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I. PRETENSION IMPUGNATORIA
Que, dentro del plazo de Ley, se interpone el recurso impugnatorio de apelación contra la
Resolución Nº 03, de fecha 22 de junio del 2020, notificado por whatsapp en fecha 25 de junio
del 2020, por el que se declara infundado la solicitud de variación de la prisión preventiva de
FRANCISCA MAMANI FLORES, en el proceso que se le sigue, por el delito contra la vida, el
cuerpo y la salud, en su modalidad de homicidio en su forma de homicidio calificado; para que la
Sala Penal de Apelaciones REVOQUE la recurrida, y reformándola DECLARE FUNDADO la
solicitud de reforma del MANDATO DE PRISION PREVENTIVA POR LA MEDIDA DE
COMPARECENCIA CON RESTRICCIONES, a favor de la imputada FRANCISCA MAMANI
FLORES. En mérito a los siguientes fundamentos:
DE LOS ANTECEDENTES:
2.1.- Que, mediante escrito de fecha 07 de mayo del 2020, Doña Francisca Mamani Flores
solicitó la reforma de la prisión preventiva por la medida de comparecencia con restricciones,
cuyo petitorio planteó de la siguiente forma:
“Que, en mérito a lo dispuesto por el artículo 255 inciso 3, y el artículo 287º del Código Procesal Penal, SE
SOLICITA REFORMAR EL MANDATO DE PRISION PREVENTIVA POR LA MEDIDA DE
COMPARECENCIA CON RESTRICCIONES, a favor de la imputada FRANCISCA MAMANI FLORES, en
el proceso penal que se le sigue por la presunta comisión del delito contra la Vida, el Cuerpo y la Salud, en
su modalidad de Homicidio, en su forma de Asesinato, previsto y sancionado en los numerales 1, 3 y 4 del
artículo 108 del Código Penal, y como tipo base lo previsto por el artículo 106 del acotado código, en
agravio de Sabino Turpo Quispe, esto en aplicación del principio de humanidad, a efectos de cautelar el
derecho a la vida y salud de la solicitante frente a la pandemia de COVID 19; consecuentemente se
IMPONGA, a criterio de su despacho, reglas de conducta establecidas en el artículo 288 del Código
Procesal Penal; y, se ORDENE su excarcelación del establecimiento penitenciario de Lampa”.
De este pedido, la solicitante invoca el artículo 255, inciso 3 del Código Procesal Penal, el mismo
que prevé: “3. (…) corresponde al Ministerio Público y al imputado solicitar al Juez la reforma,
revocatoria o sustitución de las medidas de carácter personal, quien resolverá en el plazo de
tres días, previa audiencia con citación de las partes”.
2.2. La solicitante invocó, entre otras normas de carácter nacional e internacional en materia de
derechos humanos, fundamentalmente la Resolución Administrativa Nº 000138-2020-CE-PJ, de
fecha 07 de mayo del 2020, del Consejo Ejecutivo del Poder Judicial, que aprobó “la Directiva de
medidas urgentes con motivo de la pandemia COVID 19, para evaluar y dictar, si correspondiere
la reforma y cesación de la prisión preventiva”. Así se tiene en su fundamento 2.21 de su escrito:
2.3. Por otra parte, la solicitante en su escrito fundamenta sobre el peligro procesal y el principio
de proporcionalidad, presupuestos que han variado a la fecha de su interposición de la solicitud.
2.4. Mediante Decreto Legislativo Nº 1513, publicada el 04 de junio del 2020 en el diario Oficial
“El Peruano”, - luego de 20 días aproximadamente de haberse presentado la solicitud de
variación – se establece disposiciones de carácter excepcional para el deshacinamiento de
establecimientos penitenciarios y centros juveniles por riesgo de contagio de virus COVID-19,
norma legal que tiene por finalidad la de impactar positivamente en el deshacinamiento de la
población penitenciaria y de centros juveniles a nivel nacional, para preservar la integridad,
vida y salud de las personas internas en establecimientos penitenciarios y centros
juveniles, y de manera indirecta, la vida e integridad de los servidores que trabajan en estos
centros, y de la ciudadanía en general. Dicho de otra forma, se busca preservar la vida y salud,
no solo de los internos que tengan la posibilidad de salir, sino también de los que se quedan, así
como de los trabajadores, al deshacinar los establecimientos penitenciarios.
