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E N C O N TAC TO

L E C T U R A S D I A R I A S PA R A U NA V I DA D EVO C I O NA L AG O ST O 2 02 0
LLEVE SUS PROMESAS
Si desea llevar las promesas de Dios en el corazón, las tarjetas de versículos para
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08
20 Palabras del Dr. Stanley

Ya sea que haya tenido una buena educación cristiana,


una infancia difícil o algo intermedio, cuando usted puso su fe
en Jesucristo se convirtió en el hijo de un Padre perfecto. Dios
quiere que “seamos imitadores de [Él], como hijos amados” (Ef
5.1). Eso puede sonar imposible, pero Cristo, el Hijo unigénito
y la imagen perfecta del Padre celestial, vive en cada creyente
y nos da el poder de andar como hijos amados del Rey.
Tengo la esperanza de que su tiempo devocional le muestre
lo que Cristo quiso decir con “Bienaventurados los pacifica-
dores, porque ellos serán llamados hijos de Dios” (Mt 5.9).
Que este sea un mes de paz en su corazón, tal como lo es en
FOTO POR COREY LACK PICTURES

la casa de su Padre celestial.

3 E N C O N TA C T O . O R G
E N C O N TAC T O
PRESIDENTE Y FUNDADOR Charles F. Stanley

DIRECTOR EJECUTIVO C. Phillip Bowen

DIRECTOR GENERAL DE Tom Sabonis-Chafee


MERCADEO Y COMUNICACIONES

EDITOR EN JEFE Cameron Lawrence

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GERENTE DE CONTENIDO Martha Álvarez Restrepo

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Revista En Contacto©, agosto de 2020. Tomo XX, No. 11. Todos los derechos reservados. No se aceptan
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AGOSTO 2020 4

08
20 En esta edición

3
REFLEXIONES DOMINICALES

Palabras del
Bienaventurados al
Dr. Stanley ser pacificadores

6 PUEDE SER DIFÍCIL IMAGINAR LA PAZ


mundo de hoy, donde somos bom-
en el
DEVOCIONALES bardeados con mensajes de división
DIARIOS
Meditaciones extraídas y discordia. Felizmente, no esta-
de los mensajes de mos solos en la lucha. El llamado a
Charles F. Stanley ser pacificadores es una oportuni-
FOTOGRAFÍA DE PORTADA DE CHARLES F. STANLEY_EDISTO BEACH, SANTORINI, GRECIA.

dad para caminar junto a Cristo, y


participar en su trabajo de traer
17 reconciliación al mundo. En agosto,
contemplaremos:
ESTUDIO BÍBLICO
La guerra o la paz La bendición de la paz de Dios.
La dificultad de hacer el trabajo de
pacificación.
La ayuda de la gracia de Dios.
29 El trabajo de la pacificación.
ENFOQUE La confianza en Dios para guiarnos.
Combustible para
el viaje
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5 E N C O N TA C T O . O R G
SAB
Servicio fiel
1 2 CORINTIOS 3.4-6

  ES FÁCIL DUDAR DE NUESTRA CAPACIDAD de servir a Dios


cuando nuestras mentes están enfocadas en nuestras limita-
ciones en vez de en Él. Por lo tanto, debemos recordarnos una
y otra vez que la obra es del Señor, y podemos confiar en que
Él la llevará a cabo por medio de nosotros mientras tengamos
fe y seamos obedientes.
Nuestro Padre celestial tiene buenas obras que ha prepa-
rado para cada uno de nosotros (Ef 2.10). Para ayudarnos a
realizarlas, nos ha dado dones espirituales que nos permiten
servirnos unos a otros. Además, nos ha dado principios bíbli-
cos para guiarnos. En su Palabra encontramos dirección para
nuestro camino, fortaleza para soportar las dificultades, y más
fe y confianza en la suficiencia de Dios.
¿Es usted reacio a servir al Señor porque tiene miedo o
se siente inadecuado? Incluso el apóstol Pablo se sintió así
cuando dijo: “Y para estas cosas, ¿quién está capacitado?”
(2 Co 2.16 LBLA). Pero siguió adelante para terminar la
carrera que Cristo lo había llamado a correr (2 Ti 4. 7). Y usted
también puede hacerlo si tiene la disposición de depender del
Padre celestial y obedecerlo. Tomemos un momento para orar
en cuanto a nuestra tentación de ser autosuficientes, y para
tener la valentía para confiar en el Señor.

B I B L IA E N U N AÑ O : Isaías 40-42

AGOSTO 2020 6
REFLEXIÓN DOMINICAL
DOM

La bendición de
la paz de Dios 2
Para sacarle el máximo provecho a este devocional, lea los pasajes a los que se hacen referencia.

  LA BIBLIA NOS REVELA quién es Dios, y un aspecto impor-


tante de su carácter es que el Señor ama la paz y quiere que
ella llene este mundo. Lea la promesa del Señor Jesús en el
Evangelio de Juan: “ La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os
la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón,
ni tenga miedo” (14.27). También aprendemos que el Señor
es “Dios de paz” (Ro 15.33; Fil 4.9; 1 Ts 5.23; He 13.20); el
Mesías es llamado Príncipe de Paz (Is 9.6), y hay paz en el cielo
(Lc 19.38).
A la luz de todo esto, cuando el Señor dice: “Bienaventurados
los pacificadores” en Mateo 5.9, podemos entender por qué
ser pacificador consiste en reflejar la imagen de nuestro Padre
celestial, al usar nuestro aliento, energías y creatividad para
sembrar la paz dondequiera que el Espíritu Santo nos lleve.

PI EN S E E N E S T O
  ¿Qué palabras, sentimientos o situaciones asocia usted
con tener paz? ¿Cuándo ha experimentado paz como un regalo
de Dios?
  Lea Juan 14.27 otra vez. ¿Puede pensar en los temores o
preocupaciones que afectan su capacidad de experimentar o
demostrar paz?

B I B L IA E N U N AÑ O : Isaías 43-45

encontacto.org/dichosos 7 E N C O N TA C T O . O R G
LUN ¿Cómo podemos ganar
el favor de Dios?
3 TITO 3.3-8

  INTENTAR GANARSE EL FAVOR DEL SEÑOR sería como correr


un maratón sin una meta, escalar una montaña interminable
o remar frenéticamente en los rápidos sin llegar a ninguna
parte. Tales intentos de abrirnos pasos hacia Dios son ago-
tadores e infructuosos, porque nunca podremos ser lo bas-
tante buenos o hacer lo suficiente para ganar su aceptación.
Solo hay una manera de recibir el favor de nuestro Padre
celestial, y es a través de la fe en su Hijo, quien hizo todo el
trabajo por nosotros.
El Todopoderoso nos buscó cuando todavía éramos peca-
dores, y envió a su Hijo a vivir una vida perfecta y morir
una muerte sustitutiva por nosotros. Cristo tomó nuestros
pecados y nos ofrece su justicia; lo único que tenemos que
hacer es creer y recibir su regalo de perdón y vida eterna.
El favor del Señor es inmerecido y no puede ser ganado.
Se da libremente a quienes no lo merecen, a través de la fe
en Cristo, y continúa a lo largo de la vida del creyente. Da
poder para obedecer, da la victoria sobre el pecado y pro-
porciona acceso abierto al Padre para la oración. El rico y
abundante favor de Dios está disponible para todos los que
quieran recibirlo por fe.

