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Criterio para un Análisis Espacial.

"Los valores y criterios estéticos son diferentes de cultura a cultura, siendo enriquecidos y
transformados por el uso de materiales y por el objeto al cual va a hacer destinado el
espacio arquitectónico, siendo estos valores, manifestaciones culturales que reflejan las
características de una sociedad que los sustentan."

Ernesto Velasco de León

Para poder hacer un análisis arquitectónico de los espacios dedicados al culto católico, es
necesario que éste se apoye en elementos teóricos arquitectónicos que le den validez y
soporte a este análisis y que éstos elementos arquitectónicos sean reconocidos por
nuestra comunidad.

Este estudio está apoyado en alguna de las recomendaciones puntuales que hace el Arq.
Enrique Yáñez,1 en su libro “Arquitectura, teoría, Diseño y Contexto”, donde se hace
algunas referencias a los valores estéticos y utilitarios que guarda una obra arquitectónica.

1
ENRIQUE YÁÑEZ Arquitectura, Teoría, Diseño, Contexto. Cap. 1.6 Los Valores Arquitectónicos. Editorial
Limusa S.A. de C.V. México D.F. 1996 pp. 58.
VALOR ARQUITECTÓNICO

Valores Componentes Factor de juicio Aspectos

UTILITARIO Espacios Áreas, Dimensiones y


Formas, Disposición General
Circulaciones y Nexos.

Clima Temperatura, Iluminación,


Ventilación.

Terreno Topografía, Accesos,


Espacios abiertos.

Construcción Sistema constructivo


Materiales.

Adaptabilidad Crecimiento.
Transformación.

ESTÉTICO
Conceptual espacial. Estímulos de la sensibilidad.
Proporción.
Unidad.
Carácter.
Originalidad.
Calidad de ejecución.
Congruencia cultural (estilo).
Factores de Evaluación Utilitaria.
Espacios:
Los espacios en la arquitectura se dividen en dos: espacio interior y espacio exterior. En el
análisis espacial, se analiza la forma en que el arquitecto logra la adecuación de su obra
arquitectónica en un contexto bien definido.

Los puntos que se toman a consideración para poder llegar a un análisis espacial correcto
son: áreas, dimensiones, formas y la disposición general que guardan las mismas así como la
forma en que estos se relacionan bajo diferentes contextos.

Clima:
Este rubro trata de cómo el arquitecto debe lograr el máximo aprovechamiento tanto de la
iluminación como de la ventilación.

Terreno:
En éste se revisa la forma en la que la obra arquitectónica se sitúa con una buena
adecuación a la topografía del terreno, así como la participación del conjunto arquitectónico
con su entorno urbano inmediato. Es decir, la conveniente relación del edificio con los
accesos respecto a las vías de comunicación, el aprovechamiento de los espacios abiertos,
como de los edificios ya existentes.

Construcción:
Sistemas Constructivos. En cuanto a las cualidades constructivas exigibles en el uso normal
de los edificios, muchas son las que podrían citarse: la eliminación de infiltraciones de agua
que dañan a la construcción así como a las instalaciones, así como la calidad de los
materiales al desgaste por el uso y el paso del tiempo.

Adaptabilidad:
Es la disposición del edificio que le permita un futuro crecimiento vertical y horizontal, en sí,
una transformación y disposición de los distintos espacios que conforman el edificio.
Economía:
Es la adecuación de los recursos disponibles en cada caso, lo cual depende, de la
procedencia y propiedad de éstos en el contexto económico social de donde se vaya a
empezar la obra.

Factores de Juicio Estético.


El juicio del valor estético de una obra arquitectónica está precedido de una primera
impresión de agrado o desagrado; por consiguiente, es de índole intuitiva y se sostiene o
se modifica después de haberla analizado, siempre que se esté cumpliendo con los
requerimientos utilizados. Con esta condición, será necesario analizar los aciertos o
desaciertos que la obra presente en los diversos aspectos formados empíricamente, en los
que el razonamiento lógico acompaña a la intuición.

