � SoJ en la prin1era casa (la casai d �a id,entidad)
es un ímbolo, apto para quien se identifica tan completame,n
te o:n el poder creador de la vida. La Luna en la novena casa
(la a de la religión y ]a bú, queda de ma v rd�d) proporciona
un ,ímbolo de , un ma,e tllio, e pwrituaL
E t,e ,ejemplo demuestra cómo �os trans-satu rnino, d,e un
n1apa natal se ha111 de interpretar. La focalización de los c , am
bios de nuestra vida1, de,bida a ]a p,m¡,esión de fuerzas mayofíes
'-qu , de ean� manifestarse, podrá seffaWar e examinando Jo
7
8ú
más pcnetrant es y de mayor alcance d todos; y sus efectos
1 1e
Uta'no
mo muy destructivo.
Me,diante tránsito ., Urano �nterrum1pe lo vi1ejo y revo]ucio
na muestro rnodo de ser n e] ámbito indicado. Tra vastos
cambios que tienen el efecto d reorganizar (a menudo, de- =
sorganizando al principio) nue tra consciencia a fin de pemrili-
tir que e pr,oduzca un nu vo crecimiento. Psico�ógkam nte"
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estaHa n lai consciencia en forma de, cuai]qui r id.ea, senU
·mien· to y c-0nocimiento que fuera subliminal o sea pr,eclsa
mente debajo de� umbral de la conscie·ncia. Por tanto� sus
trá.n itos son e·n, mi_gos d represión de· cualquier índole .. Si
un individuo estuvo, viviendo de manera reprimida, un modo
de vida en el ,qu, estuvi ron bloqueado descuidados o igno
rado . los elen1 entos vita le - de su natural,eza� es casi seguro
que un trá. n. ito d,e Urano po,r oonju:nción, cuadratura u oposi
ción a uno de los p�an, tas personale, s traerá. a la ·superficie,
c,on gran inmediatez, una int,ensa confrontación con estas par
tes de fa naturaleza de la persona. Urano acelera siemp,re el
rit1no de Ja naturaleza; y por ende, el individuo que exper-i
me:nta uno de e f,o tránsitos ,está a menudo tenso� excitable�
inquieto e impulsado porj u1r1 abrumador deseo de cambio y li
bertad. Urano. ,en su me or forma, es el gran füberador, el des
pertad,or,. el iluminador que Jev�nta ,con tal intensidad la vida
interna y externa de la persona que, de aUí en adelante, las
cosas nunca on la mis.mas. .te planeta puede pare,. erse a
la mito,�ógica figurra de Promet,eo quien robó el fuego de �os
dioses y d sta n1anera p ermitió ,que los, ser, s humallOS, ex
1e 1
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drá resuUar de tal desafio es a menudo .mucho mayor q_ue la
que se ganaría ·tirando lo viejo -y saltando excit.adamente den
tro de lo, nuevo y lo diferente. Por supuesto,, esto no es nega.r
que a veces es necesaria u ma r evolu,cíó.n total o u.na repolariza
ción en algún ámbito d,e la vid.a.
En muc'hos casos, la influencia, de Urano podrá d•efinirse
cuJtu.r.almen t,e, pues Urano comienza. donde t,ennina Saturno�
Saturno seft ala la fr,o,nt,er.a de la consciencia de] ego personal,
simbolizando .las normas y r,eglas culturales y colectivas (una
clase d,e ' .. super-ego"' cultural en ténn mos fJie , udianos ). Satur
g
no es,,, pues, JiÍido y contraído. Urano, por ,el otro l�do, esta•
llai a través de 1estai vieja estructura con impulsos J\evo,1uciona
rios,; y· la .rigidez de la frontera ·saturnina habitualmence hace
que se raj,e y rompa en pedazos. Las manifestaciones psi,coló
,gicas d,e fuerzas uranianas ,como 1as que experimenta e� indivi
duo no, sólo son comp,ren.sibles, sino también hasta vigorizan
tes, de fa, mente que está abierta hacia lo nuevo. En �ai an'tigua
asttrolo,gía, aJ p]an-eta Mercurio se lo conocía como el mensa•
jero de los dioses térmmo q , ue suena muy parecido a la des"
cripci6n que hace Rudllyar de los planetas 'trans-sa:tumino,s
u
como �"embajadores de la galaxiai � Merc , ur io se asociaba en
tonces con la facu�tad ,creativa en. los seres humanos. for su
puesto, �os anUguos astrb.togos t hasta do,nde sabemos., no, co
nocían la existencia de UraJilo. Empero,, muchos alquimistas
estaban al tan to de una runció n creativa más pro funda (o
más elevada) que el nivel de la me:n te racional, que es el ,si,gni
ficado _pdimordial de Mercurio en la asts,ología moderna. Es
tors alquimistas, asociaban esta actividad creativa con e:l signifi
cado oculto de Mer,curio como e� unificador de lo:S o,puestos.
Desde nuestra perspectiva modema ll' bien. podríamos pregun
tamos si se .fe'fe·rían .a la función d,e Urano pero no ten .ían tal
·símbolo planetario para expresar lo que experimentaban, Es
ta hipótesis pa_,ece la má·s p robable bajo la luz de] hecho de
,que numerosos astrólogos modernos están ahora afirmando
que, en contrast,e con la antigua versión griega de la exaJta�
ción y dignidad de Mercurio, en Virgo, la exaUacib,n d,e Me·r
curio debe considerarse que está en A,cuario, el signo de
Urano.
Dane Rudhyar en su profundo e inspirador libro titulado
Triptycb '" se refiere a Uran,o como ""e·I c, reativo poder del espJ-
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