B IB L IA E N U N AÑ O : Isaías 46-49

AGOSTO 2020 8
Al vivir en el favor MA R

de Dios
ROMANOS 6
4
  UNA VEZ QUE HEMOS RECIBIDO EL FAVOR DE DIOS a través de
la salvación, ¿importa cómo nos comportemos? El pasaje de
hoy responde con un rotundo sí. Después de recibir la mise-
ricordiosa salvación de Dios, no debemos continuar actuando
de maneras desagradables para Él. Por el contrario, debemos
andar en novedad de vida y considerarnos muertos al pecado.
Esta verdad es demostrada por la vida de Pablo. Al conver-
tirse, el apóstol tuvo un cambio radical y comenzó a vivir con
devoción y obediencia a Cristo. Después de ser rescatado de
la esclavitud del pecado y recibir al mejor Maestro posible,
habría sido una necedad volver a su estado anterior.
La gracia divina nos libera para que no seamos más escla-
vos del pecado; no solo somos rescatados del castigo por el
mismo. Y porque nuestro Padre celestial nos da el poder para
conocerle a través de las Sagradas Escrituras, podemos vivir
de una manera que le honre y produzca un fruto duradero.
¿Qué tan bien conoce usted a Dios? Agradarle requiere
aprender a pensar de la manera que Él lo hace, y esto significa
que su Palabra debe ser una parte vital de su vida. También
requiere elegir su camino sobre el suyo. Aunque esto puede
parecer una forma de vivir que tiene un alto precio, el resul-
tado vale cada sacrificio.

B I B L IA E N U N AÑ O : Isaías 50-53

9 E N C O N TA C T O . O R G
MIE Los dones del
Espíritu Santo
5 1 CORINTIOS 12.1-31

  MIRE CUALQUIER IGLESIA VIGOROSA, y encontrará creyentes


que están sirviendo de manera diligente al Señor, así como
otros que no lo están. Sin embargo, la Iglesia de Cristo no fue
creada para parecerse a un evento deportivo con unos pocos
participantes en el campo y muchos espectadores en las gra-
das. Aunque algunos pueden no estar involucrados debido
a la apatía, hay muchos cristianos que simplemente se sien-
ten inadecuados. Pero las limitaciones de un creyente no son
excusa, porque Dios ha provisto todo lo que necesitamos para
servir con éxito.
Por nuestra propia cuenta, cada uno de nosotros está mal
equipado porque las fuerzas y el talento humanos no son sufi-
cientes para servir al Señor. Por lo tanto, Él nos ha dado a cada
uno habilidades específicas potenciadas divinamente llamadas
dones espirituales, para que las utilicemos en el trabajo para
Cristo. No podemos elegir cuál será nuestro don; esta es la
prerrogativa del Espíritu Santo. Solo Él sabe con exactitud lo
que quiere lograr, y nos capacita a cada uno de acuerdo con eso.
Los dones del Espíritu deben ser usados para el bien común
de la Iglesia. Aunque nos han sido dados a nosotros, están des-
tinados al beneficio de los demás. Nuestra responsabilidad es
comenzar a servir, y al hacerlo, empezaremos a descubrir lo
unido que está en realidad el Cuerpo de Cristo.

B IB L IA E N U N AÑ O : Isaías 54-57

AGOSTO 2020 10
El uso de los dones JUE
espirituales
1 PEDRO 4.7-11
6
  TODA PERSONA QUE PERTENEZCA A CRISTO ha recibido un don
espiritual para la gloria de Dios y el bien de la Iglesia. Servir
al Señor no es una sugerencia sino una orden. Cuando des-
perdiciamos la oportunidad, nos privamos a nosotros mismos
y a los demás del servicio que el Padre celestial quiere que
hagamos.
En la lectura de hoy, Pedro divide a los dones espirituales
en dos categorías: dones de servicio y dones de comunicación.
Pero dentro de estos dos grupos hay una ilimitada variedad de
formas en que el servicio a Cristo se pone en acción. Incluso si
dos creyentes tienen el mismo don, lo expresarán de maneras
únicas y con resultados diferentes.
Debemos recordar que aunque hay diversidad de dones,
ministerios y resultados, el Espíritu Santo es la fuente de
todos ellos, y Dios es quien hace el trabajo (1 Co 12.4-6).
Por ejemplo, el don de enseñanza tiene una amplia gama de
aplicaciones. Puede ser usado por una persona para instruir
a niños pequeños, mientras que otra persona lo utiliza para
enseñar a estudiantes del seminario. Ambos usos son esen-
ciales a los ojos del Señor, y lo glorifican.
Dios no tiene una clasificación de los dones espirituales,
así que nunca piense que el suyo no es importante. Lo que Él
desea es fidelidad al emplearlo.

B I B L IA E N U N AÑ O : Isaías 58-62

11 E N C O N TA C T O . O R G
VIE
Soldados para Cristo
7 1 TIMOTEO 6.11-16

  EN EL PASAJE DE HOY, el apóstol Pablo le dice a un joven pas-


tor llamado Timoteo: “Pelea la buena batalla de la fe” (v. 12).
Pero este mandato no se limita a los pastores; cada creyente
necesita ser un fiel soldado de Cristo. Lo cual se debe a que
todos estamos en una batalla, no contra las personas sino
contra fuerzas espirituales de maldad (Ef 6.12).
Esta guerra comenzó cuando Satanás y otros ángeles
se rebelaron contra Dios. Entonces Satanás tentó a Eva a
desobedecer al Señor. Como resultado de la rebelión de
Adán y Eva, la Tierra fue maldecida, y toda la humanidad
fue corrompida por el pecado. Desde ese día, la batalla por
la verdad y la justicia ha persistido.
Aunque a menudo podemos sentirnos turbados por las
tentaciones y el engaño, Jesucristo modeló el camino hacia
la victoria cuando fue tentado por Satanás en el desierto
(Mt 4.1-11). Él usó solo un arma para refutar cada tentación
y mentira: la Palabra de Dios.
Esta es la misma arma poderosa que nuestro Padre celes-
tial nos ha dado para pelear la buena batalla. Cuando vemos
bíblicamente las batallas de cada día con plena seguridad
en la confiabilidad y autoridad de las Sagradas Escrituras,
podemos huir del pecado, seguir la justicia y defender con
firmeza las verdades de la fe.

B IB L IA E N U N AÑ O : Isaías 63-66

AGOSTO 2020 12
El examen final SAB

8
1 CORINTIOS 4.1-5

  AL TERMINAR NUESTROS ESTUDIOS, la mayoría nos sentimos


aliviados por no tener más pruebas. Sin embargo, nuestros
días de prueba no han terminado, porque Dios tiene una
especie de examen final para los creyentes. Y así como nece-
sitábamos estudiar para demostrar nuestro progreso en la
escuela, también debemos estar preparándonos para el día
en que el Señor evalúe nuestra vida.
Aunque los cristianos no seremos juzgados por nuestros
pecados, ya que Jesucristo los llevó en la cruz, somos respon-
sables ante el Creador por la manera que hemos vivido desde
el momento de ser salvos. Todos nos presentaremos ante el
tribunal de Cristo para que nuestras obras sean evaluadas
con el fin de ser recompensadas. Algunas de las acciones que
creíamos buenas, serán consideradas sin ningún valor por el
Juez que conoce nuestros motivos, mientras que otras serán
recompensadas.
Hay muchos factores por los cuales el Señor evalúa nues-
tras vidas, y su conocimiento de cada detalle es absoluto.
No tendremos excusas por los motivos equivocados o por la
pérdida de tiempo y oportunidades. Por lo tanto, debemos
vivir a la luz de la eternidad cada día de nuestra vida, bus-
cando agradar al Señor con nuestros pensamientos, motivos,
palabras y acciones.

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 1-3

13 E N C O N TA C T O . O R G
REFLEXIÓN DOMINICAL
DOM

9 La dificultad de hacer
el trabajo de pacificación
Para sacarle el máximo provecho a este devocional, lea los pasajes a los que se hacen referencia.