Es difícil precisar, nos comenta el Arq. Enrique Yáñez, los aspectos por examinar desde el
punto de vista estético y establecer un ordenamiento entre ellos, ya que estos actúan
simultáneamente, por lo cual es necesario considerar los siguientes puntos: a) concepción
espacial, b) estímulos de la sensibilidad, c) proporción, d) unidad, e) carácter, f) calidad de
ejecución y g) congruencia cultural.

Concepción espacial:
Las obras arquitectónicas, con algunas excepciones, están constituidas por varios espacios
internos, entre los cuales algunos son los principales rectores del diseño. Así pues, el
análisis crítico de una obra arquitectónica tiene que dirigirse a las condiciones que presenta
el espacio, a fin de expresar o motivar los estados de ánimo acordes con el destino del
edificio; la forma volumétrica, las dimensiones de los espacios internos, como la solución
del espacio construido delimitante, son las características esenciales de una concepción
espacial. Los espacios exteriores perceptibles visualmente, son los que en lenguaje
ordinario se llaman fachadas, las cuales son las delimitantes de los espacios abiertos,
siendo estos en su mayoría de las obras, el medio sobresaliente de la expresión estética.
Estímulo de sensibilidad:
El sentimiento estético que suscitan las obras arquitectónicas, es un proceso psíquico que
origina estímulos que afectan principalmente la vista. Estos estímulos de la sensibilidad, en
la percepción de la obra arquitectónica con la luz, la calidad de los materiales, su textura y
el color. En la iluminación, la manera de proporcionar la luz ya sea ésta natural o artificial, la
primera impresión según los claros y la disposición de estos, la intensidad, color y
disposición, son recursos de importancia en la arquitectura. En cuanto a los materiales de
construcción, la acertada selección de ellos por cuanto a su influencia en el sentido
estético, constituyen rasgos característicos de la capacidad creativa del arquitecto.

Proporción:
Ésta se establecerá visualmente de una o varias formas:
a) Respecto a los objetos utilitarios.
b) En relación con su significación.
c) La relación entre las dimensiones de los elementos que conforman el conjunto
arquitectónico.

Unidad:
Es la cualidad que resulta de mantener un criterio congruente a la apariencia formal de un
edificio y en los materiales, texturas, colores que conforman el conjunto o el edificio
arquitectónico.

Carácter:
Toda obra deberá tener un significado que corresponda a los objetivos que la han
determinado, adquiriendo así un rango de simbología; el carácter general y la cualidad en
los espacios, son condicionados entre los sentimientos que generaron la obra
arquitectónica y con los objetivos básicos a que obedece su construcción.
Originalidad:
Es un valor del factor estético, cuando se tiene como respuesta a nuevas formas
arquitectónicas, lo contrario a la originalidad sucede cuando ésta no va acompañada de un
contenido nuevo y propio, es decir, las formas caprichosas e ilógicas en la arquitectura,
pero estos rasgos llenos de similitud, pudieran ser explicables dentro de ciertos límites.

Calidad de ejecución:
En este apartado, el Arquitecto comenta que la diferencia entre la que es simple
construcción y la que es arquitectura, es que en la primera, basta solamente con que
cumpla satisfactoriamente los requerimientos utilitarios, y la segunda se trata de materializar
la concepción del arquitecto, de manera que exista identidad entre las formas ideadas y
formas realizadas. Cabe mencionar que la calidad de ejecución que importa en el juicio de
valor estético, son los elementos visibles, no los que por su naturaleza quedan ocultos en la
construcción. La perfecta ejecución significa que las formas geométricas aparezcan sin
deformaciones, justamente de acuerdo a su concepto.

Congruencia Cultural:
Esta va enfocada a la tradición que se desprende de las manifestaciones culturales y
artísticas, congruencia con las características culturales que forma la manera de ser de los
usuarios, así como los que nos presentan un medio físico y urbano.

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