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CONOCER TE DA PODER, DIOS TE RESPALDA

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Diseño de portadas: Jesús Andrés

Copyright 2019, Jesús Andrés

Primera Edición: Jesús Andrés, Floridablanca Santander

Primera Impresión: 26 de Junio de 2019

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BIOGRAFÍA

Filósofo de la Universidad Industrial de Santander y

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Terapeuta Espiritual formado en el CENTI (Centro
de Teoterapia Integral)

Mi nombre es Jesús Andrés Escobar Rodríguez,


nacido en la bella ciudad de los parques
Bucaramanga, Santander, criado bajo el empuje de
un padre Paisa (Gustavo Escobar) y una madre
Bumanguesa (Martha Rodríguez). Desde muy
pequeño descubrí un don que me ha permitido
acercarme a muchas personas que tienen diversos
problemas: el don de Escuchar. Me di cuenta que
todas las personas tienen algo que contar que no se lo
confían a cualquiera y sobretodo que quieren
escuchar un consejo que les ayude a resolver los
problemas que no faltan en la vida. Teniendo
entonces esta gran responsabilidad me apasioné en el
bachillerato por la materia de Filosofía llegando a ser
el mejor del colegio. Al obtener mi título de bachiller
y no desaprovechando que en una de las mejores
universidades del país existía la carrera profesional
de Filosofía tome ese barco para entrar de manera
más profunda en el conocimiento de cómo los
mejores pensadores de todos los tiempos intentaban
comprender la vida del hombre. En medio de mis

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estudios y de tanto razonar me volví ateo para
desprenderme de todos los prejuicios que la cultura
me había implantado. Fue en ese entonces que a los
21 años por problemas de dinero y de una vida muy
bohemia tome la decisión de suicidarme con un
veneno que ingerí en mi habitación y antes de ello
escribí una carta de despedida a mi familia. Estando
muy cerca de la muerte perdí el conocimiento y tuve
una especie de visión que me permitió ver muchas
cosas de mi futuro. Milagrosamente el veneno no
hizo su efecto, pero sin comprender yo la situación y
muy confundido salí de mi casa a dormir en la calle, y
allí, al lado de un Jardín Botánico en Floridablanca,
Santander, una patrulla motorizada de la policía me
encontró durmiendo en el suelo. Al requisar mi bolso
y encontrar el paquete vacío del veneno y la carta de
despedida comenzaron a hablarme de Dios sin
importarles mucho si el veneno aún estaba en mi
cuerpo. Misteriosamente me decían que ellos eran
como ángeles que habían sido enviados a rescatarme
y que yo tenía propósitos muy grandes en la vida. Me
llevaron al Caí y allí llamaron a mi madre quien me
interno en una Clínica Psiquiátrica. En ese lugar duré

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un mes, tiempo donde me hice muchas preguntas,
sobretodo el por qué el veneno no me había hecho
efecto si me había tomado la cantidad necesaria para
morir porque había investigado muy bien y fue algo
planeado. Al salir de la clínica un amigo que también
era mi compañero de estudio me buscó invitándome
a una iglesia. Decidí dejar un poco tanto
razonamiento y abrir mi mente a la posibilidad de
Dios. En la primera reunión de esa iglesia la primer
canción que escuché decía: “Jesús, has mi carácter
más como el tuyo yo quiero ser, porque en esta vida
hay cosas que pasan que yo no entiendo” y fue a
partir de allí que comencé a experimentar a Dios en
mi vida. Lo que no entendía comenzaba a tener una
razón; aun me hacían falta muchas cosas por hacer.
Con mucha dificultad logre continuar mis estudios
pues no tenía ya trabajo para sostener la universidad.
Tuve muchas veces que caminar desde Floridablanca
que era donde vivía hasta Bucaramanga que es donde
queda la universidad, más o menos 9 kilómetros de
ida y 9 kilómetros de venida, era como 2 horas y algo
yendo y 2 horas y algo viniendo. Luego mientras fui
conociendo a Dios durante varios años, estudiando la

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Biblia, realizando misiones en varios pueblos de
Santander y afianzándome en la fe comprendí que si
le pedía a Dios su apoyo él me lo daría y en medio de
un ayuno de varios días pude conseguir un trabajo en
un Centro de Rehabilitación. Allí comencé a aprender
acerca de los problemas del consumo de drogas,
depresión, comportamiento, crisis familiares,
ludopatía y demás. Dios comenzó a mostrarme lo que
debía hacer y cómo podía servir mi vida para ayudar
a muchas personas. Tuve que pasar mucho tiempo
sin estudiar, luego me tocó trabajar medio tiempo y
estudiar el otro medio tiempo hasta lograr culminar
todo. Durante 5 años acumulé experiencia para tratar
el problema de la adicción, mi profesión me llevó a
investigar, a leer, estudiar y prepararme para
orientar a las familias. En ese trayecto logre atender
más o menos dos mil casos de consumo de drogas y
familias, pude ayudar desde la parte espiritual a
jóvenes a través de vigilias, ayunos, devocionales,
consejería y también a sus familias en terapias y
escuelas de padres. En aquella época conocí a mi
maravillosa esposa (Julia María Arrieta) quien me
alienta todos los días a llegar de la mano del Señor a

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muchas personas y por eso hoy me siento
complementado enormemente por el amor de un
hogar conformado. Lo que hacía me llenaba mucho
pero sabía que necesitaba extenderme más para
ayudar de una manera profunda y personal a los
padres de familia que sufren por sus hijos. Este libro
lo hago como una guía práctica para cada hogar con
la finalidad que las familias aprendan a enfrentar y
proteger a sus hijos del flagelo de la depresión y
prevengan el suicidio que quiere destruir nuestra
sociedad y juventud. Este libro combate este
problema desde el conocimiento y la experiencia
enseñando a las personas a cuidar de sus seres
queridos para motivarlos a amarse a ellos mismos y
ver la vida como una oportunidad para dejar huellas
positivas imborrables en medio de una sociedad
necesitada de amor.

TODA LA GLORIA SEA PARA DIOS.


¡BENDICIONES!

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Dedicado a Dios quien me dio

la oportunidad de seguir aquí

cuando intente quitarme la vida,

a mi esposa que es mi motor

mi motivación y mi más profundo amor

quien me fortalece cada día con su

amor, a mis padres que me aman

y me han dado el mejor de los ejemplos.

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CAPÍTULOS

INTRODUCCIÓN Página 17

1. ¿QUÉ ES LA DEPRESIÓN? Página 23

2. ¿POR QUÉ LOS JÓVENES SE


DEPRIMEN? Página 29

3. ¿CÓMO SE PASA DE LA DEPRESIÓN


AL SUICIDIO? Página 37

4. COMPORTAMIENTOS DE UNA
PERSONA CON IDEAS SUICIDAS
Página 45

5. FORMAS DE INTENTO DE SUICIDIO Y


CÓMO AUXILAR Página 57

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6. ¿CÓMO AUXILIAR A UNA PERSONA
QUE ESTE EN DEPRESIÓN Y QUIERA
SUICIDARSE? Página 71

7. ¿CÓMO AYUDAR A RECONSTRUIR EL


SENTIDO DE LA VIDA? Página 83

8. TÉCNICAS PARA EVITAR LA


DEPRESIÓN EN OTROS Página 91

9. ¿CÓMO LA VIDA ESPIRITUAL


ELIMINA LA DEPRESIÓN? Página 101

10. TESTIMONIO DE CÓMO VENCÍ LA


DEPRESIÓN Página 109

11. TERAPIAS Y SERVICIOS Página 121

ORACIÓN FINAL Página 127

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INTRODUCCIÓN

Cada día que vemos en noticias que informan de un


joven que decidió ahorcarse por una pena amorosa;
de un niño se cortó las venas hasta desangrarse fruto
del bullying que sufría en su colegio; de un
adolescente que se lanzó de un puente cansado de ver
cómo sus padres se maltrataban; de un muchacho
que se pegó un tiro en la cabeza porque no le
encontraba sentido a su vida; o de una niña que se
envenenó porque se sentía fea y gorda. Ante esto
sentimos seguramente lastima por esas personas y
damos un juicio diciendo ¡qué cobardes! O
¡pobrecitos! Ya que sólo nos importa leer la noticia
porque surge el morbo de encontrar una foto que
muestre cómo quedo la persona o simplemente saber
cuáles fueron sus intenciones para tomar esa

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decisión para sentir lástima. ¿No imaginamos acaso
que esas personas que aparecen en las noticias
podrían, tal vez, ser un familiar cercano o un
conocido? Vemos estos casos como ajenos a nuestros
problemas y no vamos más allá para analizar que el
suicidio se ha convertido en un problema serio que
puede atrapar a cualquiera. Y es que la decisión del
suicidio puede tener motivos que a la vista de
muchos pueden ser tontos comparado con los
problemas que otras personas tienen a diario, pero
nadie sabe a ciencia cierta de qué forma el otro
experimenta el dolor en su mente y cómo este dolor
le crea pensamientos desesperantes que le dan como
única opción el quitarse la vida como forma de aliviar
el dolor de su alma.

Para que una persona llegue a la acción del suicidio


es porque durante mucho tiempo ha acumulado ese
pensamiento que ha ido tomando fuerza con cada
situación negativa que le ha sucedido. Nadie se
suicida de la noche a la mañana sin haber pasado
muchos meses antes pensándolo y planeándolo.
Precisamente por esta razón es que el suicidio se
puede prevenir, porque la idea de hacerlo se

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desarrolla en un largo periodo de tiempo, lo que
quiere decir que se puede intervenir antes de su
ejecución.

Por ello quiero revelar una verdad que está en todo


suicida tomándola desde mi propia experiencia
personal y de la experiencia de muchos pacientes que
he atendido: El suicida siempre espera ser rescatado
antes de ejecutar su muerte, porque al fin y al cabo lo
que más le interesa es encontrar una esperanza que
le permita darse cuenta que su vida es importante y
que hay razones para continuar en este mundo.

Las personas, en especial los jóvenes, le están


perdiendo el sentido a la vida. Ya no creen que se van
a ir al infierno si llegan a suicidarse, simplemente le
han perdido el valor a la vida porque sienten que es
lo mismo estar vivo que estar muerto, y que si están
vivos sufren, pero si están muertos no hay ningún
dolor; de esta manera concluyen que morir es mejor
que vivir.

No podemos permitir que más vidas se sigan


perdiendo y que el futuro de esta sociedad esté en
manos de jóvenes desmotivamos que se odian. Toda

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persona es importante para la sociedad. Además en
cada uno de nosotros hay un universo de
posibilidades de donde surgen ideas valiosas que
pueden hacer de este mundo un mejor lugar.

Una persona que se quita la vida es una pérdida


irreparable porque esa persona hubiera podido ser
un gran artista que alegrara corazones o un excelente
médico que hubiera descubierto la cura para una
enfermedad. Cada persona tiene algo para aportar a
los demás y esto es motivo suficiente para considerar
que todos son valiosos.

La persona que se suicida deja siempre una herida


demasiado grande en su familia y los seres que la
aman. Saber que alguien murió antes del tiempo
natural es algo que confunde y destruye a quienes
están alrededor; sin contar con los sentimientos de
culpa que atormentan a las personas cercanas.

Por esta razón el tema que aquí se trata es para


aprender a intervenir en la antesala del suicidio, para
aprender a ser héroes rescatistas de vidas que
merecen llegar a cumplir sus sueños.

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La causa del suicidio es la depresión porque
absolutamente nadie se suicida de la noche a la
mañana. Es la depresión el virus que contagia a la
mente con ideas suicidas. Por ello entraremos en un
proceso de aprendizaje que nos llevará a evitar que
más vidas se destruyan.

Es importante que estudiemos cómo surgen las ideas


suicidas desde su origen más profundo y de qué
forma intervenir la depresión para prevenir a los
jóvenes de hacerse daño a sí mismos.

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¿QUÉ ES LA DEPRESIÓN?

Antiguamente, entre los años 400 y 300 antes de


Cristo, lo que hoy se conoce como depresión era más
conocida por la palabra melancolía, la cual fue
definida por un médico de la antigua Grecia llamado
Hipócrates quien decía que ésta se producía por un
exceso de bilis negra que causaba un
comportamiento apático y abatido, por eso la palabra
melancolía viene del griego melas (negro) y kholé
(bilis) que juntas forman melancolía, es decir, bilis
negra. Hipócrates la asociaba con una enfermedad. Si
la persona duraba con todos sus miedos y desalientos
durante mucho tiempo entonces su causa era el
exceso de bilis negra. De aquí también este médico
tomó la palabra melancolía para catalogarla dentro

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uno de los cuatro humores o temperamentos como el
temperamento melancólico.

Luego en 1725 un médico británico llamado Sir


Richard Blackmore le cambio el nombre al mal de la
melancolía por el término de depresión, que antes de
la aparición de la psiquiatría era tratada por medio
de rituales mágicos y terapias prácticas tales como
escuchar música, salir a pasear y dietas alimenticias.

La palabra depresión viene del latín depressio-


depressionis que significa hundimiento, fruto de la
presión que se ejerce de arriba hacia abajo sobre
algo. El prefijo de de la palabra de-presión habla de
una fuerza que se ejerce de arriba abajo, y la palabra
presión habla de una fuerza contra algo. Es así que
depresión, en el sentido literal significa una presión
hacia abajo que causa hundimiento, y en el sentido
emocional significa derrota o abatimiento de la
persona.

Luego con la aparición de la psiquiatría la depresión


pasa a ser catalogada como un trastorno mental, es
decir, una enfermedad que para tratarse requiere el
uso de medicina.

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Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la
depresión es un trastorno mental frecuente que se
caracteriza por la presencia de tristeza, pérdida de
interés o placer, sentimientos de culpa o falta de
autoestima; en fin una enfermedad que afecta a más
de 300 millones de personas en el mundo y es la
principal causa de suicidio.

La depresión se considera un trastorno mental


porque afecta el estado anímico de una persona
haciendo que este sea muy bajo, la persona se ve
poco activa y con la sensación de no querer hacer
nada. Este estado anímico bajo es producido por
pensamientos negativos que constantemente surgen
en la mente de la persona. Algunos ejemplos son
como “no sé para qué vivo” “no soy feliz” “nadie me
quiere” “no sirvo para nada” “todo me sale mal” “soy
muy feo” “me siento solo” etc. Al irse acumulando en
la mente pensamientos así, estos influyen
directamente sobre el comportamiento
modificándolo. Hacen que la persona no quiera
levantarse de la cama, llore frecuentemente, no tenga
interés en arreglarse, publique en sus redes sociales
imágenes o escriba cosas referentes a la muerte, y

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también hacen que la persona pueda hacerse daño
cortándose los brazos o las piernas, pierda el apetito,
o en el grado más alto, termine suicidándose.

