Está en la página 1de 9

Ensayo del libro Homo Ludens.

Laura Marcela Socha López.

Octubre 2020.

Corporación Universitaria Minuto de Dios.

Zipaquirá.

Fundamentos del Desarrollo Motor y el Juego.


Homo Ludens.

Johan Huizinga autor de este libro a lo largo de su interpretación se pregunta

sobre la relación que existe entre el juego y la cultura; a través de este da su definición

respecto al juego, pero también explica que es y que reglas hay que tener en cuenta. Al

principio es un poco complicado comprender el concepto de juego, ya que para cada

persona puede ser algo racional, sin embargo cuando uno se encuentra con las diferentes

ideas y criterios que tienen distintas culturas hacia el concepto del “juego” no existe algo

determinado quedando así la posibilidad de más definiciones según la época.

Los capítulos que se tratan en Homo Ludens son los siguientes:

1. Esencia y significación del juego como fenómeno cultural:

En este primer capítulo el autor dice que el juego es bastante viejo que la misma

cultura, puesto que los animales juegan antes de que el juego existiera, como menciona

el autor “no han esperado a que el hombre les enseñara a jugar” (Huizinga, Homo

Ludens, 1954, pág. 11), además ellos mismos en su momento crean sus propias reglas

tanto así, que cuando uno observa como juegan dan a entender que lo disfrutan bastante.

Por esta razón el juego “es ya algo más que un fenómeno meramente fisiológico o una

reacción psíquica condiciona de modo puramente fisiológico”. (Huizinga, Homo

Ludens, 1954, págs. 11 – 12)

Lo que es la psicología y la fisiología ciencias que se encargan de examinar y

explicar el juego que tienen los animales, los niños y los adultos, para así asignarle un

lugar esencial en el plan de vida de cada ser vivo, porque en realidad el juego abarca

tanto el mundo animal como el mundo humano, Johan Huizinga describe que “todo lo

abstracto se puede negar sea la belleza, el espíritu, entre otros, pero el juego no se puede

negar” (Huizinga, Homo Ludens, 1954, pág. 14) porque con este a través del actuar nos
lleva a conocer lo espiritual y racional de cada ser, ya que cada individuo juega y sabe a

qué juega.

Más allá de los distintos significados que tiene “el juego” se puede evidenciar

que el juego llega a ser serio en el caso de jugadores de fútbol o de ajedrez, aun así

también puede ser lúdico en el caso de los niños, ya que es importante y necesario

vincular de algún modo la risa en el juego.

En este capítulo el autor menciona que el juego tiene tres características, la

principal es que este es libre, por ejemplo en el momento que “el niño y el animal juegan

porque encuentran gusto en ello” (Huizinga, Homo Ludens, 1954, pág. 20), y en esto

consistirá la libertad en el juego, por eso de acuerdo a esta se relaciona la segunda

característica donde dice que “El juego no es la vida” (Huizinga, Homo Ludens, 1954,

pág. 21) sino que consiste en escaparse de ella, el juego puede absorber por completo al

jugador, pero este también llega a su límite respecto a lo serio, por esta razón “como

actividad sacra el juego puede servir para el bienestar del grupo, aun así este debe

apartarse de la vida corriente por su lugar y por su duración”. (Huizinga, Homo Ludens,

1954, pág. 22). La tercera característica la constituye la limitación, en el momento que

se juega a partir de un límite tanto de tiempo como espacio, mientras se tiene la

posibilidad de jugar existe movimiento, emociones y distintas actitudes del individuo

pero como bien lo explica Johan; “respecto a esta limitación que existe se crea otra

característica que es inmediatamente el juego cobra su sólida estructura como forma

cultural” (Huizinga, Homo Ludens, 1954, pág. 23)

2. El concepto de juego y sus expresiones en el lenguaje:

En el anterior capitulo se ha habla del juego como algo que ya conocemos y que

se intenta analizar. Hay que aclarar que no es la ciencia, si no es el lenguaje el que da


origen, tanto a la palabra como al concepto, es decir casi todos los lenguajes que existen

en el mundo. Como en el caso del mundo griego que el agón, “muestra todas las

características formales del juego y pertenece, en virtud de su función.”(Huizinga, Homo

Ludens, 1954, pág. 49) en cambio La porfía, “se convirtió en una función cultural tan

intensa para los griegos que ya no se sentía como juego” (Huizinga, Homo Ludens,

1954, pág. 49) y de igual forma existen distintos términos que definirán ya sea un tipo de

juego o una función de este.

