RAMÓN ARTEMIO SORIA
Nació en La Rioja el 15 de febrero de 1928.
Retrato a carbonilla de Soriarealizado por Molina Pedro. 1955
La Rioja 1928 - 1963
En su taller
Don Estanislao Guzmán Loza, Ramón Artemio Soria,
Dr. Carlos Vallejo y Nicolás Rivera
Luego de cursar sus estudios primarios en la Escuela Normal
“Dr. Pedro Ignacio de Castro Barros” y secundarios en el
Colegio Nacional “Joaquín V. González”, ingresa en 1948 a la
Escuela Provincial de Bellas Artes “José Figueroa Alcorta”, en
Córdoba.
En 1953 se integra en Córdoba al grupo “Seis pintores jóvenes”
junto a Eduardo Giusiano, Celso Amici, Domingo Roque
Menseguez, Norberto Cresta y Carlos Zárate. Con ellos expone
en Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, Buenos Aires y La Rioja.
Graduado como Profesor Superior de Dibujo y Pintura, regresa
en 1955 a La Rioja, ejerciendo la docencia en la Escuela
Técnica Nº 1, en la Escuela Normal y el Colegio Nacional y
funda el primer taller libre de dibujo y pintura en la Dirección
de Cultura de la provincia.
Por aquellos tiempos se vincula también al Grupo Calíbar con
quien, en 1958, impulsa la creación del Instituto de Profesorado
Superior en Artes Plásticas y se desempeña como miembro del
Consejo Editorial de Estado hasta el año 1963.
Entre los premios que obtuvo a lo largo de su corta pero
intensa carrera, se cuentan:
· El primer premio de pintura en el “Salón de Vacaciones”
de alumnos de Bellas Artes en la ciudad de Córdoba, en 1949;
· El premio distinción en el “Salón de Otoño de artes
Plásticas” de La Rioja, en 1953;
· El segundo premio en Dibujo en el “VIII Salón de Artes
Plásticas de Villa María”, Córdoba, en 1953.
· El segundo premio de pintura del “XX Salón de Alumnos
de Bellas Artes” de Córdoba, en 1954;
· El tercer premio de pintura en el “XV Salón Nacional de
Artes Plásticas” de Tucumán, en 1955.
Falleció en La Rioja el 18 de Noviembre de 1.963.
RAMÓN SORIA Y LA UTOPÍA
El grupo Calíbar buscaba incorporar la modernidad que
se entreveía en los movimientos artísticos que
eclosionaban en México, Sâo Paulo y Buenos Aires y que
se irradiaban hacia las grandes capitales. Lo hacía con la
vocación de erigirse como referente de la vanguardia
cultural en la sociedad riojana.
Este concepto, que remitía a la proclamación de los
movimientos artísticos europeos de principios del siglo
XX por volver a unir el arte a la vida en el marco de un
clima social convulsionado por la guerra y sus
consecuencias, en América Latina se caracterizaría por la
búsqueda de reafirmación del ser americano frente a lo
europeo.
Estos lineamientos artísticos se harían claros en la corta
trayectoria de Ramón Artemio Soria, cuya obra pasó por
distintos momentos de búsqueda en los que se descubre
la influencia europea. 1 2 3

Así, según los diferentes momentos que atraviesa la

exploración del artista, se va develando el corte intimista
y de alta significancia de lo femenino, que remite unas 1 Estío 2 S/T
veces al Simbolismo, otras veces al grupo de los Nabis, Óleo s/tela Óleo s/tela
Año: 1955 Año:1955
otras al amaneramiento y deformación expresiva del
italiano Amadeo Modigliani, al Expresionismo, a
contenidos conceptuales del Cubismo o a la resolución
formal del Surrealismo. 3 S/T
Témpera s/papel
Esa es precisamente la magia que atrapa de Soria: la de Año:1955
haber sido un observante reflexivo de la realidad artística
internacional y adaptarla a la micro-realidad riojana, con
su particular manera de sentir e interpretar el mundo. 4 El Ángelus 5 S/T
Óleo s/tela Óleo s/tela
4 5 Año:1958 Año:1955
 S/T - Óleo s/tela S/T - Óleo s/hardboard S/T - Óleo s/hardboard Nostalgia - Óleo s/hardboard
Año:1954 Año:1953 Año:1958 Año en estudio

RAMÓN SORIA Y EL ANTICONSEVADURISMO PICTÓRICO

A “Ramón Artemio Soria, como a Edgardo Mario Aciar, le cabe también el calificativo auténtico de pionero.
(Él) contribuyó a consolidar la personalización de una estética de rasgos nuevos y fuertemente diferenciados.
”Calíbar” / auspició la traslación de la muestra del juvenil grupo cordobés denominado “Los seis” (que integraba Soria). Y esta fue una pica filosa, enfebrecida y
desorientadora / porque a partir de ese momento, aquí comenzó ya a entenderse / que, en la realidad del arte, lo aparencial era lo de menos.
Desde esa fecha / se entró a protagonizar una disputa que hasta hoy tiene alternativas irreconciliables; pero / la expresión es en este caso la directa beneficiaria
de esta contienda de ideas.
A Soria, por esta intervención tan decisiva, la posteridad habrá de conferirle / el laurel vivísimo de los innovadores.
Extracto de “Presencia y espíritu de la pintura riojana de hoy”, Cap. VIII, pp. 58-61.
Ariel Ferraro, 1962, Ed. Norte, La Rioja.