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signadas por la impronta neoliberal y adoptando, según el caso, diversas denominaciones, tales

como: Educación Basada en Competencias (EBC), Educación Basada en Normas de Competencias


(EBNC), o Formación Basada en Competencias (FBC). Sea cual fuera la denominación utilizada, se
buscó reconocer y certificar las competencias obtenidas no solo mediante procesos formativos,
sino también capitalizar los saberes adquiridos en otros ámbitos, como el de la experiencia
profesional. Para los sistemas for- mativos, esto implicó una múltiple transformación: curricular,
del modelo de gestión institucional y de la formación del personal responsable (instruc- tores,
facilitadores, docentes, técnicos, supervisores, etc.). Cada administra- ción educativa y de trabajo
ha definido el concepto con sus particularidades pero, en el año 2005, es cuando en el seno de OIT
se acuerda una nueva recomendación (R195 OIT), en la cual se define que el término competen-
cia abarca los conocimientos, aptitudes profesionales y el saber hacer que se dominan y aplican en
contextos específicos». (Briasco, 2010)12. Competencias básicas o competencias clave Como
hemos mencionado, las competencias incluyen un conjunto de sa- beres (saber hacer, saber estar,
saber conocer, saber estar con otros) que son específicos de cada actividad, pero algunos de estos
saberes necesarios serán transversales y abarcarán a más de una tarea o disciplina. Son
consideradas competencias básicas aquellas que todas las personas preci- san para su realización y
desarrollo personal, así como para una ciudadanía activa, para la inclusión social y para el empleo.
Estas competencias básicas o competen- cias clave deberían haber sido desarrolladas al llegar al
final de la enseñanza o formación obligatoria y deberían constituir la base para el aprendizaje a lo
largo de la vida. En este sentido, el desarrollo de las competencias básicas constituye el sentido de
la escolarización en tanto que la formación no puede concebirse exclusivamente como la
adquisición de un conjunto de conocimientos de dife- rentes ámbitos disciplinares, sino que hay
que tener en cuenta la capacidad de utilizar los aprendizajes adquiridos para afrontar las
situaciones nuevas que se plantean cotidianamente en la vida adulta (Tiana Ferrer, 2012). Es
importante resaltar que, si bien puede acordarse un conjunto de compe- tencias básicas
generales, los diferentes organismos internacionales y los dife- rentes países las han ido
adoptando a lo largo del tiempo. Por este motivo, es 12 Briasco, I. (2010). «Implementación de
sistemas de competencias para la acción y lec- ciones aprendidas». Boletín Nº 5, Junio 2010. OEI-
IDIE: Alfabetización y educación permanente.

Briasco, I. (2016). El desafío de emprender en el siglo XXI: herramientas para desarrollar la


competencia emprendedora. Madrid, Spain: Narcea Ediciones. Recuperado de
https://elibro.net/es/ereader/biblioibero/46214?page=23.

posible encontrar diferencias en la selección de competencias básicas y sus co- rrespondientes


indicadores entre los países o las instituciones consideradas de referencia en la temática13. A
modo de ejemplo, incluimos la selección de competencias clave conside- radas por la Organización
para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE) y por la Unión Europea (UE). Es interesante analizar las
diferencias y las coincidencias presentes en los manuales y guías didácticas de ambos organismos.
✓ CompetenCias Clave para la oCDe (proyeCto DeseCo) • Actuar con autonomía: – actuar
dentro de una perspectiva global, – para definir y llevar a cabo planes y proyectos personales, –
para afirmar y defender derechos, intereses, límites y necesidades. • Habilidad para utilizar de
forma interactiva: – la lengua, los símbolos y los textos, – el conocimiento y la información, – la
tecnología. • Interactuar en grupos heterogéneos: – relacionarse bien con otros, – cooperar con
otros, – manejar y resolver conflictos. ✓ CompetenCias Clave para la Ue (reComenDaCión 2006)
Comunicación •  Comunicación en la lengua materna. •  Comunicación en lenguas extranjeras. • 
Competencia matemática y competencias básicas en ciencia y tecnología. •  Competencia digital
13 tiana Ferrer, A. (2012) Presentación: Las competencias básicas en la educación: el desarro- llo
de la iniciativa y el emprendimiento. OEI. República Dominicana.

Briasco, I. (2016). El desafío de emprender en el siglo XXI: herramientas para desarrollar la


competencia emprendedora. Madrid, Spain: Narcea Ediciones. Recuperado de
https://elibro.net/es/ereader/biblioibero/46214?page=24.

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