  MOMENTOS DESPUÉS DE ENSEÑAR LAS BIENAVENTURANZAS en


su Sermón del monte, el Señor explicó cómo sus seguidores
debían comenzar el trabajo de pacificación: amen a sus ene-
migos, oren por los que les persiguen y saluden a quienes no
sean como ustedes (Mt 5.44-47). Pero, a veces, incluso saludar
a alguien con quien uno no suele hablar, puede ser incómodo.
Hay muchos ejemplos de la vida de Cristo en los que era
difícil hacer la paz, porque las personas a las que intentaba
amar lo ridiculizaban o reaccionaban con hostilidad. (Véanse
Mr 2.6, 7; Lc 7.34; Jn 8.48). Hubo incluso momentos en que sus
propios hermanos no le creyeron (7. 5). Sin embargo, Él superó
estas experiencias y ofreció reconciliación —tanto con Dios
como de unos con otros— a toda la humanidad. A medida que
crezca nuestra conciencia de la gracia y de la fortaleza que se
nos ofrece, también crecerá nuestro deseo de cultivar paz en
nuestro entorno.

PIENSE EN ESTO
  ¿Cuáles son algunas maneras nuevas en las que usted puede
comenzar el trabajo de pacificación en su vida cotidiana?
  ¿Puede pensar en una experiencia cuando hacer o buscar
la paz fue difícil? ¿Cómo reaccionó usted?

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 4-5

AGOSTO 2020 14 encontacto.org/dichosos


Confianza en la espera L UN

10
SALMO 33.13-22

  ESPERAR EN DIOS HACE MÁS GRANDE NUESTRA CONFIANZA EN ÉL,


en especial cuando anhelamos con urgencia su intervención
o guía en una situación. Desde nuestra perspectiva terrenal y
con nuestro limitado conocimiento, puede parecer como si a
Él no le importara, pero eso está lejos de ser cierto.
El Señor usa los tiempos de espera para fortalecer nuestra
confianza en nuestro Padre celestial. Entonces, mientras usted
espera, recuerde:
El Señor tiene conocimiento pleno de cada detalle de sus
circunstancias.
Tiene una comprensión absoluta de los motivos e inten-
ciones de todos los involucrados en su situación.
El poder de Dios es mayor que todos los esfuerzos que
usted haga para resolver sus problemas.
Su ojo está siempre puesto en usted durante la espera, y
Él es su ayuda y su protección.
Su misericordia descansa todo el tiempo sobre usted.
Siempre que se sienta invadido por una sensación de urgen-
cia o incertidumbre, recuerde quién es Dios y lo que Él ha pro-
metido hacer. Aunque es posible que no todo se resuelva como
usted lo desea, se hará de acuerdo con la sabiduría perfecta
de Dios y para el bien de su vida, en lo cual puede regocijarse.

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 6-8

15 E N C O N TA C T O . O R G
MAR
Esperar con fe
11
HEBREOS 11.6-16

  CUANDO ERA NIÑO, mi madre me dejó plantar algunas semi-


llas en su jardín. Aunque me explicó que las plantas tardarían
en aparecer, después de varios días, decidí desenterrarlas para
verificar su desarrollo. No encontré ningunas plantas, pero lo
peor fue que también arruiné la posibilidad de ver alguna.
Hebreos 11 contiene ejemplos de personas que por fe espe-
raron lo que Dios prometió.
Noé siguió construyendo un arca a pesar de los numerosos
años que pasaron hasta el diluvio anunciado (v. 7).
Abraham esperó con ansias la tierra que Dios le prome-
tió, aunque el cumplimiento no tuvo lugar mientras vivió
(vv. 8-10).
Sarai tuvo que esperar hasta que estuvo más allá de la
edad reproductiva antes de que Dios le diera el hijo que le había
prometido (vv. 11, 12).
Si esperamos que el Padre celestial trabaje de acuerdo con
nuestro cronograma es probable que nos desilusionemos.
Las personas mencionadas en Hebreos tuvieron que esperar
muchos años; de hecho, algunas de las promesas que se les
hicieron no se cumplirán hasta después del regreso de Cristo.
No podemos utilizar una promesa y asumir que tendremos al
instante lo que deseamos. El nuestro es un largo andar de fe.

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 9-11

AGOSTO 2020 16

08
20 Estudio Bíblico

La guerra o la paz
El amor cambia las cosas… para mejor.

  AFERRARSE A LA HOSTILIDAD RESULTA TENTADOR, tal vez


incluso esté de moda. Pero el bien llega a quienes pro-
mueven la paz. En una historia del Antiguo Testamento,
el Señor usó la situación de José para preservar a la
ILUSTRACIÓN POR ADAM CRUFT

nación de Israel para la futura venida del Mesías. El per-


dón de José a sus hermanos también puede inspirarnos
a trabajar por el bien de todos. Dios nos bendice para que
podamos bendecir a otros. Y eso funciona mejor cuando
las tensiones se han resuelto. Continúa en la pág. 18

17 E N C O N TA C T O . O R G
E S T U D I O B Í B L I C O

LEA Génesis 45.4-28

CONTEXTO Han pasado unos 13 años desde que los celosos


hermanos de José lo vendieron como esclavo y le dieron
a entender a su padre que había muerto. Con el tiempo,
José llegó a tener un gran poder en Egipto. Sus herma-
nos, que han venido a comprar grano durante una ham-
bruna, no reconocen a su ahora influyente hermano.

REFLEXIONE Los hermanos de José lo habían tratado muy


mal, pero aún al ser reconocidos, no piden perdón.
  José les revela su identidad a sus hermanos y los
invita a “acercarse” (Gn 45.4). Incluso utiliza la palabra
hebrea na, un término más fuerte que por favor, como
“les ruego”. Esta expresión está en marcado contraste
con la última vez que José se acercó a sus hermanos,
cuando le arrancaron las ropas y lo arrojaron a un pozo
(37.23, 24).
  Para el mundo, José estaría justificado en rechazar
a sus hermanos, pero no lo hace. En cambio, se regocija
en el plan de Dios de sal-
varlos a todos (45.5-8).
INVITAR A QUIEN LE Aunque nuestras adver-
sidades pueden no ser
HA HECHO DAÑO A parte de un plan tan
“ACERCARSE” PUEDE importante, sabemos
SER LO ÚNICO QUE SE que el Señor usa cada
una de ellas para nues-
INTERPONGA ENTRE tro bien (Ro 8.28). ¿Qué
USTED Y EL PERDÓN. indica esto acerca de la
J AGN
A OUSA
TROY2 20 02 20 0 18
relación entre confiar en el CUANDO TERMINA LA
Señor y poner la otra meji-
01 (Mt 5.39)?
Bible Study TENSIÓN ENTRE LAS
lla20
  Cristo compara a los PERSONAS, EL ALIVIO
pacificadores con los “hijos QUE SE SIENTE ES, POR
de Dios” (v. 9). En otro LO GENERAL, PODEROSO
lugar, esa descripción se Y LLENO DE REGOCIJO.
refiere a quienes “aman [a]
sus enemigos” (vv. 44, 45).
La palabra pacificador se aplica no solo a uno que media
entre otros, sino también a una persona que renuncia a
la hostilidad, como lo hizo José. Dado que “hacer” de la
paz implica acción, ¿puede usted describir algo que haya
hecho, como hijo de Dios, para fomentar paz?

CONTINUACIÓN DE LA HISTORIALa paz entre José y sus her-


manos causa un cambio dramático: José les ofrece a
sus hermanos y a su padre un hogar en Egipto junto a
él, con provisiones para ayudarlos a sobrevivir durante
los años de la hambruna.
  ¿Hay algo que usted podría hacer por alguien, pero
que ha pospuesto por algún conflicto? ¿Cómo podría
despejar el camino y ser de bendición para esa persona?
  Después de la explicación y las expresiones de
perdón de José, todos lloran, se abrazan y hablan (Gn
45.15). Cuando termina la tensión entre las personas,
el alivio que se siente es, por lo general, poderoso y
lleno de regocijo. ¿Alguna vez ha experimentado usted
este tipo de cambio en una relación que había sido
problemática?

