Está en la página 1de 3

INSTITUCIÓN EDUCATIVA RURAL DEPARTAMENTAL EL SALITRE

SEDES EL SALITRE, EL HATO, EL LIBANO, Y FRAILEJONAL


Resolución de Integración N.º 004552 del 29 de diciembre de 2004;
Resolución de Reconocimiento Oficial N.º 7100 del 27 de septiembre de 2016
DANE: 225377000163 NIT: 900008766-4

Nombres y apellidos del estudiante: _________________________________ Grado: __Once__

Docente: Jesús Bonilla__________________________ Duración: 2 horas semanales. Área: Filosofía ____

Objetivo: Analizar y reflexionar sobre los afectos humanos a partir de la lectura de las
obras platónicas sugeridas
Indicadores de desempeño: Distingue y caracteriza el amor entendido como eros y como philos
Criterios de evaluación Lee y se apropia de un discurso sobre el amor para exponerlo a sus
compañeros.
Eje temático: Heidegger y el estudio del ser
Conéctate y pregunta Correo electrónico del profesor: jesusbonillat@gmail.com
durante tu trabajo Código para la plataforma Google Classroom: 4oesua5

El amor y la filosofía
¿Qué es el amor?

De todos los sentimientos y reacciones humanas, el amor es el que ocupa la posición número uno en las
preocupaciones. Esto es cierto si con esa palabra entendemos una amplia variedad de afectos: el amor de
amigos, el amor de padres, la admiración por alguien, el amor al arte, a la sabiduría, el amor a Dios y, desde
luego, el amor de pareja. En la filosofía no ha sido un tema aparte, no podía ser para menos si es que la
entendemos como la respuesta natural a las inquietudes propiamente humanas. Dentro de los posibles
autores estudiaremos a Platón por ser uno de los referentes principales y por ser el autor de maravillosos
libros que motivan a amantes y ajenos a la filosofía.

En los diálogos platónicos el tema de los afectos humanos se aborda desde dos términos
que dividen en dos categorías el sentimiento y los tipos de relaciones sociales, estos son:
“eros” y “philia”. Es decir, amor erótico y amistad. Mientas que “philia” tiene un campo
de aplicación bastante amplio y puede incluir los afectos de distintos tipos de relaciones
filiales y fraternales, “eros” se encuentra referido a la atracción sexual.

La distinción entre estos sentimientos se da manera natural incluso en nuestros días donde
es claro que el tipo de relación establecida con una pareja sentimental es distinto a la que
se establece propiamente con un amigo. Sin embargo, la cercanía entre estos afectos puede
ser tan evidente como su distinción. Nosotros intentaremos estudiar la concepción de estas
dos formas de afecto a fin de poder motivar la reflexión más profunda de lo que estos
significan para nuestra vida.
¿qué es la amistad?
En un dialogo llamado Lisis Sócrates aborda la cuestión de la amistad directamente. Los
personajes que en él intervienen permiten entre ver desde el primer momento
diferencias fundamentales entre eros y philia: Hipotales se encuentra enamorado de
Lisis y su sentimiento le hace comportarse de manera ridícula (205d), mientras que la
amistad entre Lisis y su primo Menéxeno se presenta ejemplar. El dialogo nos presenta
una rica concepción de la amistad, la cual podemos dividir en tres partes:

1.El conocimiento y la utilidad nos hace mejores amigos.


Lisis es un Joven como tú, al cuidado de los padres, estudiante de filosofía y muy bello. Sócrates le pregunta
sobre el amor de sus padres: si ellos lo quieren tanto deberían desear lo mejor para él y sin embargo limitan
sus capacidades ¿Por qué lo hacen? Lisis lo reconoce de inmediato: tales prohibiciones no significan una falta
de afecto sino el resultado de la ausencia de experiencia del muchacho en muchos asuntos. El afecto entonces
se vincula al conocimiento (que condiciona el cuidado de los padres) y no a las concesiones o placeres que los
progenitores puedan darle. A manera de lección Sócrates le enseña al muchacho que la falta de conocimiento
nos hace esclavos de los demás y por tanto infelices. El conocimiento nos proporciona así gobierno propio y
nos hace útiles para otros. Esta utilidad, condicionará la amistad posible entre extraños y parientes porque las
personas buscan hacerse amigos de los que son útiles y buenos (210d).

Aclaremos un poco más la idea, la amistad surge en la utilidad, pues buscamos amigos en la medida que con
ellos podemos apoyarnos en el colegio, en el juego o en otras actividades. Lo mismo sucede con los familiares
(así sea difícil aceptarlo) la amistad se hace más fuertes cuando la otra persona me proporciona alegría, buenos
consejos, diversión o compañía.

2.toda amistad es una relación recíproca


Al ser la amistad una relación social y política fundada en la utilidad, la relación tiene que ser recíproca. Platón
ve que las supuestas amistades en un solo sentido son tan absurdas debido que, si una de las dos partes no
corresponde a la amistad, en realidad es un enemigo y ser amigo de un enemigo es una contradicción. Por
otro lado, una relación de este tipo es tan absurda como entablar amistada con un objeto inanimado.