La depresión es entonces una enfermedad que afecta


la mente y se refleja en el cuerpo, en el semblante del
rostro, en el lenguaje negativo y pesimista que use la
persona. Es así que como enfermedad necesita
prevención, tratamiento y observación para
salvaguardar la integridad física del depresivo. Los
psiquiatras suelen formular medicamentos llamados
antidepresivos como la fluoxetina, citalopram, paxil,
venlafaxina y duloxetina que actúan sobre el sistema
nervioso central y ayudan, de manera artificial, a
regular los estados anímicos de forma temporal.
Estos medicamentos no curan la depresión y
mientras una persona no cambie las ideas que tiene
en su mente, sin importar cuántos medicamentos
tome, su depresión nunca se irá, y sí generará una
dependencia muy perniciosa a estos medicamentos.

Así que más allá de que la depresión sea una


enfermedad mental, hoy día es un problema de salud
pública constatada por el incremento de personas
que la padecen y las consecuencias que está

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generando al poner en riesgo la vida y la integridad
física de los que los mismos.

Ante un panorama tan grave y que año tras año va en


aumento debemos conocer muy a fondo esta
enfermedad porque nadie está exento de padecerla,
ni nosotros mismos, ni las personas cercanas y
mucho menos nuestros hijos.

Cada año esta enfermedad provoca que se suiciden


cerca de 800.000 personas en el mundo, siendo el
suicidio la segunda causa de muerte en el grupo de
edades de entre los 15 a 29 años según la OMS, es
decir, más de dos mil personas diariamente. Si estás
cifras siguen así, en unos 50 años se habrá suicidado
el equivalente a la población actual de Colombia o
Argentina; salvo que estas cifras aumenten podría
llegar a ser la población de un país más grande.

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¿POR QUÉ LOS JÓVENES SE
DEPRIMEN?

Tomando la definición de la OMS vemos claramente


que una de las características de la depresión es la
presencia de tristeza, la cual no es ajena a los niños y
jóvenes de esta época por múltiples razones, como
por ejemplo la exponencial desintegración familiar.
Un informe del Supernotariado indicaba que en
Colombia diariamente 135 parejas se unen en
matrimonio, mientras que 60 se separan, un
promedio de 45% de divorcios. Si en estos 135
matrimonios surgen hijos, y casi la mitad de los
casados se separa, estos niños van a crecer con
amplios vacíos emocionales al no tener a sus papas a
su lado y vivir seguramente toda la serie de conflictos
y abandonos que tengan. Esta desintegración familiar

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es una de las causas que está provocando tristeza en
la generación creciente.

Por otro lado los estándares de belleza y aprobación


están más elevados que nunca. La cantidad de
cuidados tanto en hombres como mujeres por tener
una figura fitness, los cuidados de la piel, diseños de
sonrisa, las cirugías estéticas, la moda, y el tener
redes sociales llenas de fotos (donde constantemente
la imagen física de la persona está expuesta), videos
buscando likes y amigos virtuales han hecho que el
mundo superficial sea lo más importante para los
jóvenes que crecen en estos nuevos parámetros de
sociedad, donde su angustia se agudiza si reciben
comentarios negativos en sus redes y no alcanzan los
estándares de belleza actuales creando depresión.

Para los padres de familia que crecieron en una época


donde existía un concepto de familia más organizado,
(donde el internet no robaba el tiempo de nadie y el
sentarse a la mesa a comer juntos, salir a paseos,
dialogar, jugar y reunirse constantemente con los
demás miembros de la familia eran los ejes de una
salud mental sana) les resulta difícil entender cómo
actualmente sus hijos sufren por cosas que parecen

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absurdas. Pero hay que entender que esta sociedad
ha cambiado y fruto de ello se debe al avance de las
tecnologías y las telecomunicaciones. Actualmente la
percepción de realidad y verdad depende del mundo
virtual.

Hoy todo es inmediato, tan rápido que no hay tiempo


para pensar y disfrutar. Sólo importa el presente, la
noticia viral del momento, lo que se deba hacer de
moda para publicar, haciendo que todos los
protocolos se estén eliminando. Las relaciones
sexuales no tienen los protocolos de hace unos años
donde existía un conocimiento del otro a través de
una amistad que luego producía un noviazgo y por
último el matrimonio. Ahora por medio del internet
existen aplicaciones exclusivas para concertar citas
sexuales con otras personas sin importar cuan
desconocidos sean. Ya casi nadie se toma el tiempo
de preparar una comida en casa porque solo con un
par de clicks en su móvil pide lo que se le antoje y en
10 minutos llega a su casa. El amor se transformó en
emoticones enviados que reemplazan la profundidad
de las palabras y el esfuerzo de pensar frases que
vengan del corazón. Ya las personas han dejado de

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contemplar el cielo y su alrededor, ahora sus cabezas
siempre están inclinadas ante un teléfono móvil. Los
viajes ya no se disfrutan porque lo más importante es
tomar una selfie (foto) para decir que estuvieron en
tal o cual parte. Si esto sigue así en unos años ya las
personas hasta dejarán de ir a cine, porque a través
de las Plataformas de video Streaming como Netflix
o Amazon Video nadie necesitará salir de casa a
compartir el Séptimo Arte.

Con todo lo expuesto, es obvio que surja tristeza y


depresión en esta sociedad tan superficial e
inmediatista que está perdiendo lo humano para
convertirse en una sociedad mecanizada de consumo.
Los jóvenes están perdiendo la identidad porque no
logran saber quiénes son ellos mismos. Si observa a
su alrededor al caminar por un Centro Comercial se
va a dar cuenta que muchos jóvenes están vestidos de
una forma similar expresándose de forma similar y
pensando de forma similar sin encontrar una
diferencia considerable entre uno y otro. Esto pasa
porque la juventud ya no tiene identidad y
simplemente se han vuelto una copia exacta de la
moda del momento. Por esta razón la depresión los

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invade porque simplemente ya no saben para qué
tienen una vida. Todo es impuesto por la moda del
momento.

En la definición de la OMS también encontramos


como características de la depresión la pérdida de
placer y la falta de interés por las cosas. Estas dos
características surgen porque la sociedad se está
construyendo dentro del marco del mínimo esfuerzo.
En almacenes y por internet se promocionan
productos que nos hacen absolutamente todo siendo
el único esfuerzo conectar el aparato al tomacorriente
y oprimir un botón. Las personas piensan que esto es
progreso porque facilita mucho la vida y seguramente
nos ahorra tiempo para hacer otras cosas. Pero la
verdad es que entre menos tiempo gastemos con la
ayuda de los aparatos de última tecnología, menos
tiempo también dedicamos a lo importante para el
desarrollo de nuestra personalidad y la interacción
con el mundo. Todo el tiempo que las personas
ahorran con los avances actuales lo invierten en
visitar sus redes sociales para ver fotos y videos que
no aportan ningún conocimiento nuevo.

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El inmediatismo y la facilidad de hacer todas las
cosas conducen, poco a poco, a la pérdida de placer y
el interés por la vida. Cuando no debemos
esforzarnos para alcanzar algo nuestro propio
sistema nervioso central deja de producir dopamina
provocando la pérdida del placer. Si el esfuerzo no es
necesario entonces no existe la motivación
desencadenando la enfermedad de la depresión.

Los niños son los más expuestos al mundo del


mínimo esfuerzo ya que los padres los están
educando bajo patrones muy errados de crianza. La
sobreprotección, la complacencia de sus deseos, la
falta de diálogo, la falta de límites, de normas, de
deberes, lleva a los niños a creer que el mundo debe
girar en torno a ellos y que si los papas no cumplen
su caprichosa voluntad entonces sienten el derecho
de insultar y atacar a las mismas personas que los
mantienen y les dieron la vida. De esta forma los
niños crecen con baja tolerancia a la frustración, y
cuando por fin comprenden que la vida no es como el
mundo de fantasía en el que sus padres los
malcriaron llegan muy fácilmente a sentirse
frustrados y deprimidos.

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Retomando lo anterior, llegamos a la conclusión que
los jóvenes se deprimen porque se están
desarrollando en un mundo artificial y vanidoso que
les hace perder el sentido de su vida. Un mundo que
les da todo de forma muy fácil e inmediata
robándoles la motivación y el esfuerzo que son
cualidades necesarias para que sus cerebros generen
dopamina, que es un neurotransmisor encargado de
la motivación y la generación de los factores de
recompensa.

Si el cerebro de un niño y un joven no es estimulado


para que piense y se esfuerce en crear formas y
métodos de conseguir metas en la vida y alcanzar
logros, la depresión aparecerá por su misma falta de
motivación.

Esta sociedad que crece se deprime porque su vida no


tiene propósitos y sólo se enfoca en la vanidad y el
momento. La sociedad se está educando para pensar
en un presente inmediato y no se enfoca al futuro. Al
ser tan vanidoso el pensamiento actual se están
descuidando los valores y la parte interna del ser
humano, sus sentimientos, la relación con su familia

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y el hecho de entender que la vida es mucho más que
el dinero y las apariencias materiales.

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¿CÓMO SE PASA DE LA DEPRESIÓN
AL SUICIDIO?

Cuando una persona tiene desmotivación por la vida


y no se esfuerza para nada en lograr algo, cuando se
preocupa más por la vanidad de la belleza y la
apariencia, cuando todo debe ser inmediato y no
tiene paciencia, comienza a ver su vida con muy poco
valor. Una persona que dependa de todos los
parámetros que aquí se han expuesto para lograr la
felicidad fácilmente llega a la pérdida del sentido de
su vida.

Con estos ejemplos expondré el problema:

Pensemos un momento en un joven que tiene en sus


redes sociales numerosos seguidores y suscriptores

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que ha acumulado durante mucho tiempo, y todo lo
que publica allí, fotos y videos, lo hace con el ánimo
de recibir buenos comentarios y me gusta. Entonces
su sentido de felicidad depende de todo lo que tiene
en sus redes sociales, de un mundo virtual. Allí
siempre se muestra sonriente y hace cosas para
buscar el agrado y la aprobación de los demás. Ahora,
si por alguna razón cometiera un error o hiciera una
publicación que no le gustaría a sus seguidores y por
ello comenzara a ser criticado u ofendido, perdiendo
día a día suscriptores, entonces su estado emocional
decaería pensando que su vida no vale nada. Además
todas las críticas recibidas le afectarían ampliamente
su autoestima basada en la aprobación de los demás,
llevándolo poco a poco a una profunda depresión, la
cual le comenzaría a crear en su mente pensamientos
que le dirían que es mejor no vivir a tener que
soportar críticas y vivir sin amigos virtuales. Por
increíble que parezca la nomofobia (miedo a estar
desconectado a las redes sociales o teléfonos móviles)
es una realidad que genera depresión.

Otro ejemplo que podemos usar es pensar en una


niña que tuviera problemas de sobrepeso y estudiara

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en un colegio donde ella fuera la única con ese
problema. Al ser diferente de las otras niñas y en
medio de una sociedad de estrictos parámetros de
belleza, seguramente esta niña recibiría
innumerables ofensas y burlas de parte de sus
compañeros. Esto haría que la niña no se sintiera con
motivación de ir a estudiar y podría llevarla a
extremos de no comer y hacer lo que fuera para
adelgazar colocándola en inminente peligro. Ahora,
si esta niña no lograra sus objetivos de adelgazar
entraría a una profunda depresión primero, por no
ser aceptada por los demás y segundo, por no ser
capaz de aceptarse a sí misma; además, las solas
ofensas en un principio serían motivo suficiente de
depresión. Fácilmente toda su tristeza acumulada
llevaría a esta niña a creer que sería mejor no vivir a
seguir soportando las burlas y el desprecio de los
demás.

Para agregar otro ejemplo, que complete esta


explicación, imaginemos un niño que ha crecido en
un hogar de padres separados donde vive con su
madre, y a veces, los fines de semana, comparte
momentos con su padre. Si este niño ve que sus

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padres discuten por los gastos que él genera y porque
muchas veces su padre le promete visitas y regalos
que no cumple, entonces el niño comenzará a sentir
que él es una carga para sus padres, y que estos lo
tratan como un objeto que es llevado de una parte a
otra. Esta situación le producirá depresión llenando
su mente de sentimientos de rechazo que lo harán
pensar que es mejor no vivir a ser un estorbo para su
familia.

Con estos ejemplos demostramos que la depresión


genera, a lo largo del tiempo, pensamientos que
conducen al suicidio, o dicho de otra manera, a
considerar que sería mejor no vivir que estar vivo.
Muchas veces los jóvenes se acuestan a dormir con la
esperanza de no despertar al otro día porque sienten
que su vida es como un peso insoportable que no
quieren llevar más. Otras veces quisieran que su
mente explotara para que no existieran dentro de ella
tantos pensamientos negativos que los atormentan.

Cuando un joven se deprime es porque en su mente


comienza a concluir que los problemas que enfrenta
no tienen una solución posible o real, entonces
aparece la frustración que lo ata al negativismo. A

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partir de aquí la idea de no vivir surge como la última
y más efectiva decisión. El suicidio aparece primero
como una idea que crecerá conforme el joven tenga
experiencias malas.

Para que una persona tome la determinación de


suicidarse es porque ha pensado este hecho durante
mucho tiempo. De seguro en internet comenzará a
buscar formas efectivas de suicido porque la
intención será acabar con la vida ya que no querrá en
un intento de suicidio quedar vivo y con secuelas
graves que le vayan a complicar mucho más su
existencia.

Una vez se efectúa el suicidio ya no hay vuelta atrás,


la persona ya no estará en este mundo para ser
ayudada (salvo que en el intento de suicidio la
persona sobreviva) Por ello es muy importante que la
ayuda se preste pronto, en el mismo momento que la
familia comience a notar la depresión de su ser
querido.

Lo cierto es que nadie quiere sufrir de depresión.


Aquellos que la sufren se sienten en una cárcel, como
si estuvieran presos en su mente y no tuvieran la

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oportunidad de escapar. La persona depresiva no
tiene comportamientos negativos porque esa sea su
decisión, no es voluntaria su forma de ser. Lo que
menos quiere un depresivo es sufrir depresión, por
ello hay que entender que lo que realmente padece la
persona es una enfermedad, y como toda enfermedad
hay que tratarse para obtener una cura efectiva.

