AMÉRICA LATINA DESPUÉS DE LA INDEPENDENCIA

 
Los países de Latinoamérica lograron su independencia entre 1811 y
1828 (la actual Argentina, seguramente recordarán, fue en 1816). Luego de la
independencia comenzaron a producirse serios desacuerdos económicos y
políticos  entre los sectores dominantes, que desencadenaron largas guerras
civiles (es decir entre la población de un mismo territorio).Tenían que organizar
el país y eso implicaba enfrentamientos acerca de cómo hacerlo.

Los principales conflictos económicos enfrentaron a los partidarios del

LIBRE COMERCIO con los partidarios del PROTECCIONISMO. Al mismo
tiempo, surgieron claras diferencias políticas  entre unitarios y federales.

A partir de su independencia, la mayoría de los países latinoamericanos,

instauró un régimen de libre comercio, basado en el intercambio de productos
con el exterior. Se favorecían los comerciantes criollos. Pero se perjudicaban
los productores y artesanos locales, quienes comenzaron a reclamar
protección para sus productos, es decir eran partidarios del proteccionismo.

En países como Argentina, Uruguay y Brasil, el principal conflicto se

desarrolló entre unitarios o centralistas y federales.
 Los unitarios pretendían organizar un Estado centralizado, donde la
capital tuviera atribuciones para decidir sobre las provincias.

Los federales aceptaban la existencia de un gobierno central, pero

reclamaban la autonomía  provincial de modo que cada provincia redactara su
propia Constitución y designase a sus autoridades.

Durante estos enfrentamientos, se destacaron los caudillos, líderes y

dirigentes naturales de los distintos territorios provinciales, que defendían
causas propias y de los pobladores que los seguían y confiaban en ellos.
 A partir de 1819, se inició en el territorio del Río de la Plata, un período
de guerra entre unitarios y federales. En 1835 triunfa la postura federal y Juan
Manuel de Rosas estableció una confederación con autonomía para las
provincias. Durante la Confederación rosista (1835-1852), Buenos Aires se
afianzó como la provincia política y económicamente más influyente. Comienza
aquí otro período de la historia argentina que veremos más adelante...