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LA HONDURAS QUE ANHELAMOS

Somos conscientes de la realidad que Honduras está viviendo, a pesar de esta


situación se tiene la esperanza de mejores condiciones de vida. Teniendo en cuenta
que ver un país transformado implica un cambio de mentalidad a nivel personal y de
esa manera ir permeando en los lugares donde uno se desenvuelva en la familia,
trabajo y en el ámbito educativo etc.

Soñamos con una Honduras donde las instituciones públicas estén siendo dirigidas
por personas que tengan las competencias y habilidades necesarias para
desenvolverse el cargo asignado, desde el presidente hasta las personas con cargos
más pequeños. Educación de calidad que trasmita: conocimientos, valores,
costumbres, comportamientos y actitudes que tanto necesitamos como seres
humanos para poder apreciar y poner en práctica en nuestro diario vivir, ser agentes
de cambio ciudadanos comprometidos y participativos para la sociedad.

Un sistema de salud que tenga condiciones dignas para sus ciudadanos, que no tengan
que pasar más muertes por no tener los insumos y materiales adecuados para atender
las distintas necesidades. Hospitales, clínicas y dispensarios médicos en las diferentes
zonas del país, que no todo este centralizado en la ciudad ya que muchas personas no
tienen los recursos necesarios para poderse movilizar desde sus pueblos, aldeas y que
por eso mueran.

Economía estable con oportunidades de empleo para sus pobladores así no tener que
salir del país buscando mejores condiciones de vida en otros países donde somos
explotados, marginados y maltratados. Que la violencia cese, que ya no se escuche
tanta muerte y menos que sea de jóvenes, es increíble como la misma población joven
es la que es utilizada y manipulada para acciones negativas, por eso es necesario un
cambio en nuestra Honduras, que los políticos ya no se arropen con la cobija de la
corrupción y que todo ciudadano puedan ser transparentes. Para lograr la Honduras
antes descrita es necesario que se defiendan, respeten y se promuevan los derechos
humanos de cada ciudadano y que este cumpla con sus deberás solo así podremos
vivir en un país en paz y una Honduras transformada. ¡Digamos no a la violencia y
gritemos si a la paz!.

Wilson Aníbal Martínez Cantarero


Caritas de Honduras
Jóvenes Artesanos de la Paz

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