Está en la página 1de 2

4.5.

Las versiones que ha dado la accionante sobre el hecho que mi representada habría tenido
conocimiento de los hechos desde el primer momento en que supuestamente habrían
ocurrido, y que no ha actuado de acuerdo a sus funciones, quedan desvirtuadas por lo
siguiente:

- En su carta notarial de fecha de recepción 17 de Setiembre del 2004 no expresa la existencia


de una conservación o entrevista previa con la persona de la directora, ni mucho menos que
personal alguno de la institución educativa haya solicitado los exámenes médicos practicados a
su menor. Por tanto, esta documental acredita que jamás sostuvo mi apoderada comunicación
alguna con las madres de la menor con fecha anterior a dicha misiva, pues es con ésta Carta
que la Dirección del Colegio toma conocimiento de los hechos. Esta carta notarial ha sido
presentada con fecha viernes 17 de Setiembre del año 2004, y recibida en el despacho de la
directora, el primer día útil hábil siguiente, es decir el día lunes 20 de setiembre del 2004.

- Que de los exámenes médicos practicados a la menor, indican que “ Se extiende el presente a
solicitud de la madre de la interesada..”, es decir que ni mi persona a título personal ni
personal alguno del centro educativo que dirijo han solicitado dichos certificados y con ello se
acredita que es la propia madre de la menor la que decide someterla a dichos exámenes por
razones que desconocemos.

- Con fecha 14 de octubre ante la Oficina de Control Interno Institucional de la DRELL la madre
de la menor no manifiesta que se haya entrevistado o hay sostenido conversación alguna con
la persona de mi ponderdante cuando se iniciaron los hechos, si no con fecha posterior al
envió de su carta notarial , conforme lo expresa folios 48 y 49 del expediente Administrativo, al
expresar que el “ día 20 de setiembre me entrevisté con la madre directora” Con ello queda
debidamente acreditado que la madre de la menor no sostuvo contacto alguno con mi
poderdante y ésta tomó conocimiento de los hechos con la recepción de la Carta Notarial y no
como pretendidamente se quiere sostener que tuvo conocimiento de los hechos con
antelación.

Más aún las contradicciones de la madre de la menor subsisten en sus manifestaciones dadas
ante la Comisión de Procesos Administrativos, cuando con fecha 20 de Octubre declara que se
entrevistó con mi poderdante Directora del Colegio en dos oportunidades: el día sábado 11 de
Setiembre y luego sin señalar fecha, aduce otra conservación sostenida con relación a su
menor hija. Esta afirmación queda desvirtuada porque el día sábado no corresponde al horario
de atención del despacho directorial, ni de personal del centro educativo, conforme es de
conocimiento de todos los que conformamos la comunidad Rosina según el Reglamento
Interno. A ellos debe sumarse que tal y como se ha acreditado con la certificación
correspondiente, el día 11 de Setiembre del año 2004, en el horario en que la demandante
dice haberse entrevistado con mi apoderada, esta se encontraba en clases en la Universidad
Cesar Vallejo, en la cual estudia la carrera de Psicología.

4.6. Al tomar conocimiento del contenido de la carta notarial, en la fecha y de inmediato mi


poderdante solicitó al Departamento de O.B.E., mediante Memorándum N° 074- 2004-CN –
SR-D, notarial cursada por el accionante, ésta buscaba demostrar la inocencia de su hija en
hechos que eran hasta entonces desconocidos por la Dirección, por lo que resultaba necesario
que dicho departamento informe al detalle los hechos ocurridos. Esto le fue manifestado a la
accionante en la conversación sostenida con la Sra. Moreno, el día jueves 23 de Setiembre del
2004 esto es, un día antes de la intervención de la Defensoría del Pueblo.
4.7. Dejamos expresa constancia Sr. Juez que la existencia de los certificados médicos no
acredita de manera alguna que hayan sido solicitados por la Directora ni a título personal ni a
nombre del colegio, mucho menos que no haya dispuesto las medidas correctivas que impidan
un supuesto abuso y maltrato psicológico a la menor, toda vez que dichos certificados datan
de fechas 11 y 13 de Setiembre del año 2004, mucho antes que mi poderdante tome
conocimiento de los hechos materia de investigación. A mayor abundancia, se debe tener en
cuenta que en la misma Carta Notarial, la madre de la menor, recién hace de mi conocimiento
la existencia de los exámenes médicos, los mismos que fueron presentados al Departamento
de OBE, sin precisar fecha, y en ningún momento a la Dirección; dejando claramente
establecido que según el propio tenor de la carta, los presentaba con la finalidad de demostrar
la inocencia de su hija.

4.8.Debo manifestar que frente a la intervención de la Defensoría del Pueblo el día viernes 24
de setiembre , fecha en el cual aún no se contaba con el informe del departamento de OBE; en
estricto cumplimiento de mis funciones y ante la intervención de un órgano superior como lo
es la defensoría del pueblo, se decidió allanarse a la investigación de dicha entidad con la
finalidad de evitar que una doble investigación desnaturalice los hechos y cause perjuicio a los
involucrados en los mismos, al tratar de imputársenos una falta de imparcialidad. Tal es así que
el 28 de Setiembre al recibir el informe del Departamento de OBE suscrito por su coordinadora
Sra. Laurenana Susana Gonzales Minchola y por la psicóloga Sra. Karla Lizette Mila Díaz, este se
remitió de inmediato a la defensoría del pueblo, adjunto al Oficio N° 639- 2004-CN-SR-D. Si
bien es cierto el informe del departamento de OBE se nos hizo llegar con fecha 28 de
setiembre del año 2004, también es verdad que dicha demora no puede ser atribuida a mi
poderdante, ya que dicho personal estuvo de licencia conforme a la ley, tal y como lo acredito.

4.12. En este orden de ideas es claro que el sometimiento de la menor a los análisis antes
referidos, por parte de sus propios padres, por iniciativa y voluntad propia de estos , resultan
ser completamente ajenos a la persona de mi representada, no los ha solicitado , no existe
prueba de ello, tan solo los dichos contradictorios de la demandante, han sido los propios
padres los que han realizado por propia voluntad los análisis a su menor hija, y en virtud de
ello han sido ellos mismos lo que han propiciado el maltrato a su hija.

4.17. Si bien lo manifiesta la accionante el perjuicio se encontraría por la difusión periodística


que se le dio al caso también es verdad que dicha situación ha sido propiciada por la propia
accionante y por la Defensoría del pueblo pues han sido ellos los que han lanzado este
problema en los medios de comunicación tal y como se encuentra debidamente acreditado
incluso en los expedientes administrativos y con el propio medio de prueba anexo de la
demanda como 1 W específicamente la publicación realizada en el diaria Correo de fecha 08
de Setiembre del año 2004,q que contiene declaraciones del propio comisionado del Defensor
del Pueblo y de la Madre de la menor, el mismo día en que presentó el hecho ante la DRELL y
convocando a una conferencia de prensa, presenta alegremente los hechos sin tener en
cuenta que se trata de una menor y que la ley le obliga a tener reserva el caso, y lo que es más
presenta a la madre de la menor, y si bien es cierto solamente se consigna las iniciales de la
menor, manifiesta que es hija única, entonces por ende identificable. A partir de esta
publicación la defensoría ha manejado el tema en los medios de prensa y ha sido esto lo que
en realidad ha generado el daño que hoy pretende la accionante, sea asumida por terceros
ajenos a la perpetración del daño , cuando es quien ha ocasionado el verdadero agravio el que
debería resarcirlo.

También podría gustarte