3. No hay amistad entre malos


Si el vínculo entre amigos es la utilidad, las personas deben procurar tener cualidades
que sean provechosas entre amigos. Sin embargo, dice Sócrates, las cualidades
negativas resultan perjudiciales y no sirven para fortalecer las amistades. Dos ladrones
pueden tener una relación de utilidad, pero esta no puede evolucionar a la amistad si
las cualidades de los sujetos incluyen la traición, el engaño o el egoísmo. Las personas
que cultivan estas cualidades no tienen amistades duraderas.

Quizá el concepto de utilidad en la amistad te lleve a pensar en una concepción bastante cruda de las
relaciones filiales. Sin embargo, es importante aclara que Sócrates pone la mistad dentro del conjunto de
afectos en los que el objeto es querido por sí mismo. Un padre no quiere a su hijo como quiere una vasija, lo
quiere por su utilidad, pero esta utilidad está encarnada en el mismo sujeto. En palabras más simples: el padre
no ama el orgullo sino el que su hijo lo enorgullezca.

¿Qué es el amor entre parejas?


Eros tiene un lugar privilegiado comparado con la philia. En primer lugar, para la cultura griega el amor es un
dios, lo que lo pone de plano en una categoría de afecto excelsa. En efecto, el enamoramiento es por
naturaleza la experiencia más aguda e importante para nosotros, de allí que su intensidad bien puede
compararse con una experiencia religiosa. Puede señalarse que gran parte de las composiciones artísticas
bellas tiene como objeto la divinidad o la persona amada. Quizá las dos apreciaciones estéticas comparten un
mismo principio.

El dialogo por excelencia estudiado para este tipo de amor es El Banquete. En este libro, participan personas
de diferentes posiciones que pronuncian discursos sobre el amor, también incluye escenas que permiten
visualizar la mundanidad del sentimiento como deseo y su carácter divino como aspiración a la eternidad, la
belleza y la sabiduría. De manera que, aunque eros pertenezca en buena medida a la esfera divina, es cierto
también que el amor es responsable de sufrimientos, decepciones y vergüenzas. Una buena descripción del
amor tiene por tanto que incluir su inseparable polaridad.

Después de escuchar los discursos sobre el amor de las personas


presentes, Sócrates confiesa que sabe todo sobre el amor debido
a las enseñanzas que en su juventud le proporcional la sacerdotisa
Diotima. Lo primero que señala es que eros no puede ser un dios
sino algo intermedio, pues su naturaleza es el deseo y solo se
desea lo que se carece. Se trata entonces de un Daemon hijo del
dios Poros y la mortal Penia (202b). De Penia Eros hereda la
pobreza. El amor es carente del bien, la belleza y la sabiduría. Pero
esta ausencia le permite configurarse siempre como un deseo por
lo mejor, un deseo que bien puede compararse con el ansia que Aristófanes describe entre los enamorados
que busca su otra mitad (192e). A su vez, tal descripción del amor corresponde con un principio que Platón
cree natural en el hombre: la búsqueda del bien.

Aterricemos un poco las ideas anteriores. Reconocemos que el amor (erótico) nos eleva y nos conecta con las
ideas más excelsas: la belleza, la sabiduría, el bien, etc. ¿acaso no son esas cosas las que empezamos a ver en
la persona de la que nos enamoramos? Podríamos decir que el amor es por excelencia una exaltación del otro,
que aparece ante nuestros ojos con un aura de divinidad. Pero es también deseo y carencia, no sentimos
vacíos y deseamos esas bondades vistas en la otra persona.

Platón advierte que existen niveles en este deseo: en primer lugar, nos atraen los cuerpos bellos, luego
aprendemos a atender la belleza en los sentimientos y acciones, de allí pasamos a la inteligencia que nos hace
amar el conocimiento (son las personas sapiosexuales). Por último, llegamos a la contemplación del bien en
las virtudes y la sabiduría.

Aquí irrumpe en el dialogo Alcibíades borracho que, al querer encontrar diversión erótica con estos mayores,
se encuentra con Sócrates y no puede hacer más que elogiar su sabiduría. A pesar de que sus intenciones eran
escabullirse bajo el manto con Sócrates, su maestro le convence del verdadero amor, el que se dirige a las
cosas más divinas que aspiramos mediante la actividad de conocer. La filosofía es pues una actividad erótica
(erosofía) que desea lo verdadero e intangible (recuerda la noción de idea platónica), pero que no lo puede
alcanzar debido a que quienes la practican son mortales. Este es pues el concepto del amor platónico: una
búsqueda siempre insatisfecha de la divinidad que se expresa en la actividad constante del filosofar.

Actividades
Presenta en la próxima clase una exposición sobre uno de los siguientes discursos: Fedro, Pausinas, Eriximaco,
Aristófanes y Agatón. (programa una actividad de exposición en vídeo si realizas esta guía fuera del tiempo
estipulado)

También podría gustarte