Analizando de manera más profunda el problema de


la depresión vemos que esta conduce al suicidio a
medida que se alimenta de vivencias negativas que
van dando peso a argumentos que concluyen que: si
no hay vida tampoco hay sufrimiento. Pero el
problema de los depresivos no es tanto el sufrimiento
ya que éste es innato al ser humano. No se puede
evitar sufrir por una u otra cosa. El problema de los
depresivos es la forma como enfrentan el
sufrimiento.

Para un depresivo sufrir no es aprender que las cosas


se deben tomar con un propósito o que se debe
cambiar la manera de hacer las cosas. Es en cambio
una herida que da vueltas en su cabeza y los lleva a
preguntarse ¿qué estoy pagando en esta vida? O ¿por
qué solamente me pasa esto a mí? Después de

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intentar dar muchas respuestas a estas preguntas los
lleva a otra pregunta más radical ¿para qué sigo
viviendo si lo único que hago es sufrir?

Las personas que tienen depresión se vuelven muy


sensibles ante cualquier situación. Hasta la más
mínima mirada que les hagan de mala forma los
derrumba y los lleva a dar vuelta a sus problemas una
y otra vez sin encontrar respuestas. Una persona
depresiva no desarrolla mecanismos de defensa que
los lleven a contrarrestar las ofensas, el rechazo ni las
situaciones amargas que vivan. Simplemente acepta
lo que se le diga como una verdad que no se puede
refutar y la guarda en su corazón como una razón
más para despreciar su propia vida.

El depresivo no se defiende, descarga su ira y dolor


contra sí mismo para en últimas acabar con el único
culpable de sus males, con su propia existencia. De
aquí que una persona en estado de depresión viva
encerrada en sí misma y no exprese mucho sus
pensamientos. En esta persona solo podremos
encontrar pesimismo en su lenguaje.

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Es clara entonces la manera cómo de la depresión se
pasa al suicidio, entre éstas se va formando un
puente a lo largo del tiempo que cuando termina de
construirse solo surgen dos posibilidades: la muerte
o, una nueva oportunidad de seguir vivo. Así que
nadie debe apostar cuál de las dos opciones ganará,
antes bien hay que ayudar a la persona en depresión
antes que su mente alimente la idea del suicidio.

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COMPORTAMIENTOS DE UNA
PERSONA CON IDEAS SUICIDAS

Cuando se trata de una persona con problemas de


depresión es muy importante estar al tanto de sus
comportamientos, ya que en la medida que la
depresión este presente, las ideas suicidas se van a ir
desarrollando a lo largo del tiempo. Pero ¿cómo
sabemos si una persona cercana tiene ideas suicidas?
Analicemos lo siguiente:

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Si una persona, presenta estos comportamientos, en
especial un joven, tales como:

Vivir muy aislado del resto de la gente

No expresar sus emociones

Mantener un semblante apagado

Caminar cabizbajo

Pensar y hablar de forma pesimista

Sonreír muy poco y llorar demasiado

Ausencia de vida social

Autolesiones

Pensar negativamente de sí mismo

Dormir demasiado

Escuchar obsesivamente música que tenga mensajes


tristes y negativos

Poco apetito

Ausencia de proyección al futuro

46
Entonces en su mente se pueden desarrollar ideas
donde conciba que mejor le sería no vivir que seguir
en este mundo. Aquellos que viven con depresión
guardan en su corazón todo lo malo que les sucede y
durante mucho tiempo acumulan su tristeza, la cual
se va concentrando hasta afectar sus estados
anímicos y modificar el comportamiento, labrando
poco a poco un camino hacia su autodestrucción.

En la mente de un depresivo sus pensamientos son


muy oscuros y desesperanzadores. Primero comienza
cuestionando el por qué tiene que sufrir tantas cosas
malas como: rechazo, bullying, no alcanzar sus
metas, maltrato, falta de amor y soledad. Luego se
comienza a comparar con las otras personas viéndose
a sí mismo como alguien que no es normal. Sus
pensamientos lo limitan a considerar que su vida no
es valiosa y por ello estar vivo es un desperdicio.
Después de construir estos pensamientos comienza a
imaginar cómo sería no existir. Aquí él siente alivio
cuando se ve como alguien que no está en este
mundo porque visualiza que toda su tristeza se va y
que ya su mente no lo atormentará más. En muchas
ocasiones los depresivos piensan que si mueren

47
pueden llegar a otra vida que sea mucho más justa
con ellos. Si sintieran lo contrario: que la acción de
huir de la vida les traería un castigo, pondrían todo
su empeño en superar sus problemas.

La pérdida de la esperanza, del que ha caído en


depresión, le hace ver la vida como el verdadero
infierno del cual quiere escapar pronto. Esto hace
que su comportamiento gire en torno a sus
pensamientos negativos. Se vuelve aislado porque
siente que nadie lo puede entender y piensa que si
cuenta sus problemas a los demás, seguramente va a
recibir críticas porque nadie entiende lo que vive en
su interior.

La persona depresiva vive todo dentro de su mente y


comienza a pensar una y otra vez en las malas
experiencias que ha tenido. Sus pensamientos se
vuelven repetitivos y obsesivos porque están dentro
de un laberinto que no tiene salida. Trata de hablar
consigo mismo sin encontrar respuestas valiosas sino
razones para justificar el por qué es mejor no vivir y
aquí es donde se van desarrollando las ideas suicidas.

48
Cuando la persona va llevando su mente a formular
la muerte como solución y no expresan sus
emociones, muchas veces manifiestan su
inconformidad sobre la vida escribiendo en
cuadernos que guardan celosamente. Allí consignan
todos sus pensamientos y planes, y van contando
cómo poco a poco sus ideas de muerte se hacen más
fuertes. Es importante que si tiene un familiar con
problemas de depresión le revise muy bien su cuarto
y lea absolutamente todos los cuadernos que tenga.
También, las personas con ideas suicidas suelen
hacer publicaciones en sus redes sociales que
expresan lo que están sintiendo, por eso haga
también un seguimiento de sus redes para que
observe qué tipo de cosas está sintiendo su familiar.

El aislamiento es otro punto importante de las


personas con ideas suicidas. Si su pensamiento hacia
la muerte se ha vuelto intenso, lo que menos quiere
es tener a alguien que tenga conocimiento de sus
ideas suicidas, ya que se verían acosados por esta
persona intentando darle motivos para que no piense
en suicidarse. Lo que menos quiere una persona con
ideas suicidas es escuchar sermones acerca de la

49
vida. El depresivo solo quiere ser comprendido en su
tristeza y no juzgado.

La ausencia de vida social hace que el pensamiento


de la persona no considere sino sólo sus propias
ideas y que cada vez más se encierre en sí mismo. La
distancia de la vida social lo vuelve cada día más
desconfiado con las personas y a su vez más
vulnerable para sí mismo. Ese ensimismamiento, en
muchas ocasiones, lleva a la persona a
autolesionarse.

Mientras mayor tiempo pase una persona en estado


depresivo, su mente asimilará el dolor como algo
cotidiano que debe acostumbrarse a sentir. Al no
encontrar soluciones a sus problemas, el depresivo se
aferra a su dolor como los únicos sentimientos que
tiene y empieza pensar cómo desahogarse. En este
punto las autolesiones son la forma como convierte
su dolor en un sentimiento de placer que le brinda
paz y descanso.

Cuando alguien es capaz de atacarse a sí mismo a


través de cortadas, golpes en la cabeza, quemaduras y
pellizcos, es porque su dolor se ha acumulado tanto

50
que su mente no es capaz de contenerlo y necesita un
canalizador para despejarse un poco. Las
autolesiones son la forma de regular la carga mental
tan desesperante que vive un depresivo. Esto es así
porque la sensación de dolor físico hace que el
cerebro se concentre en el dolor del cuerpo poniendo
a la mente en pausa temporal. De esta manera el
depresivo siente satisfacción por haber sido capaz de
detener los pensamientos obsesivos y negativos que
la mente le produce.

Muchas personas con comportamiento depresivo se


vuelven sadomasoquistas hasta en su parte sexual,
también se exponen a parejas abusivas y
maltratadoras. En muchas ocasiones vemos mujeres
que buscan siempre a hombres posesivos, muy
celosos, violentos y con amplios problemas de
inseguridad. Esto obedece a que la mujer depresiva
encontró en su pareja violenta una forma de sentirse
importante para alguien, a tal punto de ser capaz de
soportar el maltrato para demostrar amor. Los golpes
e insultos que reciba serán manifestaciones afectivas
fuertes que contrarrestan el dolor que ha acumulado
en su pasado. Obviamente esto no es nada sano para

51
la persona depresiva y se pone en riesgo. La mujer
difícilmente dejará a esta persona maltratadora, y si
llega a dejarla, conseguirá otra pareja igual.

Hay que entender que las autolesiones y la búsqueda


de dolor como placer son los primeros pasos fuertes
que conducen al suicidio. Poco a poco la persona
perderá el miedo a lastimarse cada vez de forma más
fuerte hasta que llegue a hacerse una herida fatal.

Si su familiar es una persona depresiva debe revisarle


los brazos y las piernas y observar muy bien si tiene
pequeñas cortadas. Las personas depresivas intentan
ocultar sus heridas colocándose abrigos, sacos y
prendas que tapen completamente su cuerpo. Es
importante que también observe si tiene quemaduras
y morados, todo esto indica que ha entrado en un
comportamiento peligroso.

A medida que avanza la depresión el lenguaje va


cambiando y se torna muy pesimista, todo lo ve
oscuro y sin sentido. Para saber si la persona tiene
este tipo de lenguaje hay que preguntarle sobre su
futuro y analizar lo que responda. Si la persona
manifiesta que no ve futuro en ella, o que no tiene

52
sentido pensar en el futuro porque de todas maneras
concluye que le va a ir mal, está mostrando un estado
depresivo avanzado. Significa que ya ha hecho
muchas conclusiones en su cabeza que no son buenas
y está ideando morirse pronto. También, en medio de
una conversación, si usted le comenta algo positivo
seguramente va a recibir un comentario
desesperanzador por parte del depresivo. Por
ejemplo, usted le cuenta que tiene nueva pareja, y el
depresivo le dice algo como: al menos a usted alguien
lo quiere, a mí nadie me quiere.

Las manifestaciones del depresivo indican si ya tiene


desarrolladas ideas suicidas. Si se aferra a la idea de
soledad, si no concibe proyectos para su vida, si no
manifiesta tener sueños para cumplir y su mirada es
apagada y triste, si su actitud es cabizbaja y si
constantemente habla mal de sí mismo
menospreciando sus habilidades o diciendo que se
siente feo, seguramente su mente está haciendo que
odie su vida.

Una persona que desarrolla ideas suicidas no haya su


lugar en el mundo, por ello no le gusta estar rodeado
de personas ya que siente que todos a su alrededor

53
tienen un lugar definido menos él. Esta persona tiene
la idea que no hay un lugar adecuado para su vida,
que esta no tiene sentido.

La música es otro factor muy importante para


analizar. La estimulación que producen los sonidos
en la mente como medio canalizador del dolor hace
que la persona con ideas depresivas busque letras
negativas. Sus sentimientos de tristeza y
desesperanza tratan de reafirmarse con las letras de
las canciones que hablan de decepción, pérdida,
ausencia de amor, incomprensión, soledad, llanto y
situaciones similares. Una persona con depresión
suele escuchar la misma canción una y otra vez sin
sentir la monotonía. Este comportamiento hace que
los pensamientos de tristeza se vuelvan una ley al
asociar la canción con su propia vida. En muchas
ocasiones la persona depresiva se acuesta a dormir
escuchando esta música negativa haciendo que se
ancle de manera profunda en el subconsciente hasta
convertirla en una verdad. Por ello es fundamental
vigilar lo que está escuchando la persona para
detectar el desarrollo de las ideas suicidas.

54
La pérdida del interés por hacer actividades y por
vivir va llevando a la persona con depresión a dormir
mucho. No quiere estar despierto porque eso le
implica que su mente le traiga pensamientos
negativos continuos. El dormir entonces se convierte
en un consuelo y en la esperanza de que tal vez
cuando despierte ya no estén en la vida que sufren o
se hayan muerto. Aquí la pereza se apodera del
depresivo, su plan es no hacer nada porque nada
tiene sentido, porque no hay una razón que motive su
existir.

Sumado al exceso de sueño y pereza, el depresivo va


perdiendo su apetito. Su mente está tan ocupada con
sus pensamientos que bloquea toda sensación de
hambre del cuerpo, es como si se autocastigara por
estar todavía vivo, como si no mereciera comer
porque le recuerda que la alimentación es una forma
de subsistir. La falta de una buena alimentación baja
las defensas del depresivo y hace que constantemente
se sienta enfermo y tenga virosis, su cuerpo se
descompensa y esto ayuda a aumentar la pereza y el
exceso de sueño.

55
El llanto en una persona depresiva que desarrolla
ideas suicidas es constante. La persona siente un
dolor agónico en su interior que no logra explicar y
siente la necesidad de encerrarse en su cuarto o en el
baño a llorar desconsoladamente durante horas. Su
desesperación puede llevarlo a tirarse al suelo y llorar
como un niño. Por ello las personas depresivas se ven
siempre con los ojos hinchados y el aspecto de su
rostro es cadavérico. Cuando hay tanto llanto la
mente está llegando al tope del dolor que soporta y el
desespero por morirse comienza a agudizarse mucho
más.

Todos estos comportamientos alimentan las ideas


suicidas de la persona depresiva empujándolo al
camino de la muerte. Una vez las ideas aparecen, la
mente comienza el plan para llevar a cabo el suicidio.
De esta manera la persona comienza a buscar por
internet formas de morirse, investiga cuál es la que
más le conviene, comienza a publicar en sus redes
sociales de manera indirecta mensajes de despedida,
comienza a visualizar un mundo sin ella misma y
trata de volverse cada vez más invisible para las

56
personas que lo rodean con el fin de que se vayan
acostumbrando a su ausencia.

Para una familia que tiene alguien con problemas de


depresión debe tomar muy en serio estos
comportamientos para que pueda actuar a tiempo y
lograr detener una tragedia a futuro. La vida de las
personas es muy valiosa y nunca sabemos para qué
grandes propósitos estén destinados los que nos
rodean. Una sola persona puede llegar a transformar
el mundo con sus talentos y obras. Tal vez la persona
que ahora sufra depresión pueda ser un gran
presidente mañana, un excelente conferencista, un
importante deportista o un inventor en potencia.
Toda vida es valiosa y cuidarla es nuestra
responsabilidad.