REFLEXIONELa paz sana las heridas y nos restaura.


  El versículo 25 se refiere al padre de José como
“Jacob”. Pero cuando Jacob está Continúa en la página 20

19 ENCO
I NNTTO
AUCC
THO.ORG
E S T U D I O B Í B L I C O

convencido de que José está vivo y se reunirán, el ver-


sículo 27 dice que su espíritu revivió, la misma palabra
usada en 1 Crónicas 11.8 para la reconstrucción de
una ciudad en ruinas. A Jacob se le llama, entonces
“Israel”, el nombre especial que había recibido de Dios
años antes (Gn 32.28). El esfuerzo por hacer la paz
puede tener profundas y hermosas consecuencias para
el sufrimiento de los demás.

PROFUNDICE Piense en cómo se aplica este estudio a su vida.


Traer la paz a un lugar es un el Señor con “no he venido a traer
llamado sagrado y una de las paz, sino espada” (Mt 10.34)?
alegrías de ser cristiano. Y aunque Tal vez haya usted tenido situa-
a menudo significa involucrarse, ciones en las que no pudo traer
nunca debemos subestimar el paz, por ejemplo, con personas
poder del Espíritu Santo en los que se negaron a reconciliarse o
creyentes. Aunque no puede perdonar. Las Sagradas Escrituras
ser visto, ciertamente puede ser dicen que no debemos devolver
sentido. Esta presencia es una ofensa con ofensa, pero promete
fuerza a tener en cuenta, y puede que seremos bendecidos por
producir reacciones poderosas bendecir a otros (1 P 3.9). ¿Qué
sin que digamos una sola palabra; puede hacer hoy para bendecir a
que la reacción sea de miedo o de alguien que no está dispuesto a
amor, depende del corazón de la reconciliarse?
persona que tenga el encuentro Tenemos el privilegio, a través
con Dios. del Espíritu Santo, de traer paz
Los creyentes somos “una dondequiera que sea recibida.
fragancia de Cristo”, olor de Incluso cuando algunos digan que
muerte o de vida (2 Co 2.15, 16). no al Señor Jesucristo, todavía
¿Ha sentido usted este efecto de es posible mantener una actitud
su presencia, como creyente, en amorosa, recordando guardar
los demás? la espada en el evangelio, no en
¿Qué cree usted que quiso decir nuestros corazones.

AGOSTO 2020 20
EL CAMINO HACIA LA PAZ
Es fácil olvidar que el orgullo, la envidia y el
resentimiento —así como otros sentimientos
negativos— pueden descarrilar nuestro andar de fe.
En Minas terrestres en el camino del creyente, el
Dr. Stanley explica los principios bíblicos para
desactivar dichos detonantes espirituales y así
poder despejar el camino hacia la paz de Dios.
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MIE
Confiar y obedecer
12
1 REYES 18.1-16

  LA FE Y LA OBEDIENCIA SON COMPAÑERAS de viaje que se dirigen


al mismo destino, el cual es agradar y glorificar al Señor. Cre-
cen juntas al mismo tiempo a medida que se practican, pero
se marchitan si se descuidan. Por lo tanto, Dios a veces trae
nuevos retos a nuestra vida para fortalecer nuestra confianza
y sometimiento a Él.
Elías era un profeta que había demostrado ser fiel al Señor.
Incluso cuando le dijeron que se presentara ante el rey Acab
que buscaba matarlo, él obedeció. Abdías fue otro siervo fiel de
Dios. Él había salvado de morir a otros profetas, pero cuando
Elías le dijo que informara a Acab de su presencia, Abdías
temió por su vida.
El miedo pone trabas a la fe cuando comenzamos a dudar de
que el camino de Dios sea en realidad el mejor. Si permitimos
que la ansiedad se afiance en nuestra mente, nos negaremos
a hacer lo que el Señor dice. El resultado es un cambio de
compañero de viaje. En vez de fe y obediencia, comenzamos a
caminar con la duda y la rebeldía.
La fe grande comienza con pasos pequeños. Cuando usted
obedece la Palabra de Dios, comienza un ciclo de fe y obedien-
cia cada vez mayor. No deje que el miedo le robe las bendiciones
que el Señor ha planeado para usted.

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 12-14

AGOSTO 2020 22
¿A quién servirá usted? JUE

13
1 REYES 18.17-40

  DURANTE LOS DÍAS DEL REY ACAB, el pueblo de Israel fue arras-
trado en dos direcciones. Acab había instituido la adoración
de Baal, pero Elías desafió a Israel a seguir a Dios. Cuando
presionó al pueblo para que decidieran a quién servir, no
supieron qué decir.
El Antiguo Testamento presenta a la idolatría como un
problema serio, pero en este civilizado mundo moderno, la
adoración de ídolos parece arcaica e irrelevante. En reali-
dad, a veces somos como los israelitas: no podemos decidir
a quién servir.
Cuando algo o alguien tiene mayor valor y prioridad para
nosotros que Cristo, tratamos de servir a dos señores, lo cual
Jesucristo dice que es imposible. Terminaremos amando a
uno y menospreciando al otro (Mt 6.24). Los regalos genero-
sos de Dios, tales como nuestros seres queridos, posesiones
materiales y buenos trabajos nunca deben ser más apreciados
que el Dador.
La manera en que usted utiliza su tiempo revela las prio-
ridades de su corazón. ¿Una parte de cada día está dedicada
al Señor o cada minuto es consumido por las demandas de la
vida? ¿Existe alguien o algo en lo que confíe más que en Dios?
Si es así, es hora de que le ponga fin a su indecisión y entregue
su vida por completo a Jesucristo.

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 15-17

23 E N C O N TA C T O . O R G
VIE
Fe creciente
14
2 TESALONICENSES 1.3-5

  EL DESEO DE DIOS ES QUE CREZCAMOS EN FE mientras camina-


mos con Él. La fe no es solo un acontecimiento por medio del
cual fuimos salvos, sino también una forma de vida perseve-
rante desde el momento de la salvación. Cuanto más tiempo
vivamos, mayor debe ser nuestra confianza en el Señor.
Nuestro grado de fe afecta cada aspecto de nuestra vida:
nuestros pensamientos, actitudes, oraciones y comporta-
miento. Y las pruebas a menudo revelan cuánto confiamos en
Dios. Cuando enfrentamos aflicciones, ¿notamos solo el sufri-
miento y las imposibilidades, o vemos la grandeza de nuestro
Padre celestial que controla todas estas situaciones?
La fe también tiene poder para influir en las emociones.
Cuando nuestras mentes están llenas de dudas acerca de Dios,
la ansiedad y el miedo se apoderan pronto de nosotros. En vez
de descansar en Cristo, nos quejamos y nos preocupamos, tra-
tando de imaginar las posibles consecuencias y resolver cada
problema con nuestras propias fuerzas.
Pero cuando la Palabra de Dios es la base de nuestros pensa-
mientos, descubrimos que el amor, la soberanía y la sabiduría
de Dios se convierten en nuestro enfoque. A medida que nues-
tra confianza en el Padre crece, dependemos más de Él. Por lo
tanto, las dificultades no nos sacuden tan fácilmente porque
su paz y su gozo protegen nuestro corazón y nuestra mente.

