… Módulo 6

… Técnicas de Maquillaje

… Aplicación de correctores claros y

oscuros
Cuando se aplica maquillaje a la piel y se sellan las bases o sombras, es normal
que la piel luzca un poco opaca y antinatural. Lo deseado al maquillar es que la
piel tenga un brillo muy lindo, para lo cual existen técnicas específicas que indican
dónde colocar luz y sombras. Existen correctores uno o dos tonos más claros que
la piel que se utilizan para marcar o afinar las zonas que deben verse más
pronunciadas. Los correctores uno o dos tonos más oscuros sirven para hacer un
contorno y dar forma al rostro según convenga.

Los correctores claros se

aplican en zonas como el
tabique de la nariz,
mientras que el oscuro
se coloca a los lados del
tabique; de esta forma la
nariz lucirá más
perfilada. En la frente
también se pueden
aplicar estos correctores;
el corrector oscuro se
coloca en la zona que
pretendamos que no se
note tanto, y el claro lo usamos como foco para dirigir la atención hacia esa zona.
Así mismo, podemos aplicar estos tonos claros en los pómulos y los oscuros en la
parte baja para disminuir el tamaño de las mejillas y disimular la mandíbula. Todo
depende de la morfología del rostro y las correcciones necesarias.
… Aplicación de rubor e iluminador
el tono del rubor es un tema delicado y es directamente proporcional al tono de la
piel. Una guía sencilla e infalible es ver los tonos de las venas en las muñecas del
cliente. Hay dos tipos de piel que se distinguen no por su color, sino su calidez: las
pieles cálidas y las pieles frías. Se diferencian por venas color verdoso o azulado
respectivamente. Es la guía para la aplicación del rubor.

Pieles cálidas

Les favorecen los rubores en tonos durazno oscuro, naranja, rosa fuerte, terracota
y tonos hacia el marrón.
… Pieles frías

Tienden a ser muy blancas y deben usar rubores como durazno claro, rosa pálido
y coral suave.
En cuanto a la aplicación del rubor, se utiliza una brocha ancha y suave,
preferiblemente biselada. Se aplica el producto en la zona de los pómulos. Si la
persona tiene una cara delgada, se aplica desde la parte frontal de la mejilla hacia
la oreja. Si es de una cara redonda, se debe aplicar en forma de línea inclinada en
la parte vacía bajo el pómulo hacia la sien. Con práctica y analizando bien el
rostro, se identifica dónde necesita el color y la profundidad.
Adicionalmente, disponemos del iluminador. Éste se aplica con el pincel con forma
de abanico o con una brocha gruesa, suave, pequeña y redonda. Aplicarlo en
partes donde se quiera iluminar(aunque no pegue el sol) y sobre el pómulo, bajo el
arco de la ceja, en el tabique y punta de la nariz, y, por último, en el arco de
Cupido de la boca. Éstas son las zonas más comunes y depende del estilo y tipo
de maquillaje.
… Diseño de labios y sus efectos:
1. Primero colocar un polvo translúcido sobre los labios para así lograr que el
labial colocado dure un poco más.
2. Proceder con un corrector claro y un pincel para delinear los labios por la
parte externa; ello dará luz y hará que los labios se vean un poco más
definidos.
3. Aunque se aplique un solo color de base, es ideal jugar con luces y
sombras para dar volumen al labio. Si aplicamos un color base, podemos
utilizar un tono más claro para colocarlo en el arco o triángulo del labio y en
el labio inferior para darle más volumen; todo esto depende de la forma de
los labios. Hay que recordar que aplicaremos el tono claro donde queramos
que se vea más grande y los tonos oscuros donde queramos que se vea
menos voluminoso.
4. Por último, sellamos el labial con algún polvo translúcido si es un labial
pastoso. Si es mate, este paso no es necesario.
5. Se puede colocar un poco de vaselina en los dientes, de esta manera los
protegemos de manchas si el tono de labial es muy fuerte. Si el borde de
los labios está irregular, podemos utilizar corrector con un pincel y delinear
mejor los labios, así quedara más prolijo el trabajo.