FORMAS DE INTENTO DE SUICIDIO Y


CÓMO AUXILIAR

57
Como ya vimos la depresión es una enfermedad que
padece una persona que ha dejado de tener
motivación en la vida perdiendo el sentido de la
misma, encerrándose en pensamientos negativos y
conteniendo enormes sentimientos de tristeza y falta
de esperanza llevando a la persona a considerar que
su vida no vale nada creando en ella pensamientos y
acciones suicidas. Así que cuando el suicidio llega ya
no hay nada que hacer a menos que la persona se
salve o alguien la pueda detener en el mismo
momento que intenta quitarse la vida.

Por ello vamos a explorar las diferentes formas en


que una persona planea el intento de quitarse la vida
y qué significado tiene esa forma de hacerlo.

Hay muchas maneras en que una persona puede


intentar quitarse la vida, en algunos casos, puede
sufrir una muerte instantánea y en otros, una muerte
lenta y dolorosa, esto lo expongo con el fin de que su
mente se abra a contemplar cómo piensa el suicida y
cómo va planeando su muerte, ya que este
conocimiento le servirá para que usted salve una vida
y pueda detener a alguien que tal vez está planeando
su propia muerte.

58
Muchas personas depresivas que intentan suicidarse
buscarán hacerlo de diversas formas dependiendo de
la problemática que tengan y cómo perciban la vida y
el dolor. Podríamos pensar que si una persona quiere
quitarse la vida buscara la forma más efectiva de
hacerlo. El suicida no le tiene miedo a su muerte,
pero sí puede tener miedo de la forma de morir, por
eso buscará la forma que más le convenga.

Lanzarse de una altura

Si una persona busca lanzarse desde un piso alto, un


puente o a un abismo, definitivamente no busca la
posibilidad de sobrevivir. El no sufrir de vértigo y
estar colgado de un lugar tan alto le hacen sentir que
no quieren sufrir un dolor muy grande en su muerte,
pero lo cierto es que alguien que intente suicidarse al
lanzarse de una parte alta sentirá que el tiempo va
más despacio, muy a pesar de que esta persona
pueda alcanzar una velocidad de 200 km al caer.
Además, las personas que se lanzan de lugares altos
no mueren siempre de ipso facto, sino segundos o
hasta minutos después, todo depende de la altura de

59
la que se lance. En este punto hay personas que
toman un tiempo antes de lanzarse. En algún lugar
de su conciencia buscan que alguien lo rescate
convenciéndolo de no lanzarse pero cuando llega
alguien hasta donde está el suicida se puede poner en
peligro el mismo rescatista.

Si la persona demora mucho tiempo en lanzarse es


porque realmente no lo quiere hacer, y aquí es muy
importante el trabajo del rescatista, quien puede
persuadir a la persona para que no lo haga diciéndole
cosas que prometan una solución a su situación y
brindándole muchas razones para seguir con vida,
tales como hablarle de la familia y contándole
experiencias malas que le hayan pasado también y
contando la forma como las superó. Algunas veces,
personas morbosas les gritan: tírense, salte. No se
debe tomar en juego ver a una persona colgada de un
lugar alto, ni pensar que sólo está llamando la
atención, ya que está a un salto de quitarse la vida.
Algunas veces, la persona que está en esa altura
puede padecer problemas mentales o estar bajo el
efecto de una droga.

60
Las personas que tienen la intención de saltar de
lugares altos, por lo general tienen muchas deudas o
lo hacen por motivos de rupturas amorosas. Estas
personas generalmente se suicidan fuera de su casa
porque sus problemas son externos. Es decir, si es un
noviazgo que terminó o una separación y las
personas no viven juntas el suicidio lo realizarían
fuera de la casa.

Cuando el intento de suicidio se da por problemas


familiares o en la misma casa, generalmente el
suicida quiere dejar huella en su hogar como medio
de manifestar su inconformidad al problema que allí
se haya desarrollado y dejar presente un sentimiento
de culpa a los demás si es que la persona vive con
otros miembros de la familia. El suicidio se puede dar
por ahorcamiento, envenenamiento, intoxicación por
pastillas o cortándose las venas para desangrarse. En
estos casos algunos suicidas esperan ser hallados a
último momento para ser rescatados; otros
simplemente lo hacen durante la noche para ser
hallados por la familia al otro día sin que haya
posibilidad alguna de sobrevivir.

61
Ahorcamiento

Cuando la persona se ahorca es claro que la muerte


que busca es rápida y menos dolorosa. Aquí no hay
mucho tiempo para rescatarla, son pocos los minutos
antes de que muera por asfixia, más o menos unos 2
a 5 minutos. En este caso se debe estar alerta
siempre. Si un familiar suyo sufre de depresión, la
cual se ha generado por conflictos familiares, procure
revisar siempre cuando su familiar se duerma en la
noche, también verifique que esa persona no tenga
heridas o marcas en el cuello pues son indicios de
que tal vez ha estado intentando ahorcarse. Muchas
veces las personas que intentan estas formas de
suicidio dan mensajes de despedida antes de cometer
el acto en redes sociales o dejan cartas. Si por alguna
razón encuentra a una persona en estado de
ahorcamiento, de forma inmediata debe bajarla de
ese lugar y comenzar a darle los primeros auxilios,
compresiones en el pecho y respiración boca a boca
(RCP). Usted no sabe cuánto lleve esa persona ahí
colgada y puede estar a tiempo de salvarla. No se
desespere ni salga a buscar ayuda, baje a esa persona
de allí y bríndele los primeros auxilios.

62
Envenenamiento

Las personas que usan veneno para suicidarse


escriben también cartas de despedida justificando su
decisión y tratando de dejar un mensaje para
aquellas personas que lo rodean. Este tipo de intento
de suicidio puede generar un dolor muy grande en la
persona que se envenena. Muchas veces los que usan
este método de suicidio lo hacen como forma de
manifestar lo miserable que siente su vida. En otras
ocasiones lo hacen personas que tienen medicación
psiquiátrica prescrita y entran en crisis depresiva,
tratan de tomarse todo el medicamento a la vez.

Si encuentra a una persona en estado de


envenenamiento debe pedir inmediatamente una
ambulancia y asistencia médica vía telefónica, ya que
dependiendo del tipo de veneno puede hacer diversas
cosas. No induzca al vómito si no se lo ha dicho un
asistente médico. Tenga toallas cerca por si la
persona vomita para que limpie su boca y si la
persona no reacciona aplique los primero auxilios
RCP.

63
Venenos como el cianuro son los más usados, la
muerte que produce es bastante dolorosa y rápida.
También los venenos para Ratas son muy comunes
porque son muy asequibles y baratos. Con estos la
muerte es más lenta y hay muchas probabilidades de
encontrar a la persona con vida después de un
tiempo. La intoxicación por pastillas puede ocasionar
que la persona quede en un estado de coma y exista
un daño cerebral grave. Es muy importante que
pueda revisar muy bien el cuarto de su familiar
porque generalmente estos venenos son escondidos
días antes de que la persona se los quiera tomar.

Cortarse las venas

Las personas que deciden cortar sus venas buscan a


través del dolor físico mitigar el dolor emocional.
Generalmente estas personas expresan su dolor a
través de una autoflagelación y ven las cicatrices que
se hacen como una forma de recordar las heridas que
han sufrido a nivel emocional. En muchas ocasiones
una persona depresiva, antes de tomar la decisión de

64
cortarse las venas, se hace heridas leves con cuchillas
en las muñecas o las piernas. Estas heridas se las
hace quien sufra frustración y reprima demasiado sus
sentimientos ya que convierte su dolor emocional en
físico.

Cuando una persona intenta cortarse las venas pero


no quiere morir, se hace una herida horizontal en la
muñeca, lo que provoca pérdida de sangre, pero no la
suficiente para morir desangrado. En cambio, cuando
la persona tiene en claro quitarse la vida, se hace una
herida vertical siguiendo el camino de la vena, desde
la muñeca hasta 10 0 20 centímetros arriba, lo que
puede hacer que la persona rápidamente se desangre.
Para ambos casos es importante realizar un
torniquete con alguna prenda de vestir sobre las
heridas para disminuir la pérdida de sangre e
inmediatamente llevar a la persona a un hospital. Es
muy importante que revise muy bien las muñecas y
las piernas de sus familiares para que detecte si está
realizándose heridas y practicando para un futuro
suicidio.

Muchos jóvenes en su intento por canalizar el dolor


emocional y la ira reprimida toman la decisión de

65
infligir dolor sobre su cuerpo por medio de las
cortadas. Esta práctica se ha vuelto muy común en
adolescentes en su intento por llamar también la
atención de las personas que los rodean. Aunque lo
hagan por llamar la atención tome muy en serio el
comportamiento de las personas que practiquen esto.
Actuando a tiempo se pueden evitar tragedias.

Disparo

Otra forma de suicidio se da por el uso de arma de


fuego. En este caso la persona busca una muerte
instantánea al querer impactar su cabeza apuntando
a su sien o introduciendo el arma en la boca
apuntando hacia arriba. Como no a todas las
personas les es fácil conseguir un arma, los que
intentan el suicidio por este método generalmente
son personas que tienen vínculos con armas sea
porque están en la delincuencia, porque en la casa
tengan un arma de protección o porque haga parte de
fuerzas armadas y de seguridad. Aunque hay muy
poca probabilidad de que una persona sobreviva a
este intento de suicidio, si se logra sobrevivir, el daño

66
que puede quedar en el cerebro puede ocasionar
problemas cognitivos o motrices de manera
permanente. Una persona que intenta por este medio
quitarse la vida se encuentra profundamente
desesperada y quiere dejar una escena bastante
traumática. Las armas son muy peligrosas y no sólo
puede llegar a ser usada por el suicida para acabar su
vida, sino también para acabar con la vida de otras
personas antes de su propia muerte.

Son muchos los casos terribles de hombres de familia


que por algún sentido de venganza matan a su
exnovia o a su esposa e hijos para luego suicidarse.
Las personas que hacen esto creen que tienen el
derecho de quitar la vida de los demás y son personas
con profundos problemas mentales que se pueden
identificar de manera anticipada. Los celos
incontrolables, las manifestaciones públicas
bochornosas, las amenazas, la violencia son indicios
de una persona que puede matar a otros y luego
suicidarse. Estos homicidios-suicidios son totalmente
escabrosos y carentes de sentido, pero son hechos
reales que vemos a diario.

67
Bajo ninguna circunstancia en un hogar se debería
tener un arma de fuego, ni aceptar que su pareja
porte una, sus peligros son inminentes.

Si se tiene una pareja que use arma de fuego y tiene


problemas depresivos o de celos incontrolados lo más
sensato es tratar de dejar a esta persona de la manera
más diplomática posible para no ponerse en riesgo.

Las personas con armas de fuego se vuelven


completamente peligrosas para la sociedad. Hemos
visto muchas veces cómo en otros países jóvenes
llenos de ira acumulada entran a un salón de clase
disparando sin piedad a múltiples personas y luego
se quitan la vida. Cualquiera que se sienta con el
derecho de quitar una vida para luego quitarse la de
él mismo sólo refleja la falta de moral y serios
problemas mentales.

Si en su hogar existe un arma de fuego o si tiene


personas cercanas que manejan arma de fuego, a no
ser que un policía o alguien de seguridad muy bien
calificado, persuada para que esa arma no esté más
en su casa y que esa persona no posea dicho
elemento para no poner en riesgo a nadie.

68
Si encuentra a una persona apuntándose con un
arma y amenazando con dispararse debe hablarle
continuamente persuadiendo para que entregue el
arma. En este caso debe rogar y demostrar la mayor
tristeza posible para convencer a esta persona que no
se dispare y entregue el arma. Una vez logre tener el
arma de esta persona, saque inmediatamente las
balas, aviéntelas lejos y abrace fuertemente a la
persona que intentó suicidarse. Luego llévela
inmediatamente a una clínica.

Otras formas de intento de suicidio

Existen otras maneras para que una persona puede


intentar quitarse la vida, no son muy comunes pero
también se pueden dar. Una de ellas es la muerte por
intoxicación de gas. La persona suele encerrarse en
un automóvil y hacer que el gas que emana del tubo
de escape entre al interior. Esta forma de suicidio
hace que la persona no sienta ningún tipo de dolor y
sí quede dormida o inconsciente antes de morir. Es
muy usada por aquellos que le han perdido sentido a

69
la vida y solo quieren una muerte sin dolor y sin
darse cuenta. Otro método usado también es la bolsa
de suicidio que consiste en una bolsa que se coloca
sobre la cabeza, se amarra con un cordón y se
introduce una manguera que provee helio. Esta
muerte es rápida y a los 10 minutos la persona ha
muerto sin darse cuenta.

En lugares donde hay metro o trenes una forma de


suicidio es lanzarse a ellos cuando estén pasando.
Esta forma de morir es bastante trágica y escandalosa
ya que es una muerte que se produce en público y
deja una huella traumática en quienes la presencian.

También es otra forma de suicidio cuando una


persona se electrocuta metiéndose en una bañera
llena de agua para dejar caer dentro de ella un
aparato que esté conectado al tomacorriente. Esta
muerte es muy dolorosa porque la persona termina
prácticamente quemada por dentro.

Como hemos visto, existen muchas formas de


suicidio, tantas, que cualquiera que desee quitarse la
vida tiene muchas opciones, por lo tanto el depresivo
está en peligro.

70
Si la persona que intenta suicidarse sobrevive al
intento, casi la mayoría vuelve otra vez a intentar
hacerlo, si es que no recibe una ayuda adecuada.
Otras personas que sobreviven al intento, confrontan
su pensamiento y ven el sobrevivir como una
oportunidad para comenzar de nuevo. Algunas otras
quedan con secuelas físicas que les causan
limitaciones motoras o cognitivas por lo que sus
vidas se vuelven aún más caóticas.

Piense por un momento en una persona que se lanza


de un piso alto y sobrevive, si sufre un daño grave en
la columna puede quedar inválida o cuadripléjica de
por vida; o piense en una persona que se dispara en
la cabeza y sobrevive, puede destruir parte de su
cerebro y quedar con el pensamiento de una persona
con déficit de aprendizaje.

La vida no es un juego y hay que tomarla muy en


serio, no sólo la nuestra sino la de las personas que
nos rodean y por alguna razón pueden caer en la
enfermedad de la depresión.