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 18-21

AGOSTO 2020 24
Una vida de fe SAB

15
HEBREOS 10.35-39

  ALGUNAS PERSONAS SUBESTIMAN SU FE pensando que se les


hizo aceptar las creencias cristianas, pero que no tienen nin-
guna relevancia en el presente. Sin embargo, el escritor de
Hebreos dice que una vez que somos declarados justos al poner
nuestra fe en Cristo, debemos vivir por fe y no retroceder.
Vivir por fe es algo que se aprende con el tiempo al ver la
fidelidad de Dios tanto en su Palabra como en nuestras expe-
riencias. Considere los diversos grados de fe, como se mues-
tran en los siguientes ejemplos:
POCA FE (Mt 8.23-27): Los discípulos de Cristo mantuvieron
centrada su atención en una peligrosa tormenta y clamaron por
ayuda, pero Él les preguntó por qué tenían miedo. A la poca fe
le resulta difícil creer que Dios es más grande que la situación.
GRAN FE (vv. 5-13): Aunque estaba preocupado por el padeci-
miento de su siervo, el centurión reconoció la autoridad de
Cristo sobre la enfermedad y creyó que Él era capaz de hacer
lo imposible.
FE PERFECTA (Stg 2.20-23): Abraham tenía tanta confianza en
el Señor que siguió adelante con un acto de obediencia muy
difícil. Como resultado, su fe inicial se volvió total y madura.
No importa cuánto tiempo haya sido usted creyente, Dios
quiere que continúe creciendo en la fe. La única manera de
lograrlo es conociendo y creyendo en la Palabra de Dios.

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 22-24

25 E N C O N TA C T O . O R G
DOM REFLEXIÓN DOMINICAL

16 La ayuda de la gracia de Dios

Para sacarle el máximo provecho a este devocional, lea los pasajes a los que se hacen referencia.

  CUANDO HABLAMOS DEL TRABAJO DE PACIFICACIÓN, es impor-


tante entender que eso no significa que siempre debamos estar
tranquilos, felices o incluso desconectados de alguna situación
conflictiva. Los pacificadores entienden que encontrar la paz
con Dios nos llega como un acto de gracia, algo que sus hijos
reciben como un regalo, gratis e inmerecido. Reconocen que
sus esfuerzos hacia la buena voluntad y la armonía solo son
posibles gracias al amor del Señor. Y que el trabajo de recon-
ciliación no puede hacerse con nuestras propias fuerzas.
Mientras esperamos el regreso del Señor Jesucristo, Él nos
invita a acompañarlo en el trabajo de pacificación en el mundo.
El apóstol Pablo lo dijo de esta manera: “Justificados, pues, por
la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor
Jesucristo” (Ro 5.1). La gracia que nos reconcilia con Dios es
la misma gracia que estamos llamados a extender a los demás
(Col 3.12-14).

PIENSE EN ESTO
  ¿Es capaz de reconocer la gracia de Dios en su propia vida?
¿Cómo le capacita esta gracia para buscar reconciliación?
  ¿De qué maneras puede extender gracia en sus relaciones
o en su comunidad?

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 25-27

AGOSTO 2020 26 encontacto.org/dichosos


La fe para perseverar L UN

HEBREOS 11.24-40
17
  A TODOS NOS ENCANTAN LAS HISTORIAS DE VICTORIA de Hebreos
11: los enemigos son derrotados, las personas son salvadas,
las bocas de los leones se cierran y los muertos resucitan.
Pero ¿qué de aquellos que agradaron a Dios con su fe y aun así
sufrieron y murieron? Los últimos versículos de este capítulo
transmiten una realidad espiritual que muchas personas hoy
en día son reacias a aceptar: que la fe no es un medio para
conseguir que Dios haga lo que queremos.
Quienes pertenecemos a Jesucristo tenemos la promesa
de Dios de que Él sanará todas nuestras enfermedades, nos
socorrerá en todos los problemas y nos dará grandes riquezas,
no ahora, sino en la eternidad. No obstante, el Señor dijo que
mientras tanto podemos esperar tribulación, persecución
y sufrimiento (Jn 15.18-21). Por eso es importante recordar
que la fe no nos salva de todo esto, sino que nos ayudará a
superarlo.
Dios quiere que permanezcamos firmes ante la aflicción y la
tentación. Al igual que Moisés, podemos ser llamados a sopor-
tar “como viendo al Invisible” (He 11.27). Por tanto, pongamos
nuestra esperanza en el Padre celestial y mantengámonos
firmes en la fe en los tiempos buenos y malos.

B I B LIA E N U N AÑ O : Jeremías 28-30

27 E N C O N TA C T O . O R G
Una manera divertida
de crecer en la fe.
Dé a los niños de la casa más maneras de aprender acerca de Dios con
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08
20 Enfoque

Combustible para
el viaje
POR TIM RHODES
FOTOGRAFÍAS POR JOSEPH LEE

  MIENTRAS EL SOL DESCIENDE SOBRE LA SELVA, Mike Daw-


son está en la orilla del río Orinoco, en busca de cual-
quier señal de una lancha a motor. Chequea la hora, sus
oídos se esfuerzan por el zumbido lejano de un motor.
El combustible diesel es un recurso escaso Continúa en la página 30
29 E N C O N TA C T O . O R G
E N F O Q U E

DAWSON FUE PARA ELLOS pero crucial necesario para


visitar las aldeas no alcan-
EL ÚNICO INSTRUMENTO zadas de esta región, y hoy,
PARA DISFRUTAR DE LAS parece que no vendrá.
SAGRADAS ESCRITURAS. En lo profundo de las sel-
PERO LA ANTORCHA LO vas tropicales del sur de
CAMBIA TODO. Venezuela, la ubicación de
Dawson es remota. “Le digo
a las personas”, dice riendo,
“que si pasas junto a noso-
tros, empiezas a acercarte a alguien sin acercarte a
nadie más”. Él y su familia viven con la tribu yanomami
cerca de la frontera con Brasil. Gran parte de su tiempo
lo dedica a viajar, evangelizar y acoger grupos de dis-
cipulado para fortalecer a los creyentes y a los líderes.
Dawson nació aquí, criado por padres que estuvieron
entre los primeros misioneros entre la tribu yanomami.
Cuando el combustible no llega, Dawson, que está
acostumbrado a vivir en condiciones impredecibles, se
ocupa de revisar su más reciente herramienta evange-
lística: la Antorcha, un recurso del Equipo Mensajero
que funciona con energía solar y que a la vez reproduce
la Biblia en audio, además de ser una linterna, algo que
le emociona compartir una vez que reciba el combus-
tible para su próximo viaje.
Hasta hace poco, no habían Biblias ni recursos de dis-
cipulado para que las personas de esta tribu pudieran
usarlas sin ayuda. Dawson llevaba la película JESÚS y
leía la Biblia a un grupo grande en cada aldea lejana.
Luego se quedaba y explicaba las lecciones antes de
J AGN
A OUSA
TROY2 20 02 20 0 30
viajar a otra aldea. Durante mucho tiempo, Dawson
fue para ellos el único instrumento para disfrutar de
las Sagradas Escrituras.
Pero la Antorcha lo cambia todo. Ahora los yano-
mami escucharán la Palabra de Dios, incluso cuando
Dawson no esté con ellos. Con el combustible difícil
de encontrar y comprar, no es posible visitar todas las
aldeas a su cargo con la frecuencia necesaria. Y desde
que comenzó la crisis política y socioeconómica de
Venezuela hace unos años atrás, ha tenido más motivos
de preocupación. En esa época, todos los no nativos
fueron forzados a dejar las zonas indígenas, pero por
la gracia de Dios, la familia de Dawson se salvó de la
reubicación ya que él nació entre los yanomami. No
obstante, han experimentado escasez de casi todo,
incluyendo medicinas y herramientas. “El hecho de
que todavía podemos hacer funcionar un generador, y
trabajar, es nada menos que un milagro”, afirma.
Por la mañana, con la llegada de más diesel, Dawson
prepara su lancha para el viaje de tres días. Él sabe
que los aldeanos están preocupados por su retraso,
pero se alegrarán al ver los regalos que trae. Ya no
tendrán que esperar a
que la Palabra de Dios
llegue; estarán capacita- (Base de suministros)
PUERTO
AYA C U C H O
32 kilómetros
Comunidades

dos para estudiarla por


alcanzadas
Río Orinoco

sí solos. “Desearía haber


tenido la Antorcha hace
50 años”, dice. “Pero ala- ESTACIÓN
PRINCIPAL

bado sea el Señor, ahora


DE LA MISIÓN
ALDEA
C O S H I L O WA
la tenemos”.
Colombia
YA N O M A M I

Venezuela

Río
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31 ENCO
I NNTTO
AUCC
THO.ORG
MAR Una vida centrada
en Cristo
18
HEBREOS 12.1-3

