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ESTRATEGIAS DE NEUROMARKETING PARA LA GRANJA

El neuromarketing es la aplicación de las técnicas de la neurociencia al marketing. Su


objetivo es conocer y comprender los niveles de atención que muestran las personas a
diferentes estímulos. De esta manera se trata de explicar el comportamiento de las personas
desde la base de su actividad neuronal.
El neuromarketing abre una nueva vía de conocimiento ofreciendo un nuevo modo de
acercarse al consumidor a través de sus emociones, que también tienen un importante peso
a la hora de tomar decisiones de manera racional.
Gracias a los conocimiento del neuro-marketing, la publicidad se centra más en los puntos
que debe explotar como por ejemplo las emociones o incluso todos los sentidos que se
puedan, ya hemos vistos como en los grandes supermercados se estimulan los sentidos por
medio de la música, pero no solo eso sino que también existen otros tipo de marketing
experiencial que están siendo explotados de la misma manera que la música. Quién no ha
entrado en una tienda con un olor característico que puede perfectamente asociarse con el
producto que se vende.
Las estrategias de neuromarketing que vamos a implementar en los locales de la granja
buscan vender más de lo que nuestros clientes necesitan y que salgan de nuestros puntos de
venta con más productos de los que tenían pensado comprar.
Nuestra idea principal con estas estrategias es que nuestros clientes siempre terminen
llevando algún producto que no habían previsto comprar, La pregunta es ¿Cómo lo vamos a
lograr?
La respuesta a este interrogante parece estar en el poder de las estrategias que vamos a
implementar en nuestros locales, las cuales son las siguientes:

1. Marketing Olfativo: Según estudios el marketing olfativo puede impulsar las


ventas de un negocio entre un 30% y 40%, por eso en la granja vamos a tener
ambientadores con olor a fruta fresca, aprovechando el aire acondicionado para
inundarnos con estos olores que causen efecto en nuestros clientes y llamen la
atención induciéndolos a la compra
2. Ubicar lejos los productos básicos: El objetivo es dificultarle el acceso al cliente
aquellos productos de mayor demanda, de esta manera el cliente debe dar más
vueltas por el local y aumentan las posibilidades de que tomes algunos artículos en
el camino, por eso, los artículos de mayor demanda serán ubicados al fondo del
local, ubicaremos dos zonas, zona fría, es la zona donde se ubican los productos
más comprados (al fondo del local) y zona caliente de fácil acceso y se ubican los
productos de menor demanda.

3. Ubicar las marcas más caras a la altura de nuestros ojos: Se trata de ubicar o
poner a la altura de los ojos los productos más rentables, esto obliga a nuestros
clientes inconscientemente a seleccionar estos productos.

4. Música: Se trata de manipular nuestros movimientos a través de la música. Cuando


el local está lleno, se usa un ritmo musical que favorezca las compras rápidas. En
caso contrario, en los momentos de poca afluencia, se usa música tranquila, suave y
lenta con el objetivo de prologar la estancia de los consumidores.

5. Precios Psicológicos: Esta estrategia se trata de colocar precios que siempre


terminen en 5,7 o 9, pues estos números suelen atraer más la atención del
consumidor, dificultan hacer comparaciones y psicológicamente crean la percepción
de ser más económicos que los precios redondos.
6. Productos desordenados: Ver montones de productos en desorden y apilados nos
darán inconscientemente la sensación de que estos son más baratos, aunque
realmente no sea así. Esta técnica es usada por las llamadas "tiendas de
oportunidades".

7. La iluminación: Estrategia creada para engañar nuestros ojos. Las luces son usadas
en las secciones de alimentos perecederos buscando dar una percepción de frescura.
Generalmente se usan luces fluorescentes en diferentes tonalidades según el
objetivo. También se usa la luz con el objetivo de dar sensación de elegancia o valor
a ciertos productos.

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