71
¿CÓMO AUXILIAR A UNA PERSONA
QUE ESTÁ EN DEPRESION Y QUIERE
SUICIDARSE?

La intervención oportuna para las personas con


problemas de depresión e ideas suicidas termina
salvando vidas y mejorando la calidad de las mismas.
Por este motivo es fundamental aprender a auxiliar a
estas personas para convertirnos en sus terapeutas y
apoyo.

Aquí se debe dejar algo claro: es posible lograr que


una persona sane su depresión. Esta enfermedad es
transitoria si se trata de la forma adecuada. Ninguna
persona nace con depresión y mucho menos con
ideas suicidas. Tal vez existan factores genéticos que
predispongan la depresión pero esta sólo se
desarrolla fruto de las vivencias y la forma como el
carácter nos lleva a enfrentar la vida. De la misma
manera como la depresión se forma con el tiempo y
apoderándose de los pensamientos, se puede sanar
con terapia y un buen acompañamiento para así
darle libertad a la mente haciendo que ella genere

72
pensamientos positivos independientes de las
circunstancias.

Cuando detectamos en un familiar o una persona


amada la depresión y las ideas suicidas, según los
comportamientos que vimos en capítulos anteriores,
nuestro actuar debe ser inmediato. Lo primero que
debemos hacer es acercarnos con mucho cuidado al
deprimido porque no queremos que se encierre más
en sí mismo sino que pueda encontrar confianza en
nosotros. Este acercamiento se debe hacer con el
ánimo de conducir a la persona a expresar lo que en
su interior está viviendo para generar un puente de
confianza. Nunca se acerque con el ánimo de juzgar o
censurar sus pensamientos. Si esta persona dice que
esta triste o se siente mal por alguna circunstancia,
por más que parezca absurda, simplemente escúchelo
con mucho respeto. Lo realmente importante es
hacer que exprese lo que guarda en su interior y se
sienta comprendido.

Algunas personas pueden deprimirse porque sienten


que nadie quiere ser su amigo, o porque se le dificulta
conseguir pareja, o porque piensa que las personas
hablan mal de él. Sin importar que tan simple sea la

73
razón por la que se deprima, debe entender que en el
interior esa persona siente un gran dolor que le es
difícil soportar.

Para lograr que la persona deprimida confíe sus


sentimientos y los exprese con libertad es importante
no realizar preguntas puntuales que la lleven a
sentirse intimidada. Esto hace que se sienta invadida
en su intimidad. Estas personas siempre se deben
abordar con preguntas generales para así, poco a
poco, hacerle preguntas particulares.

Por ejemplo, no le pregunte:

-¿te sientes mal porque las personas se burlan de ti?

Esta pregunta es puntual y muy directa. De


inmediato hará que levante un muro que elimine la
confianza. La pregunta adecuada debe ir dirigida con
el fin que la persona comience a hablar de sus
experiencias. La pregunta correcta sería:

-¿cómo te has sentido últimamente?

La persona puede responder en un tono poco


convincente: -ahí, bien.

74
Esta respuesta muestra un grado de insatisfacción y
es eso lo que se va a tomar como si fuera un hilo que
se tirará para obtener más palabras. La clave de la
respuesta que hemos recibido está en el tono y en el
Ahí, bien. En otras ocasiones la respuesta puede ser
un bien seco y con una expresión facial que indica lo
contrario. Entonces lo siguiente que le preguntará
será:

-¿por qué dices ahí? ¿Hay algo que no esté tan bien?

O también puede decir:

-Noto que ese bien lo dices en un tono no tan bien,


¿pasó algo recientemente?

Y de esta manera por cada respuesta que reciba


transforme las palabras que la persona misma le diga
en preguntas para que ésta poco a poco exprese lo
que en verdad le está sucediendo.

Luego, cuando la persona le revele la razón de su


tristeza y depresión lo segundo que debe hacer es
crear empatía. Esta palabra significa que usted va a
colocarse en el lugar del otro; puede hacerlo a través
de una anécdota personal que también haya sufrido,
o de alguien más.

75
De esta manera la persona con depresión se va a
identificar con lo que escuche y así ese puente de
confianza va a ser muy fácil de cruzar al sentirse esta
persona comprendida.

Es importante recordar que nunca debe juzgar o


censurar los motivos por los cuales una persona se
deprime. Todas las mentes son diferentes perciben la
realidad con diversa intensidad. A nuestro alrededor
podemos encontrar personas de mente muy fuerte
que no se inmutan al recibir una ofensa o burla, que
superan muy rápido las pérdidas o los fracasos; y
también encontramos personas que hasta la más
mínima palabra los hace sentir muy mal.

Cuando logre alcanzar empatía con el depresivo debe


tener paciencia a todo lo que le pueda contar,
seguramente ha guardado mucho dolor por varios
años y por eso querrá decir mucho acerca de todas
sus vivencias. Una vez se haya descargado lo tercero
que debe hacer es brindarle las posibles soluciones
acerca a su problema. No le plantee una sola
solución, exprésele muchas soluciones posibles y
positivas para sus problemas justificándolas muy
bien, esto con el fin de comenzar a programar la

76
mente de esta persona deprimida a repensar todas
las soluciones que ha escuchado. Recuerde que esta
persona ha buscado muchas razones para justificar
su estado depresivo, por ello es importante brindarle
muchas salidas a sus problemas para que ocupe su
mente en considerarlas.

Cuando exponga sus consejos muéstrelos como


oportunidades que la misma vida ofrece, por ello esas
soluciones debe ejemplificarlas, para demostrar lo
reales que pueden llegar a ser.

Si la persona está deprimida porque recibió traición,


una de las explicaciones que podría dar es que eso fue
algo que la vida misma mostró porque esa persona
con la que estaba realmente era peligrosa, puesto que
si fue capaz de traicionar es porque buscaba lo que le
convenía a ella misma y por ello tarde o temprano
pagará las consecuencias de ese comportamiento
(aquí trate de darle un ejemplo real); concluya que
tener esa persona lejos de su vida le da la
oportunidad de conocer a otra que si valga la pena.

Así mismo le puede decir también: entiendo que


estés triste, es necesario expulsar el dolor, las cosas

77
se vuelven pasado y la vida siempre la vida nos da la
oportunidad de seguir y caminar con mayor cuidado,
tú no has hecho nada mal, la próxima vez podrás ser
más cuidadoso (y expone otro ejemplo real)

Mientras más soluciones presente a la persona con


depresión a través de ejemplos reales más va a
ocupar su mente en pensar en esas soluciones y
considerarlas como alternativas. Pero estas
soluciones serán escuchadas siempre y cuando la
persona ya se haya desahogado. De lo contrario sus
palabras solo serán consejos baratos que nadie pidió
y no serán tenidas en cuenta.

Lo cuarto que debe hacer es realizar un


acompañamiento. A través del diálogo descubra
cuáles actividades son de la preferencia de la persona
con depresión. Analice si le gusta el baile, el cine, los
paseos, ir a piscina, hacer deporte, jugar algo
específico, visitar un sitio en especial, etc. Siempre
busque hacer algo que le interese a la otra persona,
no busque que esta persona haga las actividades
contrarias a los gustos que ella tenga porque
entonces recibirá negativas a estas invitaciones, se

78
aburrirá y romperá la confianza que hasta allí ha
construido.

El acompañamiento es parte esencial en el proceso


de recuperación de la persona con depresión para
observar el cambio de sus pensamientos. Esto no es
un proceso inmediato, por ello debe ser paciente y ser
muy sabio para que determine en qué momento ir de
lo primero aquí expuesto a lo segundo y así
sucesivamente. No se apresure, a no ser que vea a la
persona en un riesgo muy alto, en este caso debe
tomar otras alternativas.

Si la persona está en una depresión muy avanzada


hay que acudir de inmediato a una ayuda profesional
idónea. Las clínicas psiquiátricas están diseñadas
para controlar a pacientes en crisis y son cubiertas
por los seguros médicos. Por ello es importante que
tengamos conocimiento de cuál clínica psiquiátrica
atiende a nuestros familiares. Si la persona está
mostrando una intención suicida no dude en llamar a
una ambulancia para que trasladen a su familiar a la
clínica; también llévelo por urgencias a esta clínica si
percibe que la persona se encuentra en una depresión

79
profunda donde no come nada, se pasa todo el día
llorando o ha llegado a lastimarse.

Piense y sea sensato para actuar, hay cosas que no


podemos manejar con nuestro propio conocimiento y
que nuestro amor no puede proteger, por ello si la
depresión de su familiar se ha salido de control acuda
a la ayuda profesional. Los pasos dados
anteriormente son para aplicar cuando la persona
está comenzando sus estados depresivos o se
encuentra iniciando una crisis.

Muchas veces las familias tienen la predisposición


que las clínicas psiquiátricas están diseñadas para
personas que están locas o con un estado mental
deplorable, o que allí solo se vuelven adictas a
medicamentos. Esto no es cierto, las clínicas
psiquiátricas están diseñadas para controlar crisis y
estabilizar a una persona que puede poner en riesgo
su integridad física, a fin de llevarla a un estado de
lucidez mental.

Los medicamentos que usan las clínicas psiquiátricas


para dormir a las personas y bajarles sus niveles de
excitación o subirle los niveles de depresión son

80
dañinos y adictivos si se toman por varios años sin
control médico. No se puede esperar que una persona
intente suicidarse para llevarla a una clínica
psiquiátrica, por esta razón debe ayudarla a tiempo si
percibe gravedad en su comportamiento.

Como ya se ha mencionado, debemos estar muy al


tanto de las actitudes que muestren la tendencia
suicida en un familiar. Es importante vigilar las redes
sociales, todo lo que publica; todo lo que comenta;
las páginas que siga; las publicaciones a las que le de
me gusta. Si por alguna razón no puede entrar a
observar el perfil de esta persona, sea porque lo tiene
bloqueado o, no está agregado en sus redes sociales,
busque personas que sí puedan ver las redes sociales
de su familiar y pregúnteles sobre todas estas cosas.
Además trate de observar muy bien el cuerpo de su
familiar, moretones, quemaduras, cortadas,
laceraciones pues son cosas que indican el riesgo de
un estado de depresión avanzada. Dude si le dice que
esas heridas se las hizo sin culpa o que no se había
dado cuenta. Vigile muy bien que se esté alimentando
y no esté vomitando lo que come ni tirando la
comida. Ponga atención a la música que escuche y

81
analice las letras de esas canciones para que conozca
el tipo de mensajes que su mente está recibiendo.
Busque en cuadernos cualquier pensamiento que
escriba sobre su propia vida como frases que hablen
de muerte o cosas similares; también observe si tiene
dibujos que muestran intenciones de hacerse daño.
Analice muy bien si pasa mucho tiempo solo porque
el contacto con otros es muy necesario para su salud
mental.

La depresión es un estado que se puede superar con


el debido acompañamiento familiar. Por eso
mantenga la calma frente a los comportamientos
depresivos y no tenga actitudes escandalosas frente a
estas personas ni les demuestre su tristeza. Personas
con este problema necesitan a quienes les inyecten
vida, alegría y motivos para seguir adelante, por eso
siempre tenga una actitud positiva cuando este cerca
de ellas.

82
83
¿CÓMO AYUDAR A RECONSTRUIR EL
SENTIDO DE LA VIDA?

No es fácil enfrentar problemas y sentir incapacidad


para resolverlos. Tampoco es fácil sentir que somos
presos de la tristeza ni que nuestra mente esté
trayendo pensamientos negativos que produzcan
desespero. No es fácil perder las ganas de vivir y
desear en el corazón que la muerte llegue pronto para
por fin descansar. Tampoco es fácil ver a las personas
que nos rodean felices y sentirnos diferentes al resto
del mundo. Todo lo anterior es lo que enfrentan
personan con problemas de depresión, así que lo
mejor que podemos hacer es ayudarles a descubrir
propósitos en sus vidas para que puedan hallar el
sentido d las mismas.

Muchos son los consejos que podríamos ofrecer a


una persona con depresión acerca del valor de la vida
y de las oportunidades que el futuro le ofrece, pero

84
todas esas cosas ya las conoce y no necesita escuchar
mil palabras para que lo convenzan de abandonar la
tristeza y el bajo estado de ánimo. El problema de
ella está en su alma, en su sentir, en lo mal que sus
mente procesa los pensamientos generando una mala
salud mental. Precisamente el problema es que su
mente está enferma de algo que no comprende.
Ninguna pastilla ni ningún remedio van a cambiar la
química del cerebro para llevarla a pensar de forma
diferente. La clave de la recuperación está en que en
el interior cambie la percepción de la realidad y se
comprenda la vida desde el Porqué del dolor hasta el
Cómo darle forma para transformarlo en algo
positivo.

Por ejemplo, algunas personas que tienen grandes


defectos físicos, limitaciones y poca inteligencia
desarrollan un mecanismo de defensa mental que los
hace aprender a burlarse de sí mismo para
contrarrestar la burla de las demás personas, dejando
de sentir dolor por el rechazo de la sociedad y
convirtiéndolo en una oportunidad para hacer
comedia o socializar de forma más sencilla. Otras
personas como los artistas transforman el dolor en

85
grandes éxitos musicales, cuadros admirados,
películas de renombre o libros best seller. Esto es
posible porque han encontrado el método para
sacarle provecho a su dolor y volverlo algo positivo
que les deja grandes ganancias económicas, fama,
relaciones sociales y sobretodo, satisfacción personal.

Para ayudar a una persona a recuperar el sentido de


su vida hay que conducirlo por un proceso de
autodescubrimiento y extraer todos los esquemas
mentales a los que se haya aferrado. Es decir, hay que
llevar a la persona a descubrir el origen de sus
problemas con el fin de justificar cómo logró su
mente la costumbre de crear pensamientos
negativos.

Las personas que tienen depresión por el constante


acoso y burla de los demás, sea el motivo que sea,
interiorizan esas burlas creando en su mente la idea
que son diferentes al resto y por ello están
condenados a sufrir. Esto crea un conflicto en la
identidad, porque al no aceptarse a sí mismo por las
burlas de los demás, no logran definir quiénes son, lo
cual hace que la mente no procese pensamientos
adecuados sino de autorechazo.

86
Una persona que hubiese desarrollado depresión por
el bullying debe aprender a interiorizar la idea que
en la diferencia está la autenticidad del ser humano y
que la vida no se trata de que seamos similares a
nadie (para hacernos invisibles entre tantas
personas) porque lo que debemos aprender es a ser
únicos para ser verdaderamente reconocidos entre la
multitud. Si la persona que sufre las burlas aprende a
proyectar de sí mismo una exaltación de su
diferencia, pasará de ser burlado a ser admirado.

