EL MUSEO CELESTIAL

Había una vez una chica que tenía el anhelo de visitar el museo celestial, pero
sólo la gente importante lograba ingresar, ella no podía esperar a ver lo magnífico
que podría ser, aunque tenía el plan perfecto para presenciar en aquel museo.
Su decisión ya estaba tomada, incluso su plan iba bien, estaba a punto de lograrlo,
sin embargo los guardas de seguridad la lograron ver y la aprisionaron, la
sometieron a una investigación bastante escalofriante, estaba muy nerviosa y
confundida, ellos no lograban entenderla, lo único que pudo hacer fue recitar un
poema de su autoría mientras ellos se ahogan en gritos, pero pararon para oírlo y
quedaron encantados, dijeron tan magnífico como este lugar.
Finalmente comprendieron el amor que tenía por el arte y no sólo eso, le
ofrecieron el lugar de guía turístico en el museo celestial y como es de esperarse
terminó aceptando y ahí fue el momento donde dijo: soñar no cuesta nada.