  UNA VIDA DE FE FIRME NO SURGE DE FORMA AUTOMÁTICA o sin


ningún esfuerzo de nuestra parte. Aunque no somos salvos
por nuestros esfuerzos, el crecimiento espiritual requiere la
apropiación de todos los medios que Dios ha provisto para
ayudarnos a caminar fielmente con Él. Debemos…
Aprender de las vidas de los héroes de la fe, como los que
leímos ayer en Hebreos 11. Saber que otros han atravesado con
fe los mares tormentosos de la vida nos alienta a perseverar.
Deshacernos de los pecados u otras cargas que nos impi-
den adorar y obedecer de manera incondicional al Señor.
Enfocarnos en el Señor Jesucristo, no en nosotros mismos
o en nuestros deseos.
Cristo modeló para nosotros cómo vivir con confianza, sin
importar cuán difíciles sean las circunstancias. Demostró una
seguridad perfecta, haciendo siempre y de manera precisa
lo que el Padre celestial le ordenaba, incluso yendo a la cruz.
Soportó la vergüenza y el sufrimiento centrándose en el gozo
que sería suyo por la redención total de su pueblo para la gloria
de Dios.
¿Está usted buscando en Cristo las fuerzas y la perspectiva
necesarias para correr la carrera de la vida con perseverancia
llena de fe?

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 31-32

AGOSTO 2020 32
Más allá de nuestras MIE

circunstancias
19
FILIPENSES 1.12-30

  ¿ALGUNA VEZ MIRA USTED SUS CIRCUNSTANCIAS y no ve nin-


guna posibilidad de que el Señor pueda sacar algo bueno de
ellas? ¿Qué beneficio podría venir de la enfermedad, el des-
empleo, la separación u otras dificultades? Aunque no siem-
pre podemos entender lo que Dios hace, hay una cosa que sí
podemos hacer: confiar en Él y usar nuestra situación para sus
gloriosos propósitos.
Aunque el encarcelamiento del apóstol Pablo puede haber
parecido el final de su ministerio, Dios lo usó para hacer avan-
zar el evangelio. El apóstol no solo pudo predicar a los guar-
dias romanos, sino que su encierro también inspiró a otros a
predicar con valentía. Y al enfrentarse a la amenaza de una
sentencia de muerte, Pablo reconoció que, ya fuera para ser
ejecutado o para continuar con vida, era otra oportunidad para
glorificar al Señor.
Las maneras de reaccionar de Pablo demuestran que en todas
las circunstancias es posible vivir de una manera que exalte
a Jesucristo. Y el mismo Espíritu Santo que ayudó al apóstol,
ayudará también a cualquier cristiano obediente. Cuando
vemos la vida desde la perspectiva de Dios, cada dificultad se
convierte en una oportunidad para confiar en su plan, depender
por completo de Él y responder de una manera que glorifique
y exalte a Cristo.

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 33-36

33 E N C O N TA C T O . O R G
JUE
Vivos por completo
20
COLOSENSES 2.9-14

  JUAN 10.10 DICE QUE A TRAVÉS DE JESUCRISTO, se nos ofrece


una vida abundante y plena. Sin embargo, ¿cuántos de noso-
tros diríamos que hemos adoptado dicha vida? Por desgracia,
no muchos. Tendemos a definir nuestra vida según cosas terre-
nales como seres queridos, salud y posesiones materiales. Sin
embargo, Cristo tenía más en mente; de manera concreta, los
tesoros espirituales. Algunos de estos nos pertenecen ahora
mismo, y otros están reservados para el cielo (Mt 6.19, 20).
En la lectura de hoy, cuando el apóstol Pablo escribió acerca
de estar vivos en Cristo, usó ilustraciones de la circuncisión y
el bautismo. ¿A qué tesoros espirituales apuntan estos?
TESORO #1—A UNA NATURALEZA NUEVA. Desde el momento en que
somos salvos, Cristo vive en nosotros; nuestra vieja naturaleza
es reemplazada por otra espiritualmente nueva.
TESORO #2—A UNA LIBERTAD NUEVA. Nuestra salvación nos libera del
castigo del pecado, porque Cristo pagó nuestra deuda en la
cruz: ya no hay más culpa (Ro 8.1). La libertad verdadera es
más preciosa que cualquier posesión terrenal.
TESORO #3—A UNA NORMA DE CONDUCTA NUEVA. Al ser salvos, somos
libres del legalismo, de la expresión de una fe regida por reglas.
Por el contrario, ahora vivimos por fe en Cristo y experimen-
tamos una relación íntima y personal con Él por medio de su
Espíritu.

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 37-40

AGOSTO 2020 34
Responsables ante Dios V IE

21
HECHOS 24.24,25

  ¿LE RINDE CUENTAS A ALGUIEN? Todos necesitamos hacerlo


porque sirve como una barrera de protección, manteniéndonos
en el camino correcto. Algunas personas actúan como si no
respondieran a nadie; sin embargo, en última instancia todos
somos responsables ante Dios, y algún día nos presentaremos
ante Él para ser juzgados.
La Biblia describe dos juicios separados: uno será para
los creyentes (2 Co 5.9, 10); y el otro, para los incrédulos
(Ap 20.11-15). La base de ambos son las obras de la persona,
pero los resultados son muy diferentes. Dado que Cristo
soportó el juicio divino por los pecados de quienes lo siguen,
estos nunca tendrán que dar cuenta por sus transgresiones. Por
eso, cuando los cristianos estén delante de Cristo, sus obras
serán evaluadas para ser recompensadas. Pero los incrédulos
serán responsables por los pecados que cometieron, y serán
sentenciados al castigo eterno.
¿Cómo se siente en cuanto al juicio que nos espera? Puede
que sienta miedo si no ha puesto su fe en Cristo como su Salva-
dor. Si es así, esta es una oportunidad para hacerlo. Pero para
quienes hemos creído en Él, la convicción del juicio debería ins-
pirarnos a sentir gratitud por el sacrificio del Señor. También
debería motivarnos a vivir de una manera que agrade a Dios
para que podamos escucharle decir: “¡Bien, buen siervo y fiel!”.

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 41-45

35 E N C O N TA C T O . O R G
SAB
El juicio de los creyentes
22 2 CORINTIOS 5.9, 10

  ¿QUÉ SIENTE cuando piensa en el tribunal de Cristo: miedo


o turbación? El apóstol Juan dice que si permanecemos en
Cristo, podremos presentarnos con confianza ante Él y no
apartarnos avergonzados (1 Jn 2.28). Esto se debe a que le
pertenecemos a Jesucristo, quien fue a la cruz para cargar con
nuestros pecados y recibir el castigo que merecíamos.
El juicio que nos espera en el futuro no tiene nada que ver
con la determinación de nuestro destino eterno; eso ya ha
sido resuelto. Por el contrario, este juicio es la evaluación por
parte de Cristo de lo que hayamos hecho, “sea bueno o malo”
(2 Co 5.10). La palabra malo no se refiere a actos malvados,
sino a aquellas cosas que no tienen ningún valor. Primera a
los Corintios 3.10-15 compara el juicio de Cristo con un fuego
que consume todas las obras sin valor, pero deja intactas a las
personas dignas de recompensa eterna. Aunque nuestra vida
puede parecer admirable juzgada por las normas del mundo,
solo Dios conoce los motivos del corazón y qué acciones son
buenas en realidad (4.5).
Nuestras acciones no determinarán si pasaremos la eterni-
dad con el Señor, pero Él tiene la gracia de considerarlas con
el propósito de recompensarlas. Juntos, busquemos vivir para
Él y su gloria cada día. Y descansemos también, sabiendo que
es su justicia la que nos hace dignos del cielo.