De esta misma manera se debe dar en todos los casos


donde exista depresión. Hay que conducir a la
persona para que libere su mente de todas las
verdades negativas que ha adoptado como una
verdad irrefutable. Todo lo que se piense y sea causa
tristeza, bajo ánimo, pereza, desmotivación e ideas
suicidas se deben identificar como pensamientos
tóxicos que obligadamente es necesario transformar.
Cada pensamiento que conduzca a la depresión está
mal formulado en el interior y sólo hace que nos
convirtamos en enemigos de nosotros mismos.

Para que se transformen las ideas primero debemos


comprender el origen de las que se tienen, para

87
convencer a la mente que puede pensar distinto a
través de los siguientes pasos:

1. Identifique un pensamiento depresivo


2. ¿En qué momento de su vida comenzó a tener
ese pensamiento?
3. Si ese, o esos momentos malos, no hubieran
pasado ¿qué pensaría ahora?
4. ¿Conoce o ha escuchado de alguna persona
que tenga un problema similar al suyo y sea
feliz o viva sin deprimirse?
5. ¿Por qué cree que esa persona con ese
problema similar al suyo sea feliz o vive sin
deprimirse?
6. Imagine por un momento en su mente que
piensa lo opuesto de lo que lo deprime
7. ¿cómo se siente al imaginar lo opuesto?
8. ¿le gustaría sentirse así?
9. Si usted diariamente imagina lo contrario al
pensamiento que lo deprime su mente se
acostumbraría a pensar diferente, sus ideas
cambiarían y su estado de ánimo mejoraría.

88
10. Escriba en un papel el pensamiento contrario
al pensamiento depresivo y diariamente repita
lo positivo.
11. En un mes de disciplina su mente cambiará

Con este modelo de pasos, si lo practicamos con una


persona que nos ha dado su confianza y con la que
hemos logrado empatía, vamos a ir deshabituándolo
de su idea tóxica para habituarlo a una idea
provechosa, que en la medida que se estimule
diariamente, la química del cuerpo hará que el
cerebro reciba los neurotransmisores que activen de
nuevo la motivación, las sensaciones de placer, el
ánimo y las ganas de vivir. Cualquiera puede
practicar esto y comprobar cómo sus pensamientos
también se van a transformar.

Ahora, para ayudar a recobrar el sentido de la vida a


alguien es importante convencerla que tanto vivir
como morir son situaciones que no nos corresponde
a nosotros determinar. Es decir, que así como nadie
nos pidió permiso para nacer porque simplemente
era imposible que lo hicieran, tampoco nadie puede

89
decidir morir por su propia cuenta porque no se tiene
conocimiento de lo que hay después de la muerte. Lo
cierto es que venimos de algo que desconocemos y
vamos hacia algo que desconocemos. Nuestra única
certeza es que estamos vivos. Por un lado la fe nos da
una explicación de lo que hay antes de la vida y
después de la muerte y, sólo hasta que nuestra vida
termine, eso será algo que comprobaremos. Mientras
tenemos la vida debemos administrarla de la mejor
manera para beneficio de todos.

El desconocimiento de lo que hay después de la


muerte debe llevar a la persona a considerar el valor
de la vida. Si después de la muerte no hay más vida,
nada perderá quien durante ésta hizo las cosas bien
buscando el beneficio de todos, por eso esta persona
morirá en paz. Y si después de la muerte existe la
vida en la que depositó su fe, será recompensado por
su buen actuar y haberla soportado. De cualquier
forma considerando las dos posibilidades saldrá
beneficiado.

Cuando la persona aprende que la vida que posee es


una oportunidad para soñar y hacer realidad sus
sueños sintiendo que cada día es un motivo para

90
construir su felicidad entonces la idea de despreciar
la vida no existirá. Es precisamente ahí donde
aparecen los propósitos, el decir: yo vivo para hacer
esto por los demás, para llevar este mensaje, para
ayudar a estas personas, para crear estas cosas, etc.

Los propósitos hacen que una persona viva para


cumplir metas, hacen que una persona se esfuerce,
luche, se levante después de una caída, piense
estrategias, sea creativo, este ocupado, visualice su
mañana y se acueste a dormir con ganas de
levantarse al otro día. Sin propósitos no hay vida.
Esta es la razón por la que la motivación hace que
una persona con depresión descubra, dentro de sí
mismo, el valor de la vida.

91
TÉCNICAS PARA EVITAR LA
DEPRESIÓN EN OTROS

La depresión se puede evitar siempre y cuando se


mantengan altos los niveles de dopamina, es decir,
siempre que la persona tenga un ánimo elevado de
forma constante y en su mente existan pensamientos
que lo lleven a ejecutar actividades de
enriquecimiento personal.

Piense en una persona que todo el tiempo está


buscando la manera de hacer negocios, componer
canciones, pintar, investigar cosas, realizar un
deporte, interactuar con otras personas, etc. Y que
esas intenciones se lleven a la realidad al ejecutar
aquellas actividades. La persona no tendrá espacio en
su mente para la depresión porque siempre se

92
encontrará en constante movimiento ocupado en
cada actividad.

Es muy importante para que exista la motivación y el


estado anímico sea alto que la persona esté
realizando actividades que le produzcan una
sensación equilibrada de placer y que éstas se
complementen a su vez con otras. Por ejemplo, si una
persona siente placer cuando practica un deporte,
pensemos en el futbol, la idea no es que su mente
sólo piense en esto todo el tiempo y tampoco que su
actividad sea sólo 100% futbol. Esta persona debe
complementar el futbol con otras actividades como
salir a un cine, compartir con familia, leer un libro, ir
a la iglesia, hacer obras de caridad, ayudar a otros, en
fin, otros gustos. Lo anterior con el objetivo que la
estimulación a su gusto preferencial no lo aburra y lo
lleve a una pérdida de motivación. Diversas
actividades que produzcan placer harán un equilibrio
emocional.

Para que la motivación exista siempre, las elecciones


de la persona deben ser voluntarias. Muchas veces
los padres quieren elegir por sus hijos basándose en
sus propios gustos y no en los gustos de sus hijos o,

93
en el peor de los casos, quieren que los hijos hagan
actividades que en su juventud no lograron hacer.
Aquí los padres cometen el error de alimentar sus
frustraciones en la vida de sus hijos convirtiéndolos
también en personas frustradas.

Es muy importante que los padres se den cuenta que


sus hijos son personas diferentes a ellos. El parecido
físico y la genética no determinan que los hijos
deseen las mismas cosas. Cada persona crece y
desarrolla gustos tomando elecciones distintas
basadas en el contexto de la época, creencia y cultura
en la que su ser crezca.

El factor más determinante es que una persona


conozca cuáles son sus gustos y los desarrolle está en
la libertad. Si siente como padre que su hijo no rinde
en ninguna actividad debe dejar de presionarlo a que
haga esto o aquello. Debe darle la libertad para que él
mismo elija sus gustos y desarrolle su personalidad.
No le dé órdenes, muéstrele opciones. No le cierre
puertas, ábrale oportunidades. No lo censure,
bríndele apoyo y motivación.

94
Para evitar la depresión, el contacto, la confianza y el
diálogo son fundamentales para llevar un
seguimiento sobre los estados anímicos y detectar
cuáles son las cosas que sensibilizan y afectan a la
persona. Esto es fundamental porque el desahogo
constante hace que no se acumulen pensamientos
tóxicos que puedan causar a futuro cambios bruscos
en la personalidad. Muchas veces para lograr que una
persona exprese algo basta sólo con sentarse a su
lado y hacer un gesto de amabilidad. Esto es
contrario a lo que muchos hacen cuando abordan con
varias preguntas repetitivas al otro presionándolo a
responder. Así que si queremos ganar confianza con
la persona que nos importa cuidar de una futura
depresión es necesario dejar de preguntar tanto, por
el contrario debemos hacer un gesto amable y
escuchar.

Las palabras positivas siempre van a llamar


pensamientos positivos, pero hay que cuidar de no
caer en un positivismo excesivo y empalagoso que se
sale de la realidad porque una de las mayores causas
de la depresión es la baja tolerancia a la frustración.
Cuando hablemos con una persona debemos

95
aprender a tener un lenguaje positivo realista.
Siempre debemos preparar al otro para enfrentar
pérdidas, traiciones, decepciones y negativas,
obviamente sin caer en el pesimismo haciendo ver
que todo es malo. La clave es mantener un lenguaje
positivo acorde con la realidad.

Si le decimos a una persona siempre que es el mejor


del mundo en algo, va a terminar muy frustrada si en
algún momento hay otro mejor porque sentirá muy
alto su estándar de éxito. Una frase positiva para
decir sería más o menos así:

-Eres muy bueno en lo que haces, mañana tendrás


que ser mejor que hoy, porque hoy eres mejor que
ayer.

Esta frase tiene positivismo con el toque de realismo


y, sobretodo, llama a la motivación para la búsqueda
de un mejor futuro. Este tipo de lenguaje es el más
acertado para mantener a la persona en la realidad y
motivarla previniendo una depresión, ya que no se le
está diciendo algo que no pueda lograr ni tampoco se
está idealizando a esta persona.

96
Desarrollar en otra persona alta tolerancia a la
frustración es la mejor receta para prevenir la
depresión porque siempre va a conocer la verdad de
la ley de la vida donde unas veces ganamos y otras
veces perdemos. No siempre obtenemos lo que
deseamos, pero si nos esforzamos hay muchas
probabilidades de lograrlo, por eso lo mejor siempre
es intentarlo es lo que debemos enseñar.

Cuando preparamos a alguien para la vida, debemos


tener muy en claro lo anterior y, sobretodo, que el
sufrimiento hace parte del proceso de formación del
carácter. No podemos evitar, por ejemplo, que los
hijos sufran porque es imposible estar todo el tiempo
al lado de ellos, salvo que en ocasiones son los
mismos padres (en su intento de proteger) los que
más los lastiman. Lo que si podemos hacer es
enseñarles a afrontar el dolor, a sentirlo con
inteligencia y aprendan que el dolor nunca es
permanente, que en el momento menos pensado, nos
vamos a reír de nuestras propias vivencias.

Muchos niños sufren bullying y no tienen ni idea


sobre cómo enfrentarlo. La falta de confianza con sus
padres hace que lo oculten y por ello terminan

97
creciendo con grandes vacíos emocionales. En otras
ocasiones los padres aconsejan mal a sus hijos
creando más problemas en la vida social de ellos y
hasta convirtiéndolos en personas violentas. En este
punto si un niño aprende a aceptar que es diferente
en la condición que tenga y se le enseña que el
objetivo de la burla que recibe es la conversión del
dolor del burlador hacia el dolor del burlado; que
entre más dolor demuestre por las burlas, más burlas
va a recibir; que la única forma de combatir el
bullying es acercándose a su burlador para tener un
diálogo tranquilo; entonces sabrá dar salida
inteligente a sus problemas, aprenderá del dolor y lo
convertirá en un estrategia para volverse más fuerte.

Si deseamos prevenir la depresión debemos entender


que un buen diálogo dará frutos útiles que servirán
para mejorar la calidad de vida emocional y mental
de las personas que queremos. Es importante tener
en cuenta que si nosotros somos personas depresivas
no podemos intentar prevenir a nadie de la
depresión; con todo lo expuesto hasta ahora ya
deberíamos saber si tenemos problemas de

98
depresión. Por eso primero resuelva sus propios
problemas para así prevenir y ayudar a otros.

Otra forma de prevenir la depresión es a través de la


superación de fobias, traumas y eventos pasados que
hayan marcado la vida. Para este punto hay que
llevar a la persona a realizar una introspección
sincera hacia todos los eventos que marcaron
negativamente la vida, desde una palabra ofensiva,
hasta un gran rechazo. Resolver el pasado y cerrarlo
es la mejor forma de dejar de traerlo a memoria
siempre. Debemos entender que el reloj camina hacia
el futuro y por eso la mejor forma de saber si nuestra
mente está sana es evaluando detalladamente si
pensamos más en el futuro que en el pasado. Las
personas se vuelven depresivas porque de manera
reiterativa sus pensamientos se van atrás hacia
eventos negativos haciendo que su cerebro viva
constantemente produciendo insatisfacción.

No podemos pretender hacer que el otro deje de


pensar en su pasado con simples motivaciones o
lenguaje positivo. Mientras esta persona no resuelva
los eventos que marcaron su vida, su mente no va a
proyectar pensamientos sanos del futuro, solamente

99
va a proyectar en su futuro imágenes del pasado,
convencido con miedo que estas se van a volver a
repetir. Por ejemplo, si una persona vio que su madre
le fue infiel a su papá y no resuelve este trauma,
entonces cuando tenga relaciones sentimentales va a
estar proyectando la infidelidad de su madre en sus
parejas, sintiendo constantemente celos, pensando
en todo momento que su pareja le es infiel,
inventando circunstancias para justificar sus
proyecciones del pasado y haciendo que sus
relaciones sentimentales se vuelvan conflictivas sin
que duren mucho tiempo. Así que mientras la
persona no confronte y supere su pasado, la
predisposición a la depresión va a ser alta, sentirá
miedo a la soledad y creará dependencias
emocionales.

Para prevenir la depresión hay que incluir una


solución de los problemas más grandes que nos ha
traído la tecnología y que en un principio
mencionamos mucho de ello: el inmediatismo.
Mientras no se desacostumbre a la persona del
inmediatismo su vulnerabilidad a la depresión será
alta. Una de las cosas que debemos entender es que

100
todo tiene su tiempo de construcción y que la
paciencia es el ingrediente perfecto para crear
estados anímicos sanos. Como lo dice un proverbio
bíblico, todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere
debajo del cielo tiene su hora Eclesiastés 3:1

No hay mayor placer que disfrutar de algo que tomó


su tiempo, que se trabajó con esfuerzo y que requirió
de nuestra paciencia. En la vida todo no puede ser de
inmediato, las cosas se deben hacer con calma para
que queden bien hechas, y cada paso que demos es
mejor darlo dos veces antes de dar el siguiente y
caernos. Si enseñamos esto a las personas que
queremos, claro está, si nosotros mismos lo
aplicamos, estaremos garantizando estabilidad y
seguridad en el futuro de todos.

