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TALLER

REALISMO Y VANGUARDISMO EN COLOMBIA.

SONETO AL AMOR

Cuántas veces, amor, por retenerte


puse a tus pies mi juventud rendida.
Y cuántas a pesar de estar herida
te la volví a entregar por no perderte.

Cuántas veces también, altivo y fuerte,


por alcanzar la gracia prometida,
me batí frente a frente con la vida,
o me hallé cara a cara con la muerte.

Y hoy, cuando mi ilusión vuelve a tu lado


trayéndole al misterio de tu hechizo
la pluma azul del pájaro encantado,

torna otra vez a mi pupila el lloro


al mirar desde el puente levadizo
que está cerrado tu castillo de oro.

Autor: Alberto Ángel Montoya

SEREMOS TRISTES

Oye, seremos tristes, dulce señora mía.


Nadie sabrá el secreto de esta suave tristeza.
Tristes como ese valle que a oscurecer empieza,
tristes como el crepúsculo de una estación tardía.

Tendrá nuestra tristeza un poco de ufanía


no más, como ese leve carmín de tu belleza,
y juntos lloraremos, sin lágrimas, la alteza
de sueños que matamos estérilmente un día.

Oye, seremos tristes, con la tristeza vaga


de los parques lejanos, de las muertas ciudades,
de los puertos nocturnos cuyo faro se apaga.

Y así, bajo el otoño, tranquilamente unidos,


tú vivirás de nuevo tus viejas vanidades
y yo la gloria póstuma de mis triunfos perdidos.

Autor: Rafael Maya.

LA COSTURERA

Vida y lino lo mismo ata la hebra.


Une noche y aurora el pedal, de tope a tope.
Miseria, son las ocho, grita el reloj a los pobres de la tierra.
Una mujer en el silencio cose, cose, cose,
cumple mil años al volver la rueda.

Por el telégrafo del carrete


los telegramas del cansancio se detienen.
Mujer obrera, hecha de carne y llanto,
hecha de hambre, luz y manos
y de sudor, rocío del hierro.

Corre el trabajo, ferrocarril sin panorama;


hay hambre en el vientre y hay hambre en los ojos;
por el sudor el cuerpo llora en el silencio.

Kilómetros, en bloques y paquetes van las horas,


trenes monótonos y ciegos;
va el pedal al galope;
describe tu existencia la polea de cuero;
la traza el brillo de la vida en la rueda que gira...

La máquina de coser es un vampiro


y de tu corazón toma su fuerza.

Monotonía, monotonía, chirría la polea,


oyendo coser el ruido ya es recuerdo.

Tú tienes el cansancio, tienes la miseria,


el dolor cada día renovado,
el dolor antiguo que es un morado en tu vida.

Mujer obrera, la que aplancha,


la que remienda, la que cose; tres mujeres
y una sola. Remienda, cose, aplancha y canta,
canta la canción:

Mañana nueva del planeta;


la insurrección ya incendia el cielo;
hay una nueva estación...
Cinco son las estaciones de la tierra:
Verano, invierno, otoño, primavera, revolución.

Autor: Luis Vidales

1. Realiza una descripción de las mujeres a las que se hace referencia en los
poemas que leíste.
POEMA DESCRIPCIÓN DE LA MUJER
Soneto al amor

La costurera

2. A partir del poema La costurera, responde


- ¿Qué denuncia el poeta sobre la situación de la mujer?
- ¿A qué se refiere el poeta con la estación Revolución? Explique tu
respuesta
- ¿Consideras que la situación de la mujer colombiana se transformó en
el transcurso del siglo XX? Explica tu respuesta citando algunos
ejemplos.

3. A partir de las siguientes palabras de Felipe Lleras Camargo, escritas el 6


de junio de 1925, luego de leer la primera edición de la revista Los Nuevos,
explica el papel de los escritores jóvenes en la renovación literaria de
comienzo del siglo XX en Colombia.

“Los Nuevos, son jóvenes, lo que quiere decir que no persiguen logros de
ninguna especie. Pretenden levantar una cátedra de desinterés espiritual
y contribuir a desatar una corriente de carácter netamente ideológico en
el país (…) Los apetitos bastardos han desterrado el espíritu. Todo pide
una restauración de los principios. Hay que proclamar de nuevo la tabla
de los valores intelectuales y morales”.
4. Poema vanguardista.
5. Construye un texto vanguardista a partir de las palabras recortadas.

6. En el siguiente fragmento resalte de azul, los enunciados donde se


evidencie la invención de un mundo mítico.

“ Macondo era entonces una aldea de veinte casas de barro y cañabrava


construidas a la orilla de un río de aguas diáfanas que se precipitaban por un lecho
de piedras pulidas, blancas y enormes como huevos prehistóricos. El mundo era
tan reciente, que muchas cosas carecían de nombre, y para mencionarlas había
que señalarlas con el dedo. Todos los años, por el mes de marzo, una familia de
gitanos desarrapados plantaba su carpa cerca de la aldea, y con un grande
alboroto de pitos y timbales daban a conocer los nuevos inventos. Primero llevaron
el imán. Un gitano corpulento, de barba montaraz y manos de gorrión, que se
presentó con el nombre de Melquíades, hizo una truculenta demostración pública
de lo que él mismo llamaba la octava maravilla de los sabios alquimistas de
Macedonia”.

7. Resalte con amarillo, la descripción detallada que se evidencia en el párrafo.

“Lo único que se llevó Ursula fue un baúl con sus ropas de recién casada, unos pocos
útiles domésticos y el cofrecito con las piezas de oro que heredó de su padre. No se
trazaron un itinerario definido. Solamente procuraban viajar en sentido contrario al camino
de Riohacha para no dejar ningún rastro ni encontrar gente conocida. Fue un viaje
absurdo. A los catorce meses, con el estómago estragado por la carne de mico y el caldo
de culebras, Úrsula dio a luz un hijo con todas sus partes humanas. Había hecho la mitad
del camino en una hamaca colgada de un palo que dos hombres llevaban en hombros,
porque la hinchazón le desfiguró las piernas; y las varices se le reventaban como
burbujas”.

8. Elabore una producción que contenga elementos del realismo en Colombia.

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