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Recuerdo en mi infancia, cuando una buena caligrafía y una lectura fluida era lo más importante

y valorado por mis maestros/as. Los cuadernos Rubio y sus interminables repeticiones así como
la lectura en voz alta al resto de la clase, era algo que me aburría bastante aunque no por ello
fuese necesario.
Hoy día, con la infinidad de recursos tecnológicos a nuestro alcance, estas actividades están
perdiendo adeptos en beneficio de realizar una lectura comprensiva además de una escritura
creativa, es decir, se parten de situaciones reales que necesiten de la lectura y escritura para
poder desarrollarlas, implicando al alumnado en un proceso motivador y contextualizado, en el
que el aprendizaje será de forma natural.
Recuerdo en mi infancia, cuando una buena caligrafía y una lectura fluida era lo más importante
y valorado por mis maestros/as. Los cuadernos Rubio y sus interminables repeticiones así como
la lectura en voz alta al resto de la clase, era algo que me aburría bastante aunque no por ello
fuese necesario.
Hoy día, con la infinidad de recursos tecnológicos a nuestro alcance, estas actividades están
perdiendo adeptos en beneficio de realizar una lectura comprensiva además de una escritura
creativa, es decir, se parten de situaciones reales que necesiten de la lectura y escritura para
poder desarrollarlas, implicando al alumnado en un proceso motivador y contextualizado, en el
que el aprendizaje será de forma natural.
Recuerdo en mi infancia, cuando una buena caligrafía y una lectura fluida era lo más importante
y valorado por mis maestros/as. Los cuadernos Rubio y sus interminables repeticiones así como
la lectura en voz alta al resto de la clase, era algo que me aburría bastante aunque no por ello
fuese necesario.
Hoy día, con la infinidad de recursos tecnológicos a nuestro alcance, estas actividades están
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creativa, es decir, se parten de situaciones reales que necesiten de la lectura y escritura para
poder desarrollarlas, implicando al alumnado en un proceso motivador y contextualizado, en el
que el aprendizaje será de forma natural.
Recuerdo en mi infancia, cuando una buena caligrafía y una lectura fluida era lo más importante
y valorado por mis maestros/as. Los cuadernos Rubio y sus interminables repeticiones así como
la lectura en voz alta al resto de la clase, era algo que me aburría bastante aunque no por ello
fuese necesario.
Hoy día, con la infinidad de recursos tecnológicos a nuestro alcance, estas actividades están
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poder desarrollarlas, implicando al alumnado en un proceso motivador y contextualizado, en el
que el aprendizaje será de forma natural.
Recuerdo en mi infancia, cuando una buena caligrafía y una lectura fluida era lo más importante
y valorado por mis maestros/as. Los cuadernos Rubio y sus interminables repeticiones así como
la lectura en voz alta al resto de la clase, era algo que me aburría bastante aunque no por ello
fuese necesario.
Hoy día, con la infinidad de recursos tecnológicos a nuestro alcance, estas actividades están
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creativa, es decir, se parten de situaciones reales que necesiten de la lectura y escritura para
poder desarrollarlas, implicando al alumnado en un proceso motivador y contextualizado, en el
que el aprendizaje será de forma natural.
Recuerdo en mi infancia, cuando una buena caligrafía y una lectura fluida era lo más importante
y valorado por mis maestros/as. Los cuadernos Rubio y sus interminables repeticiones así como
la lectura en voz alta al resto de la clase, era algo que me aburría bastante aunque no por ello
fuese necesario.
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creativa, es decir, se parten de situaciones reales que necesiten de la lectura y escritura para
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fuese necesario.
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fuese necesario.
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poder desarrollarlas, implicando al alumnado en un proceso motivador y contextualizado, en el
que el aprendizaje será de forma natural.
Recuerdo en mi infancia, cuando una buena caligrafía y una lectura fluida era lo más importante
y valorado por mis maestros/as. Los cuadernos Rubio y sus interminables repeticiones así como
la lectura en voz alta al resto de la clase, era algo que me aburría bastante aunque no por ello
fuese necesario.
Hoy día, con la infinidad de recursos tecnológicos a nuestro alcance, estas actividades están
perdiendo adeptos en beneficio de realizar una lectura comprensiva además de una escritura
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