Con lo expuesto entendemos que para ayudar a evitar


la depresión en los demás debemos incentivar la
motivación hacia el futuro, que la persona tenga
sueños para así darle la libertad de esforzarse para
conseguirlos. Por otro lado, enseñar que en la vida
siempre existen problemas y que no siempre
podemos tener todo lo que deseamos permitirá el
desarrollo de la tolerancia a la frustración. Además

101
hay que conducir a las personas a sanar su pasado
confrontándolo de tal manera que los que sufren por
ello puedan entenderlo. Y por último, enseñar que la
paciencia es importante para no desesperarnos a la
hora de querer algo ayudará a vencer el
inmediatismo reconociendo que todo tiene su
tiempo.

Al tener en cuenta estos puntos claves, nadie sufrirá


depresión y todos estaremos preparados para
enfrentar con madurez cualquier situación de la vida,
por amarga que sea.

¿CÓMO LA VIDA ESPIRITUAL


ELIMINA LA DEPRESIÓN?

El ser humano desde siempre ha buscado en lo


espiritual el sentido de trascendencia de su vida
evitando pensar que su vida sólo existe desde que
nace hasta que muere, sino pensando más bien que
su vida va más allá de la misma vida material y que
después de la muerte hay otra vida. El sólo hecho que
en cada cultura exista una creencia religiosa

102
determina la importancia tan grande que el ser
humano tiene para pensar en su vida después de la
muerte.

Para el bien de las personas y la sociedad la vida debe


tener un significado más profundo que el material.
Hay cosas que sabemos que tenemos pero que no
están en un lugar específico sino en un plano
intangible, invisible. Los sentimientos son un
ejemplo de las cosas intangibles que están en cada
ser humano porque estos conceptos no tienen una
forma específica, sino que son ideas que se han
formado a través de la experiencia y se manifiestan
en la realidad a por medio de todas nuestras
acciones.

Si vemos alguien llorar decimos que está triste, pero


sus lágrimas no son la tristeza, sino la manifestación
del sentimiento invisible que habita en nuestra
mente y se refleja en el rostro. Tampoco podemos
decir que la tristeza son los cambios hormonales o la
ausencia de neurotransmisores como la serotonina
porque esos cambios en el sistema nervioso se
producen a partir de las mismas vivencias que
tengamos. Entonces así como los sentimientos son

103
intangibles y sólo los conocemos cuando se
manifiestan, también podemos entender que existe
un área espiritual que está por encima de las
emociones y se encarga de crear la ideas y los
conceptos en nuestra mente. El área espiritual
permite pensar la vida mucho más allá de la misma
vida material. Desde el área espiritual podemos crear
ideas en nuestra mente que se manifiestan en
nuestro cuerpo y nos hacen sentir de una mejor
forma, lo que quiere decir que nos permite sentir que
nuestra vida trasciende mucho más allá de la realidad
material.

En el área espiritual una persona encuentra alivio y


consuelo para sus emociones producto de la conexión
con su ser superior (Dios) haciendo que sienta que
tiene alguien que la escucha, alguien con el cual se
puede desahogar para evitar reprimir emociones que
le puedan generar depresión.

Pensemos en alguien que tiene un dolor emocional


muy grande fruto de la pérdida de un ser querido, tal
vez una persona que fue muy cercana y con la que se
compartieron momentos muy bellos que le marcaron
la vida. Esta pérdida podría bien desencadenar en

104
una depresión por el dolor que produce saber que esa
persona ya no va a estar más presente. El dolor
inevitablemente aumentaría día tras día al ver cada
vez más lejos el último contacto que tuvo con esa
persona. Ahora bien, si existe una creencia del área
espiritual, la persona en duelo tendrá la fuerza
suficiente y la comprensión para soportar la pérdida
porque sentirá que de alguna u otra forma el ser que
perdió se encuentra en un plano mejor o que, desde
algún lugar, sigue ahí presente. El creer que esa
persona existe de alguna manera, en algún lugar
intangible, le motivará a seguir adelante su vida para
que el ser perdido se sienta orgulloso, y de esta
manera honre su memoria. Por otro lado, si cree que
Dios está acompañando su dolor sentirá un soporte
muy fuerte al cual aferrarse para no dejarse vencer
por la tristeza y día a día podrá expresar sus
sentimientos con el fin de canalizarlos.

Es importante entonces tener una vida espiritual, y


sobretodo que sea activa y constante para que cada
día sienta alivio a través del diálogo con Dios.

La vida espiritual alejará a la persona de la depresión


y los pensamientos suicidas porque entenderá que su

105
vida tiene esperanza, un propósito, un fin, un
consuelo, una promesa de mejorar la vida.

Una persona con una vida espiritual activa no


pensará nunca en quitarse la vida porque sabrá que
la vida tiene un valor único que debe aprovecharse
sin saber nunca hasta cuándo vamos a estar aquí.
Tampoco pensará en quitarse la vida porque sabe que
su existencia no dependió de sí mismo, sino más bien
fue un regalo que recibió para administrar y un día
tendrá que entregar para luego dar cuenta de todas
sus acciones.

La vida espiritual llena los vacíos que las personas


tienen porque los lleva a pensar en que un día, fruto
de su comportamiento, recibirán una recompensa
por todo lo bueno que hizo la cual llenará todos los
faltantes que llegó a tener. De esta manera las
preocupaciones y problemas pasarán a un segundo
plano y se verán como oportunidades para mostrar
fortaleza.

Cuando una persona tiene claro sus principios, a


través de la vida espiritual se siente más segura de sí
misma, sabe que no está perdido en el mundo sin una

106
guía específica. Todos los valores de su plano
espiritual regulan su comportamiento para que
piense y actúe conforme le convenga a todos y no a sí
mismo. Además esta vida espiritual le ayuda a
proteger su vida aún de sí mismo para que nunca
piense hacerse daño.

Todos los seres humanos necesitan una razón para


vivir, y cuando no la encuentran caen en el
desespero, la angustia y la desmotivación. No se
puede vivir sin un propósito, no somos animales que
siguen sus instintos, ni tampoco somos máquinas
programadas para algo, somos seres humanos
únicos, personas que necesitan tener sueños, que
anhelan una meta, que desean alcanzar un logro que
les haga sentir su vida útil. Por eso es tan importante
la vida espiritual porque en ella encontramos todos
estos ingredientes que nos llevan siempre a pensar en
el mañana, a no quedarnos estancados en una sola
cosa, sino a crear, a esforzarnos, a levantarnos con la
motivación de perseguir un objetivo.

Sin una vida espiritual no hay un para qué vivir. Sin


un sentido de trascendencia no hay una razón para
estar aquí, simplemente sería lo mismo vivir que no

107
vivir. Imaginemos un mundo donde no existiera lo
espiritual. Todas las leyes y normas no tendrían
sentido. Daría entonces igual ser bueno o ser malo
porque al fin y al cabo después de la muerte no
existiría nada y por lo tanto nadie tendría que pagar
por los males que hiciera.

Cuando alguien con depresión encuentra refugio


adecuado en la vida espiritual es mucho más fácil que
se libere de esa enfermedad ya que su mente se abre
a la posibilidad de ser sanada por Dios, así los
pensamientos comienzan a modificarse para
adaptarse a una vida de propósito, de perdón, amor y
restauración. Un salmo dice El sana a los
quebrantados de corazón y venda sus heridas.
Salmo 147:3. Versos así se convierte en refugio para
los que pasan por pruebas difíciles trayendo consuelo
y motivación.

Una persona con grandes problemas emocionales se


siente atada a sus tristezas como si su mente la
hubiera encarcelado. No tiene la libertad para elegir
estar bien y constantemente sus pensamientos son
negativos. Al llegar esta persona a la vida espiritual
desahoga su mente de los pensamientos malos

108
entregándolos a Dios, el único con la capacidad para
cargarlos tal cual como lo dice el Salmo 55:22 Echa
sobre Dios tu carga, y él te sustentará; no dejará
para siempre caído al justo.

Cuando a través de su fe la persona siente esa


descarga comienza a experimentar libertad y cambia
la percepción sobre la vida, sabe que encontró un
apoyo ideal que le da la oportunidad de comenzar de
nuevo y seguir adelante. Incluso al realizar esta
liberación de sus pensamientos negativos, la persona
encuentra el propósito de ayudar a otros que
padezcan un problema similar dándole a su vida un
sentido.

Cuando alguien entonces desarrolla la capacidad


para hablar con Dios por medio de su área espiritual
y al cual reconoce como el creador quien le dio la
vida, crea entonces una relación terapéutica sana que
lo lleva a sentirse continuamente limpio de
pensamientos negativos. Poco a poco su mente se va
convenciendo que la vida que tiene va más allá de su
propia vida, entonces su forma de actuar se moldea a
los parámetros de su creencia para realizar obras
buenas así como lo dice la Biblia en Efesios 2:10

109
Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús
para buenas obras, las cuales Dios preparó de
antemano para que anduviéramos en ellas.

Otro verso bíblico dice Amo a Dios, pues ha oído mi


voz y mis súplicas, porque ha inclinado a mí su
oído; por tanto, le invocaré todos mis días Salmo
116:1-2. Por estas razones la vida espiritual ayuda a
eliminar la depresión y mantiene a la persona
motivada; además le abre la posibilidad de saber que
tiene ayuda con sus problemas, que no está sola y que
siempre va a tener con quien desahogarse a cualquier
hora.

TESTIMONIO DE CÓMO VENCÍ LA


DEPRESIÓN

110
Tener depresión no es algo que nadie quiera
experimentar. Con ella las emociones se perciben con
una intensidad dolorosa y los pensamientos se
vuelven tan constantes y repetitivos que crean el
deseo de querer quitarse la cabeza para descansar.
Sólo una persona que sufrió depresión y logró
vencerla se atrevería a escribir un libro así. Por eso
abro aquí mi corazón para comenzar contando mi
propio testimonio personal de cómo logre vencer la
depresión que durante mucho tiempo escondí para
no preocupar a mi familia y cómo un evento muy
fuerte casi me conduce a la muerte abriéndome la
posibilidad a una nueva vida.

Diré primero que mi infancia fue espectacular, desde


muy pequeño sentía una creatividad exorbitante en
mi mente. Recuerdo que me encerraba en mi cuarto a
jugar con los muñecos de súper héroes que me
compraban e inventaba mil historias con ellos. De vez
en cuando salía a una cancha de cemento a jugar
futbol con amigos en el conjunto residencial done
vivía y la relación con mis padres era buena. De vez
en cuando mis hermanas peleaban conmigo porque
sentían que mi madre me tenía preferencia por ser el

111
varón. Pero cuando comencé a llegar a la
adolescencia esa felicidad de la infancia fue
cambiando. Comencé a ser consciente de muchas
cosas, entre ellas, de los problemas familiares que en
ningún hogar faltan. Muchas veces lo que hacía era
encerrarme en el cuarto con miedo y me ponía a
llorar. Como era muy introvertido nunca expresaba
lo que sentía. Luego comencé a leer libros que me
abrieron la mente a muchas preguntas que
cuestionaban mi existencia. Sentía que dentro de mi
corazón había un vacío muy grande que no lograba
llenar. Me preguntaba una y otra vez cuál era la razón
por la cual vivía y recuerdo que tomaba cuadernos
para escribir pensamientos sobre la falta de sentido
de mi vida. Me aferre al rock pesado como forma de
canalizar los vacíos existenciales que tenía, pero esa
música fue creando en mí rabia hacia todo.
Escuchaba canciones una y otra vez. Muchas veces en
medio del desespero que sentía por no encontrar mi
lugar en el mundo me encerraba en mi cuarto a llorar
desconsoladamente apretando fuerte la almohada
contra mi boca para gritar y no ser escuchado. Otras
veces la angustia hacía que me tirara al suelo del

112
dolor que sentía en mi alma queriendo arrancarme el
corazón; ese dolor era tan fuerte que hasta me daban
ganas de vomitar.

Delante de las personas siempre tenía una sonrisa y


aparentaba estar muy bien, sobretodo delante de mi
familia ocultaba toda la crisis que tenía dentro.
Algunas veces creía que dentro de mí había algo que
no me permitía ser feliz y me incitaba a suicidarme;
ese algo me decía que era la única forma de acabar
con mi dolor. Muchas veces me escribía cartas a mí
mismo tratando de justificar el por qué debía acabar
con mi existencia.

Cuando termine el bachillerato mi padre me dio


trabajo para que me pudiera pagar mis estudios.
Quise estudiar psicología para intentar encontrar una
solución a la tristeza que llevaba dentro de mí y
entender mi mente, pero como sólo las universidades
privadas tenían esa carrera no me alcanzaba el dinero
para pagarla. Entonces encontré en una universidad
pública la carrera de Filosofía, que también me
llamaba la atención porque en el colegio me gustó
mucho, y me matriculé en ella para estudiarla. Me
apasioné bastante por ésta carrera y encontré allí una

113
luz para entender mucho mejor mi vida, pero a
medida que leía y más estudiaba encontraba más
razones que me sumían en la tristeza. Los
razonamientos me hacían concluir que la existencia
no tenía ningún propósito y que era igual morir que
vivir.

Pasado el tiempo comencé a ganar más dinero con el


trabajo que me dio mi padre, pero la falta de sentido
de la vida me volvió una persona irresponsable y sin
límites, y fue así que en un diciembre, la época en la
que más se vendía, que hice muchos cobros a los
clientes, los cuales no fui al banco a consignar, y sí
decidí conservar esos cobros en mi bolso para sentir
que tenía muchísimo dinero. El 31 de diciembre de
ese año decidí salir a tomar con todo eso en mi bolso.
Tome tanto licor que me embriague al punto de
desconocer la forma como llegue a mi casa. Cuando
desperté al otro día no tenía ni un solo billete de los
que había cobrado. Trate de acordarme qué había
pasado con el dinero pero fue en vano. Le pregunté al
vigilante del conjunto cómo llegué y me dijo que
venía dormido en un taxi; además como el conjunto
no tenía cámaras de seguridad no pude saber cuál

114
taxi me había traído. Indague con las personas con
las que estuve y no me dijeron mayor cosa. Entendí
entonces que había cometido un error muy grande y
estaba en problemas muy serios con la empresa en la
que mi papá me había recomendado.

Comencé a sentir mucho miedo de decepcionar a mi


familia y poner a mi papá en problemas con el dueño
de la empresa. Así que trate de ocultar los cobros
diciendo que los clientes ya casi me iban a pagar
mientras pensaba qué hacía, pero nada se me
ocurrió. Sabía que yo no tenía el coraje para
enfrentar ese problema y mi depresión se agudizó
aún más. Entonces tome ese problema como
justificación para hacer lo que hace mucho tiempo
venía pensando: acabar con mi vida.