La palabra más importante en la cultura china “parece ser wan, ya que es en la

que prevalecen las ideas del juego infantil” (Huizinga, Homo Ludens, 1954, pág. 50) y

así el chino emplea palabras para cada uno de los juegos, como por ejemplo, “Koami que

sirve para todos los juegos infantiles.” (Huizinga, Homo Ludens, 1954, pág. 51)

En latín, “ludus, ludere abarca el juego infantil, el recreo, la competición y la

representación litúrgica y también teatral de los juegos de azar”. (Huizinga, Homo

Ludens, 1954, pág. 55) Ya en los idiomas europeos este concepto abarca en un campo

mucho más grande y amplio, por eso a lo largo de estos dos capítulos se “ha señalado

que la palabra jugar servirá también como significado de una limitada libertad de

movimientos”. (Huizinga, Homo Ludens, 1954, pág. 57)

3. Juego de competición, función creadora de cultura:

En este capítulo se quiere demostrar que la cultura es importante en el juego, si

no que la cultura nace jugando y que “en este juego la comunidad expresa su

interpretación de la vida y del mundo” (Huizinga, Homo Ludens, 1954, pág. 67) es

decir, en el momento que se habla de la cultura de algún país, nombrando sus diferentes

caracteres que la componen y la hacen ser. El término “Frobenius en su cultura africana


habla del devenir de la cultura como un juego surgido de ser natural”. (Huizinga, Homo

Ludens, 1954, pág. 68)

La conexión que habrá entre cultura y juego debera de buscarse de acuerdo a las

formas superiores del juego social, porque este tiene entre sus rasgos comunes ofrecer

un carácter antitético.

Dentro de “las características generales del juego en este tercer capítulo se

designa la tensión y la incertidumbre” (Huizinga, Homo Ludens, 1954, pág. 69), esto es,

que cuando el juego presenta más nivel o dificultad, hace que la tensión de los

espectadores sea mayor, en cambio cuando este demuestra su bello espectáculo se le da

su valor para la cultura, en otros términos “el espectáculo sagrado y la fiesta agonal son

las dos formas universales en las que la cultura surge dentro del juego”. (Huizinga,

Homo Ludens, 1954, pág. 70)

El desenlace y el concepto de ganar en el juego o en una competencia no solo

guarda una estrecha relación sino que también es muy relevante e importante para los

jugadores, espectadores, oyentes y muchos más, cabe recalcar que cuando se logra el

éxito se transmite esa emoción al grupo, así que “no se juega por una retribución, pero se

trabaja por ella.” (Huizinga, Homo Ludens, 1954, pág. 73) Por esta razón, es muy

necesario que desde la vida infantil se trabaje o de alguna forma se enseñen estos

conceptos, porque esta etapa es la más poderosa para conseguir el perfeccionamiento de

cada uno de los individuos, etapa que será el punto de arranque para implementar

diversas formas lúdicas.

4. El juego y el derecho:

En este capítulo para empezar se puede establecer una relación entre el derecho y

el juego, a través del término porfía “quien dice porfía también juego”. (Huizinga,
Homo Ludens, 1954, pág. 104) Este concepto se puede observar desde el plano de la

administración de la justicia que se ubica en una corte el cual es un círculo sagrado, en

cambio el tribunal es un círculo mágico.

“La contienda jurídica se considera como un juego de azar pero también como

una carrera o una pugna de palabras” (Huizinga, Homo Ludens, 1954, pág. 106), y esta

es una de las características que enlaza la relación entre el derecho y el juego, otra es que

a partir del “elemento de ganancia y lúdico que destaca más en el momento que nos

pongamos en una conciencia jurídica más primitiva” (Huizinga, Homo Ludens, 1954,

pág. 106) donde se habla de la fuerza física que existe y presentamos una decisión frente

a las manos de Dios o según respecto a las reglas del juego.

Así que, en este capítulo el autor da a entender que la justicia más que una

competición, forma de carrera o apuesta; es una intención que se manifiesta de una

forma lúdica.

5. El juego y la guerra.

En este capítulo ya se le ha denominado al juego como lucha, es decir que

cualquier lucha que se presente según las reglas limitadas del juego que se muestre de

una forma intensa, enérgica y clara; con la lucha los niños y los animales buscan

divertirse de acuerdo a reglas que limiten la violencia un ejemplo son los torneos

medievales donde era algo sangriento y se combatía hasta morir.

La guerra hasta hace poco se consideraba como función cultural, pero en formas

arcaicas esta ya está ligada más a un carácter lúdico, según el texto “se puede evidenciar

que lo que nosotros como seres humanos llamamos en la actualidad como “derechos” en

forma arcaica significa voluntad de los dioses”. Además en este capítulo la lucha forma

de un procedimiento judicial, donde se llega a considerar a esta como una adivinación.