B I B LIA E N U N AÑ O : Jeremías 46-48

AGOSTO 2020 36
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PAZ MENTAL
La paz no es un espejismo, es una promesa
del Señor. Este libro, considerado un éxito de
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REFLEXIÓN DOMINICAL
DOM

23 El trabajo de
la pacificación
Para sacarle el máximo provecho a este devocional, lea los pasajes a los que se hacen referencia.

  LA PACIFICACIÓN ES UN TRABAJO PROACTIVO. Buscar la justicia


y la reconciliación puede requerir que nos involucremos en
algún conflicto, que nos ocupemos de las necesidades de los que
sufren, o que ayudemos a quienes sufren privaciones. (Véase
2 Co 9.6-8). Otras veces, nuestro trabajo puede ser solo saber
escuchar. Como dice el libro de Santiago, todo hombre debe ser
“presto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse” (1.19).
En su libro El Sermón del Monte, el Dr. D. Martyn Lloyd-Jones
describió cuatro maneras prácticas de propiciar reconciliación:
1) Aprender a no hablar.
2) Ver cada situación en el contexto del evangelio.
3) Buscar métodos para contribuir a hacer la paz.
4) Sembrar la paz dondequiera que estemos.
A medida que las pongamos en práctica, es probable que
comencemos a orar más, decidamos no tener la última palabra,
o incluso brindemos consuelo a quien esté afligido.

PIENSE EN ESTO
  ¿Qué significa para usted que el trabajo de pacificación sea
proactivo? ¿Es una idea nueva para usted?
  ¿De qué maneras puede poner en práctica las recomenda-
ciones del Dr. Lloyd-Jones?

B I B LIA E N U N AÑ O : Jeremías 49-50

AGOSTO 2020 38 encontacto.org/dichosos


Nuestros pensamientos L UN

y el éxito
COLOSENSES 3.1-4
24
  ¿ALGUNA VEZ SE HA PREGUNTADO qué es el éxito verdadero?
La respuesta bíblica es llegar a ser la persona que Dios quiso
que fuéramos cuando nos creó, y cumplir con el trabajo que ha
dispuesto para nuestra vida. La Biblia nos dice que este tipo de
logro comienza con nuestro pensamiento (Pr 23.7). Lo sabemos
por la manera cómo funciona la mente, la cual influye en nues-
tras actitudes y acciones tanto hacia el Señor como hacia los
demás. La pureza de nuestra mente determina, en gran medida,
la santidad de nuestra vida.
Colosenses 1.21 nos dice que antes de ser salvos estábamos
apartados de Dios y con una mente hostil hacia sus asuntos. Por
tanto, la vieja mentalidad no nos ayudará a convertirnos en las
personas que el Creador tuvo en mente. Por eso la Biblia nos
exhorta a la renovación espiritual de nuestros pensamientos
y actitudes (Ef 4.23), y nos ayuda a entender lo que debe y no
debe estar en nuestra mente (vv. 31, 32).
Para poner nuestra mente en las cosas de Dios, debemos
decidir siempre tener el punto de vista del Señor, y rechazar
la manera de vivir del mundo (Ro 12.2). Si fijamos nuestra
atención en el carácter y la voluntad del Señor, comenzaremos
a entender su perspectiva.
El éxito en el reino de Dios comienza con una mente renovada
y piadosa. ¿En qué enfocará usted sus pensamientos hoy?

B I B L IA E N U N AÑ O : Jeremías 51-52

39 E N C O N TA C T O . O R G
MAR El camino hacia
el éxito
25
COLOSENSES 3.5-10

  EL CAMINO DE DIOS SUELE SER CONTRARIO AL DEL MUNDO. Nues-


tra cultura dice: “No dejes que nadie te atropelle”, pero Cristo
enseña que los misericordiosos, los mansos y los pacificado-
res son quienes tienen éxito en el reino de Dios (Mt 5.5-9).
El mundo promueve la prosperidad material y la comodidad
personal, mientras que la Palabra de Dios dice que tenemos
éxito cuando nos parecemos más al Salvador y obedecemos
el plan de Dios.
Como vimos ayer, el éxito verdadero comienza con nuestros
pensamientos. Imagínese su mente como una computadora
que regula sus actitudes y acciones, dirigiendo su respuesta en
diferentes situaciones. Dado que nuestras decisiones se toman
en base a valores y prioridades almacenados en la mente, nues-
tra responsabilidad como seguidores de Cristo es alimentarla
con una dieta constante de la Palabra de Dios. Solo la verdad
bíblica puede contrarrestar el flujo continuo de información
que a diario bombardea nuestra mente. La Biblia filtra las ideas
y actitudes que se presentan en el camino (Fil 4.8).
Cuando meditamos en la Palabra de Dios y valoramos sus
preceptos, nuestras palabras y acciones seguirán el mismo
camino. Dejemos de lado el amor del mundo por el poder y el
éxito material; y convirtámonos en las personas que el Padre
ha querido que seamos.

B I B LI A E N U N AÑ O : Lamentaciones 1-2

AGOSTO 2020 40
El control de Dios y MIE

nuestras oraciones
JUAN 14.13,14
26
  ¿ALGUNA VEZ SE HA PREGUNTADO por qué oramos si ya Dios
está al tanto de todo? ¿Qué logran nuestras oraciones?
Primero, la comunión con Dios conecta su Espíritu con el
nuestro. Para que la relación sobreviva ambas partes tienen
que hablar.
Segundo, Dios nos comunica su voluntad por medio de la ora-
ción. Si buscamos obedecerlo, entonces oraremos con mentes
y corazones abiertos. A su vez, el Señor inspira en nosotros el
deseo de pedirle lo que desea traer a nuestra vida.
Tercero, la comunión con Dios nos da la oportunidad de
participar en su reino en la Tierra. A medida que aprendemos
a confiar en Él para obtener respuestas, nos da mayores tareas
en la oración. El Señor pondrá una carga en nuestro corazón
para orar por la salvación de un amigo, de las personas que
sufren un desastre natural o por el estado de nuestra nación.
Cuando veamos una respuesta, ya sea grande o pequeña, sabre-
mos que Él nos bendijo al incluirnos en el proceso.
Dios nos pide que oremos, porque quiere que nos involucre-
mos en su trabajo. ¡Qué privilegio tan grande tenemos de poder
ir ante nuestro Padre, y saber que está interesado en lo que
queremos decirle! De hecho, se complace cuando le pedimos
por nuestras necesidades o las necesidades de otra persona.
Y si oramos de acuerdo con su voluntad, Él siempre responde.

B I B LI A EN U N AÑ O : Lamentaciones 3-5

41 E N C O N TA C T O . O R G
JUE
Nuestra reacción en
tiempos difíciles
27
PROVERBIOS 3.5, 6

  LOS TIEMPOS DIFÍCILES sirven para revelar nuestra ver-


dadera identidad. Si dos personas se enfrentaran al mismo
dilema, una podría acercarse a Dios, mientras que la otra
dudaría de la fidelidad del Señor. La manera en que reaccio-
namos ante las pruebas es muy importante.
Nos guste o no, las dificultades son parte de la vida. Con-
vertirse en cristiano no cambia ese hecho (Jn 16.33). Lo que
cambia es nuestra comprensión de la soberanía de Dios: nada
toca nuestra vida a menos que Él lo permita. Pensemos en
David, por ejemplo: Dios permitió que un rey asesino persi-
guiera a David durante años (1 S 23.15, 25); sin embargo, él
reaccionó ante la adversidad con fe y llamó a Dios su fortaleza
y su refugio (Sal 59.16).
Si lo permitimos, las dificultades pueden hacer crecer nues-
tra fe, cambiar nuestra perspectiva o hacer más profunda
nuestra compasión. Pero pase lo que pase, el Señor está al
alcance para ayudarnos en nuestra aflicción (46. 1). Podemos
acudir a Él en busca de consuelo, guía y apoyo, o enojarnos y
resentirnos por no haber sido librados de nuestro problema.
Cuando la aflicción nos roba toda esperanza, solo nos queda
depender del Señor. Mientras algunas personas son destrui-
das por situaciones así, otras se convierten en creyentes fir-
mes que no se desaniman.