Especulé mucho en la forma de hacerlo, busqué por


internet formas de suicidio. Como siempre le he
tenido miedo a las alturas sabía que tirarme de un
puente o edificio no era una opción por más que
quisiera morir, además imaginaba cuán desagradable
iba a quedar y lo traumático que iba ser para mi
familia. Pensé en ahorcarme pero también consideré
en lo difícil que sería para mi familia encontrarme en

115
ese estado. No podía conseguir un arma y tampoco
iba a ser capaz de darme un tiro. Vi por internet que
la forma menos dolorosa era con monóxido de
carbono en un automóvil pero no podía tampoco
suicidarme en el auto de la familia, iba a ser muy
cruel para ellos. Entonces me dije a mí mismo: me
siento como una rata y como tal debo morir. Con
veinte mil pesos que encontré fui a un súper mercado
y me compre un veneno para ratas el cual venía como
en forma de pastillitas pequeñas. Busque la dosis
exacta que debía tomar para envenenarme, así que
me encerré en mi cuarto en la noche, hice una carta
de despedida para mi familia pidiéndoles perdón.
Luego puse una canción del grupo metallica Nothing
else matters con la que me deprimía frecuentemente
y me tome el veneno.

Unos minutos después sentí que la respiración se me


iba al igual que la conciencia. Sabía que me estaba
muriendo. Caí en mi cama y comencé a experimentar
como entraba en otro plano que me permitía ver mi
futuro. No era la sensación de un sueño, sino en
verdad me sentía como en una realidad paralela
donde me daba cuenta que no me había muerto y que

116
en mi casa se formaban muchos problemas por mi
culpa. Veía que mi mamá y mi papá se iban a separar,
que mi papá no me hablaba, que no podía continuar
mis estudios y que tenía que pagar el dinero que
perdí de los clientes. Vi muchos problemas, y vi
muchas más cosas acerca de mi futuro. Comencé a
sentir mucha angustia al darme cuenta que no me iba
a morir y que tenía que enfrentar todos esos
problemas. Un momento después abrí mis ojos y
estaba caído sobre mi cama. No entendía lo que me
había pasado, nada me dolía, ya no sentía el mareo y
podía respirar perfectamente. A pesar de esto el
deseo de morir no se me iba de la mente. Entonces
decidí coger la carta, guardarla en mi bolso, guardar
el resto de veneno y salir de mi casa para pensar
cómo volver a intentar quitarme la vida.

Camine bastante, era de noche y tenía la plena


seguridad que no quería volver a mi casa. Me detuve
frente a un lugar llamado el Jardín Botánico; allí me
acosté en el suelo estupefacto por lo que había
pasado en mi cuarto. Como a las tres de la mañana
una patrulla motorizada llegó y me hizo una requisa.
Encontraron la carta y el resto del veneno. Como

117
ellos me vieron bien vestido sabían que no era un
muchacho de la calle. Estos policías comenzaron a
hablarme de Dios y decirme que yo los viera como si
fueran ángeles que habían sido enviados a mi rescate
y me hablaron sobre el valor de la familia junto con
los propósitos que yo podía tener en mi vida. Aunque
mi mirada estaba perdida y estaba ensimismado en
mi depresión las palabras de ellos aún las tengo
guardadas. Momentos después me llevaron al Caí de
ese barrio y llamaron a mi madre. Allí ella leyó la
carta y se enteró de lo que había pasado con el
dinero. Los policías le recomendaron que me
internada en una clínica de salud mental y entonces
me llevó donde el seguro cubría mi estadía. Allí
estuve un mes preguntándome por qué no me había
hecho nada el veneno, y por qué había tenido esa
especie de visión. Yo me consideraba ateo y para mí
Dios no era más que una idea loca de personas que
necesitaban explicar lo inexplicable, por esta razón
me parecía muy extraño que hubiera tenido esa
experiencia en mi cuarto cuando me tomé el veneno.

Cuando salí de la clínica un amigo me buscó para


invitarme a una iglesia. Era mi mejor amigo y

118
compañero de carrera. Tome la decisión de abrir mi
mente a una nueva posibilidad porque ya no tenía
nada más que perder, no tenía trabajo, tenía una
deuda grandísima, no podía continuar mis estudios,
mi papá estaba furioso conmigo, mi mamá se la
pasaba llorando y yo seguía vivo.

Mi amigo se ocupó de ayudarme con los pasajes para


ir a la iglesia, me invitaba a comer y vivía pendiente
de cómo estaba. Conocí allí varias personas que me
saludaban de abrazo, como si fuera un viejo amigo de
ellos. Como no estaba muy acostumbrado a los
abrazos me sentía un poco incómodo al principio.

La primera reunión a la que asistí en esa iglesia fue


una experiencia bastante extraña para mí. Al
principio el líder de los jóvenes comenzó a orar y
mientras todos cerraban sus ojos para orar yo sólo
incline mi cabeza por pena. En ese momento sonó
una canción que impactó mi vida y me hizo
replantear todo. La canción decía: Jesús, has mi
carácter, más como el tuyo yo quiero ser, porque en
esta vida hay cosas que pasan que yo no entiendo,
porque yo quiero demostrar tu amor a cada
instante, hazme hacer tu voluntad y morir a mi

119
viejo hombre, has mi carácter más como el tuyo, yo
quiero ser de Daniel Calveti. Por un momento sentí
que algo tocó mi interior, como cuando alguien toca
una puerta. Entonces entendí que estaba en el lugar
correcto para encontrar las respuestas a mi vida.

A medida que pasaban las reuniones comencé a


experimentar tranquilidad y a pesar de todos los
problemas que había en mi casa (porque lo que
visualicé se estaba cumpliendo) sentía que no debía
preocuparme, que todo iba a estar bien. Empecé a
leer la biblia y estudiarla. No podía parar de leerla, lo
hacía como si fuera agua que necesitaba con urgencia
y me refrescaba el alma.

Un tiempo después conseguí un trabajo vendiendo


minutos de celular en una verja de una casa
esquinera, trabajaba de 7:30 de la mañana a 10:00 de
la noche todos los días y mientras estaba allí seguí
leyendo la biblia hasta que un día llegué al libro de
los Hechos de los Apóstoles donde hablaba de la
unción del Espíritu Santo. El tema me interesó
mucho porque pensaba que era lo que me hacía falta
para sentirme por fin libre de todo y con un
propósito. Busqué al líder de jóvenes y le dije que

120
quería recibir la unción de Espíritu. Entonces, en el
oratorio de la iglesia él oró por mí. Durante toda la
oración no sentía nada y pensé que no iba a recibir la
unción, pero cuando terminó de orar y dijo: Amén,
comencé a ver una luz muy blanca que me bañaba
todo el cuerpo. Perdí la fuerza y caí de rodillas. Todas
las cosas malas que había hecho me pasaron por la
mente de repente, todos los dolores que había
experimentado sentía que sanaban y el vacío que
siempre había tenido en mi corazón se comenzaba a
llenar. Un llanto incontrolable se apodero de mí, era
como si estuviera expulsando todo lo que había
acumulado durante muchos años. Lloré como por
una hora seguida. Jamás había experimentado un
llanto donde sentía que en verdad había llorado y
desintoxicado mi alma, que en verdad había sacado
todo el dolor que mi corazón había guardado.

Cuando por fin me pude levantar parecía como si me


hubieran bañado. Mi camisa estaba demasiado
empapada como de agua, era como si acabara de
nacer, me sentía completamente libre, sentía por una
paz indescriptible en mi vida y sabía exactamente el
propósito por el cual seguía en este mundo. En ese

121
momento conocí la dimensión del amor de Dios y
supe que Él era no sólo mi creador sino también mi
Padre, el que me había amado siempre, el que me
amaba y me amaría. A partir de allí la depresión salió
por completo de mi vida y encontré mi misión. Hoy
sé que volví a nacer para ayudar a muchas personas
que sufren y que no entienden el porqué de muchos
problemas en su vida. Estoy vivo para hacer que
otros encuentren la paz y el amor de Dios que me
levantó de nuevo y me dio la oportunidad de ser un
hombre con propósito.

Hoy más que nunca sé que la depresión es una


enfermedad curable y que el suicidio se puede evitar
interviniendo de forma adecuada a los que
desarrollan estas ideas. De la mano de Dios invito a
cada lector a convertirse es un rescatista de vidas
para llevar la esperanza a cada persona necesitada.

DIOS LOS BENDIGA.

122
SERVICIOS

ASESORÍAS Y TRATAMIENTOS PARA


ADICCIONES

Para personas que tengan familiares con problemas


de consumo se realiza en primer lugar una terapia de
diagnóstico para determinar la gravedad del
problema del paciente. Los primeros en ser
asesorados son los padres de familia por medio de un
análisis de las causas del problema de la adicción del
familiar. Una vez realizado lo anterior se tomara la
decisión sobre el tipo de tratamiento que más le
convenga a la persona para su recuperación. Se le
prestará asesoría sobre Centros de Rehabilitación si

123
es necesaria la internación y se le buscara el cupo
para iniciar el programa. Durante el tiempo que dure
la internación el paciente tendrá un acompañamiento
de mi parte para garantizar la recuperación de la
persona. Una vez salga del tratamiento el paciente se
le hará seguimiento ambulatorio para evitar recaídas.
Si el paciente no necesita internación se le brindará
un paquete de terapias ambulatorias junto con
terapias familiares en donde se realizarán
compromisos escritos y realización de pruebas de
laboratorio de consumo que permitirán el desarrollo
de la recuperación del paciente. Las adicciones a
tratar versan sobre problemas de consumo de
Drogas, Alcohol, Juego (Ludopatía) y Redes Sociales

ASESORÍA Y TERAPIA FAMILIAR DEL


PERDÓN

Para que familias que tengan problemas de


discusiones frecuentes, sea entre hermanos o entre
padres e hijos, tíos, abuelos, y exista algún tipo de
resentimiento por situaciones que hayan vivido como

124
decepciones, maltratos, ofensas, traiciones etc., y
quieran buscar la forma de reconciliarse para tener
armonía en el hogar se ofrece la Terapia Familiar
del Perdón como método para cerrar las heridas,
dejar atrás el pasado y reconstruir la unión familiar.
Esta terapia va orientada desde un plano espiritual,
donde se realiza oración en el hogar y por sus
miembros, se les enseña a las personas la forma
correcta en que se deben decir las cosas sin lastimar
al otro. Aquí aprendemos también a depender del
amor de Dios colocándolo en el centro del hogar para
que siempre haya una solución a cada problema. La
terapia se realiza hasta que todas las personas de la
familia experimenten paz y amor unos con otros.

ASESORÍA Y TERAPIA PARA CONFLICTOS


DE PAREJA

Para personas que hayan tomado la decisión de


compartir su vida con alguien y tengan una relación
estable que esté pasando por una crisis que no esté
motivada por maltrato físico ni psicológico. Se

125
realizan varias terapias donde la pareja aprende que
el amor es un compromiso que nace en el corazón
por otra persona que complementa la vida. A partir
de la terapia fortalecen su vínculo para enfrentar
situaciones difíciles sin que afecte el compromiso del
amor, aprender cómo dialogar sin atacarse y
descubren de qué forma el uno complementa al otro
sin ejercer control. Esta terapia busca que la pareja se
entienda en medio de cualquier diferencia para
desarrollar estrategias que eviten más conflictos. El
terapeuta será el mediador y el número de terapias
dependerá de cómo evolucione la solución de la
crisis.

ASESORÍA Y TERAPIA PARA DEPRESION Y


CRISIS EXISTENCIAL

Para personas que no hayan encontrado un propósito


en su vida y sientan un vacío que los impulse a
pensamientos negativos o autodestructivos. Esta
terapia consta primero de un psicoanálisis de los
problemas que ocasionaron la existencia del vacío o
la perdida de sentido de la vida, se hace un recorrido

126
por toda la infancia del paciente para determinar
traumas que haya desarrollado o situaciones que se
hayan guardado en el inconsciente y que el mismo
paciente no haya aceptado. Lo importa en esta
terapia es liberar la mente de cualquier
condicionamiento que se haya puesto en opinión de
sí mismo. Se hace una deconstrucción de la
personalidad para luego construir una nueva.
Además, se le muestra al paciente cuáles son las
cualidades de su temperamento y cuáles son sus
defectos para que a partir de la aplicación de la
Mayéutica Socrática pueda descubrir el propósito de
su vida y cómo lograrlo. Aquí el paciente se
encuentra con Dios para darle un sentido
trascendental de su vida, liberándolo de miedos y
haciéndolo seguro de sí mismo.

ASESORÍA Y TERAPIA PARA MANEJO DEL


DUELO

Para personas o familias que han perdido un familiar


y no saben cómo manejar esta tristeza que le afecta
su entorno laboral, sentimental y social. Esta terapia

127
consta de un acompañamiento comprensivo de las
emociones que se despliegan de una pérdida tales
como: Negación, sentimientos de culpa, rabia,
frustración, miedo y delirios. A medida que avance el
acompañamiento terapéutico la persona comenzara a
aceptar la pérdida de su ser amado para que pueda
seguir su vida recordando sin dolor. El paciente
aprenderá a transformar la pérdida en compromiso
por su propia vida como forma de honrar al ser
querido, también aprenderá cómo la muerte se debe
aceptar como un proceso de cambio en el hombre
para aspirar a una verdadera vida de encuentro con
Dios.

ASESORÍA Y TERAPIA PARA LA REBELDÍA

Para padres que tengan hijos rebeldes y con


dificultades para obedecer, seguir normas y con
malos hábitos se les ofrecen asesoría para que
aprendan cuáles son los patrones de crianza más
adecuados para corregir y educar a los niños. La
comunicación entre los padres, el uso de las palabras

128
adecuadas junto con el tono de voz, las normas y
castigos son temas que se trataran en las asesorías
buscando la formación correcta en el niño.

ORACIÓN

Amado Padre Celestial, te doy gracias por la vida,


porque sé que en ella hay un propósito sin medida;

Bendice a la persona que me acompaña cada día,


bendice a mis hijos que son mi motor y alegría

Las puertas del corazón de mi familia hoy se abren,


para que Tú nos unas en todas partes

Que Tu Espíritu Santo nos guíe,

en nuestro pensar, hablar y hacer,

porque en Ti queremos permanecer

en el nombre de Cristo Jesús

Amén

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