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Los lunares de Lia

A UTORA E I LUS TRADORA

Bernardita Muñoz Ch.


AUTORA E ILU ST RADO RA

Bernardita Muñoz Ch.


Me llamo Lía, tengo ocho años y
veintitrés lunares.

¡Te apuesto a que nunca has contado


cuántos lunares tienes tú!

Yo tampoco me había fijado en ellos,


hasta que me pasó algo que ahora voy
a contar.
Pelusa79
Hace poco, unos compañeros de curso me
empezaron a molestar. Gritaban “Lía tiene una mosca
en la cara” y cosas así. Al principio yo traté de no
hacerles caso... pero no me resultó
Dejar de escuchar es muy difícil.

A punto de ponerme a llorar,


salí corriendo de la sala.

.
Por la tarde, cuando mi mamá
me preguntó cómo me había ido
en el colegio, le dije que mal,
por culpa de mis lunares.

-¡Daría cualquier cosa por arrancármelos!


Son feos y solo sirven para que a uno
la molesten.
Pelusa79

Salimos al patio y me dijo:

Pero
- Lía, me dijo sorprendida,

los lunares son parte de nuestra herencia

familiar.

¿Ves ese lunar que tengo en la espalda?

Tú tienes uno muy parecido en el mismo

lugar. Es una marca para que siempre

recuerdes que yo soy tu mamá, y que te


quiero mucho.

Nos quedamos abrazadas y después de un

rato, se me pasó la pena.


Así me di cuenta de que algunos de mis
familiares tienen los mismos lunares
que yo. Por ejemplo, el lunar que tengo
en el cuello también lo tiene Max, mi tío
preferido.
Pelusa79

Mi prima Elisa tiene uno igual


al que yo tengo arriba del ombligo...
tal vez por eso somos tan amigas.
Mi lunar de la oreja es parecido
al que tiene mi papá,
aunque el mío se confundió de lado.

Pero, ¿de dónde salió el lunar que


tengo en la mejilla, o el
de la palma de mi mano?
Pelusa79
Pelusa79
Al otro día, conversando con Lucas, le pregunté si
sabía cómo nacían
los lunares. El es mi amigo y sabe
muchas cosas.

Aparecen en los bebés en el lugar


en donde una mujer embarazada se rasca
durante una noche de luna llena - me dijo.

-Pero yo creía que uno los heredaba -le dije.


-Bueno, seguramente son las dos cosas.
¿Por eso la palabra “luna”
se parece a “lunar”?,
¿será cierto lo que dijo Lucas?

Lo único que sé,


es que cuando descubrí que

algunos lunares son solo míos, me sentí


especial.

Pelusa79
Pelusa79
Días después, sucedió algo inesperado.
Cuando me volvieron a molestar,
en vez de sentir vergüenza,
• me dieron ganas de cantar y bailar.
Mis compañeros me miraron asombrados
y nunca más han vuelto a molestarme.
Así comprobé que mis lunares
no solo me hacen diferente al resto,
sino que también me dan personalidad.

Si uno quiere a sus lunares,


ellos relucen como estrellas en la piel.
Pelusa79
Bernardita Muñoz Chereaü (Santiago de Chile,
1975) es Psicóloga Educacional de la
Pontificia Universidad Católica de Chile y
Magíster en Educación por la Universidad
de Londres. Vive en Santiago junto a su
marido y su pequeña hija. Juntos pasan
tardes enteras leyendo, escribiendo,
conversando y bailando al ritmo de la
música. Bernardita intenta plasmar en sus
libros las emociones, los aprendizajes y
desafíos que significan acompañar a los
niños en su crecimiento.

'juegos • actividades

www.recreallbros.cl

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