LA VISIÓN DE LA ESCALERA.

Texto principal Hebreos 11:1; Marcos 10:46-52; Génesis 28:10-22.

Introducción El Presidente John F. Kennedy dijo: “Necesitamos hombres que sueñen

con lo que jamás ha existido” Los sueños son visiones. Dios trabaja en nosotros a
través de la visión clara que tengamos del objeto que deseamos.

I. EL TEMOR ES UN ESPÍRITU QUE NO VIENE DE DIOS 2 Timoteo 1:7. El temor o la

preocupación son el producto del uso negativo de la imaginación. Proyectamos
situaciones imaginarias que no están sucediendo y como resultado, experimentamos
sensaciones tales como ansiedad, dolores de cabeza, aumento de la presión
sanguínea, aceleración de las palpitaciones del corazón.

1. Tenemos el poder para ver, formando cuadros mentales que no existen

materialmente.

2. Podemos proyectar posibilidades, escenas y situaciones positivas o negativas.

3. Nuestros pensamientos son los cuadros que escogemos proyectar en nuestra

mente.

4. Las visiones que vemos y sobre las que reflexionamos ejercen una influencia casi
milagrosa sobre nuestro estilo de vida. 5. Ignoremos y rechacemos todo pensamiento,
concepto, imagen o visión que disminuya, devalúe, desmoralice, deprecie, desacredite
o deprima la visión que tenemos del ser que Dios hizo ser.

II. LA VISIÓN DE DIOS DIRECCIONA EL CURSO DE NUESTRA LA VIDA Génesis 28:12-

22. Una de las experiencias más hermosas que Jacob tuvo en su vida, fue en
Beerseba, allí Dios le habló a través de la visión de la escalera. Jacob estaba pasando
por un momento muy difícil en su vida, huía de la presencia de su hermano Esaú.

1. Jacob tuvo una visión nítida de la presencia de Dios. En esa noche oscura Dios le
reveló a Jacob Su propósito. Génesis 28:12.

2. Dios le confirmó el Pacto que había establecido con Abraham e Isaac Génesis 28:13.

3. Dios le dio una visión de la tierra como su herencia y la de su descendencia Génesis

28:13.
 4. La visión de Dios le abrió los ojos a Jacob y vio más allá de sus límites. Entró en la
dimensión de la expansión Génesis 28:14 Dios le dijo: “Te extenderás hacia el
occidente y hacia el oriente, hacia el norte y hacia el sur. Esto es expansión.

5. Dios le dijo: serás bendición para todas las familias de la tierra Génesis 28:14.

6. El temor desapareció. Jacob pudo ver en su espíritu que la presencia de Dios estaba
con él, y que era un protegido de Dios a donde quiera que fuere Génesis 28:15.

7. Jacob emprendió su camino con la convicción de que la presencia de Dios estaba

con él y que la Palabra que el Señor le reveló, se cumpliría como Dios lo había
prometido. Jer. 1:12; Isaías 55:11.

III. DIOS TRABAJA A TRAVÉS DE LA VISIÓN. Somos la residencia de Dios, su

presencia es real en nuestra vida, Él está tan activo como siempre, como en los días
de la creación en el Génesis. Pero él necesita de nosotros para poder llevar a cabo sus
planes eternos.

1. Dios trabaja a través de la visión y los pensamientos que tengamos.

2. Tengamos una visión clara, un cuadro en nuestra mente de lo que somos en Cristo.

3. Leamos la Biblia, dejémonos persuadir por la Palabra de Dios, mantengamos una

visión exaltadora conforme a lo que Dios hizo en nosotros cuando nos creó.

4. Ignoremos y rechacemos todo pensamiento, concepto, idea, consejo, imagen o

visión que nos desmoralice o deprima los sueños que tenemos.

5. Enfoquémonos y proyectemos el cuadro que potencialmente tenemos y

mantengamos nuestra mente en la visión que Dios ha hecho nacer en nosotros.

6. Constantemente examinemos ese maravilloso ser que somos. Actuemos siempre

como se supone que actúa ese extraordinario ser que somos en Cristo.

Conclusión: Con Dios obrando en nosotros, las metas y la visión clara que hay en
nuestro espíritu, son posibles de alcanzar. Con Dios todo es posible.