Entre otras cosas las reglas y límites que existían solo serían respetados con aquel

que fuera igual a su oponente, esto no ocurriría si fueran bárbaros o inferiores. Cabe

aclarar “que todas esas costumbres de tipo ceremonioso y ritual, que se nos transmitían

de regiones distantes, se manifestaría como un origen de la primitiva esfera agonal,

donde coexistían de manera indiferente el juego y la lucha, la justicia y el echar de las

suertes” (Huizinga, Homo Ludens, 1954, pág. 129)

Por esta razón Johan Huizinga a lo largo de este capítulo, intenta describir lo que

significó para el los códigos de honor, costumbres, caballerías, torneos, distintas

actividades durante la Edad Media y es aquí cuando más se ha evidenciado la conexión

que existe entre la cultura y el juego.

6. El juego y el saber.

En esta parte del texto, ya habla más sobre la competición y el empeño que existe

por ser el primero en cada juegos y diferentes culturas; dándose en distintas

posibilidades de formas que brinda la sociedad. También en este se explica como a

través de las diferentes competencias culturales se lleva a cabo el juego, en plan de que

primero se encuentran los límites temporales y especiales, luego aparecen las reglas a

llevar acabo y por último, como uno de verdad se llega a meter en el juego tanto que

queda como un uso habitual de la vida.

La extraordinaria uniformidad que reina en la cultura y el juego, además se

menciona que si hay porfía en el derecho o las guerras esta no existirá en el saber.

En este se menciona sobre lo que cada dios creía, por ejemplo hoy en día los

niños preguntan quién hace tronar, como se creó el mundo, etc. y a veces los adultos se

pueden encontrar con respuestas enredadas o contradictorias pero la idea es comprender

que lo más importante es el carácter lúdico.


Para los arcaicos “el saber” era algo fundamental, mágico y misterio, en pocas

palabras lo mejor.

En este capítulo se habla sobre el nacimiento del pensamiento filosófico como un

juego “sacro y competitivo” a través de este se lleva a cabo la sabiduría como una

habilidad especifica donde se juega no por diversión si no como un culto sacrifica torio

que es esencial, o sea el problema que entra acá es prácticamente que cuando se

entablaba una conversación no se generaba una respuesta coherente si no se referían más

a algo “sacro” (consagrado o dedicado a un culto).

Finalmente, los enigmas poseen un carácter sagrado, peligroso, mortal y esencial

solo dentro de las márgenes del juego lúdico y por esta razón nace la cultura, siendo esto

muy importante ya que la idea de que el juego del saber permite a la cultura que esta se

constituya de una forma lúdica. (Huizinga, 1954, págs. 137 - 152)

7. Juego y poesía.

En este capítulo se habla de la creación poética que es el punto central para

conectar el juego con la cultura así como se mencionaba en el anterior capitulo

manteniendo un carácter lúdico en el tiempo. En esta parte del texto entra la poesía

como juego y lúdica.

En la fabulación mítica que se puede encontrar en los inicios del cuestionamiento

sobre la existencia es donde la poesía toma posesión y a través del tiempo es cuando

estas expresiones empiezan a formarse ya con un sentido lógico y de aquí nace la

filosofía, ciencia, teología, y muchas más es decir todo lo que tenga un sentido.

A lo largo de este se habla de la poesía como núcleo de la fe primitiva donde

prácticamente en su inicio todo giraba en torno a la poesía es decir todo era poesía,

quitándonos la idea que esta reduce una cuestión puramente estética que es el concepto
que tiene actualmente el ser humano. La poesía es un uso arcaico como primitivo, siendo

reflejo de una función vital y social.

Cabe destacar que antes de todo el proceso judicial, la poesía, y los juegos

sociales estaba la primitiva competición.

Para finalizar la poesía es mera satisfacción estética y lo primordial está

prácticamente en el juego mismo, es decir como un fundamento espiritual supremo de la

expresión de las cuestiones altas de la sociedad, así que todo lo que es poesía surge en el

juego. (Huizinga, Homo Ludens, 1954, págs. 153 - 173)

Como conclusión general del libro, pienso que Homo Ludens se caracteriza por

ser un buen texto y de lectura fácil de comprender, claro que en algunos momentos se

encuentran algunos conceptos difícil de entender a la primera, pero con la mayoría de los

ejemplos que menciona a lo largo logra llegar a un distintas definiciones sobre el juego,

porque en el momento que el ser humano juega se libera pero también aprende, en pocas

palabra Homo Ludens hace sentir al lector con libertad y conocimiento, además con este

se conoce la personalidad y carácter de la sociedad.

Referencia: Huizinga, J. (1954 ). Homo Ludens . Madrid: Alianza Editorial .

También podría gustarte