2.5. El decreto antes citado, es de aplicación inmediata, incluso a los procedimientos que se
encuentran en trámite, por lo que, la solicitud de reforma incoada por Francisca Mamani Flores,
debe de resolverse conforme al artículo 3º del Decreto Legislativo Nº 1513 en concordancia con
los numerales 2 y 3 del artículo 255 del Código Procesal Penal.
2.6. Pues bien, el artículo 3º del Decreto Legislativo N° 1513, su horizonte se proyecta a las
prisiones preventivas vinculadas a los delitos que no se encuentran dentro de la relación a los
que corresponde la cesación obligatoria prevista en el artículo 2º del mismo cuerpo normativo.
Para dichos delitos se les ha denominado “revisión de oficio de la prisión preventiva”; sin
embargo, dado que es el juez quien insta la audiencia para debatir los requisitos de la cesación
de la prisión preventiva, bien puede denominarse “cesación de oficio”, comprendiendo al término
de “cesación” no como resultado, sino como actividad de revisión de sus presupuestos en
audiencia.
En consecuencia, la solicitud de variación debió haberse resuelto bajo los parámetros invocados
en dicha petición, en concordancia con el Decreto Legislativo 1513. Sin embargo, la A quo no
fundamento su decisión bajo ese marco.
1
Véase <https://www.paho.org/per/index.php?option=com_content&view=article&id=4506:r
ecomendaciones&Itemid=0>.
2
Sentencia del Tribunal Constitucional del expediente N° 05436-2014-PHC/TC, del 4 de junio
del 2020.
penitenciarios para proteger la vida y salud de los internos y personal del INPE. Así se tiene el
razonamiento en los fundamentos 5.3 y 5.4 de la recurrida:
“5.3. (…) se debe señalar que para la finalidad de la variación del mandato de prisión
preventiva, o si es que se habla específicamente de la cesación de prisión preventiva,
tiene como eje la nota característica de variabilidad a partir de nuevos elementos de
convicción en relación a los presupuesto materiales de la prisión preventiva, es decir se
requiere una nueva evaluación, pero en base a presencia de nuevos elementos que
deberán ser legítimamente aportados por parte de la solicitante, elementos que deben
incidir en la modificación de la situación pre existente y con ello en la posibilidad de la
aplicación”.
Así entendida por la Magistrada, nos encontraríamos concretamente ante la figura propia de una
solicitud de Cesación de Prisión Preventiva, regulada por el artículo 283 del Código Procesal
Penal, que establece en su numeral 3 lo siguiente: “La cesación de la medida procederá cuando
nuevos elementos de convicción demuestren que no concurren los motivos que determinaron su
imposición y resulte necesario sustituirla por la medida de comparecencia. Para la determinación
de la medida sustitutiva el Juez tendrá en consideración, adicionalmente, las características
personales del imputado, el tiempo transcurrido desde la privación de libertad y el estado de la
causa”. Al respecto, la solicitud no es una de Cesación de Prisión Preventiva, sino una reforma
de la medida de prisión preventiva por el de comparecencia restringida, por la presencia del
estado de cosas inconstitucionales y la presencia de la pandemia COVID 19, conforme a lo
previsto por los numerales 2 y 3 del artículo 155 del Código Procesal Penal, en concordancia con
la Resolución Administrativa Nº 000138-2020-CE-PJ del Consejo Ejecutivo del Poder Judicial
[D) otro factor será si el interno procesado está por cumplir el plazo de prisión
preventiva o si ya se encuentra bajo la prolongación de prisión preventiva] y el literal a)
del numeral 3.2 del artículo 3º del Decreto Legislativo 1513 [El procesado o la procesada
cuenten con un plazo de prisión preventiva ampliada una o más veces, sin fecha programada y
notificada para el inicio de juicio oral]. De modo que, la valoración debió de haberse hecho no
necesariamente con nuevos elementos de convicción, sino reevaluar el presupuesto de peligro
procesal en función a los argumentos esgrimidos en la solicitud de reforma, así como los
fundamentos que aparecen sobre el principio de proporcionalidad que sustentan la variación;
además con la concurrencia de la normatividad antes invocada.
