Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
más rápido
Este artículo fue redactado y avalado por el psicólogo Francisco Pérez
16Compartidos
Quizá hayas sentido que no progresas cuando estás
estudiando. Puede que alguna vez te hayas preguntado por qué tu ritmo de
aprendizaje es tan lento o incluso, te has desesperado tras varios intentos fallidos
a la hora de memorizar el significado de un concepto. Retener información en
nuestra mente a veces no es tan sencillo.
Para ayudarte en este aspecto, te presentamos la técnica Feynman, una
estrategia simple y eficiente para adquirir nuevos conocimientos de
forma mas rápida y profunda. Sigue leyendo para descubrir en qué consiste.
«Si no puedes explicar algo de forma sencilla es que ni tú mismo lo has entendido
lo suficiente».
-Albert Einstein-
-Richard Feyman-
¿En qué consiste la técnica Feynman?
La técnica Feynman fue explicada por su biógrafo James Gleick en el
libro Genius: The Life Science of Richard Feynman . Utilizando esta técnica
cualquier persona puede adquirir nuevos conocimientos de manera eficiente si se
lo propone. De hecho, también es una poderosa herramienta de
estudio para preparar cualquier examen.
«Lo que no puedo crear, no lo entiendo».
-Richard Feynman-
-Richard Feynman-
Primer paso
Para empezar, hay que coger una hoja de papel y escribir en su parte
superior el nombre del concepto que estamos estudiando. Por
ejemplo, si estamos estudiando el teorema de Pitágoras deberíamos escribirlo en
la parte superior del folio o papel.
Segundo paso
Una vez escrito el concepto, hay que describirlo con nuestras propias
palabras y utilizando un lenguaje sencillo, como si se lo
estuviéramos explicando a otra persona.
Si seguimos con el ejemplo del teorema de Pitágoras, tendríamos que escribir algo
así «en un triángulos rectángulo, el cuadrado de la hipotenusa es igual a la suma
de los cuadrados de los catetos».
Tercer paso
El tercer paso consiste en revisar todo lo que hemos escrito con el
objetivo de identificar aquellas partes que no están perfectamente
explicadas, que son confusas o que no están bien redactadas. Para ello,
podemos volver a nuestros apuntes o incluso buscar nueva información al
respecto. También es de utilidad utilizar ejemplos que refuercen el conocimiento.
«Aprende a resolver todos los problemas que ya hayan sido resueltos».
-Richard Feynman-
Cuarto paso
El último paso consiste en realizar una última revisión de lo escrito. Así, si
hemos utilizado un lenguaje demasiado complejo podemos
reescribir el texto para hacerlo más simple e inteligible. Para ello,
podemos utilizar metáforas o analogías. Lo importante es asegurarnos que el
discurso puede ser entendido por cualquier persona.
Si después de seguir estos sencillos cuatro pasos, nuestra explicación sigue sin
entenderse puede ser que no hayamos comprendido del todo bien lo que hemos
estudiado. En este caso, deberíamos empezar el proceso de nuevo.