B I B L IA E N U N AÑ O : Ezequiel 1-3

AGOSTO 2020 42
Hacer la obra de Dios a V IE

la manera de Dios
ZACARÍAS 4.1-7
28
  EN EL 538 A. C. LOS ISRAELITAS VOLVIERON A JERUSALÉN para
reconstruir el templo. Pero se encontraron con muchos adver-
sarios que trataron de impedirles el éxito (Esd 4.1-5). El des-
ánimo se apoderó de ellos, y al final se vieron obligados a dejar
de trabajar. Dios le dijo a su líder, Zorobabel, cómo proceder:
“No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu” (Zac 4.6).
Seríamos sabios al seguir ese consejo.
Al igual que los israelitas, podemos estar bajo presión e
inseguros de cómo seguir adelante. Cuando nos encontramos
con obstáculos, nuestra tendencia es encontrar la solución por
nosotros mismos, pero dicha actitud no es correcta. Si bien ser
independiente puede ser común y admirado en el presente, así
no es como la Biblia dice que vivamos. Por el contrario, debe-
mos caracterizarnos por nuestra dependencia del Espíritu
Santo: dejar que Él dirija nuestras acciones resultará en hacer
la obra de Dios a su manera. Nuestra vida no estará libre de
problemas, pero seremos victoriosos con la ayuda del Señor.
Cuando dependemos del Espíritu Santo se hace evidente
que sin Dios, fracasaríamos, y nuestros compañeros cons-
tantes serían la preocupación y la angustia. Pero con Él, reci-
bimos la verdadera sabiduría y el poder divino. Entonces, la
paz y el gozo nos acompañan, aun en medio de las dificultades
(Ga 5.22, 23).

B I B L IA E N U N AÑ O : Ezequiel 4-6

43 E N C O N TA C T O . O R G
SAB
Para superar
los obstáculos
29
JOSUÉ 6.1-5

  NOS ENFRENTAREMOS A MUCHOS TIPOS DE OBSTÁCULOS en la


vida, algunas veces serán seres queridos problemáticos y,
otras veces, crisis físicas o económicas. Pero recuerde que
nada puede pasarnos sin el consentimiento de Dios.
Considere lo improbable que parecía una victoria para el
ejército de Josué: no solo había una gran muralla que prote-
gía a Jericó, sino que Dios también había dado instrucciones
extrañas de marchar a su alrededor. Él les había prometido
a los israelitas la tierra, y Josué le creyó. No le preocupaba
lo que parecía inconquistable. En vez de eso, reconoció el
poder del Altísimo, y obedeció.
Aun antes de eso, el Señor ya había estado trabajando,
preparando a la ciudad para la destrucción al infundir miedo
en los reyes de esa región (Jos 2.8-14). Puede haber sido un
plan de batalla extraño, pero como Josué obedeció, el pueblo
de Dios triunfó.
Cada vez que usted se enfrente a un obstáculo, puede que
experimente una gran angustia, pero aun en medio de ella
podrá confiar en Dios. La parte más importante de cada día
es el tiempo que pase a solas con el Señor. Él le alentará con
su amor y su guía.

B IB L IA E N U N AÑ O : Ezequiel 7-9

AGOSTO 2020 44
REFLEXIÓN DOMINICAL
DOM

La confianza en Dios
para guiarnos 30
Para sacarle el máximo provecho a este devocional, lea los pasajes a los que se hacen referencia.

  SER LLAMADOS HIJOS DE DIOS SIGNIFICA que buscamos con


fervor su redención, no solo para nosotros sino para todo el
mundo. Así que, cuando Cristo dice: “Porque ellos serán llama-
dos hijos de Dios” (Mt 5.9), no está prescribiendo una fórmula
sobre cómo convertirse en un hijo de Dios. Está definiendo
lo que es un pacificador: alguien que cree y confía en el Padre
para guiarnos.
Pensar en Dios como “Padre” es tranquilizador y alentador
para muchos creyentes. Pero hay otros que tienen una rela-
ción complicada con su padre terrenal, y esto puede afectar la
manera en que piensan y se relacionan con el Padre celestial.
Para entender mejor quién es Él, solo tenemos que leer la Biblia
y ver algunos de sus atributos: Él es santo (Is 6.3; Ap 4.8),
misericordioso y compasivo (Sal 103. 8), inmutable (Stg 1.17),
y creador fiel (1 P. 4.19).

PIENSE EN ESTO
¿Cómo entiende usted la idea de Dios como “Padre celestial”?
Si conocer a Dios íntimamente es crucial para ser pacifi-
cadores, eso significa que debemos comprometernos a pasar
tiempo con Él. ¿Existe algo que obstruya su relación con el
Padre celestial en este momento?

B I B L IA E N U N AÑ O : Ezequiel 10-12

encontacto.org/dichosos 45 E N C O N TA C T O . O R G
L UN
Dios es capaz
31 EFESIOS 3.20, 21

  EL SEÑOR JESÚS SABÍA LO QUE ERA VIVIR con recursos limita-


dos, ser cuestionado por sus acciones (Mr 3.21) y experimen-
tar el rechazo de aquellos a quienes buscaba servir (Jn 6.66).
Pero a pesar de tal oposición, Él no dejó que las circunstancias
afectaran su confianza en el Padre.
Estamos llamados a seguir el ejemplo del Señor con la con-
vicción de que Dios hará lo que ha prometido. Por ejemplo,
Hebreos 7.25 asegura la salvación para quien pide perdón en
el nombre Cristo, porque su muerte en la cruz satisfizo las
demandas de la justicia divina por todos nuestros pecados.
El Padre celestial perdonará a todos los que tengan fe en su
Hijo, y hará de cada persona una nueva criatura (2 Co 5.17).
No importa lo que haya hecho, el Señor invita a esa persona a
acercarse con fe y recibir el regalo de la vida eterna.
Dios también promete fortalecer a los que confían en Él
(Ro 16.25). A través de su Espíritu y la Santa Palabra, comen-
zamos a ver las cosas como lo hace nuestro Padre, lo que nos
ayuda a comprender lo que le agrada.
Cuando creemos en que el Señor cumplirá sus promesas,
nuestra fe se fortalece y gozamos de paz. Las dificultades que
alguna vez nos habrían desviado del camino pierden su poder.
La esperanza sustituye al desánimo y la confianza vence a
la duda.

B I B L IA E N U N AÑ O : Ezequiel 13-16

AGOSTO 2020 46
BIENAVENTURADOS AL
SER PACIFICADORES
En las Bienaventuranzas del Sermón del monte,
BIENAVENTURADO
Cristo describe la idea de una vida bendecida,
SOY que podemos vivir aquí y ahora. Este año,
compartiremos recursos exclusivamente
diseñados para ayudarle a discernir en qué
consiste disfrutar de una vida bendecida —como
por ejemplo, una guía trimestral gratuita de 48
páginas con lecturas especiales, instrucciones
para cultivar la oración y preguntas para
reflexionar. Acompáñenos a medida que
exploramos las palabras del Señor Jesús y
discernimos en qué consiste ser pacificadores
en el mundo.
Para obtener la guía trimestral GRATUITA, visite
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