2.9. Para efectos de análisis del presupuesto de peligro procesal, se ha ofrecido como medio
probatorio la resolución que declara fundada la prisión preventiva, en cuyo contenido se hace
referencia al arraigo de la solicitante, concretamente en su fundamento sexto, en la parte
pertinente, señala: “se ha presentado una notificación se puede verificar que se considera como
parte a Francisca Mamani Flores esto en un proceso de alimentos que se realiza en el Juzgado
de Juliaca, obra copia simple; una constancia de estudios donde se puede verificar que Denilson
Trujillo Mamani cursa sus estudios en la Institucion Educativa Nº 70606 de la Urb. San Francisco
de la ciudad de Juliaca de fecha 22 de junio del 2015; constancia de estudios expedida a favor
de Flor de Liz Trujillo Mamani, consta que estudia el segundo grado C de la Institucion Educativa
Nº 70606 de la Urb. San Francisco de la ciudad de Juliaca, en copia certificada; constancia
emitida por el Director de la Institución Politécnico de la ciudad de Juliaca, hace constar que
Gualberto Trujillo Mamani está matriculado en el quinto grado de educación secundaria; obra en
copia certificada un acta de nacimiento donde se puede verificar a Francisca Mamani Flores que
es madre del menor F.L.A.T.M. de igual forma se puede verificar un acta de nacimiento de los
menores de iniciales V.TM. y W.T.M. donde se tiene como madre a Francisca Mamani Flores; de
igual forma a anexado un par de fotografías donde se puede observar domicilios con techo de
calamina y paja material rústico; un certificado expedido por el alcalde Ricardo Flores Hilasaca el
cual acreditaría que esta tiene su domicilio en Lusuni del distrito de Sina, provincia de San
Antonio de Putina, en original”; al respecto, la solicitante a la fecha de su detención si contaba
con los arraigos domiciliario, familiar y laboral en su condición de pertenencia a una Comunidad
Campesina; dichos arraigos a la fecha no han variado. Por otra parte, la Sala Penal de
Apelaciones, en el Auto de Vista de fecha 19 de setiembre del 2017, admitió la concurrencia de
los arraigos de la solicitante, empero relativizó por la gravedad de la pena. En consecuencia, la
reforma debe de limitarse a la reevaluación del presupuesto del peligro procesal en función a los
elementos de convicción que en su momento se aportó, así como en función a los hechos
notorios (art. 156.2 del CPP) que se presentan en tiempos de COVID 19, los que constituyen
datos reales.
Entonces el plexo valorativo se debe efectuarse a partir de la finalidad del D.Leg. 1513, y la
reevaluación del presupuesto del peligro procesal y la ponderación de los bienes jurídicos
(proporcionalidad en sentido estricto), prefiriéndose el valor supremo LA VIDA no solo de la
solicitante sino de quienes se encuentran en el establecimiento penitenciario de Lampa.
Se aprecia varios errores de la Magistrada, pues es erróneo señalar que la presencia del COVID
19 no sea considerada como nuevo elemento de convicción para variar la medida de prisión
preventiva, sostener así es ignorar el D. Leg. Nº 1513. Por otra parte, pensar que la sola
existencia del COVID 19 no generaría automáticamente una variación de prisión preventiva, es
contradictoria a lo dispuesto por el artículo 2 del Decreto acotado, que prevé la cesación
obligatoria por delitos de mínima lesividad, en donde no hay la necesidad de evaluar la situación
de vulnerabilidad del preso preventivo ni su edad, es automático. También se incurre en grave
error, al exigirse a la solicitante la acreditación de lo previsto por los incisos 1 y 2 del artículo 290
del CPP referido a detención domiciliaria, que no forma parte de los fundamentos de la solicitud
de reforma.
Más allá de la falacia del argumento, lo que se invocó es la aplicación de los literales a), c) y d)
del numeral 3.2 del artículo 3º del D. Leg. Nº 1513, fundamentándose básicamente: A) “En el
caso concreto, la solicitante ha sido privado de su libertad desde el 21 de julio del 2017, y a la
fecha son 34 meses de prisión preventiva, venciendo los 36 meses el próximo julio del año en
curso sin opción a ampliarse. Por otra parte, el proceso se encuentra en la etapa intermedia, con
requerimiento de mixto, de sobreseimiento y acusación, lo que demandará un tiempo no menor
de dos meses dada la carga procesal que se tiene; posteriormente se llevará la siguiente etapa
que es el juicio oral, el mismo que demandará un tiempo adicional de dos meses como mínimo;
haciendo un total de 04 meses para obtener una sentencia en primera instancia. De modo que,
en el caso concreto, ante el pronto vencimiento del plazo de la prolongación de prisión
preventiva, corresponde declarar fundada la reforma solicitada, a efectos de priorizar la vida y la
salud de la solicitante frente a la presencia del COVID 19. Asimismo, la solicitante cuenta con un
plazo de prisión preventiva ampliada más de una vez, sin fecha programada y notificada para el
inicio de juicio oral”. B) “es un hecho notorio que al interior del establecimiento penal de Lampa,
dada el hacinamiento de reclusas, no podría dictarse ninguna medida que asegure el derecho a
la vida y salud de los solicitantes frente al riesgo que representa la presente pandemia; de modo
que, la única medida es sustituir la prisión preventiva por comparecencia con restricciones en el
caso concreto, lo que permite asegurar la vida y salud de las internas y prevenir el riesgo de
contagio y propagación del COVID 19 al interior del citado penal; asimismo, las propias normas
dictadas por el Poder Ejecutivo por el Estado de Emergencia, permiten disminuir el riesgo de
fuga”.
“5.7.- Al respecto, como hemos señalado en los considerandos anteriores dicho decreto
legislativo, tiene como fin impactar positivamente en el deshacinamiento de la población
penitenciaria y de centros juveniles a nivel nacional, para preservar la integridad, vida, y
salud de las personas internas en establecimientos penitenciarios y centros juveniles, y
de manera indirecta, la vida e integridad de los servidores que trabajan en estos centros,
y de la ciudadanía en general, cuyo requisito para acogerse, debe cumplir con lo
establecido en el artículo 2 de dicha norma, esto es, que cumplan con los siguientes
presupuestos de manera concurrente: 1.- No cuenten con medida de prisión preventiva
dictada en una investigación o proceso por cualquiera de los siguientes delitos regulados
en el código penal y leyes especiales(…) 2.- No cuenten con otro mandato de prisión
preventiva vigente por alguno de los delitos previstos en el numeral anterior o con
sentencia condenatoria con pena privativa de liberta efectiva vigente”.
2.13. A fin de no ser redundantes con los demás fundamentos de la recurrida, se tiene del
razonamiento 5.9, que señala, “que la solicitante no ha acreditado una situación de
vulnerabilidad, es decir, el solicitante no se encuentra en el grupo de personas vulnerables ni
tampoco tiene una enfermedad pre existente que pueda perjudicar su condición”; al respecto, la
solicitante la solicitante no invocó como causal de variación contar con una enfermedad, sino la
afectación del plazo razonable, y las demás razones antes referidos. De modo que, es errado
aquel fundamento de la Magistrada.
Constituye gravísimo error señalar que efectuando el reexamen del principio de proporcionalidad,
se prefiera salvaguardar los fines del proceso y la vida del agraviado frente a la libertad de la
solicitante; cuando en el escrito de variación se afirmó: “Finalmente sobre el sub principio de
proporcionalidad en sentido estricto, consiste en aplicar la ley de ponderación sobre la base
que “cuanto mayor es el grado de la no satisfacción o de la afectación de un principio, tanto
mayor tiene que ser la importancia de la satisfacción del otro”; y considerando que dada la
situación actual de pandemia por el brote del COVID-19 ya no nos encontramos sólo frente a la
ponderación entre la libertad ambulatoria y el deber y derecho del Estado de investigar y
sancionar los delitos (en este caso de especial gravedad), sino también, ha entrado a tallar los
derechos de salud y vida de la solicitante, que consideramos prevalecen; toda vez, si como
hemos indicado, se cumplen con los presupuestos normativos para una comparecencia con
restricciones previsto en el art. 288 CPP, y existen condiciones particulares en la imputada para
considerar que existe un peligro concreto para su salud y vida el continuar con mandato de
prisión preventiva. Además a ello, en este caso, considero que con las restricciones a imponerse,